Descargo de Responsabilidades:

Todos los derechos pertenecen a Rick Riordan, el creador de este maravilloso mundo en el que viven Percy Jackson, Apollo y el resto de los seres mitológicos. A mi me pertenece únicamente el fanfic y algún personaje OC que aparezca más adelante.

¡Hola a todos!

Espero que les este gustando la historia y la disfruten tanto como yo lo hago a la hora de escribirla.

Quería decirles que voy a tratar que las actualizaciones sean cada 2 días, pero puede ser que haya días que no pueda hacerlo, en ese caso trataré de traer un nuevo capítulo el día siguiente al que correspondía.

Muchas gracias por leer y espero que tengan un hermoso dia

Ayshane

Capitulo 3

Cuando estoy en las puertas del salón de tronos vuelvo a sentir el nerviosismo que sentí hace, ya casi, 10 años. En ese momento no había conocido nunca a mi padre y lo único que quería era recuperar a mi madre. Siento la mano de mi padre en mi hombro y pienso que hay una cosa que no cambió en esos 10 años, quiero hacer que esté orgulloso de mi. Miro por última vez a mi padre mientras se abren las puertas de la sala de tronos, y no puedo evitar sentirme tranquilo sabiendo que lo tengo a mi lado.

Cuando entró lo primero que veo es a mis dos tíos parados en el centro de la sala, ambos están hablando pero al ver que nos acercamos se quedan en silencio y nos miran. Una vez estamos cerca hago una reverencia.

"Tíos" Digo a forma de saludo

"Levantate, sobrino. Tenemos mucho de qué hablar" Escucho a Zeus hablar, al levantar la vista veo que ambos me están sonriendo. "Después de todo ya no eres un semidiós, ahora eres un Dios y no cualquier Dios, eres Percy Jackson, el salvador del Olimpo"

Sentí como me sonrojaba, Hades al verme se comenzó a reír.

"Eso que escucho es humildad? Poseidon, tendrías que aprender de tu hijo!" Mientras escuchaba a Hades pude sentir como me sonrojaba mas y vi como mi padre negaba con la cabeza. No pude evitar sonreír al darme cuenta que también estaba sonrojado.

"Oh, cállense los dos" Aunque ahora sonreía. "Vayamos a lo interesante, así Percy puede volver a descansar"

Al escuchar eso lo mire "Pero papá! ¡Estoy bien, no quiero descansar!" Me miro serio. "Esta bien…"

Cuando mire a mis tíos vi que estaban tratando de contener una sonrisa. Lo que me faltaba, una eternidad con mi familia burlándose de mí.

"Por una vez, Poseidon, tiene razón, tenemos que hablar de temas importantes" Al escuchar a Zeus todos nos pusimos serios. "En primer lugar ¿Como estas? ¿Te encuentras bien?"

Me di cuenta que me hablaba a mi "Si, tío. Gracias a Apollo estoy bien. Me dijo que estoy, sorprendentemente, bien" Zeus asintió con la cabeza.

"Entonces podemos hablar de lo importante, en primer lugar te tenemos que anunciar tus dominios"

Asentí con la cabeza, siendo sincero tenía mucha curiosidad por saber cuales eran mis dominios, ciertamente esperaba que mi dominio no fueran las hamburguesas porque tendría que pasar vergüenza por toda la eternidad. Oh, genial, sigo teniendo TDAH.

"Preparado Percy?" Me pregunto mi padre. Los mire nervioso y asentí con la cabeza.

"Perseus" Hice una mueca al escuchar mi nombre completo. " Eres el Dios de los Semidioses, la Lealtad y la Marea. También, por lo que me dijo Poseidon, eres el General del ejército de Atlantis. Esto quiere decir que eres el general de tu padre" Asentí con la cabeza. " También quería ofrecerte el puesto como Director de los campamentos…"

"Campamentos, ¿en plural?" Lo interrumpí.

Zeus me miró pero asintió con la cabeza. "Si, para poder terminar de unificar lo que comenzó en la última guerra necesitamos que haya un director de ambos campamentos y que trabaje conjuntamente con Chiron y Lupa" Asentí con la cabeza. " Si aceptas la oferta tendrías 6 meses para adaptarte a ser Dios y luego tomarían el lugar de Dionisio" Me miró. "Así que, Perseus, como dios de los semidioses aceptas ser el Director de los campamentos?"

