Gracias por sus comentario me da gusto que les haya gustado. Si debo de decir que son muy OCC todos jaja, pero en mi defensa es por el desorden de ansiedad que tiene Harry, por eso van a leer ahorita lo sobreprotectores que son con el. Ahora bien, como les comentaba en la primera parte este es solo un vistazo de mi universo. Esta historia la hice para el reto de Dramnione desde los ojos de otros, por lo que esta termina en este capitulo, pero publicare la próxima semana el universo desde cero, o sea que podrán leer el desarrollo de cada personaje y porque los Malfoys son tan cariñosos y sobreprotectores con Harry, ya que fue nuestro chico quien los cambio, haciéndoles una familia diferente. So, disfruten de la lectura, y debo de advertir que hay drama, drama, y mas drama.
—Cissy
—Lo se debemos resignarnos.
—No es tan malo…— Se le escapo una risa — Que bajo hemos caído.
—Nuestros padres deben estarse retorciendo en sus tumbas— Ambos sonrieron con complicidad mientras tomaban su mano.
—Pues me da gusto por tu madre, esa mujer se lo merece.
—Cállate — Le golpeo — Ahora que lo recuerdo ella jamás te quiso y me alegra lo cruel que fue contigo.
—Oh por favor…— Gimió.
—Eso y más te mereces por hacer llorar a Harry.
—Ya me disculpé por eso en reiteradas ocasiones— Se quejó logrando que su esposa le volviera a golpear— Bien, bien no lo suficiente — Se acercó para robarle un beso el cual ella correspondió al instante mientras se abrazaban.
Narcisa tuvo que evitar la mueca de disgusto al ver a su esposo espiando a sus hijos y a esa chica de nuevo. No era que a ella le agradará mucho la niña también por su condición, pero si a Harry le hacía feliz tener a su amiga ahí en casa, ella no podía hacer nada. Nunca le decían que no cuando se trataba de socializar ya que no era igual a Draco literalmente tenían que arrastrarlo a los eventos sociales y tenía que tener a su hermano en todo momento antes que intentará escapar. Sus pensamientos fueron interrumpidos por las palabras de su esposo.
—No puedo creer que se haya atrevido a traer a una sangre...
—No digas esa palabra — Le amonestó golpeando su brazo — Se enojará contigo y no volverá a hablarte como la otra vez.
—Como si me importara que no me hable... — Gruñó, aunque en el fondo él sabía que no era cierto. Paso casi dos semanas antes que lo perdonara eso y que Draco tuvo que intervenir.
—Oh Claro... Por eso no le pediste a nuestro hijo que hablara con él ¿cuánto te costó esta ves?
—Dos escobas, dos capas, y los mejores asientos para toda la temporada de...
—Veo como no te importa si le has dado todo eso a Draco— Negó con diversión.
—Solo te está diciendo la mitad de lo que me dio madre — Se acercó a sus padres — Y déjame decirte padre que si continuas así se va a enojar mucho contigo. Pueda que creas que no escuchamos nada de lo que dices, pero podemos verte y tus gestos dicen más que mil palabras al menos intenta disimular un poco tu disgusto no es como si no conocieras a Hermione ya, te la presentamos al final de nuestro primer año, y nos encontramos con ella y sus padres al principio del año pasado, y ahora con este son tres años padre estas exagerando.
—Silencio — Volvió su mirada hacia Harry quién reía ante los relatos de la niña — ¡Debemos detener esa amistad ahora mismo! — Se escandalizó — Míralo podría casarse con ella peor aún podría enamorarse de Draco. Dile a Pansy que necesito que atrape a Harry antes que alguien más se lo robe.
Y ahí estaba lo que ambos esperaban ver en Lucius la paranoia bien marcada hablando de traer a Pansy para ayudarla a crear un plan cuando él sabía que Harry no toleraba la presencia de la niña. Draco y Narcisa rodaron los ojos ante sus arrebatos.
—Padre... — Se calló cuando lo vio directamente a los ojos y supo lo que diría al instante — Ya te dije que solo la tolero porque es amiga de Harry — Se cruzó de brazos fingiendo desinterés uno que su madre reconoció de los recuerdos de su hijo menor.
