"NUEVA OPORTUNIDAD"
SEGUNDA PARTE
No quería soltarla, quería retenerla así por mucho tiempo.
- ¡Déjala respirar enano posesivo! – escucho decir a su tío en medio de una risa
- No creo que a ella le moleste mucho – dijo Uri con una sonrisa
Y era cierto Hanji le devolvía el abrazo con la misma fuerza.
- Por fin – le escucho decir – te he extrañado tanto Levi...
Él se separó solo un poco, lo suficiente para mirarla a los ojos, acaricio su mejilla al ver, estaba tan hermosa como la última vez que la vio, con esos lentes que eran su sello (aunque más modernos), sus hermosos y grandes ojos marrones castaños brillando mientras le devolvían la mirada, llevaba el cabello largo suelto y ondeado.
- No tanto como yo cuatro ojos – le dijo – no tienes idea de lo feliz que me hace tenerte así
Ella volvió a sonreírle.
- Te amo...
Levi casi siente como su corazón quería escapar de su pecho, aquellas dos palabras lo habían movido de una manera que no podía explicar.
- También te amo – le respondió – te amo Hanji
Corto la distancia entre ambos y se apodero de su boca.
Dios mío, pensó, cuantas soñó con besar sus labios, cuantas veces añoro esa boca y ahora podía delinearla con la suya, sentir esos labios con cada roce, con todos esos sentimientos que se acumulaban dentro suyo y quería transmitir.
Definitivamente amaba a Hanji, la amaba como nunca iba a poder amar a nadie.
- No son adorables
Pudo escuchar la voz de su madre, con un poco de vergüenza se separó de su castaña, esta estaba algo sonrosada.
- Tómale una foto Uri – dijo Kenny – la versión romántica del enano es como el cometa Halley solo aparece cada mil años
- Cállate viejo – dijo Levi para no perder la costumbre
Hanji empezó a reír.
- Buenas noches señora Kuchel – saludo a su madre – buenas noches tío Kenny, señor Uri
- Buenas noches princesa – le dijo Kenny – ya me contaron que ganaste esa beca, felicidades
- Gracias
- Estaré encantado de verte en mi clase Hanji – dijo Uri
Levi recordó que Uri enseñaba en la universidad a la que ingresaron, algo sobre laboratorio, no recordaba mucho, solo eso.
- ¡Por supuesto – dijo su novia – estoy más que dispuesta a ser la primera en la clase!
- Cálmate un poco cuatro ojos – dijo Levi – las clases ni siquiera empiezan y ya quieres ser las chupamedias del profesor
Hanji sonrió.
- Tranquilo que el puesto de amargado de la clase nadie te lo quita
Levi le dio un empujón juguetón y ella volvió a sonreír.
- Ya vámonos – dijo Levi – o este trio nos obligara a quedarnos a cantar Karaoke con ellos
Kuchel empezó a reír.
- Solo fue una vez hijo, ya olvídalo.
Cada vez los recuerdos de esta vida eran más nítidos, así que recordaba una noche con su madre, tío y amigo de su tío, cantando a todo pulmón, Hanji fue a visitarlo con la intención de salir algún lado, pero el trio se había pasado de copas, así que Levi no quería dejarlos, terminaron la noche siendo el público de esos tres, que eran muy desafinados.
- Tienes una hermosa voz tío Kenny – dijo Hanji
- Tu sí que sabes apreciar el talento princesa
- Ya, ya, vámonos de una vez
Levi tomo la mano de Hanji y después de despedirse salieron de la casa.
- Erwin y los demás ya están yendo para allá – dijo Hanji revisando su celular
Levi se detuvo justo frente a su auto y jalando a Hanji la volvió a abrazar para besarla.
La chica se sorprendió un poco, pero al instante le empezó a devolver el beso. Levi quería aprovechar cada segundo, este beso ya no era un roce de labios, era uno más profundo, más necesitado, abrazo a su novia por la espalda sintiendo una parte desnuda.
Hanji llevaba un vestido lila con los hombros descubiertos, amarrado en tirantes a su cuello, parte de su espalda estaba desnuda y él podía acariciar su piel sin remordimiento.
- No sé qué sucede contigo hoy – dijo Hanji separándose un poco – pero me gusta
No era que Levi no fuera amoroso, al contrario, lo era en demasía con ella, pero Hanji no sabía porque sentía que esta vez era diferente, lo sentía más necesitado de ella, mas ansioso en cada beso.
