Los pasos dentro de la academia siempre fueron algo lo cual Kane dio sin importarle mucho, al final ¿De que tenía que cuidarse?
Tragando ante la vista de la academia.
Kane tragó, estaba a un par de manzanas ya, por lo cual, podía vislumbrar ya el edificio.
Ella no había estado con ninguna de sus amigas, de hecho, desde ayer no había visto ningún mensaje.
― Te ves algo pálida ―la joven de cabello ceniza se giró y vio a su lado.
Caminando con tranquilidad.
Emiya Shirou, el ídolo del club del arco, estaba caminando sin preocupación alguna.
Kane estaba paranoica.
"Maestro, si es posible no se acerque demasiado al mago" la voz de Saber llegó a la cabeza de Kane al instante en que ella miró a todos lados buscando la voz.
Dando un suspiro, la joven bajó la cabeza y juntó las manos y jugaba con sus dedos mientras que caminaba.
Ella estaba realmente nerviosa.
― ¿Todo va a ir bien no? ―la duda en toda la oración solo se ganó la misma mirada de Shirou.
La mirada que siempre portaba, la mirada que nunca dejó caer, la expresión de siempre.
Era como ver a una máquina, más que una persona.
Aquel fue el pensamiento que la mayoría tenia de Shirou.
Era una buena persona, siempre altiva, siempre atenta, siempre queriendo ayudar, pero fuera de eso ¿Hacia otra cosa?
Cuestionable.
La mayoría incluso supuso que era un pervertido en secreto.
Ahora Kane sabía que era algo como esos cuentos y cosas demás de esa clase.
Un mago.
― Lo hará, puedo defenderte, con tal de que sobrevivas el tiempo para que saber llegue, todo irá bien ―Kane dio un suspiro ante aquellas palabras.
Actualmente Shirou tenia una bufando en su cuello y las manos con guantes.
Era para ocultar como las vendas cubrían parte del cuerpo del joven, al igual de ocultar el hecho de que el tono de piel del joven se tostó.
Fue curioso para Kane.
Como el joven tenía tinte rojo en su casa.
¿Shirou entonces siempre tuvo el cabello blanco?
La joven se quedó mirando unos instantes a Shirou a la espera de encontrar algo más.
Shirou que siempre fue un misterio para todos, era curioso como se veía y actuaba fuera de la escuela.
Además.
¿Cómo alguien podía cocinar tan bien?
― ¡Kane-chan! ―un grito hizo que la joven de cabello gris girase y viera quien la llamaba.
Era Kaede que iba corriendo a la dirección de Kane.
Seguida detrás de Kaede, era posible ver a Yukkika, que caminaba con más moderación, pero de igual con un toque acelerado para alcanzar a su amiga.
Kane alzó una ceja cuando estuvo frente a Kane.
― Buenos días, Emiya-kun ―fue con un tono de confusión como emergió la voz en la boca de Kaede.
― Emiya-kun ―agachando la cabeza en signo de saludo, Yukkika saludo al joven de la otra clase.
― Buenos días ―la voz tranquila de Shirou llegó a las recién llegadas.
Ambas recién llegadas vieron al joven y a Kane, desde hace una distancia considerable, Kaede había visto a ambos ya ir caminando, pero el hecho de que hablasen de la nada.
Fue lo que hizo querer saber que pasaba.
― Nos preocupaste ayer, no contestaste tu teléfono y tus padres dijeron que estabas fuera ¿Cómo es eso de que te quedaste en otro lugar? ―Shirou entrecerró los ojos ante aquello.
Rin no fue tan útil como esperó.
Kane abrió la boca como para responder, pero la cerró de inmediato.
¿Qué iba a decir?
No podía decir que estaba en la casa de Emiya, no después de eso, y mucho menos después de que ambos caminasen juntos hasta la academia.
― ¿Hola? Tierra a Kane-chan ¿Estas allí? ―la voz de Kaede hizo que Kane parpadease y viera a su amiga.
― Olvidé mi teléfono en el club ―dando una pequeña sonrisa Kane contesto; más Yukkika observó la reacción de Kane, pero no dijo nada. ― Me quedé en la casa de un pariente de mi madre, mi pidieron algunas cosas para hacer ―terminando eso.
Kaede dio un ligero golpecito en la frente de Kane.
