Senku 5 años y 6 meses
Si uno de sus dos tutores no podía ir a recogerlo a la salida de la escuela se arreglaba fácilmente con enviar un auto militar que lo llevaría directamente hacía el edificio donde vivía y el soldado de turno no se iría hasta que llegara Xeno o Stanley.
Exagerados. Sus dos tutores eran unos sobreprotectores, pero sabía que lo hacían por su bien, aunque él lo odiara.
Ese viernes durante el desayuno matutino, Stanley le había dicho que iría uno de esos benditos autos blindados a recogerlo y por primera vez lo agradecía puesto que cuando llegó en la mañana a su sala de clases se encontró a la Leona.
—¡Senku! Mira .-la pequeña rubia se acercó corriendo a su amigo alzando el brazo que en algún momento estuvo enyesado-. ¡Ayer después de clases me quitaron el yeso!
—Ah, felicidades Leona .-desde que se conocieron, la niña no había dejado de hablarle incluso, había veces en que se quedaba con él durante el receso leyendo libros, libros que él tenía que explicarle su contenido.
—¡Si! Ya me siento mejor .-sonrió mientras se sentaba en el puesto delante del pequeño genio como lo apodaron los maestros-. ¿Sabes qué significa?
—¿Qué debes tener más cuidado?
—¡No Cebollín! .-infló las mejillas cruzando los brazos-.¡Significa que ya puedes ir a mi casa!
—Ah .-se había olvidado completamente de la invitación a cenar de la niñ gracias .-no, no podía ir con ella o sino las malditas bromas de Snyder seguirán.
—¡¿Por qué no?! ¡Dijiste que irías!
—Si, pero... .-tragó algo de saliva dudando, seguramente si Xeno se enteraba de lo que diría ahora sería castigado-. Xeno no quiso ir y Stanley sigue todo lo que diga él...
—¿Eeeh? ¿Por qué? .-hizo un puchero puesto que se había decepcionado con esa respuesta-. ¿Y no hay nada que puedas hacer para ir? De verdad quiero que conozcas a mi hermana...
Uy con la niña. Aunque se sintió mal por mentirle, pero prefería eso a seguir escuchando todas las burlas de Stanley, además, estaba diez billones por ciento seguro que de conocer a esa Leona Xeno se uniría a esas burlas.
—No, lo siento.
Después de escuchar un suspiró decepcionado y un par de reclamos más, Kohaku se dio un tanto por vencida, de verdad quería que su nuevo amigo conociera a su hermana mayor.
Al finalizar la jornada escolar, Senku se dirigió tranquilamente hacia la salida y no como otros días donde salía corriendo para evitar que Stanley se encontrará con Kohaku o incluso que Xeno llegará a conocerla. Definitivamente eso era el peor escenario posible en su mente.
Grande fue su sorpresa al encontrarse al joven científico esperándolo frente al portón de la escuela.
—¡¿Qué haces tú aquí?! .-comenzó a mirar hacia todos lados nervioso para asegurarse de que la rubia no estuviera cerca.
—Se saluda a la gente primero, Senku .-Xeno frunció el ceño mientras lo regañaba, pero al notarlo nervioso su mirada se relajó levemente-. ¿Qué sucede?
—¡Nada! .-tomó a su mentor de la mano para tratar de jalarlo-. ¡Vamos! ¿Dónde tienes el auto?
—¿Qué demonios te pasa hoy, mocoso? .-ni se inmuto, quedándose quieto en su sitio-. ¿Por qué tanta prisa?
—¡Quiero llegar rápido a casa! .-trato de jalarlo con más fuerzas, inútil porque su peor escenario se hizo realidad ¡¿Por qué no calculo esa pequeña variante?!
—¡SENKU! .-Kohaku llegó corriendo hacía donde vio al niño junto al hombre que intuyó era su tutor porque no era ninguno de esos tipos con uniforme militar que a veces iban por él-. ¡Oye!
—Mierda .-estaba en problemas, en SERIOS problemas.
