Yasuo salía de un callejón solitario a su alrededor podía oír el sonido de las gaviotas, las mareas y el viento salado en el ambiente, se aseguró de salir del callejón mientras nadie lo estaba viendo para cuando llego a la calle principal lo primero que hizo fue sacar su cantimplora de bambú y tomar un poco del alcohol en ella.
Mientras hacía eso empezó a contar las monedas de oro que tenía, si el mapa de la Liga estaba bien él se encontraba en Puerto Barro era un puerto costero que estaba cerca de Piltover sin embargo en este se encontraban partidas de exploraciones noxianas junto con un fuerte un poco más profundo en la selva.
Yasuo lo último que quería era lidiar con los noxianos, su plan era simple compraría suministros par días en la selva, encontraría a su guía Rengar, encontraría a Mara y volvería simple como eso, mientras caminaba buscando una tienda que le proveyera de lo que buscaba no pudo evitar pensar que si bien los pasos de su plan eran simples llegar a hacerlos no necesariamente lo seria.
Yasuo entro en una tienda de suministros generales, cuando abrió la puerta vio como 5 personas en armaduras negras salieron de la tienda empujando un poco a Yasuo, si bien no se dijeron nada las miradas se cruzaron.
Yasuo no estaba aquí para pelear, aunque no le importaría derramar la sangre de estos o de cualquier noxiano que se cruzara en su camino. Él se acercó a mostrador y en este había hombre de color con ropajes ligeros.
-¿Habla Vanoxiano? Extranjero-. Pregunto el hombre.
-Si soy proficiente en el idioma-. Yasuo estaba agradecido de que su cristal hiciera de traductor y interprete para estos casos ayudaba mucho con la diferenciación del Lenguaje.
-Perfecto buen señor, ¿En qué Puedo ayudarlo? -.
-Busco suministros para 2 días de exploración en la selva-. Dijo Yasuo mirando el stock del vendedor.
-Ohhh, por supuesto ¿Está usted con alguna compañía de exploración? -. Pregunto el hombre.
-No…soy un cazador…y bueno busco nuevas presas para mi colección. -Es lo único que se le ocurrió decir a Yasuo.
El hombre solo asintió y comenzó a poner elementos en el mostrador para que Yasuo les echara un vistazo.
-Si gusta puedo venderle un paquete de exploración, es lo que encargan las compañías de exploradores al por mayor. - Menciono el hombre.
Yasuo no tenía mucha idea de negocios o economía conocía lo básico.
-¿Qué trae este paquete?-.
-Solo lo necesario 5 Antorchas, Pedernal, 3 Raciones, y utensilios para comer-. Dijo el hombre como si fuera segunda naturaleza.
Yasuo solo asintió, el tendía a viajar ligero por lo general cuando tenía la oportunidad cargaba consigo un saco las cosas que no cupieran en sus bolsillos o que pudiera amarrar a su cinturón de cuerda, el miro el resto de objetos de la tienda y decidido que esta vez compraría unas cuantas cosas más.
-Bien quiero eso, además quisiera 2 odres de agua, algo de cuerda y eso-. Yasuo apuntando a una carpa pequeña, sería más tedioso llevar, pero necesario el aire caliente y húmedo solo le decía que beber de su cantimplora de bambú no sería buena idea.
El hombre comenzó a poner todos los utensilios en la mesa.
-Bien serian 3 securi de oro con 5 de plata, también acepto hexágonos de oro y engranajes de plata. - Dijo el hombre.
Yasuo no entendió bien esto, el solo puso 5 monedas de oro en el mostrador esperando que fuera suficiente.
- ¿Que tal esto y te quedas con el cambio? -. Dijo Yasuo.
El hombre solo esbozo una sonrisa y acepto las monedas -Un placer hacer negocios con usted buen señor, ojal que vuelva de una pieza-. Dijo el hombre.
Yasuo tomando sus cosas solo salió de la tienda el sol estaba un poco pasado de su punto mas alto, antes de ir a la reunión con Rengar Yasuo decidió explorar Puerto Barro un poco, si bien tenía experiencia moviéndose por los puertos debia de admitir que este lugar era mucho mejor que Aguasturbias tanto en la limpieza como calidad de puerto, agradecía que no habían muchos malhechores acechando por las calles y callejones del puerto , incluso avisto un par de tabernas que no dudaría en visitar en su viaje de vuelta a la Liga algo de esto le hacia recordar un poco a sus amigos inesperados que hizo en la Aguasturbias sin duda era difícil de olvidar a personajes como "Miss Fortune", Illaoi, Braum o incluso el fantasma espeluznante de Pike.
Yasuo esbozo una sonrisa mirando al horizonte por primera vez en su vida se sentía que de alguna loca manera estaba dejando una marca en el mundo, tal vez con el tiempo podría encontrar propósito, lo único que le quedaba hacer era seguir el viento a donde sea que lo guiara, y ahora lo estaba guiando directo a la jungla.
Yasuo solo dijo en su mente el nombre de Rengar y al igual que otras veces el haz de luz salió de su cristal con dirección a la jungla.