—¡Y espero que siga así esa niña no puede entrar a esta familia como esposa de Nadie no lo voy a permitir! Harry debería de saberlo, lo adoptamos, le hemos dado todo, no es nuestro hijo y ahora... Tu sabes que ella es una... Sangre sucia
—Lucius es suficiente— Su madre habló indignada una cosa era que hablara de la niña con padres no magos y otra que se dirigiera a su hijo en esa forma porque Harry era tan hijo suyo como Draco.
Esas palabras le dolieron a Draco, su padre podría ser a veces muy cruel y no tenía sentido querer razonar con alguien quien no quería ver más allá de su herencia. Incluso su amor por Harry se empeñaba al escuchar la palabra muggle su hermano había sufrido todo este tiempo por su falta de tacto y solo el hecho que ofendiera a la única persona amable a su alrededor, una tan dulce como Hermione le hacía enojar. No lo iba a aguantar más le diría que a él le agradaba. No que creía que le gusta que...
Toda palabra murió en sus labios al ver a su hermano parado justo detrás de su padre. Harry solía gritar, enojarse con quien sea incluso discutir con Lucius si la situación lo ameritaba, pero ahora al ver su expresión su corazón dolió.
—Harry... — Tanto Lucius como Narcissa palidecieron— papá no...
—Herm—mione... y-ya s-se va y-yo... Mm le pediré a Dobby que l-la lleve a su... Casa — Tartamudeo evitando verlos. Lucius se dio la vuelta e intento tomarle por los hombros, pero antes que eso pasara él se alejó con temor de lo que pudiera decir.
—Hijo… este no es lo que piensas yo solo — intento él mientras Narcissa se acercaba sigilosamente para no asustarlo.
—Yo sé que no soy su hijo... No se preocupe... No tiene que fingir más preocuparse por mi... Todos usted... Pueden dejar de hacerlo— Hablo con la voz quebrada. No podía pensar con claridad, solo escuchaba las palabras de su pa... No del señor Malfoy, quería salir corriendo, pero sus piernas no respondían. Hermione le había asegurado que sus pensamientos eran infundados y que no hiciera caso a los comentarios, pero al escuchar todo ya no sabía que pensar.
Desde que tenía memoria eran los mismos comentarios una y otra vez sin aparar: "Son una de las más prestigiosas familias y ahora cuidan a un mestizo" "Ellos no son tus padres deberías referirte hacia tus superiores con más respeto" "Incluso se atreve a presumir que son sus padres y usar una capa con la insignia de su familia" "Por favor Potter todos sabemos que tus padres fueron unos asquerosos traidores, manchas a la casa Malfoy y ahora estas en una casa enemiga."
No podía parar de escuchar cada palabra y resonaba más las de Lucius. ¿Entonces de verdad no lo quería? ¿Era por eso que con sus amigos lo trataba diferente? ¿Todos esos regalos, muestras de afecto fueron fingidas? ¿Incluso Narcissa y Draco? Cubrió sus oídos para intentar que se detuvieran todas esas voces.
—H—a.… rry... Harry — Escuchaba su nombre a lo lejos, pero no era consiente de nada a su alrededor, su respiración se volvió pesada y manchas negras opacaron su visión. Se inclinó hacia adelante y solo sintió que alguien lo atrapó bajando lo con cuidado al suelo. Gimió intentando alejarse pensando que era Lucius.
—¡Harry! — Draco le llamó apretando lo en sus brazos — Está bien...tranquilo soy yo— Intento calmarlo, trago saliva al escuchando los sollozos ahogados que se le escaparon a su hermano y solo atinó a meterlo más en sus brazos. El temblor en su cuerpo solo hacía que Draco se preocupara más y lo acunara en sus brazos intentado reconfortarlo. Le lanzo una mirada de advertencia a su padre quien intento acercarse.
