Yamcha llegó a su departamento donde vivía sólo con Puar. El minino lo esperaba allí con él almuerzo listo. El ex bandido se había ido de allí con la excusa de que iba a ver cómo se encontraba Bulma por lo ocurrido el día anterior, sin embargo dado lo que había visto, volvió hecho una furia.

Hola Yamcha, ya que viniste podemos comer, hice ramen para el almuerzo-dijo con una sonrisa el gato mágico. No tardo demasiado en ver la expresión contrariada en la cara de su mejor amigo-¿Estas bien? ¿Viste a Bulma?-preguntó curioso.

Así es, no sólo la vi, sino que la encontré en la cama con Vegeta dormido en ella-dijo el humano con enojo en sus palabras.

¿Se acostó con Vegeta?-preguntó sorprendido el minino. No se esperaba de ninguna manera aquella declaración.

No estaban haciendo eso, Vegeta estaba dormido en su cama de espaldas y Bulma le estaba haciendo caricias en el cabello-dijo el lobo solitario con desdén-Aunque no descarto que ya hayan estado juntos de esa forma, no lo sé.

Bueno, por lo que dijiste que viste anoche probablemente no haya sido así. Dudo que Bulma este con él y mucho menos tan pronto-dijo el gato haciendo referencia al corto plazo de tiempo que el humano llevaba separado de la peli azul, que no constaba más que de unos meses.

No entiendo cómo puede estar de esa manera con él. Por más que sean amigos o no eso no es normal, Vegeta me mató-dijo el hombre de la cicatriz con indignación.

No sabes si hay posibilidad de que estén juntos Yamcha, quizás son amigos por tanto tiempo que pasan juntos, es decir, Vegeta vive en su casa-dijo el gato de manera racional.

Los amigos no salen juntos en el día de los enamorados-dijo el humano con el ceño fruncido mientras se tornaba pensativo.

Tampoco los asesinos espaciales -dijo Puar a su vez-Aun así no deberías rendirte tan fácil, yo dudo que Vegeta vaya a estar dándole flores. No creo que tengas tanta competencia-dijo el gato intentando animarlo.

Debo hacer algo para separarlos, pero no se me ocurre qué-dijo pensativo el bandido del desierto-Vegeta no está interesado en nadie como para poder distraerlo con una mujer-dijo nuevamente.

Quizás no le gusten las humanas-dijo Puar-pero eso no tendría sentido si según tu le gusta Bulma.

Humanas-dijo pensativo Yamcha-¿Puar crees que.. A Vegeta pudo gustarle alguna mujer que no fuera humana antes de venir aquí a matar personas? -preguntó curioso.

No creo que tengamos modo de saberlo Yamcha, además en caso de que así hubiera sido ¿De qué nos serviría si esa mujer está muerta o fuera del planeta? -preguntó Puar dudoso.

Yamcha lo miró ingeniando un plan en su cabeza detalladamente. Una vez pensado el método, habló.

Las esferas del Dragon Puar-dijo mientras tomaba el tazón de ramen entre sus manos para comerlo rápidamente.

¿Eh? ¿Las esferas?-preguntó confundido Puar.

Así es, podemos usarlas para traer a una mujer que aleje a Vegeta de Bulma, de seguro ha conocido alguna que le ha robado el corazón alguna vez-dijo el ex bandido con una sonrisa en su rostro-y si es así podemos traerla aquí o revivirla.

¿Pero y si Vegeta no se ha enamorado de ninguna mujer? -preguntó el gato dudoso.

Entonces voy a pedirle a Shenlong que lo mande a algún lado lejos de aquí, para hacerlo más sencillo-dijo el ex bandido con una sonrisa divertida.

¿Y qué tal si es necesario para acabar con esos androides que van a venir en un par de años?-preguntó nuevamente el gato volador.

Esta bien entonces, haremos el primer plan, y sino ya se me ocurrirá algo. Tampoco pretendo poder estar con Bulma pero morir a manos de esos androides-dijo el humano pensativo.

