Asalto a Némesis
Las naves del grupo de las Outers Senshis y los Shitennou dirigido por el Rey Endymion ya habían partido rumbo a Némesis, las turbinas trabajaban a toda potencia para darle a las naves la máxima potencia y así llegar lo más pronto posible a destino, para ello la velocidad inicial aplicada era la mayor posible y de esa forma llegarían en tan solo un día.
El planeta Némesis era de pequeño tamaño y tenía una órbita errática, luego de que el Gran Sabio lograra fusionarse con el mismo pudo cambiar la órbita de Némesis a su antojo ya que su voluntad había pasado a ser una con el lugar, entonces hizo que el planeta se colocara muy inteligentemente unos kilómetros detrás de la Luna, mirando hacia su cara oculta o sea, al hemisferio no observable desde la Tierra y acompañaba al movimiento de rotación del satélite alrededor del planeta. Además de eso, equipó al planeta con sistemas anti-radar, de esa forma los sensores de rastreo en Tokio de Cristal no podían encontrarlo.
Esa era la razón por la que la Resistencia nunca había podido ubicar el verdadero corazón de Black Moon, sumado a que el lugar desde donde operaba Wiseman contaba con una máquina que le permitía teletransportar a sus soldados directamente a la Tierra, pudiendo elegir más de un lugar a la vez y por ende, la procedencia de los atacantes no había podido ser determinada. El gran tamaño del aparato posibilitó teletransportar también vehículos incluyendo a las naves que lanzaron las bombas nucleares que destruyeron todo; cuando Black Moon logró invadir la Tierra y construir las bases terrestres destinadas a armar las naves y los Exterminadores, ya no le hizo falta trasladar más tropas directamente desde Némesis.
Solo el arduo trabajo de las Sailors Mars, Neptune y Saturn y sus habilidades psíquicas además de la ayuda de Mercury, evitó que la ubicación del planeta siguiera siendo desconocida indefinidamente. No fue sencillo ya que Dark Crystal además que convertir a los integrantes del Clan maligno en terminators, los proveyó de habilidades extra*y por alguna razón, lograba evitar los dones espirituales de las tres Senshis, sobre todo los de Rei.
El Rey Endymion se encontraba en la sala de controles y tenía toda la expectativa con respecto al resultado del asalto a Némesis, ya se había comunicado con el resto de las naves para controlar que todo marchara bien y no veía la hora de poder dar la orden de atacar. Mientras continuaba pensando en dicho momento, uno de sus fieles Shitennou se le acercó para hablarle.
- Maestro, se le ve con mucha ansiedad - dijo el hombre
- Tienes razón Jedite, esta guerra terminará finalmente con la victoria siendo nuestra - respondió Endymion con decisión
- ¿Qué tiene pensado hacer luego de eso? - preguntó el rubio
- Reconstruir Tokio de Cristal junto con mi esposa luego de que ella sane a Plut, será una ardua tarea ¿Y tú que tienes pensado? - indagó el soberano
- Bueno, mis compañeros y yo ayudaremos en esa tarea, luego podré construir un hogar y casarme con Haruna - contestó Jedite sonriendo
- Me parece perfecto, podrás vivir tranquilo y ni siquiera tendrás que preocuparte porque Lady Mars quiera calcinarte - afirmó riendo el Rey
- Tiene razón, tomó tiempo y no fue fácil que ella se convenciera de que nosotros los Shitennou ya no somos malvados y nos viera con buenos ojos - recordó el de ojos celestes
- Cierto, me acuerdo que no quería que te acercaras a su hija y tampoco le gustaba que Ralf fuera amigo tuyo - hizo memoria el de cabello negro
- Así es, pero por suerte todas esas rencillas quedaron atrás -
- Bueno, repasemos el plan de ataque a Némesis - pidió el soberano
- Justamente venía a informarle que ya estamos llegando a destino, de acuerdo a las coordenadas del planeta Némesis proporcionadas por Saturn, Neptune y Mars, 1000 kilómetros detrás de la Luna, por eso paulatinamente estamos disminuyendo la velocidad - informó el Shitennou
- ¡Grandiosas noticias! Si hacemos esto bien, sin dudas tendremos éxito - afirmó alegremente el Rey
- Una vez que logremos aterrizar, las naves proporcionarán apoyo aéreo y cuando lleguemos al palacio de Black Moon, mientras las Unidades de las Outers vigilan afuera, mis compañeros se encargarán de dirigirse al núcleo de sistemas de Dark Crystal y colocar las bombas mientras Usted y yo nos encargamos del Gran Sabio - recordó Jedite el plan
- Excelente, una vez que el núcleo de sistemas esté destruido, las máquinas serán inservibles y después de eliminar a Wiseman, Némesis solo será un planeta muerto... según tengo entendido, no perdió su cuerpo físico a pesar de fusionarse con el planeta así que si él muere, el planeta también - dijo sonriendo el de cabello negro y ojos azules - ¡Contacten con la Tierra para avisar que pueden proceder e inicien el ataque ahora! - exclamó a continuación
En los rocosos y oscuros paisajes repletos de construcciones metálicas que evidenciaban la avanzada tecnología del planeta base de Black Moon, destacaba un enorme castillo con tres enormes torres, la central era más alta que las otras dos y tenía la media luna creciente que era logo del Clan.
