-Preparatoria Furinkan, una hora antes-
En la preparatoria furinjkan, dentro de una de las aulas que albergaban la instalación, la menor de las Tendo, Akane, adormecida con su cabeza apoyada en su mesa, contrajo algún tiempo los raros síntomas perjudiciales de la magia que Yoichi la obligó a oler en contra de su propia voluntad, que el llevo a su actuara de forma defectuosa en su propio sistema inmune. Sucesivamente, después de algunos 10 minutos, el audio sonoro que emiten sus ronquidos se hicieron mas roncos y ásperos para el resto de la sala, la cual estaba administrada por la señorita Hinako, que no toleraría mas insolencias por parte de la joven letárgica.
Ranma, preocupado, cada vez que miraba de reojo a su prometida, se culpaba por su ineficacia en hacer que se sentiría mejor de salud. Un pesar de la vanidad que presentaba Akane mas de lo habitual, cuando se trataba de ayudarla con su enfermedad trasminada por la espuria de escorpión.
Con un fruncimiento de ceño, la maestra Hinako, fulminándola con un anverso muy peculiar al de habitual, saco su pequeño mazo de juguete para despertarla de una martillada. Hinako el golpeo en el centro de su cabeza, lo que permitió que Akane espabilara muy aturdida y con unos mareos que parecían que duraran por una eternidad, pero Akane disimulo perfectamente las ganas infernales de vomitar. Enfurruñada con la joven, Hinako la regaño por su comportamiento inusual durante el trascurso de toda la semana, que si sigue con esa faceta molesta no le quedara mas que otra que eximirla de las clases de ingles. Por la parte de Akane, solo hiso un débil asentamiento. No quiero tener otro desgano con la señorita Hinako; se quedo conformista quedando en callada.
Unos minutos más tarde, Hinako repartió los exámenes a cada uno de los alumnos para dar comienzo a la prueba final del ramo de inglés. Sin embargo, en cuanto a la señorita Hinako, en su forma de niña, al aleccionar a sus alumnos, la alarma de la preparatoria sonó un volumen de improvisto, dejando estremecidos a todos por el implacable y fuerte sonido que recorrió por los oídos de los estudiantes. Rápidamente, la maestra azuzo a sus estudiantes que formaran una fila para salir de la forma ordenada fuera del aula, inclusive llego a amenazarlos con una moneda de cinco yenes que si no obedecían sus órdenes, Hinako absorbería toda su energía de un chasquido por no cumplir con lo preestablecido.
Mientras que algunos mas se retiraban ordenadamente, el megáfono se activo gracias al director y farsante llamado Kuno, que le ordeno a todos, con una voz amainada, que no tuvieran ningún acercamiento o travesía en la ciudad de nerima, ya que es donde el desastre estaba aconteciendo. Ranma y Akane salieron sin armar alboroto fuera de la clase, pero al cruzar el umbral de la puerta, tomo súbitamente a Akane de su muñeca, escapando y subiendo al tejado de la preparatoria Furinkan. Hinako ve esto y se enfurece con el trenzudo. Apunto de perseguirlo y seguirle el paso, un apoteósico estruendo hace temblar toda la preparatoria, lo que provoco el miedo en todo el grupo estudiantil; la fila de desorganizo y todos los huyeron como una estampida de animales salvajes hacia la puerta principal.
Hinako fue aspirada por el tsunami de alumnos que la succionaron dentro del vórtice, perdiendo su moneda y sin posibilidades de volver a ser un conseguir. Luego de eso, Hinako, con su delantal amarillo jironado, estaba furiosa por el anodino de sus estudiantes por la falta de disciplina, pero el enojo aun mas cuando se acordo que su alumno mas revoltoso, Ranma, huyo de la formación sin aviso previo. Ella se levanto a regañadientes, pero otro temblor de mas magnitud que el anterior, hiso que la maestra se encuentra nuevamente a las baldosas. Soltó una maldiciendo e hiso un berrinche de niña de dos años.
Ya en el tejado, ambos, jadeados y con sus corazones palpitando por la adrenalina, miraron a lo lejos como unas explosiones manaban un banco denso de humo, que se elevaba y creaba una imagen perturbadora; pareciese que no se enrarecería la monstruosa masa de humo que tragaba todo oxigeno adyacente. Los rascacielos y edificios perdieron todo rastro de magnificencia, quedando ahora inclinados o totalmente demolidos por la lluvia indiscriminada de bombas de chi creas por Ranma; parecian escollos y, por lo tanto, naufragaban en el océano envuelto en llamas.
"Oh no, empezó." Dijo Ranma. "No falta mucho para que la totalidad de la ciudad y sus ciudadanos mueran. Y si eso pasa, la destrucción se extenderá mas allá del dojo. Estamos condenados."
"Ranma ..." Akane era apunto de desmayarse. "Ya lo recuerdo todo..." Se tapo el frente con su mano de un color asociado a la muerte. "Ese hombre que me maldijo, eres tu... pero es diferente al mismo tiempo".
"Tranquilo, Akane, todo va estar bien". Suavizo Ranma la situación.
Akane frunció el ceño y se enfado. "¡Estas loco, idiota! ¡Mira la ciudad como si fuera reducida! ¡Mientras estamos platicando, las personas inocentes esta muriendo por ese malnacido!" Grito Akane aireada. "No podemos perder el tiempo, debemos ir tras su ayuda". Akane casi pierde su conciencia y se agarro del barandal para no caer de nariz.
"¡Akane!"
"No tenemos ... Tiempo que perder, Ranma. Nadie se puede dar el lujo de ver como la gente muere una causa de ese psicópata insensible." Escano Akane.
"¿Tenemos? No. Tu te quedas aquí; si te llegas a pasar algo en ese lugar, no me perdonaria jamás."
Akane se opuso a decir con el ceño fruncido. "Tu solo no podrás con el, idiota. ¿No recuerdas como te doblego sin esfuerzo? ¿Eh? Tu porcentaje de ganar es cero si pretende ir como carne de cañón sin que nadie te acuda en tu ayuda ¡Déjame ir contigo a la batalla sin mas rodeos y no me digas que NO! " Sentencio Akane.
"¡Eres una boba y terca!" Replico Saotome. "Esto es diferente: pantimedias o azafrán, esto es algo que no se puede solucionar en solitario dialogando o con frases bonitas.# Compara Ranma. "Además, no ire solo; Ryoga y Moose me cubrirán mi espalda cuando este indefenso. Tenemos una estrategia que plane hace tres días, ya que solo con patada y golpes no serán sufrientes para mandar al pozo a ese demonio del mal." Revelo.
"Aun así, sus habilidades están lejos de poder si terminar con ese maldito. Ranma, se que quiere protegerme pero yo les podre ser de mucha-"
"¡NO!" Decidió Ranma con un grito. "¡Te prohibido totalmente involucrarte en esto!" Ranma agarro a Akane en sus hombros. "¡¿Acaso no lo entiendes?! ¡No quiero perderte por nada en el mundo, porque eres la luz que ilumina el corredor de mi corazón cuando estás en riesgo de muerte¡ ¡No quiero experimentar de nuevo esa soledad cuando no te separas de mi lado! ¡TODO ESTO LO HAGO ES PORQUE YO TE... "Cancelo su ultima, su ultima palabra bonita.
Por otro lado, el joven quedo perpleja por la declaración que estaba gritando su prometido.
"Ranma ..."
El joven de la coleta reacciona de la hipnotizador rostro de la menor de los Tendo. Eran un solo a unos centímetros de sus rostros, sus corazones bombeaban por el amor. Ranma bizco lentamente sus ojos hacia los labios de Akane. Pese a que estaban escasos de color, quiero sentir la deliciosa sensación de besarla y, a menos de una vez, obtener un romántico beso de sus preciosa Akane. Ranma ya no podía con esta presión que estaba rompiendo el cascarón de su orgullo. Cerro los ojos y preparo sus labios en posición y desicio perderse entremedio de las rosas teñidas de rojo, que embellecían la panorámica que se estaba figurando en su mente. La absolución de sus prejuicios la quería desunir de la montaña de orgullo.
Akane, ante cuentos palabras de Ranma y seguro de lo que era apunto de hacer, cerro los ojos para introducirse en el mundo bohemio que Ranma la quería arrastrar. Los dos a solas: Ukio, Shampoo, Kodachi o Kuno no estaban para impedir la entrada en el firmamento que estaban a punto de abrir las puertas del destino. Faltaba un poco mas, un poco mas ... pero ... Ambos despiertan por la conmoción.
Una densa nube de combustión negra se apoderó de la ciudad, fundió mas los escombros, y las vidas humanas se apagaban paralela con su valor.
Ranma se separo de Akane y ella también lo calco.
"No hay mas tiempo, tengo que partir." Murmuro Ranma en dirección a la ciudad.
Puso un pie en el baranda.
"Adiós, Akane, y siento el daño que te he hecho". Se despido, dejando con mucha tristeza a su amada.
"¡RANMAAAA!" Grito Akane cuando el se fue de se atrevió despegarse de su lado.
Estaba devastada. El adios de Ranma aludía a que su final en la tierra de los vivos concluía. Cayo de rodillas y golpeo el piso con tal fuerza, que se agrieto, creando hendiduras conectadas desde el punto principal del impacto. De repente, Nabiki, fatigada por correr hasta el tejado, vio un Akane para darle información valiosa que recopilo durante la semana y en sus expediciones.