—Lenguaje .-Xeno alzó la ceja para girarse a notar a la pequeña niña rubia con una coleta que hacía que su cabello se viera como una melena-. Oye mocoso, ¿Ella es tu amiga de la que habla Stanley?
—¡No es mi amiga! .-dejo de jalar la mano sintiéndose nervioso por ser atrapado.
—¡Si somos amigos! .-le sacó la lengua al estúpido niño cebolla ¿Por qué siempre la negaba? Recordó un poco de lo que le había dicho su hermana mayor sobre las presentaciones con adultos y extendió la mano-. ¡Hola, señor! ¡Me llamo Yamaha Kohaku! Soy amiga de Senku.
—Vaya, hola .-tomó la mano de la niña divertido por la forma en que lo saludó-. Soy el Doctor Xeno Houston, el tutor de Senku. Un gusto conocerte Kohaku.
—¡Lo mismo digo Doctor Xeno! .-sonrió mientras alejaba la mano que noto algo áspera, después preguntaría por qué.
—Listo, ya se conocieron .-hizo un nuevo intento de jalar a su tutor, esta vez del abrigo-. ¡Ya nos podemos ir! ¡Nos vemos Leona!
—Senku, modales .-nuevamente frunció el ceño, pero esta vez entendió un poco del porque quería irse tan rápido.
—Disculpe Doctor Xeno .-se acercó a tomar el otro extremo del abrigo jalándolo para tener atención del nombrado-. ¿Por qué no quiere ir a mi casa? Mi papá no es tan enojón si es que eso le dijo Senku, ¿Por qué no quiere ir?
—¿Ah? .-alzó la ceja viendo a la niña curioso.
—¡Si! Es que verá .-aclaró su garganta tratando de que su voz no sonara tan infantil-. Hace unos dos meses me lastimé el brazo ¡Pero ahora está como nuevo! .-movió el brazo izquierdo dando golpes al aire-. ¿Ve? Eso es porque Senku y el señor Stanley me llevaron al hospital, y después yo llame a Senku para decirle que cuando me saquen el yeso él, el señor Stanley y usted estaban invitados a cenar a mi casa para agradecerles ¡Y Senku me dijo que sí! Pero ahora me dijo que usted no quería ir, así que por eso le estoy preguntando de porque no quiere ir a mi casa .-terminó su relato mientras su mirada se volvía algo triste.
—Así que Senku te dijo eso... .-vio al niño de reojo solo para notar que se rascaba el oído tratando de disimular que había sido atrapado en la mentira-. Verá señorita Kohaku, eso era porque tenía demasiado trabajo .-sonrió mientras tomaba a su mocoso por los hombros para acercarlo-. Pero ya me desocupé, así que cuando quiera invitarnos estaremos encantados de asistir.
—¡¿En serio?! .-su mirada ahora se iluminó ¡Por fin su amigo conocería a su hermana! .-¡Pueden ir mañana a la noche! ¡La señora Turquoise cocina excelente! .-ahora dirigió la mirada hacia el niño sonriendo-. ¡Te dije que si le decía yo podías ir!
—Si... Qué bueno .-sentía que estaba sudando frío gracias a la mano que estaba presionando su hombro. Iba a ser castigado, al diez billones por ciento seguro que lo dejarían sin poder ocupar el telescopio junto a la computadora por un mes entero.
—Entonces mañana a la noche estaremos en tu casa ¿Podrías pedirle a tu padre que le mande la dirección a Stanley?
—¡Claro! .-asintió energéticamente, de verdad estaba demasiado feliz-. ¡Ya me tengo que ir! El señor Jasper ya había llegado a recogerme. ¡Nos vemos mañana en la noche Senku! ¡Hasta mañana en la noche Doctor! .-se alejó de allí corriendo para ir con el chofer de su casa, porque si no se ganaría un regaño por parte de su padre.
Cuando Xeno se aseguró de que la niña se encontrara con su el hombre que supuso era quien la recogía tomó la mano de Senku para dirigirse a su auto.
