[Bóveda]
[P.O.V Drake]
Me encamine más adentro de la bóveda, sujetando mi brazo justo donde me había hecho el corte.
"Y justo ahora tenía que tener una herida..." me quejé mientras la sangre corría por mi brazo y goteaba al suelo, probablemente dejando un rastro.
Pero sin importarme, pude llegar a unas escaleras que daban hacia abajo.
Y yo al verlas, pude recordar adonde iban, por lo que no dudé en bajar por ellas, dirigiendo me aún más profundo en la bóveda.
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[P.O.V tercera persona]
Mientras Drake bajaba por dichas escaleras, las dos únicas chicas que habían logrado entrar a la bóveda después de Drake, comenzaba a salir totalmente de su aturdimiento.
"Rayos... Pero que fue eso?" preguntó Nary frotándose un poco los ojos, sin darse cuenta de la Octoling a unos metros al lado de ella.
"Aquí la teniente Otome, me reciben?, estoy dentro de la bóveda... Alguien puede escucharme?" dijo Otome por el intercomunicador de su visor mientras se apoyaba sobre una rodilla, pero al oír nada mas que estática, decidió descartar el comunicarse con alguien.
Ambas chicas miraron a su alrededor, solo para que luego sus miradas terminaran encontrándose.
Pasaron al rededor de cinco segundos mirándose fijamente, solo para que luego, de golpe ambas reaccionan al mismo tiempo, apuntándose con sus armas una a la otra.
"V-vamos sucia Octoling, si quieres pelea te la daré!" exclamó Nary apuntándole con su Splattershot a la teniente, algo nerviosa pero decidida.
"No si yo te splateo primero, inkling tramposa" contestó seriamente Otome, apuntando su Octoshot a la susodicha chica calamar.
Ambas permanecieron apuntándose firmemente con sus armas, por alrededor de veinte segundos, esperando el primer movimiento de la otra.
Hasta que en un momento, Otome pudo ver unas manchas de la sangre que Drake había dejado por el suelo, haciendo que por un momento no le prestara atención a Nary.
"¿Tinta roja?" se preguntó a si misma la teniente, mientras que la Inkling se le había quedado viendo algo confundida.
Otome sin prestarle atención a su adversaria, se agachó y tomó un poco de esas manchas con sus dedos, que por suerte esta tenía guantes puestos.
"Oye, que estas haciendo, no vamos a pelear?" preguntó Nary bajando su Splattershot y quedándose viendo con curiosidad lo que hacía la Octoling.
Pero por supuesto, la chica pulpo siguió sin prestarle atención.
"¿Que clase de tinta es esta?" volvió a preguntarse lo misma, Otome mientras frotaba con sus dedos la sangre que había en ellos.
"¡Oye, me estas escuchando?!" en eso exclamó Nary a la chica pulpo, haciendo que esta por fin saliera de su trance.
"¿Quieres callarte un momento?" respondió la Octoling un poco fastidiada, para luego ver el pequeño rastro de sangre que había dejado cierto humano.
"Wow, eso es tinta roja?" preguntó Nary viendo el rastro también.
La Octoling luego puso su mirada sobre la enorme nueva puerta que había bloqueado la entrada de la bóveda, y posiblemente también la salida, recordando luego que entró en la bóveda sin pensarlo, por lo que ahora no sabía como le haría para salir.
Pero en eso volvió a ver a la Inkling de tentáculos naranja, que miraba con intriga todo el interior de la bóveda.
"Oye, Inkling!" llamó la teniente a Nary, haciendo que esta volteara a verla.
"¿Por que entraste aquí?" continuó Otome preguntándole a la misma.
"¿Por que te lo diría?" preguntó la chica calamar, cruzándose de brazos y apartando la vista con los ojos cerrados y el ceño fruncido.
"Por que sea cual fuera la razón, olvidaste pensar en como saldrías de aquí" respondió Otome seriamente.
Nary al oír eso, abrió sus ojos de par en par al ver que la teniente tenía razón, no sabría como salir.
Por supuesto, Otome al verla no pudo evitar dar una pequeña sonrisa, mientras contenía una ligera risa.