Yasuo siguió el camino que habían hecho los exploradores que ya habían explorado un poco las junglas, para cuando llego al límite de estas comenzó a seguir la luz dentro de la jungla.
Yasuo camino tranquilo y sin mucho apuro si bien parte de esto era por la humedad del ambiente que lo estaba haciendo sudar, unas cuantas ráfagas de viento frio a su alrededor lo mantenían fresco esto también ayudaba con los mosquitos e insectos voladores, Yasuo debía de admitir que había algo fascinante en la jungla de Ixtal, a diferencia de los bosques de jonia donde podías sentir la magia y la vida fluir de los arboles y de la tierra aquí era como si todo estuviera observándote pero en vez de hacer notar su presencia era como su te estuviera mirando con una curiosidad extraña.
Yasuo debía tener cuidado el piso era disforme y había muchas cosas en el suelo, no solo eso de vez en cuando podía notar había animales a su alrededor, noto un par de monos de colores vivos y a unas serpientes saltaban del suelo impulsándose a varios metros en el aire.
Para Yasuo de vez en cuando era molesto poder sentir la respiración de tantos seres vivos a su alrededor, pero eso lo ayudaba a no tropezarse con nada indeseado.
Mientras seguía el haz de luz llego a un gran canal si bien el haz de luz decía que debía cruzar el canal no había forma de hacerlo a pie sin mojarse por el agua. A Yasuo se le ocurrió la idea de usar el viento con impulso para llegar al otro lado, este encontró el árbol mas grande y cercano a la orilla que había y lo sintió con su mano primero.
Era un poco resbaladizo y lizo el tronco, pero nada que no pudiera escalar a gran velocidad. Se puso a unos metros del tronco y comenzó a tomar carrera solo para saltar y ser impulsado por una ráfaga de viento que lo impulso hacia arriba se agarro de la primera rama a su alcance para apoyarse y dando otro gran salto logro llegar a las copas del árbol que eran capaces de soportarlo.
Yasuo Aprecio como de a poco comenzaba a oscurecerse en la selva, eso no impido que sus ojos notaran como una barcaza pequeña se aproximaba por el rio, Yasuo se escondió dentro de las copas para observar a los navegantes.
Si bien no pudo escuchar de que hablaban pudo notar que en la barcaza estaban soldados con armaduras negras y otros que llevaban instrumentos de minería, la barcaza navegaba rápidamente el gran canal y no se tardo ni cinco minutos en pasar a Yasuo y seguir su camino.
Yasuo reflexiono un momento sobre esto, si bien era poco probable que se topara con gente dentro de la inmensa jungla debía ser cuidadoso, Yasuo se preparo para saltar y cruzar al otro extremo del canal, respiro profundamente y dando unos pocos pasos por la rama en la que estaba salto hacia el vacío con un gran impulso de aire, si bien no fue perfecto logro llegar al tronco de un árbol en la otra orilla pero no calculo bien la fuerza de su peso y la rama se quebró, afortunadamente Yasuo reacción a tiempo y cando una voltereta en el aire cayo sin problemas en el piso del otro lado del canal.
Yasuo miro hacia la rama quebrada y decidió continuar su camino apresurando el paso.
La noche había llegado y Yasuo no sabía cuántos kilómetros había recorrido y aun así el haz de luz le decía que debía seguir hacia adelante aun no podía encontrar a su guía Rengar, Yasuo maldijo a Vessaria en silencio por no decirle a su guía que lo estuviera esperando en el maldito puerto, al menos así tendría un poco de compañía.
Yasuo suspiro sacándose un poco de sudor de la frente decidió que era mejor descansar y reponer fuerzas. El despejo con una ráfaga de viento el piso de la jungla lo mejor que pudo y empezó a poner su carpa luego de eso junto un poco de ramas y trato de encenderlas no le fue fácil tuvo que ocupar alcohol de su cantimplora de bambú de un poco de sus poderes para iniciar una buena llama, para cuando ya tenia todo montado se sentó a comer sus raciones y a beber de los odres de agua que tenía.
Sus raciones consistían en una bolsa de frutos secos y dos paquetes que contenían unas especies de galletas bien grandes, Yasuo le dio unos mordiscos a la galleta y se dio cuenta de que sabían bien tenían un sabor dulce pero fuerte, mientras bebía un poco de agua cerro los ojos y empezó a sentir todo a su alrededor, una parte de el recordaba todo lo que paso en las islas de las sombras, la muerte, la desolación, la tristeza etc. Todas esas emociones juntas por culpa de un solo hombre. Un hombre incapaz de dejar ir eso que se acabó, le era difícil a Yasuo creer que un solo hombre y su ejército lograran provocar tal caos, pero también sabia que eso no hubiera sucedido si no fuera por Thresh.
Es en eso que Yasuo a su alrededor sintió una respiración casi imperceptible pero que cada vez se hacia mas pesado y agitada pero no tenía ruido era sin duda de un animal que lo estaba acechando, pensó que el fuego lo mantendría a salvo, pero no este seguro que era un animal que buscaba comérselo.
Yasuo dejo lentamente el odre de agua a su lado también la ración que estaba comiendo puso su espada sobre sus piernas y desenvaino el filo un poco, podía sentir cada vez más la respiración de la criatura agitarse.