—Creo que necesito recordar cuando dije que no quería ir a la cena con tu amiga.
—¡Que no es mi amiga! .-gruño mientras caminaba a la par de su tutor-. ¿Lo siento?
—No vas a ocupar ni la computadora ni el telescopio por dos semanas.
Creyó que oiría reclamos, pero nada. El mocoso se quedó tranquilo mientras llegaban al auto, donde ya le preguntó qué tal estuvo su día y hablaban sobre de su nuevo proyecto en el trabajo.
Aunque ahora entendía porque Stanley molestaba tanto al niño, la rubia era totalmente adorable incluso para él, además que fue algo impresionante ver a su mocoso interactuar de esa manera con alguien de su edad, no era la típica mirada seria de siempre o el tono de voz ligeramente cortante, algo de especial debía tener la rubia.
Stanley llegó agotado al departamento, en serio que odiaba el papeleo que no hizo más que aumentar desde su ascenso, él era un militar de acción. No estaba entrenado para estar enfrascado leyendo y firmando todo tipo de estupideces. Apenas su mocoso tuviera vacaciones en la escuela él también las pediría y obligaría a Xeno a hacer lo mismo.
Después de darse una ducha rápida y cambiar el bendito uniforme por algo más cómodo, se sentó en el sillón para pedir algo de comer ¿Quizás una pizza? Era más fácil que esperar a que Xeno cocine algo. Al diablo, lo iba a hacer.
Justo después de terminar el pedido un mensaje llegó a su celular con el nombre de "Japonés Irritante"
"Buenas noches Snyder, adjunto la dirección de mi casa para que puedan asistir a la cena de mañana a las 20 hrs."
Alzó la ceja y tecleo un rápido ok ¿Así que por fin le habían quitado el yeso a la mocosa rubia? Bien, apenas llegara el mocoso lo molestaría.
No pasó mucho tiempo con ese pensamiento cuando la puerta del departamento se abrió.
—¡Ya llegué! .-Senku entró corriendo al departamento mientras cargaba una pequeña bolsa con víveres, la cual fue directo a dejar sobre la mesa de la cocina.
—No corras que te vas a caer .-Xeno suspiró mientras cerraba la puerta para encaminarse a dejar las demás bolsas a la cocina-. Hola Stan.
—Bienvenidos .-se levantó de su cómodo asiento para dirigirse a hacia su pareja y poder darle un beso en modo de saludo.
—¡Oye yo también estoy aquí! .-el niño reclamó mientras hacía una cara de asco ante el momento cursi de sus tutores.
—¿Qué? ¿También quieres uno mocoso? .-Stanley se agacho para morder la mejilla del niño que lo alejó de un manotazo.
—¡Aléjate de mí!
—¿En serio no quieres uno? .-Xeno se acercó a morder la otra mejilla del niño, recibiendo un manotazo de igual manera. Solo se unió para molestar.
—¡Alejen sus babas de mí! .-se limpió las mejillas mientras hacía una mueca de asco.
Xeno negó divertido mientras se disponía a acomodar las compras, pasaron al supermercado junto a Senku solo por lo más importante, pero ambos terminaron comprando más de la cuenta cuando encontraron todo tipo de cosas con las que podían hacer pequeños experimentos en casa.
—Que aburrido mocoso, ya ve a cambiarte ese uniforme.
—No es necesario que me digas lo obvio .-le sacó la lengua al militar mientras se dirigía su habitación.
—¡Mañana iremos a casa de tu amiga Leona! ¡Ya tengo la dirección! .-grito divertido mientras escuchaba como el niño aumentaba la velocidad del paso gritando un "No es mi amiga" como de costumbre-. Ah, el japones ese me envió la dirección de su casa para ir a cenar,
—Ya sé, conocí a la niña hoy .-abrió la puerta de la despensa para guardar unos tarros de conserva-. Senku está castigado sin usar la computadora o Tablet.
—¿Qué hizo? .-eso lo sorprendió, muy pocas veces habían castigado al niño.
