Jisung estaba completamente seguro que todos los astros se juntaron en su contra, ¿como es posible que haya terminado con Minho para hacer el examen final? Eso implicaría estar con el moreno durante todos los días, tenían que llegar a un acuerdo para hacer una canción y coreografía, no era una tarea fácil, y menos con este chico, que se opondría a todo lo que el rubio dijera.
Mientras que todos sus compañeros estaban empezando a trabajar en su actuación, ya sea compartiendo gustos, eligiendo canciones para versionar... El moreno y el rubio estaban sentados en el suelo mirando a cualquier parte. No se habían dirigido nada más que odiosas miradas.
El profesor ya les negó por cuarta vez cualquier cambio, no podían simplemente cambiar sus grupos para que cada uno estuviera con su amigo y poder realizar mejor sus respectivos trabajos.
Era una puta mierda.
Miró al castaño a su lado, éste estaba mirando como Felix y Changbin trabajaban felizmente. El rubio suspiró, iba a suspender, lo tenía claro.
—¿Tienes alguna idea, señor genio? — habló Jisung por primera vez, Minho le miró con los ojos entrecerrados.
—¿Que quieres decir con eso?
Jisung suspiró, rodando los ojos. — Digo que como no hagamos nada, los dos suspenderemos, yo no sé tú, pero quiero terminar el curso cuanto antes.
Ahora fue el turno del castaño para rodar los ojos. Jisung se aguantó las ganas de reprocharle algo. — ¿No eres tú el genio de las canciones?
—Bueno, al menos sabes y reconoces que eres penoso para eso. — casi pudo jurar escuchar al castaño gruñir ante el comentario. Jisung sonrió satisfecho.
—Yo me ocuparé de la canción, dime algo que te guste para empezar — Minho había sacado una libreta de su mochila y se había sentado más recto, listo para escribir.
El rubio le miró con la ceja alzada, ¿él? ¿Haría la canción? Eso habría que verlo. — De seguro nunca has producido ninguna, no serías capaz.
Si las miradas matasen... Minho podría explotar. — Pues hagamos el reto, solo dime algo que te guste y haré el resto.
Jisung estuvo pensando por un buen rato, hasta que miró al castaño con una sonrisa divertida. — Café helado.
—¿El café helado?
—Efectivamente.
Minho frunció los ojos, mirando su libreta y con su lápiz en su mano, moviéndola sin parar. Jisung observaba como la gomita del lápiz golpeaba los finos labios del castaño, como sus cejas estaban tan fruncidas que parecía unicejo. Miraba su libreta como si esperase que algo mágico fuera a pasar y tuviera la canción lista en un instante.
En menos de un segundo, el castaño cogió su móvil y los cascos, rápidamente se los puso y empezó a escribir en su libreta. Jisung estaba confuso, pero le dejó estar, por su parte cogió su tablet y se colocó sus propios cascos, empezaría a trabajar en una base, no tenía ni idea de como era el gusto del otro para empezar a crear la canción, pero se sentía inutil siendo el único en la clase sin hacer nada, si a Minho no le gustaba su ritmo, tendría que aguantarse.
.
.
Quedaba media hora para terminar las clases por el día, Jisung había avanzado en la base, pero se sentía inquieto, las posibilidades de aprobar con una buena nota eran nulas, tenía más posibilidades de suspender que de aprobar por los pelos. Eso hacía que se estresara más todavía, y su compañero no ayudaba. Ahora estaban sentados en un banco de la universidad, bajo un gran árbol que tapa varios rayos de luz para que ambos pudieran trabajar en sus respectivos dispositivos sin que el sol fuera una molestia para ver la pantalla.
—Ya tengo algo, ardilla. — habla de repente Minho, Jisung le mira, el castaño tiene una pequeña sonrisa mirando su libreta, sus dientes resplandecen y hace que su cara se vea diferente a lo que el rubio está acostumbrado a ver. Resulta, en cierto modo, acojedor. Minho le mira, borrando su sonrisa. — ¿No vienes? ¿O es que te has vuelto sordo?
—¿Me estabas hablando a mi? — Jisung se señala, ofendido.