Hermione quien había llegado minutos atrás logró escuchar una parte de las palabras de su amigo, no supo en qué momento todo se había complicado. Solo vio cómo todo el estrés que se había acumulado durante años, sumado con todos esos pensamientos los últimos días explotaba en ese momento. Harry no solía contarle a nadie de los comentarios que escuchaba o de los que si iban dirigidos hacia él en su propia casa o la de Draco. Ambos habían descubierto todo eso por Myrtle la llorona. Draco se había encargado de amenazar junto con sus amigos a quien fuera que dijera algo hiriente o que solo dirigiera una mala mirada a su hermano, pero no había sido suficiente y siempre había alguien quien decía algo ofensivo.
Y Ahí estaban los Malfoys sin poder acercarse a ninguno de sus hijos cada vez que lo intentaban Harry intentaba huir, pero el fuerte agarre de Draco no se lo permitía. Hermione se arrodilló en el suelo intentando calmarlo, hablándole suave mientras acariciaba su cabello rebelde cariñosamente. Se encontró con la mirada preocupada de Draco y le sonrió para tranquilizarlo también. Él le devolvió la sonrisa agradecido y ambos continuaron hablando con su hermano.
—Hermanito tu sabes que... padre dice puras tonterías cuando no es razonable... y eso que ha dicho no es...
—Q—quiero... Irme... no...quiero…estar… con el tío Sev... — Hablo entrecortado mientras seguía hablando sin tener ningún sentido. No estaba funcionando y sólo lograban que se agitara más de lo que estaba. Hermione había impedido que se halara el cabello en más de una ocasión y estaban empezando a preocuparse en verdad cuando el aire se le escaba por completo de sus pulmones.
Lucius sólo miraba impotente la escena de la cual era culpable y sólo escuchar que quería irse le hacía sentirse aún peor. Su esposa le dio una mirada furiosa.
—Ya estarás contento... — Murmuró antes de alejarse y pese a las protestas de Harry se acercó a él y metió en sus brazos a ambos porque sabía que sí lo agarraba sólo a él sería peor.
Narcissa dirigió su mirada a la niña por quien había empezado toda esta discusión. Podría echarla de su casa, incluso insultarla como lo haría su madre y tía, pero no pudo, no cuando le hablaba de forma cariñosa a Harry, menos cuando le tomó la mano de Draco en señal de apoyo. Observó con atención como su hijo no se quejó y lo supo en ese instante, esto traería problemas en el futuro. El quejido lastimero de Harry la hizo centrarse en él de nuevo y solo recordó el día en el que alguien de su círculo de amigos le dijo a su hijo como habían muerto sus padres biológicos no tenía más de 8 años y había sucedido lo mismo que ahora. Les había costado tranquilizarlo y se había negado a hablar con nadie, su esposo había estado furioso y no sé arrepintió para nada cuando los destruyó socialmente.
Suspiro mientras secaba las lágrimas de las mejillas de Harry sabía que era inútil hacerlo, pero necesitaba sentirse amado y ella no le iba a negar nada de eso.
—Estas arruinando esos bonitos ojos verdes que tienes y...
—No quiero... Su lastima... — Hablo en un sollozo apartando su mano— Debieron... dejarme con mis... Tíos muggles... No quiero estar aquí...
—Mamá has algo... — Suplico Draco al notar que Harry no iba a calmarse— No puedes irte... ¿Me vas a dejar solo acaso? Por favor Harry sabes que yo si te quiero no puedo fingir algo que no siento, crecimos juntos, eres mi hermano la sangre no significa nada, no importan esas tonterías de pureza, yo…te quiero, y a Hermione también — Intento razonar con él.
Harry negó una y otra vez sin entender ninguna palabra de lo que le decían.
—No estoy dejándote ir a ningún lado así tenga que atarte a la cama... ¡Mamá!
—Draco cálmate, nadie irá a ningún lado— Miró a Lucius y este supo lo que tenía que hacer desapareció en busca de un mendimago — sshh respira más despacio — Instruyo hablándole con amor a su hijo adoptivo — Tu sabes que te quiero— Susurro en su oído mientras ponía la mano en el pecho de Harry podía sentir como su corazón golpeaba agitado robándole el aliento a cada segundo y no ayudaba en nada que siguiera llorando. Ella no era sanadora, pero su abuela lo había sido y ella le había enseñado unos cuantos hechizos especiales. Empujó su magia con suavidad para no asustarlo intentando reducir su ansiedad— Tu eres mi bebé también— Dejo un beso en su mejilla.