― ¿No te dije que lo dejaras al lado de tus zapatos? Dios, no es la primera vez que te pasa eso, para ser alguien tan sobresaliente académicamente, siempre haces errores tan mundanos ―Kaede dio un suspiro antes de caminar hacia la academia.
Dando una risa suave, Yukkika siguió al grupo.
…
Lo primero que Shirou notó al instante en que ingresó, en la academia.
Fue el hecho de que se sintió débil por un instante antes de que se recuperara.
Un cambio delimitado estaba erguido.
Girando la cabeza y dirigiendo la mirada hacia Kane, pudo ver como la joven al igual que los demás. No notaron nada.
¿Entonces era un campo que se usaba para los no iluminados?
Dando un suspiro, Shirou supo que este iba a ser un día largo.
….
Pasando las horas de clase, Kane se sintió indefensa.
Le habían explicado, que podía usar un sello de comando para poder traer a Saber de la nada a su lado, pero aquella opción era demasiado limitada.
Alzando el teléfono enfrente suyo, Kane vio el número de Shirou.
Y envió un simple mensaje.
Era hora de receso, a lo cual, no veía problema con aquello.
Eso hasta que una mano rápida tomó su teléfono y la alejó de ella.
Los ojos de Kane se abrieron ante aquella acción repentina.
― ¡Ja! A ver que te tiene tan centrada ahora en esto…Kane-chan ―la voz emocionada de Kaede se fue apagando mientras que leía el nombre del contacto. ― ¿Estas enviando mensajes con Shirou-kun? ―la pregunta llena de sorpresa hizo que no solo Kane saltara de sorpresa.
Si no, que la mayor parte de los que escucharon eso se movieron directamente hacia Kaede.
― Kaede, por favor, no hagas una escena ―Yukkika habló mientras que miraba a Kaede que observaba el teléfono sin poder creer lo que estaba leyendo.
Kaede guardó silencio, de hecho, ignoró completamente lo anterior, solo tomó el teléfono, lo bloqueó y se lo devolvió a Kane.
No hubo más comentarios después de eso de parte de Kaede.
Al poco tiempo, la conmoción se fue junto con la salida de varios estudiantes al tipo de descanso.
Cuando el ultimo salió, fue entonces que Kaede habló.
― ¿Estas realmente saliendo con Emiya-san? Realmente no te tomé como una de las que va tan…adelante ―la voz de Kaede sonó en duda mientras que miraba a Kane.
Kane alzó una ceja.
¿Qué mensaje había visto como para que piense eso?
― Kaede-chan, no creo que sea eso- ―Yukkika intentó hablar y razonar, pero fue cortada por Kaede que le puso las manos sobre los hombros.
― Hablaban de como pasaron ayer la noche, Kane-chan agradecía de como la cuidó ayer y la ayudaba ―los ojos de Kane se abrieron.
Realmente eso daba para mal interpretar por completo la situación.
― No- ―antes de que pudiera terminar, la puerta de la clase sonó en un pequeño toque.
Las tres chicas giraron la cabeza para ver a la persona que estaba siendo nombrada hace poco.
Emiya Shirou parada con tranquilidad frente a la puerta.
― ¿Puedo unirme? ―fue una voz calmada y pasible.
Kaede intentó decir algo, Kane también quedó muda.
Yukkika fue la que se levantó se su asiento y se paró traer una silla a su lado.
― Claro, puedes sentarte aquí ―con tranquilidad desde la puerta, Emiya entró y se sentó en el asiento que estaba entre Yukkika y Kane.
― ¿Emiya-kun? ―la duda en el tono de voz de Kane sonó mientras que miraba el joven.
― Entonces ¡Realmente están metidos en algo! ―la emoción en el tono de voz de Kaede fue palpable al momento de ver la reacción de sorpresa de Kane.
Un leve signo de vergüenza se asomó en el rostro de Kane.
Aquel gesto fue lo único que necesitó Kaede para reír y abrazar a la joven.
― Y pensar que solo ayer dijiste que no estaban involucrados ―la respuesta divertida de Kaede hizo que Kane quisiera contestar en algo.
Pero fue Shirou el que habló.
― Bueno, no es como si las cosas fueran como uno esperase, simplemente sucedió ―Kane vio a Shirou.
Una expresión de desconcierto tomó el rostro de la joven de cabello gris ¿Shirou acababa de aceptar eso?
