Rarity: 25
Applejack: 24
Fluttershy: 23
Pinkie Pie: 22
Rainbow Dash: 21
Twilight: 20
Trixie Lulamoon: 16 al comienzo del capituló, 17 para el capituló dos
Starlight Glimmer: 21
Un año más tarde podemos ver cómo la joven yegua azul se ve muy diferente, en su mirada ya no existe la gran y poderosa trixie, solo queda una yegua indefensa, podemos ver como la yegua está llena de moretones, ya que para muchas de las reclusas el motivo por el cual Trixie estaba recluida era una tontería y al verla joven fue suficiente para hacerle la vida vida difícil.
Faltaban diez días para que su confinamiento terminara, a lo largo del día podemos ver como la yegua sufre de acoso, entre golpes y empujes llega la hora de la comida, cuando estaba formada uno de los guardias le llama, sin más remedio va con el, es llevada al ala de visitas, ahí estaba su abogado y a dos guardias de celestia, la yegua toma asiento.
Ammm… ¿qué es lo que sucede?- pregunto la yegua.
¿Su padre es Jack Pot Lulamoon y su madre es Spectacle Lulamoon?- respondió el abogado con una pregunta.
Si- respondió Trixie.
¿Su padre padece de alguna enfermedad?- pregunto el abogado.
Si… pero hasta donde tengo entiendo no es nada grave o eso era así cuando me fui de casa- respondió Trixie.
¿Ha hablado con sus padres desde que se fue de casa?- pregunto el abogado.
No- respondió Trixie- ¿pasa algo?
Mmmm… la salud de su padre ha decaído mucho, los médicos creen que no le queda más haya de días de vida, su madre intento por mucho tiempo ponerse en contacto con usted para informarle, incluso a contactado con otros abogados para conseguir que se liberada antes de tiempo hasta que la princesa Celestia le concedió el perdón- dijo el abogado.
La joven yegua empieza a llorar con las palabras del abogado, entre felicidad por su liberación y tristeza por lo de su padre.
En un acto de buena fe la princesa se encargará de hacerla llegar a Aashtethos- dijo el abogado.
¿Cuando salgo?- pregunto la yegua azul.
Hoy mismo- dijo el abogado.
Media hora más tarde la yegua ya está fuera de la penitenciaria juvenil de Canterlot, las dos guardias que anteriormente estaban en el ala de visitas están fuera también.
Señorita Lulamoon, nosotros nos encargaremos de llevarla a Aashtethos -dijo uno de los guardias.
Si- dijo Trixie.
Será mejor que nos apresuremos si queremos llegar lo más pronto posible a Aashtethos- dijo el otro guardia.
Un par de días más tarde llegan a la ciudad de Southstock tras estar viajando en tren, a su llegada recorren toda la ciudad hasta llegan al muelle para buscar un barco que los lleve a Aashtethos, ahí toman un barco volador que los va a llevar a la ciudad natal de trixie
En el gran océano Meditermareian podemos ver cómo un barco amarrado a un gran globo surca los cielos, en una parte de la cubierta podemos ver cómo una joven yegua unicornio de pelaje azul esta recargada mirando hacia el horizonte, cerca de ella podemos ver a dos guardias de la princesa Celestia que la estaban resguardando, también podemos ver que la yegua tiene un objeto incrustado en su cuerno, después de estar mirando el océano podemos ver como la unicornio regresa al interior barco con rumbo a su camarote.
Dentro de este se puede que no es de gran lujo, solo ahí una simple cama, un tocador y una pequeña maleta en la cual lleva sus cosa, se acerca a la ventana para poder mirar hacia el mar nuevamente pero esta ves con la tranquilidad de no ser vigilada, mientras observa a través de la ventanilla en su reflejo podemos que la unicornio está seria, pensante y si uno se la queda viendo por mucho tiempo hasta parece nerviosa o preocupada.
Ese mismo día más tarde se puede ver como en el horizonte es visible una gran pirámide que está siendo rodeada por una gran muralla, todos los pasajeros se colocaron en la proa mientras que algunos de los marineros se colocaron en babor y estribor agarrados de las cuerdas para poder ver bien, entre todos los pasajeros podemos que la yegua y los guardias de la princesa también estaban ahí, ambos pegasos sementales estaban sorprendidos ya que era primera ves que veían la ciudad de Aashtethos ubicada en la región de Saddle Arabia, lejos de la jurisdicción de equestria, la unicornio azul sonríe con cierta nostálgica ya que es la primera ves en cuatro años que regresa a su lugar de nacimiento.