En el lugar sonaba la alarma porque las naves de la Resistencia habían sido detectadas y eso al Gran Sabio no le gustó nada, para él era inconcebible el hecho de que hayan podido encontrar el planeta por la ubicación y los desarrollados sistemas anti-radares que tan bien habían logrado evadir los sistemas de rastreo terrestres.
El tétrico hombre cubierto por una túnica morada y capucha del mismo color que le cubría poco más de la mitad del rostro estaba nervioso y caminaba por uno de los lúgubres pasillos rumbo a la sala de monitoreo mientras se comunicaba por radio con uno de los terminators.
- ¿¡Cómo diablos pudieron localizarnos esos gusanos de la Resistencia!? - preguntó exaltado Wiseman
- Información desconocida señor, el chequeo de los sistemas anti-radar ha sido completado el cual muestra un rendimiento del 100%, por lo cual no presenta fallas - respondió el cibernético interlocutor
- Debí haber puesto armas antiaéreas pero no creí que lograran encontrarnos... ¡Que los H-K estén preparados! ¡Hagan lo que sea necesario pero no permitan que esos miserables lleguen hasta aquí, así que obedezcan a Zafiro y Diamante en todo! ¡Ah y manda a llamar a Esmeralda, que ella esté a cargo de la defensa del castillo! ¿Entendido Z000M? - ordenó el líder de Black Moon
De repente, Wiseman se detuvo alertado porque creyó ver una silueta humana detrás de una de las columnas laterales del pasillo.
- Le sugiero haga un pequeño cambio con respecto a esa orden, señor - dijo el desconocido asomándose a medias detrás de la columna
- ¿¡Quién eres tú!? ¿Cómo entraste aquí? - preguntó el encapuchado con desconfianza
- No se preocupe Gran Sabio, soy un aliado suyo - respondió el extraño
- ¿Un aliado mío? Jamás te había visto en mi vida, mis sensores me indican que no eres humano pero no me dicen nada mas - aseguró Wiseman
- Soy un modelo diferente a usted y sus subordinados... vengo de un lugar lejano, no hay mucho tiempo así que no pregunte y limítese a escuchar lo que tengo para sugerirle -
- ¿Cómo? ¿Me estás dando órdenes a mí? - preguntó enojado el Gran Sabio
- Je, je, créame que si hace lo que le digo, Black Moon triunfará aunque usted y los suyos caigan aquí ante la Resistencia - afirmó el desconocido
- ¿De qué estás hablando? - indagó intrigado Wiseman
- Mande a llamar a la T-X pero no para que se haga cargo de la defensa del castillo, prepare el desplazador temporal y envíela a la fecha que yo le indicaré... lo mismo con los dos T-1000 - propuso el aliado a Black Moon
- Dime una buena razón por la que yo debería enviar a mis tres mejores subordinados al pasado, en vez de dejarlos aquí para defender la base - replicó el encapuchado
- Porque si los envía a las fechas que le indicaré a continuación, se asegurará de borrar la existencia de Serena Tsukino y por ende, tampoco habrá Sailor Senshis -
- Interesante, de todas formas tengo planeado enviar a una T-800 a 1978 en caso de emergencia, la seguridad de la base de Tokio lo hará de ser necesario - dijo Wiseman con curiosidad por lo que acababa de oír
- Le aseguro que lo será, eso hágalo pero además envíe a la T-X y los T-1000 también ah y otra cosa, apenas terminemos de hablar ahora, teletransporteme a la Tierra... tengo que estar ya mismo en Tokio para mezclarme entre las tropas de la Neo Reina Serenity, eso es imprescindible para que el plan funcione - aseguró el extraño
