--Hinata, ya es hora de dormir, ¿Y si empiezas tú? --era un hecho de que no quería hablarle, pero ésta insistía en seguir hablandole. --Yo solo no puedo dormir, ¿puedes hacerlo?.

--No, si tú no puedes yo no puedo. --lo abrazaba con fuerza, no quería que le pidiera soltarlo pero aún así seguía. --Nos amamos y dormimos juntos; así funcionan las cosas.

--Pero a veces no funcionan cómo uno quiere... Sasuke...

--Deja de pensar en esa cosa, no te hace más que sufrir, hazme caso ¿si?

--No. Buenas noches, Hinata.

Hinata estaba impactada, ¿Desde cuando es tan frio? Oh, claro, desde que se la pasa pensando en ese infeliz.

La mañana asomaba. Sasuke siempre se mantuvo sin ganas de nada, era un lugar realmente malo, incluso peor de lo que pensó. Siempre estaba aislado de los otros.

--Hola, Itachi. --estaba llamando por teléfono a su hermano mayor desde el frío lugar en el que ahora se encontraba.

--Oh, hola, ¿Cómo estas?

--No podría estar peor... --su tono de voz parecía desgastado y cansado.

--¿Qué? ¿Qué sucede?

--Me acusaron sin pruebas de haber matado al hijo de Naruto y pues aquí estoy... en la cárcel... maldito gobierno, para nada sirve...

--Bueno, primero tranquilízate, me avisas cuando salgas para ir a recogerte ¿de cuánto es la sentencia?

--3 años aquí...

--Bueno, no olvides que te quiero, hermano, bye.

--Adiós... --colgó el teléfono y se fue.

--Oye ¿estás bien? --Shikamaru lucía preocupado por su amigo que parecía estar siempre decaído. --¿No crees que necesitas ayuda profecional antes de que tu cabeza explote? Creo que sería lo mejor.

--Sí, por favor...

Shikamaru siempre acompañó a Naruto a las seciones de terapia. Así fueron aprovechados los 3 años sin Sasuke.

Con esto se dió cuenta de varias cosas:

-Necesita el divorcio porque Hianta no le hacía feliz.

-Necesita contentarse con cosas pequeñas como mínimo.

Y también...

-Estaba enamorado de Sasuke.

3 AÑOS

Han pasado 3 años. ¿Por qué razón Naruto sigue con Hinata? Eso nisiquiera él lo sabe.

--Fue dificil ¿No es así? --Itachi manejaba el auto a su casa, en compañía de su hermano menor, Sasuke y su pareja, Dediara. Sasuke no parecía tener ganas de conversar.

--¡Oye! ¡Itachi está tratando de ser amable y tu estás despreciandolo! --Deidara estaba algo enfadado, más o menos como siempre. Deidara era alguien de carácter fuerte y no dejó que ignorara a Itachi así.

--Sí, fue dificil... --Sasuke decidió contestar.

--No te preocupes, Deidara casi siempre es así. A veces es dulce y-

--¡Itachi, basta, me sonrojas, y no de la buena forma... --su cara estaba roja y sus piernas bastante juntas. Itachi pudo verlo por el espejo retrovisor y dedicarle una sonrisa, ahora era peor. --¿Y entonces ahora Sasuke vivirá con nosotros?

--Sí. Pero no deberías preocuparte porque sea una molestia, es muy tranquilo como para ese tipo de cosas.

--Tsk, cómo sea.

Lo llevó a su casa en la playa, la vista era hermosa, las palmeras se movían suavemente con la brisa fresca de la playa, las aguas eran de un azul verde casi cristalino, un lindo atardecer que hacía parecer el cielo y la arena de un tono de mezcla entre naranja, rojo y algo de rosa; simplemente un paraíso, tenía sentido, ya que Itachi tiene toda la fortuna Uchiha ¿Porqué? Simple, ni a Fugaku ni a Mikoto les caía bien Sakura, asi que lo dehederaron, además de el hecho de que estaba enamorado de un chico; de verdad creyeron que Deidara era mujer, incluso murieron antes de siquiera darse cuenta que era un chico así que Itachi pudo quedarse con todo.

--Es un lindo paisaje. --Sasuke estaba impresionado por el paisaje, nunca había visitado a su hermano. --¿Cómo conseguiste todo esto?

--Por esta bella dama de mi lado. "Ella" fingió ser mi novia, nunca supieron que era un chico y además mi novio jeje... --Itachi dió un suspiro y sonrió --a mi no me deheseredaron porque al parecer les cayó bien Dei.

--Pff, sólo presumes tu fortuna y a tu esposo... --un ligero sonrojo. Movió la cabeza en seña de apestar avergonzado.

--¿Y qué? ¿Todavía tienes 26 y sin Naruto?

--No quiero hablar sobre él... --sus ojos comenzaron a lagrimear un poco.

--Está bien está bien, entiendo. Cómo sea, ya casi llegamos a casa.

--¿Qué no la pasamos hace rato?