"P-pues de eso no me preocupo, por que cuando lo atrape lo obligare a decirme como salir de aquí" formuló la Inkling naranja, confiada de si mismo mientras ponía sus manos en sus caderas y alzaba su frente en alto, segura de sus palabras.
"¿Entonces tu misión es atraparlo?" preguntó Otome ladeando un poco la cabeza.
"Bueno, no yo... Las que lo querían atrapar eran las Squid Sisters..." contestó Nary frotándose la parte trasera de su cabeza.
"¿Las dos famosas idols, y que quieren con el?" preguntó nuevamente la teniente.
"No lo se, aún no sabemos por que lo persi-... Oye espera, por que hablo contigo?!" de la nada exclamó Nary, dándose cuenta de que estaba hablando con el 'Enemigo'.
Otome al ver esa reacción por parte de la chica calamar, no pudo hacer nada mas que suspirar frustrada y poner una mano en su rostro.
"Okey, escucha inkling..." trató de decir Otome, pero Nary la interrumpió.
"¡Y ya deja de llamarme 'Inkling' a cada rato, tengo nombre y es: Nary!" contestó la susodicha, ya un poco molesta.
"Como sea, niña... Escucha, ambas entramos en esta bóveda sin saber como haríamos para salir, pero escuchar la razón por la que entraste me hizo dar una idea para poder ecapar" dijo Otome viendo fijamente a la chica calamar.
"¿Una idea, y cual sería esa?" preguntó Nary mirándola dudosa.
"... Es que hagamos una t-tregua para poder capturarlo, y obligarlo a decirnos como salir de aquí" respondió Otome con un poco de dificultad en la parte de 'Tregua'.
"¡¿Una tregua?!" preguntó sorprendida Nary por lo que Otome había dicho.
"Si, una tregua temporal, por mas difícil que lo veamos..." contestó Otome, sin poder creer lo que estaba proponiéndole a la chica calamar.
"Si claro, y luego me disfrazaré de tiburón y me iré a dar un chapuzón en el mar" dijo Nary de forma burlona, fastidiando un poco más a la teniente.
"Hablo en serio, ninguna de las dos conoce este lugar, pero el si, por lo que estamos en su terreno, tendremos más posibilidades si nos olvidamos de las rivalidades por esta vez, y trabajamos en conjunto!" insistió Otome de mala gana.
Nary lo pensó por un momento, pero al ver que en verdad no tenía de otra, tuvo que aceptar.
"Bien, pero solo sera hasta que lo atrapemos" dijo Nary, levantando una mano en la última frase.
"Me parece perfecto" respondió Otome comenzando a caminar siguiendo el rastro de sangre, mientras que Nary se ponía a la par de ella, aunque ambas estaban tres metros apartadas una de la otra.
"Esto es raro..." no pudo evitar comentar Nary, sin voltear a verla.
"El sentimiento es mutuo..." respondió Otome también sin voltear a ver a la Inkling.
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Drake había llegado a una puerta alcanzada por los años, pero no tanto como para no poder abrirse.
En eso, el humano abrió una pequeña compuerta, rebelando un pequeño panel el cual tenía un detector de huella dactilar.
Este sin dudarlo, puso su mano en el detector, y automáticamente este comenzó a escanear su mano, para que al terminar, este emitiera una luz verde y se desbloqueara la puerta.
Drake trató de abrirla, pero al dificultarsele la tarea, trató de abrirla con ambas manos y aplicando más fuerza en su intento.
Luego de varios jalones, el humano logró abrir dicho portal, pero también provocando que esta se abriera bruscamente, emitiendo un fuerte sonido, y casi haciendo caer al susodicho.
Drake sonrió ampliamente al ver que al fin algo le estaba saliendo bien, para luego adentrarse en la habitación cerrando la puerta tras de si, sin mencionar que por arriba de la puerta, se podía ver un cartel, el cual estaba demacrado por el oxido impidiendo verse lo que estaba escrito, pero si dejando ver las tres primeras sílabas "Ars"
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Otome y Nary continuaron la búsqueda del Antiguo por la inmensa bóveda, pasando a través de las múltiples cajas de distintos tamaños.