—¿Acaso hay alguna otra cara-ardilla por aquí? — dice Minho como si fuera obvio, mirando a su al rededor y volviendo su vista al rubio.
—Serás pedazo de b-—
Minho le corta antes de que pueda seguir insultándole — Cállate y escucha.
El castaño desconecta los cables de su teléfono, y una suave base de percusión empieza a sonar.
—Iced Americano we drink it all day — la dulce voz de Minho empezó a acompañar la suave melodía — Oh man, it's not enough, charge me up more on caffeine, but not too much, you can have too much of a good thing. Anyways, ice americand and sometimes a latte. Have a sip babe, woah. Cool yourself off, woah. Get another glass, woah, and hold em up high ice ice ice — paró la música y miró al rubio con suficiencia.
La cara de Jisung, de seguro, era un poema. — ¿Estás de coña, verdad?
—¿Te parece esto una broma?
—¡Por supuesto que si! ¿Cómo se supone que vamos a coreografiar eso?
—Oh claro, señor café helado, ¿te parece fácil hacer una canción con esto? Trabaja tu también pensando en la coreografía, ya he hecho la mitad de la canción y todavía no has hecho nada.
Jisung estaba a punto de ponerse rojo de la rabia. — ¡Pero si has sido tú el que ha propuesto hacer la canción! ¿Que pretendes que el baile sea nosotros dando vueltas con tutús mientras hacemos gestos de que estamos bebiendo café helado en un día de calor?
—¡Eso ahora ya no es mi puto problema! Al menos estoy haciendo algo, ¿no eras tú el que no quería suspender? — contractacó Minho, los dos habían subido bastante el tono, llamando así la atención de bastantes estudiantes.
—¡Y no quiero suspender! ¿Pero de verdad te crees que esa canción nos va a hacer aprobar? ¡Como mucho nos darían un aprobado raspado pero por la pena que daríamos!
—¡Oh no seas tan quisquilloso! ¿Que pasa que no has podido hacerlo mejor, señor compositor?
—Igual mi problema no es que no pueda hacer una buena canción con mi compañero, si no porque mi compañero es tan pasota que es imposible trabajar con él.
—Oh no me digas, como si trabajar contigo fuera la quinta maravilla.
—Al menos yo no crearía una canción sobre tomar café helado en el verano, ¿a quien se le ocurre?
—¡Te pedí algo que te gustase y me dijiste café helado! ¿Que se supone que iba a hacer?
—¡Oh entonces si te digo que me gustan las pollas haces una canción sobre chupar pollas! Me la anoto para la siguiente.
—Mi polla es la que vas a chupar hasta atragantarte.
—Ni en tus mejores sueños.
—¡Oye! — una tercera voz hizo que los chicos rompieran contacto, parando de discutir, todos sus amigos estaban mirándolos. — Se supone que tenéis que trabajar juntos para crear una canción, no ver quien aguanta más discutiendo. — Regaña Chan.
—Díselo a este gilipollas, que hace una canción sobre café helados, ¿como se supone que se puede trabajr con eso?
—Si pusieras un poco más de empeño no estaría yo solo haciendo todo el trabajo, listillo — contratacó Minho. El rubio estaba a punto de saltartle al cuello, juraba que su ojo estaba palpitando ya de la rabia.
El timbre sonó, dando por finalizado el día, los dos chicos seguían mirándose con rabia, mientras sus amigos estaban cansados con el comportamiento de ambos, ¿no podrían simplemente llevarse bien como los demás?
—Sunggie, vámonos. — le llama Changbin. Casi sin despegar la mirada de la de Minho, Jisung recoge sus cosas y se va con su amigo, quien se despide de Felix con una suave sonrisa a diferencia del rubio, quien aún puede notar la mirada del otro chico en su nuca.
—Me parece increíble, aún por encima la culpa es mía, me dan ganas de golpearle la cara, igual le haría un favor. — Jisung no paraba de murmurar sobre el molesto castaño, su amigo simplemente negaba con la cabeza.
—¿Tan horrible ha sido?
