Los chicos fueron contratados por un noble para tocar en su fiesta privada que sería esa noche, a decir verdad parecía una buena oportunidad si reciben una buena paga pero había cierta duda, como que hay algo mal al respecto, por el momento se mantuvieron en su habitación en aquel momento.
- Parece que no necesitamos practicar. – Comentó Ronnie sosteniendo la guitarra. – Desde el momento que sostuvimos estos instrumentos, es como si años de practica hubieran sido insertados en nuestros cerebros.
- Así que solo necesitamos decidir la canción y ya. – Le siguió Sagiri. – Por cierto Kanno, sigues dudando respecto a esa propuesta ¿no? – El pelinegro asintió.
- Acepté pero sigo pensando que algo ocurrirá, no vaya a ser que por rechazarlo haga algo mucho peor.
- Fue la mejor decisión entonces… por ahora, escojamos la canción, luego podremos ver otros sitios.
- Es cierto, necesitamos buena comida. – Expresó Ronnie. Pasado el tiempo acabaron de escoger la canción que tocarían esa noche y los tres salieron para recorrer el pueblo, necesitarían abastecerse con alimentos para el camino, no siempre podrían estar cazando o recogiendo frutos de los árboles, de ese modo fueron al mercado, con el dinero que llegaron a recolectar sería más que suficiente.
- Kanno, Ronnie ¿puedo consentirme un poco? Quisiera ver que tipo de ropa hay en este lugar. – Preguntó Sagiri.
- Es verdad, no tenemos más cambios además de la ropa actual. – Pensó Kanno por debajo.
- Ronnie ¿quieres acompañarme? Te dejaré escoger mi ropa interior. – Expresó la pelinegra con una sonrisa seductora, el castaño se sonrojó levemente.
- Y-Ya basta con esas bromas Sagiri. – Ella empezó a reír.
- Podríamos ver ropa después, obtuvimos bastantes monedas al final. – Con la declaración de Kanno, empezaron a ver los alrededores. Debido al impacto de su presentación mucha gente los reconoció y saludaba, incluso algunos vendedores hicieron ofertas exclusivas o de plano regalaban algo, eso los sorprendió, al final Ronnie terminó cargando cuatro bolsas.
- ¿Pueden ayudarme? – Pidió ayuda aunque lo ignoraron.
- Kanno, realmente eso sorprende. – Expresó Sagiri por debajo.
- Y fue la canción más popular y normal que conocíamos, eso habla mucho del impacto que tuvimos en la gente, realmente no conocen para nada el Rock.
- Eso nos asegurará mucho a futuro. – Sonrió la pelinegra. Al final entraron a una tienda de ropa.
- ¿Sí? Oh, he escuchado de ustedes, son esos músicos tan extravagantes que tocaron hace poco, me alegra que escogieran mi hermosa tienda, vean lo que deseen. – El hombre con obvias pintas de afeminado por llevar maquillaje encima les ofreció ver lo que había a los alrededores.
- Sagiri, no agarres demasiado, tenemos que prepararnos para tocar en esa fiesta de aquel noble. – Comentó Kanno.
- ¿Irán a la fiesta de un noble? Eso amerita algo especial, necesitan los mejores vestidos y trajes que tengo. – El encargado de la tienda los sujetó a los tres para arrastrarlos, ninguno de ellos pudo rechazarlo ya que se veía muy emocionado al respecto. – Se magnifique, se verán hermosos con esta ropa.
- ¿Es necesario? – Preguntó Ronnie en el cambiador.
- No podemos rechazarlo, quizás llore, igual me veo linda. – Respondió Sagiri por su lado.
- Lo tomaremos entonces. – Terminó Kanno a lo que el encargado chilló de la emoción. Escogieron unas cuantas ropas más que iban con lo que deseaban y de tal modo pagaron.
Al salir de la tienda, tenían algo de tiempo libre más, quizás podían pasear un rato antes de volver a la posada para prepararse, ahí estaban Ieyasu y Sayo.
- ¿Ya irán a esa fiesta? – Preguntó el chico.
- Como está anocheciendo, es mejor prepararse.
- Compramos ropa para ir. – Señaló Sagiri.
- Puedo ayudarte a prepararte, vamos. – Sayo arrastró a Sagiri para ayudarla, los chicos siguieron ahí.
- ¿Vendrán con nosotros? Dijiste que se ofrecieron a ser como guardias. – preguntó Ronnie, Ieyasu asintió.
