DISCLAIMER: NARUTO NO ME PERTENECE ES PROPIEDAD DE MASASHI KISHIMOTO.
Esta historia es completamente de mi autoría, cualquier adaptación o traducción favor de consultarla conmigo.
Prueba y Ojos Carmín
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Sasuke
Por fin había llegado el jodido miércoles
Estiró su cuerpo y bostezó pesadamente con sus ojos aún cerrados. Parpadeo varias veces para acostumbrar su vista a la luz del amanecer que se asomaba violentamente por su ventana.
Se levantó completamente y bajo de la litera que compartía con el Uzumaki, había tratado de relajarse lo más posible la noche anterior para evitar cualquier tipo de estrés para el siguiente día, lo cual había significado no meterse a al dormitorio con sus ruidosos compañeros hasta la hora de dormir. Se había ido a distraer al gimnasio del instituto para después ir a la biblioteca a despejar su mente. Era una de sus rutinas de cada año antes del esperado examen de cálculo.
Camino hacia el baño para tomar una ducha fría para despertar aún más su cuerpo y mente. La frías gotas de agua escurrían lentamente por su cuello para después perderse en su marcado abdomen, al haberse expuesto a aquella temperatura del agua de manera tan drástica, su cuerpo dio un respingo ante el súbito contacto. Salió de la ducha después de haberse lavado como de costumbre y procedió a cambiarse el uniforme del instituto.
Una vez alistado, volteó hacia la litera que Shikamaru y Choji compartían, encontrando la cama del castaño completamente vacía.
Sasuke enarcó una ceja ceja. Desde el primer año, al haber reconocido clandestinamente que Shikamaru estaba a su nivel o incluso más arriba, ambos habían comenzado la tradición de llegar juntos al examen.
Shikamaru Nara era de las pocas personas que Sasuke realmente respetaba y que consideraba mejor tenerlo de aliado que de enemigo. Sabía de antemano que el castaño podía vencerlo en aciertos y promedio.
Claro, en el hipotético caso de que el quisiera.
Y esa era su mayor ventaja: la escasa ambición y la poca emoción de este sobre el examen eran las razones por las que Sasuke se confiaba tanto del examen, por que si no era Shikamaru, nadie podía estar arriba de el en los aciertos del examen.
Salió del dormitorio. La afluencia dentro de los pasillos escolares y el aura competitiva que emanaba el ambiente, hacían notar el evento académico más importante del año, los alumnos cuchicheaban entre ellos al verlo. El azabache sonrió de lado, si bien no le gustaba ser el centro de atención, reconocía que el hecho que los demás estudiantes supieran que el iba por una victoria segura al examen hacía que su ego y confianza crecieran descomunalmente dentro de él.
Llegó al salón de cálculo haciendo que su sola presencia hiciera que los demás estudiantes hicieran un mohín de miedo, se sentó hasta en frente del aula, según el para evitar la atención de la bola de idiotas de atrás que para su sorpresa eran más que los años anteriores.
Había comenzado a sacar sus cosas hasta que una voz familiar lo interrumpió.
-¡Asi es!, ¡Me verán junto a a todos esos cerebritos! ¡Ya lo verán 'ttebayo!
Esas voz solo podía pertenecerle a un solo idiota
Sasuke se volteó rápidamente y pudo ver a Naruto en la fila de hasta el fondo del aula sentado con las piernas arriba del escritorio mientras era rodeado por varios estudiantes que lo miraban de manera atónita debido a su inusual presencia.
El rubio, a diferencia de él, si disfrutaba ser un chico popular y esto gracias a la atención que recibía en los partidos de basketball, le gustaba ser el centro del universo y hacerse notar a toda costa.
Se levantó de su asiento y se dirigió hacia el rubio haciendo que los demás estudiantes se alejaran del ojiazul.
-¿Que haces aquí idiota?- Preguntó el azabache tomándolo del cuello de manera brusca.
-Buenos días también para ti, teme- Saludo el rubio mientras mascaba una goma de mascar.
-¡Contéstame!- Volvió a preguntar jalándolo aún más fuerte.
-Bah, parece que alguien esta en sus días- Se bufó el Uzumaki. -¿Pues para que más? ¡Para el examen!