"¡Akane, debo contar-" Se tijereteo su habla cuando vio a Akane amargamente. Se acerco despacio a su hermanita. "¿Estas bien, hermanita?"
"De-descuida, Nabiki, solo me entristecí" Respondió, secándose las lagrimas.
"Como sea. Lo importante es que, mientras estabas en tu habitáculo descansando, yo averigue de que se trata todo esto". Dijo Nabiki. "Espera... ¿recuerda algo de lo que paso a una semana? Si es así, ¿recuerdas el hombre que te hiso esto exactamente?" Pregunto, cruzándose de brazos.
Akane se quito todas sus lagrimas. "Si. Pero, Nabiki, aun tengo algunas memorias borrosas a causa de eso."
"Por supuesto. La magia que te contamino tu cerebro, provoca que el organismo del huésped se deteriore una medida que pasa el tiempo: morirás prematuramente en los próximos días, aunque no tengo las cálculos más precisos." Explico Nabilki severamente.
Akane, apenada por ella misma, solo dio un asentamiento, asumiendo esa realidad. Nabiki le toco el hombro, una sonrisa confiada.
"¿Por que esa sonrisa, Nabiki?" Pregunto confundida.
"Descuida. Al paso de los dias, encontre el antidoto perfecto para rejuvenecer tu organismo, y asi volverte a como eras antes del hechizo." Revelo.
Akane se sorprendio "¡¿Es enserio, Nabiki ?!"
Con el semblante pasando a una de seriedad absoluta, dijo: "Normalmente te cobraría unos 5000 yenes por esta información exclusiva, pero esto va mas allá de mi propia comprensión. Miles de personas morirán si no ponemos un fin a esta locura." Nabiki se acomodo en el suelo, sentándose en estilo indio. Akane la imita.
"Esto tiene que ver con Ranma y ... ¿el otro Ranma?" Dijo Akane, dubitativa.
"Si. Cierto tiempo atrás, me di la tarea de excavar los cabos sueltos para encontrar la verdadera identidad y motivaciones de este Ranma." Expuso Nabiki.
La peliazul escuchaba atentamente.
"Cuando apareció por primera vez en nuestra propiedad, me pregunte: ¿quien era este sujeto? ¿De donde venia? ¿Porque tiene un parecido tan extraño con Ranma? Es entonces que puse manos a la obra: le seguí las huellas a este Ranma y busque pistas en el Nekohanten y en el restaurante de Ukio. " Presento con mas cuidado sus palabras.
A pesar de lo que estaba dilucidando Nabiki, no era creyente de esas pruebas, reveladas por su hermana de al medio. ¿Shampoo y Ukio, dos mujeres enamoradizas de Ranma, tendrian la vergüenza de aniquilar el amor de su vida? Claro, ellas eran posibles de todo y mucho mas para conseguir lo que mas anhelaban, llegando a la abominable acto de matar a una persona, como es el caso de Shampoo, la amazona. No obstante, sus deducciones apuntaban a la mas acertadas, debido, probablemente, a que el Ranma de ojos escarlata hacia gala del mismo estilo de combate de Shampoo, además de hacer manejo de espátulas, como Ukio. Aunque las pistas apuntaban a las dos prometidas, le costaba entender el porque de asesinar a Ranma con una especie de clon, dedujo Akane en sus pensamientos.
Akane le pregunto a Nabiki si ellas eran las culpables, a lo que Nabiki respondió con un rotundo no.
"Es remotamente imposible que ellas tuvieran algo que ver, porque cuando reunimos todos en el dojo, lucían una cara de sorpresa." Argumento. "Pero eso les quita algo de rareza al asunto. Es por eso que me infiltre en el restaurante del gato. Busque entre las pertenecías de la bisabuela de Shampoo para buscar respuestas lo bastante contundentes para que me conduzcan por un buen camino con esta investigación."
Con un fruncimiento de ceño le dijo: "¡Oye, Nabiki, eso es allanamiento!" Regaño la menor de las Tendo al saber que Nabiki fue capaz de birlar objetos de la bisabuela.
"Mas decoro, Akane. Todo esto fue por una buena causa". Justifico Nabiki, moviendo las manos hacia los lados.
El ceño de suavizo y siguió escuchando.
"No fue una perdida de tiempo, ya que, entremedio del ropero y de las cosas de la bisabuela, encontré una caja fuerte muy bien reforzada. Por suerte, llevaba conmigo una ganzúa experta para ver lo que podía descubrir dentro de ella. Afortunadamente, dentro de la pequeña bóveda me encontré escritos, pergaminos, documentos, archivos; todos ellos no tenían poca o ninguna relevancia en el caso. Obviamente no me quede de brazos cruzados, rebusque y, indagando mas sobre la materia, di en el clavo. " Nabiki saco debajo de su uniforme una carpeta con algunos papeles amarillentos por una capa de suciedad y, increíblemente, con los bordes quemados; parece que intentaron quemar la documentación. "Toma esto. Me fue de mucha ayuda para resolver este misterio."
Le extendió la carpeta a Akane, cuando de pronto retrocedió el brazo con una sonrisa maliciosa en el rostro. Estiro su otro brazo; la menor de las Tendo ya sabia lo que quería decir Nabiki.
"300 yenes" Ofreció Nabiki.
"¿No dijiste que esto es peligroso, y por eso no me cobrarías ningún centavo?"
"Tómalo o déjalo" Recalco. "¿Quieres regatear el precio?" Su sonrisa se volvió mas amplia.
Refunfuño en sus adentros y le pago unos 200 yenes. "Es todo lo que tengo, codiciosa". Akane paso el dinero con rabia.
"¡Me encanto hacer negocios contigo, hermanita!"
Nabiki, complacida, le traspaso la información a Akane mientras ella contabilizaba las ganancias adquiridas.
La peliazul tomo en sus manos la carpeta con los archivos de Cologne. Aunque no lo pareciera, Akane tenia un intensa curiosidad por descubrir que sorpresa podía llevarse encima. Los textos solo trataban de recopilaciones científicas, modificación del ADN y, lo que más le sorprendió, estudio y codificación de las aguas de Jusenkio. ¿Estanques de Jusenkio? Los recibos le llego como una misil balístico a Akane en la sien. No tenia alguna idea de cual era la relacion de este Ranma y los legendarios estanques de Jusenkio. Quiso arriar esta prueba para no enlazarlas con la actualidad, pero sintió que no tenia sacar conclusiones precipitadas. Hojeo las paginas, descubriendo mas escritos que anteriormente estaban con ascuas. Se quedo plasmada con el nombre que titulaba el texto: Yoichi.
Estupefacta, Akane parpadeo unas cuantas veces. Era mucha información que procesar: en los enunciados describían el comportamiento y, como era de esperarse, el aspecto físico del falso Ranma, además de caracterizaciones, puntos fuertes y puntos débiles, fortalezas y debilidades, estilo de combate favorito, su conducta en el fervor de una batalla, su personalidad. Aun con este hallazgo, no hubo crónica anterior a los hechos, que fueron el inicio de la creación de una bestia psicopática. Fechas, testamentos, historia, origen, diarios, lugares, infancia, edad, amigos cercanos, comida ..., familia. No había nada relacionado con eso que Akane buscaba con meticulosidad. Ningún detalle, solo un vació existencial en el trascurso de esos largos años. El que haya fabricado tal monstruo, ¿que tenia en su mente maquiavélica para planear un masivo extermino?
Emitió gruñidos de impaciencia. Quería saber cual es la verdadera identidad del Demonio que se hacia llamar Yoichi.
Nabiki se guardo lo mejor para el final cuando estaba con ese semblante tan feliz.
"Si quieres te puedo contar como sucedieron las cosas". Ofreció la Tendo con una cara picara de dinero extra. "Pero te costara".
Irradiando humo en sus pensamientos, la peliazul le pago lo que le sobraba de dinero. Quejarse no era una opción, necesitaba llegar el fondo de todo esto, y no estaba para discutirlo con su hermana que era una veterana en vaciarle las carteras a los bobos.
Como lo había hecho antes, saco un libro pequeño debajo de su falda, haciéndole entrega a una Akane desdeñosa y bastante irritada con su hermanita, recitando las palabras. Los párrafos, oraciones, frases y palabras estaban escritas con un bolígrafo con saco de tinta negra de muy buena calidad, estaban dibujadas con una pluma, recito Akane mientras seguía la narración. Curiosamente, el nombre del padre de Ranma, Genma Saotome, se repetía conjunto de insultos y promesas de muerte de un niño en su temprana edad y, vehemente, describiendo relatos violentos. Pasaron unos 5 minutos para pausar la lectura. Nabiki solo tenia el codo apoyado en su regazo con unos ojos expresivos de aburrimiento.
Pero... mas allá de todo lo que había ingerido de información, unas fotografías sobresalían del reverso del diario. Es en ese preciso momento Nabiki, con un movimiento cauteloso y furtivo, intento quitárselas de su mano. Mal para ella, pues Akane fue mas rápida y las termino viendo... algo que probablemente no quería saber ni por nada del mundo.
Nabiko bajo su mirada, y Akane estaba conmocionada por la revelación cruda de las fotos.
