Disclaimer:
La trama es original y está basada en los personajes de la serie animada "Miraculous: Les aventures de Ladybug et Chat Noir". Los personajes son propiedad de Thomas Astruc.
Los personajes originales así como las situaciones aquí presentadas son ficticios y cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia.
[PROHIBIDA SU COPIA]
Marinette bajaba desde su habitación tarareando una alegre canción.
- Buenos días, parece que alguien se ha levantado de buen humor y...temprano. - Sabine la saludaba con una caricia en la mejilla.
- Si, esta noche he dormido de maravilla y me siento genial. - por más que quisiera no se podría ocultar la felicidad en su rostro.
- Jaja, si llego a saber que el tener novio te haría madrugar y tener ese buen humor hace tiempo que yo misma hubiese hablado con Adrien.
- ¡Mamá! - exclamó sonrojada.
- Jaja no te voy abochornar más, pero sabes que digo la verdad.
La azabache apuró su vaso de leche y metió unas cuantas galletas en su bolso. Tomó un croissant y se acercó a su madre para darle un beso en la mejilla.
- Me voy al colegio.
- Que tengas buen día...y Marinette.
- ¿Si? - se giró hacia su madre desde la puerta de la vivienda.
- Pregunta a Adrien si le apetece venir hoy a cenar.
La azabache esbozó una sonrisa emocionada - Lo haré...gracias. Adiós - cerrando la puerta dejo a su madre con una expresión de felicidad al verla tan alegre.
Al llegar al colegio pudo ver a Alya junto con el resto de sus compañeras conversando al pie de las escaleras de entrada y más al fondo veía como los chicos se carcajeaban por algo que Kim les contaba. Con la mirada buscaba a su chico pero al parecer aun no había llegado.
- ¡Marinette! - Alya agitaba su brazo para llamar la atención de su amiga.
- Hola chicas. - saludó amablemente incorporándose al grupo - ¿De qué hablaban?.
- Oh, Un poco de todo, - respondió Alya con tono divertido - de la fiesta de Kim, de los chicos, de ti y de Adrien.
Todas las chicas notaron como los ojos de la azabache se abrieron de más, por inercia le mando una mirada acusadora a Alya, la cual supo interpretar.
- No, no, a mi no me mires que yo no he dicho nada, ellas solitas han sacado sus propias conclusiones. - dijo señalando al resto de las chicas.
- Vamos Marinette, ¿cuéntanos que paso entre ustedes?. - preguntó Mylène.
- Si, se les veía muy a gusto...muac...muac, jaja. - Alix aprovechó para sacarle los colores a su amiga.
- JaJaJa...- el resto de su amigas incluida Alya rompieron en risas.
Marinette solo las veía abochornada. - Vamos Marinette no te lo tomes así, Alix solo bromeaba. - Alya pasó su brazo por los hombros de su amiga apegándola a ella.
- Es verdad, es que los vimos hablando tan cerca uno del otro y cuando tú le acariciabas el cabello...¡oh Dios! se veían tan adorables. - Rose se tomó de las mejillas emocionada al recordar la escena entre ellos dos.
- Jeje - la azabache solo pudo reír por lo bajo ante la tierna expresión de su amiga, en cualquiera de los casos ellas se iban a enterar así que lo mejor era decírselo ahí mismo - Muy bien, ejem... Adrien y ...
- ¡Adrien! - el fuerte llamado de Kim interrumpió a la azabache haciendo que todas las chicas fijaran su atención en él.
Al bajar del coche lo primero que hizo Adrien fue buscar con la mirada a Marinette, al fin la vio junto a las escaleras de espaldas hablando con sus amigas. De inmediato se dirigió hacia ella, hasta que el grito de Kim lo distrajo de su objetivo, antes de darse cuenta sus amigos ya estaba a su lado.
Los ojos de la azabache brillaron en cuanto lo vio, su corazón comenzó a palpitar más rápido conforme él se acercaba, hasta que fue detenido por los otros chicos entonces un infantil puchero se mostró en sus labios.
- Jeje, aunque no dijeras nada con solo ver tu cara ya nos imaginamos lo que paso. - le susurró Alya.
Un ligero sonrojo en sus mejillas no se hizo esperar pero aun así no dejo de ver a su chico.
- ¿Entonces es verdad que le ganaste a Kim? - preguntó Max con libreta en mano tomando alguna anotación.
- Bueno, me parece que así fue. - respondió aun pensativo el modelo.
- Pero esa no es la cuestión. - intervino Nathaniel - Aquí el punto es como gano. - pequeñas risillas corrieron entre los chicos menos en Nino que frunció el ceño hacia el pelirrojo.
- Es mejor que no empiecen con la broma, ya se rieron antes así que ahora déjenlo pasar. - habló el moreno centrándose en cada uno de los ahí presentes.
Adrien miraba confuso a su amigo ya que no entendía a lo que se refería.
- Vamos Nino, no tiene nada de malo. Seguro que no es culpa de él. - ahora Kim era quien buscaba reírse un poco a costa del rubio.
- ¿Nino, de que están hablando? - inquirió curioso.
