Capitulo 4

Shad y Sidon eran los mejores amigos de Link, las gemelas sabían que debían usar a alguien más como peón para meterle ideas al rubio. Alguien que fuera cercano a él pero al mismo tiempo no tanto para que no las delataran.

Para su fortuna Link tenía un compañero muy cercano en el equipo de atletismo.

Malón fue quien convenció al chico de acercarse al rubio y meterle ideas de dejar a su novia, por supuesto no sin antes darle su "recompensa" con ambas pelirrojas, una noche que sin dudas el joven nunca olvidará.

Parecía que su plan iba de maravilla, aquel chico le hablaba de la ventaja de tener muchas chicas a su disposición y que con la que se juntaba todos los días era sin duda preciosa y encantadora, que sería un tonto de verla únicamente como una amiga.

Link aparento no hacer caso a aquel individuo, aunque concordaba con que esa chica era encantadora y ciertamente preciosa.

Por otra parte las peleas de Link e Ilia iban cada vez en aumento, hasta que traspasó la violencia verbal y comenzó con violencia física por parte de Ilia obviamente, Link jamás le puso un dedo encima, simplemente aguantaba con frustración los maltratos de la rubia, pensando ilusamente que esto era una simple etapa que pronto superarían.

La gota que derramó el vaso finalmente fue una semana antes del cumpleaños del rubio, la pareja había estado peleando aproximadamente 1 hora por cierta castaña, aunque claro la culpa no era de ella en realidad, es solo que la rubia estaba en su límite y sus celos junto con su muy buena imaginación estaban haciendo estribos cualquier rastro de cordura en ella.

-Como quieres que te crea! ¿Por qué siempre estás con ella?- grita- acaso ya te acostaste con ella! Es eso verdad! Te acostaste con esa zorra! - grita y llora de la rabia.

-No hables así de ella, no ha pasado nada de eso entre nosotros- la mira con seriedad- déjala en paz, no te ha hecho nada para que la odies tanto, solo es una amiga.

-¿Por qué la defiendes tanto? ¡Te gusta! ¿No es así?- comienza a golpear con "fuerza" el pecho de Link- Te odio, eres un infiel! Eres igual que todos! Nunca debí confiar en ti!

Link se pellizcaba el entrecejo con frustración, pero esta vez no negó lo que le recriminó Ilia. Hace algún tiempo que le comenzaba a llamar la atención esa preciosa castaña.

Desde el primer momento en que la vio, pensó que estaba viendo a un ser divino, toda el aura de la chica le decía que entre sus brazos estaba sosteniendo casi a una diosa.

Sus siguientes encuentros hicieron que reafirmara ese hecho, era tan adorable que con solo verla sonreía como tonto.

No sabía por qué tenía ese sentimiento involuntario hacia ella, intentó mantener cierta distancia con esa joven, después de todo él tenía novia y no quería que ella lo malinterpretara, pero conforme más pasaba tiempo con la castaña de pronto descubrió que quería saber más y más sobre ella.

Inconscientemente nunca le mencionó la existencia de su novia a la joven, como si se la quisiera ocultar. Temía que si se lo decía, ella se alejaría de él. Eso que comenzaba a sentir por Zelda estaba mal….

El no quería saber que sentía por ella, pensó que tenerla como amiga era más que suficiente. Por lo que enfatiza en nombrarla amiga directamente…

-Eres una buena amiga Zelda- le regaló sonrisa. Esa joven lo hacía sentirse en paz.

…..no quería que ella pensara de él de otra manera, no engañaría a su novia, aún creía que la amaba, pese a que sus escenas de celos comenzaban a ser más y más agobiantes. Pero esa chispa que tenía por la rubia se apagó, desde hace algún tiempo, sin que él se diera cuenta.

Estaba con ella por pura costumbre, por miedo de romperle el corazón, por qué creía que aún podían ser algo. Ya no la amaba y la quería, si, pero ya no de la forma romántica, la quería como él quien quiere a una amiga de toda la vida y de eso no se había dado cuenta hasta ese día.

Finalmente Link explotó.

-Ilia! Ya no puedo más, creí que era solo una etapa, pero ya no puedo…- la separó de él y la miraba a los ojos con pesadez- no importa cuantas veces te demostré que solo era para ti, que solo me importabas tú y que nunca te he engañado. Que el sexo no es importante en lo absoluto para mí, yo solo quería tu amor, tu comprensión, pero sobre todo tu confianza - dice ya completamente frustrado- ya no puedo más, lo intente, encerio que lo intente pero todas las personas tienen un límite... lo siento, esto se acabó.

Ilia lo escuchó sin decir ni una palabra, no esperaba que él le subiera el tono de voz, casi gritándole.

Link la suelta y se aparta de ella, la mira con dolor en sus ojos y simplemente se retira. Ella por su parte estaba en shock "¿Qué estaba pasando?" Se preguntó.

Tardo de asimilarlo y cuando por fin salió de su trance se dio cuenta que Link se había ido. El sentimiento de pérdida sumado al del remordimiento se entre-mezclaron.

Lo había arruinado por completo, debía y quería arreglar las cosas con Link… no podía permitirse acabar su relación así, no iba a perder a su hombre perfecto.

En unos días sería su cumpleaños, debía darle el mejor regalo de todos y pedirle disculpas.