"A-Akari... no, no puede ser esto posible."
Ella estaba muerta. Ello cobro mas veracidad cuando su cuerpo desnudo estaba ensangrentado.
"Se suponía que no debies-
Akane se desmayo.
Nabiki inmediatamente se levanto a ayudar a su hermana. "¡Akane, responde,! ¡Akane, Akane!"
Su conciencia se apago.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
-?-
Cerro los ojos con fuerza, su frente se arrugo y la oscuridad la arrastro a un espacio caótico. Los abrió con recelo de por medio, solo para trasnochar con las gotas de una tormenta de agua que impactaban en su cuerpo. Cabellera ondeando, su uniforme de su preparatoria de toda su vida se humedecieron y mojaron por la ominosa lluvia del cielo destemplado. Como si no fuera suficiente, un trueno, tan fugaz que fue impredecible, se revelo por la lejanía de los hogares. Estaba de noche, donde los ojos no se adaptaran a las mas tenebrosas tinieblas.
El diluvio zarandeo las hojas de los arboles, que cedían ante la corriente que se intensificaba. El torrencial repiqueteo sus cabellos y su incolora epidermis grisácea. Los charcos de agua se acumulaban en los boquetes. Todo, absolutamente todo estaba a oscuras; los faroles estaban abarrotados y su luz se apago inevitablemente. Su única luz natural, la luna, arrullo a la peliazul e intimido a las inmortal sombra que yacía en esas calles, aunque no lo recuerde, conocidas.
La peliazul, aterida por la brisa tempana, hecho nuevamente un vistazo a su entorno. Las gotas friolentas traspasaron su atuendo colegial y su cuerpo fue alcanzado por el agua. Voy a sufrir una neumonía si no salgo de este congelador, aseguro Akane absorta en sus mas profundos pensamientos. Akane camino, sin rumbo fijo, por la calle delantera, adjunta con las avenidas que remerobaba sus predicciones. Mientras caminaba, estremeciéndose del frio, Akane se percato al fin del sitio donde estaba: muy cerca de la casa de la señora Nodoka, la madre de su prometido. Su primera impresión fue de impacto, ya que, durante los insufribles días de la semana, nunca su agobiada cabeza evoco este lugar en concreto. Sin embargo, la llovizna, comparada a misiles que caían en picada, dañaban ligeramente la piel descubierta de Akane. Daba la sensación que era un granizado.
Al igual que el chico de la bandana amarilla, se encontraba perdida y desorientada, no pudiendo encontrar ni el mas mínimo atisbo de vida. Desafortunadamente, las casas de sus lados no manaban ni un foco de bombilla en su interior, por lo que no tuvo mas opción que dar toda su devoción a la luz tenue de la luna. Caminando en la pasarela, descubrió una señal de luz rojiza, poco luminosa, en la avenida de la esquina. Akane, sin pensarlo dos veces, corrió a ese débil alumbrado. Estaba apunto de llegar, hasta que se detuvo en seco, visualizo por esa dirección una figura paranormal. Un joven de cabellera azabache, de pantalones negros y una camisa negra de mangas cortas de origen chino, hizo acto de presencia en la esquina. Los ojos carmesí se volvieron repentinamente fosforescentes en un tono poco aluminosa.
Estar a la merced de la llovizna lo hacia sentir en plena libertad de su cautividad, saliendo por fin de su punitiva mala racha detrás de la noche taciturna. Se reía entremedio de la recia lluvia, dejando que su sangre divina lo embargase y plantar su sonrisa tan siniestra. Cerro los ojos con fuerza y soltó su sonrisa maligna; se escucho por los drenajes de las alcantarillas y las casas que flanqueaban los muros. De pronto, su sonirsa se apago como el sonido del gatillo de un arma de fuego disparando el primer proyectil… Todo se mortifico en un inmundo de silencio, de angustia y paranoia.
La joven peliazul frunció el ceño y tembló, no se si por miedo o por el frio insostenible que hospedaba la calle correspondiente. Retrocedió un pie izquierdo, poniéndose en posición defensiva, esperando algún ataque sorpresa de parte de su enemigo.
Y entonces, sus miradas se tachonaron, lo cual provoco una gran preocupación a la peliazul. Akane estaba apunto de enajenarse sino fuera por su valentía y, aunque con un dolor inimaginable, compostura media endeble. El no ejerció ningún musculo, ni seña en la que guiarse. Elevo un brazo e hiso un gesto para captar su total atención; quería que se acercase, demostrando así también una lasciva sonrisa. Después de ese detalle, se dirigió, dándole la espalda a Akane, por la acera siguiente.
Confundida, la joven de las Tendo se paralizo. ¿Tenia que perseguir a ese malhechor? ¿Era mejor idea huir del purgatorio? La respuesta es muy obvia: no. Y, sin embargo, vacilo en que podría hacer. No podía quedarse de brazos cruzados, no después de escuchar toda la información que recopilo su hermana. ¿La peliazul estaba atentando su propia vida por indagar mas sobre este misterio? Si, en absoluto. ¿Estaba quitándole peligro a la situación? También, sin dudas.
Aun con el gran peligro latente que desemboca ese farsante, además de tener a su disposición un armamento letal de infinidad de técnicas desconocidas, no tuvo mas remedio que averiguar mas a fondo todo lo que esta pasando. Necesita comprender el porque de sus genuinas acciones y motivaciones, sino también sus propósitos de porque se convirtió en un ser despiadado y lleno de un rencor indescriptible.
Akane se dirigió a la silueta desaparecida. Giro a la izquierda y visualizo una única casa iluminada detrás del ventanal. El demonio, que era reconocido por todos como Ranma, su figura desapareció sin dejar rastro de su presencia siniestra. Es entonces, cuando se dio cuenta de la calle que se encontraba, un escalofrió agudo se apodero de su cuerpo regado.
"La casa de la señora Nodoka. ¿Qué significa todo esto?" Intrigada, ella suspiro y empezó a caminar. "Algo muy raro esta pasando aquí, y yo seré quien descubra tu verdadera identidad." Juro Akane con aires envalentonados.
Elevo su brazo para tocar la puerta. Tock, tock. Dejo que pasaran unos cuantos segundos pero, a pesar de la iluminación que deslumbraba el cristal de las ventana, nadie contesto a su llamado. Reitero no dos veces, sino tres veces el toque de puerta; nada deslizo la puerta. Impacientada de darse una espera larga, la joven Tendo, con toda su fuerza, intentado repetidas ocasiones deslizar la puerta de la casa. Intento. Intento. Intento. Parecía que no había una forma de acceso por el Hogar. Desesperada por encontrar una entrada en condiciones, sin mencionar el hecho de que la llovizna continuaba helando su piel insalubre, rodeo el hogar para entrar por el ventanal.
Cuando al fin encontró la ventana, una conversación acalorada se escuchaba atraves del delgado cristal. Una contienda verbal y de reproches dejaron helada a Akane. Akane uso su manga para desempañarlo y ver en su interior que estaba pasando. Las figuras se tornearon y clarearon. Pero, mas tarde de lo debido, tal vez debió diferir en su ultimo suspiro.
Genma y Nodoka estaban peleando verbalmente por el futuro próximo de sus hijos. Akane también vio a un niño sentado un poco alejado de la platica nociva que tenían los dos adultos. Con la cabeza gacha y avergonzado, el pequeño muchacho, que tenia los mismos ojos de su madre (café), sin levantar por nada del mundo su vista a su padre, quien lo veía de soslayo despectivamente.
"¡TU ACEPTASTE ESTE ACUERDO, MUJER, NO ME VENGAS A INCREPAR POR ALGO QUE TU ESTUVISTE EN DEACUERDO DESDE UN PRINCIPIO!" Grito Genma, disparando saliva de lo furioso que estaba.
"¡Si, tienes razón en eso, pero di autorización para que te lleves contigo a Ranma! ¡Solo Ranma tenia mi consentimiento en ir a tu viaje y convertirlo en alguien varonil hecho y derecho!" Objeto Nodoka, enfadada de su marido. "¡Además, no estuve del todo segura si dejártelo a tu cuidado en tu viaje de entrenamiento a China, pero a Yoichi no lo metas en esos asunto!
Con el nombramiento de ese nombre, que dejo a Akane surgiera su incertidumbre, no sabia que Nodoka haya tenido un segundo hijo con el perezoso de Genma. Pero, poco antes de ser consumida por la oscuridad de las anomalías que se presentaban en sus sueños, los titulares de los archivos nombraban a un tal Yoichi, de modo que se sorprendió de que Nodoka tendría esa confidencial información, que mucho tiempo después Nabiki descubrió a base de su red de contactos y por infiltrarse a al Nekohanten.
Genma, rojo como un morron, queria mandar todo a la mierda. "¡Yoichi es un muchacho de mierda y super inútil, que tiene que valerse como hombre y aprender lo que significa la vida! ¡Sino lo llevo al viaje de entrenamiento, será solo una carga para la familia y será un peso muerto y flojo!" Asevero Genma. " Por lo menos, Ranma, teniendo menor edad que su hermano, tuvo un mejor avance y aprende mas rápido que el inserbible Yoichi."