En una ocasión pudieron ver una que otra cápsula, como en la que Drake había sido encontrado, solo que estas estaban abiertas, y al parecer por mucho tiempo.
Pero en eso, ambas se detuvieron de golpe al escuchar un fuerte sonido que resonó con eco por toda la bóveda.
"Debe estar por aquí" comentó Nary mirando hacia todas direcciones.
"Mantén los ojos abiertos, quien sabe por donde podría salir" añadió Otome sujetando firmemente su Octoshot.
Ambas chicas continuaron su recorrido, cerciorándose bien de su entorno, incluso mirando detrás de sí en más de una ocasión.
Solo hasta que ambas pudieron ver unas escaleras que daban hacia abajo. Un pensamiento llegó a la mente de Otome, creyendo que tal vez el Antiguo habría bajado por ahí, aunque no podía ver bien, ya que era un pasillo bastante oscuro.
Pero antes de que siquiera pensaran en bajar, otra vez el mismo sonido pudo escucharse, solo que en esta con mas fuerza, como si alguien hubiera pateado algo, alertando así a ambas.
Tanto la Inkling como la Octoling retrocedieron al escuchar dicho sonido, también por el hecho de que comenzaran a escucharse pasos subiendo los escalones de concreto.
Ambas se apartaron alrededor de unos cinco metros, hasta que pudieron ver a algo que las dejo boquiabiertas.
Era Drake, solo que esta vez llevaba un traje de combate militar, que iba entre una chaqueta azul y unos pantalones entre verde y marrón, una mascara de cabeza completa que parecía una calavera, y un rifle M-16 solo que más avanzado, con mira ACOD y lanzagranadas.
Drake al instante que las vio, les lanzo una una mirada que le helaría la sangre a cualquiera, o en el caso de estas, la tinta?.
Ambas chicas no sabían como reaccionar, hasta que Otome fue la primera que logró salir de su estupefacción, apuntando luego su arma contra el humano.
"¡Dispara!" gritó la chica pulpo, mientras comenzaba su ataque contra este.
Nary al escucharla, pudo salir de su asombro y tal como Otome, la Inkling también disparó su Splattershot contra su objetivo.
Pero por más que le dispararan, este no parecía inmutarse ante los proyectiles de tinta que impactaban sobre el.
"Pero... C-como?" tartamudeó Otome sin poder creer que ante los disparos que ambas habían efectuado sobre él, parecía que ningún efecto habían logrado mas que manchar su uniforme.
"Oh cierto, se me había olvidado decirte que parece que la tinta no surte efecto en él" dijo Nary haciendo que Otome volteara a verla incrédula.
"Mi turno..." respondió Drake levantando su M-16 y apuntando hacia ellas.
Ambas volvieron a quedarse petrificadas, con sus ojos bien abiertos, hasta que esta vez fue Nary la que reaccionó primera.
"¡MUEVE TÉ!" en eso gritó Nary empujando a Otome, sacándola de su shock, y empezando a correr mientras Drake comenzaba a disparar por el suelo donde corrían, casi a sus pies.
En varias ocasiones ambas intentaron dividirse para que una lo distrajera mientras la otra contraatacaba, pero Drake siempre se los impedía, disparando al lugar hacia donde una correría, evitando así que se separaran, a la vez que Drake las seguía caminando tranquilamente.
Eso y que también el ensordecedor sonido del arma del humano no las dejaba pensar con claridad, o formular un plan.
Drake por supuesto no pensaba matarlas, ya que si lo hubiera querido, habría apuntado a sus cabezas en vez de al suelo por donde pasaban.
Pero en eso Otome pudo divisar una caja lo suficientemente grande donde podrían cubrirse y/o contraatacar.
"¡Rápido, sigueme!" exclamo la teniente mientras era seguida por Nary.
Al llegar a dicha caja, ambas pasaron por sobre ella para luego comenzar a devolver el fuego, mismo del que el humano les dejó impactar. Pero en eso de repente Otome había dejado de disparar.
"¡¿Que sucede?!" preguntó Nary volviendo a cubrirse.