Una mirada que decía que siguiera el juego llegó de parte de Shirou a Kane.
Kane parpadeó unos instantes ante aquello.
Entonces Emiya Shirou no era tan inocente como parecía.
"No es lo mejor, pero si le sigue el juego al mago, va a haber menos preguntas" la voz de Saber llegó a la cabeza de Kane.
La joven solo suspiró y puso sus manos en el pupitre para dejar que se cabeza descansara allí.
― Me olvidé de darte esto esta mañana ―Kane levantó su cabeza para ver a Shirou extendiendo una caja frente a ella.
Un bento.
La emoción fue visible en los ojos de Kaede. Inclusive Yukkika abrió los ojos ante aquello.
― Yo…gracias ―la voz de Kane fue tranquila mientras que intentó tomar de la manera más natural que pudo el paquete en frente a ella.
Abriendo el bento, pudo ver algo.
Realmente se veía bien la cocina de Shirou.
…
Conforme pasó el tiempo.
Ambos volvieron a la que sería la casa de Shirou.
La primera vez no pudo entender bien el concepto, pero Kane poco después de la segunda vuelta, pudo entender algo.
Shirou era mucho más rico de lo que dejaba ver.
La casa parecía más una mansión del estilo japones que una residencia normal.
Dejando sus zapatos en la entrada, caminó hasta la sala de estar, y pasó a donde estaba el mismo tatami de ayer.
Pudo ver como saber estaba tranquila, comiendo como si no hubiera un mañana lo que tenía en frente.
Bastante despreocupada para alguien que había dicho que no confié en el mago.
― Me alegro que no tuvieras problemas para volver ―una voz que no llegó a reconocer salió de la cocina.
Era Rin Thosaka.
La cual estaba caminando con los brazos cruzados viéndola.
― Tenemos que ir con el supervisor de la guerra más tarde ―Rin comentó mientras que daba un suspiro final.
Al poco tiempo de aquello.
Shirou ingresó con calma, pareciera ser que las partes oscuras de su piel estaban mucho mejor que antes.
― Supongo que veremos a Kotomine Kirei ¿No? ―Rin alzó una ceja ante eso, pero asintió a las palabras de Shirou.
Rin no podía ignorar el hecho de que el joven estaba mucho más informado de lo que pensó que sería, bueno, siendo que él había vivido en aquel lugar por varios años, era bastante previsible aquello.
― De hecho, por lo que saber ¿No puedes pasar a estado astral verdad? ―la pregunta de Rin solo fue recibida con un asentimiento de parte de Saber.
El mana para mantener a un servant era si bien no necesariamente mucho, si era grande cuando este debía pelear.
Shirou miró a ambas.
― Tengo algunas maneras de convertir a Kane en magus si es lo que necesitas ―las palabras de Shirou hicieron que Rin parpadease.
Esa no era información que esperó escuchar.
― ¿Puedes? ―la pregunta de Rin vino con intriga.
― No tan convencional como crees ―Shirou caminó hasta la mesa y dejó una taza frente a Rin y Kane.
Té el cual Rin aceptó y tomó sin problemas.
― ¿Es eso así? ―Rin no esperó mucho de aquel "Método", pero de igual manera tenía curiosidad.
― Podría generar bastante energía si convirtiera parte de sus nervios en circuitos, quizá de baja calidad, pero suficientes para que pueda mantener a Saber altiva y en estado ―la boca de Rin se abrió ante aquellas palabras.
Bajando con fuerza la taza de Té, se puso de y miró con seriedad a Shirou.
― ¿Por qué no dices que quieres matarla? ―Kane parpadeó ante la declaración de Rin.
― ¿Qué? ―la duda se formó antes de que una risa hueca saliese de Rin.
― Crear circuitos solo hará que te maten, muchos lo intentaron, pero nadie puede, hay una razón por lo cual se nace con talento o no ―la voz de Rin fue áspera al momento de decir aquello. ― Crear circuitos como los plantea Emiya-kun, solo sería un intento de asesinato.
Shirou suspiró ante las palabras de Rin.
Incluso Saber ahora estaba mirando a Shirou con duda.
― Era una sugerencia, además, yo mismo soy el ejemplo vivo de que se puede ―ante aquellas palabras, Rin solo pudo abrir la boca.
¿Qué demonios le hicieron a Shirou?
La pregunta golpeó a Rin.
