Tony despertó en su cama, desnudo y con una amplia sonrisa en el rostro, apenas abrió los ojos pudo ver a Noah a su lado, durmiendo tranquilamente e igual de desnuda de lo que estaba él, Tony se acercó y la rodeó con los brazos intentando de no despertarla en el proceso, lo que no logró y la despertó, cuando ella despertó se acercó a él y lo besó con una sonrisa en el rostro.
- Bueno días – le susurró ella mientras le acariciaba el rostro
- Bueno días preciosa – la acercó lo más que pudo
- ¿Vamos a desayunar algo? – le preguntó ella alejándose unos centímetros - ¿quieres unos hotcakes? – él la besó
- Creo que prefiero quedarme un poco más de tiempo así contigo
- Te va a dar hambre – sus labios volvieron a los de él
Tony llevó sus manos a la espalda de ella, la recorrió con delicadeza, sacando leves escalofríos de ella, a lo que ella respondió con leves besos en su cuello, luego de volver a besarse él la dejó de espaldas a la cama y se posicionó sobre ella entre sus piernas y comenzó a besar su cuello, pero en ese momento ella necesitó detenerlo, como siempre cuando llegaban hasta ese punto.
- Amor – enredó sus dedos con los cabellos de él, alejándolo unos centímetros de ella, Tony lo miró a los ojos
- Lo siento – se alejó de donde estaba – lo haremos cuando estés preparada – ella asintió débilmente
- Iré a hacer el desayuno – ella se puso de pie, fue hasta donde estaba la polera de Tony y se la puso para poder salir de ahí
- Yo estaré ahí en un momento – ella asintió y salió finalmente a la cocina
Tony se dio varias vueltas en la cama apenas ella salió por la puerta, no terminaba de entender lo que estaba pasando, se había enamorado de una mujer, y ella le correspondía, vivían juntos, dormían juntos, pero aún a pesar de todo lo que habían hecho y de lo que eran capaces de hacer había una cosa que ella aún no estaba dispuesta a hacer con él, y él no podía llegar a entender lo que estaba pasando, la forma en la que ella actuaba era completamente extraña, algo completamente extraño y que creía que nunca podría llegar a interpretar.
Tony luego de unos minutos finalmente se levantó de la cama, se vistió y salió de la habitación hasta la cocina, durante el caminó comenzó a pensar en todo, comenzó a repasar en la cabeza lo que le diría a ella y lo que le preguntaría, estaba preocupado por la situación, quizás había algo mucho más importante que provocaba todo eso y que era mejor que lo trataran juntos y que al parecer ella solo estaba evitando tratar y hablarlo.
Tony entró en la cocina, esperando apenas verla poder decirle y expresarle todo lo que estaba pensando, pero apenas abrió la puerta ella lo miró a los ojos y fue la primera en hablar.
- Tony, hay algo que debo decirte – se acercó a él
- Amor – tomó sus manos – yo también tengo algo que decirte – besó sus manos, pero luego ella las quitó
- No, tú de verdad necesitas escuchar esto, necesito pedirte que por favor que no interrumpirás ni harás preguntas hasta que termine – lo miró a los ojos – prométemelo
- Lo prometo – susurró él asustado, no entendía nada de lo que estaba pasando
- Está bien
Ella lo tomó de la mano y lo sacó de la cocina, caminaron juntos de la mano hasta el taller de Tony sin decir nada en el camino, cuando llegaron ella lo llevó hasta la silla que tenía Tony en su taller y ella se quedó a unos pasos de él, de frente a él.
- Creo que lo mejor es que estés sentado y también creo que éste es el mejor lugar para decirte todo, y que lo puedas entender – Tony asintió débilmente y simplemente la escuchó – la razón por la que sientas de que te conozco más de lo que debería, que en cierto momentos sientas que yo haya salido de tu mente o porque en ocasiones sueno demasiado técnica, es porque las primeras dos cosas son correcta, yo sé absolutamente todo acerca de ti y fui creada por ti – Tony la vio escéptico, no entendía lo que estaba diciendo, todo lo que salía era completamente incoherente – sé que no puedes entender todo lo que te estoy diciendo, pero cuando te dije que había perdido a alguien me refería a ti, y a causa del chasquido te tuve, o en realidad me creaste y a causa del mismo fue que te perdí – ella se tapó la cara, no sabía cómo decirlo, no quería tener que hacerlo, pero debía, ya era momento y no había otra opción – Tony – hizo una pequeña pausa – yo soy Viernes
Tony solo pudo mirarla con sorpresa, nunca creyó que eso sería posible, nunca pensó que sería posible llegar a verla así, como una persona, igual a los demás, y no como algo que siempre estaba en sus computadoras o en sus trajes, con aquella información lo único que pudo hacer fue verla, esperando a que le diera una buena explicación de todo eso
