Fic
Unidos por la Pasión
De Mayra Exitosa
Capítulo V
La relación de Archie
La conversación entre las parejas con otras era algo especial, parecía que cada pareja estaba atenta a la pareja de otro, vean ustedes nuestro querido William, hablando cerca de esos tentadores atractivos y turgentes montículos, que tenía que dejar de ver, para que no lo juzgara un pervertido y que el lunes ella iría a su oficina, para entonces, el estúpido de Archie decidiría si con la pelinegra o la rubia, que por obvias razones se veía bastante critico su cuadro de bigamia en pleno auge.
La nueva amiga Patricia, estaba encantada con Stear, quien desde que le había guiñado un ojo, no dejaba de conversar con ella y su pareja Susana se la pasaba masajeando la pierna del rubio recién llegado, que estaba moviéndose con agilidad manteniendo su mano perdida entre sus piernas acariciando la abertura tan insinuante que le mostraba y rozándose constantemente con ella, así la rubia sentía la indirecta de que se quería deshacer de su novia, que hasta venía combinando con su corbata en turquesa, solo una mujer posesiva podía decirle que usara eso al rubio que le favorecía el celeste combinando con sus ojos, para Susy la muy ilusa de turquesa por más tema que le hacía, no lograba arrancar la mano misteriosa que parecía disfrutar introducirla acariciándola de manera provocativa, él estaba jugando con ella, eso la tenía muy distraída sin ver a su amigo Stear, se mantenía ene se juego prohibido de estar con la pareja de alguien más, tocándose las piernas uno al otro. Como si se aceptaran, ya que al desconocer Susana que no eran novios, ella estaba tratando de seducir a un hombre que le gustaba realmente.
Para Archie las cosas eran completamente claras, su primo esa noche se iría con Annie y estarían en su departamento, la poseería en la pared como había aprendido de la trepadora de Elizabeth y que ahora con la ligera y fácil de montar que era su asistente, no dudaría en probarse a sí mismo en esa circunstancia. Mientras que, por otro lado, Candy estaba feliz, porque si el socio de Archie la contrataba, sería por sus habilidades contables, su detallado financiero, su agilidad para poner las cosas al día sin ningún problema. Al girar a verlo, notaba que seguía clavando la mirada en la pelinegro a la que ni se habían tomado la decencia de presentarle y la realidad, no podía distraerse de la plática del hombre que le daría empleo si pasaba a revisar su hoja de trabajo.
Anthony un poco alterado por como lo tenía Susan y ella sonriendo por lo que había logrado, bajaba el rostro emocionado por lo que comentaba a Annie, - Querida, me prestas a tu pareja para bailar un poco. Annie soltaba las quijadas, asintiendo y tragando seco, pues Archie estaba molesto y la tenía incomoda por haberse atrevido a ir al evento con su socio. Anthony se cubría y le daba la mano a lo que ella se iba al frente con una sonrisa radiante porque lo había logrado, separar al atractivo rubio de su novia.
Albert al ver que Stear invitaba a Paty, preguntaba distrayendo un poco al notar las quijadas ajustadas de Archie, - ¿Archie, me permites bailar con Candy? - Por supuesto, ella es libre de bailar con quien desee. La respuesta dejaba incrédula a Candy, al notar que no le importaba si bailaba con alguien, lo cierto es que no la giraba a ver para preguntarle siquiera, en sus pensamientos sabía que algo estaba sucediendo y nadie decía nada. Albert bailaba unido a Candy colocando su antebrazo en su espalda baja, logrando que ella estuviera aun más cerca de él, el olor de su loción, y su aliento tan cercano, la dejaba deseosa de seguir ahí, aspirando la mágica sensación de tranquilidad y seducción que sentía, mientras que su novio, al levantarse todos los de la mesa, parecía reclamar y discutir con la joven de vestido turquesa. ¿Quién sería ella? ¿Por qué estaba tan molesto Archie con su presencia? ¿No le importaba que se sintiera atraída por otro hombre, que ahora sería su jefe?
El rubio miraba hacia la mesa, notoriamente había un aire de incomodidad en la pareja, Archie estaba celoso de Anthony y este no sabía su relación con su asistente, giraba a ver a su preciosa pareja la notaba meditativa, luego la ajustaba sintiendo como el roce activaba sus pezones, notándose despiertos y deseosos de ser atendidos, era una mujer sensual y exudaba feromonas de atracción por todo su precioso cuerpo, jamás se había sentido tan atraído por una mujer antes, y lo mejor de todo es que estaría en su oficina el lunes, sería una hermosa sensación tenerla a su lado torturándolo diariamente hasta que cediera la relación incomoda que tenía con Archie y él estaría ahí para ella, porque ese estúpido no se la merecía, le provocaba todo, pero la otra le había dado demasiado y lo tenía comiendo de su mano ahora.
Candy me gusta mucho como bailas las piezas musicales, - No lo hago seguido, eres un bailarín generoso, me llevas al momento que bailas, siento cuales son los pasos que darás. - Me alegro de que te dejes llevar por mí. - Estoy segura de que cuando leas mi hoja de trabajo el lunes, no te arrepentirás de darme la oportunidad de trabajar para ti, no me gusta estar sin empleo, no podía seguir en la ciudad si eso pasa. - No te preocupes, el mismo lunes aun si regresa Maggie, tu serás mi asistente, te lo prometo. - Gracias, esta noche ha sido gratificante desde el instante en que te conocí, había pasado toda esta semana preocupada por no contar con un trabajo estable. - Ya no hay de que preocuparse, ahora em tienes a mí.
Esa ultima frase hizo que Candy enlazara su mirada con la de él, había algo que no le estaban diciendo y Archie tenía algo con esa mujer, por eso él la estaba apoyando, tenía sus palabras cierto toque de consideración directa a su persona. Luego en la pieza musical, la melodía subía la velocidad, sentía su cuerpo muy unido al de ella, ni Archie había bailado jamás así de cercano, vio al joven de la corbata color turquesa, pareja de la joven que estaba con Archie, no le importaba dejarla con él, estaba feliz y sonriente con la rubia hermosa que tenía sus dos manos en su cuello, su vestido con una abertura tan alta, la hacía ver espigada y elegante. Pero su rostro estaba demasiado cerca de él. Por lo que deducía que no era novio de la joven que había dejado en la mesa, y si había una relación con su novio y ella.
Gracias por leer y comentar, por sugerir que adelantemos capítulos y que mejor que quien lee y comenta para pedirlos
continuamos creando Historias de Albert y Candy
Un Abrazo A la Distancia
Mayra Exitosa