Sasuke frunció el ceño y soltó Naruto dejándolo caer en la silla.
-¿Por que tan repentinamente?, Nunca te ha interesado y no te cansas de decir que todos en el grupo de cálculo avanzado son un nerds egocéntricos.
-¿Y miento?
Con su paciencia al borde del colapso, golpeó su puño sobre el de escritorio y acercándose al rubio con un semblante amenazante.
-Yayaya, si sigues con esa actitud te verás igual ojeroso que tu hermano. Yo sólo quería ver a Sakura-chan, seguro que no tarda en venir.
Con que eso era
-¿Y no te va a dar pena que te vea comiéndote las uñas en el examen por que no sabes nada?- Dijo el ojionix más relajado.
-Pfff, claro que no. Eso no va a pasar.- Aseguró Naruto sacándose el chicle de la boca y pegándolo abajo del escritorio.
-Ya veo- Soltó mirándolo de reojo- Quieres reprobar para que cuando ella lo haga, puedas ir a consolarla. Bastante astuto de tu parte, Naruto.
-Ya qui...- El Uzumaki había dejado de hablar de manera repentina fijando su mirada en la puerta del aula.
Y ahí estaba ella. La molesta e irritante chica de cabello rosado, estaba siendo animada por lo que parecía ser su grupo de amigas, las cuales también conocía, pero no les hablaba por el simple hecho de que Ino Yamanaka fuera parte de su ellas.
-Ahora ve y aprende como se conquista a una chica, nee Sasuke- Naruto se levantó de su asiento.
El Uchiha sintió la fuerte necesidad de acompañar a Naruto para que no hiciera algo estupido; corrección, para evitar lo estupido que el rubio estaba a punto de verse.
-¡Sakura-chan!- Llamó Naruto efusivamente mientras se acercaba al grupo de chicas.
La recién nombrada volteó curiosa a ver aquella voz que le llamaba, sonrió al ver al alegre chico que iba en su dirección pero cuando sus ojos jade se posaron en el azabache, frunció el ceño.
-N-naruto-kun- Tartamudeó Hinata al ver la cercanía del Uzumaki.
Sasuke pensaba que Naruto era demasiado estupido. Hinata Hyuga, la prima de Neji, era demasiado obvia en cuanto a su pequeño enamoramiento con el rubio, y honestamente Sasuke no entendía como es que alguien se podía fijar en Naruto. Ciertamente Hinata podía considerarse como el tipo de persona que podría apaciguar la flamante personalidad del Uzumaki con su aura más tranquila.
-Hola- Saludó Sakura con una sonrisa. -¿Quien eres?
-¡Naruto!, ¡Naruto Uzumaki "ttebayo! Los dos estamos en la misma clase con Kakashi-sensei.
-Oh ya te recuerdo, debes ser alguien bastante agradable para tener un amargado como amigo- Comentó la pelirosa viendo al pelinegro.
-Hmp.
-¿Te refieres al teme? ¡Ja! Imagínate compartir dormitorio con el, ¡No podrías aguantarlo mientras habla dormido!- Grito Naruto con una carcajada.
-¿De verdad?- Sakura sonrió divertida. -Parece más del tipo que habla solo.
-¡También hace eso!
Sasuke comenzó a apretar los dientes tratando de no golpear al rubio frente a todos los que estaban ahí para no arruinar su imagen, aunque viéndolo bien, si merecía arruinar su imagen con todas las estupideces que te estaba gritando de él.
-¿También harás el examen de cálculo?- Pregunto la pelirosa.
-¡Si!, es la primera vez que lo hago pero soy de esos chicos bastante optimistas.
-Si Sasuke es tú amigo, debes haber tenido bastante apoyo a la hora de estudiar.
La miro al oírla decir su nombre. Le sorprendió que a pesar de que parecía que no le caía bien, dijera algo tan positivo de él. Las chicas normalmente lo veían como el chico guapo y misterioso, pero la superficialidad de sus intenciones hacían que no notaran los rasgos que verdaderamente le importaban a él, y que hacía todo el esfuerzo por que reconocieran sus habilidades más allá de lo físico. Habilidades que ella había notado. Su rostro mostraba naturalidad y el tono de su voz usando al pronunciaciar su nombre había sido sorprendentemente agradable, aún cuando el no lo había sido con ella.
