Hola chicos. Espero que estén bastante bien. Hoy les traigo uno nuevo capítulo de este bello fanfic.

Regalo de Kotori

(Shidou and Ellen)

Ellen estaba agotada, no podía caminar entre todas las calles de la ciudad de Tengu. Había accedido a salir con Shidou y Yoshino, pero la pequeña quería hacer muchas actividades para los tres que la agotaban más que una sesión de entrenamiento con Mana.

Ya hace tiempo que había tenido su cita con Shidou; recorrieron las calles y miraron una película de estreno siempre cuidados por las chicas. En ese momento, iban a un ritmo tranquilo, pero con la pequeña chica espíritu eso cambiaba.

—Shidou, me duelen los pies—se quejó ella mientras tomaba a Shidou del brazo—. ¿Por qué debemos hacer esto? ¿No iba a salir con Kurumi a comprar un pastel para Tohka?

—Te dije no te pusieras los tacones—respondió Shidou mientras veía como la mayor entrecerraba los ojos molesta—. Además, Kurumi está preparando la cena con Mana para celebrar el cumpleaños de Kotori.

Había olvidado por completo el cumpleaños de la hermana de Shidou. Tohka se lo había comentado hace unos días, pero hasta ahora recordó gracias a su «amigo».

Yoshino estaba muy entusiasmada, era evidente que esperaba la fiesta. Habían visitado varias tiendas, pero no para comprar algo para ella, sino para encontrar el regalo perfecto para la chica que les concedió un lugar al cuál llamar hogar.

—Ahora lo entiendo, Itsuka Shidou—comentó Ellen con cierta alegría—. Kotori es especial para ti, para todas; no solo es una comandante que sabe dirigir a los suyos, sino que también es la hermana y amiga que los apoya para seguir adelante.

Shidou estaba impresionado por lo que su antigua enemiga dijo.

—Fufu, no olvides que fue Kotori quien te dio permiso de dormir con Shidou-kun cuando tú preciado Ike te rechazó—la marioneta de Yoshino había hablado tocando un tema que molestaba a Ellen quien estaba usando su Territorio para intimidarla—. Shidou-kun, protege a tu novia Yoshino de esta maga..

—Yoshinon, te lo mereces—dijo Yoshino mientras se quitaba su marioneta con un poco de vergüenza para dársela a Ellen—. T-Ten.

—Gracias.

Ellen no iba a hacerle cosas imperdonables a Yoshinon, solo le daría unos golpes para que aprendiera su lección. Era raro, pero cuando dio las múltiples cachetadas al títere se sintió más tranquila.

Después de la paliza a Yoshinon, quien expresaba su molestia a su compañera, al fin llegaron a la última tienda por ver en su recorrido. Ellen no sabía porqué, pero era una tienda de dulces que parecía ser muy costosa, algo que no iba con ellos.

En ese momento Shidou sacó un fajo de billetes de alta denominación. Era muy, pero muy raro ver qué hiciera esto e incluso temió que se tratara de algo más. Estaba dudando de esto, pero tan pronto entró, se dio cuenta de que el encargado del lugar ya lo esperaba. Fue entonces que vio el regalo, una marca de paletas tradicionales muy costosas elaboradas a mano.

—¿Este es el regalo que ella desea? —preguntó con duda Ellen.

—E-Es lo que ella necesita—expresó Yoshino quien se paró de puntas y le dio un beso a Ellen en la mejilla—. Gracias por venir.

Ellen quedó impresionada por la acción de la pequeña. Sabía bien que esto no era algo propio de ella, sino del chico; pero esa calidez que sintió se asemejaba a la que el joven Itsuka podía otorgar.

—Gracias por acompañarnos, Ellen-san—agradeció Shidou quien notó la mirada de Ellen la cual se parecía a aquella que hace Tohka cuando se enfada—. ¿Sucede algo?

—Idiota—soltó ella, parándose con la punta de sus pies para así alcanzar al chico y darle un pequeño beso en su mejilla—. Ya vámonos.

Shidou se quedó totalmente atónito por lo que sucedió. Ni siquiera la marioneta de Yoshino hizo comentario alguno. Tan pronto vieron que Ellen se perdía entre las calles, comenzaron a seguirla para así regresar juntos a casa.

«Eres un tonto, Itsuka Shidou »