Resumen: A los 25 años de edad, Marinette por fin obtuvo todo lo que soñó y Adrien perdió todo lo que tenía. Inspirado en un fanart
Notas:
1) Los Personajes no me pertenecen, son propiedad de ZAG Heroes, y los créditos son de Thomas Astruc y su equipo.
2) Este fic está realizado sin fines de lucro, solo por diversión.
3) Puede contener Spoilers de lo que ha aparecido en la tercera temporada
NUEVO COMIENZO
CAPÍTULO 3
Café en Montmartre
Dos semanas después
A pesar de que se suponía que era una ocasión especial, una manera de recolectarse con sus queridos amigos y quizá una manera de relajarse, Adrien se dejó caer en su asiento y puso la cabeza y los brazos dramáticamente sobe la mesa tan pronto como llegó a la reunión.
-Todo esto es una pérdida de tiempo- dijo el rubio con un gruñido.
Alya sonrió mientras que Nino le daba unas palmaditas en la cabeza. Su mejor amigo podía ser tan dramático en ocasiones.
-Vamos, no puede ser tal malo- dijo Alya cruzando los brazos y apoyando la espalda en el respaldo de la silla- ¿cuántas entrevistas has tenido?-
-Dieciséis en estas últimas dos semanas- dijo Adrien en tono desesperanzado- ya, estoy resignado. Nadie va a contratar a alguien como yo jamás-
-Oh, no digas esas cosas, mon pote- dijo Nino con una sonrisa, intentando animar a su mejor amigo- estoy seguro de que pronto encontrar alguna cosa, es solo cuestión de buscarlo bien-
-Ese no es el problema, hay mucho trabajos- dijo el rubio- el problema es que nadie quiere darme trabajo a mí, al hijo del villano que aterrorizó la ciudad por casi cinco años. No creas que no veo las expresiones de todos cuando me ven entrar por la puerta. Es como si vieran a un fantasma…-
-Ya, pero estoy segura de que no todo el mundo será tan prejuicios contigo- dijo Alya tocando su codo con el suyo- trata de ser más positivo.
-Eso intento, de verdad- dijo Adrien con una sonrisa agradecida. Sabia que sus amigos eran optimistas, porque estaba seguro de que nadie en su sano juicio le ayudaría. Aún tenía tiempo, pero no quería quedarse sin dinero para empezar a preocuparse, y vaya que su falta de éxito era preocupante.
-Bueno, no vine con ustedes a quejarme de mis problemas- dijo de pronto Adrien- ¿qué me cuentan ustedes dos?-
Los dos se miraron con una sonrisa cómplice.
-Creo que quizá no lo sabe- dijo Nino en voz baja con dirección a su esposa, lo que hizo que el rubio alzara las cejas. Habían picado su curiosidad.
-¿Qué cosa?- dijo Adrien mirándolos con enormes ojos.
-No, parece que no- dijo Alya.
-Quizá deberíamos decirle- dijo Nino.
-¿Qué cosa?- dijo el rubio mirándolos alternadamente y solo obteniendo un par de idénticas sonrisas traviesas de parte de sus amigos- ¡díganme!-
-Quizá sea una mejor idea dejar lo con curiosidad- dijo la pelirroja con una expresión traviesa mientras que Nino se reía.
-Ustedes no tienen compasión- gruñó Adrien en voz alta, volviendo a dejarse caer sobre la mesa de manera dramática, haciendo reír a sus amigos.
-Bueno, tengamos compasión con el pobre Adrien- dijo Nino volviéndose a Alya y tomando su mano. El rubio levantó la mirada hacia ellos, mirándolos expectante. ¿Por qué esos dos sonreían así?
-Adrien, Nino y yo vamos a ser padres. Estamos esperando un bebé- dijo la pelirroja llevándose una mano al abdomen. El rubio abrió los ojos desmesuradamente, tardando unos segundos en caer en cuenta lo que le estaban diciendo.
Cuando cayó en cuenta de lo que le estaban intentando decir, Adrien se lanzó a envolverlos a a ambos en un enorme abrazo olvidando un momento sus preocupaciones y sus penas para felicitar a sus amigos.
-¿En serio?¡Felicidades!- dijo el chico- ¿desde cuándo?-
-Desde hace dos meses- dijo Alya en mirándolo seriamente- pero espero que esta conversación quede entre nosotros tres. A estas alturas, solo Marinette lo sabe y quisiéramos que continuara así, al menos por las próximas semanas-
-¡En serio, felicidades! Estoy muy feliz por ustedes. Y no te preocupes, no diré nada- dijo Adrien haciendo una seña como si estuviera cerrando un zíper en sus labios.
