FIC

Caída del Cielo

Por Mayra Exitosa

CAPITULO V

La líder de ventas

George meditaba, aunque le pusieran un ultimátum, William no aceptaría, para él esta inversión no significaba tanto como para ella, no podía decirle a su Tía que William poseía mayores y mejores inversiones, donde no perdía nada por estar asociado, por el contrario se encontraban en pleno crecimiento, pero eso eran cosas que solo manejaba William, estar del lado de su Tía Elroy era de momento lo mejor que podía hacer, desde que el piloto se había reportado con él diciendo que había viajado, lo comprendía, necesitaba espacio para pensar y estaba consciente que él sentía que ya no estaba de su lado, pero era la única forma de saber cómo manejar todo desde otro punto de vista, por lo que buscaría luego a William, si se había ido a Europa, no lo localizaría por un tiempo, aunque asegurara que estaba en Escocia, ese lugar podía esconderlo aún más si él se lo proponía, ahí estaría a salvo, mientras tanto tenía que mantenerse al tanto de cómo solventar todo sin firmas ni autorizaciones de William, sus cosas por más que su tía se empeñara solo él podía dominarlas, era muy listo, ni siquiera con todo su conocimiento, podía intervenir en las inversiones de Andrew, sabía que su Tía era un caso especial, por lo que no dejaba de enviar mensajes a su teléfono explicando su punto de vista al estar en esos momentos del lado de su tía Elroy y averiguar que ganaba ella, si la sociedad de los Legan para los Andrew no era nada importante, al aceptar esa sociedad de matrimonio que se podía perder en cualquier momento y quedarse con Legan al mando.

- Señor Johnson, se requiere de las firmas del señor Andrew, no se puede mover esos conceptos, así que lo lamentamos mucho, haga lo que haga, es él quien debe hacerlo, y si él quisiera lo haría desde la comodidad de su computadora, usted lo sabe. - Si, pero su Tía cree que podrá manejarlo, me da gusto saberlo, solo manténgame informado de cualquier cambio. - Si señor.

Por otro lado, muy lejos de ahí en la cabaña, Candy deliraba, en su mente se encontraba asustada, las nubes no la dejaban ver absolutamente nada, temía por no volver a salir con vida, no había dejado ningún legado, no contaba con nada que ofrecer al mundo, ni con nadie con quien imaginar que la esperaría, no tenía familia, sus pocos amigos la apreciaban por ser tan independiente de todo, a quien le iba a importar su vida o su muerte, nada significaba mucho para nadie, la desesperación de no haber amado a aquel que la quería en esos instantes pasaron por si mente a velocidad luz, rechazó al chico que la pretendía y le daba regalos costosos, con su madre maliciosa que decía que la aceptaba como una buena esposa, quería que vivieran con ella, pero siendo honesta quizás fue demasiado ambiciosa, deseaba tener una vida mejor, salir de todo lo que había vivido en su infancia, luchar por ganar dinero, sobresalir en lo que mejor sabía hacer, demostrarle al mundo que ella podía con ese empleo.

Todo ¿para qué? había aceptado realizar ese anuncio por hacer de su descanso una ventaja, algo que la haría mejor al ser precisamente ella, la que saliera en ese anuncio y no alguien más.

Al final se hallaba luciéndose ahí, para demostrarles ¿Qué?, ¿A quién? había sido una tonta, sabía que era un riesgo enorme ni siquiera era una paracaidista con experiencia ni profesional y esa sacudida, ese golpe en la cabeza le había cambiado un pensamiento diferente de lo que estaba sucediéndole.

De todos los riesgos que había corrido por un empleo que no la valoraba y que tenía que estar luchando constantemente solo por ser mujer, ahora estaban haciendo un anuncio de mujeres dentro de la empresa, cuando por años la habían menospreciado y hecho competir con sus compañeros ¿para qué? ¿Qué logro? ¿alguien acaso se preocupaba realmente por ella?

Las horas ahí sola, colgada como cebo para los animales del bosque, no traía heridas sangrantes, y a pesar de todo, el árbol no le había golpeado la espalda, gracias a recordar a Jim y el motor, pero meditar que estuvo a punto de morir, la hizo orar por horas, una oportunidad, solo una y haría lo mejor, una posibilidad y se daría tiempo de vivir, no de estar vendiendo y haciendo ricos a las personas, volvería a empezar de nuevo, el frío la hacía llorar al no poder ni siquiera abrazarse a sí misma, se quedaba dormida adolorida, lamiéndose las heridas mentalmente porque nunca acepto a Tom siendo tan bueno con ella, mucho menos a Robert, ella no quería quedarse ahí en el pueblo, quería crecer y encontrar un amor que realmente sintiera que la apreciara y la considerara su compañera y no una mujer guardada en un hogar cuidando de los hijos y todo eso la había llevado a competir con ellos, con sus compañeros por un lugar en ese corporativo que fue su vida, por años ¿y para qué? al final le dieron la espalda, la mandaron de vacaciones obligadas, con el pretexto de un descanso necesario. ¡Dios!

Lejos de ahí Sofia, la novia de Jim comentaba justificando a sus jefes, que Candy había estado en un comercial de paracaidismo y que no la encontraban, ella todavía estaba de vacaciones para todos, sin embargo, temía no volver a verla, sonriendo y gimiendo por todo lo que ella hacía comentando que el comercial era de la misma empresa de los Cornwall, al saber esto, el jefe del departamento le informaba a su gerente y este a su coordinador quien llamaba a Alistar e informaba a detalle de lo que se estaban enterando,

- La líder de ventas, se encontraba de vacaciones, ella hizo un comercial de paracaidismo, casualmente de nuestra empresa. - ¿La líder de ventas? Nosotros contratamos una empresa externa. - Ella se encontraba de vacaciones, señor.

Alistar hacía una seña y su asistente llamaba al Lic. Archivald, ahí escuchaban ambos hombres los detalles, luego citaban a la empresa que elaboraba el comercial y confirmaban para ir a ver los avances, al hacerlo, ambos hermanos miraban el trabajo perfectamente bien hecho, a lo que Jim que se encontraba ahí, para decir que también trabajaba para Cornwall y que con él, Candy se había enterado del anuncio y lo había hecho, porque deseaba quedar bien y que fuera real, para que fuera algo motivador para las empleadas como ella.

Continuará...

De antemano muchas gracias, entre más comentan una historia, es motivante para seguirla escribiendo,

Continuamos completando más historias de Albert y Candy

Un Abrazo a la Distancia

Mayra Exitosa