Esas palabras denigrantes a Yoichi le hirvieron las venas de enojo a Akane, quien gruño y apretó su puño rociado de agua. Genma era un afamado por su papel de mantenido dentro del dojo completo. Alguien que no colocaría de su parte ni un yen, incluso su esfuerzo, por traer algo bueno a la familia. El era un aprovechado, un mentiroso compulsivo, perjurador, deshonroso, charlatán, cobarde en potencia, deshonesto, y lo peor de todo, es que utiliza a su propio hijo como excusa para salir de problemas que atenten a su seguridad, poniendo en constante peligro a su hijo; llego al punto de venderlo solo por penurias de pan o comida. Debería ser selecto como concursante de quien es mas hipócrita de Nerima, pensó Akane con indignación.
"¡No trates a nuestro primer hijo como alguien defectuoso, Genma, porque eso si no te lo permitiré!" Clamo Nodoka. "Una vez mas, y te degollare esa insensible bocaza grosera que tienes " Amenazo.
"¡Ya no hay vuelta atras, Nodoka! Te prometo que si Yoichi se convierte en un hombre de verdad, te lo traeré sano y salvo." Dijo Genma con solemnidad. "De lo contrario, tu nos obligaras a someternos sepukku."
Sorprendida por eso, Nodoka seguio insistiendo. "¿Porque tienes tanta afán por llevarte a Yoichi a China? Mucho antes de esto, ya lo escuchaste que no tiene interes absoluto por las artes marciales, a diferencia de Ranma. Pero tu lo entrenas sin consultarme a mi." Nodoka se le acerco con cólera. "¿Sabes cuantas cicatrices tiene por esos tediosos ejercicios que lo obligas a hacer? El simplemente no quiere tener algo que ver con las artes marciales."
"¡YA ME TIENES HARTO!" Vocifero Genma. "¡Las artes marciales es todo lo que importa! Cualquier otra cosa que este planeando, será una deshonra para nuestra familia. Lo siento, Nodoka, pero es mi deber seguir con este regimen."
El niño apretó sus dientes y le grito a su padre: "¡NO LE VUELVAS A GRITAR A MAMA!" El extendió sus brazos hacia adelante y corrió, esperando que todo fuese efimero y pasajero el dia. En cambio, el recibio una patada en la cara, saltando de su boca liquido rojizo.
"¡YOICHI!"
Nodoka abrazo a su hijo, alejándolo de los malos tratos de Genma.
"¡Genma! ¡¿Como pudiste?!"
Genma le dedico una mirada de desdén multiplicada por diez a Yoichi y, con pasos aireados, se fue de la habitación refunfuñando palabras malsonantes. Al cruzar el umbral de la puerta y cerrándola de golpe, Yoichi comenzó a sollozar. Al notar lo afligido que estaba su primer hijo, decidió cobijarlo en sus brazos para darle algo de cariño.
"¡Mamá, por favor, te lo suplico, no dejes que separe de ti!", dijo con una voz a partida a pedazos.
Afectada por el estado frágil de su propio hijo, esta lo abrazo con aun mas fuerza. "Perdóname, hijo. De verdad, perdóname por todo lo que hice..."
La caía del agua mitigo sus pisadas, donde las huellas de barro quedaron sedimentadas. Sintió que alguien se aproximaba por detrás de ella. Una mano lechosa se poso en su hombro, y una fuerza galvánica hormigueo el cuerpo entumecido de Akane Tendo. Una corriente escalofriante que podría llegar a un guardar en sus tétricas garras de una águila, cubiertas por un agua soluble de lluvia. Por instinto, volteo su frágil rostro, con un movimiento agitado y lento, topándose con los fulgidos ojos carmesí de Ranma. El rostro, con un semblante nevado, que era la causante de ser humano despreciable de la maldad y la acidez
Es entonces, el demonio, mirando con angustia la escena, se situado al lado de Akane. "Así es como termina la historia." Expreso el demonio.
Todo era una mero recuerdo del pasado, incrustado en sus neuronas, como si todos esas experiencias las había vivido en carne y hueso. Culpable, esa era la palabra correcta. Genma, el mantenido por excelencia de Nerima, era el causante de las innumerables desgracias que estaban viviendo las personas. El ya no era ese niño humanitario y compasivo que solia ser antes ser separado de los brazos de su madre, ahora el, Yoichi Saotome, era la personificación del odio, resentimiento, y el rencor que supuso ser segregado del amor incondicional de su madre; pero eso no era justificación por todo el daño moral y físico que era capaz de engrandar. No tuvo otra opción disponible, pensó Akane, la cual su indignación fue liberada por lo aprovechado que era el padre de Ranma.
De pronto, su recrudecida falta de energía se encogió, y una ira descomunal se apodero de la peliazul. Pese a su trágica historia y lo que conllevaba la misma, no olvidaba los llantos, el alboroto y el infortunio que perecerán a todas esas personas inocentes; ellos eran exentos de toda culpa que causo el muerto de hambre de Genma.
"¿Que paso en el trascurso en el viaje a China? ¿Quién te convirtió en esto?."
Su rostro se endurecio. "Me vendió a un mago." Contesto, aparentemente con sinceridad. "Un hechicero resentido."
Con un sentimiento mezclado de indignación y pena, Akane decidió platicar mas con el. "Y... ¿Qué te hiso ese nombrado mago para formar a alguien tan sanguinario? Aun con lo que acabo de ver, falta algo que me pone muy nervosa."
Entorno ligeramente los ojos. "Ese mago canoso, lleno de frustración, impotencia y furibundo, necesitaba un títere para no ensuciarse las manos del derramo de sangre. Es por eso que, nervioso e impaciente por encontrar a un monigote, compro, con una fortuna grande de yenes, a un niño de 5 años que sufría de los abusos y maltratos físicos y morales a su hijo. Si, mi infancia fue un infierno por donde lo veas."
Akane decidió ser mas capciosa. "Supongo... que ese niño vendido fuiste tu. ¿Dime la verdad?"
El dirigió una mirada fría. "Por supuesto. El holgazán de Genma tenia miedo de quedarse sin dinero. De modo de que me vendió al primer mendigo que se cruzase por su camino." Apretó sus puños. "Ese idiota no tomo en cuenta que volvería. No sabes el placer que me dará al observar su cara de terror cuando sepa que su primer hijo resurgió de las larvas."
"¡¿Entonces porque mataste a tantas personas?! Ellos no tenían la culpa del hombre que te vendió. Necesito comprender, porque te juro que si no me das una buena razón, te hare pedazos en nombre de todos los que mataste."
Se palmeo el rostro "Akane, Akane, Akane..." Dio un suspiro. "Eres muy comprensiva y compasiva, ¿no? Los mate porque quise hacerlo. Esta en mi naturaleza disfrutar de la agonía y, por lo tanto, de la destrucción. Intentar razonar conmigo no cambiara nada, así que no te desgastes en hacerme cambiar de parecer acerca de mis motivaciones." Le sonrió maléficamente. "¡La redención no existe en mi vocabulario!"
"Entonces, si es así como me comentas, porque no nos mataste cuando tuviste la libre oportunidad de hacerlo. Estabas, literalmente, en tus manos, pero decidiste darle una pequeña propuesta a Ranma para no hacernos daño. ¿Por que lo hiciste?" Pregunto la peliazul, con una frialdad tangible.
El demonio puso una expresión perspicaz. "Tu misma sabes esa respuesta."
"Pero quiero que tu la escupas de tu asquerosa boca." Convino Akane, mofándose un poco de el.
El gruño levemente. "Lastimosamente, no solo me fabricaron con la esencia de Ranma y de otros que probamente conoces, sino también la esencia de Kasumi." Revelo sin darle muchas vueltas al asunto. "Insinuaron mucho acerca de ella. Lo hicieron para mantenerme a raya y ser algo mas, según el imbécil que modifico mi contextura fisica y mi personalidad, obediente perro con un bozal en el cuello." Sonrió después de lo que iba a comentar. "Pues no les funciono; no tuvo la repercusión que esperaban ellos. Es por ese detalle que no los puede matar en ese momento. Parece que tu hermana los salvo indirectamente de una apuñada en el corazón."
Un gran alivio recorrió a Akane. "Lo sabia. De cierto modo, comprendo. Por supuesto, Kasumi nos protegería a todos nosotros de tus garras, asesino."
Yoichi se encogió de hombros. "Quien sabe... Tal vez la esencia de esa estúpida y cándida de tu hermana me de un ticket de lotería."
"Y que hay con Ranma. Porque hay necesidad de matarlo. Se supone que tu eres su hermano mayor, que fueron separados por culpa de su padre."
Se toco el mentón con el dedo, pensando. "¿Saotome? Ese zoquete de mi hermano nunca me apoyo ni me dirigió la palabra cuando éramos unos mocosos. Era el preferido del holgazán de mi padre. Lo único que me interesaba a mi era contentar a mi madre, ya que era la única persona quien podía confiar ciegamente. A Genma en si... ¡Nah! ¡Que se pudra en el tártaro ese zángano desconsiderado!"
"Entonces lo quieres matar por despecho. Debí imaginármelo." Insinuó Akane.
