Soul Eater no me pertenece es propiedad de Ohkubo Atsushi, yo sólo tomo prestado a los personajes para fines de esta historia.

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Capítulo 3. La probabilidad se encuentra a la vuelta de la esquina.

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"Hazlo por tu bebé Soul… por esa capa de pintura nueva."

Soul contrae su rostro en otra mueca de desagrado cuando garabatea en la etiqueta el nombre y apellido del sujeto al que pertenece el pequeño frasco de plástico transparente, nadie nunca dijo que clasificar muestras de análisis fuese el trabajo más sencillo del mundo. Bueno, si, relativamente lo era ¿qué tendría de difícil garabatear un pedazo de papel sobre un estúpido y aburrido frasco? Tal vez nada, si el pedazo de plástico desechable estuviese vacío, pero éste por desgracia todavía se encuentra tibio.

La sensación envía un ligero estremecimiento a cada rincón del cuerpo de Soul. Ugh. Bloquea cualquier incomodidad con el pensamiento de su bellísima motocicleta cubierta con una nueva capa de pintura naranja, el mantra "Hazlo por tu bebé" se repite una y otra vez en su mente dándole la fuerza de voluntad que necesita para terminar esa tarea.

Deja el frasco donde las demás muestras tan rápido como le es posible y con la agilidad de un gato, toma el líquido desinfectante que mantiene en todo momento sobre el escritorio para limpiarse las manos.

Soul agradece internamente el haber terminado con la tarea.

Se pone de pie para tratar de aliviar la tensión de su cuello y espalda por estar sentado toda la tarde en ese pequeño cubículo que separa la sala de espera con el consultorio de Stein, como acto reflejo Soul mueve la cabeza de un lado a otro para quitar la tensión de los músculos y se sobresalta cuando escucha y siente el ruidoso crujir de su cuello.

Sondea el lugar dándose cuenta de que la habitación está tan vacía como siempre, lo que es raro ya que esa pequeña clínica es la única disponible en Death City. No, él sabe por qué casi nadie se atreve a poner un pie ahí a menos que se tratase de una situación de vida o muerte: Stein asusta como la mierda.

Frank Stein, el espeluznante sujeto que tiene por jefe. Un excéntrico cirujano "retirado" que decidió abrir una clínica cuando se mudó a esa olvidada ciudad en medio del desierto.

— ¡Hermano! ¿Es esto una clínica o una funeraria? Siento cómo las paredes succionan toda mi alegría y energía vital.

El estridente grito de Blake desde el umbral corta abruptamente el flujo de pensamientos de Soul.

—Baja la voz idiota —Evans mira a su amigo con disgusto y reproche—. ¿Qué haces aquí Black Star? Stein podría regresar en cualquier momento.

— ¡Ha! Como si tu grandioso Dios le tuviera miedo a un sujeto raro con fetiches extraños.

—Stein te diseccionaría con gusto si escuchara eso.

Soul observa desde el interior de la ventanilla del cubículo cómo Blake desestima su comentario y se acerca para meter la mano a través del pequeño agujero que comunica con el exterior con la única intención de tomar la mitad de su sándwich, no le queda más que reprender inútilmente a su amigo antes de soltar un suspiro de cansancio.

Típico de Black Star, ahora se ha quedado sin un almuerzo para disfrutar.

— ¿Esto también se sumará a la cuenta de Sid?

Blake responde inteligiblemente con ruidosos sonidos de masticación que Soul interpreta como un "te dije que te devolveré cada cosa hermano" o algo así, no está muy seguro de todos modos. Pero antes de que pueda reprender a Black Star sobre lo molesto y desagradable que es su masticar, el teléfono de la recepción suena y Soul marcha hacia él con su desgarbado andar para tomar la llamada.

—Clínica de la Muerte ¿en qué puedo ayudarle?

—"¿Soul?" —La voz al otro lado de la línea de inmediato identifica el característico timbre de su voz.

Y así como la persona en la línea lo ha reconocido, él también sabe de quién se trata con sólo escuchar el melodioso timbre de voz. Soul no dice nada por un par de segundos y en lugar de eso, exhala un sonido de sorpresa y consternación.

¡Es ella!

Mil preguntas golpean su confusa y frágil mente ¿cómo consiguió ese número? ¿Por qué está llamándole? ¿Cómo supo que trabajaba en ese lugar si él nunca se lo mencionó en su pequeña charla? ¿Por qué sigue encontrándose con ella una y otra vez? ¿Por qué no le responde una maldita palabra en vez de quedarse callado dando bocanadas como un estúpido pez? ¿Qué demonios está pasando? Y lo más importante ¿por qué su corazón está dando vuelcos incontrolables en su pecho como si fuera una colegiala?

