Here I am

Parte II

Llegué a mi departamento, fui directo a la cocina, busqué un tazón limpio y mi cereal de hojuelas de maíz. Que sea una estrella de rock no quiere decir que vaya a desayunar una cerveza y una puta, no. Lejos estoy de eso. No tendría este cuerpo si fuera así. Apenas termine mi desayuno me iré al gimnasio.

Absorto en mi desayuno, la amenaza de esa loca mujer me llegó a la cabeza; aunque no quiera admitirlo, Hange tiene razón, necesito conseguir a un guitarrista pronto, antes de que ese idiota de Galliard abra la boca y llegue a los odios de la prensa y de los fans. Sería un dolor en el trasero lidiar con ellos ahora y no está en mis planes dejar ir ese contrato y menos por esto.

¿Pero cuáles son mis opciones?, ¿Poner un anuncio?, ni hablar, me llevaría meses encontrar a alguien. ¿Robar un guitarrista de otra banda? Puede ser. ¿Resignarme? No, le daría la oportunidad perfecta a mis enemigos de burlarse. ¿Aceptar que Galliard regrese y tragarme mi orgullo? JA. Primero muerto.

Conclusión: estoy jodido.

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Llegué al gimnasio. Me puse una sudadera deportiva y unos shorts junto con unas mallas de compresión abajo. Obviamente todo de color negro y solo la sudadera de color gris.

Apenas hice mis estiramientos de piernas y brazos, busqué mis audífonos inalámbricos. Mi parte favorita es llenar mis oídos con todo el poder del heavy metal, y una o dos de mis propias canciones, entrenar con Painkiller de Judas Priest es una experiencia que todos necesitan probar al menos una vez.

Mi rutina es correr alrededor de una hora en la caminadora y luego hacer varias repeticiones de levantamiento de pesas, por último, trabajar mi abdomen con algunos aparatos de peso. En cada ejercicio pongo un estilo diferente de metal. Y esto tiene una razón de ser.

Lo cierto es que estaba buscando inspiración de algún lado. Hace un buen tiempo que ninguna musa me ha visitado, no he podido escribir nada más que pura mierda para mis canciones. Lo admito, pero no siempre fue de ese modo.

Hubo una época en la que veía la música de manera diferente. Quería ser diferente, ser el mejor.

Escribía lo que la música me hacía sentir, lo que era pararse en el escenario y cantar, fueron los mejores años de mi jodida vida, tenía muy alta la ilusión de triunfar. Y ahora, después de tanto tiempo, tengo que admitirlo, me he dejado llevar. Sin querer me hundí en el lado oscuro y no tengo deseos de salir.

Cuando grabé mi primera canción y la presenté al público, probé por primera vez el sabor del triunfo en mis labios, mi primera experiencia con el alcohol y la diversión. Mi primera fiesta y mi primera noche de sexo sin amor, sin embargo seguí haciendo buenas canciones.

Muy pronto llamamos la atención de los cazatalentos y entramos a la industria de la música, lo cual fue muy diferente de lo que pensaba. Era fácil seguir el camino y también era sencillo perderte en él.

El primer álbum de mi banda se vendió como droga para los adictos. Y en cada escalón a la cima se presentaban nuevas presiones y tentaciones; las fiestas formaron parte de mi vida, el alcohol era mi mejor amiga y luego conocí a la que sería mi amante por un buen tiempo, la poderosa nicotina.

Sabía que muchos artistas pasaban por esta etapa. Es normal disfrutar de la vida y sus placeres, pero desafortunadamente nuestro animal interior nunca está satisfecho con nada.

Yo quería más, probé de más, e ingenuamente pensé que eso no repercutiría en mi carrera. Pero quedé como pendejo cuando a la semana se me pedía un nuevo sencillo. Me sentaba a escribir confiado, pero las palabras no salían, fue la última vez que escribí algo como Run Free [1]. Desde entonces dejé de encontrarle sentido a lo que componía.

Si el libertinaje era parte de mi vida, se me hizo buena idea darle también un espacio en mi música, así que mi tercer álbum gritó esa perdición. Con mi sencillo To the stage [2] esperé que fuera igual de bienvenido. Y al ver su éxito me volví vanidoso y engreído, mis preocupaciones vanas por entregarles lo mejor a mis fans se esfumaron.