"¡Me quedé sin tinta!" exclamó Otome frustrada mientras se asomaba por un lado de la caja, y ver los charcos de tinta en el suelo cerca de Drake.
"Y a mi ya no me queda mucha..." añadió Nary revisando el contenedor en su espalda.
"No podré recargar si no me sumerjo en tinta" pensó Otome seguido de ver a Drake recargando su arma rápidamente, soltando un pequeño cilindro cuadrado y colocando uno nuevo en esta, mostrando que dicha arma podía recargar munición más rápido que un Octoshot recargando tinta.
"Tengo que conseguirme una de esas..." ante eso comentó Otome, viendo fijamente el M-16 de Drake.
"Yo también" dijo esta vez Nary asomándose también por un lado de la caja y viendo dicha arma con estrellas en sus ojos.
Pero ambas volvieron a esconderse detrás de su cobertura, al reanudarse los disparos hacia ellas por parte del humano.
"¡Ni siquiera se por que nos preocupamos por quedarnos sin tinta, de todos modos nuestras armas no funcionan con el, o por lo menos estas!" exclamó la Octarians, dando leves cabezadas hacia abajo por los roces de las balas sobre la caja.
"¡Podríamos usarlas como garrotes por lo menos!" propuso esta vez Nary sujetando su arma de dicha forma.
"¡Sería inútil, como podríamos entablar un combate cuerpo a cuerpo con el?, si ni siquiera podemos acercarnos!" dijo Otome para darse cuenta de que Drake había dejado de disparar, dejando algo confundidas a las dos cefalópodas.
"¿Se habrá quedado sin munición?" preguntó Nary, pero antes de que Otome dijera cualquier cosa, como en cámara lenta, una granada Flashbank paso sobre la caja y cayó cerca de ellas.
Instintivamente, Otome se lanzó al suelo cubriendo sus orejas, pero Nary no tubo el suficiente tiempo para hacerlo.
La granada de flash detonó, emitiendo una encandesente luz blanca y un fuerte golpe de sonido.
Por su parte, la pobre chica calamar ante eso no pudo hacer nada mas que soltar su arma y cubrir sus ojos mientras gritaba.
"¡¡¡ESTOY CIEGA, ESTOY CIEGA!!!" pero el padecimiento de su temporal ceguera y sordera no duró mucho, ya que sintió como algo la golpeaba fuertemente detrás de su cabeza, dejándola fuera de combate.
Otome lentamente quitó sus manos de sus orejas, sintiéndose bastante aturdida, además de solamente escuchar un chirriante silbido, a causa de la Flashback.
Dificultosamente, la chica pulpo se volteo solo para ver a Drake noqueando a Nary con un golpe en la nuca, y luego volteándo a verla fijamente.
Desesperadamente, Otome trató de encontrar algo con lo que defenderse, solo para divisar el Splattershot de Nary cerca de ella.
Torpemente, Otome comenzó a arrastrarse hacia dicho disparador de tinta mientras oía los pasos de Drake acercarse hacia ella, motivo suficiente para apresurarse.
Y al acercarse lo suficiente, Otome estiró su brazo para tomar el arma, pero justo cuando había puesto su mano sobre el mango de esta, una bota se posó sobre el Splattershot, evitando así que lo levantara.
Lentamente, Otome se dio la vuelta para encarar al enmascarado humano, que aún algo aturdida lo veía borroso. No obstante, si pudo ver como este levantaba su arma por casi sobre su hombro.
"Luces fuera..." fue lo último que dijo Drake, dándole un golpe en el rostro con la culata de su arma, literalmente apagándole las luces a la pobre teniente.
[Zona de la excavación]
[Fuera de la bóveda]
[Un minuto después de cerrarse]
Todos tanto Inklings como Octolings comenzaban a salir de su temporal ceguera y sordera, quedando con un fuerte aturdimiento, y un leve pero molesto silbido en sus oídos.
"Ugh... Que rayos fue eso... Marie, estas bien?" preguntó Callie con una ligera vista borrosa.
"Me duelen los ojos..." respondió Marie sentada en el suelo mientras se tallaba dichos ojos.