Al poder visualizar el puerto el capitán hace aviso a todos los pasajeros para que empiecen a prepararse, a su llegada dos pegasos de un tamaño mayor al convencional vuelan cerca barco haciendo la labor guías para que puedo aterrizar de manera correcta, al tocar agua empieza su camino al muelle que se les a sido asignado, llegado a su destino los marinos que son ponis terrestres empiezan amarrar el barco.
Todos los tripulantes empiezan a bajar del barco, nuestros tres pasajeros bajan de igual modo pero con rumbo a una de las entradas de acceso más cercana que haya, salen del muelle que no es diferente a la mayoría de muelles qué hay a lo largo de todo equestria, una ves hallada la entrada más cercana se forma esperar su turno para ingresar a la gran urbe, la fila avanza y avanza hasta que nuestros viajeros llegan al frente de esta, se topan con un gran entrada que es custodiada por dos corceles de gran tamaño, cada uno de ellos tenía un pica además de un armadura liguera y en la cabeza un turbante.
Al ser su turno de pasar los dos guardias de Celestia muestran sus pasaportes junto a una moneda de oro, la moneda de oro es un impuesto que los extranjeros tienen que pagar para poder ingresar, al ser turno de la yegua azul muestra un pasaporte con una ilustración de una pirámide de oro y dos bastones, cuando lo muestra la encargada de la entra lo recibe y queda sorprendida con el pasaporte, hace una pequeña reverencia, hace una seña y les permite la entra a los tres.
Tras atravesar la muralla, se topan con el gran cantidad de especies que avanzan rápidamente, para los guardias reales les fue difícil mantenerse en rumbo ya que no están acostumbrados a este ajetreo mientras que para la yegua Azael fue fácil meterse ya está acostumbrada a este tipo de vida, esto hizo que la pierdan de vista, eso los los puso nerviosos y buscaron el modo de salir del ajetreo, tras salir ven que la yegua azul lo estaba esperado mientras comía lo que es un helado, salieron del primero cuadro de la ciudad para entrar en la zona comercial, de igual modo que en el primer cuadro de la ciudad fue difícil para ambos sementales
Caminan hasta salir del primer cuadro de la zona de la ciudad, se empiezan a adentrar en una zona en la cual las viviendas son muy estrafalarias, idénticas a las que puedes hallar en Canterlot, solo que con el estilo del lugar, al llegar a su destino se topan con una casa, si así se le puede llamar, más bien es un tipo castillo, claro con las tendencias de construcción de la zona, al acercarse se puede ver varios banderines en los cuales se puede ver grabado tres estrellas color amarillo y una franja verde perpendicular con borde amarillo que termina en dos puntas, aquella unión es la mezcla de la Cutie Mark de los padres de la yegua azul.
Estando frente a la puerta presiona un botón el cual hace un ruido, no pasa mucho tiempo para que vemos como la puerta se abre, de su interior sale un yegua que de pelaje café que una un uniforme color de servidumbre.
¿Qué se les ofrece?- pregunto la pony terrestre con un ligero mal genio.
Soy Trixie Lulamoon vengo a ver a mis padres- respondió Trixie.
¡Trixie¡- exclamo la voz de una yegua que estaba por detrás de la pony terrestre.
¿Mamá?- pregunto Trixie.
Del interior sale una yegua de pelaje color naranja de mediana edad con la crain rubia y rayos más claros, tenía una cara de sorpresa al ver a su hija única primogénita regresar a casa, emocionada trota hasta donde está la yegua para darle un fuerte abrazo a su hija, al terminar su abrazo mira a los guardias reales de la princesa celestia.
Así que lo que dice la carta es cierto- dijo su madre y suspiro.
Es hora de que nos retiremos- dijo uno de los guardias.
¿No gustan pasar un rato para poder tomar algo?- pregunto la madre de la yegua.
Muchas gracias señora Lulamoon pero la princesa celestia fue clara, solo teníamos que escoltar a la joven y regresar inmediatamente- dijo uno de los guardias.
No me digas señora me hacen sentir más vieja de lo que ya estoy, solo díganme Spectacle- dijo la madre de Trixie.
Bueno Spectacle, nos retiramos- dijo el semental.
Que tengan buen viaje y tengan cuidado aveces el camino suele ser traicionero- dijo Spectacle.
Gracias tendremos en cuanta sus palabras- dijo el guardia.
Ambos sementales se despiden de ambas yeguas y empiezan su camino de regreso hacia Canterlot, al salir de su campo de visión, Spectacle hace uso de su magia para empezar a jalar de las orejas a su hija, la mete a la casa, la yegua azul intenta soltarse pero su madre al ser mejor hechicera no puede soltarse, sin tener más opciones solo le ruega a su madre que la suelte, se detienen hasta que llegan a una de los varias habitaciones qué hay a lo largo de mansión, es ahí donde la suelta.