Yo creo que es una mala idea-dijo Puar nuevamente mientras comenzaba a devorar su almuerzo-Deberías olvidarla y salir con alguna de tus admiradoras de baseball.

Ya Puar, ayúdame a encontrar las esferas lo antes posible para pedir mi deseo-dijo el ex bandido con decisión.

De acuerdo-cedió el gato volador resignado-Luego no digas que no te lo advertí-Puar siguió comiendo su almuerzo mirando con recelo a su compañero, era una muy mala idea.

Oye Vegeta despierta-dijo Bulma de manera suave mientras acariciaba levemente la cara del saiyajin. Todavía estaba en su cama durmiendo mientras recibía las caricias de la peli azul de forma apacible.

Mm...-tan solo emitió un ruido dando a entender que no quería levantarse todavía. La anterior noche no había sido capaz de dormir demasiado.

Habían pasado largas horas en la terraza de aquel edificio, donde se había evidenciado que si bien no lo admitían abiertamente, algo sucedía entre ellos dos. Luego de haberse besado y haber disfrutado de la compañía del otro allí, habían decidido arribar a la corporación.

Habían perdido completamente la noción del tiempo ya que, apenas notaron la cantidad de horas que habían pasado cuando vieron el sol asomarse en el amanecer, una vez que llegaron al hogar de la científica se sentían un poco cansados por trasnochar. Además de que Bulma se encontraba preocupada por llegar a tales horas de la madrugada.

Se sentaron cerca de un árbol pretendiendo esperar a que las ventanas se abrieran y se desactivara el sistema de seguridad para poder entrar sin que los padres de la peli azul lo notaran. Aún así fue un plan fraudulento, dado que se quedaron dormidos al pie del árbol que se encontraba en el jardín.

Vegeta ¿No tienes que entrenar hoy?-preguntó insistente mientras pellizcaba una de las mejillas del saiyajin.

Mmm...-refunfuñó nuevamente el saiya mientras se inclinaba levemente hacia un lado sin incomodar al contacto que ejercía la mujer con su rostro.

Ya es entrado en la tarde ¿Quieres ir a tomar un café conmigo?-preguntó, sabía que el saiya estaba despierto y también bastante dócil dado que permitía el pleno contacto físico.

El saiya se sentó en la cama con expresión adormilada, se veía ciertamente adorable dado que tenía el cabello despeinado y no parecía estar de un notable malhumor.

¿Que hora es?-preguntó mientras se acomodaba el cabello con cierta pereza.

Las seis de la tarde-respondió Bulma, sabía que para el saiya eso ya era muy tarde como para irse a entrenar, había perdido bastante tiempo durmiendo intentando recuperar el sueño que se había perdido la noche de San Valentín.

De acuerdo-dijo Vegeta con tranquilidad, Bulma sonrió al oír que había aceptado su invitación-Pero sin cámaras esta vez-dijo el saiya a modo de advertencia, las luces del flash impactando en sus ojos le molestaban.

De acuerdo-dijo Bulma también, imitando la respuesta que el saiya había dado antes.

Voy a peinarme un poco-avisó mientras se ponía de pie y se dirigía a la puerta de la habitación de la peli azul, la científica sonrió, no pudo evitar pensar que iría a arreglarse para ella.

Te espero abajo-dijo Bulma antes de que el saiya cruzara la puerta, este le hizo un gesto con la mano indicando que la había oído sin darse vuelta a mirarla.

Bulma se dispuso a arreglarse dado que estaba con ropa de casa, entró en su baño para darse una ducha y luego cambiarse de ropa. Una vez bañada se dirigió a su armario a buscar ropa para ponerse, optó por unos jeans negros, una camiseta gris y unos zapatos sin taco rosa pastel, después de todo tan solo estaría en su casa por el resto del día.

Una vez en su cuarto, Vegeta se duchó también dado que no había tenido tiempo para ello por el percance con aquellas humanas que lo acosaban, además había dormido sentado en el césped y quería cambiarse de ropa. Se duchó y se vistió con unos sencillos pantalones y zapatos negros y un poleron azul oscuro. Ese día ya no entrenaria, su sueño estaba cambiado y además había perdido mucho tiempo.