- ¿Quién eres? ¿Cómo es que sabes tanto? -
- Dígame ¿el proyecto T-3000 tuvo éxito? - preguntó el desconocido
- Se quedó en fase de experimentación porque todos los prisioneros que usamos para probarlo morían al instante ¿Pero cómo sabes de eso? ¡No se lo dije a nadie más que a Esmeralda, Zafiro y Diamante! - exclamó el Gran Sabio sorprendido grandemente
- Je, je, je ¿Y si le dijera que de dónde vengo, el proyecto T-3000 tuvo éxito? -
- ¿¡Como dices!? - preguntó el líder de Black Moon shockeado
- Para probarle que no miento, le presentaré a alguien que he traído conmigo... él viajará también al pasado una vez que usted envíe a sus subordinados - afirmó el enigmático aliado - ¡Puedes salir! Wiseman desea conocerte - exclamó a continuación hacia su izquierda
Inmediatamente desde detrás de otra columna, se asomó una segunda silueta la cual caminó hasta colocarse en medio del pasillo.
- ¿¡QUE!? ¿¡TU!? ¡Pero habías muerto! ¿¡Cómo puedes estar aquí!? - preguntó impactado el Gran Sabio
- Me parece que usted me confunde con otro, yo he venido con mi señor aquí presente - respondió el sujeto, quien vestía uniforme militar negro y era de tez blanca con una enorme cicatriz en el costado izquierdo del rostro, cabello plateado peinado hacia atrás y pupilas doradas
- Ja, ja, ja, excelente... espero que esto le parezca suficiente para que siga mis instrucciones - dijo el primer desconocido con total confianza
- De acuerdo... haré lo que me digas, te escucho - contestó el líder de Black Moon terminando de decidirse
Las naves de la Resistencia habían aterrizado en el inhóspito suelo de Némesis a unos kilómetros del castillo en donde operaba el Gran Sabio, escondiéndose detrás de las numerosas torres o de donde podían para cubrirse de la lluvia de disparos procedente de las máquinas que las estaban esperando.
Si bien cada vehículo contaba con un pequeño fragmento del Cristal de Plata que la Reina había separado del cuerpo principal para que pudieran contar con un escudo de energía que los protegiera de los ataques, la duración era por tiempo limitado y una vez que agotaran toda su energía retornarían al Cuerpo principal en el Palacio Cristal, cuanto más uso le dieran más rápido se agotarían.
Así que las Outers y sus Unidades acompañadas de los Shitennou y el Rey Endymion descendieron rápidamente y a continuación, las naves despegaron nuevamente para atacar desde el aire.
- ¡Ahora sí! ¡Acabemos con ese montón de hojalata! - Ante la orden del Rey todos avanzaron.
Mientras Sailor Saturn realizaba su "Campo de Energía" el cual serviría de barrera contra los ataques de las máquinas, Sailor Uranus atacaba lanzando sus bólidos de energía amarilla con los que lograba mandar a volar a varios T-800, Sailor Neptune extendía sus brazos y un enorme remolino de agua salía de sus manos el cual arrastraba a muchos terminators más al mismo tiempo que ninguno de los soldados dejó de disparar. Y cada tanto, la Senshi de la destrucción desactivaba el escudo para poder atacar ella también con su "Presión Trituradora" y gracias a las ondas de energía de dicha técnica destruía una gran cantidad de Exterminadores, incluyendo H-Ks y máquinas con forma de arañas gigantes equipadas con ametralladoras láser. Cuando Hotaru atacaba, Jedite era el encargado de formar el escudo de energía que los protegiera al mismo tiempo que sus compañeros y el Rey ayudaban en el ataque.
