¡¿Qué onda, Que onda amigos?!

¡Aqui les saluda Ryu Shiro con un nuevo capítulo!

Esta vez no habrá introducción... por falta de creatividad (0.0U)


Formando Lazos (1ra Parte): El Significado De Familia Y Amistad.


Los meses siguientes, bajo la tutela de Kurama, Naruto mejoraba rápidamente en su desarrollo como ninja, la sola idea de poder lanzar fuego como lo haría un dragón era un buen incentivó para el pequeño príncipe, quien ahora a sus 6 años era capaz de ejecutar sus 'misiones ninja' de manera muy eficiente a tal punto que hasta sus 2 guardianes que normalmente conocían sus manías, pasaban por serios problemas para ubicarlo siempre que realizaba alguna de sus fechorías; Shining incluso llego a pensar que la idea de Hearts de colocarle un cascabel gigante en cuello como si fuera un gato no sonaba tan descabellada después de todo.

Otro punto que tal vez sea un motivador para el niño, era su nueva y querida amiga Twilight, quien desde su primer encuentro en el laberinto, fue como un rayo de alegría para él; finalmente tenia a alguien de su edad con quien jugar y compartir.

Ella muy lista, conocía muchas historias y cuentos debido a sus hábitos de lectura; pero a pesar de ello, Naruto se negaba a revelar su linaje, ya anteriormente cuando otros potros, traídos por los nobles, y la alta sociedad de Canterlot le fueron presentados, estos al igual que sus padres fueron muy presumidos, más cuando se les informó de su relación con la princesa Celestia, cambiaron su actitud al instante con él… y eso le molestaba.

No quería que su amiga cambiara su forma de tratarlo, el quería que ella fuera siempre así con el, alegre, lista, incluso que lo corrija cuando cometía alguna tontería, pero sincera; además, sin quererlo poco a poco volvía a la linda e inocente unicornio en una cómplice y secuaz de sus travesuras por todo el castillo.

En cuanto a Twilight, todo era una experiencia nueva, finalmente ella tenía un amigo, no una niñera cariñosa, hermano que la ame, o un muñeco mal hecho que ocupe ese lugar, sino un amigo real, alguien fuera de ese cerrado circulo que puso alrededor suyo al dedicarse solamente al estudio, alguien que la aceptara tal como es ella; La unicornio siempre fallaba miserablemente en el tema de hacer amigos se tratara, pensó que la amistad no era un tema para ella, hasta que conoció a ese niño en aquel laberinto.

Naruto siempre elogiaba lo inteligente que era, siempre le animaba cuando la veía decaída, y siempre le dedicada a ella una de esas sonrisas zorrunas que le encantaban; y sin saberlo, el mismo Kurama se impresionaba de sus conocimientos a pesar de su corta edad, incluso el zorro se imaginaba que de estar en el mundo shinobi, la potra con algo de entrenamiento físico, tendría una exitosa carrera como kunoichi.

Pero a pesar de ello, el tema de quien es en realidad es su amigo, la dejaba muy intrigada, siempre que ella preguntaba por el tema, Naruto siempre le salía con respuestas muy variadas, graciosas y hasta absurdas, tales como un minotauro sin cuernos, un Chimpancé sin pelo o un duende mágico de jardín, como solía decirles su hermano y Hearts; ese punto también la intrigaba, ambos parecían conocerlo bien y a veces jugaban con ellos, mas a su criterio, le parecía que los estuvieran cuidando celosamente.

Pero al pensar en eso, sumado al hecho de conocer a su niñera Candace que era una princesa y vivir en el palacio, ella llego a creer que podría ser hijo de un embajador de algún país lejano y exotico, al menos eso creía al ver a los demás ponis y guardias del castillo siempre tratarlo con amabilidad y respeto; pero para aumentar su extrañesa, nunca pudo ver a la princesa Celestia en sus dias de visitas.

Luego de un tiempo, Twilight dejo de darle importancia al tema, esa criatura era Naruto, su más querido, y posiblemente único amigo, compañero de juegos y su cómplice de bromas, cosa que en un principio lo seguía tímidamente, pero con el tiempo le encontró el gusto y le decía sus sugerencias en caso de hacer bromas más elaboradas.


Un día como cualquier otro, la princesa Celestia revisaba y aprobaba algunos informes en su trono, mientras eras asistida por Shining quien archivaba los documentos ya vistos.

"¿Y bien Shining...? ¿Que se siente cuidar de dos niños a la vez?, espero que Naruto no les este dando problemas a ti y Heartsword" Pregunto la princesa para amenizar el trabajo, más el unicornio puso una cara leve de fastidio.

"Yo más bien diría que cuido a tres niños, Hearts a veces olvida que está cuidando al Príncipe y se vuelve un potrillo más…" Comento el recluta con resignación mientras la princesa solo reía de forma educada recordando al Pegaso, que si bien su fama de torpe y distraído llego hasta el palacio, debía reconocer que su fama de tener un buen corazón y jamás rendirse a la adversidad también era bastante admirable.

De pronto recordó el tema de la hermana del pelirrojo, y tratando de saber más, aprovecho la oportunidad.

"Y dime, ¿Crees que la hermanita de Heartsword pueda llevarse bien con Naruto?" Pregunto Celestia, pero pronto noto la expresión triste del unicornio y sintió que habia cometido una indiscreción.

"No dudo que ella pudiera ser una buena amiga para el príncipe, su majestad, pero…" Usando un tono de preocupación "Tengo entendido que ella desde pequeña siempre ha estado internada en el hospital; ni siquiera Twilight la ha podido conocer… Yo sé que Hearts la quiere mucho ya que solo se tienen el uno al otro desde que sus padres murieron; lo único que podría decirle sobre cómo es ella, es que ella es como Hearts, algo torpe e ingenua, pero dulce y muy tierna" Menciono Shining lo último con una sonrisa triste.

La princesa no evito sentirse conmovida por esa revelación, y ahora entendía en parte tanta dedicación del Pegaso a su entrenamiento como cadete y los constantes auto castigos que se daba como entrenamiento extra con el fin de mejorar; trato de averiguar mas pero fue interrumpida.

"Awwwwww~ Shining… No sabía que pensabas así de mí; pero lo siento amigo, tu no eres mi tipo, además, luego Candase se pondría celosa, y luego tendríamos que hablar con tus padres y…" En un tono burlón se hacía presente Heartsword visiblemente sucio luego de otra sus rutinas de entrenamiento, saludando como es debido a Celestia; mientras la princesa solo reía de forma discreta ante la mueca de enojo del unicornio; su hijo tenía toda la razón, ver interactuar a esos dos era un show cómico asegurado.

"Envés de decir tantas tonterías, ¿Se puede saber porque no estas cuidando a los niños?" Hablo Shining visiblemente enojado y con una vena en la frente a punto de estallar.

"¡Oh!, no temas por su seguridad, los deje jugando en el cuartel, lugar más seguro no pueden estar..." Contesto de forma despreocupada el Pegaso, mientras el unicornio puso una cara de preocupación.

"¡Genial!, ahora son los guardias los que me preocupan…" Comento el unicornio con temor ante lo que los niños pudieran hacer, temor que se confirmó pocos segundos después.

"¡AHHHHHHHH! ¡NARUTO! ¡TWILIGHT!" Fue el grito de furia del capitan Ironblood, quien se le escucho desde el comedor del cuartel hasta el castillo.


(Naruto theme: GO GO)


"Justo lo que me temía…" Comento suspirando con resignación y fastidio Shining.

"Ya se habían tardado…" Le dijo Hearts por lo bajo a la princesa, mientras Celestia hacia más notoria su risa, y los 3 iban directamente hasta la escena del crimen.


Al llegar al comedor del cuartel, vieron lo que parecía un globo cubierto de plumas colgado del techo y balanceándose como el péndulo de un reloj, pero al mirarlo mejor, se dieron cuenta que era el capitán Ironblood colgado de cabeza claramente molesto.

El capitán era un pony blanco de mediana edad, crin y bigote de color plata, junto a una imagen de tres medallas de guerra en su flanco… Y ahora era una ridícula piñata cubierta de melaza y plumas.

Celestia con una cara seria salió un momento del cuarto para la extrañeza de todos, solo para escucharse la fuerte risa descontrolada de la princesa fuera de la habitación a pesar de ser claramente escuchada, para luego regresar con la misma cara solemne.

Mientras los dos reclutas, tratando en vano de no reírse en la cara de su superior; lo ayudaron a bajar y limpiarlo un poco para comenzar la búsqueda de los dos pequeños terroristas.

Mientras, la princesa dejaba a cargo a los cadetes el desenlace de la historia para volver a sus deberes reales, pero aun riéndose de la imagen del emplumado capitán con una mueca caricaturesca de enojo en su cara.

"¡Jajajajajaja! ¡Era como ver a una piñata de pollo con cara de amargado!" Comentaba entre risas Celestia.

(Fin del tema)


Luego de un rato buscándolos, finalmente lograron dar con los dos pequeños.

Naruto tenía a su amiga en la espalda, y usando su habilidad de trepar, ambos estaban escondidos en la esquina superior del cuarto usando su ultimo truco de escondite (cortesía de Kurama), la capa ninja de invisibilidad, que… En realidad solo era un trozo de tela que imitaba el color de la pared, pero muy efectivo en ese momento. Lastimosamente a la pequeña unicornio le gano un estornudo por las plumas y los terminaron descubriendo.

"Lo siento Naru… siempre por mi culpa terminan descubriéndonos" Le dijo susurrando la pequeña unicornio con orejas agachadas estando ambos en el suelo.

"No te preocupes Twi, además, fue muy divertido, solo tenemos que mejorar nuestro escape para la próxima vez…" Susurro el candidato a ninja con una pequeña sonrisa animando a Twilight, pero la conferencia fue interrumpida por la mirada inquisidora de los dos cadetes y la mirada furiosa del Capitán.

"¿Y bien chicos…? ¿Que pueden decir en su defensa?" Pregunto de forma calmada y seria Heartsword, aunque por momentos se le inflaban las mejillas tratando de contener la risa al recordar al como encontraron al capitán.

"Ahhhhh~…" soltó Shining en tono de derrota al ver que su amigo no podía guardar al menos cinco minutos de seriedad "Será mejor que hablen ya, ¡Lo que hicieron fue muy serio esta vez!" Con más auto control habló Shining, aunque claro, no evitaba poner una leve mueca de burla al mirar a su capitán.

"¡ESTO ES UN ULTRAJE! ¡Estos mocosos no respetan nada! ¡¿Cómo es posible que pongan trampas en el comedor solo por diversión?!" Visiblemente enojado reclamaba Ironblood aún con restos de plumas en su cara.

"¡No fue por diversión! ¡Fue para atrapar al ladrón!" Se defendió el príncipe, mientras los cadetes miraban con sorpresa los niños.

"¡Es verdad!, nosotros queríamos atrapar al ladrón de pastelitos de chocolate…" Twilight apoyaba la versión de Naruto "Siempre el capitán nos culpa de robarnos los postres, por eso colocamos una trampa..." Recalco la pequeña unicornio recordando bien.


¡Flashback!


Luego de ser dejados por Hearts en el cuartel, los niños jugaban sanamente en el lugar, hasta que de pronto uno de los encargados de la cocina visiblemente consternado salía a darle una queja al capitán, alguien se ha estado robando los postres de las tropas una vez mas, y ante esta noticia, el capitán soltó lo siguiente.

"¡Je!, seguro que fueron esos niños, siempre se pierden los postres cuando están presentes..." Con tono acusatorio declaro el capitán, y luego regreso a su oficina, mientras los niños bajaron la cabeza ante esa acusación y haber recibido una reprimenda a pesar de no haber hecho nada.

"¡No es justo! ¡Solo porque somos unos niños, no quiere decir que tenemos la culpa del robo!" Protesto visiblemente molesta Twilight por tal injusticia.

"Hmmmm… La verdad también me molesta que me culpen por algo que no hice… Aún…" Respondió naruto colocándose la mano en el mentón, mientras le pedía algún consejo a Kurama.

"Nueva misión ninja: ¡Atrapar al ladrón de pasteles!" Fue la respuesta inesperada del zorro "Mocoso, los ninjas no solo son expertos en escapar de sus enemigos y esconderse, sino también en emboscarlos y poner trampas; usando tu ingenio crea una trampa para descubrir al culpable" El zorro quería evaluar sus capacidades de cazador de Naruto, y de paso divertirse al imaginarse de lo que su alumno podría ser capaz.

"¡Twilight, atrapemos al ladrón!" Exclamó el príncipe a su amiga emocionado.

Más, la unicornio no parecía muy convencida de la loca propuesta de su amigo, pero luego de explicarle su plan, juntos se metieron a escondidas al comedor donde el cocinero dejo una nueva bandeja de pasteles de chocolate, y sin perder tiempo, Naruto comenzó a armar la trampa.

"Naru, no creo que esto sea buena idea, podríamos meternos en problemas…" Comento con temor la niña quien no se acostumbraba a las ideas alocadas de su amigo.

"Twilight, si tienes miedo puedes retirarte, no te preocupes…" Le decía Naruto con una sonrisa amable "Si algo sale mal, asumiré la responsabilidad, ¿Pero sabes?, podrán acusarme de travieso, ¡Pero no de ladrón y no deseo que te acusen de eso a ti también!, sobretodo porque tu jamás harías algo así..." Comento firme mientras colocaba el solo la trampa para tener colgado del techo al culpable.

La unicornio lo miraba asombrada por lo protector que él era, quería no solo demostrar su inocencia, sino también la de ella…

"Creo que el solo colgarlo no bastara como castigo, creo que... deberíamos hacer algo mas…" Con una sonrisa apenada, twilight se unía al rubio comentándole su idea.

"Twilight… ¿Sabes lo que acaba de pasar?" Comento serio el rubio terminando de armar todo.

"si, me meteré en un buen lio por esto..." Respondió sonriendo la pequeña.

"No… ¡Te acabas de volver mi socia en el crimen!" Declaro con una suave caricia en la frente a la potra, la cual río dándole una sonrisa levemente sonrojada, para luego mirar ambos su obra maestra "¡Tu idea del castigo extra esta genial!" Exclamó Naruto, mientras buscaban donde esconderse.

"Hmmm… Nada mal para un par de principiantes, me gusta cómo piensa la pequeña" Critico el zorro desde su jaula mirando la trampa lista.

Naruto trepo la pared y se escondió en la esquina superior del cuarto, y usando la manta ninja logro camuflarse, pero pronto vio a la unicornio nerviosamente ir de un lado a otro, sin saber dónde esconderse, de inmediato bajo hasta donde ella.

"¡Ven conmigo!" El príncipe estiro su mano a su amiga, pero está se negó.

"¡No! ¡Si estamos juntos nos descubrirán más fácil y…" No pudo continuar, pues Naruto sin rechistar la tomo en brazos para sorpresa y sonrojo de ella.