Mire a los tres dioses frente a mi y sonreí.

"Por supuesto que acepto, no soy tan cruel como para dejar que Dionisio siga siendo el director"

Zeus intentó contener una sonrisa, Hades me miraba divertido y mi padre comenzó a reír.

"Casi lo olvidaba, todavía no vamos a decirle a Dionisio que su castigo termina en 6 meses, voy a esperar hasta la próxima reunión." Me dijo Zeus, asentí con la cabeza. "También quiero decirte que no hace falta que estés siempre en los campamentos, esto te lo va a explicar Dionisio cuando te entrene como director" Al mirar a Zeus vi que estaba mirando a mi padre.

"Percy" Mi padre me puso la mano en el hombro. "Hay algo que queremos decirte, es algo que sabemos hace bastante pero queríamos darte tiempo de poder vivir tu vida" Mi padre me miró y yo asentí con la cabeza esperando que continúe. "Unos días después de que recuperaras el rayo de Zeus vinieron a verme las Moiras y me hablaron sobre tu destino" Lo mire sorprendido. "Lo que me dijeron es que…" Mi padre me miró. "Percy, tu destino era convertirte en Dios, me dijeron que eras demasiado poderoso para ser mortal y que tu vida iba a estar plagada de triunfos. Todavía no descubrí porqué, pero genéticamente eres más mi hijo que de tu madre" Mire a mi padre sorprendido.

"Todavía no se por que se sorprenden, Percy es como si fuera tu gemelo, es tu copia exacta" Mire a mi padre y no pude evitar estar de acuerdo con Hades, si mi padre tendría mi edad seríamos, casi, idénticos.

"Una cosa no tiene que ver con la otra, Hades" MI padre lo miró. "Podría ser igual a mi físicamente pero seguir siendo mitad Dios y mitad humano. Este no fue el caso, aunque no puedo decir que me queje. Que pasara esto hizo que Percy se convirtiera en Dios." Mi padre me miró y sonrió. "Y como te dije hace tantos años, eres mi hijo favorito. Te quiero, hijo"

"Papa!" Me sonroje, pero sonreí. "To también te quiero."

"Lamento cortar con este momento padre-hijo pero tenemos que seguir hablando de cosas importantes" Zeus nos miró. "Perseus, nos gustaría que en un futuro te convirtieras en parte del Consejo Olímpico."

Si hubiera estado bebiendo algo hubiera escupido todo, mire a Zeus sorprendido.

"QUE?" Los tres hermanos me miraron alzando sus cejas. "Perdón, pero ¿Yo? ¿Parte del consejo? ¿Tío, estás seguro de que quieres eso?"

"Estoy seguro Percy. Y también se que serias una gran incorporación ya que vas a estar en constante contacto con nuestros hijos y vas a ser el General de Poseidón"

No puedo creer como mi vida pudo cambiar tanto en menos de una semana.

"En ese caso, Tío, en el momento que me lo ofrezcas lo voy a aceptar" De reojo vi a mi padre sonreír. "Antes de seguir con otro tema, me gustaría pedirles un favor" Al ver que los tres asentían seguí hablando "Me gustaría poder seguir visitando a mi madre mientras ella siga viva "Hice una mueca al pensar en su muerte. "Yo sería muy cuidadoso pero ella es mi madre, es la única persona a la cual tuve durante mucho tiempo"

"Bueno, es tu madre, por supuesto que puedes seguir viéndola." Sonreí ampliamente cuando lo escuche. "Así que si, puedes seguir visitando a tu madre el tiempo que quieras."

No pude evitar abrazar a Zeus, al principio se quedó quieto pero luego me devolvió el abrazo. "Gracias" Le susurre. "Lo aprecio mucho" Me aleje de él y le sonreí mientras volvía al lado de mi padre, el cual pasó su brazo por mis hombros.

"Yo quería pedirte un favor personal, sobrino" Esta vez hablo Hades, al verme asentir siguió hablando. " Dentro de unos años, cuando Nico cumpla 21, se le va a ofrecer divinidad al igual que a ti" Sonreí ampliamente al pensar que no iba a estar solo. "Y me gustaría que cuando llegue ese momento lo ayudaras a adaptarse a sus nuevos poderes y responsabilidades."