Dentro del castillo, en la sala de la máquina teletransportadora, la misma ya estaba en funcionamiento para trasladar directamente a la Tierra al par de misteriosos visitantes que habían hablado con el Gran Sabio, la luz inundaba la plataforma y envolvía los cuerpos de ambos.
- Recuerde todo lo que le dije Wiseman... de acuerdo a mi plan, Black Moon y las máquinas gobernarán indefectiblemente aunque ustedes sean vencidos en esta batalla - fue lo último que dijo quien primero se había revelado ante el líder del Clan Maligno antes de que la luz que inundaba el lugar se disipara y desapareciera junto con su acompañante
El tétrico encapuchado observaba el piso ahora vacío de la plataforma y reía malévolamente mientras meditaba en todo lo que el desconocido le había revelado.
Unos pocos instantes después, una hermosa mujer de cabellos verdes ondulados, provocativo y ajustado vestido corto oscuro, largos guantes y botas de taco aguja con altura hasta la rodilla, entró a la sala y se acercó al Gran Sabio.
- Aquí estoy de acuerdo a su solicitud señor, espero sus instrucciones - dijo la de pelo verde
- Desnúdate Esmeralda, te vas al pasado, el desplazador temporal ya está siendo preparado - respondió Wiseman mirándola
- Entendido señor, le informo que nuestras tropas están siendo eliminadas por los humanos - informó Esmeralda sin inmutarse ante la orden de su líder
- No importa, aunque perdamos hoy la guerra igualmente conseguiremos cambiar las cosas a nuestro favor - aseguró el encapuchado con una sonrisa perversa - Una vez que te hayas sacado la ropa, ponte esta arma de modo que la cubra el metal líquido de tu cuerpo así puedes llevarla contigo a donde te enviaré - agregó él sacando una pistola de rayos láser
- Como ordene, pero dudo que la necesite... estoy equipada con armas avanzadas - contestó fríamente la de cabellos verdes
- Lo sé, pero es un seguro extra en caso de que surja algún problema ¿Dónde están Zafiro y Diamante? - preguntó el Gran Sabio
- Deben de estar por llegar - fue la respuesta de la T-X
- Muy bien, ellos también irán al pasado así que en cuanto lleguen les diré a qué fechas los mandaré y lo que deberán hacer cada uno, ahora te informaré el año al cual vas y cuál será tu misión una vez que hayas llegado a destino - dijo el ex fantasma de la muerte mientras Esmeralda ya se estaba desnudando sin demostrar pudor alguno.
Las Unidades de la Resistencia continuaron avanzando sin poder ser detenidos por las tropas cibernéticas de Black Moon hasta conseguir llegar hasta el castillo que era la base central en donde se encontraba el núcleo de Dark Crystal.
El Rey Endymion y los cuatro Shitennou se adelantaron unos pasos con respecto a las Outer Senshis y sus escuadrones quienes habían peleado incansablemente para poder rodear al castillo.
- Este parece el castillo de Drácula - comentó bromeando Jedite contemplando la tétrica construcción
- Solo es la fachada amigo mío, ¿Ya tienen listas las bombas, muchachos? - preguntó Endymion a sus guardianes
- Si maestro, los tres tenemos las bombas en las mochilas y las colocaremos en lugares estratégicos - respondió Kunzite seriamente
- Excelente, Jedite tú crearás el portal que nos teletransportará adentro y entraremos los cinco, una vez en el interior del castillo nos dividiremos, Kunzite y Zoicite ustedes se dirigirán al núcleo de Dark Crystal y cuando hayan colocado las cargas explosivas me avisarán, Jedite y yo iremos a buscar al Gran Sabio - explicó el soberano de cabello negro
- Entendido Maestro, cuente con nosotros - contestó Zoicite inclinándose levemente
- ¿Qué es lo que voy a hacer yo? - preguntó con curiosidad Neflyte al ver que su soberano no lo había mencionado recién
- Tú tendrás otra tarea, debes localizar la máquina de desplazamiento temporal y colocar allí las bombas que llevas además de encontrar la esfera granate del báculo de Sailor Plut y las llaves del Tiempo, si nosotros averiguamos la información antes, contactaré contigo - respondió Endymion - Saturn, Uranus y Neptune ustedes estarán aquí atentas y destruirán a los enemigos restantes que ataquen mientras nosotros estamos dentro - dijo el Rey a continuación
- No se preocupe Majestad, nosotras nos encargamos - contestó Eternal Sailor Uranus seriamente - ¡Muy bien ya escucharon, estén todos preparados! - gritó inmediatamente la rubia de cabello corto a los soldados de su escuadrón
De esta forma, Jedite creó un portal en el que se podía apreciar del otro lado el lúgubre interior del palacio de Black Moon. Los cinco hombres cruzaron e inmediatamente el portal desapareció al igual que el Rey y los Shitennou de la vista de las Outers y los soldados.
