Aunque Shirou estuviera un tanto molesto de que Gaia no lo enviara directo a Avalon después de ser liberado de su contrato con Alaya, no tenía el derecho de quejarse, de hecho, se sentía mayormente agradecido por ser libre.

Independientemente de lo que Vivian opinara de él o su relación con las Fae (Vivian y otras dos) estaba agradecido con Gaia, no tenía otra manera de expresarse, bueno eso y que no quería cabreara a la madre tierra para que un PM venga y lo mate... otra vez.

Intrigada.

Era como se sentía en este momento, por culpa de su estado como semihumana, pudo visualizar la caída del reino que tanto ansiaba poseer, al principio quería negar dichas visiones, pero cuando aparecían con regularidad se dio cuenta que no podía negar lo inevitable, era más que obvio que pasaría en un futuro.

La manera en la que su hermana lloro como ningún otro momento aún estaba en su mente, era una escena en la cual su hermana parecía llorarle a ella y no a la nada. De cierta manera se dio cuenta de lo que probablemente provoco esa escena fue su propia codicia.

Pero ya nada de eso importa, debe de cumplir su deber como hermana mayor, aunque la llamasen bruja en algún futuro, debe de acabar con este reinado, no puede simplemente dar marcha atrás en este momento.

"Ya no es tan simple como antes..."

Una sonrisa de desprecio lleno el rostro de la mujer, hace apenas unos días seguía teniendo ese sueño, pero ahora no podía verlo, era como si el mundo le dijera que estaba a punto de cambiar, de cierta manera se sintió extraño.

Por ende, mando algunos de sus familiares a espiar la situación en Camelot, para su sorpresa había un hombre que vivía como ermitaño en una cueva, pero no parecía quejarse por eso.

No era ajena al hecho de que varias personas en Camelot vivían de esa manera, pero sin duda alguna era raro ver a un joven como el habitar una cueva a las afueras de la ciudad, durante los primeros dos días apenas y le prestaba atención, pero su curiosidad despertó en el momento en que miro la manera en que materializaba las espadas de la nada.

Sin duda alguna era proyección, pero a diferencia de las proyecciones normales, no estaba para nada degradada, eso hizo que se preguntara quien era este chico, era un completo misterio para ella, inclusive pensó en hacer que alguno de sus o los hijos de su hermana mayor la cual falleció lamentablemente por lo que ella se hizo cargo de aquellos niños, pero aun asi estaba tentada a que lo espiaran o consiguieran información sobre él.

Para su grata sorpresa Tristán apareció y comenzó a charlar con el como si fuesen amigos, pero de la nada su conexión con su familiar se cortó, eso hizo que ella frunciera el ceño, seria normal si hubiesen destruido su familiar, pero al instante siguiente la conexión apareció una vez más, pero se llevó otra sorpresa al ver el estado en el cual se encontraba el joven, parecía chamuscado, casi como si un rayo hubiera caído sobre él.

Su cuervo el cual observaba toda la situación desde la distancia mostraba una imagen vivida de como venció a Tristán en una competencia de tiro con arco, sin duda alguna es una hazaña de la cual muchos se jactarían, pero el solo sonrió y se despidió.

Algo que la dejo boquiabierta fue la manera de actuar de su hermana, aunque quisiera negar como su expresión cambio de ser una estoica, ella pudo observar los pequeños rastros de tristeza lo que la dejo sin palabras.

"Interesante..." dijo el hada "... no espere volver a ver esos gestos en ti querida hermana"

Una vez más su cuervo siguió de cerca al joven, pero por alguna razón no podía ver más allá de la cueva a pesar de reforzar la vista de su familiar, lo que la llevo a concluir que había una barrera que le impedía mirar.