"Por supuesto, me encantaría ayudar a Nico cuando llegase ese momento"

"Pero todavía no le digas nada, quiero que viva su vida como él quiera, sin saber que él en un futuro podría llegar a ser un Dios.

Asentí con la cabeza mientras hablaba "Por supuesto, no voy a decir nada"

"Bueno lo último que tenemos que decirte, aunque ya creo que te agobiamos lo suficiente" Mi padre se reía mientras hablaba. "Durante tus primeros meses vas a tener Dioses que te van a entrenar para que puedas acostumbrarte a tus nuevos poderes y responsabilidades" Asentí con la cabeza. "Luego te diré quienes van a ser, lo primero que necesitas saber es que tienes la tarde libre y si quieres puedes visitar a tu madre. Al ver que empezaba a asentir con la cabeza me sonrío "Pero, luego vas a venir por unas semanas a Atlantis conmigo. "Volví a asentir con la cabeza sonriendo.

"No hace falta que les tenga que decir que lo que hablamos no se lo pueden a nadie, no?' Al ver que asentimos Zeus sonrió. " Bueno, doy por finalizada la reunión." Zeus me miró y sonrió. Luego desapareció.

"El Dios del Drama" Dijo mi padre riéndose. "Zeus tendría que ser el Dios del Drama" Escuchamos un trueno y los tres sonreímos.

"Yo también me marcho" Nos miró y nos sonrió. "Nos vemos y mucha suerte. Percy, hermano" Hades desaparece en las sombras.

Mi padre y yo salimos del salón de tronos y nos dirigimos hacia la enfermería.

"Percy ahora puedes ir a ver a tu madre ¿Quieres que te lleve?" Negué con la cabeza. "Ten cuidado y no te sobre esfuerces ¿Me escuchaste?" Asentí con la cabeza "Cuando hayas terminado de hablar con tu madre madame un Mensaje Instantáneo e iré a buscarte ¿Entendido?" Volví a asentir con la cabeza, mi padre sonrío. "¿Sabes que podes hablar, no?"

Solté una carcajada "Si, lo se, papá" Le sonreí. "Y si, voy a tener cuidado y te voy a mandar un mensaje cuando esté listo para que me vengas a buscar" No pude evitar pensar que apreciamos un padre e hijo normal, no dos dioses.

"Bien, te quiero, hijo. Ten cuidado" Con esto último desaparece dejando olor a mar. Sonreí y comencé a caminar por el Olimpo hacia el ascensor, tenía ganas de caminar y despejar la mente.

Mientras caminaba por la calle principal del Olimpo me di cuenta que las personas me miraban, me saludaban y hacían reverencia cuando yo pasaba. Negué con la cabeza, nunca me iba a acostumbrar a eso. Llegué al ascensor y bajé. En la recepción seguir la seguridad leyendo un libro, no puede evitar pensar que es un hijo de Atenea, mire su pelo rubio y me di cuenta que seguramente fuera su hijo. Caminé por las calles de mi ciudad dándome cuenta lo diferente que era todo. Llegue al edificio de mi mama y subo hasta su departamento. Al llegar a su puerta toque. Pasó un minuto y escuché algo arrastrarse detrás de la puerta, luego de unos segundos se abrió.

"Percy!" Sentí que algo se aplastaba contra mis piernas, al mirar hacia abajo sonreí.

"Estelle!" La levante y la abrace. "¿Cómo estás? ¡Estás mucho más grande!"

Estelle se rió y me abrazo mas fuerte "Percy, te extrañe mucho, mamá dijo que estabas ocupado y que por eso no pudiste venir para tu cumpleaños"

Estelle se comenzó a retorcer en mis brazos para que la baje, al bajarla mire alrededor.

"¿Estelle, abriste la puerta sola?" La mire y ella me miró inocentemente. "¿Cuántas veces te dijo mamá que no abrieras la puerta sin ningún adulto a tu lado?"

"Pero eras tú, Percy! Estaba con un adulto porque estabas al otro lado de la puerta. Además mire por la mirilla como me dijo mami"

Negué con la cabeza mientras entramos al departamento, vi una banqueta al lado de la puerta y no pude evitar sonreír.