- Es lo menos que podemos hacer por ustedes, yo soy el mejor usuario de hacha de mi aldea y Sayo tiene una gran puntería con el arco, no les sucederá nada. – Aseguró este, ya como tal fueron a cambiarse, para ser un mundo algo antiguo tecnológicamente les sorprendía que existieran ciertas cosas actuales, como tal pudieron ver electricidad y focos pero era lo poco que había así, además en ropa, tenían verdaderos trajes o smokings.
- Aprieta un poco en la corbata. – Ronnie se la ajustó. – Mucho mejor.
- Debes resistir Ronnie, siendo una fiesta de un noble, seguro exigen algo de etiqueta. – Expresó Kanno.
- Eso lo sé, pero no es que sepa nada de ese tipo de costumbres, no somos ingleses o de la realeza.
- Solo déjamelo a mí. – Al terminar, los dos salieron, solamente faltaba Sagiri.
- Irán en su carreta ¿no? Puedo manejarla. – Se ofreció Ieyasu pero Kanno le hizo ver que no sería necesario.
- Ya estamos aquí. – Sayo bajó con Sagiri, la pelinegra llevaba un hermoso vestido color rojo de una sola pieza, llevaba leve maquillaje encima y un pasador de flor en el lado izquierdo de su cabello.
- ¿Cómo me veo? – Preguntó.
- Te ves bien. – Asintió Kanno, Ronnie también pensaba lo mismo.
- ¿Estoy hermosa Ronnie?
- Claro, bastante. – Respondió el castaño, Sagiri sonrió ampliamente.
- No soy alguien que realmente sepa aplicar bien maquillaje pero creo que estuvo perfecto. – Aseguró Sayo.
- Bueno, viniendo de aquella chica que antes era una salvaje. – Se burló Ieyasu a lo que su amiga se enojó y empezó a darle golpes en el brazo. – Oye, eso duele.
- Eso te ganas por decir que no soy femenina ¡Hmph! – Hizo un puchero.
- Ya es momento de irnos. – Señaló Kanno. Fueron a la carreta para subirse, cabe decir que los dos se sorprendieron de ver golems que empezaron a moverla.
- ¿Cómo? – Preguntó Ieyasu.
- Un secreto. – Soltó un guiño Sagiri. Ya empezaron a ir a las afueras del pueblo por la mansión donde vivía aquel noble, estaba todo listo, sus instrumentos y demás. No tomó más de unos minutos cuando lograron verlo, como tal iban demasiados carruajes donde bajaban muchas personas con trajes y vestidos por igual.
- Me alegra verlos aquí. – El noble los recibió. – su música será toda una novedad para este reino, así que deseo darlos a conocer.
- Agradecemos la invitación. – Respondió Kanno. – Debemos hacer los preparativos, nosotros mismo podemos llevarlo todo.
- Claro, tómense su tiempo. – Dicho eso, el noble se retiró. Ya de ese modo comenzaron, un golem sostuvo el equipo de la batería para bajarlo.
- ¿También hiciste micrófonos? – Preguntó Ronnie, Sagiri asintió.
- Los hice durante mi tiempo libre, necesitamos mayor alcance después de todo.
- Los estaremos viendo desde aquí, háganlo perfecto. – Aseguró Ieyasu, los tres asintieron. Con eso se adentraron a la mansión, este era grande y como tal contaba con un gran pasillo frontal, escaleras a un segundo piso y muchas puertas.
- La sala de fiestas debe estar por ese lado. – Fueron por la izquierda para moverse, viendo a más personas ir a ese lugar, llegaron y era grande, varias personas ya estaban platicando entre ellas, había bocadillos en las mesas y vino.
- Kanno ¿puedo?
- Comer, si, tomar, no.
- No es que vaya a agarrar el vino, sé que aun soy menor de edad. – Dicho eso se movió para comer algo mientras los chicos empezaron a armar todo, el golem conectó la batería y prepararon los micrófonos, haciendo las pruebas necesarias para empezar.
- Todo perfecto. – Pasado un tiempo, varias personas se preguntaron por qué estaban ahí y lo que tenían en manos, la curiosidad era algo normal, ya lo descubrirían después.
- Necesito su atención. – El noble, dueño de la mansión, llamó la atención de los invitados. – Como una ocasión especial, les presentó una orquesta un tanto distinta, normalmente tendríamos música clásica pero hice este descubrimiento y estos jóvenes tocarán algo que nunca antes han conocido, adelante. – Les dio el visto bueno.
- Hola a todos, somos Rock Crusaders, espero disfruten de nuestra presentación. – Una vez terminó de hablar Kanno, empezaron en aquel momento para tocar.