Ya en el interior de las instalaciones, Endymion y sus guardianes contemplaron las mismas, había varios pasillos con escaleras entre los que destacaban tres que eran más anchos que el resto.
- Muy bien señores, aquí es donde nos separamos... mantengámonos informados por radio de nuestro progreso - dijo firmemente el soberano
- Esto parece un laberinto - comentó Zoicite rascándose la cabeza
- Descartemos los pasillos angostos, tomemos los tres más anchos - sugirió Kunzite
- Es exactamente lo que iba a decir, tengan las armas listas y pongámonos en marcha - respondió el Rey de cabello negro
Inmediatamente a continuación, Zoicite y Kunzite tomaron el pasillo grande de la izquierda mientras que Endymion y Jedite agarraron el central y Neflyte entró por el de la derecha.
Todos fueron encontrando y combatiendo en el camino a numerosos Exterminadores que los estaban esperando, gracias a los poderes de cada uno y la ayuda de los lanza-granadas que llevaban fueron destruyéndolos mientras cada grupo por su parte avanzaba e iba informando al resto de lo que iba encontrando en el camino.
Endymion y Jedite llegaron a una habitación rectangular con una escalera en el medio que subía hasta una pequeña plataforma en la cual flotaban los objetos que tanto tiempo habían estado buscando, la esfera granate del báculo de Sailor Plut y el manojo de llaves del Tiempo. A ambos costados había escaleras verticales que subían hasta una especie de balcón que rodeaba toda la habitación, el balcón tenía numerosos barriles con el aviso de "Peligro" impreso en cada uno.
- Neflyte, no busques más... hemos encontrado los objetos de la Guardiana del Tiempo - dijo el Rey por radio mientras se acercaba a los mismos
- Muy bien Maestro, me limito a colocar las bombas en el desplazador temporal entonces... aún no he logrado encontrarlo - respondió la voz del Shitennou
- Si, localízala y coloca los explosivos, luego dirígete hacia nuestra posición, te iremos guiando para que no te pierdas - decidió el soberano de Tokio de Cristal
- Mhhh... sospecho que no la tendremos tan fácil, tengo una idea... - dijo Jedite paseando la vista por los barriles
- Hemos buscado bien y el Gran Sabio no está por ninguna parte, por suerte hemos podido encargamos de los T-800 que encontramos apuntándoles el lanza-granadas a la cabeza, si no nos hubiera costado mucho más - contestó Endymion pasándose una mano por su lastimada frente
- No creí que lograran llegar hasta aquí, pero bienvenidos... ahora mismo me encargare de matarlos - se escuchó pronunciar a una voz cavernosa dirigida a ellos
Desde el fondo de la habitación y detrás de una pila de barriles que había allí aparte de los de arriba, salió alguien el cual se acercó a ellos. Una vez que Endymion y Jedite pudieron distinguir quién era, se sorprendieron en gran manera.