"¡Jamás dejare a mi socia sola o en problemas!" Respondió el testarudo príncipe y se la llevo a la esquina, para luego acomodarla en su espalda y usar el manto; Mientras la unicornio, con una pequeña sonrisa, abrazaba la espalda de Naruto muy cómoda por la sensación protectora que emanaba de su amigo.

Luego de varios minutos de espera, se oyeron pasos hacercandose y guardaron silencio esperando a la victi… ¡Digo, culpable!

Al poco rato, la puerta trasera del comedor se abrió y una sombra entro lentamente mirando detenidamente todo el lugar. Cuando se aseguró que no había nadie, se apresuró en ir a donde los pasteles y tomo un par de ellos.

¡Click!

Pero al momento de hacerlo, se activo un mecanismo que lo atrapó de la patas traseras, lo alzo del piso, y lo hiciera girar como un trompo en el aire de cabeza para que luego chocara frente a un gran globo lleno de miel y una bolsa plumas colgantes… La trampa fue un éxito.


¡Fin del flashback!


"Tchss… y me lo perdí" Fue el pensamiento unísono de los cadetes, mientras que el capitán estaba rojo de la furia exigiendo un castigo para los niños por tal humillación hacia el.

"Bien, bien, calmémonos un poco… Por lo que dicen… La trampa era para el ladrón, eso quiere decir…" Shining dedujo volteando hacia su superior nervioso.

"Que el ladrón de pasteles, era el mismo quien inicialmente culpaba a los niños…" Termino Hearts la oración, mirando con decepción al capitán, el cual al verse descubierto intento cambiar la situación.

"¡Huh! ¡bien!, ¿Y si así fuera?, ¡Lo que hice no fue tan grave comparado con lo que ellos hicieron! ¡Hare un reporte de esto y exigiré una sanción para estos traviesos!" El capitán no daba su brazo a torcer, los niños bajaron la cabeza porque su intento por limpiar su nombre fue en vano, mas, Shining sonrió de forma suave.

"Estoy de acuerdo con usted capitán, hacer un reporte será lo mejor…" Los niños y Hearts miraron sorprendidos la respuesta del unicornio "Tendremos que poner claro en el reporte como el honorable capitán Ironblood fue víctima de una vil trampa…" De inmediato, Shining guiño el ojo al Pegaso el cual capto la idea de su amigo.

"¡Oh si, claro, claro!, el honorable capitán cuya fama es reconocida por anticipar y evitar emboscadas de criminales peligrosos en cumplimiento de su deber; termino cayendo miserablemente en la trampa de unos niños solo por robarse unos pasteles…" Añadió el pelirrojo sonriente, mientras el capitán se daba cuenta lo que los reclutas querían decirle comenzando a sudar.

"Será un escándalo en la corte y en los cuarteles de toda Equestria…" Agregó de brazos cruzados el unicornio.

"Se volvería el hazmerreír de las tropas… ya me imagino las bromas y comentarios que se formaran…" Imitando al unicornio, Hearts hizo la misma postura cerrando los ojos; Mientras el capitán hizo una cara como diciendo '¿Acaso me están chantajeando?', pero ambos reclutas hicieron la cara de '¿Acaso no es obvio?'

Mirándose acorralado, el Capitán con una sonrisa nerviosa hablo "Hehehe… ¿Saben chicos?, no fue para tanto… Además, fue muy gracioso, ¿No?... Niños no se preocupen, solo no lo vuelvan hacer, yo me retiro a mi oficina, y pueden quedarse con los pastelitos que quieran, yo se los regalo…" Apresurando el paso, Ironblood abandono el cuarto, mientras los cuatro suspiraban de alivio.

"¡Nos salvamos!" Gritaron de alegría los pequeños, solo que su festejo no duro ante las miradas severas de Shining y Hearts.

"¡Vengan acá!" Dijeron los cadetes sujetando a los niños, mientras el unicornio frotaba su casco en la nuca de ambos, el Pegaso les hacía cosquillas con sus alas, haciendo que los niños rían sin control.

Luego del 'castigo' que siempre le aplicaban a los traviesos; Hearts colocaba en un saco los pasteles de chocolate.

"¡Oh siiii! ¡Pastel gratis!" Con una sonrisa, Hearts acomodaba los postres para el, pero el unicornio movía la cabeza de forma negativa, y advirtiéndole que si los comía todos le dolerá el estomago, pero el Pegaso sonriendo amablemente respondo "No son para mí, son para ella... Y sabes que a ella le encantan los postres"

"Es cierto… Ella adora los pasteles de chocolate…" Comento Shining con una sonrisa comprensiva, más los niños se quedaron con la duda a quien se referían los dos cadetes.


Los días en que Twilight no iba a jugar, se pensarían que serían algo largos y aburridos para el príncipe, más el se las ingeniaba para divertirse jugándole bromas a todo el mundo como siempre lo hacía.

Los únicos que se salvaban de la olas de bromas eran la princesa por obviamente ser su madre, y tener todo el poder de castigarlo; y su guardián Shining Armor, aunque no por consideración a su amiga, sino porque el parecía tener un sexto sentido que le advirtiera en donde no debía estar y lograba burlar las trampas y bromas del inquieto príncipe, para frustración del niño y de su amigo Hearts que deseaba ver a su amigo caer en alguna trampa, mas parecía que el destino les negara esa alegría, pero aun así el pequeño travieso lograba meterlos a ambos en apuros.


Soundtrack: Naruto - Fooling Mode


Ambos reclutas regresaban de su rutina de entrenamiento, visiblemente cansados, pero no se esperaron encontrar Naruto de lo más tranquilo jugando con una pelota en la habitación de ellos.

De inmediato, como si fuera un escuadrón antibombas, los ponys comenzaron a revisar los rincones del cuarto con sumo cuidado, buscando algún cable, objeto fuera de su lugar o indicio de trampa en la zona.

Cuando vieron que el cuarto estaba limpio, dieron un respiro de alivio y saludaron al pequeño,preguntándole que deseaba.

"Venía a pasar el tiempo con ustedes, como no estaban los espere jugando con la pelota, pero esta se rodó debajo de la cama de Heartsword y encontré esto…" Mostrando un poster donde aparecía la princesa Celestia en una pose algo sugestiva, tendida sobre la arena a orillas del mar, 'Mi Dulce Celestia' titulaba el afiche (se oye un provocativo femenino Ou Yeee~).

El pobre Pegaso sudaba a mares ante el descubrimiento del príncipe "Hearts… ¿Porque tienes un poster de mi mami?" Pregunto el niño con un tono algo celoso y serio; mientras Shining hacia una mueca nerviosa por no tener una explicación para ayudar a su amigo.

"Ah… Ah… Yo…" Balbuceaba Hearts que miraba de un lado a otro de manera nerviosa tratando de explicarle eso al niño, deseando que la tierra se lo trague "Pues veras Naruto… tu… tu mama, la princesa celestia… Es muy popular por su belleza entre los corceles, ¿Sabes?" Se defendía pobremente el pelirrojo, mientras su amigo se daba una palmada en la frente y kurama dentro del niño hacia el mismo gesto ante la burda excusa que puso para algo como eso.

Naruto miro el poster por un momento nuevamente y sonrió después "Tienes razón Hearts, ¡Mi mami es muy linda!" En su inocencia (Porque hubo una época en donde tenía inocencia el creador del Sexy no jutsu), el príncipe creyó que el Pegaso se refería a que admiraban la belleza de su madre en el buen sentido de la palabra, al igual que se admira a alguna estrella de cine; devolviéndole el poster a Heartsword y prometiéndole darle otro con el autógrafo de la princesa, permitiendo al Pegaso respirar nuevamente.

"Te dije que te deshicieras de eso antes de mudarnos al pabellón…" Murmuro por lo bajo el unicornio a su avergonzado amigo, el cual asentía con la cabeza derrotado.

"y Shining… ¿Porque tienes este catálogo de yeguas usando tantos disfraces?" Mostro Naruto está vez una revista titulada 'Ponyboy: Especial De Cosplay' entre sus manos (se escucha otro ¡oh yeah!); haciendo que Shining se ponga rojo de la vergüenza y Hearts se ría por lo bajo "¿Piensas comprarle algún disfraz a Twilight para el día de Nightmares?; no te va servir esto, aquí solo usan trajes de mucamas, porristas, enfermeras o secretarias, y todos tienen tela muy corta y pegada al cuerpo; ella me comentó que le gustaría uno de StarSwirld… oye, ¿Porque hacen esas poses tan graciosas?" Comento el príncipe ojeando la revista de costado; mientras Shining lloraba de forma cómica en un rincón con una aura azulada encima de él, rogando al cielo que Candace, cuyo noviazgo solo Hearts y Celestia conocían, jamás se entere de esto.


Con el pasar del tiempo, la amistad entre ambos niños se hacía más fuerte, pero para Shining se volvía poco a poco en un asunto inquietante.

No era que le desagrade la idea que fuera su hermana la amiga del príncipe por más humano que el fuera, sino por el hecho que al igual que paso con él, la pequeña unicornio empezaría a formar una dependencia con Naruto, y al parecer el príncipe también empezaba a mostrar esos síntomas; Shining deseaba que ambos pudieran conocer mas niños de su edad, pues de esa forma al menos sería más fácil lo que se avecinaba… El ingreso de Twilight a la escuela.


Las tardes eran por lo general algo calurosas, y Shining acompañaba a Naruto a sus lecciones de canto que su madre solía darle, el príncipe deseaba poder cantar igual de bello que su madre y ponía tanto empeño así como lo hacía en sus entrenamientos con kurama, sobra decir que el mismo zorro estaba impresionado con la habilidad de canto del pequeño, aunque cuando lo escuchaba cantar, intentaba tener la mente ocupada en otros asuntos y no dormirse de largo otros cinco años seguidos como paso la última vez.

Cuando salieron de la lecciones, recibieron la visita del príncipe Blueblood en el jardín real; Si bien Naruto fue educado y formal como el príncipe que era, su guardián no podía evitar notar el gesto de desagrado que el pequeño le dirigía a la visita que tal vez era percibido por todo el mundo, salvo por el ególatra príncipe blueblood, quien se encontraba en su propio mundo de perfección, luego este se retiró de forma petulante del lugar.

Shining se acercó a Naruto y con preocupación le hablo "Naruto, ¿No crees que deberías tratar de ser más tolerante con el príncipe Blueblood?; es decir, el es tu primo, si lo intentas ambos podrían ser amigos y…"

"¡Nunca! ¡Blueblood es un cretino!" Fue la respuesta inmediata del príncipe.

"¡Naruto! ¡¿Quien te enseño esa palabra?! ¡No es bueno que hables así!" Regaño visiblemente consternado Shining, no era para nada bueno que existiera ese tipo de comentarios dentro del palacio, y al ver al niño con la cabeza agachada volvió a preguntar "Dime quien se expresó así para que lo copiaras, no me enojare, pero si deberé tener una seria conversación con ese pony..." Aplicando su faceta de hermano mayor, el unicornio intentaba persuadir al niño.

"Pero… Lo escuché de ti, Shining…" Mirándolo de forma sincera y simple respondió el niño, más el unicornio se sorprendió, y luego haciendo un poco de memoria, recordó la 1era vez que conoció al vanidoso príncipe, eso ocurrió en sus primeras semanas como guardián del niño, y vio como este trataba de forma despectiva a los sirvientes y guardias del castillo, como si ellos tuvieran que besar el piso por donde el camino, a diferencia de Naruto, Candace y Celestia, quienes siempre eran amables con el personal "Pero que cretino..." Susurro el unicornio al ver tal comportamiento, sin percatarse que Naruto lo escuchaba.

"Jeje, bueno... Que le vamos hacer, el pobre es un cretino…" Se excusó de forma nerviosa el unicornio para luego reírse junto al príncipe.

"Por cierto Shining, ¿Cuando volvemos a hacer la pijamada?" Pregunto el niño emocionado.

La noche pasada, todos los guardias y sirvientes masculinos del palacio se encerraron en un cuarto todo el día y la noche incluyendo al príncipe; aunque esto no era del todo nuevo para el, desde que recuerda, una vez al año todos se reúnen en una habitación para pasarlo con diversas actividades, más para extrañeza de Naruto y Kurama, no había ninguna yegua en el cuarto, solo corceles, y cuando pregunto por su mama en la pijamada ese día, Hearts le dijo que la princesa tenía su pijamada con las chicas en otro lugar de una forma muy nerviosa, que al parecer ignoro el pequeño.

"Esto… Naruto… Creo que una pijamada podríamos tenerla cualquier otro día… Pero como la de anoche… felizmente es una vez al año…" El pobre unicornio sudaba avergonzado y nervioso, sin saber cómo explicarle el motivo real de ese dia al inocente niño "¡Te lo explicare cuando seas más grande!" Se apresuró a responder.

"¡Oh! ¡Príncipe Naruto!" Llamo la atención del niño una voz, para alivio de Shining quien al parecer lo salvo la campana.

"¡Señor Pants!" Saludo el príncipe con una sonrisa al unicornio que se hacía presente de manera elegante y distinguida; era Fancy Pants, el único noble que salió en su defensa aquella tarde cuando su madre lo presento en esa reunión tan desastrosa.

Meses después de ese incidente, el unicornio se encontró de casualidad con el príncipe en el jardín quien paseaba por allí luego de colocarle a Discord una camisa Hawaiana, un sombrero de paja veraniego y lentes de sol negros. Si bien el príncipe lo recordaba y se sentía agradecido por el apoyo de ese día, aún tenía algo de miedo por relacionarse con ponys de la corte, más la educación y amabilidad del noble, poco a poco hicieron que el pequeño le gane confianza como para considerarlo alguien bueno.

"Buenas tardes su majestad, buenas tardes joven..." Saludo cortésmente el distinguido pony, y le solicito al pequeño príncipe una charla privada, claro, si no era molestia para su guardián; Shining no tuvo problema en dejarlos solos, conocía la fama y amabilidad de ese noble, y tomo una distancia prudencial para al menos no perderlos de vista

"¿Soy yo… O la cabeza de esta estatua esta torcida...?" Fue la idea que paso por la mente del joven guardián al percatarse de la prisión de Discord.

"Príncipe Naruto, sé que puede sonar algo pretencioso lo que le voy a pedir, pero, ¿Sería tan amable de acompañarme al salón de música?, quiero que conozca a alguien muy importante para mí…" Le pidió Rancho casi en tono de súplica y bajando la cabeza ante el niño.

"No tengo problemas en ir al salón de música señor; ¿Pero porque tan de repente ese pedido?; además, quedamos en que solo me llamaría Naruto..." Contesto el niño rubio con una leve sonrisa.

