Capítulo 1: "Información y decisión"

En el pueblo o en la ciudad, se encontraban caminando cinco adolescentes, los cuales eran: Midoriya, Uraraka, Todoroki, Momo y Bakugo. Los cinco llevaban diferentes ropas de ese tiempo: Midoriya llevaba una camisa blanca, pantalones marrones y una gorra para ocultar su cabello; Uraraka llevaba un vestido marrón, un delantal blanco y un pañuelo blanco en la cabeza; Todoroki llevaba una chaqueta marrón y debajo una camisa verde, pantalones marrones y, al igual que Midoriya, una gorra; Momo llevaba un vestido de color verde claro en la parte superior del cuerpo y en la inferior verde oscuro, además de traer un delantal blanco y un pañuelo en la cabeza como Uraraka; y Bakugo traía una chaqueta verde con una camisa roja debajo y pantalones negros.

Pero ¿Se estarán preguntando qué pasó con los demás, cómo consiguieron bajar del muro, y de dónde sacaron esa ropa? Aquí tienen la respuesta. Resulta que los estudiantes de la U.A se dieron cuenta que, para no llamar la atención, solo tendrían ir cinco de ellos. Momo y Uraraka podían ir debido a su apariencia normal, mientras los demás tuvieron que decidirlo a la suerte. Momo creo cinco palos, tres grandes y dos pequeños; quienes sacaran los grandes irían, y quienes sacaran los pequeños se quedarían. Bakugo sacó el más grande, Shoto el segundo, Midoriya el tercero, y Kaminari y Eijirio los más pequeños.

Una vez decidido quienes irían a investigar, lo siguiente era bajar del muro sin ser detectados. Momo creo una manta del mismo color que el muro, mientras Uraraka usaba su peculiaridad para que descendieran lentamente. Al aterrizar, Midoriya se prepararon para irse, no sin antes de desearles suerte a sus compañeros, los cuales también hicieron lo mismo.

Y ahora el siguiente pasó era conseguir ropa. Está parte del plan fue sencilla, solo consistía en distraer a los mercadores, mientras ellos tomaban las ropas. Casi querían dejarles dinero, pero no podían por dos razones; la primera, no tenían dinero, y la segunda era que si tuvieran, probablemente no sería reconocible para este tiempo. Y ahora que estaban listos, tocaba la parte difícil, buscar una biblioteca e investigar.

"Muy bien. Ahora sigue investigar el lugar en dónde estamos y porque viven dentro de este muro", dijo Midoriya.

"Lo más probable es que se estén escondiendo de algo que vive en el exterior", sugirió Todoroki.

"Pero si fuera así", continuo Momo.

"¿De qué se estarán escondiendo?", término Uraraka.

"¿Y a quién le importa de lo que se escondan? ¡Solo encontremos esa maldita biblioteca!", dijo Bakugo enojado.

Aunque un poco molestos al principio por el desinterés de su compañero, decidieron ignorarlo y seguir adelante. Después de horas de búsqueda, al fin lograron encontrar una. Entraron y rebuscaron unos libros de historia que hallaron. Siendo sinceros, la información no era lo que todos esperaban.

Según esto, hace 100 años aparecieron unas criaturas conocidas como titanes, las cuales se alimentaban de la gente. La humanidad parecía acabada, hasta que se construyeron tres murallas nombradas como María, Rose y Sheena, estás eran tan altas que ningún titán era capaz de pasarlas. Pero la humanidad no iba a quedarse atrás, se crearon ejércitos, regimientos y algo llamado equipo ODM para poder enfrentar a los titanes, sin embargo la humanidad nunca tuvo oportunidad en su contra y siguieron perdiendo. Los adolescentes salieron de la biblioteca completamente impactados.

"Así que… por eso se están escondiendo detrás de estás murallas", dijo Midoriya aún impactado.

"Siento mucha pena por estas personas", dijo Uraraka entristecida.

"Esos titanes deben ser una verdadera amenaza para la humanidad", dijo Momo.

"A demás de que nunca obtuvieron una victoria contra ellos", dijo Todoroki.

"O vamos. Es muy obvio que la única razón por la que siempre pierden es porque no tienen peculiaridades", dijo Bakugo.

"¡Bakugo! ¡No seas insensible!", dijo Uraraka enojada.

"¡Tú no me des ordenes cara redonda!", dijo Bakugo molesto.

"¿¡Cómo me llamaste!?", pregunto Uraraka molesta.