-Más te vale- dijo la pelirroja.
Más animado gracias a la noticia que acababa de recibir, Adrien siguió charlando animadamente con sus amigos, al menos por un rato.
x-x-x
Oficina de Marinette
Al día siguiente
Aeon no podía parar de reír mientras que Marinette tomaba las medidas de Jess para su nuevo atuendo. A pesar de que sabía lo valiente que era, Marinette también sabía que la chica americana podía ser un poco exagerada.
-A ver, extiende los brazos para que te pueda medir la…- comenzó a decir la diseñadora
-No, Marinette, esto es imposible- dijo la chica palmeándose la frente con un gesto dramático- ningún atuendo me va a quedar bie, y voy a hacer el ridículo antes de perder contra ese narizón de Luka Couffaine…-
-Oye, Luka es mi amigo- le recordó Marinette frunciendo el entrecejo- vamos, separa los brazos…-
-Afirmativo- intervino Aeon, sintiendo desde el pequeño sofá a la mitad de la oficina- Luka Couffaine no es un mal tipo-
-Yo no dije que era un mal tipo, dije que era narizón- dijo Jess rodando los ojos- igual que su padre Jagged Stone. ¡No puedo creer que voy a tocar contra el hijo de Jagged Stone!-
-Pues según mis estadísticas, el tamaño de su nariz está dentro de las medidas normales para…- comenzó a decir Aeon.
-Uh, Aeon, necesito que me apoyes aquí- dijo la otra chica en un tono frustrado.
Al ver a la chica androide reír, Marinette no pudo evitar sonreír también mientras que terminaba de tomar las medidas de la chica. No habían cambiado mucho, salvo que había disminuido un centímetro en la cintura por el que Jess estaba haciendo tanto drama.
-¿Sabes, Jess? La mayoría de las mujeres estarían contentas si descubren que bajaron un par de medidas o de peso- comentó Aeon casualmente.
-Yo no soy la mayoría de las mujeres- dijo la joven seriamente- siento que me va a quedar mal todo lo que me ponga-
-Bien, creo que ya terminamos aquí- dijo Marinette con una sonrisa mientras que dejaba que Jess se volviera a vestir y caminaba de regreso a su escritorio- espero que te guste la idea que tengo para ti-
Aeon se levantó de su asiento para analizar el dibujo y, cuando Jess terminó de vestirse, ella también acercó al escritorio de Marinette junto a su hermana para mirarlo.
-Wow, está increíble- dijo Jess.
-Afirmativo, es increíblemente bien proporcionado- dijo la chica androide.
-Bueno, si estás de acuerdo con este diseño, podré comenzar a trabajar en él- dijo Marinette- estará listo en una semana-
-Perfecto, en dos semanas es el concurso- dijo Jess volviéndose a su hermana- creo que nos quedaremos aquí en París hasta que esté listo. Tendremos que avisarle a maman. ¡Muchas gracias, Marinette!-
-No es nada- dijo la aludida sonriendo- la verdad es que te estoy utilizando egoístamente para promover mi marca-
Jess rió en voz baja porque sabía que no era cierto, sabía que MDC no podía ser mucho más famosa de lo que ya era. Tras agradecerle de nuevo, Jess y Aeon salieron de la oficina para regresar al hotel donde se estaban quedando.
x-x-x
Edificio de Kids+TV
La tarde siguiente
Tan pronto como terminó su trabajo del día, Kagami se trasladó al estudio de televisión donde Luka estaba ensayando para el concurso. El joven le había dicho que en el último concurso él había tenido un problema con el eco del sitio y quería asegurarse de que esta vez no le sucediera lo mismo.
Kagami sonrió para sí misma mientras que subía por elevador pensando en ello. Por eso le gustaba tanto, era igual de competitivo que ella aunque tuviera una fachada de tranquilidad. Ella sabía que no era así.
-Hey- dijo Kagami entrando al estudio de televisión mientras que Luka tocaba, pero sabía que en ese momento no le prestaría atención. La joven sonrió mientras que Luka terminaba de tocar su canción y abría los ojos, sus labios transformándose en una enorme sonrisa cuando la vio.