"Oh, que descuido, lo siento, es la costumbre... Ejem, vera su ma.. Naruto… ella es una pony algo especial… Solo podre decirle los detalles en un lugar más privado, espero que comprenda…" Contesto esperando una respuesta positiva por parte del príncipe, y para su alegría el pequeño acepto, indicandole a Shining que acompañaría al noble al castillo, por lo que ya no era necesario seguirlo.


Una vez dentro del castillo, al ir acercándose a la zona de música, se comenzaba a escuchar una suave melodía tocada por lo que parecía ser un violín.

El niño sigilosamente se acercó al salón de música, y abriendo levemente la puerta; vio una pony terrestre un par de años mayor que él, melena negra bien peinada y pelaje gris oscuro, acompañada de otra pony de la misma edad. Era una unicornio blanca con melena de color similar al señor Pants, aunque peinada de forma algo alocada.

La pony de tierra era la que interpretaba de forma tan esplendida aquella melodía con el violín, mientras su compañera tenía los ojos cerrados disfrutando la música y meciendo la cabeza.

"Ellas son mis hijas…" Fue el comentario que escucho el príncipe a espaldas suyas de parte de Fancy Pants.

El príncipe alzo la ceja algo extrañado, sabía bien que muchos ponys por lo general solo se casan entre los de su mismo tipo, y sin mencionar de la misma nobleza por eso de 'La Pureza De Sangre' como ellos lo llaman.

El príncipe quería saber la razón de traerlo hasta acá, y el unicornio comenzó a contarle con tristeza en sus palabras su historia.

Fancy Pants se casó muy joven, siguiendo la tradición de su familia de un largo linaje de unicornios con una dama de igual nobleza, de esa relación nació su hija Vinyl Scratsh, nombre algo gracioso teniendo en cuenta su clase social; mas para la madre de la pequeña unicornio quien la amaba, la música fuerte y estridente le parecía el adecuado para ella, felices los padres por heredar sus gustos por la música.

Por un tiempo fueron muy felices como toda una familia… pero… debido a un trágico accidente, Fancy enviudó dejándolo solo con su pequeña hija. Tratando de aliviar sus penas, se fue lejos de Canterlot a la ciudad de Manehatam, donde tiempo después conoció a una famosa intérprete de música clásica. Con el tiempo se enamoraron, y no le importó el hecho que ella fuera una pony terrestre, no fuera una noble, o incluso el hecho que ella fuera viuda también, ya que sentía que ella hacía curado la tristeza en su corazón, encontrando el amor nuevamente.

El tiempo pasó y tuviera una hija de la misma edad de Vinyl, llamada Octavia. Ese unicornio se enamoró profundamente de aquella mujer y la hija que tuvieron; se volvió a casar y adopto a la niña formalmente, pero sin el conocimiento de este hecho de su conservadora familia de nobles.

Mas parecía que el destino le jugaría una mala pasada nuevamente, su nueva esposa tenía la salud muy frágil, y luego de unos hermosos años juntos, no pudo ganarle a su enfermedad y volvió a enviudar, ahora con dos niñas pequeñas a su cargo.

Fancy creía que sí ambas se educaban en un ambiente familiar sería lo mejor para ellas y regreso a Canterlot, donde presento formalmente ante su familia a su nueva hija; y como era de esperarse, las quejas y reclamos de parte de su intransigente familia no se hicieron esperar, la pequeña Octavia que hacía poco perdió a su madre, se sentía destrozada ante ese rechazo y luego de un tiempo se volvió fría e indiferente, no reía, no lloraba, no se enojaba, solo se dedicaba a la música y únicamente hablaba muy poco con su hermanastra Vinyl y con su padrastro.

Cuando termino su relato, el príncipe sentía tanta pena por la vida de ese educado pony, pero aun no entendía el motivo de traerlo hasta acá y narrarle algo tan íntimo, entonces el unicornio se explicó.

"Majestad… Aquella tarde en que su madre lo presento ante la nobleza, para mi fue como si todo se repitiera, los comentarios de desaprobación, las burlas, las críticas... Todo lo que mi pequeña Octavia tuvo que pasar vino a mi mente, pero multiplicado por diez, por eso mismo fui en su defensa, pero fue tarde… Vi la misma mirada llena de dolor en sus ojos…" Narro el unicornio con tono triste "Pero luego de un tiempo, cuando nos volvimos a encontrar, esos ojos se habían ido, ahora eran unos ojos llenos de alegría los que habían en su lugar; usted mi príncipe, reía y jugaba como cualquier otro potrillo..." El unicornio usaba un tono de voz a punto de derrumbarse en lágrimas "¡Se lo suplico majestad…!" Fancy se puso de rodillas, y agacho la cabeza de la manera más sumisa posible "¡Por favor, príncipe Naruto! ¡Ayude a mi hija!, Ya son 2 años que solo veo en su rostro esa indiferencia y frialdad... ¡Estoy desesperado y no sé qué más pueda hacer…!" Termino su pedido llorando aquel noble delante del niño.

Naruto se sentía totalmente abrumado, aquel pony le suplicaba que ayudara a su hija y no tenía idea alguna de cómo hacerlo, así que intento pedirle ayuda a Kurama "Lo siento Naruto, no existe misión ninja en el mundo que pueda ayudarte esta vez… pero si deseas un consejo, solo te puedo decir que recuerdes y compares aquella situación que tu viviste, con la situación de ella; recuerda el cómo te sentías aquella vez, y recuerda el cómo y por qué te sientes así ahora…" De manera seria respondió el zorro al niño.

Naruto cerró los ojos un momento evaluando las cosas como se lo aconsejo su amigo y finalmente sonrió de forma leve, creo que habia encontrando la respuesta.

Naruto se acercó al preocupado padre "Señor Pants, creo saber cómo ayudarla, pero tengo dos condiciones… Una es que no revele mi título ante ellas, y la otra… ¡Deje de llamarme príncipe o majestad! ¡Me siento raro!" Con una sonrisa, el príncipe estiro su mano hacia el unicornio que aún se postraba delante de él para ayudarlo a levantarse "Por favor deje de hacer eso… no es nesesario…" El unicornio alzo la cabeza y miro al niño sonriéndole de forma confiada, vio la esperanza de arreglar las cosas y se puso de pie.

Acto seguido como haciendo una travesura, el niño se metió sigilosamente en el cuarto, espiando a las dos ponys con una sonrisa traviesa en un rincón. Comenzó a taradear una linda melodía, lo suficientemente fuerte como para que Octavia parara su música y prestara atención al tarareo; Ambas niñas comenzaron a mirar alrededor suyo, buscando quien era el responsable de esa hermosa tonada, pero después de unos segundos, ellas cerraron los ojos disfrutando ese dulce sonido.

Cuando el príncipe vio que ambas prestaban atención, comenzó a cantar aquella canción que desde que era un bebe, su madre le entonaba de forma tan hermosa.


OST: Final Fantasy - Melodys Of Live


Cuando el niño acabo con la canción, ambas ponys aplaudían, Vinyl lo hacía muy entusiasmada, mientras que Octavia lo hacía de forma más pausada y aun mostrando su rostro frio.

"¡Me alegro que les gustara!" Respondió Naruto ante los aplausos saliendo de su escondite con una gran sonrisa, y como era de esperarse, los aplausos pararon enseguida y cambiaron por un pequeño grito de asombro, pues tanto Vinyl como Octavia tenían la mandíbula hasta el piso ante esa criatura tan rara.

"¿Quien… o que eres?" Pregunto la aun sorprendida Vynil colocándose de forma protectora delante la Octavia, mientras el príncipe sonreía al ver como la unicornio quería proteger a su hermana.

"Me llamo Naruto, lamento interrumpir su concierto privado, pero esa melodía fue tan bonita que me provoco cantar... ¡Felicidades! ¡Tocas muy lindo!" Respondió el rubio mirando a la pelinegra de forma amable, mas está bajo la mirada, y con una expresión seria, volvió a practicar con el violín ignorando por completo al niño, mientras Naruto se le formaba una gota de sudor gigante "Me siento ignorando… Debo admitir que se siente raro" Pensó el pequeño Príncipe estando acostumbrado de llamar la atención de cualquier cosa que hacía.

"¡Hey!, yo me llamo Vinyl Scrtash; gusto en conocerte amigo... ¡Chócala!" saludo la unicornio de pelo alborotado chocando sus casco con el puño del niño de manera amistosa; para sorpresa del príncipe que esta unicornio tan despreocupada, aunque amigable, sea hija de un pony tan formal como el señor Pants "Y la callada de allá se llama Octavia; ¡Vamos Octi, saluda!" Señalo vinyl a la pony seria.

En vista que la unicornio no la iba dejar tranquila, Octavia cedió un poco "Buenas tardes, me llamo Octavia... Ahora, si fueras tan amable, ¿Podrías retirarte?, interrumpes mi practica…" Respondió de forma seca, pero formal, la pony terrestre volviendo a lo suyo.

"¡Octy! ¡No es manera de tratar a los demás!, y según recuerdo, ¡Tu aplaudiste también por su canción!" Reprendió consternada la unicornio por la actitud de su hermana "Por cierto amigo, linda canción..." Menciono esto último con una sonrisa.

"Bueno, lamento si las interrumpo, ya es algo tarde, y mi mama se debe estar preocupando…" Menciono de forma despreocupada y con intenciones de irse.

"¿Acaso hay más como tú…?" Para sorpresa del niño, y vinyl, fue Octavia la que pregunto con curiosidad olvidando por un momento el violín.

"No, mi mami es una pony, ¡La más linda de todas!" Contesto con una gran sonrisa el niño, sorprendiendo a las niñas, mientras tras la puerta Fancy pants, espiaba la conversación "bueno, es obvio que soy adoptado, pero desde que tengo memoria, ella me cuido y me dio su amor... Ella es mi familia y para ella yo soy su hijo, genial, ¿No?" Hablo en tono de alegría el pequeño, mientras Vinyl sonreía de manera comprensiva, pero Octavia apretaba con fuerza su violín.

"¿Pero cómo es posible que tú digas eso…? ¡¿Acaso no te das cuenta lo diferente que eres a nosotros?!" Exclamo Octavia casi en desesperación.

Naruto puso una cara melancólica "Eso es verdad, no me parezco en nada a un pony... No tengo cuernos, no camino en cuatro patas, no tengo alas, pelaje que cubra mi cuerpo, o una cola o cascos para parecerme en algo a uno... Esas fueron algunas de las críticas que recibí cuando ella me presento a un grupo de conocidos suyos…" Menciono el pequeño recordando ese triste día, mientras la pequeña pony de melena oscura apretaba más duro su instrumento, recordando la crueles críticas que le dieron su nueva familia cuando el señor Pants la presento.

"Y a pesar de eso… ¿Por qué sonríes como si nada pasara? ¿Acaso no te dolieron sus palabras?" Musito en tono apagado Octavia, mientras que su hermana, estaba sorprendida, Octavia apenas habla con ella o con su papa, pero este chico hacía que ella se abriera, y volteo a ver al niño esperando también su respuesta.

"Claro que me dolieron… es imposible que a alguien no le doliera todo eso, pero…" Naruto cerró los ojos, colocando su mano en el pecho "Para esa pony... No le importaba que yo no fuera de su especie, no le importaba ninguno de esos detalles... ¡Ella me amaba, así como yo la amo a ella!" Respondió el niño sonriendo con los ojos cerrados para luego abrirlos y mirar directamente a Octavia, cuya expresión fría había sido cambiada por una de asombro "Por eso no me siento solo, y ella no es la única que me quiere; tengo una prima que me quiere mucho; dos buenos amigos míos algo mayores que yo, pero que siempre me hacen sonreír; tengo una gran y querida amiga mía con la que compartos lindos recuerdos y tengo la amistad del más asombroso zorro de toda Equestria…" El niño dio una sonrisa zorruna, y las ponys presentes estaban maravilladas por sus palabras, aunque se confundieron un poco por la última declaración, al fín y acabo, ¿Qué tiene de especial un zorro? "Esa canción de antes me la enseño mi mama, ella siempre me la cantaba desde que era un bebe, y si creen que yo canto bien, deberían oírla cuando ella la entona... Es preciosa…" Finalizo el pequeño, dispuesto a salir de la habitación.

"Lo dices con tanta facilidad… Como si fuera algo sencillo…" Octavia bajo la mirada derrotada y avergonzada de sí misma sin superar todo eso del pasado.

"No es sencillo, ni es fácil, pero si algo me enseño uno de mis amigos, es que jamás debo rendirme por más difícil que sea cualquier cosa, ¡Siempre debo intentarlo!, además, Octy… Nadie nació para estar solo, ¡eso te lo aseguro, dattebayo!" Declaro el niño con una leve sonrisa, abandonando el salón de música sin más.

"¡Oye amigo, espera!" Escucho naruto la voz de la pequeña unicornio detrás de él, la niña había salido del salón también y lo miro fijo "Lamento mucho la rudeza de mi hermana, ella no solía ser así… Espero que no te lleves una mala impresión de nosotras" Se disculpó.

"No te preocupes Vinyl, la verdad fue culpa mía por interrumpirla..." Luego, naruto se percató de la presencia del unicornio mayor mirandolos, mientras Vinyl se sorprendía de encontrar a su padre allí "Lo lamento señor Pants, no pude ayudar mucho…" Se disculpó el niño pensando que sus palabras no aportaron mucho; pero Fancy movió la cabeza de forma negativa.

"Al contrario, alte.. Naruto... Este día mi hija hablo más de lo que ella lo ha hecho en los últimos meses…" El noble con una sonrisa agradecía la intervención del príncipe.

Dentro del salón la pequeña potra recordaba las palabras de Naruto, ella era una pony como lo eran los miembros de su nueva familia, y fue víctima de duras críticas por no ser de un linaje nobles… Pero ese pequeño del cual no tenía idea alguna que clase de criatura era, recibió un rechazo mayor y ofensivo; pero allí esta,sonriendo y siendo feliz porque el recuerda que a pesar de todo ello, el tiene a alguien que lo ama… Al igual que ella…

Agarro su violín, y comenzó a recordar varias cosas mientras tocaba una melodía nueva, una melodía que acaba de aprender hace poco y pensó que expresaba el desorden emocional que comenzaba a sentir en su interior.

Fuera del salón, los dos ponys y el pequeño humano escucharon una melodía, una melodía nueva para los unicornios, pero para el niño le fue fácil de reconocer, era la canción que hacía poco les habían cantado.

Cuando Vinyl abrió levemente la puerta, su gesto fue de sorpresa "¡Papa! ¡Papa!, es Octy… ¡Octy está llorando!" Llamo la atención a los presentes, los cuales apresuradamente se asomaron a la puerta.