- No sabes cuánto soñé con tenerte de esta manera – dijo Levi rosando sus labios
Y era cierto.
- Siento haberte abandonado...
Hanji se refería al tiempo que lo dejo por estudiar, pero Levi, aunque entendió el trasfondo de aquellas palabras, las sintió en el alma.
- Ahora estas aquí
- Y para siempre – dijo ella volviéndolo a besar
Hanji se restregó de una manera casi sensual a su cuerpo, Levi pudo sentir sus pechos, estaba tan necesitado de ella.
- Debemos parar – dijo Hanji sonriendo – o terminaremos haciendo cosas indecentes en medio de la calle
- Está bien – dijo a regañadientes
Levi la soltó, aunque no quería hacerlo y tomando su mano la llevo hacia el asiento de copiloto, nada le quitaba lo caballero.
- Pero después de la fiesta – le dijo cuándo le abrió la puerta del auto – prometo recompensarte por todo este tiempo separados
Hanji se acercó y le mordió el labio inferior, para luego entrar al auto.
Levi cerro por inercia la puerta del auto, estaba lelo.
Recordaba muy bien que ya había intimado con Hanji, cuando ambos tenían dieciséis años, fue el primer y único hombre de Hanji, al igual que ella era su primer y única mujer. Podía recordar el tacto de su piel, la sensación de estar dentro suyo.
Debía calmarse o terminaría más excitado de lo que estaba.
Hanji bajo la ventana para llamarlo, al ver que ni se movía.
- Ackerman – le llamo sonriendo – deja de alucinar y sube al auto
El espabilo y rodeo el auto para subir, ya dentro se abrocho el cinturón y reviso que Hanji lo hubiera hecho también, encendió el auto y antes de arrancar tomo su mano y la beso, ella le regalo otra de sus sonrisas que le paralizaban el corazón.
Estaba tan feliz, tan feliz por aquel regalo que el creador le había dado.
Fiesta de bienvenida a la Universidad / Organizada por los graduados del 2020
La música y las luces estaban a todo su esplendor.
Hanji entro moviéndose de un lado al otro, Levi la tenía sostenida de la cintura.
- Vamos a bailar – le dijo tomando su mano
- ¿No deberíamos buscar a los demás?
- Primero bailemos, ¿sí? – le pidió haciendo puchero
Levi le dio un beso rápido y asintió.
Caminaron a la pista donde muchos ya se movían al ritmo de la música.
Ella tomo de la cintura y ella empezó a moverse.
La música que sonaba era Gimme, gimme, gimme de Abba, aunque esta era una versión más actual, hecha remix por alguien dj y cantada por alguien más.
Hanji movía sus caderas y alzaba las manos, él estaba encantado de verla así, moviéndose de un lado para el otro, dejándose envolver por la música, alzando sus manos por encima de su cabeza, totalmente inmersa en la canción.
En un momento la soltó, para que le diera la espalda y empezara a moverse pegando su cuerpo al suyo, Levi la envolvió con sus brazos nuevamente, tratando de moverse a su ritmo, pero más concentrado en acariciar su cintura con pequeños roces.
Le fascinaba ver a Hanji de aquella manera, sin las preocupaciones de antes, sin el dolor constante, sin el sufrimiento de ver morir cada día a más personas. Esta Hanji solo disfrutaba su juventud, como debió ser desde siempre.
Ella seguía moviéndose, en un momento volvió a girar y paso sus manos por su cuello. Levi paso sus manos a sus caderas, la cual ella empezó a contonear.
Levi no pudo resistirse a ella y volvió a besarla.
No iba cansarse de besarla, de acariciar su cuerpo, jamás.
La canción termino para dejar empezar otra, Hanji corto el beso.
- Vamos a buscar a los chicos – el asintió
Caminaron en medio de los cuerpos danzando, solo le tomo un minuto encontrar a su grupo de amigos.
- ¡Aquí! – grito Moblit
Hanji corrió hacia ellos tomada de la mano de Levi.
- ¿A qué hora llegaron? – le pregunto Erwin
- Recién – respondió Hanji – pero bailamos una canción
- Levi bailando – dijo Nanaba – eso debí grabarlo
Todos rieron.
- Tranquila oxigenada – dijo Levi y todos volvieron a reír
Aquello era demasiado bueno para ser realidad, pero lo era.
Justo frente suyo estaban todos sus amigos, Erwin al lado de una chica de cabello rubio cenizo, era Marie su novia, en este mundo pudo completar su historia de amor con ella, Mike y Nanaba eran novios también, Moblit con Nifa, novios también.