Mientras se cambiaba la ropa se reprochó a sí mismo haber cedido el día anterior con la peliazul. Sino hubiera seguido el juego que la humana le había planteado no habría perdido tanto de su valioso tiempo de entrenamiento. Sin embargo, no pudo evitar pensar en el beso que le había dado a la humana en la azotea de aquel edificio, se sonrojó cuando aquello cruzó su mente. Hace mucho tiempo que ese tipo de cuestiones no invadían sus pensamientos.

Pensó seriamente en rechazar la solicitud de Bulma de tomar café con ella, si seguía relacionándose con ella seguramente eso se interpondría en la forma de vida que había adoptado en cuanto debió unirse al ejército de Freezer. Desde aquello había decidido que tan sólo se ocuparía de ser cada vez más fuerte y no permitir que nada se interpusiera con eso.

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando notó que el ki de la sabandija estaba cerca de la casa, no se había ido hace mucho y ya estaba allí fastidiando de nuevo.

Sin pensarlo dos veces se dirigió al comedor de la casa Brief, al arribar allí logró escuchar la voz de Bulma y su madre conversando en la cocina, sintió el olor de café y pastelillos en el ambiente. Luego de un par de minutos de estar sentado allí, Bulma entró en el comedor con una bandeja con pastelillos y dos tazas de café.

No sabía que ya estabas aquí, creí que te habías dormido otra vez-dijo Bulma mientras posaba la bandeja en la mesa.

Estaba tomando un baño-se excusó el saiya, no solía ser muy comunicativo con las personas, pero no podía evitar serlo un poco más con ella, después de todo se veían todo el tiempo.

Bulma se sentó a la mesa mientras aproximaba una taza de café hacia Vegeta y dejaba la bandeja con pastelillos en el medio, tomó la otra taza para sí y tan sólo sonrió.

Vegeta se limitó a dar un sorbo a su café hasta que se detuvo abruptamente y miró a su alrededor con sospecha.

¿Sucede algo?-preguntó Bulma al notar las acciones del saiya, parecía estar alerta.

Me pareció escuchar algo alrededor de la casa, hace un rato sentí el ki de la sabandija cerca de aquí ¿Tú le dijiste que viniera?-preguntó Vegeta, le extrañaba sentir el ki del humano tan cerca sin ver señales de él por allí.

¿Hablas de Yamcha?-preguntó Bulma confundida, Vegeta asintió- Yo no le dije que viniera, no hace mucho que se fue ¿está aquí?

Siento su ki en el patio trasero de la casa- dijo Vegeta, aquello era extrañamente sospechoso, siempre que sentía el ki de ese humano cerca se dirigía directamente a ver a Bulma.

¿Y no está viniendo para donde estamos nosotros?-pregunto Bulma confundida, Vegeta se levantó de la mesa en cuanto escuchó un ruido que parecía proveniente del patio, se dirigió al patio seguido por Bulma que también lo había oído.

El patio de la casa Brief ya se veía bastante oscuro, estaba levemente iluminado por las luces exteriores, Vegeta se dirigió directamente a donde sentía el ki de Yamcha, le parecía muy sospechos que estuviera en esa parte de la casa sin anunciarse con la peliazul. En el patio trasero de la corporación se encontraba justamente el laboratorio de los Brief.

Al acercarse allí vieron un bote de basura estrellarse contra la cerca que rodeaba la propiedad, Vegeta miró hacia donde estaba el bote de basura y luego procedió a entrar en la casa por la puerta de atrás, la peliazul lo seguía de cerca un tanto asustada, el impacto la había alarmado un poco.

Al entrar, el príncipe saiyajin visualizó el laboratorio detenidamente, no parecía haber nada extraño allí.

Parece que no hay nadie aquí-dijo Bulma, estaba un poco mas tranquila al ver que todo parecía estar en orden en su laboratorio.

