¡Holaaaaaa estrellitas!

¿Como me las trata el universo? espero que bien y se estén resguardando en sus casas de todo mal *cofcofcovidcofcof* en fin.

Quiero darles las gracias por sus lindos comentarios en este dramón novelero en algún momento haré una sección de responder a los comentarios para agradecerles personal y enormemente su apoyo y claro responder a cualquier cosita.

De verdad que me hacen muy feliz

¡Gracias!

Sin más que agregar los dejo con el capítulo de hoy

¡ACLARACIÓN!

Los personajes de esta historia son creaciones de un Dios cruel pero justo de nombre Hajime Isayama

Capítulo 7

—¿De verdad vas a dejar que se acerque a ella?— Sasha quien se encontraba en su despacho de visita lo miró de brazos cruzados— Es una locura que no voy a aceptar, Armin

—Pero Sasha...

—Estamos hablando de la estabilidad emocional de Mikasa.— dijo poniendo sus manos sobre el escritorio— No quiero que ella vuelva a sufrir, tú la viste caer en depresión por Eren ¿No? Todos sabemos que si Mikasa no hubiera tenido ese accidente las cosas seguirían igual o peor, Armin— Armin desvió la mirada y Sasha suspiró

—Lo sé...

No sabía qué hacer, Eren le había dicho que quería estar cerca de Mikasa, pero una cosa era estar cerca de ella y otra era llevarla a los lugares que frecuentaban en el pasado para que lo recordara, era una locura, Eren estaba siendo egoísta con Mikasa y con ellos. Tenía que hablar claramente con él y exigirle que se fuera o de lo contrario los esfuerzos por proteger a Mikasa serían en vano, pero conociendo como conocía a Eren el pasaría por encima de lo que le dijeran solo para conseguir lo que quiere.

—Hablare con él, Sasha.

—Eso espero, Armin. Por cierto— Sasha sacó un sobre de su bolso— casi lo olvido, ten— dijo extendiéndole el pequeño sobre a Armin quien lo tomó y lo abrió

—¿Qué es esto, Sasha?

—Jean me pidió que las hiciera, es una reunión sorpresa, piensa pedirle matrimonio a Mikasa— Armin la miró con sorpresa ya qué se esperaba todo menos esa noticia

—¿Matrimonio?— pregunto Armin y Sasha asintió con una sonrisa

—Sera la boda del año si Mikasa dice que sí— la chica se emocionó dando pequeños aplausos— yo me encargaré de que sea un boda de cuentos de hadas con un banquete al estilo de vikingos con mucha carne y pan— Armin le dio una sonrisa que más parecía una mueca

—¿Desde cuándo lo estás planeando?

—Apenas Jean me dijo que había comprado el anillo, me emocioné y pues empecé a organizar todo

—Sasha... ¿No crees que te estás adelantando a los hechos? digo, Mikasa puede que le diga que no...

—Tonterias no lo hará, Mikasa quiere a Jean

—¿Estás segura?— Sasha lo miró alzando una ceja

—¿Qué es lo que sabes, Armin?— El rubio levantó las manos al ver el rostro enojado de Sasha frente a él

—Yo no sé nada, no me meto en los asuntos amorosos de Mikasa— Armin se relajó— No habla conmigo de esas cosas a pesar de que soy su mejor amigo— Sasha se relajó— pero la conozco lo suficiente como para saber que Mikasa no está segura que si lo que siente por Jean sea amor— Armin suspiró— y me parece realmente algo precipitado de tu parte, Sasha

—Yo... se que es precipitado y que puede que diga que no, pero tengo la vaga esperanza

—Todos sabemos que esa relación es un error, Sasha. Nosotros tuvimos mucho que ver ahí— Sasha tomo asiento frente a Armin tapando su rostro

—Solo quiero que mi mejor amiga sea feliz— destapó su rostro y miro al rubio frente a ella— Y sé que su relación con Jean es un error pero, sé que él puede hacerla feliz, Armin. Por eso me emociona saber que él quiere dar ese paso— Armin sonrió levemente comprendiendo la preocupación de Sasha

—Tienes razón, lo siento todo esto de Eren en la ciudad y Mikasa teniendo esos repentinos flashbacks justo ahora con él aquí, me han estresado un poco— Sasha suspiró y miro un punto vacío en el suelo

—Eren... ¿Quien lo diría? Se fue sin darnos explicaciones y vuelve como si nada. A veces tengo miedo de él, Armin— el rubio la miró extrañado

—¿Porqué?

