La historia de Abbott

El sol caía a chorros sobre un campo extenso lleno de crecida hierba. Los pájaros cantaban. No parecía en absoluto el escenario donde un villano se hallaría sentado, contemplando lo que había hecho, y lo que iba a hacer. Pero así era.

Sus ojos estaban rodeados de una sombra oscura, inexpresivos y distantes. Sus labios ligeramente abiertos. Parecía alguien perdido, una persona absorta en otra realidad.

-Todos me han abandonado -dijo en voz alta, en solo un susurro, a pesar de que no había nadie más allí-. Todos me han traicionado.

Se oía el canto de los pájaros, distantes, en árboles alejados y perdidos entre la vegetación. Las manos del villano colgaban sobre la hierba. Su rostro no indicaba maldad: solo una profunda tristeza, una mirada algo desorbitada, un pequeño dejo de demencia. Era alguien que había sufrido golpes muy duros.

-No tuve más remedio -dijo en otro susurro-. No había otra opción… Tenía que matar a Harry. Tenía que hacerlo…

Sus ojos centellaron levemente. Su cabello se despeinó con el viento. Su cabeza se inclinó un poco de lado. Era como si su mente estuviera lejos, muy lejos de allí.

-Y ahora tendré que matar a los demás. A todos. Ninguno podrá seguir con vida.

…

-Aquí tengo el perfil de los cinco sospechosos -dijo Abbott, caminando rápidamente por su oficina, una sala pequeña y muy oscura, con solo un par de velas encendidas, sin ventanas reales ni aquellas otras, las mágicas, que el Ministerio tenía simulando un sol exterior.

Solo había dos personas en el claustrofóbico despacho: él y su compañero.

-Como sabe, Goldstein -dijo Abbott, mientras se paseaba con un dedo en el mentón y jugando con una extraña pipa mágica en la mano, un objeto que no dejaba de lanzar humo de distintos colores, sofocando aun más el ambiente-, Los Originales 6 es un apodo que el grupo de amigos conformado por Harry Potter, Ron y Ginny Weasley, Hermione Granger, Luna Lovegood y Neville Longbottom adoptaron brevemente luego de finalizada la Segunda Guerra Mágica.

Dio una calada a la pipa antes de continuar su discurso:

-En el verano de 1998, dos meses después de concluida la Segunda Guerra Mágica, los seis estuvieron de vacaciones en playas de Francia. Allí, se han hecho un tatuaje cada uno con el símbolo de un triángulo, una línea y un círculo, conocido como el símbolo de las Reliquias de la Muerte, con el agregado de un número "6" dentro. Este símbolo había tenido un significado importante para todos ellos durante el final de la Segunda Guerra, y acordaron realizarle un encantamiento al tatuaje mágico que los alertaría si alguno de los seis traicionaba algún día al equipo.

"Bien, luego de esto han transcurrido quince años en los que la amistad de los seis jóvenes se vio alterada por diversos sucesos. El más reciente y el que tuvo más repercusión fue la infidelidad de Harry Potter hacia su esposa, Ginny Weasley, con nada menos que otra de Los Originales 6: Hermione Granger. La infidelidad se hizo pública cuando la periodista Kristen Skeeter, hija de la reconocida Rita Skeeter, filtrara la información y la publicara en la revista Corazón de Bruja. El escándalo no tuvo tanta repercusión por la fama de Harry Potter, actualmente menor que en las épocas de la Segunda Guerra; sino, lógicamente, por la de Hermione Granger. Al ser la actual Ministra de la Magia, por supuesto que la noticia se esparció por todos lados enseguida.

"La pareja nunca se divorció oficialmente: hasta el día de su muerte, Harry Potter seguía casado con Ginny Weasley; pero se lo ha visto en numerosas ocasiones con una nueva compañera, Cho Chang, desde hace algunos meses. Jamás se lo ha vuelto a relacionar con la ministra Granger, y no se ha hablado nuevamente con Ginny Weasley.