Draco espero pacientemente mientras observaba las acciones de su madre. En todo momento no había soltado la mano de Hermione ambos se habían alejado un poco para darle espacio a su mamá. Hermione esperaba que funcionará, nunca había visto llorar a Harry y nunca más quería hacerlo.
—Tu padre debería ordenar sus prioridades— Apretó la mano de Draco— Ahora no va a querer escuchar nada de lo que le diga.
—No te preocupes…madre y yo no le dejaremos olvidar esto, y más le vale se disculpe o sino le cobrare esto.
—Siempre podemos teñirle el cabello de verde.
—No, de rosa dos semanas serán suficientes — Se permitieron sonreír.
Draco suspiro esperando a que el mendimago saliera junto con sus padres de la habitación de Harry. Tenían un buen rato ahí y nadie le decía nada. Estaba molesto y la verdad no volvería a hablar con su padre en lo que le quedaba del año.
—¿Le pasa seguido? Digo…ya lo he visto sus ataques de ansiedad, pero esto fue más aterrador —Llamo Hermione su atención sacándolo de sus pensamientos.
—No.… bueno en los últimos tres años solo tuvo uno en el baile de navidad. No ayudo mucho a que Pansy no le dejara tranquilo.
—Tu amiga es odiosa— El asintió en comprensión — ¿sucedió algo antes que llegara?
—No— Mintió de inmediato no queriendo que se sintiera culpable — Sólo... Papá dijo algo que no debía.
—Oh... Pues... Creo que me tengo que ir y...
—Granger no te atrevas a culparte. Papá fue el que hizo esto y se dejas de hablarle a Harry o a mi te juro que...
—No lo haré — Sonrió— ¿así que me quieres eh?
—Eso lo dije porque…bueno.
—También te quiero Draco— Dijo sonrojándose — Mm… no es como si no supiéramos nuestros sentimientos ¿no? — Se acercó abrazándole tomándole desprevenido.
—Vas a ser mi perdición un día de estos— Correspondió al abrazo— Prometo que…lo hablaremos cuando estemos solos— Se cercó quedando a centímetros de sus labios más opto por besar su mejilla— Este dobby te llevará a tu casa, te haré saber si Harry está bien.
—Claro que lo harás Malfoy — Dejó un beso en su mejilla de igual manera y desapareció junto al elfo de su amigo.
—Contrólate... Es solo un beso— Se tapó el rostro — No escuchare el final de esto si padre se entera— Gimió. Respiro hondo intentado calmar los latidos de su corazón guardando la compostura al escuchar que la puerta se abría.
—Draco ya puedes...
—No estoy hablando contigo— Ignoro a su padre.
Narcissa tuvo que evitar rodar los ojos ante el comportamiento infantil de su esposo. No pudo evitar pensar que estaba exagerando un poco, pero siendo honesta sabía que él haría todo ese escándalo ante tal situación. Suspiro con disimulo mientras observaba sus acciones detenidamente. Su esposo se paseaba en círculos mientras movía sus manos con desespero, su voz se escuchaba claramente disgustada mesclada con esos gestos que la desesperaba en gran manera. Se tragó su comentario sarcástico mientras bebía un sorbo de su té esperando pacientemente a que él terminará con su monólogo acerca de: "por qué su hijo no debía invitar a chicas muggles a su casa. "
—No puedo creerlo... Como se atreve — Gruñó disgustados días después del incidente.
—Deberías tranquilizarte un poco. No es como si fueran a casarse o algo por el estilo solo están charlando y además... —
—Espera ¡¿Qué?! ¡¿Casarse?! ¡De ninguna manera! — Grito pisoteando el suelo tal y como un niño lo haría.
