Capítulo IV: La Batalla de Trost Pt3
*Elio*
Una vez más estaban en el interior de los cuarteles. La guarnición bajo comando del capitán Kitz estaba decidida a ejecutar a Eren, gracias a la presencia de la supervisora Irina fue que no los habían abatido ahí en el campo de batalla
Elio enredaba su cabello entre sus dedos mientras esperaba, no sabía que era lo que esperaban. Nadie lo sabía
Sentada la supervisora Irina golpeaba sus uñas una y otra vez contra la oscura madera del escritorio. Armin y Mikasa no se separaban de Eren y otros cadetes cercanos los tenía rodeados sin dejar de hacerle preguntas a Eren y sus titánicos
Así que tres anormales en un día!- Reiner exclamó detrás suyo. Elio no tuvo tiempo para reaccionar cuando sintió una brusca palmada azotar contra espalda, pasó de estar recargado al borde de una ventana a tambalearse mientras sentía su cuello y boca tensas por retener sus quejidos
"No sabe medir su fuerza" Pensó mientras se reincorpaba. Con sus labios en una tensa sonrisa rígida se volteó hacia el rubio para darse cuenta que venía junto a Bertholdt y Annie
Vas a terminar matando a alguien con esas muestras de afecto- Berthdoldt lo reprendió
Si- Annie agregó –Eres un gran toro descerebrado, pon esa fuerza tuya en labores anti titanes- Entre los cuatro cadetes solo hubo silencio tras el comentario de Annie. Elio no pudo evitar preguntarse si en las murallas había alguien mas con la capacidad de insultar a alguien sin denotar rastro de emoción alguna
Entre el silencio fue inevitable presenciar una sofocante tensión entre el rubio y la rubia y aunque Reiner estuviera riendo en voz alta era fácil notar como sus ojos reaccionaban según su interior en lugar del exterior, Elio dejó de fijarse cuando uno de esos nerviosos movimientos oculares terminó sobre él
Al unísono Elio pudo reír nerviosamente junto a Berthdoldt. Ansioso por no sentirse inutilizado al estar recluido en cuarteles, ya se había decidido por charlar y así despistar su mente, aunque fuera unos momentos
Pues me siento bien- Elio dijo mientras se sentaba sobre el borde de la ventana. El sol se sentía cálido sobre su espalda, como el abrazo de la primavera
No sé si solo sea cosa mía, pero la poca que he atravesado este día en verdad me ha hecho pensar cosas…- Elio hubiera dejado sus palabras hasta ahí hasta que se dio cuenta de lo tonto que sonaba pensar cosas
Pensar cosas de otra manera- Se corrigió para después reír por ello –Y ustedes?- Le preguntó a la triada
Si no te miento me siento decepcionado- Reiner no demoró en contestar, confundido por su respuesta Elio frunció el ceño, se halló buscando las expresiones de Bertholdt y Annie para ver como juzgaban aquella reacción y como respuesta obtuvo la nerviosa risita del alto pelinegro
Decepcionado por no haber acabado con un anormal- Reiner añadió y sorprendentemente eso hizo que la rubia frunciera su ceño
Pensándolo bien tú también deberías estar decepcionada- Nuevamente los rubios parecían antagonizarse –Perdiste la baja del anormal ante Elio- Sintiendo que aquél comentario lo traería al medio de una boba discusión giró sus ojos y suspiró
No era mi objetivo- Annie contestó fría pero furiosa como una ventisca – Hablas de todo esto como si fuera para divertirse cuando es un deber… O acaso olvidas tu propósito soldado Braun?- Ante las palabras de Annie Reiner solo agachó su mirada, Bertholdt parecía estar por ponerse de medio, pero aquella ventisca se había vuelto un terrible invierno
Además, no es como que tú lo hubieras matado, fue Elio!- Se puso tenso ante la segunda mención suya en el argumento de ambos, bostezó queriendo ignorar la discusión pero se halló pensativo
"No es como que tú lo hubieras matado, fue Elio"
Si tanto te enorgullece tu número de bajas de titanes puros y descerebrados talvez deberías tomar tus espadas, cortar tu nuca y matat!-
No lo maté- Elio interrumpió antipático a la discusión, de inmediato los tres se fijaron sobre él – Bueno… Según yo, no lo maté- Inconscientemente se halló tomando la empuñadura de sus espadas
No terminé de cortar la nuca…- Apretó el agarre sobre el mango de sus armas al recordar la repentina nube de vapor que lo empujó –Empezó a soltar vapor y luego cayó… Talvez después de todo esos monstruos no son inmortales-