"Sin embargo, este no ha sido el único episodio que alterara la relación entre los seis miembros originales del grupo. De acuerdo a este recorte de la misma revista Corazón de Bruja, pero de 2002 -señaló uno de muchos recortes periodísticos que había sobre el escritorio-, Neville Longbottom ha sido ridiculizado por un periodista en una breve nota en la que asegura que el muchacho estaba locamente enamorado de otra persona del grupo, Luna Lovegood. Sin embargo, ella pareció rechazarlo, lo cual llevó a que dejaran de hablarse. La nota es muy breve y parece estar destinada únicamente a burlarse de Longbottom, pero no ha tenido una gran repercusión.

"El muchacho ha sido elegido director de Hogwarts en años posteriores, luego de una carrera de varios años a cargo de la asignatura de Herbología, y actualmente no tiene vínculo alguno con el resto del grupo. De hecho, ninguno de los seis ha tenido vínculo alguno entre sí en los últimos tiempos. Han estado completamente separados desde hace ya tiempo, y no hay registros de que ninguno de los seis se haya vuelto a hablar entre sí.

Abbott hizo una pausa para dar otra calada a su pipa, mientras se refregaba sus cansinos ojos con el puño.

-¿Qué sabemos de Luna Lovegood? -preguntó Goldstein, con aire sospechoso.

-Dejó la casa de su padre poco después de terminar Hogwarts -relató Abbott, retomando su caminata alrededor del despacho-. Su más grande ambición era recorrer el mundo para investigar criaturas mágicas extraordinarias en las que solo ella y su padre creían. A pesar de que ha habido artículos periodísticos desmintiendo la existencia de tales criaturas -señaló otros artículos que había recolectado-, ella continuó su búsqueda incansablemente. Hay muchos artículos de los Lovegood en El Quisquilloso, el periódico de su padre que luego pasó a administrar ella misma, sobre los viajes que Luna Lovegood realizó y sus intentos por encontrar al Snorkack de Cuernos Arrugados, una supuesta criatura mágica de la que jamás existieron pruebas de su existencia.

-¿Y encontró algo?

-Nada interesante, solo hallazgos poco creíbles, como lo que suele publicarse en esa revista. Luego de unos años abandonó los viajes y se dedicó a administrar el periódico a tiempo completo. Tampoco se ha vuelto a hablar con los demás miembros de Los Originales 6 pasado un tiempo.

-¿Sabemos algo de su paradero el día del homicidio?

-Sí, estaba en casa de su padre. Xenophilius lo respaldó, aunque no es un gran testimonio tratándose de su padre, ¿verdad? No asistió a la reunión de ex alumnos de Hogwarts porque claro, no estaba invitada. Como usted sabe, era una reunión para la promoción 1998, en la que estaban Potter, Ron Weasley, Granger y Longbottom. Pero Lovegood no pertenecía a esa promoción. Tampoco Ginny Weasley. Ambas se egresaron en 1999 y no tenían motivos para asistir allí ya que no tenían más vínculos con los demás invitados.

-¿Y ella? ¿Qué hay del paradero de Ginny Weasley esa noche?

-Aparentemente estaba en su casa esa noche, sola. Nadie pudo confirmar su testimonio ya que dice haberse ido a dormir temprano y no haber hablado con nadie.

-¿Es creíble?

-Bueno, lleva viviendo sola desde que se separó de Potter. Ya la interrogué y me dio toda la impresión de ser una persona solitaria que muy probablemente pasa todas sus noches sola, sin hablar con nadie. Así que sí, es un testimonio creíble.

-¿Usted le cree, Abbott?

El auror hizo una pausa con el pico de la pipa en la boca y volteó lentamente hacia su compañero.

-Aún no puedo estar seguro -dijo finalmente-. Esperaré a haberlos interrogado a todos antes de emitir una opinión personal.

Su compañero asintió y anotó algo en una libreta que llevaba, muy concentrado.

