Determinación para el futuro

Pues lo que prometí, un capítulo más largo!

No sé si lo puse en la descripción principal del fic pero esto va para largo, dado que hay cosas y experiencias que siento son importantes para los personajes por lo que pues eso…jeje

Siempre pasa que no se mucho que poner aquí ya que lo escribo minutos antes de publicar y las ideas que tenía mientras escribía pues ya se esfumaron :p

Sin más espero que lo disfruten

Att. Inumakume

Una semana suspendido, esa fue la respuesta de la escuela cuando Katsuki puso en su lugar a esos malditos, claro que merecían mucho más que eso pero parecía que tendría que conformarse. Terminada su sentencia la viaje bruja finalmente lo dejo visitar a Izuku, se enteró que en los últimos días él y la tía Inko habían ido al hospital repetidas veces para probar un nuevo tratamiento para Deku, aun seguiría tomando esas pastillas pero querían probar algo diferente para tratarlo.

Cuando la tía Inko abrió la puerta con su abrigo aun puesto adivino que no hacía mucho que habían llegado. Fue invitado a pasar a lo que acepto sin dudar, en la mesa del comedor se encontró con Deku quien tenía la mirada perdida como si buscara algo en el suelo. Kacchan se acomodó en el lado opuesto de la mesa.

—Aquí tienes Bakugou-kun — Dijo Inko colocando un plato de okonomiyaki frente a el—Y un vaso de agua para ti Izuku

Fue cuando su madre lo llamo que Deku finalmente alzo la vista encontrándose con su amigo de la infancia y su mirada penetrante

—K-Kacchan?!—Deku tartamudeo sorprendido

—Izuku, no me digas que no notaste cuando llego—Reprocho su madre divertida con la escena

—no…perdona Kacchan

—No importa—Respondió el secamente

El resto de la comida fue bastante tranquilo con Inko haciendo comentarios ocasionales sobre la escuela o temas similares, pero después de ver que no daba frutos simplemente lo dejo estar. Kacchan por su parte no le quito la vista a Deku en nigua momento, parecía demasiado entretenido con sus propios pensamientos y constantemente se quedaba con la mirada perdida. Cuando Kacchan e Inko terminaron su comida ella les dio su espacio para que ambos chicos pudieran charlar cómodamente

—Como va ese tratamiento?—Se aventuró a preguntar Kacchan ya harto con el silencio

—Oh! Bien, funciono perfectamente…—Respondió Deku sin mucha emoción

—Escúchame Deku! Más te vale no hacer un gran drama de esta tontería—Dijo irritado con la actitud de su amigo—Si es así entonces ni siquiera intentes aplicar a la UA, no permitiré que manches el nombre de la escuela

Deku lo miro sorprendido y comenzó a llorar a la vez que su rostro se llenaba con esa sonrisa típica de él. Normalmente Kacchan no dejaría que se burlara así de él, pero en esta ocasión o dejo pasar

—Gracias Kacchan

Unas horas después Katsuki finalmente regreso a su casa y Deku subió a su habitación sonde simplemente se tumbó en la cama. Cuando fue al médico argumentando que quería saber si había más tratamientos a su condición y había recibido una respuesta afirmativa sitio que todo estaría bien; pero eso no duro mucho ese nuevo tratamiento constaba en inyectar directamente los nutrientes en su torrente sanguíneo, al principio parecía ir bien y en verdad empezó a tener esperanza, pero en los últimos días esa sensación regreso y ahora la reconocía bien: Hambre.

Intento convencerse de que era su imaginación y siguió con el tratamiento…no funciono y ahora estaba seguro solo había una cosa que lo mantendría vivo y eso lo atormentaba. Ese día al llegar a casa pensó en todas las posibilidades, diferentes ángulos, tal vez si…. Pero siguió sin encontrar otra respuesta más que la obvia, tendría que salir al bosque a buscar otro cadáver para…comer. Fue entonces cuando la voz de su madre lo saco de sus pensamientos y allí estaba Kacchan !

Tal vez había sido su plática, no, definitivamente había sido eso. Sabía que su amigo había ido para animarlo y eso aunque fuese un poco le daba la determinación para seguir. Su madre y Kacchan contaban con él, no podía simplemente quedarse a sufrir, tenía que hacer algo.