- Bah, no les hagas caso, hoy han empezado el día tontos.
- Venga Adrien, ¿no nos vas a decir que ganaste porque aun no has besado a una chica?. - Adrien entendió por fin de que iba todo eso.
Las risas entre los chicos se hicieron presentes una vez más, consiguiendo atraer a algunos curiosos a la conversación.
Las chicas quien también habían escuchado el comentario veían con desaprobación la actitud burlona de sus compañeros hacia el joven modelo especialmente cierta azabache, tomando la iniciativa se dirigió hacia el grupo de chicos seguida por sus compañeras.
- Jaja, otra vez la princesa viene a cuidar del príncipe. - esta vez fue Kim quien soltó el mordaz comentario en cuanto vio a Marinette.
Marinette tomó de la muñeca a Alya quien ya iba dispuesta a poner en su sitio al pesado de su compañero y le hizo una seña de negación con la cabeza.
La azabache miró retadora al grupo de chicos y con paso cadencioso fue hacia el rubio, quien la miraba divertido.
- Te equivocas Kim mi príncipe sabe cuidarse perfectamente solo. - dijo mientras caminaba hacia su chico.
Los murmullos no se hicieron esperar, Alya ya tenía preparado su teléfono en la mano y miraba con satisfacción a su amiga.
- ¿Acaba de decir mi príncipe? - preguntó una confundida Alix a Rose.
Al llegar junto a Adrien, entrelazó su mano con la de él ante la atenta mirada de todos.
- Su princesa solo viene a decirle buenos días. - sonrió coqueta ante sus vivaces ojos verdes.
De nuevo los murmullos hicieron acto de presencia.
- ¿Acaba de decir su princesa? - volvió Alix a preguntar a Rose quien miraba con ojos temblorosos y puños apretados ante lo que se avecinaba.
Marinette afianzó la camisa de Adrien por el frente con sus dos manos y tiro de él a la vez que se ponía de puntillas para compartir un beso que ante los ojos desorbitados de sus compañeros iba tomando intensidad. Adrien dejo caer su cartera para tomar a su princesa por la cintura y estrecharla contra él, ella soltó la camisa y se afianzo a su cuello, por un momento se olvidaron de la gente y de donde estaban, el ahí y el ahora eran solo ellos dos.
Menos Alya que mantenía una sonrisa de complicidad mientras grababa con su teléfono, todos los demás estaban boquiabiertos, mirando estupefactos a la joven pareja.
La campana del colegio empezó a sonar avisando del inicio de clases, Marinette y Adrien seguían ausentes del mundo, solo disfrutando del dulce contacto entre ellos. Los chicos que estaban presenciado el efusivo momento comenzaron a retirarse aun con la mirada puesta en la joven pareja, solo sus compañeros de clase siguieron a la espera.
- ¿No deberíamos decirles algo? - susurró Nino al oído de Alya.
- Jiji, voy a ello. - la morena se acercó - Ejem...ejem - carraspeo pero nada, ellos seguían a lo suyo - ¿Eh, chicos?, las clases acaban de comenzar - intentó de nuevo.
Marinette y Adrien poco a poco empezaron a separar sus labios aun con alguna renuencia por parte de él, al final solo quedaron unidos por sus frentes contemplándose en silencio.
Adrien se siente lanzado hacia atrás viendo como lo separan de su princesa, Kim lo sostenía por el hombro.
Al momento las chicas rodearon a Marinette atosigándola a preguntas.
- Muy bien Agreste nos ha quedado claro a todos así que quiero mi revancha y esta vez no habrá más "no he besado a una chica". - Adrien solo sonreía ante la seriedad del reto del deportista.
- Kim, déjalo sabes que Adrien no bebe. - intervino la azabache saliendo de entre sus amigas.
Adrien tomó la mano de Kim y la quito de su hombro para ir al lado de su novia - Lo siento Kim ya has oído a mi princesa. - y sin más la tomó de la mano para entrar al colegio ante la mirada divertida de sus compañeros.
Cerca del colegio se escuchó un estrepitoso estruendo, todos miraron asustados la columna de humo negro que empezaba asomarme por encima de los edificios.
- ¡Debe ser un akuma! - exclamó Alya que revisando su teléfono se preparó para grabar a los héroes de Paris en acción.
- ¿Gatito? - susurró con mirada cómplice hacia su chico.
- Después de ti mi Lady. - respondió con una reverencia antes de desaparecer ambos por la puerta del colegio.
Al instante la gente pudo ver como los héroes se movían con gracia entre los tejados. Se detuvieron antes de llegar junto al villano para evaluar la situación.
- Este será sencillo. - dijo confiada la heroína, cuando Chat Noir se iba a lanzar al ataque lo detuvo por el brazo - Ah por cierto, mi madre quiere que vengas a cenar hoy. - dijo sonrojada.
- ¿Solo hoy bichito? - respondió con una sonrisa ladina.
- Tonto...te espero a las ocho. - se puso de puntillas para darle un corto beso y lanzarse al ataque.
Chat Noir se quedó embelesado mirando a la heroína. Como amaba a su chica...a sus dos chicas.
FIN