"¡No veo, no veo!" exclamaba Nayls caminando en círculos con sus brazos extendidos al frente, y sus ojos cerrados.
"¡Abre los ojos, Nayls!" en eso reclamó Shara, con solamente un ojo abierto, y bajandole los brazos, ya molesta por la torpeza de su hermano menor.
Nayls hizo caso a su hermana, y abrió sus ojos lentamente para comenzar a tallarselos también.
Por otro lado, Levin se había sentado en el suelo con sus manos en sus orejas y sus ojos cerrados, esperando a que el silbido en sus oídos se fuera, a lo que este lentamente este fue desvaneciéndose poco a poco.
Por parte de las Octolings, su grupo también comenzaba a recuperarse poco a poco, algunas más rápido que las otras.
Pero la primera de ellas fue la Cabo, que ya se encontraba erguida, pero un poco tambaleante.
"¿Están todas bien...?" preguntó la oficial algo aturdida, pero estable.
No obtuvo una respuesta coherente, mas que quejidos y uno que otro "Ugh", hasta creyó escuchar "veo estrellitas" por parte de alguna del grupo.
Solamente eso le basto a la Cabo para asegurarse de que todas las miembros estaban bien, o por lo menos lo suficiente.
"Teniente... Esta bien?" preguntó nuevamente la cabo, pero al no recibir respuesta por parte de esta, comenzó a mirar hacia todos lados.
"Teniente... Teniente Otome!" llamaba la Cabo buscando a su superior con la mirada, hasta que esta se posó sobre el grupo de Inklings frente a ellos.
"¿Están todos bien?" preguntó ahora Marie, viendo a los tres SquidFire que quedaban.
"Oigan... Donde esta Nary?" devolvió la pregunta Levin mirando hacia todos lados, en busca de su amiga de tentáculos naranja, para que luego todos comenzaran a hacer lo mismo.
Pero en eso, una fuerte pisada hizo que todos voltearan a ver.
"¡Malditos, que le hicieron a nuestra teniente?!" reclamo la Cabo mientras ella y el grupo que quedaba de Octolings apuntaban sus armas hacia el equipo de Inklings.
"¡¿Nosotros, que le hicieron ustedes a nuestra amiga?!" contestó esta vez Nayls, mientras ellos también apuntaban sus armas hacia las Octolings.
Pero en eso Shara pudo darse cuenta de que alguien mas faltaba.
"Oigan, y la cosa que perseguíamos?" preguntó la chica pulpo de tes morena, para luego voltear a ver la puerta de la bóveda.
"¿Y esa puerta no estaba llena de hoyos?" volvió a preguntar la misma Inkling de tentáculos morados, mientras volteaba su atención hacia el susodicho umbral.
"¡No intenten cambiar el tema!" ordeno la Cabo preparando su Octoshot para disparar.
"Oye, por que en vez de culparnos no analizan lo que pasa?" respondió Shara frunciendo el ceño.
"¿Analizar que, Inkling?" pregunto la Octoling de actualmente mayor rango.
"Su teniente y nuestra amiga no están, tampoco esa cosa que veníamos persiguiendo, y cabe recalcar que ahora esa bóveda o lo que sea, ahora tiene una nueva puerta... Es obvio que el las secuestró" afirmó Shara dejando casi con la boca abierta a todos.
"Tiene razón" dijo Marie con sus ojos bien abiertos de la impresión.
"Bien hecho Shara" comentó Levin, mientras que la nombrada se le escapaba un pequeño rubor.
"Wow Shara, en serio formulaste todo eso en solo un minuto?" preguntó Nayls asombrado por lo lista de su hermana.
"Que sea tu hermana no quiere decir que sea una tonta también" respondió esta mirando burlona mente a su hermano menor.
"Jaja, claro... ¡Oye!" exclamó Nayls molesto al darse cuenta de lo que trató de decir su hermana, también haciendo que una de las chicas pulpo diera una pequeña risa por la actitud de Nayls.
"¡Eso no prueba nada, digan me donde esta la teniente o-...!" la Cabo no pudo terminar su oración, ya que fue interrumpida por una llamada entrante del comunicador de su visor.
