Capítulo 4
Al escuchar el grito los tres hermanos se miraron entre sí, tomaron sus armas y montaron sus caballos.
Elrohir iba a la cabeza seguido por Elladan y Estel en dirección al origen del grito.
La noche era mortalmente oscura debido a la ausencia de la luz de la luna, por lo que, tuvieron que depender únicamente de lo que sus ojos alcanzaban a ver mientras se movían a gran velocidad a través de los árboles que los rodeaban.
Después de varios minutos de gran incertidumbre los hermanos lograron visualizar a lo lejos una luz rojiza custodiada por sombras más negras que la misma oscuridad de la noche.
Los gemelos y el hombre continuaron avanzando y conforme se iban acercando redujeron la velocidad de sus caballos para no ser detectados tan pronto y perder esa pequeña ventaja que tenían.
Los gritos continuaban cada vez más cercas conforme se iban acercando y era imposible escucharlos y no ser afectados por la agonía que estos emanaban. Y más de uno tuvo que tragar saliva para evitar hacer alguna estupidez que arruinara las cosas.
Claramente, los gritos provenían de un joven, de un elfo, de un pariente lejano, de una víctima de la tortura de un grupo de orcos.
Detuvieron sus caballos cuando se encontraron a varios metros de distancia del círculo de esas criaturas repugnantes. Eran al menos treinta de esas asquerosas criaturas y ellos eran solamente tres.
El aire se volvió denso y frio alrededor de ellos como si la misma muerte estuviera entre ellos haciendo que lo gélido del ambiente les erizara la piel.
Sabían perfectamente que las cosas se podrían poner muy mal y que si lograban salir vivos de está, seguramente Elrond los mataría en cuanto supiera. Pero no les importo, no podían quedarse simplemente con los brazos cruzados sin hacer nada. No, tenían que hacer algo y tenían que hacerlo ya.
"Vamos" hablo Elrohir en un susurro "Estel, tu ve directamente por el elfo mientras Elladan y yo peleamos contra los orcos para abrirles camino. Olvidémonos de acabar con los orcos, la prioridad es entrar, tomar al elfo y salir de ahí lo más rápido que podamos. Lo más probable es que nos sigan, pero si nos damos prisa llegaremos a tiempo al perímetro dónde se encuentran los guardias y ellos se terminarán de hacer cargo, ¿De acuerdo?"
Ambos asintieron con la cabeza en señal de compresión y desenfundaron sus espadas. Elrohir siempre había sido bueno en las cuestiones de estrategia así que en situaciones estás si Elrohir les decía algo simplemente confiaban en su criterio y lo hacían. Además, tampoco tenían tiempo suficiente como para detenerse a pensar por mucho tiempo.
"Bien, entonces hagámoslo a la cuenta de tres" continuo Elrohir "uno... dos... tr..."
"¡HAAA!"
Antes de que siquiera terminara de contar los hermanos se quedaron sorprendidos por lo que pasaba.
Justo en ese momento apareció un elfo blandiendo una espada a diestra y siniestra arremetiendo contra los orcos. El valiente elfo aparentemente se había ocultado entre las sombras de la noche y de un de repente había saltado sobre uno de los orcos al mismo tiempo que enterraba su espada en el cráneo de uno.
Los orcos inmediatamente se volvieron contra él y el elfo continúo luchando sin piedad alguna, los orcos que se le acercaba demasiado rápidamente de convertía en un cadáver que caía pesadamente al suelo para ser pisoteado por sus iguales.
Era una batalla bastante impresionante de ver, sin embargo, ese no era el momento de quedarse a ver. No, los hermanos tenían que ayudar a sus parientes, así que con un poderoso grito que los lleno de valor, los tres hermanos corrieron con sus caballos hacia el campo de batalla.
Una vez llegado al círculo de orcos que rodeaban a los dos elfos, los caballos dieron un gran salto y aplastaron bajo sus pezuñas a dos de los orcos para después continuar matando a los siguientes con el filo de sus espadas al ser atravesados rápidamente.
"Fin del FlashBacK"
"¿Y quién era el elfo que llego?"
"Hay Pippin, porque siempre tienes que arruinar el momento, ¿Qué no puedes esperar a que terminen de contar?" replico Sam.
"Es que quiero saber quién es."
"Bueno, ya, tranquilos," los calmo Aragón "el elfo que llego era Talhir, pero en ese momento no lo sabíamos. ¿Alguna otra pregunta?"
Pippin negó con la cabeza.
"¿Puedo seguir con la historia?"