Vegeta caminó un poco adentrándose más en el laboratorio, lo conocía bien dado que generalmente buscaba a la humana allí cuando la necesitaba para algo. Al aproximarse al escritorio que había allí notó que cerca de él había una hoja tirada en el suelo, la levantó lentamente.

Bulma miró lo que Vegeta había levantado y luego el escritorio, el cual tan solo tenía una pequeña lámpara de lectura en ella y su computadora portátil, tomó la hoja que Vegeta había recogido y la examinó.

Esto lo escribí hoy, es parte de mis notas, y las guardé en el cajón del escritorio-dijo Bulma pensativa, ella habría notado si alguna se le hubiera caído, aseaba el laboratorio cada día después de terminar allí. Abrió el cajón del escritorio donde se suponía que la nota debía estar y notó algo mal en él, no podía recordar qué había exactamente en ese cajón.

No siento el ki de la sabandija por aquí-dijo Vegeta confundido, estaba seguro de que el ex novio de Bulma había estado allí, le parecía muy extraño que hubiera desaparecido de la nada.

El rastreador no está-dijo Bulma al recordar bien qué solía guardar allí, no había prestado atención a lo que Vegeta le había dicho-espero haberlo guardado en otro lado-dijo comenzando a revisar en los bolsillos de una bata que tenia colgada en el respaldo de la silla del escritorio. Luego se propuso buscar en algunas cajas que había apiladas cerca del escritorio, el rastreador no estaba.

Ufff casi-suspiró Yamcha aliviado. Se encontraba en una montaña lejana junto con Goku el cual estaba un poco confundido.

Aún no entiendo para qué querías que te ayudara a robarle el rastreador de las esferas del dragón a Bulma, si le hubieras dicho que querías revivir a alguien importante para ti ella lo habría entendido y seguro te lo habría prestado-dijo Goku, le parecía muy riesgoso incluirse en el plan de su amigo para apropiarse del rastreador, Vegeta casi los había descubierto.

Es que Bulma seguro creerá que podríamos necesitar las esferas por alguna emergencia y yo de verdad quiero revivir a mi tío Goku, tenías que hacerme este favor, además no habría podido hacerlo solo teniendo en cuenta que Vegeta está viviendo allí-dijo, había engañado a Goku sobre el deseo que le pediría a Shenlong, supuso que no lo ayudaría si le hubiera dicho la verdad sobre su plan.

Casi nos descubre, si Vegeta te hubiera visto haciendo algo extraño seguro hubiera querido matarte otra vez-dijo Goku pensativo-¿Quieres que te ayude a buscarlas? Es mejor que le regreses eso pronto a Bulma o se enfadará si descubre que tu lo tienes.

No Goku, está bien, te prometo que lo haré rápido y se lo regresaré-dijo Yamcha con una sonrisa- Puar me ayudará a buscarlas, está en camino hacia aquí.

Está bien entonces-dijo Goku devolviendo la sonrisa-¿Tú aún estás con Bulma?-preguntó curioso, quería saber si las cosas iban avanzando como se debía, si bien había visto a Vegeta cenando con Bulma en aquel restaurante no pudo ver cómo prosiguió eso dado que los perdió de vista.

Bueno tuvimos una pelea hace unos meses, pero estoy intentando recuperarla-dijo Yamcha, se negaba a aceptar que Bulma lo hubiera rechazado completamente.

Ah, no sabía, suerte con eso entonces-dijo Goku, realmente no deseaba que Yamcha se reconciliara con la peliazul, pero no podía decir algo sospechoso sobre ello-Nos veremos después, es un poco tarde y debo irme, Milk me matará sino vuelvo para la cena-se excusó.

De acuerdo Goku, hasta luego-lo saludó Yamcha sonriente. Goku desapareció rápidamente de allí con la teletransportación-Bien, ahora que tengo el rastreador podré poner en marcha mi plan-dijo empezando a volar rumbo a su casa, debía buscar a Puar para que lo ayudara a recolectar las esferas lo más rápido que le fuera posible.

Muchas gracias por leer hasta el final, agradeceré los reviews que quieran dejarme. Saludos.

Nieblaneit0r.