Octavia lloraba en silencio mientras tocaba el violín y recordaba a su madre la cual le inculco el gusto por la música clásica y le enseño el uso de varios instrumentos, la pérdida de su padre ,los momentos difíciles de ellas dos juntas, eran felices al tenerse mutuamente. Luego el noviazgo con Fancy pants y el conocer a su nueva hermana Vinyl quienes la acogieron con cariño, luego la muerte de su madre y el apoyo que recibió por parte de esos dos unicornios que jamás la dejaron sola, ellos la aceptaron como su familia 'nadie nació para estar solo' fueron las palabras que resonaban en su mente; ese niño tenía razón, ella no estaba sola; tal vez el resto de su nueva familia no la acepte, pero ella tenía un padre y una hermana quienes no dejaron de preocuparse por ella ni un minuto de su vida.

Cuando alzo la vista, ella vio a los dos unicornios, llorando en la puerta, mirándola con preocupación, su indiferencia no pudo ganar esta vez y aquella mascara fría cayo, revelando una triste expresión de lágrimas hacia sus familiares "Papa… hermanita… Yo... Lo siento.. No quería preocuparlos tanto… ¡Yo los amo mucho!" Dejando caer su costoso violín, la pony coloco sus cascos sobre su rostro sollozante, mientras los unicornios corrieron a abrazarla fuerte, dándole a entender que la aman y que era muy importante para ellos.

El príncipe con una sonrisa y una pequeña lágrima escapándose, miraba la escena, dando media vuelta para abandonar el salón nuevamente "Naruto espera, por favor…" Fue el pedido de la pelinegra "¿Podrías… volver a visitarnos?, me gusta como cantas…" Con un tono amable, la pony gris dio una pequeña pero sincera sonrisa al príncipe.

"Claro que sí, me encantaría siempre y cuando toques tu bella música con una bonita sonrisa..." Respondió el niño sonriendo de forma animada, mientras se retiraba del salón.

"Papa… ¿Quien es el?" Pregunto Vinyl esperando saber más de aquel misterioso niño.

"Él es… Un buen amigo" Fue la respuesta que dio con una sonrisa; para ese unicornio, aquel pequeño humano era más especial de lo que se esperaba; era como si el tuviera mucho amor en su interior para dar, eso pudo deducir tras oír al príncipe, al cual agradecía infinitamente su ayuda "Chicas, ¿Que les parece si el fin de semana salimos de paseo y de paso visitamos a sus madres?" Propuso el unicornio, teniendo como respuesta una sonrisa con un fuerte abrazo por parte de sus dos hijas.

"Lo que acabas de hacer fue muy lindo Naruto…" Comento Shining con una sonrisa suave delante del niño. Después que este se alejara del salón de música; al parecer como buen guardián, espió al príncipe en caso que ocurra alguna emergencia.

"¿No que espiar es de mala educación Shining?" Pregunto con una sonrisa traviesa Naruto.

"Espiarte y cuidar que no te metas en líos es mi trabajo, su alteza" Contesto con total descaro el unicornio, para reírse ambos mientras lo escoltaba para que el niño valla a cenar.

"Tu amigo tiene razón…" Comento el zorro desde el interior de Naruto "Pero creo que es lógico que actuaras así, sobretodo sabiendo como eran ellos; supongo que ese par hubiera dado un discurso similar…" Por un momento, Kurama recordó a los padres de Naruto.

"¿A quienes te refieres, Kurama?" Pregunto intrigado el niño en su mente.

"Nada, solo recordé a un par de idiotas que siempre sabían decir frases geniales y empalagosas, tal vez te cuentes de ellos algún día…" Respondió el zorro con una leve sonrisa, mientras el niño con su guardián llegaban a las habitaciones.

Aquella noche, Naruto le conto a su mama lo ocurrido con el señor Pants; Celestia se sentía muy orgullosa de su hijo, y feliz de saber que él la ame tanto; a partir de ese entonces, el visitar el salón de música se volvió una actividad recurrente para el niño, pero para su mala suerte, los días de visitas de su amiga Twilight no coincidían con las visitas de sus dos nuevas amigas, las cuales eran poco frecuentes. Él quería que Twilight las conozca y poder jugar los cuatro juntos, pero la pequeña peli morada se sentía algo ansiosa y nerviosa por ello.


Finalmente el temido día de Shining llegó, y twilight tuvo que asistir a la escuela especial de magia y artes.

Para el príncipe esto fue un duro golpe, pues ya no solo podía jugar tan seguido a la banda musical que creo con Octavia y vinyl, sino que Twilight también por el mismo motivo, sus visitas se hicieron muy pocas y más breves, pues como era de esperarse, ella al ser una pony tan responsable quería destacar en los estudios, dando poco tiempo libre a los juegos.

"¿Porque todo el mundo tiene que irse a esas escuelas y dejarme solo?, primero mi prima Candace y ahora mis amigas… y yo sin poder acompañarlas, siempre solo y recluido en este palacio…" Eran los pensamientos de molestia del príncipe.

El zorro al ver el malestar del muchacho, decidió darle una nueva tarea para ver si con eso lograba distraer su mente; dicha tarea consistía en practicar los Jutsus; lastimosamente para sorpresa de kurama, ningún jutsu le salía bien, todos desde el más básico como el Bunshin No Jutsu por más empeño que el muchacho ponía, siempre fracasaban. Kurama conocía que el fuerte flujo de chakra del niño podría ser una causa, pero con tanto entrenamiento esa dificultad ya debería estar superada, a Kurama no le quedó otra más que deducir que el niño tenía un conflicto emocional muy fuerte debido a la perdida de sus amigas.

"Mocoso, si tanto te preocupa el cómo están ellas, ¿Porque no vas a la escuela también?" Comento kurama, mientras Naruto intentaba realizar por vigésima vez en el día el Bushin No Jutsu sin éxito, solo salían unos monigotes con cara chistosas cuando lo intentaba antes de desaparecer.

"Si claro kurama, voy a la escuela, me presento ante todos, y en lugar de ser un estudiante, seguro terminan estudiándome…" Comento cínicamente el niño al ser consiente de su condición de criatura mítica.

"¡Idiota! ¡¿Olvidas que eres un ninja?!, si eres capaz de burlar la seguridad de un castillo y un cuartel de guardias... ¡Entrar sin ser visto a una escuela infantil debería ser pan comido!" Respondió kurama enojado; luego respiro hondo y continuo "Como sea, ¿que es lo que te tiene tan enojado?" Pregunto el zorro tratando de averiguar más sobre la posible causa en las fallas de Naruto.

"No estoy enojado… solo me siento como un prisionero…" Naruto se sinceró con el zorro "No quería decirle nada a mama, pero la verdad desde hace mucho tiempo no conozco otros lugares salvo los terrenos del castillo, no puedo acompañar a mama alguna de sus visitas; no puedo ir a lugares públicos, solo me quedo esperando a que todos vengan a verme… me gustaría alguna vez saber cómo es una escuela…" El niño hablo en tono triste.

El zorro evaluó las palabras del muchacho, en parte comprendía la frustración del niño por no poder salir más allá de los muros del castillo, mas también era consciente de las razones por la que su madre lo tenía recluido; pero luego evaluó esto desde otra perspectiva, el niño necesita desarrollarse más como ninja y explorar otros lugares; su cuerpo se acostumbró a la rutina de los ejercicios en el castillo, necesitaba nuevos retos, no quería que su progreso se estancara "Mocoso... mañana iremos a esa famosa escuela, será como un examen especial, escapar del castillo e infiltrarse en el colegio..." Sentencio el zorro.

"¡Genial! ¡Mañana iré a la escuela!" Exclamó Naruto emocionado "Esto… ¿Sabes dónde queda la escuela?" Pregunto sonriendo de manera nerviosa rascándose la nuca.

Kurama, puso un leve gesto de molestia, había pasado por alto ese detalle "Bien, necesitaremos un cómplice lo suficientemente torpe como que nos ayude… y creo saber quien puede ayudarnos..." Comento kurama con una sonrisa macabra.


El cómplice resulto ser Heartsword, qué de inmediato se negó rotundamente ante el pedido del príncipe de ayudarlo a escaparse del castillo e ir al colegio.

"Los potrillos ruegan por quedarse en casa, ¡No por ir a la escuela!" Fue una de sus tantas negativas, recién cambio de opinión cuando vio el rostro de pena del muchacho, el cual encima usaba sus ojos de cachorro lastimero en su contra "Sabes pekke, tendré problemas por esto... Peeeeero los tendré aún más si es que te escapas por tu cuenta…" Finalizo Hearts con una sonrisa de resignación.


Al día siguiente, aprovechando una visita real de la princesa a un lugar llamado Ponyville, Naruto dejo un monigote hecho de trapo de el en su habitación donde se suponía que debería pasar toda la mañana leyendo.

Tras lograr burla la seguridad del castillo (Con música de misión imposible incluida), Heartsword lo esperaba detrás de los muros que rodeaban el jardín "¡Deprisa! ¡Vámonos! ¡Solo tenemos unas horas antes que Shining regrese de su guardia!" Comento visiblemente nervioso el Pegaso; y con dificultad el niño se subió al lomo del Pegaso, el cual tuvo que volar con mucho cuidado, pues Naruto parecía que en cualquier momento se iba a caer entre el constante viento.


Luego de un tiempo, y varios tirones de cabellos en la melena del Pegaso que dio el príncipe para sujetarse, llegaron a la escuela de Twilight.

Naruto se sentía emocionado, por 1era vez iría a una escuela, más el zorro le hizo recordar que solo estaría de observador; el niño acepto y le indico al Pegaso que lo espere cerca.

Una vez adentro, usando todos sus trucos ninjas de infiltración, observo a varios ponys de diversos tipos y de diferentes edades con una sonrisa, miro a esos potrillos conversar, jugar y relacionarse entre sí... Por un momento se imagino a él en ese lugar.

Decidió dar un vistazo por los salones y pudo dar con Vinyl y Octavia, las cuales hablaban en privado en una aula abandonada, aprovechando esa facilidad, se mostró antes las ponys las cuales sonrieron contentas de verlo allí.

Luego de charlar un poco con sus amigas, él les pregunto si ya habían podido conocer a Twilight, ambas chicas pusieron una cara de leve malestar; al parecer ambas intentaron acercársele y ser sus amigas, más la unicornio peli morada, con un gesto tímido, rechazaba sus invitaciones para charlar o jugar.

El príncipe no creía que Twilight fuera así en un lugar lleno de niños de su edad, el creía que con lo genial que su amiga es ella sería muy popular, pero al parecer la realidad era otra. Antes de despedirse de sus amigas, Octavia y vinyl le informaron que mañana irían al salón de música para jugar.

Luego de abandonar el salón, busco a la unicornio peli morada y comprobó por sí mismo la verdad en un salón donde los niños hablaban de forma amena, la única indiferente era Twilight quien leía un libro apartada del resto. Naruto se percató que algunos potrillos amablemente la invitaban a que se una a la conversación, mas ella se negaba de forma tímida como le habían dicho antes.

A continuación, vino un grupo de potras algo mayores lideradas por una unicornio de pelaje dorado y melena bicolor amarillo/rojo como el fuego, el príncipe miro mejor a esta última pony, pues le parecía familiar de alguna parte, pero estas potras, quienes a la opinión del zorro más le parecían una manada de lobos buscando carne, con molestia el rubio escucho como se burlaban de su amiga por ser tan recluida, y los demás lejos de ayudar, se unían a la burla, mientras que Twilight estaba al borde de las lágrimas.

Naruto se enfureció, pero fue calmado por Kurama para evitar que haga alguna tontería, así que buscando como impartir justicia y escarmentar a las abusivas, miro el salón de biología abierto en donde claramente se podía ver un esqueleto de pony en exhibición; Con una sonrisa maliciosa y mucho ingenio, robo el esqueleto, algo de pintura, hilos, un trapo y se armó un curioso disfraz.

Cuando las potras se retiraban felices de humillar a la unicornio, fueron abordadas desde el techo por una horrenda criatura que caminaba en dos patas y tenía dos cabezas, una era de un mono sin pelo con bigotes en la cara y otra el cráneo de un pony el cual con pintura parecía que sangraba por la boca; enormes enormes garras de hueso y varios trapos manchados con rojo colgados por hilos en todo su cuerpo; Kurama deseando aportar, hablo a través de Naruto con el tono más macabro posible.

"¡Huyan por sus miserables vidas, mortales! ¡Antes que me devore sus pútridas almas! ¡Huhahahahahaha!" Con puro terror en las niñas, corrieron de la criatura tropezando con un cable, el cual dejo caer pintura encima de sus cabezas, pero nos les importo, solo querían huir de esa horrible imagen destras de ellas, los demás niños que vieron asustados aquella criatura, salieron disparados del salón, dejando a la pequeña unicornio cerrando los ojos de miedo y usando su libro como escudo, cuando de pronto oyó al monstruo reírse nuevamente, solo que esta risa ella la conocía muy bien.

"¡¿Naruto?!" Grito ella sorprendida abriendo los ojos y reconocer fácilmente los pelos rubios de una de las cabezas, así que tiro el libro y corrió a abrazar a su amigo con fuerza, mencionando su nombre con alegría y ocultar su rostro en el pecho del niño.

El príncipe se sonrojo un poco por el accionar de su amiga, y correspondió el abrazo; pero luego Twilight alzo la mirada y el noto el ceño fruncido en el rostro de la niña, si en algo se parecía Twilight a su hermano mayor, es que es buena regañando a los demás.

"Naruto, ¿No se supone que deberías estar estudiando? ¿Porque estas aquí? ¡No deberías escaparte de tus lecciones solo para jugar!" Twilight algo enojada le regalaba al príncipe, puesto que él le mintió diciéndole que asistía a otra escuela, pero a pesar de ello, la niña no soltaba a su amigo.

"Lamento venir sin avisar, es solo que… Te extrañaba, dattebayo…" Respondió Naruto mirando al otro lado, mientras la unicornio se sonrojo mucho por esa declaración "Twilight… ¿Porque no tienes amigos en la escuela?" Pregunto en tono preocupado el niño, la potra desvió la mirada.

"Eso es algo difícil de explicar, por favor Naruto, no me lo preguntes más…" Suplico la niña, y en vista que ella no iba a tocar más del tema, a regadientes acepto.

Luego de ello, la unicornio le indico que escapara lo más rápido posible, pues en cualquier momento algún profesor vendrá a ver lo ocurrido; ella le prometió que se verían el fin de semana, y además, le aconsejo que devolviera a su lugar el cráneo del laboratorio para frustración del niño, pues creía que encontró el disfraz ideal para la noche de Nightmares.


Mientras tanto, en el castillo de Canterlot…

"Entonces, ¿El príncipe como esta?" Pregunto unos de los guardias de ronda al pony que custodiaba la alcoba real. Este abrió la puerta y vio al monigote con la cabeza caída entre los libros

"¡Durmiendo durante su lectura como siempre, señor!" Contesto en tono marcial el guardia.