Todos estaban bien, vivos y felices.
- Les pedimos sus respectivos tragos – dijo Moblit
Sus amigos habían elegido una mesa en círculo, donde todos podían sentarse a gusto.
- ¡Pido un brindis por ingresar a la universidad! – grito Nanaba – aunque Marie ingresa el próximo año – molesto a su amigo – Erwin es un corrompedor de menores
- Marie ya tiene dieciocho – dijo el rubio de cejas prominentes
- ¿Pero qué edad tenía cuando se hicieron novios? – pregunto Mike y todos empezaron a reír
Erwin había conocido a Marie cuando ella llego de intercambio a su instituto. Ella tenía 16.
- Si en esa estamos, Moblit también entra en el saco
- ¡Oye por me metes a mí!
- ¡Tenías que estudiar para abogado! – dijo Nanaba
Nifa tenía la misma edad que Marie.
- ¡Bueno ya dejen de amenazar con denunciar a Erwin y Moblit – dijo Hanji – brindemos por la universidad!
Todos pusieron sus vasos en medio y gritaron.
- ¡Salud!!!
Se bebieron de una todo el trago del vaso.
Esto era como debería haber sido, como debió ser siempre, ellos disfrutando de la vida, sin preocuparse en salvar la humanidad, sin preocuparse por morir, solo viviendo.
Estuvieron un rato más bebiendo y riendo, cuando todos fueron a la pista de baile a seguir bailando.
Las chicas bailaban juntas, mientras que los chicos le hacían una redondela, cada quien admirando a sus respectivas novias.
Mike fue el primero en romper la redondela cuando tomo de la mano a Nanaba y sacándola a bailar, lo siguió Erwin y después Moblit.
Hanji al verse sola, estiro su mano hacia su novio y este la tomo.
- Nos dejaron solos – le dijo ella y el la jalo hacia el
- ¿Quieres bailar? – pregunto
- Pensé que jamás lo pedirías
Ella empezó a moverse, mientras él tomaba su mano y le daba algunas vueltas.
Hanji era toda sonrisas. Y Levi jamás había sido tan feliz.
En un momento pusieron un remix antiguo y su cuatro ojos empezó a gritar, no olvidaba lo mucho que le gustaba la música antigua a su chica.
Ella empezó a hacer alguna de las coreografías de las canciones, mientras el trataba de seguirle el ritmo, pero más se dedicaba a observarla.
La parte del remix estaba en una canción de los 2000, llamada "Asereje", para luego seguir con un par de Shakira, "te aviso y te anuncio". En esa canción su Hanji empezaba a mover su cuerpo, cantando y haciendo un poco de teatro, haciéndolo reír.
- Siempre tan histriónica – dijo Nanaba viéndola hacer su teatro
- Es una diva – respondió Mike
Un mix de Juanes termino siendo cantado mientras ella lo abrazaba, su Hanji sí que sentía cada palabra de las canciones. Aunque ninguna canción que sonó describía su relación.
- ¡A dios le pido! – grito Hanji en su oído – un segundo más de vida para darte y mi corazón entero entregarte, un segundo más de vida para darte y a tu lado para siempre yo quedarme, un segundo más de vida yo!!!
Levi sonrió, ya perdía la cuenta de cuantas veces había sonreído, era inevitable con Hanji, ella era la razón de su existir, la razón de su felicidad.
Siguieron el remix bailando, hasta que un mix de Bacilos empezó a sonar, el rodeo su cintura con una mano y con la otra la entrelazo, para moverse con un baile lento pero bailable, ella se balanceaba a su ritmo, siguiendo el compás de la canción.
Nanaba no perdió la oportunidad y corrió a traer su celular, para grabar a Levi bailar.
- Si sabes que cuando publiques eso te va a asesinar, ¿verdad? – dijo Mike
- Lo vale – se rio y siguió grabando
Aunque sus amigos sabían que la única que podía sacar esas facetas de Levi, solo era Hanji, no era muy común verlas, así que guardaría ese video como un tesoro y un futuro video de extorsión para el enano de su amigo.
El remix siguió, hasta que termino. Habían estado bailando más de una hora.
Todos fueron a su mesa.
- Vamos por los tragos – dijo Erwin a sus amigos ellos asintieron
- Yo voy a mojarme un poco – dijo Hanji
- Vamos – le dijo Nanaba
Los chicos fueron a la barra y pidieron otra ronda de tragos.