"Grupo de exploración veintidós, soy Octavio, cancelen su misión de búsqueda, regresen a la base para nuevas ordenes!" ordenó Octavio por el comunicador de las cuatro octolings.
"S-su majestad, pero es que..." trato de discutir la Cabo, pero nuevamente fue interrumpida.
"¡Ya se que no me consiguieron nada, grupo de torpes, como siempre, pero eso ahora no importa, regresen para recibir nuevas ordenes" volvió a decir el tirano.
"P-pero, Emperador Octavio, la teniente-..." trató una ultima vez la Cabo de discutir las ordenes del gobernante, pero tal como las anteriores, esta fue interrumpida por el mismo.
"¡¡¡AHORA!!!" gritó el emperador, casi dejando sordas a las cuatro Octolings.
"¡S-si señor!" respondió la Cabo con una temblorosa voz.
Las cuatro Octolings se retiraron pasando de largo al grupo de Inklings, mismos que se les quedaron viendo como se iban, pero en eso la cabo se detuvo para voltear a verlos.
"¡Esto no a terminado, les juro que nos la pagarán!" exclamó la oficial mientras les apuntaba con un dedo, para luego retirarse junto al resto de su equipo.
"Hmm... Que tierna..." comentó sarcásticamente Levin mientras las veían irse.
En eso, tanto los SquidFire como las Squid Sisters voltearon a ver a la nueva puerta de la bóveda, preguntándose el como harían para abrirla... Excepto uno, que sorprendentemente era el único que tenía su mente en otra cosa.
"¿Alguien tiene hambre?" preguntó Nayls, ganándose un audible suspiro de frustración por parte de los demás del grupo.
[Bóveda]
[30 minutos después de la captura de Nary y Otome]
[Lugar: ???]
[P.O.V Otome]
Comenzaba a despertarme lentamente, sintiendo como mis párpados casi se negaban a abrirse, mientras que un dolor de cabeza se hizo presente en la parte frontal de esta, además de estar acompañado por un dolor de cara bastante fuerte.
No obstante, logré sentarme, para luego escuchar unos ronquidos que venían de mi derecha, a lo que al instante giré mi atención, y ver que era la Inkling quien se encontraban dormida y roncando como cerda, además de que algo de saliva se escapaba por la comisura de su boca... Grotesco.
También pude darme cuenta de que no llevaba mi visor, haciendo que maldiciera en mi mente.
Pero eso ahora no importaba.
Tocando el suelo donde estaba pude saber que no se sentía como el piso, sino que se sentía bastante liso, de hecho se sentía como si fuera...
Olvidándome del dolor de cabeza y rostro, miré a mi alrededor para luego ante mi asombro, ver que nos encontrábamos dentro de una enorme esfera de cristal.
Pero mi impresión no duró mucho, ya que pude escuchar el sonido de una puerta metálica abrirse y luego cerrarse igual de rápido.
¿Y quien resulto ser el que entró?, correcto, las Squid Sisters... No, ya en serio.
Era ese extraño ser, el cual aún se encontraba con esos extraños ropajes manchados de la tinta que le habíamos disparado, pero en eso, el extraño ser volteo a verme, dándome una mirada que me calaría los huesos, bueno eso si tuviera huesos, pero eso no quería decir que esa mirada no dejara de ser fría, y con esa mascara... Era todavía más difícil mantener una mirada fija con el, sin tragar saliva por la penetrante mirada de esos ojos, en esa mascara de calavera.
Pero en eso, el dijo algo en un dialecto que jamás había escuchado, y de repente unas luces se encendieron iluminando el lugar.
Yo por mi parte tuve que cubrir mis ojos con un brazo para evitar quedarme temporalmente ciega, pero al acostumbrarme, pude ver que estábamos en el interior de un laboratorio, y muy avanzado si me lo preguntan, mucho mas de los que había visto antes.
Pero luego pude ver como el extraño ser comenzaba a quitarse la mascara, yo por mi parte sentía algo de curiosidad por ver su rostro detalladamente.
Puesto que anteriormente no presté mucha atención a como se veía.
Desafortunadamente al quitársela, pude ver que su cara también estaba pintada como si fuera una calavera, impidiéndome apreciar mejor su rostro.