La estimación de la familia Emiya acababa de caer aún más.
― Tengo otras formas, claro esta ―la voz de Shirou fue tranquila, pero esta vez se notó algo más tenue. ― Puedo darle de mi sangre a Saber ―la expresión de Saber se arrugó al instante de la mención de eso. ― Supongo que no, entonces queda la otra forma…―Shirou desvió la mirada mientras que Rin alzaba una ceja.
― No ―Saber fue quien habló mientras que llevaba una mano a su pecho como si se tapase.
Rin seguía confundida.
Kane solo podía mirar la escena con real interés.
¿Ser parte de lo que llaman magos?
Sonaba tan bien.
Pero a la vez era algo que no quería meterse.
― ¿Qué pasa? La otra manera ¿Cuál es? ―Shirou llevó una mano a su boca y tosió como para aclararse la garganta.
― Por transferencia de fluidos, es como lo de beber sangre, pero a la vez más efectivo ―Saber miró a otro lado mientras que comió ahora con lentitud lo que tenía en frente.
Kane pudo escuchar como una "Oh" salió de la boca de Rin al momento en que la joven abrió la boca.
Solo para que al instante se sonrojara.
― ¡¿Algo así con un servant?! ―fue un grito de vergüenza de Rin.
Incluso Shirou ahora parecía avergonzado.
Kane abrió la boca ante la comprensión de las implicaciones de Shirou.
Literalmente estaba diciendo que podía recargar a su servant con sexo.
― ¡No me mires así! ―fue un momento raro en que Emiya Shirou perdía el control, Rin le hubiera gustado burlarse de eso, pero al ver como estaba la situación solo pudo mirar con sorpresa. ― No es como que fuera la primera opción, prefiero lo de dar mi sangre o…no importa ―casi al instante se cortó y se giró a la cocina.
Rin pudo ver un leve desvió de los ojos de Shirou hacia Kane.
― Tu…no te tomé como un adolescente lleno de hormonas ―Rin lo miró con intriga, luego con asco, para terminar con diversión. ― ¿Estabas por sugerir que ibas a llenar a Kane-chan en vez de Saber? ―Kane abrió los ojos ante aquellas palabras.
Shirou se detuvo.
Rin se burló.
Era raro ver algo más que la cara plana de Shirou.
― ¿Maestro? ―Saber vio el rostro completamente rojo de Kane.
La imaginación de la joven voló a una escena con Shirou.
No era del todo mala la idea…
― ¿Realmente lo estas considerando? ―la perplejidad en la voz de Rin solo hizo que Kane mirase a su compañera con sorpresa, sorpresa que pasó a vergüenza, para terminar en un rubor.
Uno que era coincidente con el de Shirou.
Esta debía ser una broma.
…
― Realmente estas seguro de esto ¿No? ―la voz de Shirou fue más que un tono plano con duda que una de desentendimiento en sí.
― Preferiría que te quedes fuera junto con Saber para que podamos hablar Kane y yo con el encargado ―la voz de Rin fue fuerte.
Era obvio que era una orden.
Los pasos se alejaron de la entrada de la iglesia.
Kane no comprendía correctamente lo que pasaba.
Pero al menos quería estar al tanto de la situación como el director frente a ella debía hacerlo.
La charla con el sacerdote fue tranquila de parte de Kane y Rin.
Hasta cierto punto en el cual Rin le sugirió que diera sus sellos de comando y buscase refugio en la iglesia.
Normalmente, y con la cabeza sobre la tierra que solía tener Kane.
Hubiera aceptado.
Pero había hablado de aquello con Shirou y Saber.
Ambos decidieron que, si ella era un master, entonces, ella debía quedarse como tal.
Shirou no tenia deseo como tal, a lo cual, Saber era la única que podía pedir el deseo, cuando Kane dio a entender, que no deseaba nada.
Era obvio algo.
La ignorancia del tema había influenciado a Kane de tal manera, que cuando las cosa parecían estar por completarse para su salida de la guerra.
Ella dijese que se quedaría.
Raro, sí.
Ante toda lógica que Thosaka y Kane podían tener, fue aquella acción que hizo que el sacerdote la felicitara.
Ambición.
Thosaka la miraba con recelo ante aquello.
Kane quería defenderse.
Pero no dijo nada ¿Solo iba a aceptar como la llamaba Thosaka?