--No, es otra. Digamos que la vendí y compré una mejor.

Llegaron a casa, era una casa mediana blanca, con hermosas flores que resaltaban en el paisaje y una que otra decoración en la puerta. Bajaron del auto y entraron a la casa.

--Así que... bienvenido a la familia, pequeñín. --Deidara trataba de llevarse bien con el hermano de su actual pareja. --Siéntete cómodo. Itachi, muestrale su nueva habitación.

--Con gusto. --Llevó a su hermano a una habitación casi vacía, ecepto por una cama, una televición y algunas cosas que le daría para que pudiera usar durante su estancia en la casa. --Bienvenido, hermano. Bueno, te dejo revisar un poco, iré a hacer de comer.

--Está bien.

El tiempo pasó y se llevaban como una bonita familia los tres. Siempre que sucedía algo, Itachi culpaba a otroero en forma de juego. O así era como se llevaban.

Naruto estaba despertando, era una mañana especial, hoy se liberaría de tanto trabajo y su molesta esposa. No tenía tiempo de boberías. Preparó todo el trabajo de hoy el día de ayer, así que tenía el día libre. Iba a ir ¿a dónde? A dónde Suigetsu le había indicado: la nueva casa de Itachi.

Naruto decidió llamar a Itachi para decirle que iría hacia ahí para visitar a Sasuke. Éste no tardó en acceder.

--¿Así que vendrás en una hora?

--Si, me encantaría verlo una vez más... ¿Podrías mandarme una foto de él? D-digo, sólo para ver si está bien ¡No es para más!

--Está bien, ¿te gusta mi hermano? Estás hablando extraño y no creo que andes por la vida así. Tengo una foto de el pero está en pijama.

--No pasa nada, me sirve.

--¿Qué?

--¿Qué?

--No importa. Nos vemos. --Itachi colgó el teléfono para luego buscar la foto que buscaba de Sasuke. La envió.

Naruto recibió la tan esperada imagen. Para él era el mejor tesoro que se podía conseguir; el tan solo mirar como su piel se veía tan pálida y suave, su cabello negro tan bien peinado, esa cara semi-dormida mientras veía aquella película que no era perceptible en la foto, su pijama le quedaba hermosa, simplemente el mejor regalo del mundo. Se juró a si mismo que algún día reharía esa escena tan tierna con su cuerpo recostado sobre él o viceversa. Estaba seguro de que quería, sin importar lo raro que se viera, besar esa foto.

Sasuke estaba llegando, cuando no supo, le pareció ver el carro de aquel rubio que no había visto en años; él otro iba mucho más adelante así que no estaba seguro. Decidió ir más lento para después seguir su camino.

--¡Yo abro! --Deidara abría su puerta sin entender quién estaba detrás de la misma. --¿Y tú eres...?

--Naruto, Naruto Uzumaki.

--Sasuke no está, largo. --tenía la intención de cerrarle la puerta en la cara, sabía que había escuchado hablar sobre algún Naruto:

"[...] ¿Todavía tienes 26 y sin Naruto?"

¿Itachi se refería a aquel condimento? ( )?

Obvio que no.

--¿Qué es todo ese ruido? --Itachi reconocía la voz de Naruto así que decidió investigar. --¡Oh, hola Naruto! Te estaba esperando, Sasuke viene de camino, perdón pero cuando me llamaste lo había mandado a combrar bíberes y esas cosas y pensé que cuando llegaras él ya estaría aquí.

--Oh no hay problema jeje.

--Los tres necesitamos hablar muy seriamente...

--Itachi, yo tuve que visitar a una psicóloga para tratar ese dolor, en el camino, me dí cuenta que amaba a tu hermano. Lo sé porque en los tres años que pasé sin él me dolía y además no se me pasaba su recuerdo, por más que Hinata me dijera algo sobre que lo dejara... él es el amor de mi vida... --estaba lísto, ya se había "descargado" con alguien de confianza.

--Me siento feliz. Sé que cuidarás de él pero...

--¿Pero?

--Cuando llegamos me dijo que no quería saber nada sobre tí, pero no creo que deberías perder tus esperanzas, creo que aún le gustas también.

--Sí... ¡Tienes razón! JAJA ¡YO puedo! --tenía la autoestíma por los cielos, nunca se había sentido así.

Mientras Naruto deliraba estupidesces, Sasuke estaba de regreso. Habría la puerta y Naruto se sentía todavía mejor.

--Ya- --Naruto decidió correr a abrazarlo sin dudarlo 2 veces, Sasuke estaba sorprendido y a la vez sonrojado, ¿Qué estaba haciendo? --¿N-naruto?

--Sí, soy yo mi querido --trataba de besarlo y este parecía no dejarle. Cuando pudo atinar a sus labios fue un beso placentero para ambos: Sasuke se sentía extraño, de alguna forma, bien, mientras que Naruto disfrutaba cada segundo que estaban ambos así de juntos. --Oye... vine a decirte que te amo... vine a decirte que te quiero... no me iré hasta que me respondas...