—Le dijo a Kohaku que yo me había negado a ir a su casa .-terminó de acomodar las cosas para dirigirse a la sala y sentarse en el sillón, seguido por Stanley que se sentó junto a él-. Son dos semanas de castigo.
—Eso es nuevo .-quiso reír, pero sintió la mirada de desaprobación de Xeno-. Digo, que mal.
—Sí .-suspiró mientras cruzaba la pierna recargándose un poco en el hombro del militar-. Así que... ¿A qué hora mañana?
—A las ocho de la noche .-pasó el brazo por sobre los hombros de Xeno para atraerlo más hacia él-. Aunque no tengo ganas de verle la cara a ese tipo, iré si con eso puedo seguir burlándome del mocoso.
—Es extraño, al parecer puede convivir bien con la niña esa .-se tomó la barbilla pensando en la actitud de Senku, le hizo recordar a cuando sus padres estaban con vida.
—Deja de darle vueltas, no los has visto convivir del todo .-alzo los hombros provocando que la cabeza de Xeno se golpeará leve, recibiendo una mirada mesta de su parte-. Lo siento. Ah, pedí pizza para la cena.
—Quería hacer una receta nueva .-su ceño se frunció aún más viendo a su pareja y ahora cruzándose de brazos.
—Deja de verme así que te saldrán arrugas .-se acercó a besar la frente de Xeno quien simplemente bufó.
—¡Escuche pizza! .-Senku volvió a aparecer por el pasillo sonriendo después de escuchar lo que comerían.
—Si mocoso .-giró su cabeza para ver al niño quien se acercaba a ambos adultos-. Ah cierto, mi parte del castigo es que saldremos a trotar mañana por la mañana.
—¡¿Eh?! .-desde hace algún tiempo Stanley lo sacaba a hacer todo tipo de actividades físicas que odiaba. ¡Cualquier cosa física no era su fuerte!-. ¡Pero si Xeno ya me castigo!
—Es bueno que salgas, a ver si tú rendimiento físico mejora. .-alzó los hombros levantándose del sillón para poder tener la mesa lista cuando llegará la comida.
—Ya gané mocoso .-le saco la lengua a Senku de la misma forma en que él lo hacía.
—¡Demonios!
No demoró mucho tiempo más en que su cena llegará y se dispusieron a cenar hablando de su día, Stanley mencionó el tema de las vacaciones que, aunque a Xeno no parecía del todo convencido sabía que Stan tendría su manera de hacerlo caer.
Y como dijo Stanley, a las siete en punto de la mañana salió a trotar junto a Senku que pedía descanso cada tanto, no sabía de donde había nacido el hecho de que Stanley lo sacará a correr tantos fines de semana, pero si lo llegaba a descubrir estaba seguro de que trataría de eliminar el inconveniente de raíz.
Para mala suerte del pequeño científico al volver al departamento Stanley lo hizo subir por las escaleras ¡Vivían casi en el último piso! Pero se vengaría, de alguna manera se iba a vengar cuando recuperara el aliento.
Para el resto del día Senku se dedicó a hacer sus deberes de escuela, leer uno de los libros que Xeno recientemente le había regalado.
Ya cerca de la hora de salida Xeno lo mandó a ponerse una ropa mucho más "Elegante" para conocer a la familia de la Leona y Stanley trato de arreglar su cabello de manera que quedará menos levantado, fallando en el intento.
—Me siento enfermo .-habló el niño desde la parte trasera del auto.
—Yo también ocupe esa excusa mocoso, aunque era más que nada para no asistir a clases .-el conductor designado nuevamente era Stanley porque había insistido nuevamente en que Xeno debía fijarse de la seguridad de su mocoso.
—Senku, es solo una cena de agradecimiento .-Xeno giro la mirada desde el asiento del copiloto solo para ver la cara de fastidio de Senku.
Al final no pudo reclamar más puesto que llegaron a su destino, se bajó del auto de mala gano mientras cargaba un ramo de flores que Stanley lo había obligado a llevar y Xeno un recipiente con una tarta de mora que habían hecho entre los tres.