Mamá… duele- exclamo Trixie.
¡Sabes lo molesta y decepciona al saber que hija estaba en prisión! No tienes idea de cómo se me cae la cara de vergüenza al leer la carta de la princesa Celestia- exclamo Spectacle- te estuve buscando como loca por todo el mundo… llegue a creer que estabas muerta y ve con las tonterías que me sales.
La yegua azul no dijo una sola palabra durante el regaño de su madre, al terminar lo único que dijo fue- Lo siento.
¿Qué fue lo que dijiste?- pregunto Spectacle.
Que lo siento- respondió Trixie.
Crees que un lo siento es suficiente… tu padre está enfermo sabes lo duro que fue para el cuando leyó la carta… no podía creer que pequeña hija haya hecho semejante tontería- le reclamo Spectacle.
Lo siento no lo sabía… no sabía que papá estaba mal- dijo Trixie comenzando a derramar una lágrima.
Como se supone que lo sepas si nunca contestas ninguna de mis cartas- dijo Spectacle.
Ya te dije que lo siento- dijo Trixie mientras comienza a llorar.
Crees que con un simple lo siento vas a arreglar tus errores- exclamo molesta Spectacle.
No- dijo Trixie- ¿Cómo esta?
Mal y peor desde que leyó la carta- respondió su yegua de pelaje anaranjado.
¿Solo le quedan días?- pregunto Trixie mientras se limpiaba las lágrimas.
Si- respondió su madre.
Al ver fijamente a su hija ve que no es la misma adolescente llena de ilusiones que partió hace cuatro años con las ganas de ser una gran ilusionista como su padre, ya casi era una yegua adulta que fue golpea por la vida y por todos sus errores, en su mirada ya no había felicidad, ahora solo había tristeza, en todo su cuerpo se puede las marca de sus errores, muchas de ella conseguidas en la prisión, como madre se sentía mal por ver a su única hija así pero también estaba molesta.
Al final el amor de madre se antepuso a todos errores que había cometido, se acercó a ella para darle un cálido abrazo.
Ma…- dijo Trixie hasta que fue interrumpida.
No digas nada- dijo la yegua anaranjada, después de un rato terminó con el abrazo.
¿Crees que pueda ir a ver a papá?- pregunto Trixie.
Vamos- dijo la yegua y salieron del cuarto .
Saliendo del cuarto se dirigen a la escalera más cercana, al estar atravesando los corredores ve que la casa de sus padres no ha cambiado casi nada desde el día que se fue, antes de llegar ve en uno de los muebles la última fotografía que se tomaron el día que la yegua azul partió con su carreta, no pudo evitar sentirse nostálgica, aquel día le prometió que se convertiría en la mejor ilusionista de todo el mundo.
Con la fotografía entre sus cascos no puedo evitar sentirse fatal pues no estaba ni cerca de ser la mitad de ilusionista de lo que es su padre, subieron hasta llegar el cuarto piso de la mansión, recorriendo el último piso pasan por un cuarto que tiene una gran estrella dorada incrustada en la puerta con el nombre Trixie grabado en ella, haciendo uso de caso, la yegua recorre la parte que tiene grabado su nombre, tras un breve suspiro sigue con su camino, continúan hasta llegan al final del pasillo donde una gran puerta de madera las espera.
Tras atravesarla ven que el semental de pelaje azul esta parado frente al gran ventanal que tienen en su habitación, la yegua azul se acerca hasta estar detrás de su padre.
No tienes que estar fingiendo- dijo Trixie mientras suspira.
Aquella figura poco a poco se fue desvaneciendo hasta no haber nada, voltea y camina hasta la cama que está en la parte más obscura del cuarto, en la cama podemos ver acotado al semental, su mirada se veía cansada, inclusive su pelaje y crain se veían más pálidas, el ver en ese estado a su padre la asustó, al ver a su hija este se quería levantar a para verla bien pero inmediatamente puso su casco sobre el.
Papá… no… no te levantes- dijo Trixie.
No puede un padre ver a bien a su hija- dijo Jack Pot.
Si… pero no en estas condiciones- dijo Trixie.
Solo quiero verte bien mi vida- dijo Jack Pot.
La joven yegua volteó a ver a su madre en busca de una respuesta, lo único que obtuvo fue una sonrisa junto a una mirada cristalina.
Claro… pa… pero no tes esfuerces mucho- dijo Trixie.
El unicornio comenzó a ponerse de pie, fue algo lento pero al final pudo, estando de pie puedo ver bien a su única primogénita, de inmediato noto que no era la misma yegua que salió hace un par de años, dejando claro que ya no era una pequeña yegua pero pareciera que había perdido su brillo.