-¿Eso crees? El teme sólo se preocupa por si mismo, aveces me pregunto por qué soy su amigo- Expresó el ojiazul indignado cruzando los brazos. -¡Pero después recuerdo la deliciosa de Mikoto-san y lo olvido! Cuando la pruebes entenderás, Sakura-chan.
Y ahora si lo golpeó
Ese idiota la estaba invitando a comer a su casa y ni siquiera se lo había consultado o algo. La confianza que había tomado Naruto en menos de quince minutos lo llevó a decir algo sin sentido como eso. No quería a ni imaginarse la cara de su padre al tener que convivir con aquellos dos, su madre seguro ser bastante amable e incluso estaría emocionada ante el hecho de que llevara amigos a su casa, y podía jurar que Itachi también se mostraría agradable.
-¿Ves a lo que me refiero?- Señaló el rubio sobándose la cabeza.
Naruto seguía hablando con Sakura cosas que no entendía por que el rubio estaba demasiado emocionado y hablaba. Se había dado cuenta que el ambiente era bastante tranquilo, y pudo ver que era por que Ino había ido al baño antes de que ellos fuera con las chicas.
-Bueno, te dejamos Sakura. No creo que quieras que Ino arme un escándalo cuando vea a Uchiha aquí- Dijo Temari. -Y ustedes dos- Señaló a Naruto y a Sasuke. -Díganle a Shikamaru que no sea gallina y vaya la junta del equipo de natación, o si no el entrenador no lo tomara en cuenta.
-Si, señora- Dijo el Uzmaki firme.
-Esta bien. Gracias por acompañarme- Sonrió la ojijade.
-Mucha suerte, Sakura-chan- Ánimo Hinata con una suave sonrisa.
Sasuke y Naruto se dieron cuenta que ya no figuraban ahí, así que tomaron su propio camino lejos del grupo de chicas. Naruto llevaba una sonrisa de idiota en la cara además de tener un brillo peculiar en los ojos, había cumplido su cometido, había hablado con la chica nueva por la que todos estaban babeando y no se había visto como el imbecil que estaba acostumbrado a ser. Sakura también pareció ser amigable con el, mostrando un lado de la personalidad que le había ofrecido a él pero se negó a ver.
-¡Shikamaru! ¡Llegaste!- Anunció el rubio la llegada del castaño.
-Si bueno, había ido a comer algo antes.
- Temari estuvo aquí, dice que...
-Me la encontré en el pasillo. Tan fastidiosa como siempre- Comentó el Nara cruzándose de brazos y recargándose en la pared. -Era sobre las competencias que habrá, seguro el entrenador hará una reunión, que se yo.
-Jóvenes- Habló un hombre entrando con una pila de hojas sobre sus manos- Tomen asiento por favor. En su escritorio no debe haber nada más que su lápiz, borrador, sacapuntas y calculadora. Sus escritorios deben tener un metro de distancia entre sí, las mochilas deben colocarse en parte de atrás del aula. Cualquier alumno que sea sorprendido copiando o sacando algo que no haya sido requerido, se le cancelara el examen.
-Bla, bla, bla- Susurró Naruto burlándose del hombre mayor. -Nee Sasuke, no se como hay gente aquí por gusto.
-Y yo no se como hay gente que pierde su tiempo aquí si sabe que no puede con el examen.
-Hn. Un examen, no es la gran 'ttebayo.
Sasuke regresó a su lugar, sabía que entre más se alejará de Naruto evitaría más problemas. No pretendía ver como Naruto pegaba sus mocos en debajo de la silla, o como hacía pequeñas bolas de papel para aventárselas a cualquier estudiante o como hacía dibujos extraños en la hoja del examen. Sin duda, el rubio podría perder su tiempo de otra manera menos estupida.
-Suerte, Uchiha- Escuchó una tenía voz a su lado. Era aquella chica de cabello rosado quien se había sentado cerca de el.
-Hmp. No la necesito.
Sakura sonrío de lado y mordió levemente la punta de su lápiz
-Lo mismo digo.
