La serie Once Upon a Time, sus personajes, y demás mencionados aquí, no me pertenecen.

Han pasado seis años, pero creo en cerrar círculos. Para mí la historia fue perfecta hasta el capítulo 2, pero has jodido tanto que aquí está tu luz de esperanza lunediose. ¿Ya estamos en paz?


Cuando vuelva a verte

Cuando desperté Regina no estaba conmigo, creí que había sido un avance nuestra conversación, pero su lugar vacío en la cama era mucho más verdadero en toda nuestra absurda situación. Creo que me levanté cuando dejó su lado en la cama, debí haberla sentido moverse, y no podía quedarme acostada sin ella a mi lado. Henry dormía en medio de libros en su cama, y la planta alta no tenía rastros de la presencia de ella; al bajar las escaleras pensé en buscarla en el estudio, pero la puerta principal abierta me alertó que no la encontraría.

¿A dónde podía haber ido? La única persona en que confiaba le había roto el corazón. Algo no se sentía bien. Tomé las llaves de mi auto y salí de inmediato a buscarla.

A medida que avanzaba mi corazón latía cada vez más rápido. Yo debía tener algo de ventaja al ir en carro, Regina iba a pie ya que no estaba conduciendo. No le quedaba ningún lugar donde ir, pensé en el cementerio, y comprobé que pasó por allí porque encontré su cripta abierta, pero ella no estaba.

Sentía que nuestra vida se estaba convirtiendo en una serie de desencuentros, era como si por mucho que me esforzara no lograba alcanzarla; cada vez que creía que las cosas mejorarían todo se hacía pedazos aumentando la distancia entre nosotras. Nada de lo que hacía estaba funcionando; no podía dejar de pensar en lo mucho que deseaba retroceder el tiempo y hacer todo lo que no tuve el valor de hacer la primera vez.

Apreté el volante mientras continuaba mi búsqueda por cada calle, y sonreí tanto al verla a lo lejos ingresando en el establo. Detuve el auto y corrí tras ella. Regina estaba de espaldas hacia mí, arrodillada entre las caballerizas, con un vestido extraño. Verla me hizo detenerme un segundo, llenarme de esperanza y alivio de volver a estar cerca, su sola presencia evocaba en mí esperanza por nuestro futuro; y mientras yo sonreía por encontrarla, ella se desplomó en el piso frente a mis ojos.

—¡Regina!

No corrí lo suficientemente rápido para alcanzarla, pero cuando llegué a ella la recogí del piso.

—¡Regina! ¡Regina!

Intenté reanimarla desesperadamente, pero sus ojos no se abrían… no estaba respirando. Creo que yo dejé de respirar en cuanto vi el polvo en su mano… su corazón estaba hecho polvo y con eso mi propio corazón parecía destrozarse en cientos de pedazos. No podía concebir la idea de lo que eso significaba, no podía creer ni entender lo que estaba pasando. Tenía que ser algún tipo de pesadilla, una horrible pesadilla de la que necesitábamos despertar.

—Regina por favor… por favor despierta… Regina.

La abracé contra mi pecho, meciéndola en mis brazos desesperadamente, pensando la manera de despertarla, poniendo incluso mis labios contra los suyos en un esfuerzo en vano de que un beso mío fuera suficiente para despertarla. No funcionó.

No sé cómo logré ordenar mis pensamientos, quizá ni siquiera fue necesario, la magia era emoción y lo que necesitaba era conservar a Regina intacta hasta encontrar la manera de solucionarlo todo.

—Todo va a estar bien… todo va a estar bien… lo prometo.

Cómo es posible que la vida de alguien a quién amas se desvanezca frente a tus ojos sin que puedas hacer nada por detenerlo, y cómo podría mi vida tener sentido después de perderla, después de no haber logrado llenar su vida de suficiente luz y felicidad para evitar que el dolor la consumiera tan profundamente como lo había hecho. No me importaba lo que tuviese que hacer por volverla abrir sus ojos, por volver a sentir su aliento y su piel cálida entre mis manos.