Yoichi, enfadado por la imprudente salvajada que se saco, le disparo una expresión violenta. "¡A MI NUNCA ME INTERESARON LAS ARTES MARCIALES!" Una respiración forzosa se produjo. Resoplo y se tranquilizo. "A pesar de que mis intereses apuntaban a otros ámbitos, Genma me obligaba todos los días a entrenar ese repugnante estilo de pelea de la escuela de estilo libre saotome, sin importarle nada lo que pensaba o que mis huesos se descuajaringuen. Odie tanto ese estilo de pelea, además de enterarme que ese estilo lo fundo un enano y aborrecible de Hapossai, que me acomode al competente modo de batalla de Shampoo."
"Enternecerme de ti me produce un asco terrible. ¿Lo sabias?" Se atrevió Akane.
"Je. Ni que lo digas."
"Y, ahora que harás al respecto con el poder que infundieron. ¿Vas a vengarte de Genma? ¿Eso es lo que quieres para saciar tu rencor hacia el y el daño mental que te fue capaz de hacerte?"
"No tengo idea..." Contesto.
Ese 'No tengo idea' como respuesta dejo perpleja todas las conclusiones apresuradas que sacaba Akane. Eso si que no se lo esperaba. Imaginaba devotamente una sermon sobre cuanto odio y rencor le guardaba al miserable de su padre que lo vendió sin miramientos de por medio. En su lugar, ese 'No' como respuesta la dejo sin habla. ¿Que estaba planeando? ¿Un nuevo estratagema para provocarla?
"¿Te estas burlando de mi?" Dio una entrecerrada en sus ojos recelosos.
El sonrió. "Lo único que siento por Genma es... el odio mas grande, pero ese odio se mitiga con el tiempo. Estos años que pase encadenado a una vida cautiva, me hicieron reflexionar el rumbo que tomaría. Me plante el momento de su muerte, paso a paso, equitativo a todo momento dentro de mi cabeza. Organizándome en cada una de las formas en como matar a ese desgraciado. Pensé y pensé. Pero, cuando llegaría el dichoso día, después de desmembrarlo cada parte de sus … ¿Qué sigue después? Nada, un vacío llega. Tal vez la sensación que podría experimentar seria muy placentera, pero se terminaría en cuestión de días. Todo el daño que me ocasiono, lo asimile: no sentía mas que un vacío insustancial e inútil. No te mentiría, su muerte aun me provocaría nada mas que placer... que se esfumaría al rato y no seria lo mismo... ¡ESPERA! ¡ESO ES!" Expreso con vehemencia. "¡Torturarlo será lo mas divertido! ¡Aplicarlo todo tipo de herramientas como todas las que me aplicaron a mi! Pero tendría que ser muuuuuy despacio, y Nodoka debería estar ahí para presenciarlo conmigo. ¡SI! Una tortura venenosa y tardía que dure muchos meses será como estar en el paraíso reconfortante."
"Si es así como lo interpretas, ¿por que nos odias tanto a nosotros, si se supone que no tuvimos nada que ver con todo lo que te paso?" Pregunto.
"TIENE MUCHO QUE VER, MI MARIMACHO." Su voz estallo. "Al momento que me incrustaron sus esencias, la vida se torno miserable. Los golpes que le dabas a Ranma y los insultos que te tiraba a ti, se conectaron a mi cuerpo, asimilando todo ese sufrimiento que paso en tu dojo. Después, las otras prometidas, formaron parte de mi, y el odio que creció en mi se intensifico; yo en ese momento, estaba mas que dispuesto en matarte y curar este dolor que me provocaba verte en estar con Ranma. Mas tarde, las otras esencias me empujaban para regar mi cuerpo con tu sangre. En el momento que yo te estrangulaba, una sensación de paz y serenidad se envolvio en mi. Pero Kasumi, la maldita de Kasumi, me malogro mi momento de gloria. Ahora, tu, Ranma, Genma y Kasumi son las personas que mas odio. El placer de descuartizarlas será una sensación casi sexual para mi."
Era una mente retorcida, enferma, desaformada, desfigurara, sin posibilidades de restaurarla a su forma de origen predeterminado. Escuchaba su voz, con tanta vehemencia, tortuosa cada minuto en sus diálogos. El quería tomar venganza, pero no cualquier venganza, una que se involucra torturas y gritos de agonia y, con una reliquia copa de plata en sus mano, beber con pasión el torrente sanguíneo de cada de los pecadores que esta hecho.
"Descuartizare a Ranma, mi hermano, para que Genma asimile el dolor y el sufrimiento que tuve que sentir durante esos 15 años de cautividad. Mas aun cuando tengo a su prometida enfrente mio, dispuesta a ser acabada en mis manos. Siendo ustedes dos muertos en el piso, Genma estallara de lagrimas para yo vanagloriarme de sus llantos de angustia y de tristeza. Y, de este modo, partirle su sueño a pedazos para no tener una vida perfecta de mantenido." dijo con vehemencia a toda gloria posible.
La peliazul ni se inmuto ante esas ideas maquiavélicas que idealizaba Ranma. "En lo ultimo, estoy completo de acuerdo contigo, pero eso no quita lo despreciable que puedes llegar a terminar, con una mentalidad lunatica y enferma." Califico Akane. ""Eres una alma intranquila, enjaulado en un cuerpo poderoso pero vacío de cariño; atestado de soledad."
"Esa gente las mataste por capricho. Te satisfacía oír sus suplicas, pero no hiciste caso a sus ruegos. Niños, que antes solían ser como tu, les robaste la vida a cada uno de ellos." dijo Akane con rabia creciente. "Ellos tenían derecho a vivir. No cometieron ninguna injusticia en contra tuya. " Ella exploto de la ira. "¡LOS ASESINASTE POR ENVIDIA, PORQUE TENIAN UNA FAMILIA QUIEN LES AMABA!"
El demonio puso levemente los ojos en blanco.
"Puede que Genma haya sido el culpable de todo esto, pero matar a personas inocentes para complacerte, es de personas inhumanas e irracionales." Akane se dio vuelta y puso en pose de pelea. "¡La única manera de finalizar toda esta masacre, es eliminándote de la faz de la tierra! "
Era muy cínica, pensó Yoichi. "Así es como terminan todas las historias... Tu felicidad y la de Ranma dependerán de que alguien perezca, mientras que en los dos el amor resurgirá y el orgullo se romperá. U-Uchan, Shampoo, Kodachi, tres mujeres obsesionadas enamoradas del mismo arrogante hombre, están obcecadas con ese amor. No importa cuanto lo intenten, siempre se interpondrá el el amor reciproco que tienen los dos."
Akane relajo su posición. "Tu no sabes absolutamente nada de nosotros. Es mas, a mi no me interesa con quien se case Ranma. Por mi que se quede con cualquiera Nuestros padres acordaron sin nuestro consentimiento."
"Te equivocas, mi querida Akane Tendo." Expreso Yoichi presumiblemente. Se toco su camisa negra, donde esta situado su corazón.
Akane miro con intriga a Yoichi
"Este cuerpo, este hermoso cuerpo esta diseñado a partir de las esencias de muchos artistas marciales y, por lo tanto, sus cualidades: tecnicas, personalidad, sentimientos, emociones, peculiaridades, dones... recuerdos y su dolor." Esta ultima palabra la dijo con delicadeza. "Por lo tanto, puedo sentir lo que tu sientes. Por ejemplo, tu amor por Ranma Saotome."
"¡Eso es mentira!" Contradijo Akane con negación. "¡Tu no sabes lo que siento por Ranma!"
"¡Oh! Por supuesto que si. Te preocupas por el, en su bienestar. Pese a que te escupe ofensas sobre tu, digamos, físico de gorila..."dijo en tono burlón, regodeándose por hacerla enojar. "Son inseparables. Cada vez que las tres obsesas hacen algo para arruinarlo, las amapolas florecen, pero se marchita la paciencia y el odio nace de sus traumas."
Sus mas profundos pensamientos se entrelazaron por el hilo del destino
...un grito sonoro se dio paso por su reposo eterno...
"Akane, te conozco, se que eres fuerte y podras resistir, solo escucha mi voz ¡creo en ti!"
"Ranma..."
Se acordó de las exasperadas palabras de su prometido, implorando a todo volumen que abrace sus ojos y siga debatiéndose entre la vida y la muerte, entremedio de la catástrofe que ocurría en Jusenkio. Sus pequeños lo habían oído con claridad, aun con las magnificas alas que presumía Saffron con tanto jolgorio. Aunque odie admitirlo, amo incondicionalmente a Ranma con todo mi corazón, pensó Akane absorta en antaño.
Ella se trago su orgullo. "Si, tienes razón, amo a Ranma Saotome." Confeso la peliazul con firmeza.
Su confesión satisfaso de sobremanera a Yoichi.
Los cabellos de Akane, mojados, sombrearon sus ojos. "Pero... se que también el me ama, yo misma lo escuche en Jusenkio. Aun puedo escuchar su temblorosa voz en mis oidos cuando era una muñeca de trapo, implorando que resistiera, que continuara adelante pese a las adversidades. Pero nuestra boda no se concretara, debido al renacer de la oscuridad que tienen algunos en su corazón." Levanto su rostro. Miro fijamente a Yoichi. "El es mi prometido. Pero, si mantenemos nuestras manos unidas y nos esforzamos para que nuestro amor se concilie, entonces nuestra vidas se enlazaran... ¡El defendera el amor que siente por mi, y yo tambien lo hare cueste lo que me cueste!" dijo Akane con firmeza
Yoichi aplaudió satisfecho. "¡Estupendo! Así me gusta. Nadie antes te había hostigado para confesar esa verdad. Por lo que puedo decir que soy el primero. " Alardeo.