Sakura
Había visto salir a Uchiha minutos antes de que ella lo hiciera. Parecía que la confianza que el se tenía sobre aquella prueba era colosal y fácilmente podía ser percibida por la gente alrededor. Admitía que había querido ser amable con el en un inicio, mera cortesía de chica nueva, pero suficiente le había mostrado el para que su imagen sobre decayera. Sin embargo, si algo había aprendido con lo años, es de que debes llevarte de manera neutral y cordial con tus rivales para llegar a ellos. Sakura no era tonta ni mucho menos ingenua, sabía tomar los retos y metas con seriedad y si debía pasar por encima de Sasuke dañando el ego de este para que se aterrizara y dejara de ser un cretino con los demás, claro que lo haría, alguien debía hacerlo bajar de su nube de gloria.
El examen había durado cuatro horas y tal como dijo Ino, realmente estaba arriba de cualquier estudiante promedio, incluso sobre los chicos listos. Pero tal y como había dicho, ella no subestimaría el examen y se había preparado durante las noches para aquella prueba, sacrificó su sueño en pro de aquel examen.
¿Había validó la pena?
Había valido cada segundo
Sin duda la mejor decisión que había tomado había sido empeñarse de manera estricta para el examen, por que si bien reconocía que la prueba era dura, también reconocía la facilidad con la que pudo avanzar en ella gracias a las noches de desvelo, la rapidez a la hora de resolver los problemas, la comprensión de los ejercicios y la presencia de las fórmulas en su cabeza eran resultado de un gran esfuerzo.
Su teléfono vibró. Eran cerca de las doce del día, la hora de almorzar. Leyó el mensaje que aprecia en la barra de notificaciones del móvil.
"Estamos en las lomas cerca de la bibloteca, mueve tu trasero y ven, frente de marquesina"
Rodó los ojos ante el apodo con la que la llamó la rubia. Sujetó con fuerza la mochila que colgaba de su hombro y camino hacia la cafetería para recoger su almuerzo para después dirigirse con sus amigas.
El clima fuera de las paredes del internado era bastante agradable, el sol dejaba caer su rayos mientras el pasto de se dejaba bañar por estos, el cielo era tan azul que podías ver hasta a las aves más diminutas volar por el. Había varios alumnos sentados a lo largo del verde y finamente cortado cesped, sonrió ante la sensación tan cálida que sentía.
Diviso de lejo a sus amigas, acercándose a ellas a paso lento.
-¡Aqui esta nuestra chica lista! ¿Que tal el examen?- Pregunto efusiva Tenten notando la presencia de la Haruno.
-Bastante bien- Contestó sentándose junto a Hinata. -¿Que es eso?- Señaló el plato que tenía Tenten en sus manos.
-¡Oh! Olvidaba que tu no eras de por aquí. Se llama anmitsu, es básicamente hielo, helado y fruta. Es delicioso y más en estas épocas de calor.- Explico la castaña levantando su cuchara a la boca de Sakura. -¡Prueba!
Sakura miro dudosa la cuchara que Tenten le ofrecía. Volteo a ver a su compañeras quienes la incitaban a probar ese postre. Trago grueso y metió la cuchara a su boca.
El frío alimentó bajo por su garganta refrescando esta de una manera increíble, además que el sabor dulce y tropical de la fruta la embriagaba de un sabor exquisito. Ella misma se consideraba una gran fanática de la comida con sabor dulce, pero jamás se imaginó que hubiera una con una combinación tan inusual como lo era el anmitsu.
-¡Oh por dios! ¡Está delicioso!- Exclamo Sakura. -¡Es la mejor comida que he probado en toda mi vida!
-Bueno, tampoco es la gran cosa- Confesó nerviosa Tenten ante la euforia de la pelirosa.
-¡Si lo es!
Siguió deleitando su paladar con tal delicioso manjar que había descubierto. El silencio se veía acompañado por el cantar de las aves que volaban sobre el cielo azul así como las voces de los cuchicheos de los demás estudiantes que se encontraban alrededor de ellas.
-Hoy vi a Tsunade Senju- Hablo Kauri cambiando de tema y mirando a Sakura. -Le comenté que querías entrar al equipo de volleyball.
-¿Ella es la entrenadora?- Cuestionó la ojijade comiendo más del anmitsu de Tenten
Karui asintió. -Me dijo que tenía que verte entrenar para poder aceptarte o no.