Ya escuchando sus palabras es que era consciente de lo raro que había sido eso, incluso pudo notar que a Annie, Bertholdt y Reiner les parecía igualmente raro. Con los dos rubios dejando de discutir y con el pelinegro totalmente pasmado
Nuevamente hubo un silencio, momentos durante los cuales aquella aversión
O podría ser que alguien más terminó el trabajo- Sugirió a pesar de saber que no era así, se arrellanó contra el enrejado de las ventanas al sentirse tonto por su idea y confundido por los hechos
No recibió respuesta por parte de sus compañeros, solamente se alejaron de la manera en que llegaron. Aburrido solamente se puso más cómodo, a través de la ventana tibios rayos de luz lo acurrucaron, trató de resistir la somnolencia, pero el costo de tanto maniobrar le había llegado a través del pesar de sus párpados
No supo ni sintió cuando se quedó dormido, no soñó y lo primero que sintió al despertarse era como lo sacudían y su cuello resentía la posición en la que había dormido
Elio despierta!- Escuchó una nerviosa voz masculina , sintiendo sus ojos atormentados por la somnolencia, poco a poco distinguió un redondo rostro adornado por una blanca cabellera y blanca barba –Elio!- Abrió sus ojos de par en par pues su padre lo estaba despertando
No pudo evitar sonreír pues le recordaba a los tiempos en que su madre lo despertaba para ir a misa, su cuerpo entró en acción al darse cuenta que esto no eran preparativos para un momento de culto
Detrás de su padre podía ver cadetes y miembros de guarnición avanzar, el rumor de su marcha resonaba, en el aula solo quedaban él y su padre
Qué pasa?!- Preguntó mientras se incorporaba, tuvo que ser cuidadoso, pues sus movimientos aun eran torpes y toscos, además de que su padre aun lo tenía tomado de los hombros
Nada!- Su padre exclamó desesperado, a pesar de tratar de ser cuidadoso de no tumbar a su lisiado padre, el señor Webber no cooperaba y seguía manteniendo su agarre sobre Elio
Papá!- Elio exclamó –Toma tus muletas y vayamos con los demás- Quitando sus brazos de encima suyo y extendiéndole su muleta, Elio mantenía su atención sobre lo que sea que estuvieran haciendo los soldados
No!- Gritó golpeando la muleta fuera de sus manos. Absorto por el comportamiento de su padre. Finamente dedicó toda su atención a él. Su rostro se veía cansado y derrotado, respiraba de manera acelerada y murmuraba nervioso tratando de darle forma a sus palabras
Elio…Vayamos con mamá- Nuevamente su padre se posó sus manos sobre sus hombros, a pesar de la cabeza de altura la diferencia casi quedaba hecha de lado pues el señor Webber agachó su rostro y comenzó a llorar
Otra vez nos lo quitan todo…- Su padre sollozaba, -Primero Shinganshina y ahora Trost! Primero Anisse y ahora tú!- Su padre apretó su agarre, calvando sus dedos sobre el uniforme de Elio. Sintiendo sus ojos llorosos por la mención de su hermana y el estado de su padre le fue inevitable llorar
Solo tenemos que irnos!- El habla de su padre se volvía más torpe y desesperada
Con tantas bajas de seguro nos haremos con un lugar cómodo en el interior de los muros Sina y así estaremos juntos- El cadete no podía dar crédito a las palabras de su padre, Elio miraba horrorizado a su padre como si este fuera uno de esos vagos locos de las calles
Tendremos nuestra casa junto al rio y ahí viviremos los tres… Al menos hasta que finalmente acaben con nosotros- La voz del señor Webber solo se rompía más, entre falta de aire e incoherencia debido a su desesperado llanto
"Vas a morir" Sus infantiles y pasadas palabras resonaron entre todo lo que pensaba. Sabía que sus palabras se habían hecho realidad, su rostro se deformó agravado por reconocer que Anisse nunca volvería a estar entre ellos, pero aquello que desbordó sus lágrimas fue pensar que el espíritu de su padre también había perecido en Shinganshina
Reconocer que su padre solo era una carcasa del bravo y noble guerrero que alguna vez fue, aunque esclarecedor resultaba aflictivo
No- Elio espetó a duras penas, pues sentía como de su boca incontables palabras y alaridos buscaban desbordarse. Apretando sus manos en puños, Elio alzó la mirada e hizo de lado a su padre