— ¿Maka? —reacciona al fin con la única cosa que puede procesar su mente en estos momentos.

Blake lo mira desde el otro lado al escucharle mencionar el nombre de la chica y no pierde el tiempo en pegar la oreja a la ventanilla para tratar de oír la conversación a pesar de la mala mirada que Soul le envía.

— "¿Trabajas en la Clínica de Stein? Espera ¿eres su recepcionista?"

Hay un ligero tinte de diversión en la voz de Maka que Soul reconoce con facilidad, no puede estar muy seguro pero también le parece haber escuchado el glorioso tintineo de su risa acompañando la cuestión.

—A medio tiempo —aclara de inmediato. La palabra "recepcionista" le hace sentirse extraño—. Por cierto ¿cómo conseguiste este número?

—"No lo sé ¿el directorio de servicios de Death City tal vez?" —El sarcasmo gotea lentamente.

¡Por supuesto! ¿Cómo pudo olvidar algo como eso? Soul se siente un poco tonto al respecto.

—Espera un segundo ¿cómo supiste que trabajo en este lugar?

—"En realidad no sabía, estaba buscando a Stein y por casualidad reconocí tu voz."

Oh. La dignidad que le quedaba a Soul ahora se disuelve en un charco en el suelo. Ella ni siquiera sabía que él trabajaba en esa clínica, es más, no era a él a quien ella esperaba encontrar tras esa línea.

—Si bueno… él salió a hacer unas diligencias y creo que regresará en una hora, si quieres puedo darle un mensaje o podrías volver a llamar.

Internamente, Soul pide en silencio que ella vuelva a llamar más tarde.

—"Creo que llamaré a Marie para que me dé su número de celular, pero gracias de todos modos Soul."

La suerte no está de su lado, piensa él.

—Claro, sí. Es genial —Evans trata de fingir indiferencia apelando al chico "cool" que lleva dentro—. Entonces hasta luego Maka.

—"Soul espera…"

— ¿Es la chica de pecho plano? —Blake prácticamente grita por la abertura de la ventanilla—. ¿De la que te estabas escondiendo en la fiesta a la que Liz nos llevó a trabajar? La misma de la que no dejas de hablar ¿cierto?

Una alarma se enciende en la mente de Soul.

—Black Star… —el siseo de advertencia denota la incomodidad que Blake le hace sentir con sus palabras.

Maka aún está en la línea y con el volumen de voz de ese idiota podría escuchar a la perfección lo que está diciendo.

—Amigo ¿por qué sigue buscándote de todas maneras? Creí que habías mencionado que ella es…

Antes de que Blake pudiera terminar la frase, Soul cuelga el teléfono de mala gana ocasionando que su amigo se calle de repente por el fuerte sonido de impacto. Maldición, eso no es para nada genial y ella pensará en lo grosero que es.

—Demonios Blake ¿por qué dices esas cosas tan a la ligera?

—Deberías ver la cara de tonto que estabas poniendo cuando hablabas con ella Evans, corta esa mierda de una vez por todas o podrías salir dañado. —Esta vez el tono de Black Star es más serio, dejando de lado su estupidez normal.

Más que cualquier par de palabras parece más un inusual consejo. Tan impropio en el idiota de cabello azul.

—Sí, sí, sí —replica Soul con sarcasmo para contrarrestar el aura tensa de Blake—. Mira, tienes que irte antes de que Stein regrese. Yo debo volver a trabajar.

—Bien, nos vemos luego hermano.

Con un pulgar en alto y recuperando esa molesta confianza que lo caracteriza, Blake se despide de Soul.

Una vez solo, Evans toma la carpeta olvidada sobre el escritorio de la recepción con la intención de archivar el expediente que hay en su interior, sin embargo cuando revisa las hojas para ver el nombre del paciente, nota las enormes y llamativas letras de la firma de Black Star estampada en cada una de ellas.

—Maldición.

Blake estuvo sin supervisión por sólo cinco minutos ¡cinco malditos minutos que le costarán a Soul media hora para rehacer ese expediente!

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No ha vuelto a saber de ella y tampoco se atreve a devolverle la llamada por la vergüenza y el temor que las palabras de Blake ocasionaron. Odia admitir que hasta cierto punto el idiota de cabello azul tiene razón, adicionalmente, no puede olvidar lo que Giriko le dijo en esa estúpida fiesta.