- Te veo más feliz de lo normal – le dijo Erwin mientras esperaban sus tragos
- ¡Estabas bailando! – dijo Mike
- ¡Y frente a todos! – completo Moblit
- Ya no exageren, hoy es un día para festejar, ¿no? – dijo Levi
- Pues si – dijo Moblit
El barman le entrego los tragos y ellos los llevaron a la mesa.
Al llegar Hanji y Nanaba ya habían vuelto. Pero Nanaba estaba riendo como loca.
- ¿De qué te ríes? – le pregunto Mike dejándole su bebida y sentándose a su lado
- Un idiota – dijo la rubia – quiso pasarse de listo con Hanji
- ¡¿Que?! – Levi que ya estaba sentado al lado de su novia se levanto
- Cálmate – le dijo Hanji jalándolo para volver a sentarlo – que antes de que pudiera tocarme, le di una buena patada
- No creo que tenga descendientes en un futuro – dijo Nanaba volviendo a reírse
Levi estaba más tranquilo, pero le hubiera gustado romperle la cara al imbécil que se atrevía a intentar pasarse con ella, pero era bueno saber que, en esta vida, Hanji no necesitaba a nadie para defenderse, siempre fue una mujer muy independiente, eso era lo que más le gustaba.
- ¡Brindemos de nuevo!! – grito esta vez Erwin – por el futuro!
- ¡Salud!! – gritaron todos
Debían ser las 3 de la mañana y todos dejaron sus autos en aquel lugar, no podían manejar tomados, aunque tampoco estaban tan mareados, mas valía prevenir.
Erwin había rentado unas habitaciones en un hotel cercano a aquel local.
- ¡Tengan sus llaves! – les dijo
Los chicos las tomaron.
- ¡Nos vemos mañana!
Mike cargo a Nanaba y fue corriendo al ascensor, Levi pudo escuchar la risa de la chica antes de perderse dentro de este.
En un segundo, Moblit, Nifa, Erwin y Marie también habían desaparecido.
Hanji tomo la mano de Levi.
- ¿Vamos? – le sonrió
Y aquella sonrisa era diferente.
Caminaron hasta el ascensor y ni bien este se cerró, Hanji se lanzó a sus brazos para besarlo.
Aquel beso era desesperado y necesitado, de tal manera invasivo, ya que sintió como ella mordía su labio para que le dejara ingresar su lengua y la recibió gustoso.
Sin pensarlo mucho, Levi la cogió de los muslos y la levanto del suelo empujándola contra la pared sin hacerle daño, ella enrosco sus piernas a su alrededor de su cuerpo, estremeciéndolo ante el contacto.
- No sabes cuan loco me vuelves – le dijo en medio del beso
- Si lo sé – le respondió ella
Y empezó a mover su cadera, sintiendo rozar sus intimidades. Levi gimió al sentir como una erección crecía dentro, sintiendo como el pantalón le estorbaba.
La puerta del ascensor se abrió y sin bajar a Hanji al suelo, camino con ella besándola.
- ¿Qué numero? – pregunto ella viendo las puertas mientras Levi besaba su cuello
- 1203 – respondió apenas
- Sigue de frente
Levi metió la tarjeta llave de alguna manera, pero la puerta se abrió, entraron aun besándose y el empujo la puerta para cerrarla.
Al llegar a la cama, el recostó a Hanji en esta para luego ponerse sobre ella, aun besando su cuello, mientras que con sus manos tocaba su abdomen.
Se separaron un momento, él se puso de pie y ella se arrodillo en la cama frente suyo.
Con una calma que no sabía de donde sacaba, Hanji empezó a desabrocharle la camisa. El solo se dejó hacer, mientras la miraba de manera intensa.
- Te amo – le dijo Hanji quien ahora terminaba de sacarle la camisa – te amo
Hanji empezó a besarle el pecho, tocándolo y volviendo un poco más loco de lo que ya estaba por ella, su tacto era algo que no podía describir, sus labios en su abdomen.
Hanji empezó a abrirle el pantalón mientras lo besaba muy concentrada.
Levi dejo escapar un gran gemido cuando ella toco su erección por encima de la ropa interior.
- ¿Te gusta? – le pregunto de manera sensual
- Me encanta, pero ahora me toca a mi
Levi puso sus manos en sus muslos y empezó a levantarle el vestido mientras acariciaba cada parte de su piel.
- Te amo – le dijo y ella alzo sus manos para que el retirara el vestido – no sabes cuánto...
Ella sonrió y él pudo verla semidesnuda, sus pechos firmes y medianos, igual de tentadores que sus labios y su piel.