Ella quería seguir observando al pelirrojo, pero no podía hacer mucho, no cuando ese sucio gordo nombrado rey Urien Rheged de Gorre era su esposo, varias veces trato de separarse de él, pero no podía ser egoísta con sus deseos, ella lo sabía, si lo hacia el destino podría cambiar y eso era algo mucho o demasiado fuera de su poder, no simplemente podría afectar toda la historia, si no que Alaya actuaria en consecuencia,

"Pero aun así..." se mordió los labios con frustración.

Ella quería saber más de ese pelirrojo, la curiosidad la estaba matando y aunque estuviese unida de cierta manera a Gaia no simplemente puede ver su información, Gaia debe de autorizar el conocimiento sobre el hombre, pero por más que trato pedírselo no encontró nada.

Dejaría de investigar si Gaia la hubiese sancionado, pero sentía como si la estuviese alentando a saber más sobre el desconocido.

"Debo de estar volviéndome loca..." un suspiro de cansancio escapo de su boca.

Mientras estaba perdida en sus pensamientos no se dio cuenta que alguien entro en su estudio o también conocido como taller para los magus.

"Querida..." dijo un hombre detrás de ella.

"Mi rey ¿Cómo puedo servirle?"

Urien sonrió al ver como su esposa le daba una sonrisa cortés, él no era estúpido, sabía que la mujer no lo apreciaba, el tener un hijo con ella fue solo un sueño, pero a pesar de eso de alguna manera pudo convertirla en suya.

Por su parte Morgan que estaba sonriendo, interiormente pensaba en diferentes formas de como matar a este hombre, pero aun asi no dejaba que su fachada se rompiera, era una de sus muchas cualidades.

"Mi querida esposa, ya deberías de saber para que estoy aquí" dijo comuna sonrisa asquerosa.

"Y lamentablemente para usted mi rey, no quiero desperdiciar 10 segundos de mi tiempo para satisfacerlo" replico Morgan aun manteniendo su fachada.

El rostro de Urien se volvió rojo de ira, estaba claro que ella se burló por su capacidad sexual, pero no podía hacer mucho, secretamente quería hacer que la mujer frente a él se doblegara a sus pies, aunque sabía que sería casi imposible, la única razón por la que ella no a actuado en su contra es porque es el rey, de alguna manera sabía que si lograba cabrear a la mujer terminaría muerto.

"¿Se puede saber en qué desperdiciaras tu valioso tiempo?" pregunto Urien.

"Tengo una reunión muy importante que atender"

"¿Puedo...?"

"Lo lamento su majestad, pero las personas comunes no tienen permitido el acceso"

Urien no pregunto nada más, no podía interferir con lo sobrenatural, respecto a ese tema le hacía tener un complejo de inferioridad con ella, pero no podía simplemente demostrarlo.

"Liliana..." llamo a su pequeña aprendiz.

Frente a un carruaje esta una hermosa joven de cabello plateado con ojos color gris con un atuendo de mucama, esa mujer es tanto la estudiante como la sirvienta personal de Morgan y algo que ella podría denominar, amiga más cercana.

"¿Necesita algo Morgan-sama?"

"Liliana, nos dirigimos a la asociación"

"Como ordene" hizo una breve reverencia.

No podía entender que es lo que sucedía, se supone que todo saldría de maravilla en su cita con Vivian, pero para su sorpresa ella solo lo miro con indiferencia y desprecio, no podía entender porque lo miraba de esa forma.

Tenía un plan perfecto para seducir a esa hermosa hada, pero ahora no servía de nada, no solo fallo en entrar a sus dominios, si no que al parecer el mundo le dijo todo lo que sabía sobre sus costumbres como medio-incubu.

"Ugh molesto, no entiendo que tiene de bueno ese pelirrojo"

A decir verdad, si sabía que tenía, por alguna razón podía sentir una ligera atracción al joven, no lo malentiendan, sin duda ama a las mujeres, pero no se puede negar que el chico posee un factor que lo hace atractivo a la vista de las mujeres.

"¿Qué te ocurre Merlín? Luces abatido" dijo Gawain "... por lo regular estarías haciendo una broma o seduciendo mujeres o... ya lo sé ¿fuiste rechazado?"