"¿Dónde está mamá? ¿Estás sola?" Mire alrededor y vi que no había nadie en la sala. Luego escuché ruido en la cocina y sonreí.

"Mami está en la cocina, está haciendo galletas de chocolate" Estelle sonrío y fue corriendo hacia la cocina.

Yo sonreí y negué con la cabeza. Cuando llegue a la cocina me quede en la puerta. Vi a mi madre sacando algunas galletas del horno mientras tarareaba.

"Estelle, quien estaba en la puerta?" Mi madre le preguntó a Estelle mientras veía que intentaba agarrar una galleta "Cuidado! Te dije que tenías que esperar, están muy calientes" Estelle hizo un puchero pero se alejó.

"Hola, Mamá" Dije antes de que Estelle pudiera decir algo.

Vi como mi madre se dio la vuelta y me miró, se llevó la mano a la boca y corrió hacia mí para luego abrazarme fuertemente. Hasta que no estuve en sus brazos no me di cuenta lo mucho que extrañaba los abrazos de mamá, es en uno de los únicos lugares donde se que todo va a estar bien.

"Hey Percy ¿Que pasa? ¿Pasó algo? Annabeth me dijo que no me preocupara, que no era nada malo" Hasta que no hablo mama no me di cuenta que estaba llorando, me aleje un poco, la mire a los ojos y le sonreí.

"No es nada malo mamá, no te preocupes. Pasaron muchas cosas en poco tiempo" Mi mamá me miró y me volvió a abrazar. "Yo tengo mucho que decirte"

"Sabes que me podes contar lo que sea, no te preocupes" Mi madre se alejó de mí y me agarró el brazo. "Ahora vamos a la sala de estar mientras se enfrían las galletas" Mi madre miró a Estelle. "Estelle, anda a jugar a tu cuarto, cuando esté todo listo te llamo"

Estelle se cruzó de brazos y frunció el ceño "No quiero mamá! quiero quedarme con Percy!"

Solté el brazo de mi mama y me agaché mirando a Estelle, abrí los brazos y ella corrió hasta abrazarme.

"Shh, shh, no te preocupes. Tengo que hablar algo importante con mamá, pero apenas termine merendamos juntos ¿Si? "

Estelle asintió con la cabeza y se alejó hacia su cuarto. Suspire y me levanté. Junto a mi madre nos sentamos en el sillón. Mi madre me agarró la mano tratando de tranquilizarme.

"Yo- yo, es complicado" Negué con la cabeza. "No se por donde comenzar"

"Shh shh tranquilo, contare desde el principio" Me dijo mi madre tranquilamente.

"El dia de mi cumpleaños me deporte y vi a papá en un mensaje instantáneo, conversamos de muchas cosas pero lo más importante fue que me advirtió que en la fiesta de la noche me iban a dar un nuevo regalo en agradecimiento por todo lo que hice por el Olimpo" Mi madre asintió con la cabeza. "El resto del día fue normal, me tuve que vestir formal, y lo odiaba mucho. Llegamos al Olimpo, caminamos todos juntos, al llegar a la puerta de la sala de tronos salió papá y fuimos a hablar a un lugar apartado, me advirtió que el regalo que me iban a ofrecer no era intercambiable, o lo aceptaba o lo rechazaba."

Mi madre asintió con la cabeza, al ver que me quedaba en silencio hablo. "Hasta ahora es todo normal ¿Qué pasó después?"

"Luego entraron todos, menos yo, al salón de tronos. Yo tenía que ser el último ya que me iban a dar el regalo. Al entrar vi que todos los dioses estaban en sus tronos y al verme entrar, muchos de ellos, me sonrieron. En fin, no voy a dar más vueltas, el regalo que me ofrecieron es la divinidad y yo la acepte." Mire a mi mama que me miraba sorprendida. "Mamá, ahora soy un Dios"

Mi mama se llevó las manos a la boca y me miró atentamente.

"¿Eres un Dios? ¿Mi hijo es un Dios?"

"Si, se que no debes estar contenta, porque sabes como son los dioses, pero te ju…"

Mi mama me abrazo interrumpiendo lo que estaba diciendo. "No, Percy! ¡No estoy enojada! Estoy feliz, ya no me voy a tener que preocupar de que te pase algo!"