-Hey- dijo Luka poniendo la guitarra en el suelo con cuidado y bajando del escenario hacia ella- no sabía que ya era la hora-
-No te culpo, estabas tocando con los ojos cerrados y seguramente en otro planeta- dijo ella rodando los ojos mientras que él ponía sus manos en las caderas de ella- te olvidas de todo cuando tocas-
-No me olvido de ti- dijo Luka presionando sus labios en la frente de ella- de hecho, tú eres la que me inspira-
Kagami se pasó un mechón de cabello detrás de su oreja y bajó la mirada para que no viera el color de sus mejillas. Llevaban ya cinco años juntos y Luka aún lograba hacerla sonrojarse cada vez que le hacía un cumplido.
-Bueno, recoge tus cosas- dijo la japonesa señalando con la cabeza su guitarra- tenemos una cita hoy con Marinette-
Luka sonrió travieso y besó sus labios, haciéndola sobresaltarse por un momento, antes de volverse a desconectar su guitarra y guardarla cuidadosamente en el interior del estuche. Una vez que estuvo listo, se puso la correa del estuche sobre su hombro y ofreció su mano libre a la joven con una sonrisa boba.
-Eres completamente irritante- gruñó Kagami en voz baja en su dirección.
-Lo sé, yo también te amo- respondió Luka. Sonriendo, la japonesa finalmente tomó su mano y ambos comenzaron a caminar hacia la salida del estudio de televisión. Salieron de la plataforma de grabación hacia el pasillo rumbo a los elevadores.
-Recuerda que esta tarde veremos a Marinette- dijo Kagami de pronto.
-Sí, no lo he olvidado- dijo él seriamente al recordar lo que había escuchado- supe que Jessica Keynes está en París y sospecho que también estará aquí porque quiere un vestuario de Marinette-
-Tiene buen gusto, al menos puedes darle crédito por eso- dijo la japonesa.
Mientras caminaban hacia los elevadores, había dos personas que caminaban del lado contrario. Kagami no los conocía, pero Luka inmediatamente se tensó a verlos. Uno de ellos, el más joven, les dirigió una mirada que no le gustó nada y Kagami les devolvió el favor, lanzando una de sus patentadas miradas asesinas a los dos sujetos.
-¿Qué sucede?- dijo ella en voz baja una vez que los dos desaparecieron de la vista- ¿quienes eran…?-
-Eran Bob Roth y XY-
-¿Quién?-
Aquello hizo que Luka suavizara su mirada y sonriera. Seguramente XY haría un soberano berrinche con la manera en la que Kagami había preguntado "¿Quién?"
-XY es un artista famoso y un antiguo rival de mi padre cuando éramos adolescentes- comenzó a explicar Luka- y Bob Roth es su padre y el dueño de una disquera. Él… una vez robó nuestra música de Kitty Section y los diseños de Marinette para que su hijo los utilizara y amenazó con acusarnos a nosotros de plagiarlo. Si no fuera por Ladybug y Chat Noir…-
Kagami se detuvo de golpe por un momento al escuchar eso e inmediatamente dio media vuelta para regresar hacia donde estaban esos dos con los puños apretados con toda la intención de usarlos. Luka, que la conocía muy bien, supo exactamente lo que estaba tratando de hacer y reaccionó rápidamente para detenerla.
-Woaaaa, espera un momento- dijo Luka atrapándola por la cintura y levantándola unos centímetros del suelo- eso fue hace muchos años, y ya lo arreglamos. No necesitamos que ensucies tus lindas manos por algo que ya no tiene importancia-
-Entonces, ¿porqué te afecta tanto?- preguntó ella cuando Luka la puso de nuevo en el suelo, aunque aún rodeándola con sus brazos sin soltarla.
-No me…- comenzó a decir él, a punto de negar que le afectaba, pero no le mentiría a Kagami- no debería afectarme. Es solo que, desde ese episodio, no puedo evitar sentirme molesto-
-Por supuesto- dijo Kagami tronándose los nudillos- si yo fuera tú, ya les habría dado un saludo-
-No te preocupes por eso- dijo él- vamos a casa-
Ella lo miró por un momento sin decir nada, hasta finalmente asentir y comenzaron a caminar con él. Esa tarde irían a ver a Marinette para el vestuario del concurso de Luka.
x-x-x
Casa de modas Dior
Dos días después
Adrien miró el edificio y, tras respirar hondo, cruzó la puerta hacia el interior del edificio. Después de un par de días de angustia, Adrien recibió una llamada que lo animó un poco.
-No estoy seguro de esto, chico…- alcanzó a escuchar decir a Plagg.