"Kuk... no fui rechazado" murmuro abatido "... es solo... necesita tiempo para que entienda lo grandes que son mis sentimientos"

Gawain solo miro al mago como si fuera un idiota ¿sentimientos? ¿Merlín? ¡que broma! Sin duda alguna sería más fácil expulsar a todos los sajones de Bretaña a que Merlín tuviera verdaderos sentimientos por una mujer, claro que no lo diría en voz alta, pero todas las personas que conocían al mago de las flores pensarían lo mismo.

Merlín solo le dio una mirada molesta al caballero, estaba claro que no le creía, bueno, no es como si estuviera diciendo la verdad. Pero le ofendía que no le creyeran y menos en esta situación donde por primera vez cuestiono su belleza.

"De cualquier manera ¿Qué opinas de Sir Shirou?"

"Grrr..." gruño molesto "Solo es un magus cualquiera, no necesitas estar tan sorprendido"

"Pero Lady Vivian abogo por él, y sabiendo sobre eso queda claro que no es cualquiera, también se ganó a Galatine" sostuvo el mango de su espada.

Eso era cierto, Merlín aún seguía intrigado por ese evento, pero al no conseguir respuestas simplemente lo dejo ser, no es como si fuera una verdadera amenaza para él.

"Ahora que lo pienso ¿Dónde están tus hermanos?"

"Ah... la hermana del rey o 'madre' está en camino, pasaran un tiempo juntos mientras tanto, aun no se ha decidido el día que partiremos"

"... veo" dijo el mago "¿la siguiente cruzada será cerca de Escocia?"

"Al parecer por ahí es donde están entrando los sajones, realmente no entiendo cómo es posible que los escoceses no puedan hacer algo con ellos, después de todo lleva una increíble cantidad de tiempo rodear la isla"

"Bueno no puedes culparlos, no es como si pudiéramos predecir eso..."

"¿acaso no puedes hacerlo?"

Merlín puso los ojos en blanco, no era la primera vez que tenía esta conversación, después de todo sus visiones estaban mayormente ancladas al destino y solo podía acceder a ellas si Gaia se lo permitía, claro, había maneras de burlar a Gaia pero tenía graves repercusiones en su cuerpo, la última vez que lo intento estuvo en cama alrededor de un año.

"Ya les e explicado que no es tan simple y solo puedo hacerlo en sueños" dijo con un poco de molestia.

Gawain solo se encogió de hombros "Ahora que lo pienso no e visto a Mordred o el rey..."

Merlín solo le dio una mirada de reojo.

Aunque tenía una ligera sospecha de que Mordred tenía algún tipo de relación con su alumna no podía llegar a algún tipo de conclusión ya que jamás la había visto sin casco ahora que lo pensaba ¿alguna vez se bañaba?

"No tengo idea"

bam

Pero como si su pregunta tuviese una respuesta instantánea, se pudo ver como Mordred salía de la sala del trono claramente molesta, seguida de ella estaba el rey.

(algo sucedió)

"Hola Mordred ¿Qué te...?"

Pero el (ella) solo ignoro a Gawain y siguió caminando como si no lo hubiesen llamado en primer lugar, para las personas que vieron eso quedo claro una cosa.

Mordred estaba extremadamente molesto, no estaba su típica actitud salvaje o comentarios alocados, solo era una furia silenciosa lista para ser liberada.

Traicionada.

Era asi como se sentía, no podía negar su relación con el rey de los caballeros ¿Qué tenia de malo querer ser aceptada? Ella solo quería que la reconociera como su hija, no pedía mucho más.

Claro el trono estaba como parte del trato pero ella en sí no lo quería, lo único que de verdad deseaba era que la llamaran su hijo con orgullo, pero decidió darle vueltas al asunto, era demasiado vergonzoso para ella decirle que trabajaría duro para hacerlo sentir orgullosa como padre, era su sueño ser nombrada el orgullo del rey.