En los siguientes días el hambre de Izuku siguió creciendo a pasos acelerados, el periodo reprueba de su tratamiento alternativo había terminado sin funcionar en absoluto por supuesto y ahora había vuelto a los supresores fingiendo que los tomaba y evitando comer con su madre bajo diferentes excusas. Fue en una noche de insomnio que encontró un frasco de café en la cocina, ni su madre ni el habían sido fanáticos del sabor por lo que aún estaba cerrado

—Por qué no?—Susurro para si

Al abrir el sello el aroma de café lo golpeo, olía demasiado bien; no se molestó en prepararlo, rápidamente tomo una cuchara y medio el polvo en su boca

—Sabe…bien

Podía sentir las lágrimas a punto de salir, pero hizo todo para calmarse. Tenía que concentrarse, no podía volver a hacerse ilusiones sin fundamento.

En los siguientes días su hambre dejo de crecer tan rápido pero indudablemente aun lo hacía; salvo el café en polvo su última comida había tenido lugar hace 3 semanas. Comenzó a tomar notas de todo lo que descubría de su peculiaridad en un cuaderno similar al que usaba para sus análisis; de momento sabía que sin los supresores su bien había vuelto a ser resistente pero cuanto más hambre tenia esta resistencia iba decayendo, en cuanto a sus sentidos mejorados estos se hacían más sensibles cuanto más crecía su hambre. Además de esto sus hijos cambiaban de color, una esclerótica negra y una pupila roja se manifestaban cuando el hambre que sentía se hacía intensa junto con un escalofrío que bajaba por su columna y se detenía en su espalda baja.

No sabía cuánto más podría aguantar, había comido todo lo que quedaba de ese frasco de café y el agujero en su estómago seguir allí aún se resistía a aceptarlo pero era claro que esto tampoco era su solución además aunque prometió no hacerse ilusiones este fracaso realmente había dolido. Aun que ahora sabía que existía al menos una cosa en el mundo (además de carne humana que podía comer) y con eso termino sus notas del día.

El sonido de algo metálico cayendo lo alerto, venia de la cocina

—Mamá! Estas bien?!—Entro corriendo y encontró algunos utensilios de cocina esparcidos por el suelo además de un cuchillo con un líquido rojo en el

—Estoy bien cariño, solo un pequeño accidente—Lo tranquilizo Inko mostrando su mano con un corte en ella

Ese aroma, eso fue todo lo que inundo su mente a la par que el agujero en su estómago replicaba y acto seguido esa sensación que recorría su espina dorsal

—Iré por el botiquín!—Grito y salir con prisa rumbo al baño cerrando rápidamente la puerta se miró en el espejo

—No es posible—Lo recibieron un par de ojos rojos a la vez que la saliva escurrió por los bordes de su boca—Para! Para ahora mismo

Izuku apretó su estómago, fue por el reflejo del espejo que noto que había algo parecido a un tentáculo balanceándose detrás de él, salía de la parte baja de su espalda

—Tengo que parar esto

Salió del baño y corrió a su habitación y resumo hasta encontrar una de los frascos de café que había comprado; vacío todo el contenido que pudo en su boca y trago apresuradamente, el cosquilleo en su espalda desapareció junto con la extraña cola y comprobó en un espejo que sus hijos también habían vuelto a la normalidad. Aun con esto le tomo unos minutos más atreverse a regresar a la cocina; todo estaba limpio ahora y su madre lo esperaba ya con una venda propiamente colocada cubriendo su herida

—Izuku, estas bien ?—Pregunto ella al verlo entrar

—Sí, yo solo—Tomo un momento antes de seguir—Me asuste

—Oh Izuku, no te preocupes todo está bien, no fue nada grave—Aseguro ella

—Lo fue para mí—Dijo triste

—Tranquilo, ven aquí

Esa noche Izuku se escabullo en la noche y fue al bosque. Con su velocidad llegar a la zona donde solía haber suicidios no fue difícil; llevo el cuerpo al pequeño claro donde había hecho la tumba del primer cadáver ya estando allí comió hasta que el hueco en su estómago finalmente desapareció. Y entonces tomo varias resoluciones:

1. Si dejaba que el hambre aumentara sería un peligro para los que amaba

2. Tenía una maravillosa madre y un gran amigo, huir no era una opción, no les haría eso.

3. Iba a encontrar una forma de librarse de esa horrible maldición llamada peculiaridad que atormentaba su vida

Anoto esto en su cuaderno de análisis de su peculiaridad en cuanto regreso a su casa.

Aquí empieza realmente el camino de Deku para el futuro junto con todos sus problemas, puede que no se note con los capítulos que van a venir, pero quiero que Deku sea feliz :´3

Aun con eso espero que lo disfrutaran, aunque Deku sufre mucho xp ( y seguirá así un tiempo xC )

Pueden ver el arte del capitulo

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