¿Dime cómo te ha ido durante todo este tiempo cariño?- pregunto Jack Pot.
Creo que ya lo sabes- respondió Trixie.
Si… pero no me refería a eso cariño… quiero oírlo por tu propia voz… cómo fue el viaje- dijo Jack Pot.
La joven yegua se sentó en la cama de su padres, su progenitor de igual modo se sentó en la cama a oír atentamente el relato, su hija empezó a contarle todas sus aventuras desde el día que salió, así estuvieron un rato hasta que empezó a hacerse de noche, su madre vio cómo su padre ya se empezó a cansarse pero la era terco al querer descansar, pero al final oyó a esposa e hija.
Amabas salieron del cuarto, Trixie camino hasta el lugar que alguna ves fue su habitación, un poco durativa abrió la puerta, en el interior se llevó una gran sorpresa, todo estaba como el día que se hablado de casa, nada había sido movido de lugar, incluso en su escritorio estaba el libro de magia que su papá le había regalado.
Todo sigue en su sitio como el último día que estuviste aquí- dijo su madre quien estaba detrás de ella.
Me trae tantos recuerdos… muy lindos de hecho- dijo Trixie.
¿Por qué lo hiciste?- pregunto su madre.
La yegua ya sabía a lo que se refería- cuando mi espectáculo empezó a decaer empecé a contar historias de supuesta hazañas que había hecho e incluso cree un personaje geocéntrico, llegó el punto que me lo creí pero todo terminó en Ponyville, un par de potrillos atrajo a una osa mayor que resultó ser la menor, dije que yo la había derrotado, cuando la vi tuve miedo en ese momento la gran y poderosa Trixie dejó de existir, por suerte para el lugar hay una unicornio lo suficientemente poderosa para detenerla, cuando salí de ahí se empezó a correr el rumor de mi ridiculez, así que en un lugar lejano obtuve el amuleto del alicornio y todo se fue al demonio, cuando me enteré de que la unicornio se volvió princesa de Equestria la venganza se apoderó de mi y de ahí ha sabes todo lo qué pasó.
Su madre no dijo ni una palabra después de oír lo que dijo su hija, solo se la quedó mirando finalmente hasta que cerró sus ojos
¿Qué tenías en la cabeza para hacer semejante tontería?- pregunto la yegua anaranjada.
Ni yo lo sé… pero estoy arrepentida como no tienes idea mamá… cuando todo se fue al demonio no puse que hacer- respondió Trixie.
Pudiste mandar una carta a tus padres- dijo su madre.
No… no quería que supieran que fracasé como ilusionista… sabes cómo es papá- dijo Trixie.
Se como es tu padre… tiene a perder la cabeza cuando se trata de magia… pero pudimos ayudarte- dijo su madre.
Lo sé pero no quería decepcionarlo- dijo Trixie.
Cariño tu padre puede ser muy duro pero sabes que en el fondo siempre iba ha estar para ayudarte- dijo la yegua.
Lo pero ya no puedo cambiar nada- dijo Trixie.
El pasado no pero tu futuro si- dijo su madre.
No quiero sonar mal… pero ¿cuánto tiempo le queda a papá?- pregunto Trixie.
Un par de días… perdiste mucho tiempo pero a un esta a tiempo de corregirlo- dijo su madre.
Creo que disfrutaré cada segundo que me queda- dijo Trixie.
Durante el resto de la semana hija y padre pasaban todo el día juntos poniéndose al día, después de diez días la tragedia llamó a su puerta, cuando su madre iba a despertar a su marido, esta ya no respondía, intento desesperadamente despertarlo pero no pudo, un grito desgarrador se oyó por toda la mansión, Trixie y el personal llegó a la habitación para ver como la madre de la yegua lloraba a cántaros a lado del cuerpo de su esposo.
Ese mismo día toda la ciudad supo de la muerte de uno de los mejores ilusiones que ha habido a lo largo de todo el mundo, para la tarde varios de amigos de la familia, regentes de la ciudad estaban en la casa de los Lulamoon para rendir los homenajes pertinentes y dar el pésame a las dos yeguas, se declaró un luto de un cinco días en honor del gran ilusionista.
Al día siguiente fue el cuerpo fue llevado en una procesión por toda la ciudad para que todo el mundo tuviera la oportunidad de despedirse, después un buen rato llegaron hasta al lugar de descanso final, en el cementerio de Aashtethos, el cuerpo de depositado en la cripta familiar de los lulamoon, al final Spectacle dio un lindo discurso en honor de su fallecido esposo que conmovió a todos los presentes.
Aquí el final del segundo capituló espero que les haya gustado mucho y nos vemos próximamente en otros capituló de Maga de Cuarta