"Muchachos, ¡Ya cálmense!", dijo Midoriya. "Ahora tenemos que concentrarnos en lo que hay que hacer ahora".

"Y pelear entre nosotros no ayudara", dijo Momo.

Uraraka seguía molesta con Bakugo, pero sabía que ahora tenía que enfocarse en lo importante. Bakugo también decidió dejar está discusión de lado. Aunque no lo parecía, Bakugo internamente sentía lastima por estas personas.

"Muy bien. ¿Ahora qué hacemos?", pregunto Todoroki.

"Estamos atrapados aquí y aparentemente no hay manera de volver. Además de que no tenemos lugar al cual ir en este momento", dijo Momo seria.

"Entonces ¿Qué podemos hacer? Incluso si nos mezclamos entre estas personas ¿Qué hay de los demás? No podrán esconderse para siempre", dijo Uraraka preocupada por sus compañeros.

"¿Porque simplemente no nos quedamos arriba de esa cosa?", pregunto Bakugo irritado.

"Porque podrían descubrirnos y tendríamos que escondernos como los demás", respondió Todoroki.

Mientras los demás discutían que había que hacer a continuación, Midoriya trataba de pensar. Había muchas cosas en su contra. No tenían lugar donde quedarse, sus otros amigos no podrían ocultarse eternamente, ¿y sí aparecían esos titanes y lograran pasar el muro en el que están? ¡Algo tenía que haber! ¡Algo en lo que pudieran ayudar! Fue con ese pensamiento que se le vino una idea.

"¡Chicos! ¡Tengo una idea!", dijo Midoriya con entusiasmo. Los demás dejaron de discutir y le prestaron atención. "¡Podríamos unirnos al ejercito!".

Hubo un momento de silencio entre los adolescentes al escuchar la idea descabellada de Midoriya. Después de unos incomodos segundos, Bakugo responde.

"Déjame ver si escuche bien, Deku ¿Quieres que nos unamos a un tonto ejército, y para que, destruir titanes? ¡Eso es absurdo!", dijo Bakugo con molestia.

"Pero, Deku-kun, ¿De dónde salió esa idea?", pregunto Uraraka con curiosidad.

"*jadeo* Es que pensé… que como aun no hallamos una forma de regresar casa, tal vez… podríamos intentar ayudar a estas personas", explico Midoriya un poco nervioso.

"Es una buena opción, pero hay un problema, Midoriya", dijo Todoroki llamando la atención de este. "Sabes muy bien los riesgos que corremos al unirnos ¿Verdad? ¿Te unirías al ejército aunque sospecharan de nosotros por nuestro aspecto, y eso podría provocar que nos descubrieran? ¿O preferirías ser devorado vivo por un titán o vernos a nosotros ser devorados?", le pregunto a continuación.

Midoriya se asombró por las preguntas de su amigo. Agacho la cabeza pensando en lo podría ocurrir si eso pasara, si los descubrieran o si él o sus amigos eran devorados por titanes. Apretó los puños mientras levantaba la cabeza, pero no con miedo, sino con determinación. Con la pasión y el espíritu de un héroe en su interior, respondió, "Sí".

Está respuesta sorprendió a todos. Ellos también tenían sus dudas de hacer esto al principio, pero al ver la determinación de su compañero, sabían que necesitaría ayuda para salvar a la humanidad.

"Deku-kun, ¡Cuenta conmigo!", dijo Uraraka con determinación

"Hagamos esto, por el bien de la humanidad", dijo Momo decidida.

Todoroki sonrió al escuchar esta respuesta mientras asentía con la cabeza. Todos hacía Bakugo para ver que tenía que decir, simplemente gruño mientras desviaba la mirada, dando a entender a los demás que estaba de acuerdo.

"¡Muy bien! ¡Vamos a buscar dónde se alista el ejército y nos inscribiremos!", dijo Midoriya con determinación.

"¡Sí!", gritaron Uraraka y Momo con alegría, mientras Todoroki sonreía y Bakugo estaba un poco molesto de que tenga que unirse a un maldito ejército.

Un año después

Midoriya narrando:

"Aún no puedo olvidar el día en el que aparecimos aquí. Después de inscribirnos al ejército, pasaron muchas cosas. Primero tuvimos que encontrar un lugar al cual quedarnos, por suerte había un refugio que estaba disponible y solo para nosotros. Luego de encontrar un lugar al que quedarnos, tuvimos que encontrar la manera de comunicarnos con nuestros amigos, no fue fácil pero un día encontramos la manera de hacerlo".