Pippin solo asintió con la cabeza.
''FlashBacK''
Uno tras otro los orcos caían pesadamente al suelo después de ser atravesados en la cabeza, el cuello, el corazón y algunos incluso con la ausencia de sus brazos o piernas. Fue así que los hermanos lograron abrirse paso a través de la oscura masa de criaturas.
Estel logro seguir el camino que generaron sus hermanos elfos hasta llegar a donde se encontraba el joven elfo. Este estaba envuelto en sudor y lágrimas que bañaban su rostro por completo intentado quitarse desesperadamente e inútilmente unas cadenas al rojo vivo que lo amarraban por las muñecas, y sus manos… sus manos… Decir simplemente que sus manos estaban severamente heridas sería restarle gravedad al asunto. No era necesario ser médico o experto alguno para darse cuenta que sus manos no sanarían tan fácilmente a pesar de su naturaleza élfica o quizás la cuestión no sería si se sanarían fácilmente o no, sino que si sería posible si quiera salvarlas y evitar tener que recurrir a la amputación de las extremidades para al menos poder salvarle la vida.
Aragón trato de mantener la calma para no asustar más al elfo. Podía sentir e incluso escuchar a la perfección a su propio corazón latir dentro de su pecho mientras intentaba mantener una postura tranquila y se sentaba a su lado con una mano en su hombro intentando tranquilizarlo mientras los tres elfos seguían combatiendo a esas monstruosidades que se hacían llamar orcos.
"Tranquilo, tranquilo. Te vamos a ayudar ¿De acuerdo? Pero necesitas mantener la calma ¿Sí?"
En cuanto el elfo asintió se giro para buscar algo con lo que pudiera soltar las cadenas. Pocos metros más allá de él visualizo una especie de tijeras que podía utilizar como pinzas. Así que se apresuró a tomarlas para desenredar las cadenas que envolvían las muñecas del joven. Fue una fortuna que al estar al rojo vivo las cadenas las hacia ser más maleables y no necesito más que dos movimientos y algo de fuerza para lograr zafarlas.
Unos segundos después el elfo estaba libre.
Estel tomo rápidamente su bolso de su caballo y saco varias vendas de este. Se sentó frente al elfo para seguidamente proceder a vendar sus manos lo más rápido y delicado que podía al mismo tiempo que le decía palabras tranquilizadoras al joven rubio que no dejaba de llorar y quejarse debido al dolor.
"¡Estel! ¡¿Cómo vas?! ¡Tenemos que salir de aquí!"
"¡Ya casi!"
Aragón se apresuró a terminar de vendar ambas manos y una vez terminado tomo al elfo por los hombros para obligarlo a levantarse y conducirlo al caballo que los esperaba.
Faltaban no más de dos pasos de llegar cuando de repente el joven elfo se desplomo sin rastros de conciencia alguna en dirección al suelo.
"¡Legolas!" Se escucho que alguien grito.
Elrohir y Elladan rápidamente fijaron la mirada en dirección a su hermano y este se las devolvió notoriamente lleno de preocupación junto al elfo en el suelo.
"¡Esta en shock!" grito.
Fue en ese mismo instante que el sonido de un cuerno orco salido de la nada, se dejó escuchar en todo el lugar. Un sonido mucho mas fuerte que lo que cualquiera de ellos jamás desearía. Un sonido que hacía sentir el miedo hasta la medula de cualquier ser.
Los tres elfos y el hombre se miraron con miedo.
Un nuevo batallón de orcos había llegado.
Continuara…
Nota adicional:
Las personas que sufren de quemaduras moderadas a graves (estas son aquellas con quemaduras de 2do o 3er grado, quemaduras de gran extensión en el cuerpo, es decir mayor al 10% de la superficie del cuerpo, quemaduras en manos, pies, genitales o cara) pueden llegar a tener complicaciones secundarias como el choque o shock.
Les explico, con las quemaduras graves, las capas de piel son destruidas (dependiendo de la cantidad de capas de piel afectadas es como se determina el grado de la quemadura: 1ro, 2do, 3ro), es debido a esta lesión, que la sangre que corre por las venas, arterias, etc., pierde fluidos y líquidos corporales. Esta perdida de fluidos puede causar la deshidratación y el shock (una puede llevar a la otra).
Shock: para el caso de las quemaduras ocurre lo que se conoce como shock hipovolémico que quiere decir que se tiene una menor cantidad de sangre o una menor cantidad de fluidos en la sangre, por lo que, el corazón bombea menos cantidad de sangre hacia los órganos.