Pensé que cualquier mierda podía convertirla en éxito. Y a todos mis fans no pareció importarles, porque la mayoría quería ser rebelde como yo, se les hacía genial gritar "puta y mierda" en una canción. Es divertido, pero lo es más observar la cara de los padres al escuchar a sus retoños.

Ese es mi público, uno agresivo.

Ya que estos son mis pensamientos, me veo en la obligación de ser el doble de sincero. Si yo fuera otra persona y tuviera que describirme, tendría que mencionar solo una cosa: no soy buena persona.

Si los demás quieren tratar de entenderme, deben empezar por comprender que soy así porque así me gusta serlo, ¿Por qué fingir que algo me agrada, cuando no es el caso?, ¿Por qué tendría que ser amable con la gente que odio y detesto?, ¿Por qué me sumaría a ese fenómeno social, masivo e hipócrita?

¿No es más bajo y desvergonzado fingir por fuera una cosa, cuando por dentro eres otra?

¿Y qué si digo lo que pienso francamente sin ningún tacto?, ¿Qué si aborrezco la mayoría de las cosas y quiero decirlo abiertamente?

Esas crisis mentales de aparentar algo que no soy, no son ningún problema para mí, porque he decidido ser como yo quiero, comer y vestir mofándose de la crítica ajena, ser como soy me inhibe de tales problemas.

Esa es la verdadera libertad.

No soy un cobarde que no admite lo basura de persona que es.

Sí, soy egoísta, poco amable, cero tolerante, obstinado y cien por ciento orgulloso; puedo abusar de mi soberbia y vanidad cuando quiera, y soy más franco de lo que en realidad debería ser. Nunca he podido cambiar mi mal humor y me regocijo en mi soledad. Si quiero ser vulgar o misterioso… Si quiero ir de extremo a extremo… Todo puedo serlo.

No necesito cambiar lo que soy, solo seguir así, aunque me sienta perdido en un abismo, no importa mientras pueda estar aquí.

He escuchado varias opiniones de mis fans en redes. Algunos me idolatran ciegamente, y como siempre, también están los haters de mierda. "La música de Levi ya no es la de antes", "se ha vuelto como todos los pretenciosos del rock", "pensé que él era diferente".

Que se jodan.

Este es el precio de la fama: la perdición. El precio que hay que pagar para vivir en el edén: renunciar así mismo.

No es tan malo como piensan, porque a cambio del placer puedes entregarte a ti mismo. La muerte es el final de todo, no importa quien seas, así que porqué no mejor adelantar lo irremediable.

Cualquiera de esta industria puede afirmar mis palabras. Nadie podría aguantar este angustioso camino adrede, no hay hogar en ningún lado, no hay familia, salvo las sustancias que te duermen los sentidos, no hay amor, solo las caricias de manos ajenas.

¿Será que ese es mi destino?, no puede importarme menos ahora.

Pero si soy honesto conmigo, hace mucho que deseo volver a ese pasado feliz, donde era uno con la música y podía gritar mis sentimientos.

Ahora no sé si lo que sale de mi voz -que es pura mierda- quiere decir que me he podrido por dentro. Y que no debería seguir buscando lo que hace tiempo se ha perdido. El mundo me hace sentir que soy superior. Mi estupidez puede vender, el circo en el que se ha convertido mi vida parece tener éxito, entonces por qué angustiarse por el porvenir.

Solo tienes que seguir adelante Levi, a cualquier precio, bajo cualquier presión. Solo no mires atrás.

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Al dirigirme a mi departamento nuevamente, otra llamada de Hange reclamó ser atendida en mi teléfono.

—Qué.

—Hola capitán.

—Dime lo que quieres, rápido y no me llames así.

—Es un apodo perfecto, ya que parece que das una orden cada vez que hablas. En fin, Mike y yo iremos al viejo Bar "Darkness". ¿Te acuerdas? Un buen amigo me dijo que hay nuevos talentos y quizá sea la solución para tu chistecito.

—No iré, sabes que ya no me mezclo con esos fracasados.

—Esa respuesta no es una opción. ¿Sabes que es tú culpa, esta situación?, yo no debería limpiar tus desórdenes, así que te aguantas y vas, o llamo a Pocco.