—Lucius— Advirtió frunciendo los labios con disgusto para luego negar con un suspiro— Para con eso de una vez o lograrás que Draco no te vuelva a dirigir la palabra sabes que está haciendo un esfuerzo por llevarse bien con la chica por su hermano— "Mentira, lo hace por ella, si lo sabré yo que soy su madre" Pensó — Deja de ser paranoico y no tientes a tu suerte no voy a permitir otro escándalo como la última ves — Cruzó sus brazos mirándolo con desafío.
Podía ser paciente y tolerante con su esposo, pero de ninguna manera permitiría que Harry tuviera un ataque tan malo. No podía soportar ver el dolor en los ojos de sus hijos luego de un comentario fuera de lugar de Lucius. Estuvo tentada a hechizarlo con imperdonable por todo el revuelo que había armado por esa odiosa chica. No era que le cayera bien, compartía los mismos temores de Lucius detestaba la idea de ver a su hijo con ella, pero tampoco iba a dejar que su crianza la cegara. Draco tenía fuertes opiniones y no se dejaba influenciar por nadie, si algo no le agradaba lo decía, y si prometía algo lo cumplía. Ella sabía que ambos estaban orgullosos de su comportamiento sin importar que, su hijo mayor llevaba la casta Malfoy en un alto nivel. Intentaría al menos conocer a la niña solo porque había demostrado su cariño por sus hijos, solo esperaba que fuesen amigos y nada más, aunque viendo la situación junto con esas miradas que se dirigían ella y Draco le hacía dudar de su "amistad."
—¿Hasta cuándo vas a reprocharme eso? — La miró fingiendo desinterés, pero ella lo conocía demasiado para saber que se sentía aún culpable.
—Hasta que aprendas que debes cuidar tus palabras— Dijo sin ningún remordimiento de su parte— Sabes que aún no se ha recuperado de la última crisis, y no quiero verlo así nunca más. La sangre no hace familia Lucius... — Dijo dirigiendo su mirada a sus hijos. Draco, y Harry. No pudo evitar preocuparse por la salud de su pequeño hijo.
No había tenido corazón para rechazarlo cuando Severus les pidió que lo cuidaran, menos al verlo en un estado enfermizo que le había costado desaparecer. Las secuelas quedaron muy marcadas, y tenían que tener cuidado con él. Alejo esos pensamientos dolorosos de su mente y se centró en verlos conversar con la manzana de la discordia entre Lucius y su hijo mayor. Debía admitir que la niña era educada, y a lo sumo alguien con quien podrías tener una conversación culta. No es que hubiera estado pendiente de sus charlas con Draco, menos que su hijo dijera algo al respecto, pero en cambio Harry no era tan reservado como su hermano mayor, no cuando se trataba de disipar dudas de sus padres.
—Ya me disculpé con ambos —habló su esposo logrando sacarla de sus pensamientos.
—Oh, claro, y resultaron muy bien tus disculpas —rodó los ojos al recordarlo.
—Padre... Si no te importa me gustaría poder terminar mi lectura en paz sin tu constante supervisión —gruñó sin despegar su vista del libro mientras se acomodaba en la cama.
—Ya te dije que vine a buscar información, no a "supervisarte" a diferencia tuya mi tiempo es valioso.
—¿Dónde quedó tu creatividad para las mentiras padre? — Bufo con fastidio no disimulado.
—No estoy mintiendo, y más te vale dejar de usar ese tono conmigo a menos que gustes pasar tus vacaciones de invierno encerrado en tu habitación — Advirtió ganándose una mala mirada de su hijo que no pasó desapercibida por Lucius.
—Quieren parar ustedes dos con eso. Harry necesita descansar, y no ayuda que estén discutiendo— Les miró a ambos con advertencia— Si no pueden mantener una conversación civilizada dentro de esta habitación pueden irse, mansión Malfoy es lo suficientemente grande para que estén alejados— Sentenció molesta.
No podía creer que siguieran empeñados en no hablar del asunto. Draco aún estaba muy molesto por el arrebato de Lucius, y su esposo no estaba colaborando en nada a la situación dejando que su orgullo pomposo se interpusiera.