Pero en el momento en el que le mostro su identidad como su hija ¿Qué fue lo que quedo? Solo un jodido sentimiento de traición ante su respuesta monótona.

"¿Qué carajos quiere decir con no ser digno?" bufó "... es solo una tremenda mierda"

Tal vez ahora entendía a Tristán un poco, no podía negar que ser perfecto lo hace menos humano, era inevitable que su reino y sus caballeros la miraran con miedo, claro algunos aun la admiraban.

"¿Y qué? No es como si me fuera a reconocer..."

Aunque estuvo tentada a contactar con su madre, se abstuvo de hacerlo, su relación con ella en su mayoría era secreta, no es como si fuese a correr directo a ella y hacerle un berrinche, después de todo esa mujer en más de una ocasión la trato como si fuese basura.

"Tch"

Mientras caminaba a pasos agigantados ignorando todo a su alrededor llego a su lugar feliz, lo denomino de esa manera porque de alguna manera podía relajarse, ver el atardecer desde esta parte de la montaña era lo mejor.

"Hah... verdaderamente hermoso"

Dijo mientras aflojaba su armadura y se desmaterializaba, era lo único bueno que había hecho esa mujer por ella.

Mientras se sentaba para relajarse no se dio cuenta de que había alguien a su lado.

'cough cough' una tos se escucho a su lado.

Intrigado.

Era como se sentía en este momento, después de algunas semanas viviendo en el bosque encontró un tanto extraña su situación, no solo seguía sin comprender por qué Gaia lo había ayudado, sino que también ha estado lidiando el cómo vivir una vida tranquila.

Es algo que lo llena de remordimientos, EMIYA no era un idiota, puede que este sea solo una ilusión puesta por esa estúpida entidad la cual estaría más que encantada de verlo retorcerse en aun mas agonía, pero...

Suspiro.

Solo podía suspirar con resignación, no le quedaba mucho de su persona, lo único que realmente lo identificaba como Emiya Shirou era su apariencia y su vínculo con Avalon el cual a pesar de todo aun lo reconocía como digno de ser su portador.

Esos eran sus pensamientos mientras estaba sentado en la ladera de la montaña, no podía decir mucho sobre su situación actual, solo callarse y esperar a ser digno de la Utopía Siempre Distante, eso fue hasta que se escucharon pasos y lo sacaron de sus pensamientos.

"Hah... verdaderamente hermoso" dijo el caballero (a)

Shirou solo pudo mirar sorprendido la figura debajo de la armadura, claro, supuso que de alguna manera se parecería a Saber, pero ¡Eran jodidamente idénticas!

'cough cough' tosí al ver que Mordred no me prestaba atención.

Fue divertido ver sus expresiones, era casi cómica la manera en que su rostro se torcía de diferentes maneras, sorpresa, ira, tristeza, melancolía era difícil saber lo que la chica a su lado estaba pensando, pero sin duda alguna era divertido de ver.

"Sin duda alguna hermoso" sonrió burlonamente a la rubia.

"A-Awawa..." no podía siquiera formular las palabras por la vergüenza "N-No es lo que parece..."

"No, no, continua, sin duda alguna estas frustrada" levanto los brazos para alentar a la chica.

Estaba claro que se estaba burlando de ella, pero Mordred aun no podía procesar lo que estaba sucediendo, ella pensó que no había nadie, no solo por el hecho de que Shirou claramente se estaba burlando de ella, sino que no podía terminar de formular sus palabras.

"Asi que dime ¿Por qué estas tan molesta?" dijo Shiro.

Mordred vacilaba de hablar con él, a pesar de conocerlo por meras interacciones y algunos roces (peleas), no conocía casi nada acerca del pelirrojo, pero aun asi, había algo en el que parecía confiable.