Tocaron el timbre de la casa que fue abierto por una señora que Senku cálculo tendría la edad del padre de la Leona.
—Bienvenidos, pasen por favor .-la señora se hizo a un lado para dejar entrar a los invitados-. El señor Kokuyo vendrá en unos momentos.
Antes de que Xeno pudiera agradecer Kohaku apareció corriendo en el pasillo directo hacía Senku y sus tutores.
—¡SENKU! .-la pequeña rubia sonrió mientras hacía una reverencia como su padre le había dicho que debía saludar a los llegados-. ¡Hola! .-dirigió su vista a los hombres detrás de su amigo quienes le sonreían-. ¡Hola Señor Stanley! ¡Hola Doctor Xeno! Me alegro de que hayan podido venir.
—Gracias por la invitación señorita Kohaku .-Xeno sonrío mientras con una mano empujaba nada disimuladamente a su mocoso-. Es un gusto volver a verla.
—Hola Kohaku .-de la misma manera que Xeno empujo levemente a Senku para que se acercará a la niña-. Gracias por la invitación.
—Ya entendí .-el niño bufó mientras estiraba el ramo de flores hacia la niña-. Felicidades por tu recuperación. Aviso que esta cosa fue idea de estos dos atrás de mí.
Ambos hombres quisieron golpearse la frente ante la nada amable actitud de su mocoso. Stanley simplemente le pellizcó la mejilla al niño, ganándose una mirada de enojo por parte de este.
—¡Auch!
—Ah, gracias .-Kohaku tomó las flores e hizo un leve mueca-. Aunque no me gustan las flores, hubieras traído otra cosa.
—¡Señorita Kohaku! .-Turquoise, la ama de llaves de esa casa llamó la atención de la pequeña-. ¡Esa no es manera de agradecer el regalo de su amigo!
—¡Pero si es verdad! .-infló las mejillas para alzar los hombros. A ella no le gustaban las flores, aunque fueran bonitas.
—De hecho, Xeno trajo una tarta de moras, para saciar tu apetito Leona ¡Auch! .-chilló al sentir otro pellizco de parte de Stanley-. ¡Ya para!
Xeno simplemente acercó la tarta a la ama de llaves quien aceptó gustosa para volver a la cocina. Kohaku guío a los tres hombres hacía la sala, donde estaba su hermana mayor junto a su padre.
—¡Senku! .-jalo el brazo de su amigo para correr con él hacia el sillón donde se encontraba su hermana-. ¡Te presento a mi hermana mayor! Ruri, él es Senku. Senku, ella es Ruri.
Ruri era unos centímetros más alta que ambos niños y se veía mucho más delicada que su hermana, casi les daba un aire angelical para ambos adultos quienes ya estaban un poco cautivados por la ternura de la rubia menor.
—Es un gusto conocerlos .-Ruri hizo una reverencia mientras se acercaba a los llegados-. Soy Ruri, la hermana mayor de Kohaku. Espero se sientan cómodos.
—Que elegancia señorita Ruri .-se acercó a saludar a la niña estirando la mano para un apretón-. Soy el Doctor Xeno Houston, el tutor de Senku
—Un gusto .-si, aunque la niña fuera muy linda y todo. Las reverencias eran una cosa que lo irritaba-. Stanley Snyder.
Inmediatamente el padre de las niñas se acercó a ambos hombres para saludar.
—Snyder, es un gusto volver a verlo .-estrecho la mano del militar algo nervioso puesto que Stanley no lo veía nada contento.
—Si, claro .-el de las teorías era Xeno, pero él tenía la suya propia y era momento de comprobarla-. Este es el Doctor Xeno. Mi pareja.
Senku quien estaba siendo interrogado sobre tonterías por Kohaku puso atención a la cara del rubio hombre. Tanto él como Stanley estaban muy al pendiente de lo que pasaría por la presentación del científico, si el japonés resultaba ser homofóbico se irían antes de siquiera comenzar a comer.