- Wiseman... - exclamaron ambos
- El mismo, en verdad fue sorprendente que hayan podido encontrar Némesis pero bueno, no vivirán para contarlo - respondió tranquilamente el encapuchado
- Lo dudo mucho, tus tropas en la Tierra y aquí están siendo destruidas... tenemos a Black Moon y Dark Crystal contra las cuerdas, ¡Ríndete ya! - dijo Endymion alzando la voz
- ¿Qué diablos eres, un monje tibetano o qué? - preguntó el rubio Shitennou mofándose de la capucha y la túnica moradas que llevaba Wiseman
- Se creen muy graciosos pero aunque me derroten, al final Black Moon vencerá - respondió el Gran Sabio riéndose
- No sueñes - fue la respuesta del soberano de cabello negro - ¡Nos entregarás las Llaves del Tiempo y la esfera granate! Ya no podrás usar la máquina del tiempo - dijo él desafiante además
- ¡Ja, ja, ya no me hacen falta! ¡Suficiente! ¡Ahora acabaré con ustedes! - gritó el encapuchado y a continuación transformó ambos brazos en extremidades monstruosas, con músculos ennegrecidos y garras en los dedos de las manos, las cuales estiró hacia sus adversarios.
Sin perder tiempo, Jedite extendió las dos manos hacia adelante y formó delante de él y de su Maestro una barrera de energía, el ataque de Wiseman chocó contra la misma pero no pudo atravesarla.
- ¡Haz lo que tengas pensado! - ordenó el Rey a Jedite, éste sin perder tiempo deshizo el campo de fuerza y levitó hasta subir para pararse sobre uno de los tantos barriles
- ¿Qué piensan hacer? ¿Creen que no me imagino para qué el idiota ese subió arriba? ¿Me crees estúpido, Majestad? - preguntó el Gran Sabio mientras continuaba con sus ataques de garras, los cuales eran esquivados por Endymion
A continuación, Wiseman retrajo las extremidades y formó una bola oscura de energía con ambas manos para disparar un haz hacia el soberano de ojos celestes, quien no tuvo tiempo de esquivarlo y uso ambos brazos para cubrirse y evitar que el daño fuera mayor, pero igualmente salió disparado hacia atrás y cayó boca arriba al suelo.
- ¡Vamos! ¡Atáquenme los dos a la vez si quieren! - exclamó el encapuchado en tono triunfante
- Ten cuidado con lo que pides, monje tibetano - respondió Jedite con una sonrisa
- ¿Crees que ya ganaste? De ninguna manera perderemos - aseguró el Rey levantándose trabajosamente, exhibiendo los brazos con heridas y quemaduras
Rápidamente, Endymion extendió los brazos y formó dos bolas luminosas en las manos e inmediatamente hizo un rápido movimiento semejante a golpe cruzado de doble brazo, las bolas se transformaron en ondas de energía con forma de luna creciente mientras el soberano gritaba "¡Explosión sónica!".
El tétrico encapuchado estaba formando una nueva bola de poder oscuro para contraatacar la técnica del Rey, pero Jedite desde arriba disparó con una de sus manos una bocanada de energía color anaranjado que obligó a Wiseman a cubrirse de la misma y descuidar el poder del soberano de cabello negro, el cual logró impactar en el cuerpo del líder de Black Moon lanzándolo hacia atrás y abriendo un enorme agujero en su cuerpo que exhibía el metal líquido del mismo, el cual comenzó a cerrase rápidamente.
- Eso no será suficiente para destruirme, señores ¡Sean despedazados por mis manos demoníacas! - dijo el Gran Sabio mientras avanzaba y se preparaba para atacar de nuevo con sus garras
De esa forma, Wiseman transformó de nuevo sus extremidades y estiró de nuevo los monstruosos y negros brazos y atacó con ellos a Endymion y a Jedite.
Pero ellos evitaron el peligro esquivando los ataques, el Shitennou rubio levitó de nuevo y se colocó cerca del techo mirando hacia el villano para repetir su técnica de antes, mientras que Endymion pegó un salto hacia adelante para conectar una patada voladora en la cabeza del encapuchado y rápidamente continuar con otra pero ascendente apenas tocó el suelo, la cual pegó en el pecho del Gran Sabio logrando lanzarlo hacia atrás y tirarlo al suelo.
El cuerpo de Wiseman se convirtió en una masa de metal líquido que tomó forma de su silueta estando de pie y mientras aún estaba en eso, Endymion extendió ambas manos en dirección a su rival.