Puede que la joven tuviera razón al final y al cabo, después de todo ¿No era ella la arrogante que había decidido que iba a participar?
Por lo que entendió.
Shirou y Thosaka se prepararon por años, desde que nacieron, para aquel enfrentamiento ¿Ahora?
Un don nadie ajena de aquel mundo venía a participar con la intención de quedarse.
Fue insultante.
Posiblemente.
Ambicioso.
También.
Idiota.
Bastante.
Pero a la vez, algo le gritaba que no podía dejar lo que prometió.
Miedo, Kane lo experimentó cuando el lancero azul la persiguió.
Alivio.
Cuando Shirou dio su todo para salvarla ¿Era por eso que estaba tan a la predisposición de seguir?
Una deuda.
Era lo que Kane se gritaba que tenía por el joven.
A pesar de todo, a pesar de las circunstancias.
La sacó del lugar, a pesar del dolor, siguió moviéndose.
Todo, incluso a pesar de que no podía seguir, movió aquel cuerpo para enfrentar al hombre de azul y salvarla.
Hasta que llegó saber y la sacó de cualquier dificultad.
Si.
Kane no tenía derecho ahora mismo.
Derecho a salir de aquel conflicto.
A pesar de lo mucho que desase y lo idiota que parecieran sus razones.
Para Kane aquello fue necesario.
Porque los sentimientos dejaban tonta la razón.
…
Al momento en que ambas jóvenes salieron de la iglesia.
Pudieron ver a Saber y Shirou conversar con más animosidad que antes.
Curioso.
A los ojos de las dos llegando.
Pero a la vez ignoraron el hecho para seguir.
Eso hasta que cayó la bomba que hizo a Kane reconsiderar todo.
La maestra de Berserker con Berserker.
…
El miedo si bien fue algo que Kane sintió hace poco por el hombre, Lancer, ahora con la criatura.
Berserker.
Solo pudo quedarse con los ojos abiertos y las piernas temblando.
― Es una pena Onii-chan, pensar que perderías el derecho a participar por un simple rata ―la voz de la pequeña al lado de la enorme criatura solo hizo que Kane diera un paso atrás.
Quedarse detrás de Shirou por el hecho de que Saber se adelantó.
Fue curioso, a los ojos de todos.
Como la sonrisa de Shirou creció en una expresión cálida.
― Supongo que este hermano mayor solo pudo ser un desperdicio, me alegro poder verte, Illya ―la joven, una niña en apariencia de cabello blanco.
Dio una mirada de sorpresa.
― Entonces Kiritsugu te habló de mí, me sorprende ―la voz de Illya fue tranquila al momento de aquello.
Pero fue recibido con la escena más rara que todos presenciaron.
Emiya Shirou sonriendo y riendo mientras que miraba a la joven frente suyo.
― Claramente, después de todo, el favorito, eres, y serás tú ―las palabras de Shirou solo hicieron que un ceño fruncido naciera en la frente de la llamada Illya. ― Mi dulce hermana que debo cuidar, es obvio que seas así, después de todo, siempre serás Illya ―la voz de Shirou fue más vacía de lo usual.
Al final.
Shirou Emiya, el antiguo hermano de Miyu, solo tenía dos cosas que hacer.
Destruir el grial.
Y salvar a Illya.
Después.
La muerte sería una bienvenida adecuada para él.
La batalla estaba por comenzar.
Y solo quedaba sobrevivir ante la primera piedra.
…
La campana de fin de clase sonó mientras que Kane daba un suspiro.
Alzando su teléfono, pudo ver el mensaje de Shirou indicándole que espere en su clase para que él pudiera pasar a buscarla.
Sin darse cuenta, y después de despedirse de sus amigas.
Kane llegó a la compresión de que realmente se sentía demasiado solo el lugar.
Incluso como si no hubiera quedado nadie.
Unos pasos resonaron por el pasillo.
Girando el cuello, Kane esperó ver a Shirou, pero antes de que pudiera terminar, Rin Thosaka la había agarrado del brazo y la metió dentro del salón de su clase.
Cerrando la puerta, Rin giró el cuello y vio a todos lados unos instantes antes de suspirar y mirar a los ojos a Kane.
― Tenemos que lidiar con él antes de que él lidie con nosotras ―Kane parpadeó ante la mención de Rin.
― ¿Qué? Pero…―Kane fue cortada por una mano que fue colocada en su boca. Rin le hizo un signo de que se quedase en silencio.