-Esa mujer está loca, terminarás con todos los huesos rotos, Sakura- Advirtió Ino alarmada.
-Es verdad. Le esguinzó un brazo a Naruto-kun- Comentó Hinata asustada.
-Bueno es que no puedes llegar y decirle vieja cincuentona a una maestra, Hinata- Dijo Temari tomando de su botella de agua. -Cosa que hizo el idiota de Naruto.
-Tienden mucho a exagerar las cosas aquí- Opinó Sakura mirando incrédula a sus amigas.
-Esta vez no estamos exagerando- Hablo Karui sería mirando a Sakura fijamente. -Es bien sabido que el entrenamiento de Tsunade-sama es un infierno en toda la escuela, además, todas sus alumnas son igual que ella, pesadas y con un gran carácter, todas esas chicas están locas.
-¿No te mordiste la lengua?- Susurró entre carcajadas Yamanka ganándose un codazo en el estómago de Karui. -¡Oye!
-Deberías tener cuidado, Sakura-chan. Neji-niisan me ha dicho que los entrenamientos de Tsuande-sama son incluso peores que los de que les pone Jiraiya-sama en el equipo de basketball- Comentó Hinata tomando de las manos a Sakura haciendo que ella se sobresaltara.
-No morí en el examen, ¿Verdad? No hay razón para que lo haga ahora, relájense- Calmo la pelirosa soltando suavemente las manos de la ojiperla.
-¡En ese caso te acompañaré!- Se ofreció Ino poniéndose a un lado de la Haruno- Vamos Sakura, tienes tanta suerte de tener a la gran Ino Yamanaka de tu lado para que puedas brillar en el instituto, seguro cuando Tsunade-sama te vea junto a mi te aceptará enseguida.
-Si claro- Comentó con sarcasmo Temari. - Bien, las dejamos, Ino tiene que hacer su parte del trabajo en equipos que no hizo para inglés, nos vemos más tarde. -Finalizó para tomar de las orejas a la otra rubia.
-¡Hey, Temari no seas tan brusca!
Con dos chicas menos en su pequeño circulo, Sakura destensó los hombros, todo era una bastante nuevo para ella y enfrentarse a dos situaciones tan extremas como lo eran el examen de cálculo y el entrenamiento de volleyball de manera tan acelerada, tomaba muchas de sus energías.
-Eres muy valiente, Sakura-chan- Halagó repentinamente Hinata.
-¿Huh?
-Es verdad que los entrenamientos son una tortura, pero estoy segura que tú podrás con ellos- Apoyó la pelinegra con una tenue sonrisa.
Sakura le sonrió de vuelta con la misma sinceridad. Esa era la clase de comentarios que necesitaba, si bien le gustaba tomar como retos las subestimaciones de los demás hacia ella y sorprenderlos con los resultados de estos, le agradaba que alguien tan remota a ella y que tenían escasos días de conocerse le diera una gran confianza.
-Ese chico- Comenzó la pelirosa mientras comía más anmitsu- El del examen de cálculo, Naruto Uzumaki, ¿Te gusta verdad?
Hinata escupió el agua que estaba bebiendo previamente y mojó completamente a Tenten, quien estaba enfrente de ella. La ojiperla se llevó la mano a la boca apenada por el incidente que había causado a la castaña, para después sonrojarse violentamente ante la pregunta de Sakura.
-Y-yo, N-naruto-kun, si bueno no, es que- Tartamuedeo la Hyuga jugando con sus dedos índices.
-No te atrevas a negarlo- Amenazo Karui ayudando a Tenten a secarse.
-De verdad lo siento, Tenten-chan- Se disculpo Hinata cabizbaja.
-No es para tanto- Animo Sakura poniendo su mano sobre su hombro. -Deberías hablarle, parece ser muy amigable.
Hinata sonrió ante el gesto de la pelirosa y siguió comiendo su almuerzo sin rechistar.
Sakura había quedado con Karui e Ino a la hora de la salida para ir al gimnasio y conocer por fin al equipo de volleyball del internado.
Sería una mentira si negara el mar de sensaciones que sentía en su abdomen a causa del futuro encuentro con la famosa entrenadora de dicho equipo. Había tenido entrenadores con un régimen de entrenamiento bastante rígido y no habían tenido piedad con ella, ¿Por que debía ser diferente?
