Una de vaqueros. Capítulo 1- Home, sweet home.
Un estruendo en el carruaje pareció despertarla. La pelirroja apretó un poco los ojos para seguidamente abrirlos y comprobar lo que sucedía a su alrededor. El aplastante sol que asomaba desde la parte de afuera le «ayudó» a despertarse mejor, y así levantarse. Se había quedado dormida en aquel enorme carruaje, propiedad de la conocida compañía de servicios postales del país llamada American Express Company, que se dirigía a la costa oeste, como todos los días, transportando paquetes y sobres.
Aquel «carro» era lo mejor que había podido conseguir para volver a su ciudad natal, de entre todos los antiguos y gastados carros de presas, fuertes y civiles que los habían tenido que usar para transportar mercancías pesadas, y cuyas ruedas no habían podido resistir demasiado.
La compañía de Servicios Postales del país era bien reconocida por su puntualidad, seriedad y seguridad a la hora de transportar sus paquetes. Sus servicios eran tan ágiles que sus cartas y paquetes llegaban de una punta a otra del país en cuestión de 10 días, y para aquellos tiempos, era toda una hazaña.
El carro se dirigía lentamente hacia las praderas del medio oeste. Atravesaba brevemente el famoso río de Missouri, pero seguía por su ruta habitual por la parte norte hacia el Estado de Oregón. La muchacha se sentó aún algo desorientada en un leve banco que había a sus espaldas y resopló indebidamente hacia el suelo con los brazos cruzados. Ya había entrado el mes de junio, pero el calor ya empezaba a apretar de una manera insoportable. Ella había vuelto de la costa este bien vestida como las señoritas de allí con un buen trabajo, aunque no lo hubiera tenido, por lo que el vestido le estaba pasando factura. No era muy pomposo, pero el ceñido corpiño y el pequeño peplo de huesos que sostenía sus volantes no le estaba haciendo ningún favor.
Con un cansancio bastante atípico en ella, se bajó del carro con el fuerte sol aún pegando en sus pequeñas y redondas mejillas, para esperar a su transportista. El pueblo aún quedaba a un par de kilómetros, por lo que su amigo de toda la vida Sanji Vinsmoke se ofreció a ir a recogerla. El carro de Servicios Postales seguiría su ruta ininterrumpida hacia Oregón.
El medio oeste americano era aún en su gran mayoría una planicie casi desértica, si no fuera por el rio Missouri que cubría todo el norte de dos estados y bajaba hasta unirse con el Mississippi. El resto, eran todo llanuras aún por descubrir y abarcar, en parte gracias a las nuevas vías de ferrocarril que pronto darían forma a todo el desierto. Mientras tanto, el pequeño pueblo natal de Nami no era un mal lugar; había trabajo -limitado, pero trabajo - , había entretenimiento y el clima una vez te habías acostumbrado a ello no era tan malo. Nadie era demasiado exigente en esa zona.
Al cabo de un rato llegó por fin su carro. Ambos amigos se saludaron efusivamente y montaron de vuelta al pueblo. Sanji estaba curioso por las aventuras de Nami en la costa este del país. Allí, en los estados de NY o CT se habían llevado a cabo muchos, muchos progresos y todo lo nuevo provenía de allí. Era emocionante todo lo que tenía que contar sobre las grandes ciudades; tecnología, transporte… Pero Nami suspiró hondamente sin querer responder debido al gran cansancio del viaje de vuelta.
Al cabo de medio camino, Sanji no pudo evitar hacer un inciso.
- Algo… algo ha pasado mientras has estado afuera. - Nami frunció el ceño y miró confusa. - No quería decirte nada porque… bueno, no sabía si volverías y todo aviso quedaba restringido por la propia oficina del ayuntamiento.
- ¿Del ayuntamiento?
- Si. Intentamos pararlos pero… a pesar de mis habilidades, no pude. Nos tenían bajo coacción.
- ¡Sanji!
- Ahora lo verás.
En el destino final, la pelirroja se pudo percatar de dichos «cambios». Una gran puerta bien custodiada impedía la entrada con libertad al pueblo, y el resto de casas disponían de una especia de muro protector que evitaba que corriera el aire. El carro de Sanji se acercó y uno de los guardias hizo el alto.
- ¿De donde viene? - insinuó amenazante con un rifle en las manos. El hombre de cabellos rubios gruñó molesto.
- De recoger a una nativa, tiene residencia aquí.