"Wake Me Up when September Ends.
Green Day"
Ronnie empezó a tocar suavemente la guitarra con la melodía inicial de la canción, Kanno y Sagiri sonrieron por debajo en aquel momento.
Summer has come and passed
The innocent can never last
Wake me up when September ends
Like my father's come to pass
Seven years has gone so fast
Wake me up when September ends
Here comes the rain again
Falling from the stars
Drenched in my pain again
Becoming who we are
As my memory rests
But never forgets what I lost
Wake me up when September ends
Hubo silencio totalmente los invitados mientras seguían escuchando, ya de un momento para otro comenzaron a tocar Kanno y Sagiri, siguiendo el ritmo de la canción y Ronnie tocó la guitarra con más energía seguido de las melodías del teclado tocado por el golem.
Summer has come and passed
The innocent can never last
Wake me up when September ends
Ring out the bells again
Like we did when spring began
Wake me up when September ends
Here comes the rain again
Falling from the stars
Drenched in my pain again
Becoming who we are
As my memory rests
But never forgets what I lost
Wake me up when September ends
Al momento de tocar el solo de la canción, el publico estaba maravillado, por detrás Ieyasu y Sayo sonrieron.
- Es otra canción… - Expresó la pelinegra con una sonrisa.
- Ellos… realmente esconden muchas cosas pero no puedo quejarme.
Al terminar la parte del solo de guitarra, volvió a tocar suavemente Ronnie con el ambiente del teclado para seguir cantando.
Summer has come and passed
The innocent can never last
Wake me up when September ends
Like my father's come to pass
Twenty years has gone so fast
Wake me up when September ends
Wake me up when September ends
Wake me up when September ends
Al terminar la canción, se quedó todo el silencio, de repente hubo un aplauso perteneciente al noble dueño de la mansión y poco a poco empezaron a surgir hasta inundar la sala, los tres chicos sonrieron y correspondieron los aplausos.
- Esa fue una gran presentación, sigan disfrutando de la fiesta. – Ya entonces se dispersaron para continuar, los tres no pudieron evitar ser rodeados por varias personas.
- Esa fue una presentación exquisita ¿Qué música es la que tocan? – Preguntó una de las personas.
- Esto… es un tipo de música perteneciente a nuestro lugar de origen, es todo lo que podemos decir. – Respondió Ronnie.
- Esos instrumentos no son nada como un piano o un violín ¿Cómo lo logran? – Preguntó otro.
- Eso es secreto, no lo revelaremos tan fácilmente. – Asintió Kanno.
- Señorita, usted es hermosa, espero acepte tomar conmigo. – Como tal, chicos nobles se fueron acercando a Sagiri, chicas hermosas igualmente fueron por Kanno.
- (Siempre ellos se llevan la atención) – El castaño sonrió por debajo, retrocedió quedando junto a Ieyasu y Sayo.
- Gran canción la que tocaron. – Comentó el pelinegro.
- Gracias, es una canción que me gustaba cuando era pequeño, así que pensé que sería la mejor opción.
- Es cierto, no nos han dicho de que reino vienen. – pensó Sayo, ahí Ronnie se puso algo nervioso. - ¿Cómo se llama su reino?
- Bueno… pues… es un reino muy lejano… se llama Atlanta.
- ¿Atlanta? Nunca escuchamos de él. – Respondió Ieyasu.
- Eso es porque queda al otro lado del mar, venimos en barco. – Buscó despejar las dudas el castaño.
- Ya veo, nosotros tampoco conocemos acerca de otros reinos más allá del mar.
- Debe ser un reino muy prospero para tener ese tipo de música. – Comentó Sayo con una sonrisa, Ronnie pudo sentirse calmado al ver que se lo creyeron.
- Jovencito, quisiera hablar con usted. – El noble lo llamó, este se sorprendió.
- ¿A mí? Si es por motivos del pago, puedo llamar a Kanno y…
- No es necesario, quiero hablar con usted específicamente, traiga su instrumento igual. – Ronnie dudó un poco pero vio a los otros dos.
- Ve, ya les avisaremos que te llamaron. – Comentó Ieyasu, con algo de cautela, el castaño asintió. Siguió al noble a lo que salieron de la sala, así se movieron por los pasillos, alejándose bastante, el camino los llevó al estudio perteneciente al dueño, teniendo un escritorio, varios trofeos y espadas en las paredes, este se sentó.