-Siempre que vengas debes traer una pastilla para el dolor y hielos, no bromeo- Aconsejo Karui mientras caminaban a lo largo del gimnasio.
-Y siempre ponte el short de entrenamiento desde antes, ya sabes, para que atrapes las miradas de los chicos- Comentó Ino guiñándole un ojo a Sakura.
-No vengo a enseñar, Ino.
-Oh vamos Sakura. Te he visto con tu pijama y si yo tuviera el trasero que tú tienes lo usaría para salir con algún chico.
-¿Quieres dejar hablar de mi trasero?- Pregunto Sakura encarando a Ino- Estoy segura que muchos chicos quisieran salir contigo aun pareciendo una "P"
-¿Que estás insinuando?- Cuestiono Ino molesta.
-Nada, solo decía.
En medio de reclamos e indirectas, siguieron su travesía a lo largo del gran gimnasio. Hasta que Ino para abruptamente, justo cuando la red y la cancha del volleyball comenzaban a para er más cercanas.
-¡Diablos!-Maldijo la rubia.
-¿Que sucede?- Pregunto Sakura mirándola confundida.
-Habia olvidado que Karin estaba ahí.
-¿Karin?
-Otra de las admiradoras de Uchiha- Informó Karui.
-Esa perra esta loca, lo digo de verdad- Expresó Ino alterada.
-Todas las fanaticas de el lo están, Ino- Dijo la morena cruzando los brazos y mirando a la ojiturquesa.
-¡No te atrevas a compararme con ella!- Grito Yamanaka atrapando varias miradas del lugar. -¡Ella juega sucio! Se aprovecha de que es la prima de Naruto para estar cerca de Sasuke-kun, además de que tiene un carácter horrible- Finalizó en un susurro.
-Eso a mi no me importa, no vengo a llevarme bien con ella- Comentó Sakura siguiendo su camino hacia la cancha.
Kurui e Ino la siguieron, una a paso más inseguro que la otra. Una vez ahí, el equipo detuvo su práctica al ver llegar a un chica que no habían visto antes por ahí, la mujer mayor se acercó a las chicas haciendo que la rubia se encogiera ante la imponente presencia de la entrenadora.
-¿Ella es la chica de la que me hablaste?- Pregunto Tsunade a Karui.
La morena asintió. La ojiavellana entre cerró sus ojos posándolos en la pelirosa que se mantenía imperturbable.
-¿Crees que pueda seguirme el ritmo?- Volvió a preguntar la Senju sin despegar la mirada de Sakura.
-Tiene agallas. Apenas llegó al instituto fue a inscribirse al examen de cálculo, yo diría que tiene potencial- Contestó la pelirroja.
-¿Ah si?
- De hecho ya he practicado, he ido a varios torneos...
Sin previo aviso y de manera repentina, Tsunade dio unos pasos hacia atrás, los suficientes para tomar una distancia perfecta para lanzar el balón que tenía en sus manos al abdomen de la pelirosa. El impacto que había recibió esta, fue lo suficientemente para hacerla doblegar y llevar sus manos a su estómago ante tan repentino ataque. Gimió de dolor, la fuerza que tenía aquella mujer era sin duda igual al de una bestia, jamás había recibido un golpe de tal magnitud. Levantó su rostro adolorido para ver el rostro de su atacante.
-Regla número uno- Habló Tsunade elevando el tono de su voz. -¡Nunca hables si no te pido que lo hagas!, ¿Como podría permitir semejante indisciplina? ¿Eh?
-Tsunade-sensei- Murmuró una chica de pelo negro corto a lado de ella.
-Silencio, Shizune- Demandó la rubia mayor. -Te dejaremos quedarte, pero quiero que sepas que yo no tolero la indisciplina y la incompetencia, ¡¿Quedó claro?!
-¡Si!- Afirmó aún en shock Sakura.
-Bien, vete a cambiar. Te quiero aquí en menos de diez minutos- Ordenó Tsunade.
Sakura se dirigió a los cambiadores seguida de Ino y Karui quienes se miraban asustadas entre sí.
-Sakura, aún estás a tiempo. Si lo que quieres es hacer algún deporte, puedes estar en las porristas conmigo, ¡Tendrías asegurados a los chicos y seguramente también tú integridad física!- Sugirió preocupada Ino.