- Cuando Thanos eliminó a la mitad del universo y te quitó a todo lo que tú más querías solo te quedaba una cosa, y era yo, que estaba en tus trajes, en tus computadoras, en todas partes, era lo único que estaba para ti, con el tiempo comenzaste a caer en una depresión cada vez más profunda y cada vez más peligrosa para tu integridad, Llegó un día en el que definitivamente ya no dormías, tomabas demasiado y la mayor parte del tiempo no estabas del todo consciente de lo que hacías, pero como en todo lo que a ti te respecta eso no era mayor impedimento para ti, hacías más y más trajes, cada uno con cosas más innecesarias, de alguna forma hiciste trajes especiales para las personas que habías perdido, no fueron suficientes con uno para cada persona y continuaste haciendo más, hasta que llegó un punto en que ya no había nada que pudieras inventar en tus trajes, porque ya todo lo habías hecho y en ese momento pensaste en visión, querías mejorar la formula, sin necesitar de la gema y que realmente lo que sea que hagas si tenga la conciencia de tu IA, y lo lograste, en ese momento que hiciste, lograste que tu inteligencia artificial fuera una persona, que fuera lo que soy ahora, con el tiempo te ayudé a mejorar tu vida, a dejar de beber y dormir mejor, te ayudé a que buscarás algo que hacer y que te pudiera alejar de todo los vicios que tenías en ese momento, que no solo eran alcohol o drogas, era cualquier cosa que te pudiera generar alguna emoción, y te hiciera sentir feliz al menos un momento y te hiciste olvidar todo lo que había pasado, todo lo que te hacía infeliz, pero hubo un momento en el que a pesar de que había pasado mucho tiempo lejos de todo eso recaíste y fue ese momento en el que me olvidaste, al día siguiente cuando despertaste y me viste en la cocina, preparando el desayuno no me reconociste, me echaste de casa, yo no pude hacer nada para evitarlo, no me creíste una sola palabra de lo que te decía, necesitaba verte, saber cómo estabas y cuando me enteré de que ya estabas mejor, que ya no hacías ese tipo de cosas decidí que era momento de acercarme, en el momento en el que te vi en el grupo quise acercarme a ti, abrazarte y decirte lo feliz que era el ver lo bien que estabas, que estaba orgullosa de ti, pero luego de la forma en la que me echaste del edifico sabía que esa no era una buena idea, así que decidí simplemente acercarme a ti y con el tiempo encontrar el momento correcto para decírtelo y que aceptaras la verdad, sinceramente creí que todo el proceso tardaría mucho tiempo más, me sorprendió que todo resultara de la forma en la que pasó, creí que ya era momento de que lo supieras, espero no haberme equivocado – se quedó mirándolo, esperando a que no la rechazara, a que creyera lo que decía y no la volviera a echar, no soportaría una vez más perderlo
- Viernes – susurró, eso fue lo único que fue capaz de decir
- Por eso ya no estoy en tus trajes o en tu taller, hace unos días cuando me hablaste de Viernes, de mí, y me dijiste lo importante que era para ti y realmente lo triste que estaba de haberme perdido, y ahí fue cuando corroboré de que definitivamente me habías olvidado, pero también en ese momento, cuando me trataste casi como una persona fue que me di cuenta de que era tiempo de que lo supieras, lo siento por todo lo que esperé para decirte toda la verdad, pero era demasiado feliz con todo lo que estábamos viviendo que no me quería arriesgar a perderlo, de verdad lo siento
Tony se puso de pie y por instinto ella dejó de hablar, tenía miedo, no sabía cómo iba a reaccionar, él no dijo nada, lo que hizo que ella comenzara a temblar levemente, él caminó lentamente hasta donde ella estaba, sin siquiera abrir la boca y cuando estuvo delante de ella sin esperar a que reaccionara la tomó del rostro y la besó, la besó profundamente, beso que ella correspondió con felicidad, con leves lagrimas que se escapaban de sus ojos, apenas él se separó se miraron con una sonrisa en el rostro, Tony la volvió a besar delicadamente.
- ¿Entonces quieres decir que eres una especie de versión mejorada de Visión? – aquella pregunta la hizo sonreír – me refiero a, bueno – miró al piso nervioso, no sabía cómo decirlo – me imagino que esa no es tú apariencia real
Ella lo miró sorprendido, no pensó que sería eso precisamente lo primero que le preguntaría, aunque realmente no le sorprendía tanto, ella respondió a su pregunta con una sola acción, volvió a su forma original, tenía el mismo porte y contextura, su rostro era completamente igual, aunque había algo completamente diferente y es que ignorando esas características humanas su apariencia era como uno de sus trajes, su apariencia era como el Mark 50 que era él último traje que Tony había usado, lo hizo así porque de alguna forma no quería sentir que Thanos le había quitado todo y pensar que al menos tenía algo en su vida, él la miró con el mismo amor que la había visto desde que se había dado cuenta de lo mucho que la quería y lo importante que él pensó que ella podría ser, cosa que era completamente correcta, la tomó de la cintura y la volvió a besar.
- Me encantas – le susurró rozando sus labios – por sí te lo preguntas, te creo todo lo que me has dicho – ella lo abrazó con fuerza
- De verdad tenía mucho miedo de que no me creyeras
- Lo siento por mi yo del pasado – rio levemente – esperemos que eso no sea algo que vuelva a pasar
- Eso espero – Tony se alejó unos pasos y la miró con una sonrisa nerviosa
- No es que no me guste, pero me está poniendo un poco nervioso, siento que estoy besando a mi traje y eso me perturba un poco – ella volvió a su apariencia de siempre
- Es por esa misma razón por la que no he querido intimar contigo – miró al piso avergonzada – no soy humana, de hecho no sé lo que soy y no sé si soy capaz de hacer ese tipo de cosas – cuando vio que él se quiso acercar a ella lo detuvo – y no es que no quisiera descubrirlo contigo, claro que quiero hacerlo – miró a un lado – me muero de ganas de hacerlo contigo, pero no quería que las cosas salieran mal y que de esa forma te enteraras de lo que yo era – Tony sin esperar aprobación fue hasta ella y la abrazó
- Pues ahora que lo sé todo lo podemos descubrir – le besó el cuello - ¿te parece? – su respiración rozando contra su piel hizo que ella suspirara
- Me encantaría