Pero en eso, este mismo volteó a ver hacia la Inkling. Yo por mi parte decidí despertarla, no por que el quisiera, sino por que ya me había cansado de sus estruendosos ronquidos.
"Oye, despierta..." dije moviéndola un poco, pero esta ni se había movido.
"¡Oye, Inkling, despierta!" volví a pedir, moviéndola con más brusquedad.
"Jeje... Si, comeré otra porción..." la escuche decir entre sueños mientras se ladeaba, dándome la espalda.
Yo ante eso no pude aguantar más e hice lo que antes hacía con los miembros de mi escuadrón cuando no se levantaban de la cama.
Puse un dedo en mi boca, y luego lo saque con algo de saliva, para luego meterlo en la oreja de la Inkling y moverlo en círculos dentro de ella. Tal como esperaba, instantáneamente esta se despertó de un salto mientras daba un grito.
"¡¡¡¿OYE QUE RAYOS TE PASA?!!!" me gritó molesta la Inkling mientras mostraba sus dientes y ponía una de sus manos en la oreja donde había metido mi dedo.
Yo por supuesto no le respondí, simplemente apunté hacia donde estaría ese ser, el cual seguía ahí parado con los brazos cruzados.
Ella siguió mi seña y al instante en que vio a la criatura, esta se levanto de golpe.
"¡Es el y esta desarmado, vamos es nuestra opor-...!" la Inkling no pudo terminar su oración, ya que esta se había chocado contra el cristal de la esfera, quedando estampada en este, seguido de que esta comenzara a deslizarse hacia abajo, aun pegada al vidrio de la esfera.
Yo solamente me dediqué a negar con mi cabeza mientras tenía mis ojos entrecerrados, viendo como la tratable Inkling se deslizaba lentamente hacia abajo, emitiendo un rechinido.
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[P.O.V tercera persona]
Drake se veía bastante confundido por la acción que había hecho Nary, la cual ya se había dado cuenta sobre la esfera que las aprisionaba.
"Es bueno saber que no atraviesan el cristal reforzado, o por lo menos eso espero" pensó Drake poniendo una mano en su mentón.
"Bruce" llamó el mismo humano, cosa al instante un pequeño robot flotante parecido a una esfera se materializó al lado del soldado, ganándose las miradas de asombro por parte de ambas chicas en la esfera.
"¿Necesita algo, Sr.Drake?" preguntó el robot con una voz que perecía estar hablando a través de una radio.
"Necesito que las escanees a ambas mientras voy a lavarme" pidió Drake, al mismo tiempo que se retiraba y salía de la sala por otra puerta.
"A la orden, señor" respondió el pequeño robot acercándose a la esfera de cristal, y con el gran lente que este poseía emitiendo un holograma azul sobre ambas chicas, las cuales reaccionaron con un susto, retrocediendo hasta la otra punta de la esfera, mientras tanto la Inkling como la Octoling veían con una mezcla curiosidad y desconfianza el holograma que se había proyectado por todo su cuerpo.
"Mmm... Interesante..." aún así comentó el pequeño robot, continuando así con su tarea.
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[P.O.V Nary]
¿En donde estábamos, que es esa cosa flotante y que nos esta haciendo?, esas eran las preguntas que pasaban una y otra vez por mi cabeza mientras tratábamos de evitar que nos alumbrara con esa extraña luz, pero sin importar adonde fuéramos, esa luz no se despegaba de nosotras, bueno, tampoco es que hubiera mucho lugar para movernos.
"¿Que crees que nos hará?" le pregunté a la Octoling mientras volteaba a verla.
"No lo se..." me respondió esta mirando fijamente al pequeño aparato flotante.
"¿Crees que nos splatee a ambas?" volví a preguntarle mientras tragaba saliva.
"Si quisiera eliminarnos, ya lo habría hecho..." respondió nuevamente la chica pulpo, a la vez que nos dábamos cuenta de que esa cosa de metal ya había dejado de alumbrarnos con esa luz, ahora solamente se quedaba viéndonos a las dos, aveces viendo a una sola y luego volteando a ver a la otra.