—Lo siento madre, pero no es mi culpa, además papá no tiene nada que buscar en la habitación de Harry si no es la biblioteca— Se cruzó de brazos.
Y ahí estaba su hijo con su propia dignidad Malfoy en todo su esplendor. No había duda que era la viva imagen de Lucius.
—Tu no me dices que hacer, esta es mi casa y puedo estar donde me plazca— Entre cerro los ojos disimulando la vergüenza.
Decidió ignorarlos por el momento mientras se encargaba de atender a Harry. Quien no se había atrevido a decir ni una sola palabra desde que despertó, de vez en cuando dirigía su mirada a cada uno de ellos como su temiera que desaparecieran en cualquier momento.
Tocó su mejilla con cuidado para no asustarlo, y sonrió cuando él se inclinó buscando más contacto de su parte.
—Sshh no iré a ningún lado — Susurro besando su frente. Les acercó a sus brazos dejando que se acurrucara en su pecho como lo hacía cuando era más pequeño. Ambos quedaron a la expectativa de la batalla campal de Draco y Lucius.
—¿Mamá...? — Susurro suave.
—Ya se les pasará — Acarició su cabello intentando calmarlo. Esperaba que sus palabras fueran verdad por el bien de su hijo mayor.
La discusión continuó su curso hasta que Harry tomó la mano de su hermano impidiendo que dijera algo grosero hacia su padre. Toda la atención de su hijo mayor se centró en él. Narcissa no pudo evitar sonreír al notar el cambio en Draco.
—Está bien, no te preocupes— Consoló apretado su mano.
—¿Pueden... Dejar de discutir?
A ninguno le gustó el sonido de su respiración menos como había arrastrado sus palabras con esfuerzo.
—Si prometes no invitar más a esa... — La oración murió en sus labios al sentir un calor proveniente de su capa.
Todo paso tan rápido que apenas tuvo tiempo de quitársela. Miró a su esposa quien sonrió con inocencia mientras Draco y ella guardaban sus varitas.
—Oh lo siento querido, pero no escuche la frase de disculpa en esa oración.
—Madre no le pidas peras al olmo, sabes que la edad le está afectando un poco. Necesita de tu ayuda para entender lo que ha hecho mal.
—Tienes razón Draco, necesitamos un pergamino y tinta para darle los pasos a seguir.
Lucius abrió la boca con incredulidad. No podía creer que se estuvieran burlando de él con tal descaro.
—Papá... deberías cerrar... la boca los Narddles pueden entrar por ahí— Agregó Harry. Eso fue todo los tres comenzaron a reírse logrando que Lucius golpeara la mano en su rostro.
—Sabía que esa niña no era buena influencia para ti... ¡Esas cosas no existen!
—¿Has visto uno?
—No, pero…
—Ahí esta... ¿Cómo sabes... que no existen si no has visto uno?
—Harry ese no es…
—Hermione...es mi amiga — Cambio de tema— Y Draco la aprecia ¿verdad? — Animo a su hermano a hablar del asunto.
Conocía a su hijo, sabía cuando intentaba jugar a su conveniencia, no era un Malfoy de sangre, pero eso no impidió ser uno de corazón, tan astuto como Draco, y tan inteligente como su esposo.
—Pues...— Oculto su sonrojo desviando su mirada— Apreciar es una palabra muy fuerte, tolerar sería mejor.
—Si tú lo dices... —Dijo poco convincente—. Me gusta... — Narcissa observó como todo el color de Draco desaparecía.
—Espera... ¡¿Qué?!
—Su compañía... —agregó con diversión.
—¡Harry! — Gimió avergonzado por caer en su trampa.
—Agradar... es la palabra... correcta y si no te conociera tan bien...diría que te gus…
—¡Cállate! — Una mirada de advertencia cruzó sus ojos al notar la intención de Draco— Madre ¡¿No vas a decirle nada?!— Hablo con indignación mientras observaba como Harry se metía en los brazos de Narcissa sonriendo con inocencia.