De repente un rugido estruendoso salió desde la oscuridad e la jungla y una gran criatura se abalanzo sobre Yasuo, este solo se paró en un rápido movimiento volteándose en el proceso y desenvaino la tempestad de acero lanzando una ráfaga de viento en forma de torbellino pequeño. Esto tomo por sorpresa a la criatura que fue lanzada de vuelta a la oscuridad en un árbol la figura no perdió momento y se volvió a abalanzar sobre Yasuo a lo cual este respondio defendiéndose de la criatura, logro evadir el puño de la criatura que tenia unas especies de largas garras y rechazo el corte que le venia con un gran cuchillo.
La criatura cayo a unos cuantos metros de Yasuo, al ser iluminada pudo ver mejor a su atacante.
Eran una imponente criatura con forma de Felino y gran pelo de color pálido tenia unas especies de rastas y una armadura de cuero con varios huesos de criaturas alrededor de esta, sin embargo, su característica mas distintiva era una especie de parche que tenia una luz amarilla en él.
Yasuo por su parte dedujo que era un Vastaya si bien ninguno se dijo nada Yasuo no dejo la posición defensiva al igual que el vastaya es en eso que el haz de luz del cristal de Yasuo apunto hacia la criatura frente a él.
Yasuo al entender que este era su guía solo pudo suspirar al bajar su espada - ¿Tu eres Rengar no? -. Pregunto Yasuo.
La criatura se relajó un poco y se enderezo parándose en sus patas traceras.
-Tu debes de ser Yasuo Kolminye me dijo que te encontrarías conmigo, ¿Por qué Tardaste tanto? - Pregunto Rengar guardando su cuchillo y su garra retráctil.
-Me tome mi tiempo, nunca había caminado por un lugar como este-. Dijo Yasuo.
-humm, no importa ¿estas listo para partir? -.
-¿Ahora? Es de noche ¿no sería mejor descansar a que fuera de día?- Dijo Yasuo diciendo esto como si fuera lo más obvio del mundo.
Rengar miro fijamente a Yasuo como si estuviera estudiándolo. -Bien hay tiempo supongo- al decir esto se acercó a la fogata y saco 2 serpientes muertas que empezó a destripar y desollar.
Yasuo no dijo nada mientras el vastaya hacia eso, el solo enfundo su arma y volvió a su lugar.
El silencio entre ambos era intenso si bien parecía que solo estaban sentados comiendo alrededor de la fogata ambos estaban preparados para desenfundar las armas, a Yasuo no le sorprendía mucho, no después de encontrarse por primera vez con Diana el aspecto de la luna y que esta lo amenazara con matarlo sin que se diera cuenta.
Fue Rengar el que hablo rompiendo el silencio.
-¿ Por que Kolminye te envio a las junglas e Ixtal ?-. Pregunto Rengar mordiendo su serpiente.
-¿Vessaria?, no mucho para reclutar a una nueva invocadora-. Dijo Yasuo terminando su gran galleta dulce. -¿Y a ti?-.
Rengar trago para luego hablar – Tengo que poner nuevas puertas de ingreso para la Liga-. Dijo este bajando su comida.
-Vessaria me dijo que serias mi guía-.
-Si me pidió que te llevara a aldea humana en la jungla no es fácil llegar, por alguna razón la jungla tiende a cambiar de algún modo-. Dijo Rengar.
-¿Cambiar? ¿Cómo?-. Pregunto curioso Yasuo.
Rengar volvió a comer, de vez en cuando movía su cabeza como si estuviera detectando lo que hacía a su alrededor.
-Es raro…pero cerca del lugar donde vas la jungla tiende a cambiar como si tuviera vida…si tuvieras un mapa estarías dando vueltas sin encontrar nada durante dias.
-Ya veo…y como la encontraras-. Pregunto Yasuo.
-Puedo rastrearlos, si sabes que buscar no hay problemas encontrándolos, no solo eso de vez en cuando hay humanos que van de aquí para allá por la jungla, los he visto en algunas de mis cacerías son fáciles de oler- Dijo este terminando su comida.
Yasuo le paso el odre de agua sin abrir, Rengar acepto y bebió un poco limpiándose la boca.
-¿Qué tan rápido eres, crees poder seguirme el paso en la mañana?-. dijo Rengar estudiando a Yasuo.
-No te preocupes me las arreglare-. Respondió Yasuo.
-Bien por que si te quedas atrás no te esperare ¿está claro? -.
-Claro como el agua-. Dijo Yasuo, en lo personal no sabia que esperar estaba claro que este vastaya no era mal intencionado en primera vista, pero era como si lo viera como alguien inferior a Yasuo.
-Descansa Humano, yo hare guardia-. Dijo Rengar parándose y dándose vuelta para adentrarse en la oscuridad de la jungla.
-¿Así como asi?...he bien que mas da entre antes termine esto antes me puedo ir de aquí-.
Dijo Yasuo guardando sus cosas dentro de la carpa para luego cerrarla y acomodarse para dormir, tal vez mañana el Vastaya estaría de mejor ánimo.