—Maldita cuatro ojos.

—¿Escuché un sí?

—Bien.

—Genial, nos vemos allá esta noche.

¿Tenía otra maldita opción? No.

A ver qué salía de esa pocilga antigua y de la jodida noche.

Me estacioné en el lugar más iluminado posible, bufé y luego traté de mentalizarme para lo que seguiría después, estar aquí era mi resignación, no tenía otro plan. Normalmente actúo por impulsos y ayer me sobrepasé un poco.

Tanto drama por un estúpido guitarrista. ¿Quién necesita a Galliard? La banda soy yo, yo soy su alma, su creador.

Por fin salí del auto y presioné el botón de los seguros automáticos. Caminé hasta la entrada del bar, notando un montón de motocicletas aparcadas y numerosos hombres musculosos vestidos como para un funeral que se juntaban a las afueras del lugar.

Ya lo dije antes, no imaginé volver a este lugar de fracasados. Quiero decir, estoy nostálgico. Ahí está ese mismo letrero pintado sobre un pedazo de madera; las letras despintadas y ahora solo hay una ala negra colgando. Recuerdo perfectamente que eran dos.

Darkness es el primer sueño de varios, fue el mío también.

Tocar aquí parecía el primer peldaño para convertirme en una estrella de rock; en aquellos tiempos donde era demasiado ingenuo y soñador, pensaba que la música lo era todo. Ahora puedo mirar orgullosamente por encima de mi hombro. Sí, nada ha cambiado en este lugar.

Suspiré pesadamente y me adentre en aquel antiguo lugar. El primer olor que detectaron mis fosas nasales fue el olor de la madera mojada, seguro la humedad se comía este lugar. Luego vino el olor a cerveza, cigarrillos y sudor. El ambiente era pesado, sofocante, suerte que solo traigo una camiseta de manga corta, sino, moriría de calor.

Cerca de la barra localicé a Mike y a Hange hablando amenamente con el bartender. Más lejos, justo enfrente, estaba el escenario donde un grupo de aficionados tocaban Not the American Average [3]. Sentí el suelo temblar.

—Oi, Loca —me acerqué lo suficiente para llamar la atención.

—Ah Levi, llegaste. Siéntate aquí.

—No te pongas cómoda, que para mí no es un placer pisar este lugar, ¿podemos ver ya a esos prodigios que dices y largarnos?

—¿Cuál es la prisa?, ¡este lugar es fantástico! Estoy nostálgica… Aquí nos conocimos y aquí tocamos nuestra primera canción. Que tiempos ¿no Mike? — él asintió sin dudar y le dio un sorbo a su cerveza.

¿Buenos recuerdos? Si claro.

—Yo solo veo un bar basura y un montón de aficionados.

Hange me miró en desaprobación.

—Se te subieron los humos. Es fastidioso cuando estás así, no puedo creer que niegues el lugar de dónde vienes.

—Si, si, lo que digas. No quiero otro puto sermón. Solo tengo que sentarme y esperar ¿no? Sorpréndeme Hange.

Claramente la estaba retando con mi tono sarcástico.

Me senté en una silla alta y le pedí al bartender una cerveza casi helada. Hange me miró desilusionada y luego suspiró mirando a Mike que siempre era de pocas palabras, cosa que yo agradecía enormemente.

"¡One, two, three, four! [3]

All the things that she said, was it all in my head?"

1, 2, 3, 4

(Todas las cosas que ella dijo, ¿estaba todo en mi cabeza?)

Oh no, esa estúpida canción vulgar. Muy buena, pero vulgar.

"Come on, baby, keep it down

Honey, hush your lips

Clothes trailing from the backdoor to the bedroom

And I don't even know your name"

(...)

(Vamos, nena, Manténlo abajo

Cariño, cállate los labios

Ropa que se arrastra, Desde la puerta trasera a la habitación

Y ni siquiera sé tu nombre)

Me recuerdan mis primeros días como cantante, de esas noches que quería escalar muy alto desesperadamente a cualquier costo.

Aquí viene la parte favorita de estas bestias aquí presentes. Bueno, y para qué mentir, yo también disfruto de esto.

"You stupid fucking whore

And after all of all my dreaming being only you"

.