La levanté del piso lo mejor que pude. Llorar y cargar a alguien en brazos no es la combinación ideal. A duras penas logré subirla al carro. Estaba desesperada y fue eso lo que me llevó directo con Gold. No se molestó en ayudarme a entrar a su tienda, pero me dejó acostar a Regina en la parte trasera.

—¡Tienes que hacer algo! ¡Tráela de vuelta!

—Nadie vuelve de la muerte —dijo casi apenado. Había una emoción en él que yo no podía descifrar.

—Eres el Oscuro.

—E incluso yo tengo mis limitaciones.

—Se arrancó el corazón del pecho con magia, su corazón se convirtió en polvo. Nada de eso es real.

—Porque lo racionalizas. Regina se quitó la vida, no importa cómo.

—¡Importa! Su vida importa, y tiene que haber alguna manera de traerla de vuelta.

Él guardó silencio, observándome como si pensara en algo, o era lo que yo quería creer. Si él no podía darme una respuesta nadie más podría.

—¿Has escuchado la frase todos los caminos llevan a Roma?

—No estoy para adivinanzas. David me dijo que Whale trajo de regreso a Daniel. Podemos hacer esto, podemos traerla de vuelta.

—No es tan sencillo.

—¿Cómo lo hago?

—¿No te contó tu padre que el truco no funcionó? Terminarías por matarla de todas formas.

—Eso demuestra que es posible, solo debemos hacerlo bien.

—No hay un nosotros, no somos un equipo —dijo burlándose—, y como decía…

—No necesito que seas mi amigo, sé cómo funciona y acepto el trato. Ahora dime cómo la traigo de regreso. Haré lo que sea necesario, conseguirle un corazón o retroceder el tiempo. Nos lo debes, así que acepta el maldito trato.

—No importa que regreses el tiempo, no importa nada de lo que hagas, al final el resultado siempre será el mismo.

—Solo lo dices porque eres un cobarde, yo no lo soy, yo no voy a perderla.

—Aunque pudieras…

—¿Puedo retroceder el tiempo? Si puedo viajar a otra realidad, podría hacerlo a otro tiempo. Debes ayudarme a hacerlo.

—No.

Estaba dispuesta a lanzarme sobre él y obligarlo a ayudarme. Qué clase de cretino era capaz de negarse a ayudar a la persona de la cual se aprovechó y torturó para conseguir sus planes. Era el ser más ruin que había conocido en mi vida y aun así sabía que lo necesitaba para salvar a Regina, afortunadamente Belle apareció antes de que yo hiciera algo estúpido.

—Tienes que ayudarla —dijo Belle.

—No me interesa.

—El que tú no hayas podido hacerlo no significa que Emma tampoco pueda, y lo sabes bien.

—Y sabes al igual que yo que nada de lo que haga logrará salvarla.

—Esa no es tu decisión. Y quizá esta es la forma en que lograremos salvar también a Neal. —Eso fue más que suficiente para lograr el interés de Gold. Belle se acercó a Regina y puso una cobija sobre sus piernas—. Rumple ayudará.


XXXSQXXX

La magia tiene un precio, es una de las tantas tonterías que he escuchado desde que mi vida se transformó en un cuento escrito por algún autor retorcido. Había aceptado el plan de mis padres para huir porque quería alejarme de la magia, consideraba que era la razón de todos mis problemas; en el Bosque Encantado la magia fue la única manera de corregir mi error y volver a casa con Regina. Necesitaba encontrar un punto intermedio, y no solo con la magia, con todo en mi vida.

Decir que Henry estaba devastado era poco, decirle que iba a solucionarlo todo no había logrado el efecto que esperaba, él no sabía cómo manejar la situación de perder a su madre, había sido bastante difícil desde que volvimos y no haber podido conectar con ella, pero al menos tenía la esperanza de que las cosas mejoren, ahora todo parecía perdido.

Tuve que pedirle a Ruby que se hiciera cargo, y con la ayuda de la abuela podía sentirme un poco más tranquila sobre la seguridad de Henry. Ellas y Archie parecían ser las únicas personas además de nosotros en lamentar la situación de Regina.

