Dudley había entrado, preparándose mentalmente para un lugar con comida a la vista. Quizá si le hubieran leídoHansel y Gretel, relacionaría su imaginación con la casa dulce, excepto por incluir también carne y otros alimentos salados.

Tenía una amplia sonrisa en su rostro, el cual giraba en todas direcciones con entusiasmo.

¡Oh! ¡Las tortas de chocolates, las galletas, la carne y demases comidas que se harían con sus propias manos! ...Su madre se pondría tan orgullosa.

Luego sus ojos se enfocaron en lo que, temporalmente, haría olvidar todas esas ganas y todas esas deliciosas comidas.

—¡Mamá! —La llamó, horrorizado, un tono que fue más que suficiente para que la mencionada entrara a la cocina y se posicionara delante suyo, para buscar desesperadamente a Harry, quien de seguro era el responsable del estado de su aterrorizado hijo.

Un niño pequeño y enjuto como Harry era difícil de vislumbrar; pero la sangre que manchaba el impecable piso, no.

Eran tan solo unas gotas, pero rápidamente llamaron la atención de Petunia, quien sintió su enojo aparecer y su temperatura aumentar.

Vio de dónde había caído y, por atrás, agarró a su sobrino por las axilas, lo sacó de la silla y lo colocó en el suelo. Bruscamente lo giró para que la mirara a ella y le pegó una cachetada.

Al sentir su mano mojada, volvió a mirar a Harry (quien se estaba acomodando sus anteojos aún muy nuevos), para darse cuenta de que todo este tiempo había estado temblando y llorando.

Petunia miró aún más abajo y vio sangre salir de uno de los dedos izquierdos de Harry. Respiró hondo y, con torpeza, agarró la mano de Harry y la examinó.

Donde debería haber un corte, solo había quedado una pequeña cicatriz que ante sus conmocionados ojos, se iba desvaneciendo hasta dejar la piel lisa y sin marcas: sin signos de que allí hubiera penetrado un cuchillo hacía tan solo unos minutos.

—Ve a limpiar —murmuró, dejando caer su mano.


Notas:

Como habrán notado en este fanfic, se incluyen cosas canon de los primeros capítulos de "Harry Potter y la piedra filosofal". Por ejemplo, que Vernon desaprueba la imaginación (por lo tanto a Dudley nunca le leyeron cuentos de hadas).