Hola chicos, espero que les guste este capítulo de esta serie sobre Rito y Nana.


Vacaciones

(Rito Nana)


Vacaciones

Rito y Nana estaban de vacaciones. La llamada "Semana de Oro" había iniciado y en todo Japón se vivía un ambiente lleno de relajación. La joven pareja disfrutaba de momentos simples, llenos de cariño y calma.

Ambos estaban mirando las noticias, habían muchas cosas que pasaban día a día en las diferentes regiones del país. Algunos accidentes graves, otras notas sobre la crisis económica que se vive en el mundo por el cambio de las energías para el planeta.

—¿Crees que un día puedan ustedes los humanos usar energías como las de mi planeta? —preguntó Nana, quien estaba recostada sobre su marido.

—Depende mucho de quién es la persona que desee llevarlo a cabo—contestó Rito con calma—. Hay personas malas que solo les interesa el dinero, pero también hay personas buenas que se preocupan por el ambiente y sus animales, como tú o cómo…

—No la nombres, al menos no por ahora.

—Lo siento.

Nana soltó un suspiro. En verdad deseaba que la Tierra mejorara para las visitas de su padre, quien en más de una ocasión hizo el comentario sobre conquistarla. No sabía si bromeaba o no, pero entendía bien sus motivos tras ver cómo la gente de Japón se comportaba, a veces rayando en lo absurdo.

—Sabes, no quiero pensar en esto—dijo Nana a la vez que se levantaba y estiraba su cuerpo—, tenemos siete días de vacaciones, deberíamos hacer algo como ir al cine o pasear por el parque. No quiero que esta semana nos dediquemos a solo estar en casa.

Rito entendía muy bien a su esposa. No debían desperdiciar tan buen inicio de semana estando en casa y escuchando las noticias. Debían salir y divertirse mientras tenían energía para hacerlo.

Justo en ese momento, casi como si fuera una obra divina, un informe sobre las playas de Osaka apareció. Los ojos de ambos brillaron al verlas. Escaparse ahí no sería tan malo, aunque deberían revisar todo antes de ir por unos días.

—¿Qué opinas? —preguntó Rito en espera de una reacción positiva de parte de su princesa.

—¿Qué opino? ¡Que obviamente debemos de ir a esas playas! Hace tiempo que no vamos, aunque me preocupa el hecho de que tú «suerte» nos lleve de nuevo a la comisaría.

—¡N-No fue mi intención!

La princesa había sacado a relucir un incidente que hace poco sucedió. Era su fin de semana libre, uno que aprovecharon para acampar solo para terminar en la comisaría de policía debido a un asalto sexual de parte de su marido a la Jefa del Departamento de Policía de la Ciudad. Lo bueno fue que pudieron comprobar que la «suerte» que él poseía provocaba esas escenas.

—¡Decidido, los Yuuki vamos a la playa! —exclamó Nana para sacar un WALKMAN y poner una canción latina de Luis Miguel—. Cuando Calienta el Sol, aquí en la playa…