Siendo honesta no podía regañar a su hijo por decir la verdad con una libertad que podría ser pasada por descaro. Correspondió al abrazo dándole seguridad sin dejar de ver a Draco quien en ese momento intentaba en vano de controlarse.
—Solo es una broma hijo, no te lo tomes tan a pecho— "Una disfrazada de verdad."
—Tienes suerte en estar enfermo, solo espera a que estés mejor y…
—Ambos... Sabemos que no me harás nada — Sonrió con confianza logrando que a Draco le diera un tic en el ojo — Si lo hicieras te acuso con Hermione.
—Granger no es mi jefe, no le tengo miedo.
—Está bien... Recordare mencionarlo... en mi próxima carta.
—¡No harás tal cosa!
Lucius observó con el ceño fruncido el intercambio de palabras de sus hijos. Narcissa atrapó su mirada y negó con advertencia, claro está que un Malfoy nunca hacen lo que le dicen, y lo siguiente que se escucho fue un comentario grosero y despectivo de parte de su esposo: "No necesitas la amistad de sangre sucia", los gritos de Draco diciendo: "¡Padre ten un poco de respeto hacia los demás, su nombre es Hermione! Todo eso desencadenó otra discusión que terminó con ella echando a Lucius de la habitación.
—Bien, bien, lo admito, no pude manejar la situación. Pero, en mi defensa, están empeñados en que ella sea bienvenida en nuestro hogar…
—Silencio —lo callo al verlos acercarse a ellos—. ¿Deseas un poco de té, querida? —preguntó más por cortesía y no porque quisiera invitarla.
—Me encantaría, señora Malfoy.
—Está bien— Llamo a un elfo pidiéndole que trajera galletas mientras otro servía el té. Observó a la chica incomodar se por sus sirvientes y a su hijo decirle en un susurro "para con eso Granger. "
—Lo siento— Se disculpó tomando el asiento libre junto a Draco— No estoy acostumbrada a... Pues a los elfos domésticos.
—Hermione es defensora de sus derechos— Explicó Harry sentándose junto a ella— No te pongas intensa con ello por favor.
— Alguien tiene que defenderlos, y ya que son mis amigos.
—De ninguna manera — Despidió la idea Draco bebiendo un sorbo de su té— Tengo una reputación que mantener, y no estas arrastrando a Harry a tus locuras él ya tiene suficiente con una loca a la vez.
—Más te vale que hables de Ginny— Advirtió mirándole con desafío — Porque si es de Luna...
—Si no te conociera diría que...
—Me gusta Luna— Afirmó sin ningún tipo de vergüenza logrando que sus padres se atragantaran con su té— A mí no me da pena decir lo que siento mi querido hermano, y si sabes lo que te conviene te sugiero hacer lo mismo.
—No sé de lo que me hablas...
—Harry tranquilo mm... No quiso decir eso, solo está bromeando. Draco sabe que no debe de hablar mal de Luna ¿Verdad?
—Lo que digas Granger.
—Draco Lucius Malfoy Black— Hablo despacio impresionándola por su tono de voz muy parecido al de ella cuando regañaba a su hijo.
—¡Oi está bien! Es una broma hermanito ¿Feliz ahora?
—La verdad si
—Mandilón— Fingió toser en su mano.
—¡Harry! Será mejor que te retractes o te juro que...
—Señorita Granger ¿podría decirme como se hizo amiga de mis hijos? — Interrumpió Lucius la amenaza de su hijo — Digo, me extraña mucho que Harry interactúe con alguien de buenas a primeras, a él no se le da ser sociable, y ahora hasta Draco es su amigo también considerando lo quisquilloso que es— Tuvo que evitar el suspiro de exasperación por tal cuestionamiento de su esposo.
—Pues...
—No respondas Granger, y padre no soy quisquilloso.
—No hará daño que sepan cómo nos conocimos Draco. Bueno, Harry estaba teniendo un...
—¡Un momento de descanso en el tren! — Se apresuró a cortar a su amiga. Lo que le valió una mirada llena de preocupación de Lucius y Narcissa.