-Shhhh…-
-Pero no te gusta modelar- dijo el kwami- ¿por qué haces esto?-
-SHHH- siseó Adrien- mantente escondido, Plagg-
La verdad era que Adrien estaba comenzando a sentirse desesperado. No había encontrado un trabajo por ninguna manera, lo cual era casi imposible para un egresado de la universidad con todos los honores como Adrien. Necesitaba algo urgentemente, y no supo más que hacer que ofrecerse de nuevo como modelo en una casa de modas. No era su pasión, pero al menos eso le permitiría tener alguna seguridad en lo que encontraba algo que le apasionara más.
-Pase por aquí, monsieur-
Pronto se encontró sentado en la sala de espera de recursos humanos. Esta vez estaba esperando una entrevista de trabajo en Dior. Respiró hondo.
-Estás cometiendo un error- siseó Plagg desde el bolsillo de su traje.
-Shhh. Por favor, Plagg-
El kwami gruñó antes de esconderse. El día anterior le había explicado a su portador que era estúpido pedir trabajo en Dior cuando su querida amiga estaba a la cabeza de MDC, pero Adrien era tan orgulloso que no quería pedir ayuda a Marinette.
Adrien supo exactamente que era lo que le iban a decir antes de que siquiera abriera la boca.
-Ah, monsieur Agreste- dijo el recién llegado- si bien apreciamos su interés por formar parte de nuestro equipo, la verdad es que en este momento no tenemos vacantes para modelos en Dior-
-Oh- dijo Adrien visiblemente decepcionado- estaba esperando que tuvieran alguna otra vacante en cualquier departamento…-
-Lo lamento, monsieur- dijo el hombre sacudiendo la cabeza- lamentablemente usted no cumple con nuestro perfil-
-Entiendo- dijo Adrien en un tono resignado. No le sorprendía que lo hubieran rechazado, ya había escuchado esa frase cientos de veces.
-Le deseo la mejor de las suertes en su búsqueda, monsieur- añadió cerrando la carpeta con los papeles de Adrien y devolviéndosela.
-Gracias- dijo el joven con un tono resignado mientras tomaba la carpeta y salía de la oficina cabizbajo. Plagg se asomó por su bolsillo sin decir nada. Sabía lo injusto que era para su cachorro eso, sabía que todos eran unos estúpidos por guiarse por su prejuicio.
Quizá más tarde volvería a tratar de convencerlo de considerar la idea de pedirle ayuda a su amiga, porque estaba seguro de que Marinette movería cielo, mar y tierra para encontrar una manera de ayudarlo.
x-x-x
Cima de la Torre Eiffel
Esa noche
Adrien necesitaba salir y tomar aire fresco después del día horrible que había tenido. ¿Dijo día? No, semana. Tampoco, las últimas dos semanas. No había conseguido absolutamente nada y estaba comenzando a perder las esperanzas de que todo eso se llegara a arreglar algún día.
Sin pensarlo, se transformó en Chat Noir y salió a correr en la noche mientras que correr por los techos, disfrutando el frío aire de la noche. Era lo que hacía cuando tenía problemas en casa, cuando su padre lo hacía sentir mal o algún otro problema.
No quería pensar en eso, solo quería disfrutar el aire fresco de la noche y relajarse un poco viendo las estrellas. Eso siempre lo había ayudado a mantener su mente en blanco y tomar un momento para despejarse de sus problemas.
Después de un rato de correr, se dejó de espaldas en el último nivel de la torre Eiffel y cerró los ojos respirando hondo. Cuando los abrió miró con una sonrisa el cielo estrellado y la luna sobre su cabeza. Se echó las manos detrás de la cabeza y cruzó las piernas mientras que admiraba la belleza de la ciudad, el tenue ruido del tráfico en la distancia. Respiró hondo y cerró los ojos de nuevo, pensando en que quizá no era tan descabellada la idea de Plagg de pedir ayuda a Marinette. O quizá era mala idea, su mejor amiga se sentiría presionada para ayudarlo a pesar de que no quería y que eso podría dañarla a ella. No, no debía pensar en ello, tenía que encontrar otra opción, una en la que nadie tuviera que ver su rostro y no le causara daño a la persona quien le diera el trabajo.
"Soy un hierro caliente", dijo Adrien "quien me acepte, se va a quemar…"
Escuchó un crujido en el metal del suelo de la torre y abrió los ojos para encontrarse con otro cielo azul: los ojos de Ladybug.
-Salut, chaton- dijo la joven con un tono juguetón.
-Ma lady!- dijo él con una sonrisa, incorporándose sentado mientras que ella se dejaba caer a su lado- ¡qué sorpresa verte aquí!-
A pesar del saludo jovial de su partenaire, la heroína se dio cuenta de inmediato que algo no estaba bien con su gatito.