—Un gusto Doctor, he leído muchas de sus investigaciones... Aunque no entiendo mucho .-rio ante su propio comentario mientras estrechaba la mano del científico.
—Gracias por la invitación señor Yamaha .-le lanzó una mirada a Stanley que se entendía como un "exagerado" a lo que el militar solo bufó.
—¡Gracias al Señor Snyder y su pupilo! Por ellos mi hija menor no terminó peor.
—¡Papá! .-Kohaku inflo las mejillas mientras se dirigía hacía el nombrado-. Ya te dije que fue un accidente.
—Un accidente totalmente ilógico .-Senku susurró, pero fue escuchado por Ruri quien simplemente negó divertida.
Terminando con las presentaciones se dirigieron al salón para poder disfrutar de la comida preparada.
Ramen ¿Por qué? Porque Kohaku había insistido en que había escuchado de su amigo que adoraba este platillo y ella estaba segura que lo disfrutaría más por ser preparada por verdaderas manos japonesas y pues Senku disfruto del platillo, verdaderamente era algo que extrañaba de Japón a diferencia de la réplica que consumía de vez en cuando junto a sus mentores, quienes simplemente estaban divertidos por la ocurrencia de la rubia menor, aunque Xeno pensará que no fue buena idea elegir una tarta de moras para el postre.
Al terminar la cena los adultos se dirigieron a la sala para conversar un poco mientras los pequeños se dirigían al cuarto de Kohaku ya que la pequeña Leona había insistido en mostrarle su habitación a su amigo.
—Este es mi cuarto .-jalo le la muñeca a Senku quien se mantuvo serio la mayor parte de la velada.
—Tienes demasiados trofeos... .-Senku se mantuvo mirando a la estantería llena de trofeos y medallas, la mayoría de artes marciales mixtas.
—Kohaku participa en varias actividades, aunque mi padre no esté del todo contento con eso la deja. Es una forma de que gaste energía .-siendo sincera Ruri se sentía algo nerviosa en compañía del niño por su seriedad.
—¡Sip! Aunque solo participó de torneos infantiles por mi edad .-alzó los hombros mientras se sentaba en la cama-. ¡Ruri también tiene! Pero son todos sobre literatura y esas cosas.
—¿Escribes? .-preguntó por curioso y se giró a ver a la mayor quien se sonrojo un poco gracias a su hermana.
—Eeeh... Sí, algunas historias... No son muy buenas.
—¡Eso es mentira! .-golpeo su cama para luego sentarse en posición india-. Ruri es excelente escribiendo cuentos e historias. Todo es gracias a mamá.
Un silencio se produjo gracias a la mención de la madre de ambas, Senku había escuchado de Kohaku que esta había fallecido cuando ella aún era bebé, pero suponía que su hermana mayor era más consciente de extrañarla puesto que compartía más con ella.
Y pues la cena le había recordado a sus padres, aunque no lo demostrará frente a desconocidos él seguía extrañando a su papá y mamá.
—Ah.
—¡Ya sé! .-se levantó de la cama y se acercó a su hermana-. Hermana, léenos una de tus historias ¡Así el cebollín me cree!
—No soy un cebollín, Leona .-hurgó en su oído despreocupado mientras se acercaba a la cama para sentarse sobre ella-. Escucharé.
Aunque Ruri no estaba del todo convencida puesto que la mayoría de sus escritos eran relatos cortos terminó accediendo a la petición de su hermana y el amigo de está, así que se dirigió a su propio cuarto para buscar su cuaderno y a la vuelta se sentó en la cama teniendo a Senku del lado derecho y a Kohaku del izquierdo, así que se dispuso a leer.
Xeno estaba fascinado con Kokuyo, y eso era solo porque el hombre era dueño de una minera realmente gigantesca, teniendo varias minas.
—¡Que elegante! Señor Yamaha, fascinante.
—Ya le dije qué puede decirme Kokuyo .-se fijó en que Stanley no lo estaba mirando nada bien, ese hombre le ponía los pelos de puntas.
—Sí, elegante .-bufó mientras tomaba un trago de su copa de vino, ahora el conductor designado tendría que ser Xeno.