Después de pensar al respecto, Soul se siente tan confundido que no sabe qué hacer. No puede negar que la chica le resulta linda y hasta divertida e intrigante, pero más allá de su interesante personalidad y apariencia, el detalle de su relación con la otra mujer es lo que no puede ignorar.

Muy a su pesar, no puede tolerar ese detalle. No le importa su preferencia sexual pero él no es una persona que apruebe una infidelidad y si es el caso, ella se equivoca con él.

No quiere pensar más al respecto, prefiere desechar la preocupación y relajarse en el único día de descanso que tendrá antes de la extenuante jornada de trabajo que le espera esa semana. Una de las bancas del parque parece una buena opción para pasar un rato al aire libre con los rayos del sol en su rostro, al menos antes de que el calor aumente con la llegada del medio día.

Soul se recuesta sobre la banca con la intención de tomar una pequeña siesta.

La tranquilidad dura sólo un parpadeo antes de que una sombra bloqueara los preciados rayos del sol de su rostro. ¿Qué demonios?

—Hola —Maka llama su atención sosteniendo dos vasos de café—. La llamada se cortó el otro día y no pude decirte lo que quería. Fue una suerte que te encontrara aquí de nuevo, te compré este café por cierto. —Le tiende uno pero él no lo acepta.

Entonces así son las cosas, bien, Soul toma una decisión al respecto para evitar problemas.

—Hey Maka, mira creo que eres genial y eso pero ¿Por qué estás aquí? ¿Por qué sigues buscándome? —Él nota cómo el rostro de la chica se descompone y una emoción que Soul no logra identificar del todo cruza por sus hermosos ojos esmeralda—. Por si no lo has notado soy un chico. —insinúa con la esperanza de que ella capte su indirecta.

Ella sigue enviándole señales que él no sabe cómo interpretar, es como si ella estuviera interesada en él sin importarle su relación con la otra mujer.

—No soy ciega, obviamente sé que eres un chico ¿cuál es punto de todo esto Soul y por qué parece que estás evitándome? —Ella le da un sorbo casual al café aguardando su respuesta.

A ella no le importa que sea un hombre. Piensa Soul confundido.

— ¿Has dormido con un hombre alguna vez? —Se da cuenta demasiado tarde de lo que acaba de salir de su boca. Por tercera vez desde que la conoció, se quiere morir ahí mismo.

Maka casi se atraganta con su café tras la impetuosa y descarada cuestión de Soul.

— ¿Qué me dijiste? —Ella se prepara para darle un golpe.

Pero antes de que ella lo golpeara, él vuelve a abrir la boca.

—Escucha Maka, no soy un chico que apruebe la poligamia o el engaño, eso no es para nada genial. Creo que si ya tienes a esa chica como pareja no deberías seguir buscándome.

— ¿De qué demonios estás hablando Soul? —La contrariedad se apodera del semblante de Maka ante la sola idea de lo que las palabras del chico plantean—. No soy lesbiana y no tengo ninguna pareja.

—La chica de la fiesta, la de los enormes pechos… ustedes dos ¿no están saliendo?

La comprensión golpea a Maka cuando se da cuenta del motivo por el que Soul parece estar evitándola.

—Tsubaki es mi mejor amiga ¡Por dios Soul! ¿De dónde sacaste semejante estupidez?

Él no se atreve a delatar a Giriko porque tendría que explicar que ese imbécil le mintió debido a la mirada insistente que Soul le dio a Maka durante toda la fiesta. El silencio delata el tremendo error que acaba de cometer.

Soul no se atreve a mirarla a la cara por la vergüenza de haber quedado como un estúpido frente a esta chica, en vez de eso decide darle la espalda para huir de ahí antes de que ella decida muy justamente darle una bofetada o un puñetazo.

— ¡Soul regresa aquí y deja de evitarme malditasea! —Maka decide ir tras él para aclarar las cosas y quizá darle un par de golpes por el bochornoso momento que le ha hecho pasar.

Pero en su afán por darle alcance y hacerle frente, no se da cuenta del desnivel en el césped del parque hasta que grita de dolor cuando se tuerce el tobillo y cae al suelo.

El chillido de dolor detiene a Soul de inmediato haciéndolo mirar en dirección a la chica.

— ¡Maka!

Él corre hacia ella para ayudarla a levantarse, sin embargo el pie de Maka se niega a cooperar. Lo intentan de nuevo pero el resultado es el mismo y el dolor sólo se incrementa, sin pensarlo dos veces Soul le sugiere que se suba a su espalda para llevarla a cuestas hasta la motocicleta. Ella es reacia al respecto más por vergüenza ante la sola idea de estar tan cerca de él de esa manera.