Con un entrecejo de ojos, Akane se puso en posición de pelea. Se mostro valerosa e intrépida, pero, al otro lado de la moneda, quería colapsar del miedo que desprendia ese sujeto.
"Di lo que quieras. Pero esta vez no te será tan fácil derrotarme... Ya no me humillaras como lo hiciste anteriormente." Sentencio la Tendo.
Ranma enarco ambas cejas, medianamente sorprendido. "Esto si que es de admirar. Por una vez en tu vida, no cederás ante la captura, al contrario, lucharas para sobrevivir y no serás una carga para las tontos que intentan salvarte. Me impresionas cada día mas, mi querida marimacho."
"Tomare eso como un cumplido. Esta vez no emprenderé la huida, sino protegeré a mis seres amados del acecho de la oscuridad."
Yoichi dio una sonrisa lasciva a la peliazul. "Ja¡ Que esperas. Tengo muchas ganas de ver a esta estoica Akane, la que tuvo el estoicismo de sacrificarse y convertirse en una muñeca de trapo para detener a Saffron." Sonrió maliciosamente, poniéndose en posición de combate.
Akane salió disparada como una flecha hacia el hijo de nodoka. Sin embargo, Akane dejo que la furia influyese en sus movimientos, por lo que estos eran fáciles de anticipar. Rápidamente, Ranma, dado a conocer recientemente como Yoichi, salió de la orbita de Akane, la cual esta solo golpeo aire y agua. Descontenta por no ser lo suficiente rápida a comparación de su rival, esta seguía cargando en contra de su enemigo, el cual subió su pierna izquierda, dándole una poderosa patada a Akane en la nariz. La chica se tambaleo y retrocedió al momento del impacto.
"Es mucho mas fuerte que Ranma. Si el no fue capaz de tocarlo, yo solo soy el aperitivo. Maldita sea, que hago."
Se paralizo enormemente por el daño que tuvo que apaciguar. Consecutivamente, después de tolerar el dolor en esa parte de su cuerpo, miro al cielo donde el malvado Ranma estaba suspendido. Asimismo, este focalizo toda su aura azarosa de chi afuera de su extasiado cuerpo, moldeando unas especies de espatulas, comparadas con el fuego azul.
"¡Shuriken enerugīhera! (Espátulas Shuriken de energía)" Exclamo Yoichi.
Akane observo con desconcierto la ráfaga imparable de espátulas. Acorralada, la peliazul eludió una gran parte de las espátulas con gran velocidad en sus movimientos prescritos. Para su mala fortuna, algunas dieron directamente al blanco, rasguñaron la piel descolorida de Akane, mientras que otras destajaron el atuendo de furinkan. Con el uniforme hecho harapos y la sangre brotando del tejido descubierto, su determinación y terquedad quedo por los suelos. Akane fue abatida en un abrir y cerrar los ojos.
"Maldición. Esas espátulas parecen mas unas dagas, bañadas en un fuego abrasador." Pensó Akane con una laboriosa respiración. Es entonces cuando algo se le vino a la mente. En los documentos de los que hablaban de los puntos débiles de Yoichi, en una de los fragmentos hacían alusión al aura de combate calórica que desprendía, actuando como un horno quemando un cuerpo en un crematorio.
"Shampoo tiene unas intensas ganas de desacerté de ti. Su esencia lo predica."
El cuerpo de Yoichi, al estar su aura de batalla operando, soltaba algunos indicios de vapor.
"¿Que estas tratando de deci-"
Lastimosamente, para chica, fue neutralizada por el agarre que le hiso Yoichi en su cuello. Para Yoichi esto era un juego de niños, pero para Akane se define una muerte segura. Akane forcejeaba la constricción, pero su fuerza disminuyo preocupantemente, ya que la magia maligna continuaba esparciéndose por el organismo de Akane, provocando así una perdida de gravísima de fuerza y velocidad. Aparte de eso, sus reflejos se volvieron mas torpes, y era todo un reto mantener una postura combativa por un tiempo prolongado de tiempo.
Mientras la muchacha se zafaba, le dijo: "¡Desgraciado sin alma! ¡¿que le hiciste a Akari?!
El encogió un hombro. "Solo le di algo que Ryoga nunca fue lo suficiente hombre para entregarle je, je, je, je." Soltó una risita por lo bajo. "Yo... la viole."
Esa trágica revelación dejo a Akane azorada de la sorpresa. Las fotos que fotografió Nabiki eran pruebas irrefutables, imposibles de rebobinar y volver al pasado para intervenir eso momento de abuso. Los dientes chirriaron y sus lagrimas de amargura se mezclaron con el torrencial fenomenal. Odio. El odio cascareo el corazón de Akane. Su amiga, Akari, acaba de ser violada y, luego de ser violentada, asesinada por su trasgresor.
"Fue todo un espectaculo en la cama. Saborear cada parte de ella me enseño que hay mujeres que son fieras en el sexo. Todo de ella me encantaba: sus senos, su boca, su piel, sus gestos... sus gritos de dolor. Aun lo recuerdo como si fuera ayer en que lo hicimos. Pero ella se oponía, asique aplique un poco de mi fuerza para domesticar a la dama. No se que clase de mujer puede rechazar a alguien tan hermoso y bello como yo. Supongo que tienen un mal gusto algunas. ¿No crees lo mismo, mis pechos planos? ¿Hmm?"
Al mismo tiempo que se vanagloriaba, una aura negativa envolvió a la mujer que tenia estrangulada.
"¡TE ODIOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!" Un Rugido ensordecer se disolvió en el entorno.
"El sentimiento es reciproco." Objeto.
Con un vespertino ataque, la Tendo alzo una de sus piernas y, por consiguiente, apuntillo el rostro de Yoichi. Gracias a esto, esta logra arriarse del agarre. Sin malgastar mas tiempo, con su aura negativa de batalla activada y ansiosa por ver derramo de sangre, cargo en contra de su oponente.
"¡ESTO ES POR AKARI, CRETINO MAL NACIDO!"
Un zurdazo dejo anonadado a Ranma, quien se rezago al fuerte puñetazo. Continuo con un rodillazo directo su cara desprotegida, para después propinarle un golpe en todo el vientre. Asimismo, Ranma fue empujado hacia atrás.
"¡ACABERO CONTIGO! ¡Y VENGARE LA MUERTE DE CADA UNA DE LAS PERSONAS QUE MATASTE SIN MISERICORDIA!" Grito.
Y con toda su fuerza y aura concentrada en un único pero formidable golpe, incrusto todo su puño en la mejilla abollada de su contrincante, quien, posteriromente, fue impulsado en retroceso y atravezo el muro de una casa.
"Ha... ha... ha... ha..." Aun tenia el puño en alto. Su aura de batalla se inhabilito, mientras Akane se desplomaba por la acera de la calle. "Me hubiera gustado verte pudriéndote en una horca." Akane gruño. La sangre de sus heridas escurrían por el tejido vulnerado. De pronto, su rostro cambio a una de pena.
"Buen golpe; sin piedad y eficaz, inclusive capaz de dejar en ridículo a la enorme resistencia de Ryoga. Pero yo soy invencible." Aclaro una voz proveniente del muro demolido.
La joven, irradiando pavor, giro su cabeza donde provenía esa voz elocuente. Saliendo de la almena, se sacudió la suciedad.
"¡¿Como es que no le hice ningún daño?!" Pensó con incredulidad. "Ese animal bárbaro tolero todos mis ataque. Maldición, como pude estar segura de ganar a ese asqueroso... Como..." Se maldijo asi misma en su pensar.
Después de cepillarse su camisa, volteo a ver la Tendo con odio. "Bueno, el tiempo que te queda aquí esta casi por finalizado." dijo.
"¡Ni pienses que te dejare con vida, no sin antes acabar con tu existencia!" Sentencio colérica. "Una vez que acabe contigo, la muerte de Akari y de muchos otros quedaran impu-" De pronto, su cuerpo se extenuó, provocando a si que Akane caiga al pavimente, perdiendo su sensibilidad en cada una de sus articulaciones.
"Vuelvo y repito: el tiempo en tu estancia se dio por terminado. Ahora..." Se acerco a ella, se acuclillo y la sostuvo la raíz de su cabellera. La miro directamente a sus ojos. "... te diré una ultima cosa: una vez que la vida de Ranma perezca, y ya de paso a las de tus amigos, no te matare, quiero que presencies la muerte de tu padre y Nabiki... Y la ángel de tu hermana mayor, a la que tanto aprecias y la vez como la sustituta de tu difunta madre, le amputare sus brazos para sentir el placer de oir sus gritos de agonía, je, je, je-
Recibio un escupitajo en el dorso de la nariz. Asqueado por la baba destilante, se la limpio con el pulgar.
"¡NO VUELVAS A HABLAR DE MI PADRE Y DE MIS HERMANAS, PORQUE, SI TIENES PUDOR DE HACER ESO DE NUEVO, TE JURO QUE TE MATARE CON MIS PROPIAS MANOS!" Grito Akane a todo pulmón.