—No puedes hacer esto —dijo Archie.

—Lo haré, y no tienes derecho a decirme nada, la rechazaste y ella hizo esto.

—No es así como funciona.

—Si no me vas a ayudar, más te vale hacerte a un lado.

—Regina se convirtió en la Reina Malvada para afrontar con todo lo que le sucedió, intentó traer a Daniel de regreso y no pudo, ella pasó años intentándolo. Eres poderosa, Emma, pero no creo que puedas hacer esto, necesitas pensar en Henry.

—Voy a dejar un poder, si algo me pasa.

—Si algo te pasa él estará devastado.

—Ya lo está.

—Le he dejado a Ruby un poder, Henry estará protegido, solo te pido que estés ahí para él si algo me pasa, y si mis padres regresan no podrán jamás estar al cuidado de Henry.

—Gold no es alguien en quien puedas confiar, no ayudó a Regina antes y no lo hará ahora. Tú crees que él hará un trato justo, pero no es así, al final siempre pierdes.

Me senté un momento. Creo que no había parado desde que desperté, el cansancio empezaba a abrumarme, pero no podía perder el tiempo descansando, Regina me necesitaba, no iba a fallarle otra vez.

—Él no va a fastidiar las partes técnicas, va a jugar su propio juego según sus intereses, y esta es la única oportunidad que tendrá de recuperar a Neal.

—Incluso si él es honesto por primera vez en su vida, esto jamás ha funcionado, ¿por qué sería diferente ahora?

—Por mí, yo he sido la diferencia en toda esta historia. —Lo dije totalmente convencida—. No importa la situación, ni lo mal que vayan las cosas, de una u otra manera termino encontrando la solución a cada problema, desde que llegué a este mundo ha sido así. Y esta vez confiaré en mi instinto, confiaré en mí para salvarla a ella.

No sé si mis palabras lograron convencerlo, si tan solo deseaba tanto como yo darle una oportunidad a Regina de ser salvada; en cierta forma él tenía razón con respecto a sus dudas sobre Gold, yo también tenía las mismas dudas, la diferencia es que no podía aceptar perder a Regina para siempre.

—Dime cuál es el plan.

Mi plan era tener un seguro ante el idiota de Gold, y ese seguro era que Belle vendría conmigo.


XXXSQXXX

Me arrodillé en el piso junto a Regina, observando sus rastros hermosos, diciéndome a mí misma que volvería a ver sus hermosos ojos, que estaría allí para verla ser feliz, incluso si no era conmigo.

—No voy a dejarte ir —le dije acomodando su cabello y besando su frente.

El tiempo que pasamos en el Bosque Encantado de cierta forma me preparó para el tiempo que tuve que esperar para volver en el tiempo. Ayudó a Henry tener una misión en la cual enfocarse, aprovechamos el tiempo pasando con Regina, planeando todo lo que haríamos cuando la trajera de regreso. De las pocas cosas con las que Henry no estuvo de acuerdo fue utilizar el corazón de Regina convertido en polvo para conjurar el hechizo.

Ruby y Belle me ayudaron a practicar mi magia, eso fue lo que más nos retrasó. Gold puso una lista de habilidades mágicas que debía dominar antes de permitirme hacer el hechizo.

—No es tan difícil —Belle pasaba repitiendo eso una y otra vez—. Regina lo tuvo más difícil.

—Tuvo más tiempo y una madre mágica, psicópata, pero mágica.

—Deben mantenerse alejadas de las hadas, ellas sabrán, siempre saben, y están enojadas por haberles quitado sus varitas —dijo Ruby.

—No lo van a recordar en el pasado.

—Lo sabrán, créeme, siempre encuentra la manera de descubrirlo todo.

No me importaban las hadas, ellas estaban seguras que me convertiría en una versión malvada al igual que Regina y que estaba por cometer un grave error. Se había corrido la voz de mi trato con Gold, de no ser porque le tenían terror estoy segura que habrían organizado una protesta para intentar detenerme, Ruby creía que no era esa la razón, que mi papel de salvadora provocaba respeto en la gente, aunque no estuvieran de acuerdo con mis decisiones.