—Me parece curioso que aún después de vivir en Japón toda su vida haya decidido mudar a Estados Unidos ¿A qué se debe? .-sintió la mirada de Stanley a su lado, era una mala mirada. Estúpido militar celoso por cosas que no tenían sentido.
—Verá Doctor, mi esposa falleció cuando Kohaku apenas era una bebé de un año y medio, por ese entonces mi situación no era como la de ahora y para variar mi hija mayor Ruri estaba enferma, decidí que lo mejor sería mudarme a Estados Unidos para curar su enfermedad y poder darles un futuro mejor a mis niñas .-sonrío con un deje de tristeza en su mirada mientras veía su copa de vino-. Por eso estoy tan agradecido del señor Snyder, comprendo que quizás esa torcedura o fractura no era mucho, pero pase un susto. Kohaku siempre ha sido demasiado activa y me cuesta un poco entenderla... Somos igual de tercos.
En otro tiempo, Xeno habría sentido repulsión por toda esa expresión de sentimientos, pero desde el incidente que marcó su vida y carrera ya no se sentía tan así, quizás todo se debía a todo lo que la familia Ishigami hizo en su ser.
—Comprendo .-Stanley habló, cosa que sorprendió a ambos hombres presentes-. Creo que si el mocoso enfermera de esa manera también agarra todas mis cosas y viajaría a un país donde tengan la solución. Tus hijas deben estar agradecidas de ti supongo.
Eso sorprendió a Xeno, se había olvidado por un momento que no solo él fue cautivado por la familia Ishigami, sino que Stanley también convivió mucho con ellos y por eso también se vio afectado por la muerte de los esposos, siempre creyó que sus sentimientos hacía Senku eran influenciados por la promesa que le hizo a Lillian, que equivocado estaba.
—Su hijo también debe de estar agradecido .-Kokuyo nuevamente habló, llamando la atención del científico-. Sé lo que les pasó a sus padres biológicos, pero en el tiempo que Kohaku lleva conociendo a Senku ella siempre habla de cómo él los admira, estoy seguro de que los considera su familia.
No. Eso no, ellos no eran sus padres, él jamás iba a reemplazar el cariño que Byakuya le entregaba a su hijo, nunca podría acercarse siquiera a ello, jamás pasaría por su mente ocupar ese lugar.
—No somos sus padres .-frunció el ceño, él no era Byakuya, él no era Lillian, ellos no eran una familia.
Antes de que Stanley o Kokuyo pudiera contradecirlo, Ruri entró a la sala con una mirada somnolienta.
—Disculpen... .-froto un poco su ojo acercándose a los hombres-. Kohaku y Senku se durmieron, los tape con una manta.
—Gracias señorita Ruri .-Xeno se levantó para acercarse a la niña-. ¿Podrías mostrarme el camino? Creo que ya es hora de irnos, Stanley.
—Claro, venga conmigo.
Xeno junto a Ruri se retiraron hacía el segundo piso de la casa para que este fuera en busca del niño.
Kokuyo sintió el ambiente pesado y frunció un poco el ceño para ver a Stanley, quien tenía la vista fija por donde se había retirado su pareja, en el rostro del militar reflejaba algo de molestia.
—Disculpé si dije algo que no debía .-creyó que debía disculparse.
—No te preocupes Yamaha, no hay necesidad.
Cuando Xeno tomó en brazos a Senku este se abrazó a su cuello, pero sin despertarse, estaba profundamente dormido y con una leve sonrisa en el rostro, bajo al primer piso en compañía de la rubia para así despedirse del dueño de casa.
—Gracias por la invitación.
—No hay de qué. Espero algún día se repita sin necesidad de que mi hija menor se lastime .-hizo una reverencia hacia el militar-. Nuevamente, gracias por todo señor Snyder.
—Ya para con eso .-bufó mientras era observado de mala gana por su pareja, pero era él quien estaba un poco molesto-. Ya estamos a mano, espero que tu hija y el mocoso se hagan buenos amigos.