Al regresar el cráneo de pony en su lugar, Naruto giro la mirada y se topó con una pequeña unicornio de pelaje turquesa y crin de un tono más claro, la cual con sorpresa y admiración lo miraba de todos los ángulos posibles. Cuando esta le pregunto que criatura es, Naruto decidió decirle que es un humano, al fin y acabo, no le importaba si le creía o no.

Pero para su sorpresa, la chica se aproximó a mirarlo más de cerca con una sonrisa que fue creciendo algo inquietante.

Mientras el príncipe se intimidaba por la repentina invasión de su espacio personal, este fue retrocediendo lentamente cuando está estaba hacercandose más a él "Caminan en dos patas... No tienen pelaje salvo la cabeza… ¡Y tienen manos con cinco dedos! ¡Existen! ¡LOS HUMANOS EN VERDAD EXISTEN!" Gritaba emocionada la pequeña pony mientras examinaba detalladamente al niño como si fuera un nuevo juguete.

"Esto… ¡Lo siento pero me tengo que ir, Dattebayo!" Asustado de lo que sea que acaba de pasar, el pequeño corrió lo más rápido que pudo, mientras la pony lo perseguía implacable. Finalmente logró burlarla y llego a su punto de encuentro con Heartsword "¡Esa unicornio está loca!" Exclamo aliviado cuando se encontró con su amigo el Pegaso.

"¿Se puede saber en que lío te has metido esta vez, pekke?" Pregunto el pelirrojo cuando finalmente el niño se presentó "Espero que no hallas tenido algo que ver con esas pobres niñas que lloraban asustadas y bañadas en pintura…" Menciono en tono de sospecha sobre las víctimas, aunque le parecía que a una de ellas ya la había visto antes en el castillo. El niño le explico lo sucedió a su guardián y este le sugirió que la próxima vez que pase eso, mescle pegamento con la pintura, de esa forma permanece más su duración.


Cuando finalmente llegaron al palacio, y tras ocultar al monigote; Naruto le pregunto a Heartsword si sabía la razón por la cual Twilight es tan cerrada con los demás en la escuela. El Pegaso puso una expresión algo seria, y le contó a Naruto que ella es siempre así, que nunca fue muy sociable, pues al parecer le da miedo hacer nuevos amigos; es más, le sorprendió que ella lo aceptara como su amigo.

Naruto sentía pena por Twilight, ella era genial y divertida, no entendía el por qué no se daba una oportunidad así misma para conseguir mas amistades "Hearts, ¿Tú crees que pueda ayudar de alguna manera a Twilight?, no quiero verla así…" Pregunto en tono triste el príncipe, mientras el Pegaso se colocaba uno de sus cascos en el mentón.

"La verdad no tengo idea de como ayudarte pekke, tal vez si lo consultas con otro amigo, al menos más inteligente que yo, tal vez puedas…"

"¡ESO ES HEARTS!" Exclamo el niño interrumpiendo del susto al Pegaso "¡Tengo que buscar más amigos!" Declaro emocionado, mientras el pelirrojo lo miraba con la ceja alzada claramente confundido "Tendré más amigos… ¡Muchos amigos!; así ellos luego podrán ser amigos de Twilight, ¡Así al menos uno de ellos podrá hacer amistad con ella! ¡Es perfecto!" Naruto miraba con determinación al cadete, mientras este le deba una sonrisa amable.

"Ya veo, buscaras amigos entre los hijos de los nobles, supongo que el plan podría funcionar" Comento el pelirrojo, más el niño movía su cabeza de forma negativa.

"No pueden ser nobles, la mayoría son muy hipócritas, están también los niños de la escuela… Pero sería arriesgarme a que me descubran en ella, tienen que ser otros ponys... ¡Ponys de otros lugares!" El niño estaba decido a encontrar los amigos ideales para la pequeña unicornio, kurama vio en eso la oportunidad de mejorar el entrenamiento del príncipe, pero el Pegaso movió la cabeza de forma negativa.

"Lo siento su alteza, pero si crees que te apoyare esta vez, dejame decirte que estas muy equivocado; ¡Casi me dejas calvo de tanto jalarme la melena!, sin contar las veces que casi te caes de mi lomo... Hasta que no encontremos una forma que viajes seguro, ¡No habrá más excursiones fuera del castillo!" Con un tono firme, pocas veces visto en el Pegaso, Heartsword sentencio al niño y salió de la alcoba.

Naruto estaba aún perplejo por la respuesta de Hearts, pero le tuvo que dar la razón en ello; luego de eso pregunto al zorro "Por cierto kurama, ¿Encerio puedes devorar el almas de los demás?" Con total ingenuidad consulto por su actuación en la escuela.

"¡Claro que no mocoso! ¡Eso solo fue parte del teatro!" Contesto enojado el zorro, pero Naruto soltó un 'Awwww' de desilusión "¡¿A que vino eso?! Pregunto Molesta.


Al día siguiente, Naruto aun con la idea de buscar más amigos para twiligh, decidió ir a buscar a Vinyl y Octavia al salón de música con la esperanza de que lo mejor a ellas se les ocurría alguna idea, pero para su sorpresa fue a Fancy pants a quien encontró, el cual con una sonrisa tenía un regalo especial para el príncipe.

"Oh, prin… Naruto... Lamentó informarle que debido a unos exámenes, mis hijas no podrán venir hoy, pero aun así quisiera darle algo por su ayuda con mi octavia, por favor acéptelo…" El formal unicornio con su magia acerco un paquete envuelto en sabanas para el niño, cuando Naruto descubrió el regalo y miro con asombro el contenido, pues no tenía idea alguna de que podría ser.

"Veras Naruto, soy un pony que le gusta viajar mucho, y entre mis viajes, desarrolle un gusto especial por la arqueología, esta cosa la cual no tengo idea alguna que es, la descubrí en uno de mis viajes, y según se cree, los humanos lo solían usar…" Se explicó el unicornio, mientras el niño examinaba tal aparato, lastimosamente sabia tanto de su raza así como sabia el unicornio, pero no contaron con el conocimiento de un zorro.

"¡Mocoso! ¡Te sacaste la lotería! ¡Eso es una silla de montar con riendas!" Kurama no creía su suerte.

"¿Una silla de montar?" Pregunto el niño en voz alta, palabras que el unicornio también sorprendido repitió la frase tratando de buscarle el sentido exacto a eso.

Acto seguido, siguiendo las indicaciones de kurama, el niño coloco la silla encima del lomo del unicornio y las riendas en su rostro; para después subirse encima y sujetar las riendas con total normalidad. El príncipe creía que con todo esto el noble se enojaría, pero para su sorpresa, el unicornio no paraba de sonreír.

"¡Oh, ahora lo entiendo! ¡ahora lo entiendo!... Los humanos usaban esto para movilizarse en animales más rápido y fuertes que ellos como… como…" Intentaba el noble nombrar a alguna criatura.

"¡Caballos!" Dijo kurama, palabra que repitió Naruto y el noble sintió que el secreto de la vida le fuera revelada.

"Ooooh… caballos, ¡Nuestros antepasados cavernarios!, eso significa que el hombre no solo fue real... ¡Sino que él y el caballo convivieron juntos! ¡Que gran descubrimiento! ¡Gracias príncipe Naruto! ¡Sabía que usted podría con este enigma!" El noble se despidió apresuradamente, al parecer el tema de los humanos lo tenía fascinado.

"Oiga señor, ¿Está de acuerdo en que me quede con esto? ¿Seguro que no lo quiere?" Pregunto el niño al ver al unicornio dejarle el paquete, pero este le contesto que tiene otro similar en su casa, ahora tiene mucho que escribir.

Aquel mismo día, más tarde el noble recibió la visita de su querida sobrina Lyra, quien era la misma pony loca que persiguió al príncipe en la escuela.

"¡Tío Pants! ¡Por favor cuénteme todo lo que sepas sobre los humanos!" Exclamó la niña en tono de súplica, mientras el unicornio adulto sonreía al ver a otro familiar suyo aficionarse con el tema de los humanos.


Ahora con la silla de montar, Heartsword no tenía forma como negarse, y tras explicarle cómo colocarse encima tal extraño objeto, no le quedó otra que aceptar ayudar al príncipe, aun así, la idea que hacer todo esto a escondidas de la princesa Celestia le carcomía la conciencia, así que decidió revelar la verdad a la madre del niño a expensas de él.

Tras escuchar la historia, Celestia se enojó un poco por el escape de su pequeño, pero luego no pudo evitar sonreír por su buen corazón "Ya veo… El desea hacer más amigos, así sea lejos del palacio para ayudar a Twilight..." La princesa miro al Pegaso y le encomendó mucho el cuidado de su hijo.

Heartsword no creía lo que oía, pero al menos se sentía más calmado y feliz que la princesa le confié la seguridad del príncipe "Oh, y Heartsword, no reveles esta conversación a Naruto, al parecer le emociona mucho la idea de fugarse..." Comento sonriendo traviesamente ante la ocurrencia de su hijo, mientras el pelirrojo le formaba una gota de sudor por el accionar de la princesa, y antes de salir, la princesa le entrego un gran pedazo de papel enrollado.

"Y por cierto… Toma esto como un premio por las molestias…" Le indicó con una sonrisa la princesa.

El guardian desenrrollo el papel, viendo que era otro poster de la Princesa en la playa, pero mostrando una pose aún más reveladora que la que el tenia, autografiado y con dedicatoria hacía el mismo.

Hearts tenía los ojos como platos sin poder ocultar su sonrojo de vergüenza, y miro a la princesa la cual no paraba de reírse del pobre cadete "Naruto me contó algunas cosas, han pasado años desde que hice esa sesión de fotos, pero me halaga saber que aún hay muchos me admiran así…" Comento la monarca, mientras el pobre Pegaso avergonzado salía del cuarto con humo saliendole por las orejas.


La búsqueda de Naruto empezó, debían ser sigilosos, por lo que ir a pueblos o ciudades estaba totalmente descartado, así que empezaron a buscar posibles candidatos en los alrededores, pero no había mucho por donde escoger.

El Pegaso cansado de volar toda la mañana, le informo que harían una parada en un valle cerca de Cloudsdale; el niño también estaba aburrido de montar, al parecer la búsqueda de amigos no sería tan fácil como él creía.

Dejo al Pegaso durmiendo un rato para que se recupere, mientras el salía a caminar un poco para estirar las piernas.

¡PFFFF!

No pudo dar ni dos pasos cuando algo, o mejor dicho alguien, se había estrellado contra él quien como si fuera un meteorito impacto contra Naruto en una gran capa de tierra.

Abriendo lentamente los ojos para recuperarse del impacto, Naruto vio que tenía a una pequeña Pegaso azul y melena arcoiris inconsciente sobre su pecho con leves raspones.

El niño le dio suave palmadas en la mejilla a la pequeña, cuando esta reaccionó, al instante con un grito tan fuerte que despertó de improvisto a pobre Heartsword, quien se dio la cabeza contra una roca destras de el.

"¡Un mono sin pelo me esta secuestrando!" Grito la pequeña apartándose lo bruscamente de Naruto y colocándose en pose combativa frente a él "¡Vamos secuestrador! ¡¿Quieres meterte conmigo?! ¡Ponte con uno de tu tamaño!" La pegaso lanzaba golpes al aire con una mirada agresiva y una sonrisa de seguridad… mientras el príncipe la miraba con cara de póker sin entender.

"¡¿Acaso estás loca?! ¡La víctima acá fui yo, dattebayo!" Con una vena hinchada y dientes afilados reclamo el niño señalandole con el dedo ante la agresiva potra, la cual reacciono tratando de recordar lo ocurrido.

Al parecer la pequeña Pegaso estuvo haciendo piruetas en el aire y cuando intento una más arriesgada, perdió el control del vuelo y se precipito al suelo, felizmente choco contra el niño, de lo contrario hubiera sido el fin para ella.

Cuando la pony recordó ese detalle se sonrojo algo avergonzada, pero aun así con orgullo hablo "¡Ha!, bueno, en ese caso siéntete feliz de haber chocar conmigo... ¡Yo! ¡La gran Rainbow Dash quien algún día sera la más famosa de los Wonderbolts!, y tu mi lampiño amigo, ¡Podras presumir de haber chocado conmigo!" La niña hablaba con tanta pedantería que al niño le parecía que se encontró con la versión Pegaso del pesado de Blueblood.

Naruto puso una cara de leve desagrado, definitivamente este tipo de pony no podría figurar como prospecto de amiga para Twilight, así que decidió ignorar a la alocada Pegaso y dar media vuelta, pero al ver eso, esta se ofendió que no le diera atención, y ante los reclamos de Rainbow para que no la ignore, el niño contraataco con una sonrisa maliciosa.

"¿Dijiste los wonderbolts?, ¡Ha!, yo que no vuelo tengo mejores chances de ser miembro que una Pegaso que pierde el control en pleno vuelo… ¡Apuesto que eres más lenta que una tortuga!" Respondió con orgullo el niño, haciendo que la Pegaso azul se enojara al verse ofendida por sus maniobras.

"Muy bien señor presumido, tengamos una carrera desde acá hasta el final de la cueva de allá pasando por el bosque, ¡El que pierda tendrá que obedecer en todo lo que el ganador le pida!" Le reto Rainbow mostrandole el recorrido y sus condiciones; en eso se hacía presente Hearts quien, sin explicación, presentación o incluso su opinión, lo pusieron de juez, teniendo un chipote rojo en su cabeza por el golpe de antes.

A la señal del pelirrojo, ambos participante iniciaron la carrera a toda velocidad, claro que en términos generales la Pegaso tenía la ventaja por volar, pero para su sorpresa, aquella criatura de dos patas corría muy cerca de ella, incluso aventajándola por momentos, así que se inclinó hacia adelante para volar aún más rápido.

Naruto se sorprendía lo veloz que era la niña, si ella fuera parte del grupo de criados que lo perseguían luego de una de sus travesuras, no tendría tiempo alguno para esconderse, pero tenía un as bajo la manga; así que por indicaciones de kurama, el acumulaba su chakra en las piernas permitiéndole ir aún más rápido, incluso Heartsword se sorprendía de la velocidad que el príncipe y esa potra estaban alcanzando.

La Pegaso comenzaba a frustrarse que ese niño en tierra la iguale, así que decidió tomar ventaja en el siguiente terreno.

Mientras la niña volaba a través de los árboles del bosque al que entraron, Naruto saltaba de árbol en árbol como una ardilla, pero de pronto una sonrisa de confianza se le formo en la cara de la Pegaso, había una trampa en el camino de la cueva cerca de la recta, era un gran abismo dentro de ella donde el niño no podría correr, dejándola con una gran ventaja.

Al llegar a la cueva, la Pegaso sin dificultad cruzaba volando el abismo velozmente mientras saboreaba la victoria, arrepintiéndose algo por la trampa que puso en su camino "Hehehe, creo que me pase un poco... Tal vez solo le pida un helado de fresa y lo deje en paz..." Hablo la niña en tono de confianza, cuando de pronto algo de tierra le cayó encima del cabello, así que alzo la mirada y la quijada se le cayó al instante "¡¿PERO COMO...?!"