—¿Y si Eren llegó a desenmascarar nuestra pequeña mentira? Cuando Mikasa lo recuerde y sepa que le estuvimos mintiendo sobre muchas cosas ella nos va a odiar

—Yo no lo sé, Sasha. Pero supongo que sí se sentirá traicionada por nosotros

Eren se encontraba aún en su casa, había dejado de recoger las cosas pensó en que si vendería esa propiedad lo haría con todo, su padre había construido ese hogar a fuerza de mentiras y para él ese lugar ya no tenía valor puesto que no estaban las únicas personas que lo hacían un verdadero hogar. Su madre y Mikasa la única persona que él podía llamar familia. Claro estaba su medio hermano mayor pero nunca se crió con Zeke lo suficiente como para tener una relación de hermanos normal

Respiró profundamente, sabía qué en cualquier momento debía irse a Marley. Que tenía que hacerle caso a Armin y dejar que ellos siguieran su vida cómo ésta seguía... sin él. Pero ahora que había vuelto no quería irse, algo lo retenía aquí y ese algo sabía que tenía nombre y apellido: Mikasa Ackerman.

"—Acércate a ella, deja de ser un extraño"

Las palabras de Mikasa daban vuelta una y otra vez en su cabeza

—Mikasa...

Quería de verdad que lo recordara, al menos quería pedirle perdón por como la había tratado años atrás, por no haberse dado cuenta del daño que le hacía, quería a su mejor amiga de vuelta, la chica que lo seguía ciegamente a donde fuera, y que siempre estaba ahí para apoyarlo en cualquier tontería que hiciera, pero ya era demasiado tarde para arrepentirse.

De repente recordó el diario y las fotografías que había encontrado en la habitación de Mikasa. Lo mejor sería llevárselas a Armin para que él viera que hacer con ellas

Así que tomo la pequeña caja donde había metido todo lo de Mikasa para de inmediato llevárselas a Armin.

Le envío un mensaje diciéndole que necesitaba hablar con él y este le contesto que justamente estaba libre por lo que no esperó más y arranco el auto camino al despacho de Armin

El camino se le hizo corto ya que venía pensando en lo que le diría a Armin cuando lo viera

"Hola Armin, vengo a dejarte las cosas de Mikasa porque no sé qué hacer con ellas, por cierto leí su diario como un libro y ahora estoy arrepentido de todo lo que le hice en el pasado, pero no te preocupes me iré con mi sentimiento de culpa a Marley en el primer vuelo que salga"

No, Armin lo regañaría por haber invadido la privacidad de Mikasa ¿Pero que podía hacer? La curiosidad lo estaba matando y bueno literalmente lo mató

Llegó sin problemas al edificio y subió con la pequeña caja en sus manos. La misma chica que lo había recibido aquella vez estaba ahí de nuevo

—Buenos días señor, ¿tiene cita para hoy?

—Oh no, soy... Soy Eren el amigo de Armin, ya nos conocimos ¿recuerdas?— la chica lo miró tratando de recordar y luego sonrió

—Es cierto, usted es el señor Jaeger ¿Verdad?— Eren asintió— enseguida le comunicaré al doctor de que está aquí

Esperó a que la secretaria de Armin hablara con él y tras escuchar un "Dile que entre" él le sonrió levemente a la chica y entró viendo a su amigo tras una montaña de carpetas que podía tomar como historiales clínicos de sus pacientes

—Eren...—dijo Armin levantándose dejando una carpeta sobre el escritorio

—Estas muy ocupado por lo que veo— dijo colocando la caja en la pequeña mesa ratona

—Solo estoy deshaciendome de archivos viejos, nada interesante. ¿A qué debo tú visita?

—Vine a dejarte algunas cosas de Mikasa.— Eren suspiró y caminó tomando la caja de nuevo para entregársela a Armin en sus manos— son algunas viejas fotografías y su diario— Armin lo miró alzando una ceja

—¿Lo leíste?— Eren hizo una mueca

—¡Pfff! No...— dijo alargando la última vocal mirándolo a lo que Armin le dio una media sonrisa

—Si algo aprendí en toda mi vida conociéndote es que cuando mientes tus orejas se ponen rojas, Eren.

—No es cierto— dijo el castaño tapando sus orejas y Armin rió

—Solo dilo, lo leíste no hay otra explicación lógica a lo que me dijiste el otro día, eso de querer estar cerca de ella— el castaño soltó todo el aire de sus pulmones

—Si, bien ya, lo hice, lo leí— dijo Eren tomando asiento en el mueble— La curiosidad me mataba. Lo que me dijiste de que ella estába enamorada de mi, no salía de mi cabeza y... ¡es que no puedo ser tan ciego, Armin! ¡Me quiso desde que éramos unos niños! Y yo la ignoraba, incluso me molestaba porque ella siempre me protegió de tantas idioteces que cometí, hasta esperó que la invitara al baile de graduación y terminé invitando a otra chica dejándola a ella sola en su casa ¡¿Porque demonios no me dijiste nada?!