"Eres un asco, Akane Tendo; mujer agresiva y violenta, para mi parecer." Soltó un Suspiro. Subió y puso su pie en su cabeza. Por consiguiente, holló su cabeza con aun mas fuerza.
En la parte de Akane, apretó sus dientes para anodinar el infernal dolor que era sometida. Apretó sus dientes, pero era inevitable no sollozar; sus lagrimas amargas aceleraron el paso por su mejilla y terminaron hundiéndose por un charco de agua. Tarde o temprano, ella cedió por la presión de la pisada que se clavaba en su cabeza. El rato paso, su visión se nublaba y perdió lenta, si no que dolorosamente, la conciencia. Por ultima vez, la oscuridad, fatua de arrogancia y excéntrica, reprimió sus deseos luchar contra esa fuerza antinatural.
.
.
.
.
.
.
.
.
"Akane... Akane... Akane... ¡Akane...!" Resonó un voz detrás de su oreja. Desorientada, la voz se afino. "Hermanita, ¿estas bien?"
"¿Na-Nabiki, e-eres tu?" Tartamudeo.
La codiciosa puso en su regazo la cabeza de su hermana enferma. Su visión nítida aclareo.
"Akane, estuviste diez minutos inconsciente. ¿Me puedes decir que fue lo que te paso?"
Nabiki aupó a su hermana con delicadeza. Auxiliada por su hermana de al medio, un retumbon mas telúrico mas fuerte que el de antes, ocasiono la total atención de Akane. Miro por encima de su hombro, y lo que contemplaba le daba una mezcla de tristeza, ira, odio e impotencia en crecimiento continuo.
"Ya no hay tiempo, Nabiki, debo apresurarme en ir a su auxilio"
Nabiki pensó en lo extremadamente terca que era su hermana pequeña, intentando convencer que acudir al rescate de Ranma era un suicidio. Por donde lo mires, una parte de Akane le daba la razón a la mezquina de su hermana.
"¿Que mosca te pico, hermanita? La cuidad esta en ruinas. Aunque cualquiera de nosotros trate de ayudar, es remotamente imposible hacer algo al respecto. No importa cual sea nuestra determinación o el espíritu heroico que contengas, jamás triunfaras en contra del demonio. No se si eres muy valiente o muy tonta para relacionarte algo como esto; esta fuera de nuestro alcance." Razono Nabiki, sonando con una absoluta severidad.
"¡Como si te importara!" Murmuro su hermana, no creyendo la preocupación de Nabiki.
"Esto no se trata de negocios o dinero, esta vez si me preocupo por ti. Puede que me tachen de codiciosa, avara, e incluso una chantajista, pero también tengo un limite, y soy muy consiente de algunas de mis acciones. Te lo aseguro al cien porciento. Ahora vamonos al dojo, ahi estaremos bajo protección ante los ataques." Dio vuelta a una ciudad hecha solo a escombros. "Al menos, aproximadamente unas horas."
"¿Limite? Esa no te la crees ni tu, Nabiki." Entonces, al oír el sermón que acaba de explicarle a su hermana, hiso oídos sordos. "Estoy cansada, Nabiki. No quiero quedarme sentada para solo mirar como todos terminan muriendo. Es por eso que, aunque muera, estoy decidía a enfrentarme a este problema. Ellos me necesitan mas que a nadie. No me quedare a brazos cruzados." Aseguro. Luego de eso, hecho a andar coetes a la ciudad, sin preguntarle a Nabiki.
-Nerima-
Luego de ser expectantes de la carnicería que se libro en la escabrosa ciudad de Nerima, no tomaron en cuenta, o solo lo ignoraron, los asiduos destrozos que estarían a punto de volar. No obstante, la hecatombe que provoco la cantidad de muertes mas grande que tuvo el distrito, afecto severamente el lugar donde el enfrentamiento se llevaría a cabo en primer lugar. El empedrado suelo, toneladas y toneladas de escombros y trozos de hormigón, ladrillos y asfalto llenaban el escenario ruinoso y mal cortado. Aun con este contratiempo, se las arreglaron, antes de entrar a la acción, para causarle algo de daño a su oponente que, muy confiado, solo evito la imprecisa mala coordinación de los tres artistas marciales; en resumen, que fallaron irremediablemente en su emboscada.
Al contraste, Yoichi se sintió desilusionado de los artistas marciales de los que se compone. Seria fácil y aburrido, pensó el Ranma o mejor dicho Yoichi, ya que presencio poco interés en los artistas marciales que, peleaban y se tiraban insultos malintencionados, no serian un problema para nada complejo en su evolución.
Detrás de todo eso, el lujurioso de Happosai increpaba a los tres por la escueta celada.
"¡Ustedes son unos inútiles!" Reprocho el pequeño anciano. Ranma se enfado con el, y lo agarro del borde de su gi.
"¡Guarda silencio, viejo libidinoso! Tu nos engañaste a todos con tus tontearías. De una buena vez admite que te equivocaste." Reprocho Ranma. "¡Ahora cooperara para vencer a ese maldito! ¡¿me escucho bien?!"
El enano sonrió. "Ji, ji, ji, ji, ji."
Ryoga ve incrédulo a Haposai. "¿Que le causa tanta gracia, maestro?"
"Lamento decirte que fuiste un pésimo alumno, Ranma. Nunca debiste tratarme con tal mala consideración a un frágil anciano como yo. Deberías saber que también fui parte importante para esto" Reprendió. "¡Encima no me agradeciste por retrasar a ese sujeto hasta que ustedes tres llegaran!
Era como convencer a un borracho empedernido que deje de beber, se quejo Ranma absorto en su mente. El ya estaba en su limite en convencer a Happosai que los ayudase en combatir contra el demonio, que casi les causa una muerte en trozo completo a los Tendo. Por intuición, volteo su mirada hacia la piña de escombros y hormigón, que algo se retorcía entremedio de la pila de piedras uniformes. Dándose cuenta de que su estrategia y distracción no duraría lo suficiente para mantener a ese maldito enterrado bajo llave, el de pelo azabache se enfureció abrumantemente de Happosai, en el cual recaía un gran apoyo y fuerza física para matar a ese psicópata. Ryoga y Moose, preparados y puestos en discreción al máximo, mantuvieron su mirada a los montaña de piedras para no ser sorprendidos por su próximo contrincante.
"Escúcheme muy bien, viejo asqueroso, no tiene idea cuanto lo odio, la verdad. No me agrada y no le agrado. Me encantaria golpearlo hasta dejarlo aballado en el piso. Pero debe entender, y aunque odie admitirlo, que necesitamos su ayuda en este momento. Ese maldito casi nos lleva a la tumba hace una semana atrás. Después de esto, si quiere puede seguir robándole las prendas intimas a las chicas, pero ahora necesitamos la mayor cantidad de personas posibles. ¿Nos ayudara?" Pregunto y reclamo Ranma, ya en el punto de desesperarse.
"¿Terminaste?" dijo Happosai en tono cansino.
"Si"
"¿Te calmaste?
"No
"Pese a que me siento un poco mal por la muerte de muchas personas, creo que me retirare para dejarle el trabajo duro a ustedes. Ya hice mas que suficente en sustentarles la verdadera identidad de ese hombre. Mientras, en cuanto a mi, seguiré buscando algunos de mis mas rebuscados tesoros en alguno otro sitio que no explorado. Bien, si me disculpan ahorita..."
Ranma mostro sus dentadura. Necesitaba desahogarse con ese viejo, de verdad. "¡Cobarde e hipócrita!"
"¡Happo-dai-karin!"
La bomba estallo, y Ranma retrocedió si ver nada mas que humo de la bomba; el anciano escapo como un cobarde.
"En el fondo, no tenias esperanzas de incentivarlo a luchar en nuestro equipo." Admitió el chico cerdo, el cual estaba algo enfadado con el maestro de la lividez.
"Quien sabe... O talvez debiste mostrarle tus pechos de mujer a Happosai." Sugirió Moose, ofendiendo un poco a Ranma.
La mofa inoportuna del cegatón provoca que Ranma le dispare una mueca desdeñosa y un gruñido leve, sin embargo, este logra ignorar esto.
"Tal parece que ese viejo no nos ayudara, no nos queda mas remedio que arreglárnoslas nosotros mismos."Inquisito el chico de la coleta de caballo.
Ryoga, azorado, detecto algo entremedio de los numerosos escombros. "¡Oigan, chicos, mejor estén preparados para lo peor!"
Los escombros se desperdigaron y dispararon por todo el ambiente destruido, desatando así una soltadora de guijarros y trozos enormes de piedras. Luego de este acontecimiento desagradable, dejaron que la neblina polvorienta grisácea amainara de su vista periférica. Todos entrecerraron sus ojos; Moose se acomodo los lentes. A continuación, un poco después de que la polvoreada se disipara de su derredor, una figura llamativa, con su aura corrompida habilitada, se mostraba exento de su ubicación inicial, al parecer. Las motas se fueron, y la entrañable silueta de Ranma (Yoichi Saotome) se destapo de la niebla.