—No puedo trabajar con él, Changbin. — después de varias horas, Jisung se relaja, ya no se muestra cabreado, al contrario, está triste y preocupado por sus notas, se le nota cansado — ¿Como se supone que voy a trabajar con Lee Minho? Es horrible, el profesor tuvo que estar borracho o muy colocado cuando hizo los equipos. ¿Por qué no nos dejó a nosotros elegir libremente? Esto no estaría pasando si no fuera porque ha cambiado la dinámica este año...
Changbin suspiró — Sabes que no hace falta que os preocupéis tanto por crear una canción, es algo bastante complicado, y más aún cuando ninguno de los dos os negáis a hablaros sin que sea discutiendo. ¿Por qué no cogéis una canción ya creada?
—Es otra idea, pero no sé que tipo de música le gusta al chimpancé de turno.
El moreno se ríe un poco del nuevo insulto que ha creado su amigo. — He estado hablando con Felix de eso, al parecer tenéis un grupo en común que escucháis bastante, Stray Kids.
Jisung sonríe al escuchar el nombre de su banda favorita. — No te niego que tiene que tener buen gusto para escucharles. Esta noche miraré algunas canciones, pero no me extrañaría que mañana aparezca con una canción sobre las noches de invierno.
Changbin ríe — Tu sólo intenta no pegarle, y que no te pegue...
—Como si me fuera a tocar alguna vez.
El rubio se pasó bastante tiempo en su habitación escuchando las diferentes canciones de Stray Kids con sus cascos, no tenía ni idea de que canción elegir.
Lee Minho era conocido por su potente baile, es muy buen bailarín, suele vigilar a todos sus compañeros y ayudarles cuando se pierden o les cuesta algún movimiento. A parte, tiene una voz bastante dulce y un muy buen falsete.
Se decantó por la canción Easy, la canción tiene una buena base para poder crear una buena coreografía. Minho podría cantar las notas más altas, Jisung era bueno tanto en el rap como canto, por lo que no sería ningún problema para él.
.
.
Miércoles por la mañana, y ya estaba encerrado en una aula de ensayo con el maldito malcriado. Suspiró pesado, sentía que el día iba a ser muy largo.
—Stray Kids — habló el rubio.
El castaño le mira con el ceño fruncido. — ¿Que tiene que ver?
—Te gusta Stray Kids, ¿verdad?
—¿Quien te ha dicho?
—Da igual, lo que importa es que ambos queremos aprobar y una canción sobre el café helado ni la canción sobre tus tres gatos nos ayudará a lograrlo.
Minho hace un suave puchero. — Mis gatos son adorables — habla en bajo, pero Jisung alcanza a escuchar, solo rueda los ojos, y sigue hablando.
—¿Que te parece Easy?
Minho vuelve a mirarlo, ésta vez con curiosidad. Jisung se levanta para conectar su móvil a los altavoces de la sala y reproduce la canción. Los dos escuchan, con la mirada perdida en cualquier punto de la sala, concentrados en el ritmo de la canción y las voces de los artistas.
—Me parece bien. — Habla el castaño una vez que la canción ha terminado. Jisung deja salir un suspiro de alivio de sus labios, al menos ha accedido y no se ha puesto gilipollas.
—¿Empezamos entonces a preparar coreografía y separar partes? — propone el rubio.
—Yo me ocupo de la coreografía, capaz eres de hacer el baile del trenecito en esta obra de arte. — Jisung solo rueda los ojos pero decide ignorarle, no tenía ganas de discutir. En cambio se cogió su tablet con la letra de la canción para empezar a escribir las partes de cada uno.
Hacer la canción entera entre los dos, cantándola y bailándola sin parar, sería agotador, por lo que recortarían una parte de la canción, con suerte no hubo ninguna otra discusión para decidirlo. Jisung pensaba que acabarían tirándose de los pelos para ete momento, pero cada uno estaba realizando su trabajo en silencio.
El rubio levantó la mirada de su tablet mirando como el castaño empezaba a marcar algunos movimientos y los iba marcando en su libreta.
Por el otro lado, Minho se había fijado en como Jisung miraba su tablet con el ceño fruncido, moviendo sus labios a la vez que las voces de la canción, intentando dividir cada parte ecualitativamente.
"Algunas personas dicen que los polos opuestos se atraen".