Mire a mi madre sorprendido y luego le sonreí.

"¿De que eres Dios? ¿Hablaste con tu padre? ¿Cómo fue todo?"

"Soy el Dios de los Semidioses, la Lealtad y la Marea. Papa se quedó a mi lado los dos días que estuve inconsciente" Al ver que mi mama iba a decir algo la interrumpí. "Es normal, mamá. No te preocupes. Es para que mi cuerpo se acostumbre a mis nuevos poderes" Mi madre sonrío aliviada.

La mire y pense en decirle el resto. Ore a mi padre, aunque no sabía si servía si yo también era un Dios, escuche su voz en mi cabeza "Percy? Paso algo?".Sonreí "No pasa nada,Papa. Te quiera preguntar algo". "Dime" "Le puedo decir todo sobre lo que hablamos hoy a mama, ella no va a decir nada. Por favor" Por un momento papá no me respondió hasta que unos minutos después volví a escuchar su voz "Si, Zeus dice que puedes" Sonreí "Gracias, papa. Luego te aviso para que vengas".

"Percy, está todo bien?"

"Si si, estaba hablando con papá" Y señalé mi cabeza. Mi madre asintió y me sonrío. "Le estaba preguntando si te podía decir unas cosas que hablamos hoy, y me dijo que si"

"Entonces, dime"

"Todo lo que te diga no se lo puedes decir a nadie, hasta que me lo permitan ¿Me lo prometes?"

Mi madre asintió "Lo prometo, no le voy a decir a nadie"

Le sonreí "Voy a ser el director de ambos campamentos, papá me pidió que sea su general y cuando Nico cumpla los 21 años también le van a ofrecer la divinidad." Mi mamá me miró con los ojos muy abiertos y yo no sabía si decirle lo que me contó papá. No le quería mentir a mi mama "Y una última cosa mamá, prométeme que no te vas a alterar." Mi mamá asintió con la cabeza. "Estaba destinado a convertirme en Dios, las Moiras, los destinos, hablaron con papá cuando yo tenía 12 años y le dijeron que mi destino era ser un Dios. Que ya en ese momento era más Dios que humano" Mi madre me miró sorprendida.

"Oh, Percy, ven aquí cariño. Siempre supe que eras especial" Mi madre me abrazó fuertemente. "MI pequeño, Dios. Quiero que siempre y para siempre voy a estar orgullosa de vos" Abrace a mi madre mas fuerte.

"Te quiero mama. Tenia miedo que te enojaras.."

"Nunca me podría enojar contigo, Percy" Mi madre me miró a los ojos. "Nunca. Se que todo lo que haces lo haces por una razón" Le sonreí.

La abracé una vez más y me levanté del sillón. "Mejor voy a buscar a Estelle, así juego un rato con ella. Luego me tengo que ir con papá" Mi madre me miró y asintió.

"Voy a buscar las galletas"

El resto de la tarde la pasé con mi mama y Estelle. Luego se nos unió Paul. Jugamos, hablamos y comemos, Todo iba bien hasta que llegó la hora de irme, ya había llamado a mi papá, era cuestión de tiempo hasta que apareciera"

"Los quiero mucho todos, puede que no pueda visitarlos durante unas semanas, pero" Mire a mamá "voy a tratar de llamar ¿Si?"

Me abrazaron por última vez, cuando escuchamos una risa.

"Hey, primo" Vi a Hermes parado en la puerta de la cocina sonriendonos. "Sally, Paul" Asintió con la cabeza en forma de saludo. "Y tu debes ser Estelle, Percy me habló mucho de ti" Le sonrío y Estelle le sonrío tímidamente escondiéndose atrás mío.

"Estelle, Paul" Los mire y luego mire a Hermes sonriendo." Este es mi primo Hermes, cuiden sus billeteras mientras esté cerca"

Hermes se rió a carcajadas. "Me conoces muy bien" Él me miró y se puso serio. "Me encantaría quedarnos un poco más de tiempo, pero nos tenemos que ir. El tío P me mandó a buscarte" Asentí con la cabeza. Mire a mi mama.

Me acerque a Hermes y me agarró por los hombros. Lo último que vi antes de desaparecer es a mi mamá sonriendo y Paul preguntando "¿Hermes? ¿Como el Dios de…?"

Yo sonreí.