-En cuanto a Ron Weasley, Neville Longbottom y Hermione Granger, pasó algo muy extraño esa noche. Varios testigos, como usted sabe, han dado testimonio y afirman no haber visto a ninguno de los tres momentos antes del homicidio. Los tres dieron coartadas muy simples pero a su vez efectivas: Ron Weasley dice haber estado en el baño, Longbottom dice haber ido a su despacho a escribir un rápido memo que había olvidado esa tarde (recordemos que es el director del colegio y por lo tanto vive allí), y Granger dice haber subido a la lechucería rápidamente a enviar una carta, también por temas laborales, ya que al ser la Ministra de la Magia no puede "desvincularse de sus obligaciones ni siquiera una noche", según sus palabras.

Los dos hicieron un breve silencio, que Abbott rompió:

-Si no fuera por los tatuajes, ninguno de estos cinco individuos serían mis principales sospechosos. Pero luego de haber tomado conocimiento de aquello… Si hay algo en que los cinco están de acuerdo, es que, si el tatuaje les ardió, eso significa que uno de ellos cometió una traición. No cualquier traición, sino una muy importante. ¿Ha podido investigar al respecto, como le pedí?

-Sí, Abbott. Investigué la casa de tatuajes en Francia y hablé con un experto en la magia que utilizaron para hacer el hechizo. Ambos corroboran la historia: ese es el funcionamiento real del hechizo de la confianza.

-Pero por supuesto, alguien que estaba durmiendo en su casa, o en el baño, o escribiendo un memo o una carta, o cenando con su padre, no se puede decir que estuviera cometiendo una "traición" hacia el grupo en ese momento. Por lo que queda claro que la traición tuvo que ser el asesinato de Harry Potter, y que por lo tanto fue uno de ellos cinco el o la que lo cometió.

Su compañero arrugó la frente unos instantes.

-Quizás… -dijo, pensativo-, podría haber otras posibilidades. ¿No es así? Podría haber muerto por otro motivo, asesinado por alguien más. Y, al mismo tiempo, uno o varios de ellos podrían estar mintiendo. Quizás sí cometieron una traición hacia el grupo, pero no el asesinato de Potter, sino otra cosa. Otra infidelidad, por ejemplo. Y el motivo por el que mienten es que no quieren que nadie sepa de aquello otro que hicieron.

-Sí, pero, ¿se arriesgarían a quedar implicados directamente en un asesinato? No lo creo, Goldstein. No es delito serle infiel a una pareja. Nadie se arriesgaría a ser condenado a Azkaban por asesinato e investigado día y noche por no admitirle, en privado y de forma confidencial, a un auror que le fue infiel a su pareja en vez de ir al baño. No, creo que no hay dudas aquí…

Abbott caminó lentamente hasta una pizarra colgada en la pared, donde había cinco fotografías de cinco personas distintas, que se movían: Ron, Ginny, Luna, Neville y Hermione.

-El asesino fue uno de ellos cinco -sentenció, asintiendo muy seriamente.

Su compañero se quedó un buen rato mirando las fotografías también. Parecía como si a los dos aquella posibilidad les pareciera extraordinaria, muy fuera de lo común. Pero no había otra interpretación.

-Usted ha hecho dos interrogatorios hasta ahora, ¿verdad? -dijo Goldstein, retomando sus apuntes y dando vuelta a las páginas-. Ginny Weasley fue uno de ellos. ¿Cuál fue el otro?

-Ron Weasley -dijo Abbott. Caminó hasta su silla y, finalmente, se sentó. -Nos encontramos ayer a la tarde, en La Madriguera. Estaba visitando a su familia luego de mucho tiempo sin verse.

-¿Pudo averiguar algo?

-No, no demasiado… -se quedó pensativo-. Ron Weasley ha estado casado con Hermione Granger y tuvieron una hija en el 2008, Rose Granger-Weasley. Como usted sabe, la niña estuvo involucrada en aquel accidente en Rumania, el que acabara con la vida del pequeño James, el hijo único de Potter y Ginny Weasley.

Goldstein asintió, con expresión afligida.