Había un cartero que llevaba una carta firmada por Midoriya, esta iba dirigida a su "familia". Mientras el cartero caminaba un hombre estaba caminando a su lado, pero de la nada tropezó. El cartero le pregunto si estaba bien, pero el hombre estaba enojado con él, creyendo que era el que lo hizo tropezar. Ambos comenzaron un pleito, uno defendiéndose diciendo que no hizo tal cosa; y el otro culpando de hacerlo caer al suelo. Después de que los amigos del hombre lo separaran, el cartero estaba feliz de que todo terminara y siguió su camino. Reviso la carta para recordar dónde debía ir, pero para su sorpresa la carta ya no estaba en su mano. Examino su bolso para ver si la había dejado dentro durante el pleito, pero no había señales de ella. Estaba empezando a entrar en pánico, y al final tuvo que aceptar que había perdido la carta.

Lo que el cartero no sabía, era que mientras el hombre lo quería golpear, la carta se desprendió de su mano y salió por él viento. Aunque esto era para el ojo inexperto, en realidad algo invisible se la quitó y simulo como si el viento se lo llevara. Esta era Tsuyu, la cual había aprendido a hacerse invisible, y la verdadera culpable de hacer tropezar al hombre y llevarse la carta. Ella se dirigió al muro, dónde sus amigos la esperaban aún ocultos con la manta de Momo que les sirvió de camuflaje. Abrieron la carta y al enterarse de que sus amigos habían conseguido un lugar para ocultarse, se apresuraron sigilosamente a ir a la dirección dónde se encontraban sus amigos.

"Cuando llegaron, estábamos felices de que nada les hubiera pasado. El refugió sirvió para que pudieran ocultarse y vivir tranquilamente por ahora. Les dijimos toda la información que teníamos sobre el lugar en el que estamos, los titanes, incluso sobre los artefactos que se parecían a los de Mei, emocionándola de que existiera uno de sus "bebes" aquí y los usaran. También les informamos sobre nuestra decisión de unirnos al ejército, en un inició nos dijeron que hacer eso arriesgaría nuestras vidas y que podríamos morir; pero les dije que eso es lo que los héroes hacen, y entendieron que era lo correcto. Hoy era el día en el que comenzaríamos nuestro entrenamiento para ser soldados; y de una cosa estábamos seguros, no iba a ser fácil".

Midoriya se encontraba en un terreno montañoso, junto con los demás reclutas. Aunque estaba emocionado internamente, se sentía un poco incómodo con el uniforme militar que llevaba puesto. Consistían en una chaqueta corta de color marrón claro con una insignia en ambos hombros, en el bolsillo delantero izquierdo y en el centro de la espalda, una chaqueta de color blanco, un fajín marrón oscuro alrededor de la cintura que cubre las caderas, pantalón blanco y botas de cuero marrón oscuro hasta la rodilla. Sus amigos tenían los mismos pensamientos.

Al frente de ellos se encontraban su instructor, era calvo, con piel morena y casi el mismo uniforme que los reclutas, debido que usaba una gabardina en lugar de chaqueta. Miraba al grupo de una manera muy intimidante, causando que Midoriya y Uraraka se pongan un poco nerviosos.

"¡Muy bien, escuchen par de mocosos! ¡Yo soy Keith Shadis, y seré su instructor estos tres años de arduo entrenamiento, para así ya no sean un estúpido ganado para que los titanes los devoren! ¿¡Pero que estoy diciendo!? ¡Ustedes son peor que un ganado!", grito, haciendo que Midoriya, Uraraka, incluso Momo, se pusieran nerviosos y Bakugo se irrito. Parece que estos tres años de entrenamiento iban a ser un verdadero infierno.

Se podría decir que Midoriya, sus amigos y los demás no estaban muy contentos con esto, pero detrás de Midoriya, había un chico de cabello marrón oscuro y con ojos esmeralda. Este chico hace años perdió su hogar y una persona que era importante para él, su madre, y todo por culpa de los titanes. Desde ese día, este chico juro matar hasta el último titán que existiera en el mundo, y por eso se unió al ejército. Y su nombre era… Eren Yaeger, y en este momento solo tenía un pensamiento en su cabeza.

"Lo hare, matare hasta que no quede ninguno de ellos".

Hola a todos. Lamento mucho si tarde en subir este capítulo.

Voy a informar que en vez de ser este una tercera parte del prologó, será el primer capítulo. Esto se debe a que no quiero alargar el prologó demasiado, así que en la segunda parte termina el prologó. Espero que disfruten este capítulo.

Saludos.