"¿Encerio?, ¡Pues yo quiero mi helado de chocolate Dattebayo!" Grito Naruto corriendo como un loco de cabeza por el techo de la cueva ante la mirada de sorpresa de ambos pegasos, pues verlo caminar por el techo es una cosa, pero correr y saltar de cabeza desafiando la gravedad es otra.

La Pegaso apresuro su ritmo para llegar a la meta, mientras el príncipe igualaba su velocidad con aún más chakra "¡No pierdas la concentración mocoso! ¡Sino la palmamos aqui!" Le gritaba Kurama desde su jaula que no se confíe tanto del chakra cuando corre de cabeza sobre un acantilado.

Alzando la mirada para ver a su rival igualandola, Rainbow no se percató de una estalactita frente a su camino que, sin poder evitarlo, choco fuertemente su costado contra ella, desequilibrandola y cayendo al abismo.

Con preocupación por ella, sin pensarlo, Naruto se lanzó para atraparla en pleno aire; Mientras Heartsword se lanzó asustado en vuelo por ambos para salvarlos, pero por fortuna el impulso de Naruto no solo le permitió atrapar a la chica, sino que también alcanzar la otra pared del abismo donde se quedó pegado para el alivio del guardián.

La Pegaso lentamente abría los ojos, miro al príncipe sostenerla entre sus brazos de forma protectora mientras subía tranquilo por la pared para salir de esa cueva. Quiso decir algo al respecto, en especial por la forma en que la sostenía haciéndola sonrojar… pero… En lugar de eso, solo cerró los ojos dejando que el rubio la cargará.

Unos minutos después, Rainbow abrió los ojos para alivio de el niño y su guardián, parece que se había desmayado, pues ella tenía puestas algunas vendas en el costado de la cabeza, al parecer salvo ese golpe, no tuvo nada serio.

Luego de ello, Hearts dijo que buscaría algo de helado para comer, y dejo a los niños solos.

Un incomodo silencio entre ambos se formo por un par de minutos, hasta que la Pegaso se animo a hablar primero, pero Naruto visualizo a dos guardias que patrullaban la zona y se escondió inmediatamente para desconcierto de la niña

Cuando los guardias llegaron, estos le informaron que se había visto una criatura extraña por los alrededores y le preguntaron si sabía algo al respecto. La Pegaso miro el arbusto donde el príncipe se escondió, y dando una sonrisa respondió que no tenía idea alguna de que le hablaban, los guardias se retiraron a seguir con su búsqueda; y Naruto salió de su escondite, preguntandole porque lo protegió.

Ella molesta contesto "¡¿Pero por quien me tomas?! ¡¿Una chismosa?! ¡Yo no delato a nadie! ¡Yo soy leal a mis amigos!" Dijo ella con orgullo, pero Naruto se sorprendió de esa declaración; luego la Pegaso agacho la cabeza "Gracias… P-Por salvarme y perdón por hacer trampa…" La Pegaso visiblemente avergonzada se disculpaba con Naruto.

El rubio con una sonrisa revaluó el concepto que tenia de la niña, tal vez se apresuró a juzgarla y de forma juguetona, contesto "¿Que? ¿Acaso hacías trampa?, Yo no recuerdo tal cosa, la cueva estaba dentro del trato..." Y acariciando la frente de la Pegaso agrego "Y por lo otro no te preocupes, seguro hubieras hecho algo así por mí…" Dijo de forma calmada, mientras la pequeña se sonrojo de forma furiosa.

"¡N-No importa! ¡Yo hice trampa así que tu ganas!… Adelante, da tus ordenes…" La Pegaso admitía su derrota, esperando alguna vergonzosa orden por parte de el.

Naruto se puso la mano en el mentón "Mmmm… Bien, técnicamente de continuar la carrera, esta sería un empate… pero ya que me sedes la victoria, solo era un pedido, ¿Estas lista?" La chica con mirada decidida acepto moviendo la cabeza "Rainbow Dash… ¡Te pido que seas mi amiga!" Fue su orden con una sonrisa zorruna señalandola.

La niña volvió a abrir los ojos con sorpresa, pero luego sonriendo contenta acepto el pedido, y este estiro su mano de forma amistosa delante de ella "Me llamo Naruto, ¡Gusto en ser tu amigo, Dashy!" sonrió aún más, y la Pegaso sonrojado y contenta, estrechó la mano del príncipe.

Durante el resto de la mañana, uno al otro se alababan lo geniales que eran, lo mucho que disfrutaron la carrera, y Naruto deseaba verla hacer esas piruetas super especiales de las que tanto hablaba, mientras ella quería verlo correr de cabeza de nuevo, así entre risas y juegos, llego Hearts con un par de helados en un portavasos.

"Je, Increíble... De saber que terminarían así, lo hubiera traído mucho antes de que todo esto empezara" Comento el pelirrojo al ver a los niños jugar felices.

Alguien que también se sentía contento con esta nueva amistad era Kurama, esa Pegaso era increíblemente rápida, incluso se atrevería a decir que era más rápida que algunos guardias adultos en el castillo, si Naruto juega con a ella a las carreras, podrá desarrollar mejor su condición atlética y distribución de chakra.

El 1er día de buscar amigos fue un éxito, y cuando llego la hora de partir, ambos acordaron los días para poder encontrarse y jugar, y al mismo tiempo se prometieron volver a competir, algún día en una gran y espectacular carrera, y esta vez limpiamente.


El fin de semana tal como se prometió, Twilight se hizo presente en el castillo, pero al parecer ella estaba algo preocupada, le contó al príncipe que habría un examen especial en la escuela para los unicornios, los que aprueben esa evaluación podrán postular a acceder a un curso especial de magia avanzada.

El príncipe como siempre la apoyaba, ya le se había acostumbrado a los ataques de inseguridad de la peli morada, mas este siempre lograba animarla, aunque claro está, parecía que esta vez el dichoso examen era muy importante, por un momento pensó en contarle sobre su nueva amiga rainbow, pero descarto la idea al verla tan ansiosa por eso; Él le sugirió que leyeran algunos cuentos para que se relaje, basto la palabra leer, para que ella se emocionara.

Luego de volver a la pequeña unicornio a su estado de ánimo común, leyeron un cuento que regularmente solía Twilight leer con mucha atencion, dicho cuenta era el que narra sobre los elementos de la armonía.

Para la unicornio le parecía todo eso una profecía que advertía que algún día vendría la malvada yegua Nightmare Moon, a buscar venganza al cumplirse los 1000 años de su encierro. Al príncipe le desagradaba mucho que le den ese papel de villana a su tía Luna, pero comprendía que no podía revelar la identidad de la tal Nightmare.

Por un momento evaluó la situación, si su amiga twilight estaba en lo cierto, si su tía Luna podría salir libre, eso sería una buena oportunidad para que ella y su mama hagan las paces, pero kurama movía la cabeza de forma negativa, si es que ese cuento tendría algo de cierto, es que su tía no regresaría precisamente de buen humor.

Al despedirse la niña, Naruto le acarició la frente con una sonrisa tratando de animarla "No te preocupes por los resultado finales, lo que importa qué te esforzaste, ¡Estoy más que seguro que tu podrás superarlo como siempre, Dattebayo!" Le dijo, dándole un giño al final.

La potra sonrió agradecida por tener a alguien como Naruto como su amigo para animarla en sus momentos de anciedad, y le prometió escribirle apenas sepa los resultados del examen.


Durante el resto de semana, Naruto y Hearts siguieron con la búsquedas de amigos para Twilight en un camino diferente.

El pobre Pegaso había tenido una dura jornada, pues no solo los entrenamientos en la academia se hacían más duros, sino que con su auto-entrenamiento y el ayudar al príncipe como transporte, hacía que sus fuerzas estén al límite; Tan cansado y hambriento se sentía, que apenas vio un árbol de manzanas de ellos, este se desvió para tomar algunas.

Naruto al ver las frutas tan jugosas también tomo una, dejando a su amigo reposando en el árbol, mientras el bajaba del árbol aun con la manzana en la mano para darle una fuerte mordida.

Al poco rato sintió algo en el cuello y bajo la mirada "¿Y esta corbata tan rara? ¿De donde salió?" Se preguntó mirando lo que de repente tenía en el cuello "¡AGK...!" A continuación, la 'Corbata' se ajustó en su cuello, y sintió que lo tiraban de ella, arrastrándolo de golpe un buen rato por el suelo.

Cuando su arrastre paro, miro destras de el un corcel rojo un poco más joven que Heartsword, pero visiblemente más grande y fuerte, melena anaranjada y una Cutie Mark de una manzana verde cortada.

A su lado, habia una pequeña pony de tierra de la misma edad que el rubio, pelaje naranja y melena rubia con un sombrero Vaquero.

"¡Ya te tengo ladrón de manzanas!" Le dijo la niña con un acento campirano, mientras sostenía entre su boca el otro extremo de la 'corbata' que era la soga que sostenía al rubio.

"¡Espera! ¡Yo no soy ningún ladrón!" Se defendió Naruto tratándose de poner en pie.

"Entonces, ¿Porque tienes una de nuestras manzanas en tus… cascos?" No pudo continuar, ya que cuando le príncipe se puso de pie, ella y el corcel se sorprendieron de ver lo que habían atrapado, era una criatura de dos patas, pero no era un minotauro, no tenía cascos y usaba ropa por carecer de pelo.

El príncipe suspiro con fastidio "Mira, lo lamento por tomar una de tus manzanas sin permiso, pero me ofende que se me queden mirando así…" Ya le empezaba a ser molesto que lo miren como bicho raro por más mítico que él sea.

"¡Oh, lo siento!, no quería ser grosera…" Se disculpó de inmediato la niña apenada, para luego reaccionar "¡UN MOMENTO! ¡Los ofendidos somos nosotros! ¡Esta es nuestra granja de manzanas, y ya tenemos suficientes problemas como para que un ladrón nos robe!" Enojada reclamo la rubia, mientras su acompañante soltó un "Eyup" en señal de acuerdo.

Naruto tuvo que aceptar que esos granjeros tenían razón, y pensando que las cosas no podían empeorar, hizo su aparición su guardián.

"¡Mira pekke! ¡Traje muchas de esas ricas manzanas!, tal vez a Shining y a tu mama les guste probar alguna..." Con una sonrisa despreocupada y cargando muchas manzanas en su lomo se presento Heartsword.

Flushhhhhh...

Un aire frío se sintió en el lugar, mientras Naruto lloraba de forma cómica entendiendo ahora como se siente Shining siempre con ese idiota a su lado.

Una vez consiente de la situación tras explicarle, el pelirrojo intento arreglar las cosas de forma nerviosa "¡B-Bien! ¡No hay problema! ¡Esto se puede arreglar!… bastara con pagar por las manzanas, ¿verdad?, Justo acá tengo… tengo… "Se buscaba en el cuerpo poco a poco con más desesperación "¡Oh, ya me acorde!, deje la billetera en… mi… cuarto…" Colocándose la pata en la cabeza en forma de disculpa, los granjeros y Naruto lo veían con miradas de querer matarlo.

No les quedo de otra que pagar con trabajo por las manzanas consumidas y las ya tomadas de los 2 'ladrones', aunque en términos simples, todo lo que hay en el reino por derecho le pertenece a la realeza, así que técnicamente esas manzanas le pertenecen al príncipe, pero este reconocía que fue su culpa por tomar algo sin permiso, al fin y acabo, esas manzanas no se plantaron solas.

Luego de una jornada de trabajo duro, debían reconocer que era divertido darle golpes a los árboles y hacer que las manzanas cayeran para empacarlas. Los dos granjeros al ver que los ladrones tenían sinceras intenciones de arreglar su falta, dejaron de tratarlos de forma hostil y fueron más agradables con ellos para unirseles en el trabajo.

Llegando la tarde, ambos fueron invitados a almorzar con el resto de la familia de la granja para sorpresa de ellos, pues no se esperaban tal trato, aunque el trabajo hizo que les diera mucha hambre y aceptaron sin más.

Una vez dentro de la casa familiar, se hacía presente una pony terrestre algo mayor de pelaje color verde, crin canosa por la edad, un pañuelo rojo con puntos blancos en el cuello y una cutie mark de una tarta. Ella miro a los singulares invitados, pero lejos de sorprenderse por el príncipe, ella amablemente los invito al comedor donde los esperaban un rico almuerzo.

Dentro del comedor en una silla especial de bebes, estaba sentada una pequeña pony de pelaje amarillo y melena roja; Naruto se le acercó y le hizo una serie de caras graciosas haciendo que la pequeña niña riera y estirará sus cascos hacia él, acto seguido el niño la cargo y continuaba haciéndola reír.

"Wow, eso es increíble... Applebloom generalmente llora cuando un extraño intenta cargarla y solo está tranquila cuando la abuela, mi hermano o yo la sostenemos" Comento la pony naranja al ver a su hermanita siendo tan feliz con ese niño, mientras su hermano asintió con un "Eyup"

"Al parecer le simpatizas pequeño… yo soy la abuela de todos estos jovencitos que están acá, me llamo María Ann Smith Sherwood, pero puedes llamarme abuela Smith como todos" Con una sonrisa amable se presentaba la pony mayor.

Los otros ponys algo apenados por no presentarse, imitaron el gesto de la abuela "Lo siento por no presentarnos antes… Yo me llamo Applejack, pero puedes decirme AJ, el grandote es mi hermano Bic Machintons, Big Mac para abreviar, y la bebe es mi hermanita Appleblom..." Sonriendo de forma amable, Applejack se deba a conocer junto al resto de su familia.

"Yo me llamo Naruto, y una vez más pido disculpas por lo que paso con tus manzanas…" Se presentó el niño correspondiendo el gesto al ver que los granjeros lo trataban de forma más amable.

"¡Yo soy Heartsword! ¡Futuro capitán de la guarida real! ¡Eso se los aseguro!" Con una sonrisa confiada se presentaba el pelirrojo de la misma forma que siempre lo hace, más la mirada reprobatoria del príncipe lo hizo corregirse "Emmm… Yo también siento el comerme sus manzanas sin haber pagado por ellas… luego por intentar escapar… luego por hacer que me eches la soga al cuello… luego por arrastrarte a un charco de lodo y luego por hacer que tu hermano me tire contra el piso y salpicando a todos con el lodo…" Agacho la cabeza en forma de disculpas, mientras el niño le gritaba que no tendría que disculparse tanto si dejara de ser tan idiota.

Los Apple sonrieron de forma jocosa, sus invitados eran muy divertidos, sobretodo el Pegaso quien no tenía pinta alguna de ser un soldado, salvo la cutie mark en forma de espada y que se proclamaba así mismo capitán, tal como parece no eran malos, así que al abuela intento saber más del pequeño.

