Un mundo Ideal
"Taniguchi-senpai!"
Al escuchar el sonido proveniente detrás de ella, Harumi Taniguchi apresuró el paso, queriendo evitar al molesto gremlin que se encontraba caminando deprisa para alcanzarla.
Harumi se lamentaba mentalmente.
¿por qué no podía tener una tranquila caminata a su escuela?¿Por qué siempre tenía que aparecer Matsuri para molestarla tan temprano?
"Taniguchi-senpai, espera un segundo"
Harumi no dejó de caminar e incluso lo hizo más rápido.
Sea lo que sea que quisiese Matsuri ahora, iba a esperar hasta el almuerzo, cuando Harumi terminara por despertarse y tuviera un rico desayuno.
"Sé que estás escuchándome y será mejor que pares o haré un escándalo ahora delante de todos hasta que me prestes atencion"
Harumi paró en seco, lo que menos quería era ser victima de los juegos de Matsuri, pero también odiaba que las personas se le quedarán mirando cada que la pelirosa hacia un berrinche a media calle.
"Está bien ¿Qué es lo que quieres Matsuri?"
"Te reto a un juego para tener una cita contigo"
Harumi volvió a apresurar el paso.
"Oye espera, ni siquiera has oído todo lo que tengo que decir" se quejaba Matsuri, por fin alcanzando a Harumi.
"No voy a tener una cita contigo solo porque me lo pides así. Eso no va a pasar".
"Lo sé, y por eso tengo un reto para ti. Si ganas no tendrás que ir a una cita conmigo, pero si pierdes nos vemos el sábado en el centro comercial"
"¿Qué te hace creer que aceptaré uno de tus juegos?"
"Qué bien que lo preguntas" Matsuri sonrió diabolicamente mientras sacaba su celular de su bolso."Recuerdas hace una semana que fuimos a una pijamada en casa de Yuzu-chan?
"Sí ¿y qué?"
"Bueno, recuerdo que vivos un maratón de películas de Disney y tengo un video inedito de ti cantando Let it go con Yuzu-chan a todo pulmón y eso para nada fue muy gyaru de tu parte, Taniguchi-senpai."
"Pequeño demonio, no puedes chantajearme con algo como eso"
"Pruebame"
Harumi y Matsuri en ese momento estaba mirándose la una a la otra podía creer que Matsuri haya grabado eso y para colmo la estuviera chabtajeando ahora con divulgarlo por ahí. Su reputación claramente se vería muy afectada, pero no quería seder en lo juegos y caprichos de ese demonio de pelo rosa.
Por otro lado, porqué tenían que jugar, ¿no sería más simple que le pidiera una cita como una persona normal, sin chantajes o sin retos? Demonios, incluso ella aceptaría con algo así.
"Y bien cuál es el juego"
"No te preocupes, será algo sencillo. Sé cuanto te gustó la película de Aladdín, especialmente la parte donde canta con Jasmín en la alfombra mágica"
Esto no se escuchaba bien.
"Cantaré "Un Mundo Ideal" para ti, y no debes pronunciar ninguna parte de la canción o perderás si cantas conmigo ¿Qué te parece?"
Ni en un millón de años, cataría algo así con Matsuri. Sería muy fácil ese reto.
"Muy bien, acepto"
"Ok, entonces empezaré justo ahora"
"¿Qué? ¿En serio?"
Yo te quiero enseñar
este mundo espléndido,
ven princesa y deja a tu corazón soñar.
Yo te puedo mostrar
cosas maravillosas,
con la magia de mi alfombra
vamos a volar...
A pesar te Matsuri cantaba muy bien, Harumi no cedió en ningún momento y cuando llegaron a la escuela, Matsuri había cantado la canción tres veces y no había pasado nada.
"Suerte para la próxima Matsuri" Sonrió Harumi.
"Esto no ha terminado" Gritó la pelirrosa.
En la hora del almuerzo Harumi estaba en su salón alistando para salir a la cafetería.
"Oye Harumi, ¿Sabes porqué Matsuri biene hacia acá cantando "Un mundo Ideal"?" Preguntó Yuzu extrañada.
"¿Qué? ¿Todavía no se rinde?"
Harumi estaba sorprendida por lo obstinada que era la chica.
Un mundo ideal, será fantástico encontrar,
nadie que diga no, o a donde ir,
a aquellos que se aman.
Un mundo ideal,
tan deslumbrante y nuevo,
donde ya vi al subir, con claridad,
que ahora en un mundo ideal estoy
"Oh por Dios" Harumi se lamentaba de haber aceptado ese reto.
En la cafetería, todas las chicas estaban almorzando juntas e incluso Mei y el consejo estudiantil estaban presentes.
"Ahora en un mundo ideal estoy"
"¿Alguien sabe porqué Mizusawa a estado cantando esa canción toda la hora del almuerzo?" Preguntó Momokino molesta.
Todas dirigieron la mirada a Harumi.
"Creanme, no les gustaría saber"
Todas intentaban ignorar la voz de Matsuri, pero al parecer Mei no estaba dispuesta a aguantar más.
"¿Matsuri puedo hablar contigo un segundo?"
Mei y Matsuri fueron a hablar en privado y cuando regresaron, Matsuri estaba muy callada.
Silenciosamente Harumi le agradeció a Mei y dio gracias también por la influencia que tenía la pelinegra sobre la menor.
Matsuri apareció nuevamente en él salón de Harumi, aprovechando que Mei había salido para arreglar unos asuntos.
Fabulosa visión, sentimiento divino,
baja y sube y vuela hacia celestial región...
Un mundo ideal...
Matsuri pasaba por el salón de Harumi, y sólo paró de cantar cuando vio entrar a Mei nuevamente.
"Gracias Mei-san" suspiraba Harumi.
Como era costumbre Yuzu y Harumi estaban en detención cuando...
Mira bien lo que hay...
Allí mil cosas voy a ver...
Conteniendo el aliento...
Soy como azul estrella que se va
y nunca será igual ya otra vez.
"Matsuri, ¿puedes dejarme en paz tan solo un segundo?"
Un mundo ideal...
Cada vuelta es sorpresa...
Un horizonte nuevo abrir.
Cada instante un relato...
Regresando a casa Harumi caminaba con cautela intentado no cruzarse con Matsuri, por supuesto falló en el intento.
Matsuri estaba parada justo delante de ella, estirando su brazo, incitando a Harumi a cantar junto a ella.
Hay que seguir sin fin, hasta el confín,
juntos en un mundo ideal tu y yo...
Un mundo ideal...
Harumi se rindió.
Un mundo ideal...
Cantó ella por fin.
Que compartir...
Matsuri le siguió
Que compartir...
Que alcanzar...
Que contemplar...
Al final las dos terminaron juntas.
Tu junto a mí...
Matsuri saltó victoriosa.
"Excelente, nos vemos el sábado a las 2:00 pm" Harumi fue corriendo hacia donde estaba Harumi, dándole un beso en la mejilla y salir disparada a su departamento.
"Está chica me volverá loca algún día"dijo Harumi, con una pequeña pero significativa sonrisa en su rostro.