Antes de esa discusión sus planes eran pasar la tarde juntos y celebrar como pareja el compleaños del rubio. Link iba a cubrir su turno en el trabajo en la mañana para poder estar con su novia después, pero dada las circunstancias eso ya no iba a ser posible…

Pero Ilia no se iba a dar por vencida, tenía que arreglar esa situación, por fin se decidió a darle lo que todo hombre quiere.

Ya se sentía preparada, se iba a entregar en cuerpo y alma a él. Haciendo esto él ya no tendría que andar coqueteando con nadie más y sería solo para ella.

Quien sabe tal vez ese día ella termina embarazada de él y así casarse lo antes posible, de esta forma él jamás se iría de su lado, estaba más que dispuesta a dar a luz a sus hijos cuanto antes.

Ante tal pensamiento Ilia estaba terriblemente sonrojada.

La semana transcurrió lentamente, no habían contado sobre su ruptura a ninguno de sus amigos, Link se excusaba con que tenía que entrenar para no toparse con Ilia en la cafetería.

Ilia por su parte no quería que nadie se enterara sobre ese asunto, de todos modos en el cumpleaños del rubio volverían a ser novios, de eso estaba segura, así que se limitó a actuar como si nada hubiera pasado y decirle a sus amigos que Link iba a estar ocupado esa semana.

Por otra parte Link seguía tan frustrado y temeroso de que Ilia hiciera alguna escena en público. Así que se limitaba a evitarla a toda costa, claro que Shad y Sidón ya sabían sobre su ruptura con Ilia, pero estos no mencionaban nada de ese asunto enfrente de la rubia, sabían cómo era la chica y no querían que ésta perdiera los estribos, por ello actuaron como si no supieran nada hasta que las cosas se calmaran y ambos rubios pudiesen convivir en paz.

Link no sabía a qué lugar ir para no encontrarse con Ilia, la mejor opción que pudo encontrar era refugiarse en la biblioteca, a esa hora la mayoría de los estudiantes estarían comiendo, por lo que la biblioteca estaría prácticamente vacía, así nadie podría delatar su paradero.

Grande fue su sorpresa cuando se encontró con cierta castaña ahí, sentada tranquilamente en una esquina, su vista estaba perdida en el libro que yacía en sus manos.

Se preguntó si era aquí dónde ella se refugiaba cuando no la veía en la cafetería.

Instantáneamente se fue hacia dónde estaba ella, era increíble para el que, siempre que la veía cualquier sentimiento negativo desaparecía como por arte de magia. Link estaba convencido que aquella mujer era un ser celestial.

Ella no se había dado cuenta de su presencia por lo que aprovecho y se detuvo un segundo a mirarla

Su cara reflejaba seriedad y calma absoluta, sus largas pestañas cubrían parcialmente el azul de sus ojos, su piel blanca resaltaba el rosado de sus labios, labios que desde hacía algún tiempo deseaba tanto probar pero se había contenido por respeto a su anterior novia, pero ahora, era completamente libre.

Podía soñar e imaginar cómo se sentirán esos labios sobre los suyos, uniéndose en una pasión desenfrenada.

Le gustaba, no lo podía negar, le gustaba bastante, Hasta el punto de desearla. Deseaba oler su fragancia, deseaba rozar sus manos sobre su rostro en una dulce caricia, deseaba hacer todo con ella.

En el tiempo que pasaron juntos se dio cuenta de muchas cosas, entre ellas, que esa joven era parte de su felicidad, todos los días ansiaba que llegara la hora de su reunión para estar con ella.

Pensó que, si Ilia nunca hubiera sido tan hostil con él y lo hubiera alejado de ella, pero sobre todo, no lo hubiera agredido fisica y emocionalmente, probablemente nunca se hubiera permitido desarrollar sentimientos profundos por Zelda.

Zelda sintió la intensa mirada del rubio, cuando volteo hacia él se lo encontró mirándola con una tonta sonrisa en el rostro.

Link se dio cuenta que lo habían pillado infraganti, así que su sonrisa se transformó en una de pena y se dirigió hacia la castaña.

-Hola Zelda, así que aquí estabas escondida….

-Link- contestó en forma de saludo- digamos que sí, es él único lugar dónde puedo leer sin interrupciones…- sonríe- ahora baja la voz si no quieres que nos saquen- dijo susurrando.

Link simplemente soltó una sonrisa silenciosa, se sentó junto a ella y comenzaron a charlar entre susurros, se sentía tan en paz y feliz, realmente no le importaba si los sacaran.

Así transcurrió la semana, Link y Zelda se encontraban en la biblioteca a la hora del almuerzo y luego se reunían nuevamente en la "hora" de asesoramiento, hora que, Link al no tener en realidad nada más que hacer se extendieron a 2.

Link por fin pudo soltarse más con Zelda, lo que lo hacía más feliz, finalmente un día antes de su cumpleaños, Link invitó a la joven a su celebración en el Bar de Telma.

Puesto a que ya no estaba con la rubia, Link evidentemente cambió sus planes así que decidió celebrarlo con sus amigos, trabajaría en la mañana y en la tarde disfrutaría ahí su cumpleaños, por supuesto, la castaña no podía faltar.

Zelda aceptó la invitación sin dudar, estaba feliz de ser parte de un momento importante en la vida de Link.

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Comentarios finales:

Sorry si me tardo en actualizar Q.Q se me olvida jajaja 3

espero que lo hayan disfrutado

¡Hasta la Proxima!