—No, no es verdad estabas teniendo problemas para respirar y... — Toda su explicación murió en sus labios al notar el pánico de los Malfoys en todo su esplendor.
Hermione intentó suavizar la historia omitiendo los detalles que no pasaron desapercibos por Narcissa quién había envuelto a Harry en sus brazos. Draco asentía a cada palabra que ella decía tomando nota de no dejar a su hermano solo con nadie de esos leones inútiles.
—Gracias por tu ayuda Hermione — Hablo con gratitud mientras tomaba su mano — La niña se sonrojo mientras apretaba la mano de su hijo — Sabes... Me gustaría que vinieras la fiesta de invierno ¿Verdad madre?
"Genial" Pensó sin tener ningún argumento en contra de la chica juggle.
—Está bien para mí... ¿Lucius? — Su esposo quien estaba a su lado asintió en acuerdo no atreviendo a emitir palabra alguna mientras acariciaba el cabello de su hijo menor.
—No tienen por qué invitarme.
—Solo te invito porque necesito a alguien más que me ayude con Harry, tu sabes que no le sientan bien los eventos sociales y tú eres la elegida para el trabajo. No lo tomes como una diversión sino como una tarea.
—Si tú lo dices — Sonrió sin previo aviso abrazándolo sin importar que los estuvieran viendo — Me encantaría venir a ayudarte Malfoy.
—B—Bueno... — Susurro sonrojándose mientras correspondía torpemente a su muestra de afecto.
—El amor está en el aire— Canturreo Harry suspirando dramáticamente logrando que ambos se sonrojaran— Madre debes de hacer los preparativos para la boda — Susurro ganándose una mala mirada de su hermano seguida de una risa poco disimulada de Narcissa.
—El drama viene de familia — Sonrió recordando porque debía aceptar a la chica de nuevo.
—¡Harry te juro que voy a matarte! — La risa de su hijo menor se escuchó por el pasillo mientras entraba corriendo y literalmente se metía entre sus padres buscando su protección.
—¡Draco Lucius Malfoy! — Grito Hermione deteniéndolo —Quieres dejar a tu hermano tranquilo.
—Lo que me faltaba que te pusieras de su lado— Grito de igual manera con indignación— ¡Tu novio soy yo y lo defiendes!
—¡Compórtate pareces un niño!
—¡Eres odiosa!
—¡Tú no te quedas atrás idiota pomposo!
—¡Sabelotodo fastidiosa!
Tanto Lucius como Narcissa les observaron riendo junto con su hijo menor.
—¿Qué fue lo que hiciste? — Pregunto su esposo.
—Tal vez podemos retrasar la boda un poco más, ¿te imaginas madre a Draco casándose en un jardín?
—¡eres imposible no estoy casándome con un odioso como tu Malfoy!
—¡Ni que quisiera casarme contigo Granger!
—Sabes prefiero casarme con Harry
—¡NO! — Se escandalizo— ¡Yo ya estoy apartado!
Narcissa debía admitir que organizar una boda en estas circunstancias no podría ser tan malo. Observo a Hermione molestar a Harry mientras Draco hacia lo mismo logrando que su hijo menor riera de sus falsas amenazas. Debía admitir que no era quien esperaba para su hijo, pero si lo que necesitaba y se sentía correcto. Draco sonrió compartiendo un beso con su futura nuera mientras ella le abrazaba correspondiendo al beso con amor.
—¡Suficiente! — Les aparto ella tomando de la mano a Hermione — Tenemos una boda que planear y ningún hijo mío se casara en un jardín como los Weasley.
—¡Podemos escoger el atuendo de Draco! — Sugirió Hermione.
—Uno verde limón— Apoyo Harry.
Ganándose las protestas de su hijo mayor. Lucius negó divertido y ambos compartieron una mirada de complicidad, su familia no era como las suyas, y no estaban dispuestos a renunciar a esta felicidad, aunque tuvieran que enterrar esos prejuicios en un rincón de su mente.
Bueno, espero y les haya gustado. Mi nueva historia estará disponible la otra semana :3
Saludos, y bendiciones.