Gold no estaba nada feliz por la participación de Belle, no paraba de intentar convencerla de retractarse, pero ella tenía una seguridad absoluta y sabía mejor que nadie que su compañía me aseguraría un viaje seguro. Su amor lo había traspasado todo, y mi misión había despertado en él también la esperanza de traer a su hijo de regreso, mi éxito le aseguraría tenerlo todo: el amor de Belle y la oportunidad de revivir a su hijo.

Mi hijo y yo tuvimos nuestro propio ritual de despedida, pasamos el día juntos, revisamos la lista de condiciones que él debía cumplir mientras esté al cuidado de Ruby y la abuela; comimos todo lo que nos gustaba, incluso nos dimos tiempo de jugar un poco; al caer la tarde con el tiempo en contra nos sentamos en los juegos donde solíamos reunirnos al principio.

—Creo que nunca te agradecí por encontrarme —le dije.

—No necesitas hacerlo.

—Cuando… cuando decidí darte en adopción… imaginé todas las cosas que lograrías hacer teniendo a alguien que cuide de ti… me hubiese gustado criarte, me habría encantado hacerlo, pero los dos sabemos que no serías el niño increíble en que te convertiste.

—A mí también me hubiese encantado crecer contigo… con las dos… ¿crees que sería posible?

—Todo es posible si lo intentas. No dejes nunca de intentar. Te prometo que esto saldrá bien.

—Lo sé. Sé que lo lograrás. Y he preparado una gran lista de cosas en caso de que necesites ayuda con mi mamá en el pasado.


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Belle iba más preparada que nadie, elegirla como mi compañera de viaje había sido la mejor elección. Gold tenía más fe en ella que en mí, sabía que no me dejaría meter la pata.

—Solo retrocederemos en el tiempo un par de meses, lo recuerdo todo. ¿Tú estás seguro que esto funcionará?

—Es importante que seas muy precisa con el tiempo, y que te apegues al plan. Tu magia debe estar en control

—No dejaré que esto falle. Lo haré bien.

El plan era simple, y en la historia de planes la regla básica es que nada es simple, pero no teníamos cabida para errores, debíamos volver antes que Regina sea secuestrada, impedir que Greg le haga daño y que Tamara mate a Neal, y debíamos hacerlo sin interferir en ninguna otra cosa. No teníamos idea lo que pasaría cuando cambiáramos esos dos eventos, sea lo que sea asumiríamos las consecuencias y seguiríamos adelante, era parte de nuestro trato.

Cuando la magia fluyó por mi cuerpo sentí que mi cabeza iba a explotar, no sé lo que Belle sintió, ni siquiera pude sentir sus manos sosteniendo las mías. En algún punto la magia era todo lo que había, y algo tan fácil como concentrarme en el momento específico al que debía regresar fue completamente imposible. Pensé en ella, sin vida en mis brazos, desconfiada sin poder mirarme tras sacarla del hospital, casi muerta en esa mesa fría donde Greg la torturó, en el muelle mintiéndole sobre alejar a Henry, en la estación interrogándola sobre la supuesta muerte de Archie, en cada uno de los errores que cometí con ella desde el día en que la conocí.

Había logrado cumplir la parte de enfocarme en ella, pero al abrir mis ojos algo dentro de mí me decía que no había logrado volver al punto en el tiempo según el plan.

—Maldición.

Estaba en Boston, en mi departamento, y según la fecha de mi computador faltaban tres meses para mi cumpleaños número veintiocho, y había perdido a Belle. Ni siquiera había otra versión mía, era solo yo, sin la más mínima idea de lo que debía hacer para evitar echarlo todo a perder.

Miré mi reflejo en el retrovisor y sonreí pensando en que a pesar de todo había logrado volver en el tiempo.

—He vuelto por ti, Regina. He vuelto por nuestro final feliz.