― Emiya, no es lo que crees ―la voz de Rin fue suave, casi en un susurro. ― Debemos salir de aquí antes de que el vuelva por ti, y mucho antes de que pueda hacer algo, no confíes en él ―Rin habló mientras que miraba a todos lados.
Era como si esperase que la persona nombrada aparezca de la nada frente suyo y los atrapase.
Era como si estuviera huyendo de un monstruo.
― Pero…―Rin suspiró ante el intento de discutir de parte de Kane.
― Cuando salgamos de aquí, te lo diré, ahora tenemos que salir antes de que vuelva, no sé que esta planeado Emiya-kun, pero no va a ser bueno para ti, no para nadie que conozcas, tenemos suerte de que me encargara de tus padres ―Rin tomó la mano de Kane y abrió lentamente la puerta de la clase.
No había nadie en el pasillo.
Caminando con cuidado, ambas jóvenes empezaron a salir, bajando las escaleras, y al doblar en otro pasillo.
Se encontraba Emiya Shirou esperando con una expresión neutra.
― Thosaka, no esperé que vinieras hoy, de hecho, no esperé que intentaras hablar con la maestra de Saber, no creo que sea solo para poder charlar ―Shirou comentó con tranquilidad.
Caminando con tranquilidad, hacia las dos jóvenes.
Shirou pudo ver como Rin retrocedió.
Y la mirada que le dio, fue completamente opuesta a la que había dado unos días antes.
No era algo que señalase amistad o algún tipo de respeto.
Era miedo.
― Emiya-kun, supuse que vendrías rápido ―Kane vio como Rin trago para luego mirar a su alrededor.
Cuando parecía que Rin se había dado la vuelta.
Levanto la mano y apunto directo a Shirou.
Fue un disparo de magia, o al menos eso fue lo que supuso Kane, porque la explosión roja y negra solo podía ser eso.
El humo llenó el otro lado del pasillo antes de que un fuerte viento se diera lugar.
Un Shirou ileso se vio, en la mano del joven tenia un cuaderno el cual hasta hace unos instantes estaba en la mochila.
El cuaderno solo estaba algo negro en la cubierta.
― Veo que parece que hubo un mal entendido Thosaka ―Rin frunció el ceño antes de disparar una andana de tres balas antes de tomar la mano de Kane y salir corriendo.
― ¿Qué esta pasando? ―la pregunta de Kane fue apresurada mientras que corrían.
Rin rechistó la lengua.
― Pensaba pedirte que renuncies, pero, supongo que Shirou no iba a dejar las cosas como así ―Rin respondió de manera apresurada mientras que corría.
― ¿Por qué? ―Kane ya estaba respirando pesadamente.
¿No era Rin demasiado rápida?
Cuando estaba por cruzar otro pasillo.
La ventana de la habitación cayó mientras que un joven entró allí.
El cabello blanco era presente una vez más en la mitad de la cabeza de Shirou.
― Supongo que debe haber algún mal entendido, Thosaka, podemos hablarlo una vez que salgamos de aquí ―dando un paso hacia adelante, Shirou se quedó quieto ante la vista de la joven apuntándolo con su mano.
Unas gemas estaban en la mano de Rin.
― No creo que sea un mal entendido esto…no sé a que estas jugando, pero algo me dice, que tengo que eliminarte ―Rin no dejó de observar a Shirou.
― Veo ―la voz de Shirou fue tranquila.
Metiendo una mano lentamente en la mochila, Shirou sacó un lápiz.
Rin alzó una ceja, pero en ningún momento dejó de apuntar.
Fue un movimiento fuera de los reflejos de Rin.
El lápiz voló a su lado y pasó a clavarse contra la pared.
Rin volteó su cabeza lentamente y vio el lápiz clavado con fuerza a su lado.
Un pequeño cráter en la pared fue dejado alrededor de aquello.
― Un maestro de refuerzo ―Rin giró una vez más su rostro y vio la piel oscura de Shirou ahora a la mitad de su rostro.
Era una línea que subía de su cuello.
― Veo que abusaste mucho tiempo de el refuerzo ¿Te quemaste tu propio cuerpo al sobre cargarlo? ―Rin preguntó viendo el cuerpo de Shirou.
Shirou alzó una mano frente a su rostro y vio el tono oscuro.