—No seas terca Maka y sube a mi espalda para llevarte con Stein.

—Sólo necesito sentarme hasta que el dolor pase. —Ella insiste.

—Maldición ¿Por qué tienes que ser tan condenadamente terca? Será por las buenas o por las malas, tú decide —Soul resopla ante su actitud, cuando ella simplemente se cruza de brazos y esquiva su mirada entonces toma una decisión—. Perfecto, entonces será por las malas.

Sin previo aviso levanta a Maka y la toma por la cintura para echarla sobre su hombro a pesar de los gritos y los golpes que ella le propina para que la suelte, él no está dispuesto a ceder, si ella es terca, Soul puede ser diez veces más terco también.

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¿Por qué las cosas nunca salen a su favor? La clínica está cerrada y Stein no se encuentra en la ciudad.

Soul agradece al menos saber un poco de primeros auxilios mientras aplica un paño caliente y posteriormente venda el tobillo de Maka. No es el trabajo de un profesional pero al menos le ayudará a soportar el dolor y a recuperar un poco la movilidad.

Una vez que termina de atender la lesión él se ofrece a llevarla a casa pero Maka declina la oferta alegando que no quiere subirse a esa bestia motorizada, Soul la llama cobarde y la reprende por ofender de semejante manera a su hermoso bebé. Pero la comprende y en lugar de insistir, decide llamar a un taxi para que la recoja en su complejo de apartamentos y la lleve a casa.

Mientras esperan, entablan una conversación sobre lo desordenado que está el departamento de Soul con el montón de cajas dispersas por doquier, así como la intriga de Maka hacia el desgarbado piano que se impone en medio de una de las habitaciones que notó al llegar, sin mayor detalles Soul responde algunas de sus dudas y evade otras.

Falta poco para que el taxi arribe y Maka retoma la conversación inconclusa de la llamada telefónica.

—Te invito a una cita el viernes. —Ella es muy directa al respecto.

Es uno de los aspectos que Soul ha llegado a apreciar de la fugaz convivencia que han tenido hasta ahora. Sin embargo, tiene que aceptar que también es esa cualidad en ella la que lo hace sentir nervioso. Él estaba pensando en invitarla a salir pero es ella la que ha invertido los papeles al proponerle una cita sin vacilación.

— ¿Y qué te hace pensar que estoy interesado y aceptaré?

Eso es, hazte el interesante. Piensa Soul.

— ¿Qué es esto? ¿Un repentino ataque de "soy un chico genial"? —Ella se ríe de él—. Hacerte el difícil no te va Soul, como si no quisieras ir a esa cita.

—Pruébalo.

Bien, ella lo hará y borrará esa estúpida sonrisa arrogante de su rostro.

Maka lo toma desprevenido cuando sostiene su barbilla y lo mira directo a los ojos.

—Porque escuché todo lo que tu molesto amigo dijo por teléfono, así que te espero el viernes a las seis, iremos por una pizza.

Él se queda callado y perdido en esa decidida y arrogante mirada que causa estragos en su organismo, pero la sonrisa que esbozan los labios de Soul es la confirmación que Maka necesita para saber que la cita es un hecho.

Maka es diferente.

Es el único pensamiento en la mente de Soul mientras se inclina más hacia ella con la intención de robarle un pequeño beso, es osado, atrevido y está fuera de sí pero vale la pena intentarlo.

El momento se desmorona cuando el celular de Maka suena sin cesar. Ella se aparta de Soul y resopla con frustración cuando ve el nombre en la pantalla, todo el buen humor se evapora y ella ignora la llamada. De hecho lo hace cada vez que el teléfono comienza a sonar, después de diez intentos ella simplemente decide apagar el aparato.

Soul está a punto de cuestionar cuando el taxi arriba y ella se levanta con dificultad, la acompaña hasta el ascensor y bajan juntos a la entrada del complejo. Ayuda a Maka a subir al Taxi no sin antes molestarla un poco y hacerle un par de bromas.

Se despiden aún con el extraño remanente del pequeño momento del casi beso que compartieron, no es incomodo en absoluto pero todavía se siente frustrante.

Pero Soul mantiene la esperanza de que quizá exista otra oportunidad para ello.

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Continuará…

N/A:

Ha pasado algo de tiempo pero aquí está el capítulo.

Quizá el SoMa se siente muy apresurado pero es para fines de esta historia, que si bien es un SoMa de principio a Fin, la trama gira en torno a otro aspecto que ya verán en el siguiente capítulo XD

Por cierto, también me estoy tomando la libertad de usar el Ooc :3

En Fin, hasta la próxima…