-Aun sigue con asistencia psicológica, aunque su padre dice que está mejorando mucho. Después de todo, solo tenía dos años. Pero aun así… ha sido algo terrible, incluso para esa edad. Si bien Weasley visita a su hija con frecuencia, dice que siempre es su abuela la que está allí para recibirlo y con la que tiene trato, la madre de Granger. Su ex esposa siempre tiene alguna excusa para esquivarlo: trabajo, sobre todo. Su relación terminó para siempre el mismo día que la de Potter y Ginny Weasley: cuando se supo de la infidelidad.

-Y allí mismo se cortó el vínculo entre Potter y Ron Weasley, que antes eran mejores amigos, ¿no es así?

-Exacto. Bueno, en verdad se habían distanciado un poco luego de que Weasley dejara el departamento de aurores, como usted sabe, para trabajar con su hermano en Sortilegios Weasley. Por motivos de trabajo, claro. Pero él asegura que seguía viéndose con Potter los fines de semana, y luego de eso quizás una vez al mes. Pero luego de la infidelidad, no volvieron a cruzar palabra.

Hubo otro instante de silencio, en el que ambos hombres se miraron el uno al otro, con rostros de preocupación y seriedad.

-Resulta increíble que uno de ellos cinco hiciera esto -comentó Goldstein en voz baja, mirando una fotografía que estaba sobre el escritorio también, una fotografía del cadáver de Harry Potter colgando de una lámpara de pared en un corredor de Hogwarts.

-Lo sé -dijo Abbott, masajeándose los ojos nuevamente-. Y siendo una de las principales sospechosas la Ministra… este caso podría convertirse en el más importante de nuestra carrera.

-Pero Granger… Es decir, tenemos que incluirla en la lista de sospechosos por protocolo, pero ella no pudo haber sido. Es imposible. Conocemos a la ministra…

-Un consejo, Goldstein -dijo Abbott, con una expresión en el rostro que indicaba experiencia-. Jamás se deje llevar por la impresión que tenga de la gente, en especial si cree conocerlos… No siempre está a la vista quiénes son realmente. Por otro lado, como usted bien sabe, el mensaje en la pared fue claro: en teoría, estamos tratando con un asesino en serie.

Otra breve pausa.

-Un asesino en serie que irá a cazar a los otros cuatro miembros del viejo grupo de amigos que aún siguen con vida.

-Y que en teoría es también uno de ellos…

-Lo que deja en el aire, inevitablemente, la pregunta…

-Si el modus operandi es así realmente…

-Si realmente intentará matarlos a todos, siendo él o ella a su vez uno de los seis miembros originales del grupo…

-…Entonces al finalizar su trabajo acabaría delatando su identidad, irremediablemente.

-Exacto. Porque habrían muerto los otros cinco, y él o ella sería el único aún con vida.

-Por supuesto, el perfil de estas personas parece conducir a alguien afectado psicológicamente, alguien que no solo podría buscar venganza, sino que quiere llamar la atención.

-Colgarlo en la pared, el día en que todos estaban allí reunidos…

-Y usted sabe lo que eso significa, Goldstein.

-Un perfil con graves conflictos y problemas psicológicos podría llevar a un desenlace fatal para el mismo asesino al final… un potencial suicidio.

-Ese es su verdadero plan -dijo Abbott, asintiendo con gravedad-. No existe forma de que los asesine a todos y se salga con la suya. Si realmente lo hace, e intenta asesinar a los otros cuatro miembros del grupo, su plan tendrá que concluir con un suicidio. O con una confesión, lo que sería menos probable.

-Se quitará la vida a sí mismo o a sí misma luego de haber matado al último de sus ex mejores amigos.

Los dos hombres compartieron otra mirada, y entonces Goldstein se volvió en su asiento para mirar atentamente las fotografías de los cinco jóvenes clavadas en la pizarra en la pared.

-No sabemos cuánto tiempo tenemos. Si está dispuesto a hacer esto, podría estar planeando el segundo asesinato en este mismo momento.

-Tenemos que detenerlo antes de que lo haga.

-Pero para eso, mi querido compañero, tenemos que resolver el enigma -Abbott también miró hacia las fotos en la pizarra, frunciendo el ceño y más preocupado que nunca-. ¿Quién de ellos es el asesino?