Anisse cumplió con su deber…- No quiso seguir viendo a su padre, sabía que podría desencadenar sus emociones y talvez cedería a la pena que sentía por su padre. Apretó sus labios unos sobre otro y sintió como una lágrima caía hacia la comisura de sus labrios
Suspiró y derramó su última lagrima
Otros tantos cumplieron con su deber aquella vez como hoy…- Elio avanzó hacia la salida del aula, siempre resistiendo las ganas de ver a hacia su padre –Ahora me toca a mí. Cumpliré con mi deber!- Tras esto solamente se unió a las líneas de cadetes y guarnición
Había vagado entre rostros desconocidos y temerosos hasta que se encontró con Mina y Marco
Elio!- Mina exclamó mientras se acercaba a él, detrás suyo Marco venia junto con otros cadetes
El supervisor Webber nos dijo que no te despertáramos, qué te dijo?- Marco preguntó con un semblante afable e impropio para la situación, quiso pensar que no era raro ver a alguien así, pero la alternativa sería aceptar que en situaciones así lo esperado sería que alguien terminara como su padre
"No" Se negaba a creer que algo así era aceptable y solo sonrió
Palabras de aliento- Mintió mientras se fijaba en los otros cadetes, no los reconocía –Ustedes qué hacen?- Cuestionó mientras trataba de mantenerse al margen de lo ocurrido a su alrededor
Ahí los dos le explicaron el plan del comandante Pyxis. Elio abrió sus ojos de par en par al imaginarse a Eren usando sus poderes titánicos para cerrar el hoyo. Se enteró que Mina y Marco conformarían un cuerpo de apoyo y abasto para facilitar la dispersión de las tropas en su intento de alejar a los titanes de Eren
Marco estaría como líder, Mina tenía amplios conocimientos de los cañones que serían la principal defensa de su estación y cuando fue momento de presentarse, Allister, Alys y Vance exclamaron que acabarían con los titanes en caso de que la torre estuviera en asedio
Sin ordenes estaba por sugerir ir con ellos cuando Marco le explicó que la supervisora Irina había pedido que le dijeran que lo buscaba. Estaba por despedirse de Mina cuando esta comenzó a deshacer sus colas
Tras reunir su cabello en una sola cola Mina le extendió el otro listón rojo a Elio. Al principio estaba reacio a aceptarlo, pues además de que no acostumbraba a peinarse sabía que algo así podría ser como el parche de su hermana, algo muy sentimental como para simplemente perderse en caso de que uno o el otro muriera
Sin embargo, lo tomó e hizo lo mismo que Mina. Su claro cabello platinado caía en una larga y delgada cola que apretaba a la altura de su nuca, se despidió y mientras el comandante Pyxis daba un discurso al que no le prestó atención se tambaleó entre la multitud hasta que encontró a la supervisora
La mujer se tomó la molestia de explicarle el plan y de asignarlo al equipo señuelo junto con Mikasa
En torno a la plaza en donde la gran roca había aterrizado, Mikasa y Elio esperaban ansiosos sobre un techo a que el equipo elite llegara al área. Esperaban en silencio con sus espadas en mano, a la distancia podían ver a otros soldados ubicados en techos lejanos y superficies altas
"Ojalá estén bien" Pensó en aquello encargados de dispersar sus titanes y en el peligro al que se enfrentaban
Siempre alertas, Mikasa y él se aproximaron a la orilla al ver al equipo de elite llegar junto con Eren. Habiéndose dormido y sin mucha claridad sobre la situación el pensar que alguien pudiera volverse un titán le resultaba más como un castigo divino que como la visión de la única esperanza de la humanidad
Mikasa- Elio la llamó –Qué viste cuando recuperaron a Eren?-
La pelinegra mantuvo su rostro serio
No lo sé- Contestó sin duda –Vi vapor emerger del titán y cuando este se dispersó Eren se levantaba entre la carne del monstruo- Asintió atento a lo que decía
En verdad crees que Eren sea un titán?- Su pregunta quedó al aire pues de donde estaba la roca un violento retumbar y relampagueo
A pesar de que el sol brillaba los incandescentes rayos amarillentos que se manifestaba deslumbraban con mayor incandescencia. Vapores y destellos revelaban poco de lo que sea que estuviera pasando.