De hecho, Shirou ya había alcanzado el punto de su yo anterior hace mucho tiempo, con el hecho de que su piel fue oscura y su cabello blanco.
Era divertido como su magia le podía causar eso.
― Me temo que, debido a mi condición, mi magia puede ser algo, extrema, por lo cual, me entrenaron desde que pude hacerlo ―Shirou mencionó algo que Rin supuso.
Había visto los expedientes de los Emiya.
No era para nada bonito.
¿El hecho de que el último heredero conocido parezca más una máquina que un humano?
Solo era el estereotipo que supuso que iba a ser.
Rin estaba feliz que alguien así no fuese un maestro.
Le debía a Kane por eso.
― ¿Es eso así? Bueno, con la magia complicada que manejan ustedes, no es una sorpresa ―Rin sonrió cuando vio el ceño fruncido de Shirou.
Fue en ese momento en que Rin movió su mano y lanzó varias joyas en frente a ella.
Un escudo verde se formó.
Casi espontáneamente, varios lápices se clavaron en la joya recién formada.
Una sonrisa llegó al rostro de Rin antes de sentir como una gota de sudor caía de su mejilla.
Emiya Shirou realmente había sido entrenado para matar.
Reforzar algo como un cuaderno y lápices a tal punto en el cual podían ser una amenaza era algo lo cual Rin debía considerar con plenitud.
― ¿Puedes llamar a Saber? ―Rin se giró hacia Kane la cual la miraba confundida.
A los ojos de Kane.
Rin era la perpetradora.
― ¿Por qué le haces eso a Emiya-kun? ―la pregunta llegó con preocupación.
Alguien que había arriesgado su vida por darle un poco más de tiempo.
Kane obviamente no podía olvidar aquello.
― Terminaste ¿Ya? ―la voz tranquila de Shirou sonó.
Rin se giró y vio al joven ileso, el abrigo en su mano, solo que chamuscado, dejándolo con la camisa blanca del uniforme de la academia.
Bastante monstruoso la verdad.
Volviendo a tomar la mano de Kane, Rin la alzó ante la sorpresa de la joven de cabello gris y la llevó del lugar.
Shirou extendió la mano como para decir algo.
Pero solo pudo ver una joya a sus pies.
…
Rin siguió corriendo mientras que la explosión la seguía por la espalda.
Esa había sido una gema realmente buena la que acababa de usar.
Debía ralentizar al Shirou al menos hasta que puedan salir de la academia.
Rin sintió como alguien estaba forzando en su agarre.
Era la misma Kane la cual casi cae a la alta velocidad que iban.
Si no fuera por el hecho de que había frenado, posiblemente ahora Kane iba a estar con algunas cortaduras y hematomas.
Respirando con dificultad luego de separarse de Rin.
Kane se giró y vio a la joven que parecía ansiosa por ese hecho.
― ¿Qué esta pasando? ―la voz de Kane era de duda absoluta cuando intentó ponerse al día con la situación actual.
― No es bueno, no es para nada bueno, Emiya-kun, ha estado mintiendo mucho tiempo ―la voz de Rin era profunda y casi desesperada.
Archer no estaba en condiciones de intervenir.
― ¡Pero me salvó de ese Lancer! ―la voz de Kane fue fuerte.
Rin se rindió.
Shirou llegó frente a ellas.
Ileso.
Rin solo pudo reírse ante aquello.
Verdaderamente peligroso.
…
Continuación, la próxima semana, entre sábado y domingo, iba a subir esto ayer, pero bueno, cosas de la vida, estoy escribiendo esto, mitad dormido mitad ebrio.
Volvió la marca de cigarrillos que consumía.
La semana más molesta que tuve en toda la cuarentena.
Bueno, esto es para antes de continuar con "El placer de los pecadores" que es un fic de Naruto y fate, emparejamiento de Naruto y Jeanne alter, cosas de la vida.
Como sea, gracias a cualquiera que lea la historia, y espero que les guste, obviamente, va a haber más desarrollo en próximos capítulos.
Pensar que esto pasó de una idea de One shot.
Como sea, tengo trabajar en mis otras historias ahora tengo libertad.
Suerte y espero que les guste.
Dato curioso, la primera vez que vi a Kane, ya quería saber más de ella, una pena que sea un extra de fondo, pero bueno, cada cosa rara que me gusta.