"Y-yo... soy hijo del rey..." dijo mientras cerraba los ojos esperando alguna señal de respuesta, pero no hubo exaltación, solo la típica mirada aburrida que tenía "¿¡acaso no puedes creerme!?"

"¿Tu?" dijo Shirou tratando de lucir sorprendido "wow... yo pensé que ese rostro, los ojos, la figura y el cabello... sin duda alguna es difícil notar el parecido que tienes con el rey de los caballeros"

"¡Ves te dije que no me creías!" exclamo Mordred molesta.

Shirou trataba de no reír por el comportamiento de Mordred, sin duda alguna ella no se dio cuenta de que estaba siendo sarcástico, pero la dejo ser, parecía una niña que estaba haciendo un berrinche.

"Asi que... ¿Cuántos años tienes?"

Era principal saber la edad de Mordred, según Shiro dedujo por la época en la que se encontraba Arturia debería de tener alrededor de 25 años.

"10 años..." apenas fue audible para Shiro.

"..." el solo abrió los ojos en shock, pero de inmediato se molestó, sin duda alguna es una niña, aunque Illya tratara de lucir inocente con su apariencia ella era mayor que el ¡Y eso no se podía negar!

"Y-Yo... mi madre me dijo que era hijo del rey y estaba feliz, inmensamente feliz de ser hija del gran rey de los caballeros"

Aunque trataba de lucir abatida, su sonrisa la estaba traicionando.

"... pero en el momento en que le dije al rey el solo me dijo que no era digno de su reino" su mirada se convirtió en una de odio "ni siquiera me reconoció como su hijo ¡Mierda!"

"Tranquila..." puso una mano en su hombro al ver que el suelo comenzaba a agrietarse "Bueno no puedo hablar por él, pero sin duda alguna no eres digna del trono"

"¡Tu tam...!" trato de dirigir su ira a Shiro, pero el solo le indico que se calmara.

"El ser rey, no quiere decir que solo serás un adorno, necesitas el carácter, el carisma, los conocimientos, dime ¿Qué sabes acerca de gobernar? ¿sabes algo sobre finanzas? ¿siquiera sabes sumar?"

"¡Claro que se sumar! 11 es igual a 2 ¿no es asi?"

"... " Shiro solo suspiro con cansancio "... no es tan simple como eso, las finanzas se manejan en base a sumas y restas, manejaras el dinero de toda bretaña, no simplemente puedes esperar que funcione de alguna manera ¿acaso no has visto como luce Agravain?"

" ¿El que tiene que ver con...? Oh..."

Se dio cuenta, al fin pudo comprender porque siempre luce tan cansado como si todo a su alrededor fuese una molestia, estaba claro que el manejaba las finanzas del rey, ugh... y pensó que sería fácil el estar en el lugar del rey.

"Ahora dime ¿alguna vez haz dirigido a un escuadrón de caballeros?"

"No" murmuró abatida.

Mordred tuvo la sensación de que su madre la estaba regañando, por lo que con un poco de vergüenza miro al pelirrojo a su lado que seguía explicándole lo que seria gobernar, lo que necesitaría para hacerlo.

"Por eso te digo que aun no eres digna de hacerlo"

Shirou, solo miro a la niña a su lado, sin duda alguna no había otra manera de verla que como una niña, siempre recta, sin nadie en quien confiar, no tiene amigos, nada que pueda conectarla a las personas a su alrededor, pero por fuera, o por lo menos en estos momentos, le recordó a Illya la misma mirada inocente, pero con una sonrisa juguetona y un sonrojo al darse cuenta de que estaba mal.

Inconscientemente puso su mano en su cabeza y comenzó a alborotarla.

"¡Y-Que crees que haces!" exclamo Mordred, pero no se separó, al contrario, le agradaba la sensación de que acariciaran su cabeza.

Shirou solo se rio felizmente al ver la actitud de la niña, no había manera de que esta chica a su lado acabara con bueno, no podía decir mucho, el termino convirtiéndose en un genocida después de todo.