- Realmente fue una presentación magnifica, algo nunca antes visto.
- Esto… gracias, llevamos haciendo esto desde hace tiempo en nuestra tierra natal. – Mintió obviamente, nadie les creería que murieron y resucitaron ahí.
- Esos instrumentos que llevan son especiales, no hay nada en este mundo que saque un sonido igual.
- Esto es una guitarra eléctrica. – Mostró el instrumento. – Es como una normal pero saca sonidos más fuertes y se maneja con mayor delicadeza para tocar lo que deseo.
- ¿Puedo verla? – Pidió, Ronnie asintió y le entregó la guitarra, viéndola. – Tiene una composición extraña, no está hecha de madera y el sonido es muy envolvente en comparación a los instrumentos normales, la gente en tu reino debe ser muy hábil para hacer algo como esto.
- P-Pues claro… las llevan fabricando desde hace tiempo… - Se rascó la nuca, el noble sonrió.
- Entiendo… era lo que necesitaba saber, ahora… - En ese momento entraron hombres a la sala, Ronnie se sorprendió cuando lo sujetaron y derribaron contra el suelo.
- ¿Qué rayos?
- Gracias por dármela chico. – Sonrió este, Ronnie quería librarse pero le aplicaban bastante fuerza.
- ¿Qué es esto? – Exigió saber, el noble sonrió de una forma altanera.
- Justo lo que ves chico, me quedaré con tu instrumento, así como igual tomaré el de tus compañeros, serán una buena ofrenda al emperador y obtener más tierras.
- Ese era tu plan desde el inicio ¿no? – Preguntó, el noble empezó a reír.
- Claro, algo tan novedoso no podía ser pasado por alto, así que por su bien, tu y tus compañeros morirán a manos de mis guardias mientras que esas dos chicas… serán unas buena esclavas que me complacerán en la cama. – Empezó a reír, Ronnie gruñó por debajo, sabía que algo estaba mal, ahora se lamentaba haber sido ingenuo para ir solo. – No tengo nada más que decir, es momento de que mueras, mátenlo.
Un guardia tomó su espada y de tal modo la apuntó a la cabeza a Ronnie, realmente iba a morir nuevamente por un descuido, el noble empezó a reír.
- ¡Muere y sé un escalón en mis ambiciones! – Empezó a actuar como maniaco el noble, Ronnie cerró los ojos esperando su final… pero nunca llegó.
- ¡Aaargh! – Por sorpresa ese guardia fue golpeado por un golem, el noble se sorprendió.
- ¡Pero qué!
- Ya sabía que algo oscuro estaba ocurriendo aquí. – De la puerta aparecieron dos figuras que Ronnie se alegró de ver al recuperarse.
- ¡Kanno, Sagiri!
- ¡Ustedes! – El noble se mostraba iracundo. – Que rayos creen que hacen.
- ¿Qué hacemos? Sabíamos que harías algo malo pero pensar que buscarías robar nuestros instrumentos, realmente que baja es la nobleza aquí.
- Escuchamos todo… así que querías hacerme una esclava sexual… que asco… - Expresó Sagiri con rostro sombrío y aterrador, el noble retrocedió.
- ¡G-Guardias, acaben con ellos! – Ordenó a sus hombres para ir por ellos, obviamente no retrocederían sin pelear, de tal modo Kanno fue por las armas en la pared, él agarrando una espada, le pasó a Ronnie una lanza y a Sagiri un par de tonfas.
- Tomen esto, no podemos revelar lo que hacen los instrumentos. – Respondió Kanno. Así tomando las armas comenzaron a pelear.
- No tenemos que matar ¿cierto? – preguntó Ronnie, uno de los guardias fue por él para atacarlo, el castaño se agachó y lo golpeó con la parte de madera en el estómago para derribarlo. Sagiri tuvo a varios rodeándola, la pelinegra sonrió.
- Realmente rodean a una chica indefensa, entonces van a sufrir. – Sagiri empezó atacando a una con la tonfa izquierda en el mentón de uno de ellos, otro quiso atacarla pero ella dio un salto y entonces con un giro en el aire aterrizó con una patada. – No subestimen a una gimnasta.
Kanno bloqueó el ataque de uno de ellos con la espada y lo alejó con una patada, de forma seguida le dio un golpe en su rostro para derribarlo, el noble solo veía como entre ellos acababan con sus guardias, viéndose asustado.
- No…. esto no puede estar pasando.
Kanno acabó con el último de los guardias, en aquel momento solo quedaban el noble que estaba detrás de su escritorio escondiéndose para no ser visto, claro que no sirvió de nada cuando Kanno estaba frente a él.