"Y dime naruto, ¿Donde está tu mama? ¿No se preocupara que no estés todo el día en casa?" La pony pregunto con curiosidad, más el niño respondió de forma amable.

"Mi mama tiene un trabajo muy importante y a veces pasa todas las mañanas ocupada por su trabajo; pero cuando tiene algo de tiempo libre, ella juega conmigo, yo no quiero darle muchas preocupaciones, así que me quedo con Hearts o mi otro amigo Shining para que me cuiden" Usando toda su educación de príncipe le contesto a la abuela.

"Oh Naruto, eres un niño tan bueno y tan bien educado... ¡¿Ya ven que no duele mostrar modales!?" Regaño la abuela a sus nietos cabizbajos, mientras el Pegaso reía levemente, pensando que si conocieran el desastre ambulante que es el príncipe en realidad, no opinaría igual.

"Y dígame señora, ¿Los padres de los chicos no nos acompañarab o vendrán más tarde?" Pregunto Heartsword solo por cortesía, pero el gesto de tristeza de los Apple le hizo entender que sin querer metió la pata una vez mas.

Ellos narraron que hacía un año sus padres fallecieron y ahora tienen que hacerse cargo de la granja familiar, haciendo que el resto del almuerzo fue algo incómodo. Cuando acabaron, el Pegaso pidió hablar a solas con la abuela, mientras dejaba a Naruto y el resto salir un rato a jugar.

El termino jugar fue relativo, pues había otras actividades para hacer en la granja, como ayudar en el arado, reparar el granero o limpiar el gallinero, si bien podían ser tareas tediosas, el niño ayudaba a los hermanos, y a pesar de ser la 1era vez en toda su vida de hacer tales actividades, le resultaron fáciles por sus habilidades ninja y la ventaja de usar manos para sostener mejor las herramientas; y tratando de conocer mejor a los hermanos, el decidió pregúntales.

"Dime Aj, cuando nos conocimos tu mencionaste que ya tenían muchos problemas, ¿Que ocurre?" Pregunto Naruto al ver que a pesar de ser más amables, un gesto de preocupación estaba en el rostro de los hermanos.

"¡Oh, no ocurre nada dulzura!" Naruto se sonrojo un poco por ese sobrenombre "Solo lo dije de molesta por la situación…" Con su típico acento campirano contesto la pony, mas al poco rato inflo las mejillas y miro a un costado, este detalle no pasó desapercibido por el rubio.

"¿Porque que haces esa mueca? ¿Ocultas algo?" Volvió a interrogar al mirarla a los ojos.

"¡N-No culto nada!" Cntesto molesta encarandolo, solo que al poco rato volvió a hacer la misma mueca con un lindo sonrojo.

"Di que tengo el cabello verde..." Reto el niño mirándola aburrido.

"¡T-Tienes el cabello verde!" Respondió rápidamente pero una vez mas la mueca gano, ahi fue oficial, era una señal que ella mentía, y antes que el niño la interrogue mas, escapó corriendo rápido de allí dejándolo con la palabra en la boca.

"Applejack es mala mintiendo, ella siempre es honesta con todo el mundo..." Hablo Big Mac con una sonrisa, mientras que el príncipe se impresionaba que el hablara algo más que 'eyup'.

"Supongo que tu podrías decime que pasa, ¿Verdad Big Mac?" Pregunto esperanzado el rubio.

"Nop" Le respondió simplemente.

El niño iba a insistir, pero Heartsword salió de su charla con la abuela y le informo que era hora de irse.

Cuando ya estaban por partir, el Pegaso anuncio que vendría mañana a ayudar con la cosecha, esto tomo por sorpresa a los Apple y Aj intento negar la ayuda, pero Bic Mac le hablo por lo bajo para que aceptara, que la situación no estaba para ser orgullosos.


Una vez en el castillo, el niño quiso saber la razón por el repentino interés de ser granjero de su guardián, el Pegaso bajo la mirada, decidiendole contar lo que ocurría realmente en la granja Apple.

La muerte de los padres de Aj no solo fue una tragedia familiar, sino también económica en la granja, el repentino deceso de los jefes de la granja hizo que muchos de sus trabajadores renunciaran de forma repentina, pensando que esta se declararía en quiebra.

La abuela Smith tenía que hacerse cargo de la pequeña Applebloom, por lo que los trabajos de la granja recayó en los hermanos mayores quienes tuvieron que abandonar sus estudios, y a pesar de la falta de mano de obra, se las arreglaron para salir a flote, ahora Naruto entendía porque en esa granja tan grande solo están cuatro ponys en ella, pero el Pegaso entonces puso una cara más triste.

"Hace medio año la bebe se enfermó y tuvieron que endeudarse mucho para poder curarla… los gastos médicos hicieron que la familia hipotecara su casa; ahora su única esperanza para salvar la granja, es que la cosecha de este año sea entregada a tiempo a un consorcio de mermelada de manzana; pero como ya te has dado cuenta, no tienen quien los ayude; ellos intentaron contactar con sus familiares, pero estos no han respondido; por eso mismo desde mañana iré ayudar en lo que pueda, solo tenemos hasta el fin de semana para que todas las manzanas sean recolectadas y entregadas para poder salvar su granja…" Con una cara de decisión el Pegaso dejaba al niño en su alcoba, pero antes de irse, este mismo le cerro el paso cruzado de brazos.

"¡Hearts, yo también quiero ayudar!" Fue la repentina respuesta del príncipe.

El Pegaso sonrió al ver las buenas intenciones del príncipe, pero se negó, el trabajo es en sí muy agotador, y el debería estudiar y jugar como cualquier niño… pero no se esperó la siguiente declaración del príncipe.

"Los Apple fueron buenos ponys conmigo, no les importo quien o que soy, no quiero que pierdan su granja, y si no quieres llevarme, ¡Yo buscare la forma de ir hasta la granja y sacudir hasta el último árbol de manzanas!" Le declaró con una mirada firme "Además, Aj… Ella también debería estudiar y jugar, no es justo que eso les pase a tan buenos ponys…" Con decisión el niño hablaba, mientras el Pegaso suspiro en derrota, una vez más el pequeño travieso se salió con la suya y no tubo que usar sus ojitos de cachorro.

"Hearts… ¿hay alguna otra razón para que quieras ayudar a los Apple?" Volvió a preguntar Naruto, al parecer había una razón más por la que el pegaso repentinamente deseara ayudar a unos completos desconocidos.

Heartsword cerro los ojos y fue sincero con el niño "Yo también sé que se siente quedarse sin padres repentinamente y tener a alguien por quien ser responsable…" Fue la respuesta del pelirrojo, mientras el niño lo miraba asombrado "Naruto, yo hace unos cuatro años perdí a mis padres, y quede a cargo de mi hermana menor, ella tiene una salud muy delicada, no puede salir a jugar o relacionarse con otros por su condición ya que esta interna en un hospital… Cuando ingrese a la academia, tuve que romperme la cabeza en pensar que trabajos podría tomar para poder pagar las facturas del hospital… Hasta que te conocí…" Declaro sonriendo tristemente "Te volviste mi duende de la suerte, pues cuando tu madre me nombro tu guardián, no solo pude asegurarla en un mejor hospital, sino que con la paga ya no tendría más porque preocuparme en caso de gastar en medicinas o algo similar…" El tono de Heartsword se comenzaba a romper, al mismo tiempo que lagrimas recorrían su rostro "Al mirar a los Apple, me hizo recordar aquella época donde tuve que sacrificar tantas cosas por ayudar a mi hermanita de las que no me arrepiento, pero ahora… esos hermanos, se rompen el lomo por no perder lo que a sus padres tanto esfuerzo les tomo crear, y así cuidar a su abuela y hermanita…" Aun llorando, sonrió al niño "Siento que esta es una oportunidad para ayudar a alguien que pasa por una situación similar a la mía y mostrar algo de gratitud a la vida por ya no tener ese pesar… (Snif) Lo siento su alteza... un soldado, no debe mostrarse tan débil frente a un miembro de la familia real..." Se disculpó sonriente limpiándose las lágrimas al ver que el niño lo miraba fijamente, pero no sabia que una vez más ese Pegaso idiota brillo para, así que el niño le dio una suave caricia en su frente con una sonrisa comprensiva.

"No lloras ante un miembro de la familia real… Lloras frente a un amigo, tu fuiste mi 1er amigo Hearts, gracias por ser así como eres conmigo…" El niño sonreía aguantando las lágrimas delante su amigo, y ante esa declaración, el Pegaso rio de forma suave aun ganándole algunas lágrimas "¿No que los chicos no lloran?" Pregunto de forma juguetona y amable el príncipe.

"Jajaja, al contrario majestad… El llorar es la forma más sincera de demostrar nuestros verdaderos sentimientos…" Respondió con una sonrisa el pelirrojo.

A partir de mañana, como sea, ese cargamento de manzanas llegara a su destino, esa fue la meta que se pusieron ambos por igual.

El zorro suspiro derrotado al ver tal escena, era oficial, los idiotas saben decir frases geniales cuando el tiempo lo amerita.

Pidiendo una licencia a la princesa Celestia, esta acepto darle el resto de la semana libre al Pegaso, lo que no se imaginó la alicornio, es que esta vez a escondidas se llevó al príncipe con él, claro que tuvieron que rogarle ambos al Shining para que los cubra hasta la noche, y Aunque el unicornio al principio no le gustó nada la idea, al ver a ambos tan decididos en ayudar a esos granjeros, no le quedo de otra que apoyar, la verdad luego de escuchar sus razones, el también deseo ir a ayudar, pero su apoyo era más necesario en el castillo… Claro que ese apoyo terminó siendo también pasear humillado de un lado a otro con un monigote de trapo con la forma del príncipe.


Cumpliendo su palabra, Hearts y Naruto regresaron a la granja y comenzaron a ayudar en la colecta de manzanas.

Si bien los hermanos Apple se sintieron algo incomodos por la ayuda repentina de dos desconocidos, no podían ponerse exigentes con nada de personal.

Todos trabajaban hasta la hora de almuerzo, donde de costumbre la abuela los esperaba con una sabrosa comida a base de manzanas. A Naruto le fascino el rico pai de manzanas de la abuela, y también halago la frituras de manzanas que acompañaba la merienda, pero la abuela contesto con una sonrisa que fue su nieta la que las preparo, y cuando el niño halago por el plato a Applejack, la pequeña se puso tan roja como su hermano ante la risa de los mayores.

El tiempo apremiaba, durante el resto de la semana se repetían la rutina de ayudar en lo que se pueda en la granja, no solo en la colecta de manzanas, el mantenimiento de la misma ocupaba una gran inversión de tiempo.

Naruto deseaba poder ejecutar algunos de los famosos jutsus que kurama le mostraba para poder apoyar, pero aun no podía ejecutar ni siquiera el bushin sin que le salga un monigote mal formado.

"Aj, ¿Quienes son todos estos ponys?" Pregunto curioso el pequeño al mirar una foto en la casa donde varios ponys de tierra con vestimenta de vaqueros posaban frente al granero de la granja.

"Todos ellos son la familia Apple, ¡El clan familiar tal vez más grande de toda Equestria!" Comento con orgullo la potra, pero luego su expresión se volvió triste "Me encantaría que al menos la mitad estuviera aqui... de esa forma podríamos acabar a tiempo…" La niña bajo la mirada triste, pues a pesar de las cartas enviadas a sus familiares, ninguno ha respondido, dando a entender lo poco les que importaba a ellos la emergencia familiar.

El príncipe miro con tristeza a la niña, pues esas manzanas era la única oportunidad de arreglar las cosas, pero se le ocurrió algo e intento animarla "Hey Aj… ¡Apuesto que puedo recolectar más manzanas que tú!" Con una sonrisa zorruna, reto a la niña la cual acepto el reto, anunciando que nadie puede con ella

El truco logro funcionar, pues Applejack recupero el ánimo, y casi como jugando, empezaron la competencia, esto también animo a los ponys mayores a seguir, y con más empeño, trabajaron en sus áreas. Naruto debía reconocer que la potra era muy fuerte y hábil para su edad, logrando tumbar varias manzanas de una sola patada; así que para no quedarse atrás aplico chakra en su cuerpo para embestir el árbol y lograr hacer caer similar número… Pero un repentino y fuerte grito detuvo el juego.

La niña se tomaba con dolor en el suelo su pata enrojesida, pues al parecer se había fracturado la pierna.

Con cuidado la llevaron a la pequeña a su habitación, felizmente no era nada grave, pero tenía que guardar reposo un buen tiempo y precisamente eso no tenían.

Con frustración la niña lloraba, no quería perder la granja, ella deseaba sacarla a delante y darle la oportunidad a su hermana menor de estudiar y ser lo que ella quiera, no quería que se hermano tuviera que cargar solo con todo.

Entre llantos y dolor se lamentaba Applejack delante de su abuela quien trataba de consolarla, mientras que el príncipe escuchaba su dolor detrás de la puerta cuando fue a verla. Se sentía culpable, si no fuera por esa tonta competencia que hizo para subirle el ánimo a la niña, tal vez no se hubiera lástimado.

Sin perder tiempo, volvió a donde estaban los árboles y desesperadamente aumento el ritmo de su trabajo para compensar su error.

Las intenciones fueron buenas, pero la ayuda llego tarde, solo tenían un día más para recoger las manzanas, empacarlas y ser enviadas para que el trato se cumpla, y faltaban aun muchos acres por cubrir.

Al día siguiente, Hearts y Naruto, quienes aún no se rendían, convencieron a Shining de cubrirlos un día mas, anunciando que el niño pasaría la noche en el cuarto de ellos como si fuera una pijamada, el unicornio nervioso reportaba la novedad a la princesa, quién amablemente aceptó el pedido.


Esa noche continuaron sin parar con el mismo empeño, pero como era de esperarse que todos los días de trabajo imparable, sumado a el cansancio del día, hicieron que sus fuerzas los abandonaran.

Naruto miraba con frustración a su amigo pelirrojo que bajaba el ritmo de trabajo, pues el trabajo de la granja, sumado a su entrenamiento diurno como guardia, hicieron que llegara rápidamente a su limite hasta que la fatiga no pudo más y cayo rendido contra un árbol.

El príncipe casi sin fuerzas lloraba de frustración, se sentía culpable por lo que le paso a Applejack y no podría ayudarla a tiempo "¡Maldición!, si tan solo pudiera hacer el Bunshin No Jutsu, esas copias ayudarían…" se reclamaba así mismo con pesar, pero el zorro intento consolarlo al informarle que esa técnica solo crea copias reflejadas para distraer al rival.

En cambio, había una técnica más avanzada que podía hacer clones sólidos, clones que obedecían ordenes e incluso pensar por su cuenta y hacer trabajos de forma individual o colectiva, pero era demasiado para un novato como el, pero esperanzado al escuchar eso, exigió saber como hacer esa técnica.

