N/A: Hace tiempo que salió esta recompensa y se me olvidó por completo subir el capítulo. Pido perdón por la tardanza, espero que os guste este capítulo.

Disclaimer: aún sigo buscando ese disclaimer divertido y original que diga que no soy Oda.


Quinta recompensa


Las noticias sobre Doflamingo se sucedían sin parar en el periódico.

La primera había sido su dimisión como miembro de los Sichibukai. Días después el mismo periódico había desmentido la noticia. Y ahora había un artículo que explicaba con todo lujo de detalles qué había pasado en los último años en la isla de Dresrossa.

Algo bastante parecido a lo que pasó con Arabasta hace dos años.

A Marco no le sorprendió en absoluto que fuera la misma banda de piratas la que hubiera desmantelado toda la operación clandestina. Vista había hecho un chiste al respecto, diciendo que todas las organizaciones clandestinas y que iban en contra de los derechos humanos podían darse por perdidas si la banda de los Mugiwara llegaba a su costa.

Sólo dos días después llegó el periódico que él estaba esperando. El que seguramente traería las recompensas de la banda y sus aliados.

El Den den mushi sonó a la hora acordada. Marco descolgó sin haber abierto el periódico si quiera.

–¿¡Lo habéis visto!?–exclamó la voz de Izo en cuanto descolgó.

Varios gruñidos se sucedieron a la pregunta y Marco supuso que a nadie le había dado tiempo a abrir el periódico antes de que Izo se pusiera a llamar a todo el mundo.

Marco dejó el Den den mushi en la mesa y sacudió el periódico. Los diferentes artículos ensalzando las virtudes de los Marines ya lo leería con calma, lo que le interesaba eran las recompensas.

¡Y qué recompensas!

La de Luffy había subido a 500.000.000 berries.

Pero las de los demás no estaban nada mal. Zoro: 320.000.000. Robin: 130.000.000. Franky: 94.000.000.

–¿Porqué "God Usopp"?–preguntó Haruta.

–Al parecer Doflamingo ofreció recompensas por las cabezas de lo que se sublevaron. Y el al Usopp fue el que más le cabreó–explicó Jozu.

–¿Entonces Usopp es el verdadero nombre de Sogeking? No le veo por ninguna parte.

Marco buscó entre las recompensas. Efectivamente God Usopp contaba con una recompensa de 200.00.00 berries, pero no había rastro de Sogeking.

–¿Y el cartel de Soul King? ¡Es el del concierto que iba a dar en Sabaody!

–¿No es el poster que te llevaste porque te hacía gracia Jozu?–preguntó Curiel.

–¡El mismo! ¿Verdad que es genial? Creo que es el poster más original que he visto.

–Yo prefiero el de Nami–dijo Namur.

Investigando acerca de los piratas de Mugiwara, habían descubierto la triste historia de Nami. Y Namur se había tomado como un insulto que alguien de los suyos tratara tan mal a los humanos. Así la convivencia entre las dos especies, no se realizaría jamás.

Después de los estragos en la isla Gyojin, Namur había viajado a ayudar. Se había encontrado con Jimbei y habían hablado de la banda. Jimbei le había contado que Nami no culpaba a los gyojin de su vida, solo a Arlong. Y que se había desvivido por salvar y proteger la isla.

Desde entonces Namur le había cogido un cariño especial a la pirata. Algunos se metían con él y decían que se había enamorado. Otros le animaban a presentarse ante la muchacha y le confesara su admiración y respeto.

–66.000.000 berries. Poco a poco la muchacha se va haciendo fuerte.

–Yo de ti tendría cuidado Namur, he visto como se las gasta esa chica. Si te declaras en un mal día, te freirá y te lanzará por la borda sin pensárselo dos veces.

Izo y Haruta ahogaron una risa. Marco se los imaginó, llevándose la mano a la boca para disimular aunque fuera un poco. Ellos habían sido los que más el habían tomando el pelo.

–¡El que ya ha conseguido tener tres cifras es el reno!–dijo Vista.–100 berries.

Se sucedieron una serie de aplausos. El más pequeño de la tripulación estaba poniéndose a la altura de los demás.

–Oíd chicos, ¿la recompensa de Sanji no es un poco rara?

Marco bajó la vista y vio el cartel. Por fin le habían conseguido quitar ese dibujo mal hecho y le habían sacado una foto de verdad. En la que quedaba claro que el hombre era un mujeriego redomado. Su recompensa había subido a 177.000.000 berries.

Pero Blenheim tenía razón. Era el único de la tripulación que tenía las palabras "solo vivo" en su recompensa.

–No me gusta un pelo–dijo Marco.

–¿Crees que el chico oculta algo?–preguntó Izo.

–No lo sé, pero no estaría de más investigar algo al respecto.

Se hizo el silencio. Todos esperando a que alguien se ofreciera voluntario. Marco se los podía imaginar perfectamente, como cuando estaban en el barco. Todos apartando la mirada hacia otro lado: el cielo, la cubierta, sus armas. Ahora que no se veían lo tenían más fácil, aunque el silencio se hacía más pesado.

–Está bieeeeeeen. Ya que yo me he dado cuenta, seré yo el que le eche un vistazo–dijo Blenheim.

Marco sonrió. A pesar de no ser ya la tripulación que habían sido, la familiaridad y el instinto de protección seguía muy arraigado en ellos. La muerte de Ace, de Shirohige y la derrota ante Kurohige les había hecho caer en desgracia. Pero por mucho que hubieran fallado en los últimos años, en lo que no pensaban fallar era en la protección del hermano pequeño de Ace.


¿Y bien? ¿Qué pensáis que pasa con el cartel de Sanji? e.e