"¿Ahora por que se nos queda viendo?" pregunté nuevamente, ya un poco incómoda de que esa cosa se nos quedara viendo fijamente como si fuéramos lo mas raro del mundo.
"¡Oye, por que no mejor vas a molestar a tu amigo?!" le reclamé ya molesta al pequeño ser, a lo que este no respondió, en vez de eso hizo algo parecido a un parpadeo con su ojo.
"Tal vez solo esté vigilando que no tratemos de escapar" dijo la Octoling seriamente.
Pero antes de que le respondiera algo, de la misma puerta de la que salió, volvió a entrar ese ser, solo que esta vez sin ese traje que llevaba antes, en vez de eso... Hay Dios.
No llevaba puesto más que unos pantalones, dejando su torso al descubierto, que al verlo detenidamente, tenía un cuerpo bastante trabajado, unos abdominales bien marcados, unos brazos fuerte, unos visibles pectorales, pero no de una forma exagerada, aún seguía siendo algo delgado.
Sin darme cuenta, pude sentir como si mis mejillas se calentaran, y eso se debía a que estas habían tomado un fuerte rubor mientras seguía viendo el cuerpo en forma del extraño ser.
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[P.O.V Otome]
¿En serio, en serio tenía que llegar así?.
Esa criatura había llegado por la puerta en la que se había ido con la mitad de su cuerpo desnudo, haciendo que mi rostro se sonrojada, e inútilmente tratando de disimularlo.
Al menos pude ver bien su rostro.
El ser era de cabello corto y de color castaño oscuro, unos profundos ojos color marrón oscuro y tes blanca como la de nosotras, bueno, más como la mía, ya que la de la inkling era un tanto mas bronceada.
De complexión atlética y además de tener una que otra marca en el cuerpo.
Rayos, como quisiera tener mi visor para ocultar el rubor que ahora tengo.
Pero para nuestro alivió, este se puso una playera negra de mangas cortas, cubriendo así su torso desnudo.
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[P.O.V Tercera persona]
"¿Que descubriste, Bruce?" preguntó Drake poniendo sus manos en sus caderas.
"Criaturas bastante interesantes, al parecer son una rara evolución de los antiguos cefalópodos, aunque no entiendo como han adquirido forma humanoide" respondió Bruce volviendo a escanearlas.
"¿Algo más que puedas contarme?" pregunto el pelicastaño nuevamente.
"Tienen un dialecto bastante curioso... Aunque no pude recopilar mucho, si lograra hacer que se comunicaran más, podría hacer el traductor que me pidió antes" respondió Bruce volteando a ver al humano.
"Pero como hacerlo?, si ellas no entienden lo que digo... Además de que ahora no me vean como alguien propenso a conversar" dijo Drake tratando de pensar en algo, mientras que su ayudante cibernético se le quedaba viendo.
Pero en eso una idea llegó a la mente del humano, el cual este se acercó a la prisión del par de chicas, y tal como esperaba, estas reaccionaron apartándose un poco.
Drake se puso sobre una rodilla para estar mas o menos a su altura, e hizo una seña con las manos para que se tranquilizaran.
"Ok... Crucemos los dedos..." se dijo a si mismo Drake, dando una respiración profunda y luego haciendo un movimiento con las manos.
"Hola, no se preocupen, yo no dañarlas" dijo Drake en el idioma de señas mientras ambas chicas lo miraban atentamente.
"Bien pensado señor, usar el único idioma que es universal para comunicarse" felicitó Bruce al humano.
"Si, pero esperemos que ellas también lo entiendan" respondió Drake, volviendo a hacer el mismo patrón de señas.
"Espera... Acaso esta...?" pensó Otome viendo el movimiento de manos que hacía el pelicastaño.
Un poco dudosa, la chica pulpo dio un paso al frente e hizo algo que provocó a Drake saltar por dentro.
"¡Dejanos salir!" dijo Otome también en el lenguaje de señas, impresionando al humano.
Drake al salir de su asombro, dio una amplia sonrisa.
"Bueno... Supongo que eso es un avance" comentó el humano viendo fijamente a los lindos ojos verdes de la Octoling.