La técnica en mención era el Kage Bunshin No Jutsu, pero no le serviría de nada, su chakra estaba al límite por todo el esfuerzo a tan corta edad, pero ante la insistencia constante de Naruto, el zorro le mostro los pasos para hacerla, y sin perder tiempo el niño intento hacer la técnica, pero tal como se lo esperaba el bijū, no pasó nada, varias veces más lo intento, germinando con el mismo resultado.

El niño miro a su amigo Hearts con el cuerpo visiblemente castigado debido a tanto trabajo, recordó los motivos por los cuales el tanto deseba ayudar a los Apple.

A big mac quien trabaja tanto sin quejarse por el bien de sus hermanos.

La sonrisas de la pequeña apple bloom por cuya salud sus hermanos sacrificaron tanto por cuidarla para darle una vida sana y un futuro seguro.

A la amable abuela Smith que los animaba con sus ricos pays y cariñosa actitud maternal.

Y finalmente a Applejack, la potra más terca que jamás pudo conocer, y a la vez la más tierna por desear siempre lo mejor a su familia.

Recordó el llanto de frustración y el dolor de ella por querer conservar lo último que lucharon sus padres, desesperado empezó a acumular todo el chakra que le quedaba en el cuerpo, kurama sintió que el cuerpo del pequeño ardía "A un amigo jamás debes abandonarlo cuando te necesite, ni debes traicionar su confianza..." Eran las palabras que Hearts le menciono cuando se conocieron por primera vez.

El calor de su cuerpo se hizo más intenso, como si fuera a estallar, y entonces hizo los pasos que le mostró Kurama "¡Kage bunshin no Justsu!" Gritó desesperado del niño… y lo que vio lo dejo perplejo.


OST: Naruto - Main Theme


Se escucharon una serie de explosiones, haciendo que varias bolas de humo aparezcan, y al despejarse el humo, delante de él habían, ¿20?, ¿50?, ¿90?, ya no importaba, Kurama se aburrió de contar cuando llego a los 120.

Aun con la mandíbula caída y los ojos como platos, el mocoso que no era capaz de hacer un simple Bushin, hizo más de 100 clones de sombras sólidos y listos para la acción.

"¡Tomodashi no bansai! (¡Que viva la amistad!)" Grito el zorro aún con la mandíbula abajo y una expresión incrédula por el milagro que Naruto tubo por su deseo de ayudar a un amigo en apuros, y sin perder tiempo, le indico a Naruto que comande a sus clones, pues una la nueva misión ninja se hacia presente:

"¡Esta noche, La granja Sweet Apple se salva!"

El niño con un gran brillo en los ojos, se sorprendía de ver de lo que un ninja es capaz de hacer, entonces lidero inmediatamente la cosecha como si fuera un general ante su ejército, ordenando que recojan todas las manzanas, y estos como una tropa respondieron alzando el puño con un '¡Hoooo!' bien motivados.

Todos los clones empezaron el duro trabajo, árbol tras árbol comenzaron con la colecta, algunos de ellos acomodaron al inconsciente Heartsword para que descanse mejor.

El pelirrojo cuando abrió los ojos levemente, miro a un ejército de pekkes arrasar con los árboles de manzanas y llevando canastas de un lugar a otro "No debí… tomar tanta cidra... Antes de dormir..." Fue el pensamiento del Pegaso para luego caer rendido.

A un ritmo demencial, los clones lograba la colecta, y conforme terminaban con un acre, los clones se desvanecían, no sin antes felicitarse a sí mismos por el buen trabajo; pero conforme se iban deshaciendo, el niño empezó a sentir mucho dolor y cansancio acumulado por cada uno de los clones, pero eso no importaba, ahora solo faltaba un árbol, uno más para que la colecta sea completada.

El niño con respiración cansada, empezó a enpujar el árbol para sacudirlo, mientras los clones se desvanecían uno por uno al terminar su trabajo.


El sol comenzaba a levantarse por el horizonte en el amanecer, y ante las protestas de su hermano y abuela, Applejack se dirigía hacia el huerto de árboles con su familia detras de ella.

Cuando llegaron al lugar, vieron una gran neblina producto de los colores que cubríeron la zona, ellos se adentraron en ella, y los que vieron… fue un verdadero milagro.

Todas las manzanas habían sido recolectadas en canastos debajo de cada árbol, listas para transportase. Vieron al pegaso pelirrojo dormir agotado a pie de un árbol, mientras el pequeño Naruto, apenas consiente y con el cuerpo muy maltratado y sucio, embestiendo cansado al último árbol con el zorro animandolo desde dentro.

"¡Un esfuerzo más! ¡Una vez más y ya esta! ¡Tu puedes Naruto!" Le gritaba desde su jaula; cuando finalmente logró tumbar las últimas manzanas sobre el canasto, justo antes de dirigir su mirada cansada y una sonrisa cálida a los Apple que lo veían sorprendidos.

"Je… Buenos días…" Pronunció el pequeño, antes de caer al suelo y perder la conciencia, mientras los Apple lloraban conmovidos por tal obra.

(Fin del Ost)


Con los primeros rayos de sol, los Apple aun perplejos y sorprendidos por este milagro, levantaron al Pegaso de suelo junto al niño y los llevaron a las habitaciones de la casa para que descansen.

Mientras, los granjeros aun con lágrimas, sonreían por la ayuda que acaban de recibir, todo estaba recolectado y listo para venderlas al consorcio, pero eso no quedo hay, ya que una vez dejado a los héroes reposar, varias caravanas de carretas se hacían presentes en la granja, el milagro continuaba, pues toda la familia Apple se hacía presente y dispuestos para salvar la granja de su familia.

Con ellos, vino un pegazo amarrillo, crin blanca con lentes algo viejo y con uniforme de cartero; al parecer hubo un error en el correo de hace unos meses para pedir ayuda al resto de la familia Apple, y cuando pudieron detectar la falla, repartieron todas las carta a sus destinatarios correctos, en pocas palabras, apenas hace unos días los familiares de Applejack se habían enterado de la emergencia y fueron a ayudarlos de inmediato.

Grande fue su sorpresa cuando se enteraron que ya las manzanas estaban recolectadas, pero por indicación de la abuela, los chicos no contaron nada del príncipe y su guardián, (Applejack tuvo que hacer un esfuerzo enorme para no hacer su mueca delatora), pero indicaron que aún faltaba el empacarlas y enviarlas al comprador para que se culmine el contrato, así que sin demora comenzaron todos con la tarea, mientras Applejack miraba con una tierna sonrisa hacia la ventana donde Naruto y Hearts dormían plácidamente.


Cuando el trabajo termino y sus familiares se retiraron, la pequeña Aj fue al cuarto de huéspedes donde ambos invitados dormían, Entrando sigilosamente y se quedó frente a la cama mirando al rubio acurrucado de costado.

Ella no pudo evitar sonreír al verlo dormir de forma tan tranquila, y esas mejillas le hacían parecer que veía a un gatito dormir, pero para su sorpresa, el niño repentinamente abrió los ojos gritando que faltaba empacar las manzanas, mientras Applejack se ruborizaba de ser sorprendida en esa manera.

Cuando la niña le contó lo que paso luego de encontrarlos, Naruto se relajó y sonrió contento de que todo saliera bien.

"¿Por qué…? ¿Porque lo hiciste…?" Pregunto la pequeña mirando fijamente al niño "No tenías obligación alguna por ayudarnos, no era tu problema si es que pedíamos la granja… y aun así tu amigo y tú, trabajaron tanto…" Hablaba entrecortadamente la niña tratando de no llorar otra vez delante del rubio.

"Escuche todo cuando te llevaron a tu habitación luego de que fracturaras la pierna…" Contesto Naruto visiblemente avergonzado por espiar, y la potra se puso roja como un tomate "Tú en verdad amas mucho a tu familia, no quería que pierdan algo que es tan valioso para ustedes… lo siento, no debí espiarte, pero…" Sin poder continuar, fue interrumpido cuando sintió los labios de la pequeña tocar su mejilla y luego darle un fuerte abrazo.

Mirándolo sonrojada y apenada por sus acciones, dejo de aguantarse y lloro levemente en el pecho del rubio, agradeciéndole de por todo lo que hizo por ella y su familia, mientras el príncipe se ponía rojo como un tomate por tal muestra de afecto, decidiendo acariciar la melena de Aj para consolarla; su guardián tenía razón, el llorar es la forma más sincera de expresar lo que siente el corazón.

Heartsword, quien se despertó desde que el niño grito, escucho todo y no podía creer que el pekke hiciera tal cosa mientras estaba inconsciente.

Luego miro a la niña que observaba fijamente y con interes al príncipe, poniéndose a imaginar la bonita escena de celos que le armaría Twilight si es que ella viera cuando la niña lo beso.

"¡Oigan! ¡Yo también ayude!, ¿Acaso no hay un beso para mí...?" Con un tono burlón el Pegaso irrumpió la bonita escena, haciendo que ambos se separen sonrojados al instante. Heartsword sonrió contento de avergonzar al menos por una vez al enano por todas sus bromas hacia el… Pero no contó con lo siguiente.

"Oh, pobre Heartsword... Tan buen trabajador y sin recibir un beso por su ayuda, ¡La abuela te dará tu premio…!, Solo deja que me ponga mi dentadura…" Hablaba la abuela Smith detrás del Pegaso, sosteniéndolo increíblemente con fuerza para una yegua de su edad, mientras el Pegaso intentaba zafarse desesperado de esa nada planeada situación, terminando con resignación a recibir el beso de la anciana, mientras todos, incluido big mac que se hacía presente, reían de esta divertida escena en familia.

Llego la hora de volver al castillo, ya con la energía repuesta y bien alimentados, Naruto estaba jugando con Apple bloom que la estaba hacia reir, mientras kurama evaluaba si lo que paso en verdad fue suerte, o el niño tiene más potencial del que él creía. En eso, la abuela llamo la atención del niño.

"Naruto, jamás podremos pagar por la gran ayuda que tú y Heartsword nos han dado… Ustedes dos con creces se ganaron el derecho de ser unos Apple mas…" Comento la abuela con una sonrisa, mientras Naruto miraba con una sonrisa de alegría a la pony mayor.

"¿Eso quiere decir que eres mi abuela?" Pregunto Naruto con una sonrisa tierna, y cuando la pony verde movió la cabeza en forma afirmativa, el niño se lanzo hacia ella en abrazo fuerte, feliz de tener a alguien a quien llamar abuelita.

"Caray, la abuela gano otros dos nietos…" Comento Applejack con una sonrisa, mirando alejada la escena.

"Me gusta la idea que tu novio sea uno más de nosotros, a mi me agrada Naruto..." Comento big mac con una sonrisa, fastidiando a su hermana que se enrojeció al instante.

"¡E-El no es mi novio! ¡S-Solo quise ser agradecida, eso es todo!" Roja y molesta le contesto a su hermano casi gritando.

"Oh~, ya veo… En ese caso le diré aun grupo de lindas potrillas que conozco que tienen el camino libre con el…" comento Heartsword uniéndose a al grandote con una sonrisa traviesa.

"¡No! ¡Por favor Hearts, no hagas eso!" Contesto la pony desesperada, pero luego reacciono de sus palabras y casi quiso llorar cuando se dio cuenta como era fastidiada por esos dos que solo chocaron los cascos con una sonrisa.

"AJ, ¿Estas bien? ¿Aún te duele la pierna? ¿Por eso lloras?" Pregunto el niño que se hacía presente, ignorante de la conversión previa, y con cuidado revisaba la pata de la niña con preocupación.

La pony no pudo evitar sonreír sonrojada por las atenciones del niño y movió la cabeza de forma negativa diciendo que está bien "Emmm… Naruto… ¿Crees que podemos ser amigos?" Pregunto algo avergonzada.

El rubio le dio una sonrisa zorruna "¡Que triste! ¡Y yo que pensé que ya lo éramos!" Fue su respuesta, para alegría de la pony naranja, mientras Hearts reclamaba que esa frase era suya y que no robe derechos del autor.

El milagro de la granja Sweet Apple fue un chisme que se corrió rápidamente a Ponyville, el pueblo más cercano del área, eso hizo que varios de sus viejos trabajadores vuelvan a pedir sus puestos de trabajo, mientras algunos familiares decidieron quedarse para que los hermanos Apple puedan terminar sus estudios en la pequeña escuela que la princesa celestia acababa de inaugurar algunas semanas antes (Cuando naruto se fugó a ver a Twilight).

Con una amiga más, los dos héroes regresaron al castillo donde una gran sorpresa le esperaba al príncipe.

Encima de su cama había una carta de su querida amiga Twilight, en donde le informaba sobre su examen que fue espectacular y pudo aprobarlo, ella pronto iría a verlo para mostrarle algo increíble. Naruto sonrió contento de saber el logro de su amiga, en eso su madre lo llamo, pues quería presentarle a alguien.

Al llegar a la habitación de Celestia, esta le presento a un pequeño bebe dragón de color morado con escamas verdes.

El niño, asombrado por ver a una cría de dragón de frente, con una sonrisa se acercó al pequeñín, y este sin querer estornudo escupiendo fuego, dejándole algunas de las puntas de sus cabellos como vela de cumpleaños, pero lejos de enojarse, el niño se maravillaba con el dragoncito al que decidió llamarlo Spike, y de forma graciosa se mojó los dedos para apagar su cabello, y por si fuera poco, su madre lo proclamo como su nuevo hermanito, mientras Naruto emocionado lo abrazaba con cariño y hacia reír a su ahora hermano menor, ante la mirada tierna de su madre.

Kurama suspiro con algo de fastidio al ver lo que acaba de suceder "Repasemos… El cómo humano, tiene a su madre como la diosa del sol, su tía la diosa de la luna, su hermana mayor es una princesa alicornio; tiene como hermanos mayores a un Pegaso y un unicornio; una abuela que es un pony de tierra, y ahora su hermano menor es un dragón…" Haciendo una leve mueca de burla con un leve tic por lo ridículo que acaba de sonar todo eso "He oído de familias multirraciales… ¡PERO ESTO ES RIDÍCULO!" Luego de ello, pensó en lo mucho que este niño lograba hasta ahora y no pudo pensar en otra cosa, salvo en lo muy orgullosos que Minato y Kushina estarían de su cachorro.

"¿Cuán lejos puedes llegar, pequeño príncipe…?, Deseo ver y comprobar si hice bien en poner todas mis cartas en ti… Espero que no me descepciones…"


19.986 palabras

Bueno, espero que les haya gustado, pues este fue el primer paso de Naruto en su plan por conseguir mas amigos para su amiga Twilight, y al mismo tiempo haber hecho por primera vez el Jutsu que más lo caracterizaria.

La historia de Naruto continua, pues en el próximo capítulo veremos…

Formando Lazos (2da parte): El vinculo de hermanos

¡Hasta el próximo capítulo!

¡Ryu Shiro se despide!