Con sus ojos completamente fijos y abiertos, forzaba su vista para divisar algo más que una silueta
Le fue inevitable estremecerse al escuchar el rugido de Eren y otra vez se preguntaba si aquello era divino o profano. Si Eren era un ángel protector o un demonio con piel humana
Completamente embobado sé que quedó quieto viendo como Eren cargaba aquella roca sobre su hombro
A lado suyo Mikasa suspiró alegre por lo que pasaba y juntos vieron como Eren se daba la vuelta, caminaba hacia donde estaban ellos. Con pasos firmes y lentos, todo parecía ir bien mientras Eren siguiera el camino hacia la calle principal
A medida que se acercaba se podía sentir con más claridad la fuerza de sus pasos. Los sacudía y a pesar de estar perplejos por lo que veían tuvieron que tomarse el momento para hallar equilibrio, pasando de estar a gatas a estar de cuclillas giró su cabeza de inmediato hacia donde estaba el titán tras escuchar un seco impacto profundo
Confundido, vio la roca sobre el suelo y a Eren corriendo hacia donde estaban, avanzaba con su mano empuñada
Eren!- Mikasa gritó su nombre, Elio quiso voltear pero se dejó caer por sobre la orilla, se enganchó a otro edificio y opacando los sonidos de su equipo, detrás suyo pudo distinguir el sonido de un impacto y el consecuente colapso de un edificio
Colgando de una pared giró su cabeza para ver como Eren desquitaba sus golpes contra el edificio en el que habían estado. Por donde estaba la roca originalmente pudo ver como una bengala roja se lanzaba hacia los cielos, buscaba hacia donde era más indicado reagruparse, pero le fue difícil concentrarse con Eren demoliendo el edificio cercano y con Mikasa esquivando cada golpe
"No puede ser" Pensar que la misión ya estaba fallando le hizo gruñir, pero pensar que ya la estaban dando como fallida lo enfureció
Pensar que los equipos de dispersión y apoyo estaban arriesgando su vida por nada le hizo pensar en las ruines palabras de su padre. No lo iba a permitir
Viendo como el equipo elite llegaba para tratar de alejar a Mikasa, fue un instante en donde Elio se empujó con sus pies contra la pared y retiró su gancho. Salió lanzado como una bala
El rechinar del metal desenvainado y el salpicar de sangre fue lo último que escuchó antes de accionar su equipo nuevamente y nuevamente estar con altura. Con su corazón retumbando en su pecho vio como Eren titán caía de rodillas por el profundo corte en sus talones
Aun recuperando su respiración corrió hacia donde Rico, Ian y Mitabi sostenían a Mikasa
Buen trabajo cadete- Rico dijo mientras lo veía –Ian, dale el golpe de gracia, tenemos que abandonar la misión antes d- Sin poder terminar de hablar todo vieron como Mikasa se libraba del forcejeo con Mitabi y se lanzaba al rostro del titán
Nuevamente Elio gruñó, ni Mikasa ni Eren permitían el desempeño correcto de la misión. Saber que tantas vidas podían perderse por su irracionalidad, Elio se lanzó
Clavando su gancho en un hombro, utilizó la inercia de la cuerda para mantener tensión. Pensaba hacer lo que hizo con el primer anormal, atacar con un avance horizontal contra la nuca
No sabía qué pasaría con Eren, pero estaba seguro que las palabras de su padre se harían realidad se no hacía algo
Estaba por moverse como lo estaba planeando cuando una espada lanzada le hizo hacerse para el lado contrario y seguir al frente hacia el hombro
Subió sobre el hombro titánico, aun a cuatro Mikasa cayó de pie a lado suyo. Elio alzó su mirada para recibir el filo reluciente de su espada bajo su barbilla, un escalofrío lo recorrió al ver los inexpresivos ojos oscuros de su compañera
Porqué lo atacas?- Elio tragó saliva al sentir sus palabras tan hostiles, pudo escuchar un gruñido bajo emitido por Eren, incluso pudo sentir las suaves vibraciones del sonido
Pasando su mirada de ella hacia la piel, hundió sus dedos en la piel al sentir como sus manos le temblaban