—Espero lo mismo.
Y así se despidieron de la familia japonesa, aunque Stanley hubiera querido despedirse de Kohaku puesto que le caía bien.
Durante el camino el conductor designado fue Xeno y Stanley se sentó en el asiento trasero con la cabeza del mocoso recostada en sus piernas, no habían traído la silla puesto que no creyeron quedarse más de lo necesario.
Al llegar al departamento Stanley vistió, recostó y arropo a Senku solo, Xeno se había excusado diciendo que necesitaba revisar unos planos de un prototipo nuevo de cohete que quería entregar a primera hora del lunes y aprovecharía todo lo que pudiera para terminarlo.
—Xeno.
—Ve a la cama, estoy ocupado .-su vista estaba fija en los planos, revisando que las proporciones a escala fueran las correctas.
—Lo que dijo el japonés no fue en mal sentido, lo sabes.
—Sí, lo sé Snyder. Ahora por favor déjame trabajar.
Escucho como Stanley gruñía y sus pasos se alejaban de la cocina, ya cuando escuchó un portazo del cuarto que compartían suspiró.
Su vista se centró en la terraza, las cortinas estaban abiertas así que podía observar un poco el cielo nocturno, su mente no dejaba de repetir las palabras que Kokuyo había mencionado.
—No somos una familia .-pensaba mientras se levantaba y caminaba a la terraza-. Jamás ocuparé el lugar del idiota de Byakuya.
Byakuya acariciaba la cabeza de un pequeño Senku de tan solo dos años, durmiendo en los brazos de su padre.
—No entiendo cómo se les ocurrió procrear cuando pasan la mayor parte del tiempo lejos .-un más joven Xeno estaba sentado junto a Byakuya mientras estaban a las afueras de la ciudad.
—¡Que mal humorado eres Xeno! .-Byakuya negó divertido mientras acurrucaba más a su hijo. Había decido mostrarle el cielo nocturno de aquel país a su pequeño e invitó a uno de sus nuevos amigos, aburrido de Xeno-. Las cosas pasaron simplemente y ahora tengo a este pequeño genio conmigo.
—Un mocoso que podría sufrir hipotermia de no ser por tu obsesión de traerlo aquí. Lillian te matará si se llega a enfermar.
—Posiblemente .-besó la frente del niño quien fruncía el ceño aún dormido, seguramente por el frío, así que lo arropo aún más en la manta-. Sabes, este mocoso como tú le dices es una de las cosas más importante que tengo.
—No comprendo a los padres .-agitó la mano restándole importancia al comentario, había aceptado ir solamente porque creyó que irían solos, grande fue su sorpresa al ver al niño-. Aunque admito que tu mocoso es bastante curioso, mira que preguntarte de dónde viene la electricidad cuando veníamos hacia acá.
—Lo sé, Senku es bastante curioso, aunque pronto cumplirá tres años .-giro su mirada hacía su amigo, sonriendo como siempre-. No lo comprendes porque no eres padre.
—Ni quiero serlo, no me gustan los niños.
Byakuya río ante el comentario mientras se levantaba del suelo, acomodando a Senku sobre sus brazos con total cuidado de que este no despertará.
—Te apuesto a que mi mocoso va a llegar a ganarse ese frío corazón tuyo.
—Que tonterias dices a veces Ishigami.
Idiota, claramente se encariño con el niño y eso lo había llevado a hacerse cargo de él, pero era solo porque prometió cuidarlo, porque era su culpa que se haya quedado sin padres.
—No soy su padre .-frunció el ceño tocando el ventanal, quizás estaba loco por hablar solo-. No soy su familia.
Apretó el puño mientras giraba para volver a su trabajo, debía de terminarlo sin fallas para que lo ocurrido hace un año no le volviera a pasar.
Continuará...
Sigo sintiendo extraño hacer este fic xD Pero es que son cosas que pasan por mi mente.
Chinga tu madre Xeno(?)
Con esto quedan al día de lo de Wattpad
¡XOXO!
