Título: El Ascenso de la Familia Black.

Emparejamientos: Indecisos.

Género: Familia / Fantasía / Aventura.

Resumen.

UA: James y Lily Potter tenían la firme creencia de que su hijo, Ralston Charlus Potter el supuesto salvador del mundo mágico, necesitaba toda su atención ante el posible regreso de Lord Voldemort. No importaba si con aquello, Tuviesen que abandonar a sus dos hijos mayores con los Dursley, después de todo, volverían por ellos un año antes de su entrada a su primer año en Hogwarts. Lamentablemente para ellos, dos ancianos magos no estaban nada de acuerdo con sus planes.

¡Fem Harry!

Disclaimer: la franquicia de Harry Potter no me pertenece. Todo crédito es para su creadora, J. K. Rowling.

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Prólogo.

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En el majestuoso castillo de Hogwarts, el colegio de magia y hechicería, exactamente en la oficina del director de tan famoso colegio mágico, tres personas hablaban mientras que la única mujer entre los presentes, cargaba a un pequeño niño de tan solo un año y cinco meses entre sus brazos.

La mujer tenía un hermoso y largo cabello ondulado color rojo oscuro y unos brillantes ojos color verde esmeralda. Aquella mujer era Lily Potter (de soltera Evans) y a su lado se encontraba su marido James Potter, un hombre alto de ojos color café oscuro detrás de un par de gafas de montura cuadrada y un alborotado cabello color negro azabache.

Ambos se hallaban sentados frente al mago más poderoso en el momento, Albus Dumbledore, quien los miraba bastante serio y con decepción reflejada en sus normalmente brillantes ojos azules, que por el momento, no mostraban ni un poco de esto a causa de lo que el matrimonio Potter le estaba relatando.

Quedándose la mujer pelirroja en silencio después de explicar todo lo que tenía que explicar, esperó junto con su marido la reacción de su antiguo director, el cual no emitía palabra alguna desde hace unos minutos atrás.

Luego de unos segundos, en los cuales el viejo mago meditó todo lo dicho por estos, habló aún serio.

"Entonces, lo que me están diciendo es que acaban de dejar a sus dos hijos mayores en el lumbral de la puerta de tu hermana Petunia, porque desean entrenar al pequeño Ralston Potter aquí por su futuro enfrentamiento con Voldemort y piensan que con la estadía de sus otros dos niños con ustedes, eso sería muy difícil de hacer. ¿O entendí mal, joven Lily?" Resumió lo relatado.

"No entendió mal, director. Está usted en lo correcto. Pero no hay nada de que preocuparse, regresaremos por ellos un año antes de que comiencen a cursar su primer año en Hogwarts". Le dijo Lily con una pequeña sonrisa tratando de tranquilizar la duda que sentía provenir del director.

"Además". Añadió James. "Igual lo hacemos para no ponerlos en riesgo en caso de que los mortífagos que quedaron libres nos quieran atacar y no podamos proteger a nuestros tres niños. También Ralston es más poderoso mágicamente que Adrian y Jasmine. Los Dursley no tendrán muchos problemas con ellos. Dudo mucho que el poder mágico que poseen los haga tener ataques de magia accidental a diferencia de Ralston que ya a demostrado tener más magia que sus dos hermanos mayores que son casi como squibs en ese aspecto".

"James, Lily. Comenzó Albus sin perder su seriedad. Entiendo sus preocupaciones ante el peligro que pueda asechar a su familia, sin embargo, opino que aunque sea, deberían mantener vijilados a sus otros dos niños y no distanciarse totalmente de ellos. Recuerda Lily, que tu hermana Petunia odia todo lo que tenga que ver con la magia, y aquel hecho podría provocar que tus otros dos hijos no estén tan seguros bajo su cuidado".

Ante lo dicho por Dumbledore, la sonrisa de Lily flaqueó un poco, sin embargo, lo dicho por el anciano director no cambió la decisión de los Potter, y ni por más que Albus Dumbledore intentó e intentó razonar con ellos para que cambiaran de opinión, no lo logró.

Con pesar en su viejo corazón, solo pudo quedarse ahí viendo como el matrimonio Potter se iba de su oficina por medio de viaje flu.

En la soledad de su oficina, el anciano mago pensaba duramente que hacer para sacar a los niños de casa de los Dursley sin alertar a las salas mágicas que Lily había puesto en ese lugar, y que solo un pariente de los niños que no tuviese ninguna mala intención hacia ellos, podía cruzar, aunque al parecer, la mujer pelirroja había omitido a los Dursley de tal protección hacia los pequeños.

Llegando finalmente a un plan propio, no obstante algo arriesgado, Albus se dirigió a su chimenea y lanzó un puñado de polvos flu en esta diciendo con voz clara. "Mansión principal de la familia Black".

Dumbledore sabía que todavía era muy temprano por la mañana, apenas eran las cuatro treinta de la mañana, pero esperaba que él atendiese su llamada, pues era importante.

Metiendo su cabeza entre las brillantes llamas verdes, Albus vio frente a él justo a la persona a la que quería contactar.

"Dumbledore, debe ser muy importante lo que me tienes que decir si estas contactándote conmigo a estas horas de la mañana". Dijo el aristocrático hombre, poniéndose de pie y acercándose un poco a la ubicación del director.

"En efecto, Arcturus, no sabes cuanto me alivia encontrarte despierto a estas horas. Tenemos que hablar". Dijo Dumbledore con voz grave.

"¿Ah sí?, ¿y sobre qué deseas hablarme?" Interrogó éste levantando una delgada ceja.

"Se trata de los dos nietos mayores de Dorea y el como sus padres los dejaron en casa de la hermana mayor de Lily".

"¡Cómo!, habla Albus, soy todo oídos". Dijo el patriarca de los Black totalmente serio y furioso al saber lo que el hijo de Dorea hizo con sus hijos.

"Bien". Y así el director Dumbledore le explicó todo lo que le habían contado los Potter minutos antes.

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En una canasta para bebés, dos lindos bebitos dormían acurrucados el uno junto al otro en un débil intento de protegerse de aquella helada noche. A un par de metros delante del lugar donde ambos hermanos dormían, un hombre de intensos ojos color gris, tes blanca y de cabello color negro elegantemente peinado, se apareció delante del Número 4 de Privet Drive, y a paso firme, se acercó a la canasta y lanzó dos hechizos, el primero para hacer que los niños no se estuviesen muriendo de frío y el segundo para hacer más ligera la canasta.

Con cuidado de no despertar a los bebitos,levantó la canasta y sin mirar atrás, se marchó del sitio, derrumbando por completo todos los planes de los Potter.

Era hora de cambiar el juego de poder en el mundo mágico. Esta era la oportunidad que estaba esperando por tanto tiempo, tras ver como la mayoría de su familia caía en desgracia. Arcturus Black se aseguraría de que la más antigua y ancestral casa de los Black volviese a la sima nuevamente. El hombre le dio una mirada suave a los niños dormidos. Dichos niños forjarían el brillante futuro de la familia Black y él se encargaría personalmente de eso.

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Fin del Prólogo.