"You standing there, baby, oh

The things that i could do

Back to the wall with a drink in my hand

Back it up, baby, ¡ride, ride, ride!"

(...)

(Estúpida putita

Y después de todo mi sueño sigue siendo tú)

(Estás parada ahí, nena, oh

Las cosas que podría hacer

De vuelta a la pared con una bebida en mi mano

Retrocede, nena, ¡cabalga, cabalga, cabalga!)

Cuando eres un novato, es muy fácil dejarse llevar por la frase "sexo, drogas y alcohol", lo sé por experiencia. Muchos lo hemos vivido. Esa adrenalina corroe poco a poco los huesos.

Pero no quiero hablar del significado de la canción, sino de su disfrute.

Cuando llega la parte del gutural, todos saben qué hacer. Se mueven poco a poco, retroceden sobre sus pasos hasta que dejan un gran espacio en medio; todos alrededor, solo esperando la señal. Y cuando el sonido de la batería se asemeja a los latidos de tu corazón, el cuerpo se deja llevar; como electricidad, como una avalancha humana, todos se precipitan unos contra otros.

Es una especie de baile agresivo. El "Mosh" es así. Sucede junto con el grito de la libertad; la adrenalina es el único veneno verdadero mientras eres golpeado y zarandeado sin piedad, entre espaldas, codos, pisotones y puños.

Se salta mientras la voz del vocalista te retumba en la cabeza y en las venas, ya no puedes parar.

Solo quiero decir que este es un "baile" -si se le puede llamar así- que es solo para apasionados.

Hace un rato que no entro a ninguno, mi condición física me lo permite, pero no estoy de humor para ello.

Sostengo un cigarro encendido con mi mano izquierda, y con mi mano derecha me empino un buen trago de la botella de cerveza. Observo a un mocoso caer al suelo bastante lastimado, es por eso que digo que el mosh no es para cualquiera.

Quienes interpretan el gran éxito de Asking Alexandria no lo hacen mal, el guitarrista es bueno, pero no lo suficiente para robarlo. He estado esperando por esos "nuevos talentos", pero creo que el amigo de Hange no es un buen crítico de música, si acaso no sabe nada de ella.

Mientras está el caos en la pista de baile, decidí dirigir mi vista a mi alrededor. Estoy sentado en la barra, volteado hacia el escenario, y a mi lado están Hange y Mike compartiendo unos tragos.

Es costumbre en este bar que se hagan las "tocadas", presentaciones y shows de música se componen de varios novatos o bandas aficionadas se presentan sin falta cada fin de semana, pero no puedo descalificarlos a todos, hay personas buenas, además que yo estuve parado en ese escenario un par de veces tal y como Hange lo dijo.

La dinámica de venir aquí es beber, escuchar buena música y convivir. Algunos otros vienen a buscar con quien follar o a quién partirle la cara, todo puede pasar.

La banda que acababa de tocar bajó del escenario bastante orgullosos para darle paso a una especie de presentador: Flegel Reeves, un gordiflón simpático y lame botas que no cambió nada en todos estos años.

—"Gracias por tan maravillosa presentación amigos de la banda Marley. Ahora, escuchen atentamente hijos de puta, tenemos la fortuna de tener entre nosotros una voz muy aclamada por ustedes. La diosa triste, Mikasa, nos ha honrado con su presencia una vez más y junto a ella, Eren Jeager, nuestro titán, un verdadero cabrón, él llegará lejos, lo sé, lo escucharon de mí".

Notas del capítulo:

[1] Run free canción de Asking Alexandria. Esta canción aparecerá más adelante con mayor detalle.

[2] To the Stage canción de Asking Alexandria. Esta canción aparecerá más adelante con mayor detalle.

[3] Not the American Average canción de Asking Alexandria.

N/A: Ya viene el encuentro. Solo espera y verás Levi, mi Eren te dejará con la boca abierta.

Para los que ya lo notaron, si, mi banda favorita es AA. Ojo, eso no quiere decir que no escuche o conozca otras bandas, tanto clásicas como nuevas. La tarea de escoger qué bandas y canciones utilizar fue muy difícil, yo con gusto pondría todas, pero tuve que adecuarme a la voz de los personajes, y para mi Levi suena perfecto con BVB y con TDG.

Espero les haya gustado, nos leemos muy pronto.