- ¿Credencial? - volvió a insistir el hombre.
- La madre que los parió a todos – musitó el camarero por lo bajini mientras sacaba su documentación. Un viejo «carnet» raído con el nombre del pueblo.
El hombre del rifle lo miró con desconfianza y después de remolonear un poco, le cedió de nuevo el documento y dio la orden de paso.
Una vez dentro, Nami se apresuró hacia su hogar donde vivían su madre Bellmère y su hermana Nojiko. Su madre era la dueña del «Saloon» más famoso del pueblo y trabajaba junto a Sanji, de sol a sol. Su hermana había decidido quedarse en el pueblo gracias a sus increíbles habilidades de costura. No era gran cosa – según Nami – pero a ellas les hacia felices.
En su acogedor hogar, en la última hilera de casas de la frontera del pueblo – ahora extrañamente rodeado de un muro – las mujeres de la familia decidieron poner al día a la muchacha a su llegada. La pelirroja escuchó con atención todo lo sucedido durante su ausencia a medida que ambas describían todo lo ocurrido, en su respectivo orden.
En la costa este, en el área de las grandes ciudades se había desarrollado mucha riqueza, pero a la vez mucha miseria. De toda la vida se ha sabido que quien crea riqueza también vive con la pobreza, que siempre ha habido gente que ha preferido no trabajar, etc. Durante los últimos años, un extranjero de piel amarilla, descendiente del Japón Feudal, se había dedicado a ir sembrando el pánico entre la gente, afianzando consigo a la peor calaña de cada rincón, con Dios sabe que objetivo. Conocidos y condenados en la zona este del país, decidieron poner su rumbo a lo desconocido hacia las planicies del otro lado del rio Mississippi. Allí, encontraron Deadwood, un pueblecito aislado en pleno estado de lo que ahora es Dakota, como si lo estuviera pidiendo a gritos. Roronoa Zoro, junto a 4 indeseables más, no se lo pensaron demasiado cuando decidieron asaltar el pacífico pueblo una noche y, en menos de lo que canta un gallo, «apoderarse» del lugar.
Así, una pacífica aldea en la mitad de la nada se ve gobernada por 5 maleantes que pretenden hacerse con todo. Deshicieron el ayuntamiento, robaron y custodiaron los tesoros y por supuesto se adquirieron las mejores propiedades, dejando a los dueños en la calle, entre otras cosas. Todo, en un abrir y cerrar de ojos.
Nojiko lloraba mientras Bellmère relataba la historia. El Saloon por suerte estaba intacto, pero muchos otros oficios se habían dejado de realizar debido al miedo que recorría el lugar. Nami se quedó pensativa.
.
.
.
Nota de la autora: BIEN! Hasta aquí el primer capítulo COMPLETO. Como ya dije, a mi me gustan las historias fáciles de leer y que sean digeribles, es todo lo que puedo hacer por ahora. Así que quiero avisar de varias cosas:
1- Espero que os haya gustado!
2- Los capítulos serán cortos, nada de tochos de 11 páginas en Word que luego tenga que re-leerme y corregir, cambiar expresiones o frases, etc. Es muy tedioso y no tengo tanto tanto tiempo. Tengo tiempo pero no me quiero machacar.
3- Intentaré, INTENTARÉ subir un episodio alterno de Una de Vaqueros y Érase una vez, que la tengo un poco abandonadilla y quiero terminarla.
4- Lo más seguro es que, aunque no me ponga un horario de subida 1 día a la semana especifico (odio hacer eso), os aviso de que iré subiendo POR LA NOCHE, HORA ESPAÑOLA. Todos los capítulos sin excepción, procuraré no salirme de ese patrón para que podáis seguirlo más cómodamente (sobretodo lo digo para los que me seguís y no tenéis cuenta privada :) )
5- Confieso que toda la movida esta del Lejano Oeste es por varios factores influyentes que son: El Sly Cooper 4 y el videoclip de P!nk llamado «trouble» que sale Hawkeye XDDDD. Por lo menos puedo decir que la inspiración me viene así de fácil con 4 mierdas JAJAJA.
6- Tengo malas noticias y es que quizá me empiece otra historia JAJA. No entraba dentro de mis planes pero es que cuando la cabeza empieza a mover la maquinaria… es una idea detrás de otra. ¿Creéis que debería empezar otra y seguir con las 3 a la vez? XD.
Muchas gracias por llegar hasta aquí. Read & Review!