- ¡Tuxedo La Smoking Bomber! - gritó el soberano e inmediatamente una explosión de energía salió despedida que chocó contra el cuerpo del villano, partiendo gran parte de su cuerpo en dos y lanzándolo hacia atrás contra la pila de barriles.
- ¡Ahora es la oportunidad, Maestro! - exclamó Jedite descendiendo un poco y lanzando un barril el cual había tomado del balcón, hacia la masa de metal líquido que era Wiseman.
El barril se rompió y el contenido se derramó, lo que provocó que el cuerpo del líder de Black Moon se retorciera de dolor y se corroyera la parte que había tenido contacto con el líquido.
- Ácido... ¡Eso es! ¡Al ser el Gran Sabio un T-1000, eso es lo que lo puede destruir! - Dijo el Rey alzando la voz - ¡Explosión sónica! - gritó repitiendo la técnica que había hecho antes
La onda de energía en forma de luna creciente golpeó la pila de barriles, logrando romperlos y que se derramara todo el ácido que tenían. Como consecuencia de eso, la masa de metal líquido se corroyó peor que antes y sus deformados brazos se agitaron para todos lados; en un último intento la misma se levantó trabajosamente y una de sus manos se transformó una larga cuchilla para atacar a Endymion.
Pero desde arriba, Jedite siguió lanzando barriles que se rompían contra lo que quedaba del Gran Sabio quien lanzaba horrendos gritos mientras terminaba de desintegrarse, hasta que ya no quedó nada de él.
- Buen trabajo, Jedite... parece que hemos acabado con él - dijo Endymion jadeando y sonriente
- Resultó como yo esperaba, me encanta cuando un plan se concreta - respondió el rubio bajando al lado del Rey - Sin embargo, fue demasiado fácil... ni siquiera tuvo usted que usar el poder del Cristal Dorado - agregó algo pensativo
- Maestro, hemos tenido que batallar mucho pero las cargas explosivas están colocadas - Se escuchó a la voz de Kunzite hablar por la radio
- Excelentes noticias, nosotros también las tenemos - contestó el soberano aún jadeando un poco
Ruinas de Tokio de Cristal
A la entrada del Campo de Prisioneros de Tokio llegaba una hilera de camiones, el que iba delante de todos estaba siendo conducido por un T-800 que estaba inmóvil en el asiento del conductor. Al llegar a la puerta de entrada se detuvo y tras de él los demás, la misma estaba llena de escáneres láseres y contaba con la guardia de un grupo de T-800.
El vehículo estaba siendo escaneado por los sensores de la puerta, había un par de detalles que a las máquinas no les iba a parecer normal, el primero era que en la parte trasera de dicho camión estaba escondido James Colt con algo que parecía ser un detonador en las manos, el segundo estaba a punto de ser descubierto por uno de los guardianes.
El T-800 en cuestión fijó su vista electrónica en el que ocupaba el asiento del conductor en el camión, sus sensores hicieron un rápido análisis y resaltaron el costado de la cabeza de este, mostrando el resultado: "ANÁLISIS T-800. ESTADO: NO OPERATIVO"
Ante esto, el cyborg apuntó la ametralladora láser con la que estaba equipado y empezó a disparar inmediatamente hacia el vehículo y los demás hicieron lo mismo inmediatamente.
Por la radio de Colt se escuchó la voz de la Neo Reina gritando "¡Ahora!" y sin perder tiempo accionó el detonador.
*Las habilidades mostradas por Rubeus y Zafiro en el fic anterior, por ejemplo
Ante todo permítanme aclarar que los hechos del planeta Némesis y los que transcurren en Tokio suceden casi simultáneamente, o sea que cuando Sailor Cosmos y las Inners atacan la base de Black Moon, el grupo de Endymion todavía está peleando en el planeta maligno y por ende, un hecho no precede al otro.
Con esta información podrán leer el próximo capítulo y entender bien cómo termina la batalla.¿Que tal la pelea contra el Gran Sabio? A mí nunca me gustó en el animé de los '90, que Darien tan solo lanzara rosas para pelear y por momentos me dio la sensación de que estaba al pedo, aquí sí sabe pelear tal como me hubiera gustado.
Sin más que decir, me despido hasta la próxima así que cuídense mucho y nos vemos la próxima, espero reviews :)