-No gracias.
-P-pero..
-Ino- Llamó Karui. -Si aún quiere estar aquí después de tremendo golpe que recibió en su primer día, no deberías de insistirle.
-¿Que imagen voy a dar si me rindo sin siquiera haber entrenado?- Expreso la pelirosa.
Ino callo ante la terquedad de Sakura. Ambas la esperaron para que terminara de cambiarse para después acompañarla de regreso a la cancha. Se disculparon por no poder verla entrenar, por que ellas también tenían que hacerlo con sus respectivos equipos. Ella no podía estar más contenta con la decisión de sus amigas, había tratado de mantener la compostura y aún sentía dolor en el área del estómago, pero las punzadas que sentía hacían aparecer un semblante adolorido en su rostro.
-¿Sakura, verdad?- Llamó la entrenadora.
-¡Si!
-Estamos haciendo trabajo en parejas. Como eres nueva, yo te daré tu pareja- La tomo de los hombros la y la dirigió hacia una chica pelirroja.- Ella será tu pareja, Karin Uzumaki.
Sakura miro a la chica frente a ella, no tenia nada de parecido con Naruto. Un vibrante cabello rojo así como unos ojos carmín que simularían ser el reflejo de una gota de sangre. Era de una complexión delgada y tenía cerca la misma cantidad estatura que ella.
-Andando, pelo de chicle.
Sasuke
Bebió de su botella hasta el fondo. El sudor perlaba su rostro hasta perderse en las líneas de su cuello.
El cansancio después del entrenamiento le exigía una ducha con agua fría y un cambio de ropas urgente. Se paseaba al rededor de la escuela, necesitaba mantener sus músculos calientes para no tener un dolor más fuerte después. Cargaba en una mano el equipo del football americano y con otra su botella de agua, tan solo deseaba fundirse en su almohada y no tener que despertar hasta mañana.
Tuvo que pasar al gimnasio ya que este era parte del trayecto hacia los dormitorios. Los demás equipos de la escuela que entrenaban ahí ya estaban saliendo de sus respectivos entrenamientos, era bastante interesante ver otros tipos de deportes desde lo ojos de un jugador de football como el, siendo que a pesar de que se consideraba fanatico de varios de estos, era claro que aún era fascinante ver los distintos muy movimientos y técnicas de cada uno.
Volteó su vista a las gradas del gimnasio y divisó una peculiar pero conocida cabellera rosada. Desconocía que hacía ella en aquel lugar, hasta que recordó la conversación de Lee y Naruto sobre la chica nueva y su intención de unirse al equipo de volleyball de la escuela, sonrió de lado de manera arrogante y se dirigió hacia aquella chica.
-Realmente te gusta la sensación de morir, ¿Verdad?- Preguntó el azabache haciendo que ella levantara su rostro.
-¿Con que espiándome, eh?- Contraatacó ella con un sonrisa pícara.
-No desperdiciaría mi tiempo de esa manera.
Antes de que el llegara, ella se encontraba vendando sus brazos después de los fuertes impactos que había recibido durante el entrenamiento.
-Primero te arriesgas a un examen que va más allá de ti y luego te expones ante los golpes de una mujer como Tsunade Senju. Creo que la definición de la palabra masoquista te entra como anillo al dedo- Dedujo mirando los vendajes de ella.
-Interesante conclusión. Déjame hacer una para ti- Hablo sin dejar su labor. -Te confías demasiado de tus habilidades, aunque lo niegues te gusta que la gente te admire e incluso te tenga miedo, no reconoces a los demás y te cierras a cualquier ofrecimiento de amabilidad. Voilá, trastorno narcisista detectado.
-¿Lo leíste de internet o en la sección de salud y belleza de una página de chismes?- Cuestionó con una sonrisa burlona.
-Sigmund Freud- Contestó ella. -Dudo que lo conozcas, pero sin duda serías un fantástico experimento para sus teorias.
-"Quien piensa en fracasar, ya fracasó antes de intentar; quien piensa en ganar, lleva ya un paso adelante"- Cito el mirándola profundamente.
Sakura sonrió. -Esa es una de mis frases favoritas de el, pero creo que tú la llevas a otros extremos.