-¿Está todo bien?-
-¿Por qué no lo estaría?- comenzó a decir él, pero Ladybug lo miró con cara de circunstancias así que se corrigió- bien, tengo algo que… me preocupa, pero no puedo decírtelo. Identidades secretas y eso-
Ladybug alzó las cejas y, sin saber qué decir, apoyó su cabeza en el hombro de él. Chat Noir no se sorprendió, y solo apoyó su mejilla en la cabeza de ella con cariño.
-Si pudiera ayudarte en algo…-
Chat Noir sabía que no había nada que Ladybug pudiera hacer para ayudarlo.
-¿Me darías un consejo?- dijo el joven.
-Por supuesto-
-Imagina que… la verdad es que estoy buscando trabajo desde hace tiempo ya que el hecho de ser un sexy héroe no me deja mucho dinero- dijo Chat Noir tratando de mantener su buen humor. No pudo ver la expresión de Ladybug pero ella no hizo ningún comentario, así que continuó- pero ha sido muy difícil. Y hay una persona muy querida para mí que podría llegar a ayudarme pero… creo que se metería en problemas si me da una oportunidad-
-¿Y tu amiga… no ha querido ayudarte por eso?- dijo Ladybug frunciendo el entrecejo, como si estuviera indignada de que una persona no haya querido ayudar a su chaton.
-No es eso- dijo Chat Noir- la verdad es que… ni siquiera se lo he pedido-
-Oh-
-Entonces, ¿qué harías?- dijo él volviéndose a Ladybug- ¿se lo pedirías? Yo he preferido no hacerlo porque no quiero causarle problemas. Creo que… esa persona se sentiría obligada a ayudarme-
-Pídeselo- dijo Ladybug separándose de él y tomando sus mejillas entre sus manos para mirar lo a los ojos- eres demasiado bueno para tu propio bien, chaton. Deja que esa persona decida, estoy segura de que te ayudará si puede hacerlo-
-¿Tú crees?-
-Por supuesto- dijo ella poniendo su mano en su cabeza y rascando detrás de sus orejas- estoy segura de que todo saldrá bien-
Chat Noir sonrió ampliamente. No sabía qué era lo que tenía su Lady que siempre la animaba. Con nuevos ánimos y con su mente decidida a pedir ayuda a Marinette, Chat Noir asintió y los dos héroes se quedaron unas horas más charlando animadamente.
-¿Aún no has encontrado el Miraculous de la Mariposa?- preguntó el héroe de pronto. Ladybug sacudió la cabeza y borró su sonrisa.
-Pobre Nooroo- dijo Ladybug abrazando sus piernas- quisiera regresarlo con el resto de los kwamis pero…-
-No temas, ma lady- dijo Chat Noir- estoy seguro de que pronto lo encontraremos-
Ladybug apoyó su cabeza en el hombro de su partenaire. Ambos recordaban bien hacía cinco años, durante la batalla final contra Papillon, cuando arrancaron su Miraculous y éste cayó al Sena en la confusión. La verdad es que ambos habían estado muy sorprendidos de descubrir que Gabriel Agreste fuera Papillon que para cuando buscaron, el Miraculous se había perdido.
Aún era fecha que cada semana la pareja de héroes se transformaba para buscar el Miraculous en el río, pero no había aparecido.
-Gracias, chaton- dijo ella con una leve sonrisa antes de separarse de él- me temo que debo irme, mañana tendré que llegar temprano al trabajo. ¡No puedes imaginar la montaña de papeles que tengo que arreglar!-
Chat Noir sonrió levemente sin hacer ningún comentario, también poniéndose de pie.
-Claro, ve a tomar tu sueño de belleza, bugginette- dijo el héroe tomando su mano y besándola. Por su parte, ella se puso de puntillas y besó su mejilla antes de lanzar su yoyo en la distancia.
El héroe la miró alejarse con una leve sonrisa antes de él mismo regresar a casa con renovadas energías.
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CONTINUARÁ…
¡Hola a todos! Espero que les esté gustando esta historia. DJWifi y Lukagami son ya parejas establecidas desde antes y las veremos durante esta historia. Luka y Jess son rivales a morir, pero se respetan mutuamente. Muchas gracias por seguir leyendo y por sus reviews. Nos leemos pronto.
Abby L.
PD: Sí, ya vi el capítulo de ayer y casi me infarto. Por favor NO SPOILERS para los que aún no lo han visto.