"Lo veo y no lo creo." Dijo Moose, con su voz seria y algo eceptico. "Al principio, lo que me dijeron parecía una broma de mal gusto, pero esto escapa de toda lógica." Mientras pensaba. "Maldición, dos Ranmas que son un dolor de espalda en mi relacion con mi amada Shampoo. Esto es el colmo" Moose se lo pensó mejor. "Detente ahi... Si logro vencer a este Saotome, Shampoo vera lo increíble y hábil que puedo ser, lo que probablemente desencadenaría mi casamiento con ella."
El se imagino todo la ceremonia en su fantasiosa cabeza: el pastel de bodas, los invitados, la musica, y lo que mas le importa, el vestido de novia de Shampoo y el en el altar. Al menos, no puso la cara de bobo en ese momento.
"Te dignaste de salir de tu escondrijo. Y lamento haberte hecho esperar una semana entera para este enfrentamiento." Ranma apretó sus puños blancos. "Entrene mucho para poder vencerte. ¡Y pagaras por todo lo que le has hecho a Akane!" Dijo Ranma a su rival.
Yoichi quedo quieto por un buen lapso de tiempo antes de responder. Escudriño con sus veteados ojos carmesí a Ranma, Hibiky y Moose. Al ver a Ryoga en el campo de batalla, se sorprendió de verlo por aquí; al parecer, una de sus técnicas devastadoras no fue nada para Ryoga, el cual salió volando al cielo, perdiéndose de la vista de Ranma. Bizco su vista hacia Moose, el pato ciego por excelencia. No seria un gran problema, firmo el demonio con gran seguridad, claramente subestimando las avanzadas habilidades de armas ocultas que poseía Moose.
"Aver, hagamos un recuento." Quiso divertirse. "El trio dinámico: el afeminado, el pato y el puerco." Se burlo.
"Ahórrate esos malos chistes. Me asegurare de enviarte al otro mundo después de esta pelea." Amenazo Ranma. "También sabemos quien eres, que eres un experimento fallido o algo asi."
"No sin antes de matar a tu prometida."
Ranma frunció el ceño. Vivir con la muerte de Akane en su conciencia lo perturbaba día con día. Hace una semana atrás, exactamente el día cuando Akane fue estrangulada, Ranma se volvió mas sobreprotector con su prometida. El no podía seguir viviendo con la idea de su muerte rondando en su cabeza. Se sentía vacío de soledad y tristeza, asemejando cada lagrima que borboteaba de sus ojos al presenciar Akane en sus brazos colgados. Igual que en Jusenkio, Ranma preferiria la muerte que vivir sin Akane Tendo. Perderla deducía el fin de su vida, su conciencia, su futuro sin ella junto a su lado.
Pensando en Akane muerta en Jusenkio lo atormentaba, lo perseguían en sus sueños y pesadillas por igual. Un rostro vacío y pálido se sembraría en su rostro si Akane no muriese en esos peores días de su vida. El dolor de cabeza apareció, y las dagas en su corazón se incrustaron en su pellejo.
"Te amo, Akane..."
Repitió y repitió.
Ella era su mundo, su universo entero.
¿Por que no se lo confeso cuando estaban en la azotea? Solo era su ultima oportunidad, si era la ultima, claro. Tenia dudas de si podría sobrevivir. Aunque tendría la ayuda de Ryoga y de los otros, no había ninguna garantía de vencer a un demonio como el, teniendo en su posesión la magia mas poderosa y vieja de la antigua China. Pero, si conseguir la victoria se trataba de sacrificar la vida para por fin aniquilar a su enemigo que tanto odia, estaba mas que dispuesto en morir o perder extremidades conjunto con su enemigo para mantener esa sonrisa que tanto amaba de ella.
Su ira se aumento a gran medida. "No podrás hacerle daño a ella, porque yo estoy aqui... apunto de enfrentarme a ti, e impedir que ese fuego, su sonrisa, se desvanezca." Pensó.
"Que te pasa, Ranma, ¿te comieron la lengua los ratones?"
Se dio cuenta que estaba pensando todo este rato. Desvio sus ojos a su enemigo sonriente de maldad y malicia.
"Estaba planeando la forma exacta de acabar con tu vida de una buena vez." Mintió. "Considérate hombre muerto antes del atardecer."
"Esta actuando mas despiadado de lo que me pensaba. Atacar a la estupida de Akane desperto su lado asesino hacia mi. Esto pinta muy bien." Penso Yoichi, confiado de sus habilidades." Entonces, si es q
Ryoga, aun lado de su amigo, pensó: "Algún problema grave tiene Ranma; es mas despiadado mas de lo normal con sus enemigos. Sin embargo, simpatizo con el. Ese maldito le hiso daño a mi querida Akane, y tiene que pagar con la muerte." Una punzada en el corazon le estoco a Ryoga. "¿Que fue eso? Porque siento este dolor en mi pecho." Ryoga reacciono. "Este no es momento de pensar en eso. Espero que Akari este bien, pero... porque me siento asi..." Penso Ryoga. Un signo de un mal presagio.
"Miren, he pensado, para que todo esto sea mas divertido, no usar nada perteneciente a ustedes, porque me da un asco terrible usar las mismas tecnicas que provienen de su arsenal." Se burlo de los tres. "Confio en que tengan al menos una estrategia."
"¡Nos esta subestimando!" Se enfado Moose.
"Por mi, no me interesa." Mintió Ranma. Le desagradaba la idea de enfrentarse a un oponente que no usaba su máximo potencial. "Pero que quede claro que este sitio, donde mucha gente que gritaba y te pedían perdón por nada, compartirás su mismo destino. ¡¿Me entendiste?!"
Yoichi sonrió complacido. "Je, je, je. Bien, como quieras."
"¡Ran-chan!"
"¡Airen!"
Dos de las prometidas del trenzudo se abalanzaron y, como siempre comenzaba en estos casos, abrazaron fuertemente a Ranma del brazo. Asimismo, este intento a regañadientes en quitárselas de encima. Evitaría cualquiera de sus maquinaciones, en especial de la Amazona, que casi nunca dejaba tirada al retrete su oportunidad en conquistar, mejor dicho Hechizar, a su amor de su vida. Fue todo un efecto en cadena, pues Moose increpo y ataco a Ranma por tener a Shampoo en sus brazos, y Ryoga lo trato mal por ser un patán de campeonato.
Mientras tanto, unos pocos metros mas alejado, Yoichi, cansado de que siempre fuese lo mismo (ciclo), analizaba sus uñas para enconcantra algún rastro de mugre, pero su vena de su sien sobresalió.
"¡PODRIAN DEJAR DE IGNORARME, O EMPEZARE A EXTIRPARLES A CADA UNO DE SUS ORGANOS!"
Casi sin excepciones, todos se posicionaron de manera combativa.
Carraspeo un poco para ajustar su voz. "Con gusto les asegurare sus lapidas en un cementerio. El ángel de la liberación cumplirá su cometida de excarcelarlos de su vida monótona y vanidad. Ese entonces que dormiremos en el descanso eterno de mis brazos."
"Mejor Guarda silencio, ridículo, porque tu eres quien caera. ¡¿Estan listos, chicos?!
"¡SI!" Asintieron todos.
"¡Gozare cada rebana de carne que se desvincule de su cuerpo!" Grito con entusiasmo y ataco.
Y en un abrir y cerrar de ojos, los seis artistas marciales cargaron en dirección hacia Yoichi, el cual se planteo en repetir la misma operación.
Todo se disolvería, y sus ojos distanciados veían a una achica de cabello corto siendo expectante de la escena. Podía sentir su confianza fluyendo en sus venas, y la determinación de acabar con el mal la consumía.
Ella... estaba lista para socorrer y unírseles a sus amigos y rivales.
.
.
.
.
Continuara...
Nota del autor: Maldita sea yo. Debería dejar de hacer promesas que no cumpliré. Pido perdón por mi demora. En fin, por fin les traje este capitulo que espero hayan disfrutado.
Agradecimientos:
Guest: Gracias por compartir tu reseña. Hablando enserio, tarde o temprano subiría el capitulo anterior. Hay días en los que no tengo ganas de escribir y no me siento lo suficiente motivado.
DULCECITO311: Hola, y gracias por comentar tu opinión. Y lo de Shampoo, bueno, es que estaba aburrido de ver otras historias de que siempre sea la antagonista principal. Quiero que ella se de cuenta, poco a poco, del daño que puede ocasionar con su obsesión por Ranma y todo eso que todos sabemos hasta el cansancio.
Hikari: Gracias por el comentario. Sobre lo de Akane, tienes razón, creo que la estoy dejando de lado mucho en esta historia, al menos en este capitulo le di mas importancia que cualquier otro. La inspiración para hacer el villano principal la saque mas principalmente de Cell, al menos el concepto sobre el termino de las esencias. Espero leerte de nuevo.
Wergar82: Lo actualice porque habian muchas faltas de ortografia (me faltaron muhas por arreglar, sin embargo). Gracias por tu comentario amigo o amiga.
Esos son todos los que comentaron el capitulo anterior. Despues de esto, me ire a dormir un poco, ya que me quede hasta las 4 de la mañana despierto, y esto lo estoy escribiendo con un cansancio terrible. Espero que lo hayan disfrutado. Les invito a dejar su reseña, su Follow o favorito y eso... creo. En el proximo capitulo cambiare la calificacion a M, si es que la historia seguira tomando el mismo rumbo.
¡Me despido desde aqui y que tengan un buen dia! Ahora me voy a dormir...