- Ey anciano. – Kanno lo sujetó para levantarlo, el noble soltó un chillido. – Parece que realmente querías engañarnos ¿no?
- P-Por favor, les ruego que me perdonen, los dejaré en paz, no solo eso, puedo darles todo lo que quieran, tierras, dinero, tengo los medios para ello.
- Nosotros no somos tan bajos como para caer en sobornos así. – Expresó el pelinegro, en ese momento tomó la espada, apuntándola contra el pecho del noble, este se asustó.
- ¡E-Espera Kanno, no es necesario que lo mates! – Expresó Ronnie, el pelinegro lo vio por detrás.
- Escucha Ronnie… creo que así son las cosas en este mundo, no es nada diferente de donde éramos antes, los poderosos siempre son corruptos y pisotean por debajo a los que tienen poco… eso es algo igual en cualquier mundo donde estemos… Ronnie, no tenemos otra opción si queremos seguir con vida.
- ¡Por favor, perdóname la vida! – Suplicaba por su vida, Ronnie sabía que Kanno tenía razón pero no tenía que ser de esa forma, en eso Sagiri sujetó su hombro.
- Ronnie… estoy con Kanno en esto, no existe forma de salvarlo, si lo dejamos vivo, capaz siga buscando gente a la cual lastimar, ni siquiera sabemos si ya lo ha hecho.
- Sagiri… - El castaño bajó la mirada, apretando el puño con fuerza, estaba mal el arrebatar una vida por más malvada que sea pero en ese mundo parecía ser algo normal, vio a las personas comunes del pueblo que los saludaron, los niños que se alegraron con sus canciones, si había nobles que amaban pisotear esa paz… quizás la muerte sea un castigo menor.
- … Hazlo… Kanno, puedes hacerlo… - Susurró por debajo, el pelinegro asintió.
- ¡No, quiero vivir! – El noble estaba llorando, Kanno no sentía nada de lastima por él.
- Eso debiste haberlo pensado antes de meterte con nosotros. – Sin previo aviso, apuñaló al noble totalmente por el pecho, atravesando su corazón, este abrió bien los ojos, escupiendo sangre por la boca antes de dejarlo caer al suelo, agonizando. – vámonos…
Sin decir nada más, los tres se retiraron de ahí, afuera estaban esperando Ieyasu y Sayo.
- ¿Por qué tardaron mucho? ¿Pasó algo? – Preguntó el chico, Kanno sonrió.
- Solo un pequeño contratiempo pero ya obtuvimos nuestra paga por tocar. – Señaló la gran bolsa que tenía en sus manos, los dos chicos se sorprendieron.
- ¡Es bastante! – Expresó Sayo con asombro. - ¿Realmente les pagaron todo eso?
- Claro, era alguien muy generoso después de todo, podremos vivir unos cinco meses sin problemas. – Sonrió Kanno. – Ya podemos volver, mañana a primera hora saldremos.
- Claro. – Sonrió Ieyasu. La carreta empezó a volver al pueblo, claro que solo ellos tres sabían lo sucedido y aprendieron algo valioso en ese mundo, habría gente malvada, si para ello necesitarían matar, traerían justicia por su propia mano…
Ninja Britten 11: Ya tuve que agregar la primera canción y pues me pareció la más adecuada para empezar, así como digo, empezarán con lo más conocido para luego ir escalando y la verdad, tengo mucho en el repertorio.
El Redentor 777: Ya como se dice, en cualquier parte del mundo existe el mismo tipo de personas y es lo que creen, ya de que Kanno sospechó, eso se hizo realidad al final, al menos le pusieron fin.
Ya pasamos la fiesta, como se esperaba, el noble quiso acorralarlos pero se defendieron, claro que Ronnie estuvo en contra de matarlo pero Kanno le hizo ver la realidad y entonces le dieron el final definitivo, el haber matado por primera vez es algo que no se olvidará y ellos ya saben como funciona ese mundo y lo que están por enfrentar, claro que falta para ver más de la corrupción que mostraremos en próximos caps, de igual manera escogí como segunda canción una de Green Day, escuchaba la banda por ahí del 2010 en adelante y esta canción es una vieja favorita que no podía dejar pasar, para el siguiente cap continuaremos el viaje, más bien pensaré hacer una versión resumida de todo lo que pasarán para llegar de una vez a la capital del imperio, ya verán lo que tengo en mente. Hasta el próximo cap. Saludos.