Porque te estaba atacando a ti..- Elio aferró sus manos sobre la piel, sentía su cuerpo tenso. No terminaba de creer que Mikasa lo tenía amenazado, ni quería creer que en verdad estaban tan fuera de lugar como para no darse cuenta de las consecuencias
No importa, yo se tratar con el- Mikasa respondió frívola, quitando la espada de debajo de su mandíbula –No podemos abandonarlo y si lo sacamos no sabemos si le estamos haciendo daño- Finalmente, Mikasa expresó el semblante de alguna emoción, sonaba preocupada y sincera con sus dudas sobre Eren
Elio gruñó, pues, aunque él también tenía sus dudas sobre lo que estaba pasando sabía que no debía dudar sobre su deber. No debía dejar que esto fuera un sacrificio en vano o una masacre
Tampoco sé que le pasa a Eren- Elio comenzó –Pero él tiene una misión, igual que tú y que yo… Eren habla mucho sobre luchar por la humanidad, pero estando aquí sin retroceder o avanzar solo estamos dejando que nuestros compañeros mueran en vano!- Con su mirada aun agachada abrió sus ojos de par en par al escuchar ordenes provenientes de Rico
Titanes se acercan!- Indicó –Mantengan el área despejada!- Libero su agarre sobre la piel del titán y con sus piernas parcialmente colgando se deslizó del hombro y cayó
Se movió hacia la derecha del gran abdomen, rodeando esa área ya tuvo a la vista la cabeza y nuca. Lanzo su gancho y comenzó a ascender diagonalmente, estaba cerca, empuñaba sus sables y vio a Mikasa darse cuenta de donde estaba
Escuchó su equipo accionarse y la vio lanzándose hacia él. Dio un profundo respiro y giró sobre sí mismo, dio otro impulso, siendo que este fue en dirección contraria a cómo iba originalmente de inmediato sintió la cuerda de su gancho latigar
Sintió que el aire se le escapaba de los pulmones ante el brusco empuje hacia abajo, pero sonrió al ver como por ello Mikasa pasaba de largo y se le escapó una risita al sentir que el latigazo restante lo estaba llevando hacia arriba
No era con velocidad o impulso suficiente, además el tampoco sentía las fuerzas necesarias. Antes de desfallecerse dio sus últimas fuerzas clavando sus espadas en la nuca de Eren titán
*Mikasa*
Teniendo que aterrizar en el suelo, Mikasa no pudo evitar sentir pena por su compañero quien colgaba desde Eren completamente desfallecido mal que
Era claro que la situación a su alrededor estaba por empeorar pues titanes puros se acercaban a ellos, su primer instinto fue pensar en defender a Eren, pero viendo como tantos desconocidos se arriesgaban por otros tantos le hizo pensar que talvez Elio tenía razón
Alguna vez fue Eren quien se puso al frente por ella y siempre le estaría agradecida, pero pensar que Armin, Sasha y Elio estaban en peligro por culpa de ellos hacía que el agarre sobre sus sables fue flojo
Eren puede cuidar de sí mismo- Se dijo al recordar que incluso tras su supuesta muerte estaba aquí
Con su mente esclarecida pensaba ir a con Rico y el resto del equipo de elite, pudo ver como otros más llegaban, pero detuvo su avance al ver el titán de Eren se ponía de pie nuevamente
Sin saber porque reforzó su empuñadura, su mirada iba hacia Elio quien aún colgaba de la cabeza del titán y ahí se preguntó si estaba dispuesta a proteger a los demás de este Eren
Presenciando el temible rugido se halló a si misma entre los aires, iba a por Elio, sabía que se lo debía
En el aire se mantuvo atenta a cada acción de Eren, por unos instantes se halló viendo a los techos en donde Armin y fue ahí que por el rabillo de sus ojos vio como el titán de Eren se movía
Eh hola, sé que hay quienes leen esto, si me demoro en subir algún capítulo es porque inicié mi cuatrimestre universitario. Agregué indicaciones para las perspectivas porque me di cuenta que necesitaría usar una perspectiva además de la Elio en algún punto y quien mejor que nuestra guerrera favorita
Espero les haya gustado :)