LEVI POV
-¿Entonces dices que esta mujer va a ser tu compañera de sesiones de acá a que termine nuestra apuesta?
Erwin, mi mejor amigo, mi colega y el idiota que me metió en todo esto se reía al otro lado de la línea telefónica.
-Me voy a retirar de esto, idiota.
-No puedes, Levi, ¿recuerdas lo importante que es el honor para gente como nosotros? Bueno, aplícalo.
-Tsk. No sabes cuánto te odio en estos minutos, estúpido.
-No puedes odiarme, somos mejores amigos. Y me lo vas a agradecer, te lo aseguro.
-Eso mismo dijiste la última vez que me obligaste a salir de fiesta en la universidad y terminaste vomitando toda nuestra habitación, eres el peor compañero de habitación que pude haber tenido. – le reprocho.
-Pasaron más de diez años, amigo, deberías olvidarlo.- Conozco al rubio, debe estar girando los ojos como suele hacer cada vez que le recuerdo lo alocado que era en la universidad.
-Nunca olvidaré cómo tuve que pedirle a Auro y Mike dormir en su habitación esa noche porque MI MEJOR AMIGO ERA UNA MÁQUINA DE VÓMITO. Al menos agradéceme que te dejé acostado sin riesgo de ahogarte antes de irme y que dejé pastillas y agua en tu velador.
-Levi, eres mi mejor amigo, y sabes que cambié, soy un hombre totalmente nuevo desde que entramos en la adultez.
-Erwin, que hayas desarrollado tolerancia al alcohol no te hace ser un hombre nuevo.
-Ok, ok. Pero volviendo al tema, ¿encontraste alguna chica guapa en tu grupo de frikis de limpieza?
-¿Crees que voy a andar buscando el amor en ese tipo de lugares?- Nota mental: conseguir un mejor amigo más decente.
-No, pero podrías, ¿hace cuánto que no sales con nadie?
-¿Y eso a quién le importa? Que tú estés comprometido con Marlene y te vayas a casar no quiere decir que tenga que buscarme a alguien.
-Hey, no digo que tengas que sentar cabeza, pero mi padrino de bodas no puede llegar sin pareja a mi matrimonio.
Erwin tenía razón, era una promesa de cuando compartíamos cuarto en la universidad.
-Está bien, buscaré a alguien. Pero no será de este grupo.
-Trato hecho. Podría ser alguna de nuestras colegas, ¿has pensado en Isabel? ¿Ilse? ¿Anka?
-No mezclo trabajo con diversión y lo sabes.
-Bueno, tómate tu tiempo, aún te quedan tres meses para conseguir a una maravillosa mujer que cumpla tus estándares de limpieza. Te dejo, tengo que llamar a Marlene.
-Que no te tiren de la correa.- Me río y corta la llamada, este idiota ya se dejó dominar.
Camino hacia el supermercado que está abierto 24hrs, está horriblemente oscuro, esto de los "grupos de apoyo" termina realmente tarde y tengo que comprar un trapeador. Traté de usar esa nueva aspiradora/trapeadora robot de la que todos hablan, pero a mi juicio no dejaba tan limpio como yo puedo hacerlo, no es mi culpa que el resto sea un grupo de novatos en la limpieza que se conformen con cosas simples como esa aspiradora.
Entro al establecimiento y lo veo.
En la estantería queda un solo trapeador.
"perfecto, es mío".
Pero antes de que pudiera cogerlo, una silueta pasa veloz al lado mío y se hace con una de las mejores armas de mi arsenal.
-Hey, yo lo vi primero.- se gira cuando escucha mi voz.
Con la ropa que lleva y con lo limpia que se ve me cuesta reconocerla, es la tipa del grupo de apoyo, esa que ama la suciedad.
-Perdóname, bajito, pero el que lo encuentra se lo queda. Y yo lo encontré y me lo quedé, mejor suerte para la próxima.- me guiña el ojo. Qué desagradable.
-Tsk, pensé que la gente como tú no tenía como panorama nocturno dirigirse al supermercado a comprar un trapeador- levanto las cejas con reproche.
-¿A qué te refieres con "gente como yo", enano?
-Ya sabes, gente que no se preocupa ni de lo que viste ni de cómo vive, cuatro ojos, aunque ahora te veas más decente que hace un par de horas, nada me asegura realmente que alguien como tú se bañe más de una vez a la semana.
-Escúchame – se alteró- no puedes opinar sobre alguien que has visto solo una vez en tu vida.
-¿Ah, no? ¿Y qué es lo que acabo de hacer, entonces?
-¿Sabes? Hoy no estoy para negociar con idiotas. Ahora, si me disculpas, me voy a pagar el trapero que logré conseguir antes que tú. – da media vuelta y se dirige a la caja.
No puedo creer que me haya quedado sin lo único que planeaba comprar.
HANGE POV
Idiota, ese sujeto es un idiota.
Cómo se le ocurre tratarme de sucia cuando ni siquiera se molestó en acercarse a mí en el grupo de apoyo y preguntarme mis motivos para estar allí.
Por gente como él tenemos tan mala imagen. Debiese medir mejor sus palabras.
Pero no importa, la próxima semana en el mismo grupo de apoyo me vengaré.
Yo, Hange Zöe, fundadora del Programa de Acompañamiento para la Rehabilitación de los Adictos a la Limpieza.