Levi la recostó nuevamente en la cama, tirando el vestido a alguna parte del piso del cuarto, lo más seguro era que ahora acompañaba a su camisa.
Empezó acariciando sus muslos, besando esas piernas de diosa que tenía, besando su abdomen para luego coger sus pechos y empezar a lamerlos, los gemidos de Hanji no se hicieron esperar, esta se retorcía con cada lamida, con cada succión, envuelta en el placer que su novio le regalaba.
Levi volvió a sus labios, pero con su mano bajo hasta su intimidad, metiendo su mano por debajo de su ropa interior, Hanji jadeo aún más fuerte, al sentir los dedos de su amante tocar esa parte especial dentro de ella, sus caderas se alzaban por si solas por el placer que sentía recorrerla.
Levi introdujo un dedo dentro de Hanji y ella dio un pequeño grito, pero no era por dolor, era por el placer que no podía acallar.
- Estas tan mojada – dijo mientras bajaba sus labios a su cuello
Otro dedo más y Hanji empezó a retorcerse.
Aquello era el maldito cielo, pensó.
Cuanto se arrepentía de no haber confesado sus sentimientos hacia ella cuando pudo hacerlo, aunque debía aceptar que las veces que durmieron juntos, se imaginó a ambos compartiendo sus cuerpos, la amaba y la deseaba, siempre lo hizo, desde el mismo momento que la conoció, aunque no se diera cuenta.
Hanji siempre fue especial, en muchos sentidos, en muchas maneras.
- Te amo Hanji, te amo desde siempre...
- Y para siempre – termino la frase
Levi quito la mano de la intimidad de la chica y retiro su ropa interior.
Una caricia más, acompañado de una bella sonrisa y se adentró en ella, despacio, mirando su rostro desencajarse ante el dolor y el placer, la levanto hasta sentarla sobre él.
Ella lo abrazo por el cuello, mientras este besaba su hombro y acariciaba su espalda, dándole tiempo para acostumbrarse. Supo que ya estaba lista cuando ella empezó a moverse sola.
Ella se separó de su cuello, solo un poco, lo suficiente para mirarlo directamente, mientras meneaba sus caderas a su ritmo. Sus miradas eran tan intensas, que Levi termino por acortar aquella distancia para devorar su boca, poniendo sus manos en su cadera y ayudándola con el vaivén de caderas, levantándola un poco para llegar aún más profundo.
Ambos gemían de una manera poco decente, pero no les importaba, era en lo que menso pensaban, ya que estaba concentrados en disfrutarse.
- Levi! – gimió su nombre – justo ahí!
Levi supo que había encontrado ese punto especial en ella y dio una estocada más fuerte y ella grito de placer.
- Ahh!, ¡sigue, sigue! – le pidió
Levi volvió a repetir aquel movimiento y ella empezó a moverse más rápido, estaba llegando a su primer orgasmo, lo sintió cuando se desplomo en su hombro y cuando su miembro fue apretado de una manera dolorosamente deliciosa.
- Hanji! – jadeo el – Hanji!
El la recostó en la cama y empezó a embestirla más rápido, unos segundos y ella estaba gimiendo su nombre de nuevo.
- ¡Mas! – le pidió – más fuerte!
Levi la obedeció dejándose llevar por su salvajismo, claro que, sin llegar a lastimarla, sabiendo hasta donde podía llegar.
Estuvieron en esa posición hasta que Levi sintió que estaba a punto de terminar, la empezó a besar mientras embestía con las fuerzas que le quedaban.
- Estoy a punto – dijo ella casi gritando
- ¡Juntos! – dijo el
Y en medio de un apasionado beso ambos terminaron, llegando juntos a aquel orgasmo, el termino dentro de ella.
El empezó a respirar muy agitado en su cuello. Por un segundo sintió miedo al terminar dentro de ella, pero recordó que su chica tomaba anticonceptivos.
El salió de su interior y se recostó a su lado, ella se giró un poco para poder recostarse en su brazo y abrazarlo.
- Te amo – le dijo acariciando su cabello – esta nueva oportunidad, no pienso desperdiciarla
- ¿Nueva oportunidad?, no entiendo, ¿una nueva oportunidad para qué?
- De tenerte, de amarte, de estar contigo por siempre
- Y para siempre – completo ella
Él le acaricio la mejilla y le dio un beso en la boca de manera tierna.
- Te amo – dijeron al mismo tiempo
Por siempre y para siempre...