-No me conoces. No te atrevas a dar por hecho cosas sobre mi- Dijo Sasuke entrecerrando los ojos.
-Podría decir lo mismo- Sakura se levantó y encaró a al Uchiha con el ceño fruncido.
Las miradas de ambos se encontraban en una lucha a muerte; verde contra negro, emeralda contra obsidiana, el color de las hojas de las flores contra el color de la noche más oscura.
-¡Sasuke!- Grito una voz.
El aludido buscó aquella voz conocida y se encontró con un chico de cabello blanco y ojos color púrpura que venía acompañado de un chico alto de cabello naranja.
-¿Suigetsu?- Miró confundido el pelinegro al chico albino.
-"¿Suigetsu?"- Imitó el chico. -Mira que dejarnos botados en medio del sermón sobre el trabajo en equipo del entrenador es muy grosero de tu parte.
Aquellos chicos eran por así decirlo, los amigos de Sasuke en el equipo de football. Muchos de los chicos del equipo habían oído lo que se decía sobre Itachi Uchiha, el hermano prodigio de Sasuke; era por eso que algunos por miedo o extrañamente en señal de respeto no se le acercaban a Sasuke más de lo necesario.
Pero Suigetsu y Jugó, eran jugadores increíbles, la espontaneidad del albino y la dualidad de la personalidad del pelirrojo, hacían que la estancia con los otros idiotas del equipo sea menos mortificante para un hombre taciturno como el.
-Vaya, vaya- Comenzó el ojipúrpura. -No cabe duda que Sasuke siempre está rodeado de chicas lindas, ¿Verdad Jugo?- Comentó mirando a Sakura con una sonrisa coqueta.
-¿Tambien entrenas football americano?- Pregunto la pelirosa.
-Estás hablando con el corredor estrella del equipo- Contestó Suigetsu orgulloso. -¿Y tú?, no me digas que esas vendas en los brazos son joyería exótica.
-Entrenó volleyball- Dijo ella tomando sus cosas.
-¡Oh!- Exclamo el albino mirando a Sasuke. -¿Que no ahí entrena el cabello de zanahoria?
Sakura rió. -Si te refieres a Uzumaki, si.- Hablo caminando hacia la salida del gimnasio. -Me voy, tengo bastante tarea que hacer; ah y Sasuke, considera ver a un psiquiatra para tu pequeño problema.
La Haruno se marchó dejando con la boca abierta al albino y a Jugo con una expresión de sorpresa. Sasuke afilo su mirada, mientras la figura de Sakura se perdía a lo largo del lugar.
Que moleta chica
¡Capítulo listo!
A qué no esperaban a Naruto ahí ¿Verdad? Jajaja, quería traerles la actualización desde antes, pero apenas pude despegarme de la escuela.
Sobre el capítulo, fue bastante genia escribir las interacciones de Sasuke y Naruto así como las de Ino y Sakura, creo que estas duplas podrán darle bastante humor a la historia. También me gustaría recalcar que ahora ya vemos la introducción de más parejas o ships en la historia, así como de más personajes.
Quiero aclarar, que no odio a Karin, es de mis kunoichis favoritas y si algo odio de los fics sasusaku es que la villanicen horrible. Lo que voy a hacer con ella es introducirla como un personaje de temperamento explosivo, para que después choque con el de Sakura -que por cierto aún no expongo en la trama- para que al final desarrollar su "rivalidad" pero no voy a villanizarla.
Por cierto, noté que les sorprendió el hecho que Naruto no sea quien se la ponga difícil a Sasuke. Si bien no va a ser el, va a jugar un papel importante para la relación de ambos en un futuro.
En el siguiente capítulo por fin se darán los resultados del examen así como el comienzo de la verdadera trama de la historia, lo cual me emociona mucho.
Antes de despedirme me gustaría preguntarles, ¿Que ship fuera del Sasusaku es su favorito del SakuHarem? Me gustaría saberlo ya que aunque tengo bien definido quien va a ser nuestro tercero en discordia, podría jugar con esto también
En fin, muchas gracias por sus reviews, no saben cómo me hacen el día y ansío demasiado por leerlos sobre este capítulo.
Sin más que decir, nos leemos luego.