Armin lo observó serio y caminó hacia su escritorio guardando el diario y la fotografía de ellos tres en la pequeña gaveta

—Quería que te dieras cuenta por ti mismo de los sentimientos de Mikasa hacia ti, pero no pensé que fueras tan ciego— dijo caminando de vuelta a Eren y sentándose frente a él

—Todo este tiempo ella me amó, y yo solo la ignoré y me siento tan... culpable

—Suele suceder— Armin suspiro— Escucha Eren, esto te ha de sonar repetitivo y para mí es cansado pero porfavor solo aléjate de Mikasa

Eren miro a Armin confundido

—¿Porqué, Armin? solo quiero pedirle, disculpas, yo... Si me voy de aquí sin siquiera haber intentado decirle que me perdone me sentiré peor de lo que ya me siento. Después de todo es por mi que ella tuvo ese accidente ¿No es así?

—Eren, su accidente no fue tu culpa ¿Okey? Fue eso... un accidente

—Pero tú dijiste...

—Estaba enojado, sí. Annie suele decirme que no soy yo cuando me enojo y suelo herir con las palabras así qué no fue tu culpa— Eren lo miró con tristeza

—Aun así destrozarle el corazón, decirle una sarta de cosas malas que en el fondo no eran más que mentiras para poder huir de aquí, haber sido un idiota y no haberle respondido ni una sola de sus llamadas o mensajes, hacer que cayera en ese hoyo de tristeza, claro que es mi culpa, Armin— Eren bajó la cabeza tratando de ocultar las lágrimas que amenazaban en salir

—Si eres consciente de todo eso ¿Porqué aún así quieres que Mikasa te recuerde? Eso es hacerle daño, Eren.

—No... No quiero hacerle daño solo quiero disculparme con ella y contigo. Ambos son mis mejores amigos y ahora me siento incompleto... Solo

—No pensaste eso hace cuatro años cuando te fuiste, Eren. No pensaste en el daño que le hacías a Mikasa, ni siquiera pensaste en mí como tú mejor amigo. Si te sentías asfixiado de esta ciudad y querías irte ¿Porque no me lo dijiste? Te hubiera entendido y te hubiera ayudado con Mikasa. Se suponía que yo sabía todo de ti y tú todo de mí... Eras mi hermano, Eren. Y aún así te fuiste, nos abandonaste, lastimaste a Mikasa y me decepcionaste a mí— Eren ocultó su rostro entre sus manos soltando una pequeña risa nerviosa. Sabía que Armin tenia razón en todo lo que decía, los había lastimado y ahora estaba recogiendo las consecuencias de sus actos.

—Tienes razón en todo lo que dices, no tengo como discutir a eso y pedirte disculpas sería excusarme cobardemente pero de verdad quiero recuperar tu amistad, y quiero recuperar a Mikasa...

—Por mí no hay problema, Eren. Pero ¿Que es Mikasa para ti? Ahora que sabes que ella estuvo enamorada de ti ¿Que significa ella para ti?

Eren se quedó un momento pensativo sin saber que decir ¿Que significaba Mikasa para él? Pues era su mejor amiga, ella sabía todo de él y él todo de ella o bueno creía saberlo todo

—No... Lo sé... Yo estoy tan confundido ahora, Armin— el rubio sonrió levemente con desdén

—Eren— lo llamó y el castaño lo miró— Jean va a pedirle matrimonio a Mikasa

—Eso lo sé— Armin lo miró sorprendido — Sasha me lo dijo el día de la inaguración del té de Levi

—¿Y que piensas...?

— Yo... no quiero que se case con él. No con Jean, él es un idiota— Armin rió con sorna y se levantó

—Estamos claros quien es el más grande idiota aquí ¿No?— Eren levantó la vista hacia Armin de nuevo— ¿Con quien quieres que esté? ¿Contigo? Pues déjame decirte que no quiero que esté a tu lado— Eren sintió la bofetada de las palabras de Armin

—¡No! yo no... Nunca sería bueno para ella

—Es bueno que lo sepas, Eren. Porque no dejaré que te interpongas en la vida de Mikasa y Jean— Eren iba a responderle a Armin pero la puerta del despacho se abrió de golpe mostrando a una sonriente Mikasa

—¡Armin!

—Señorita Mikasa el doctor está ocupado no puede entrar

—Tonterías Mina el siempre tiene tiempo para...—Mikasa levantó la mirada y vio a Armin y Eren quienes la miraban preocupados ¿Hasta cuando la gente la miraría de esa forma?

—Dejala Mina

—Lo siento mucho señor— dijo la chica haciendo una reverencia y excusándose para salir y cerrar la puerta

—Lamento haber entrado así de golpe solo quería contarte algo— dijo la chica poniéndose repentinamente nerviosa ante la mirada de Eren

Desde que habían ido a la playa el chico no salía de su cabeza y lo más extraño era que tenía más recuerdos con aquel niño.

—Hola, Mikasa...

—Hola, Eren

Armin los miró era tan obvia su atracción pero Eren era demasiado idiota y ciego para darse cuenta y Mikasa pasaba a ser demasiado inocente pero era mejor que se quedará como una simple atracción

—Hola, Armin— dijo el rubio señalándose a si mismo ganándose las miradas de sus dos amigos

—Lo siento Armin, es que...

—Si, Si descuida...— dijo interrumpiendolo— Primero a que se debe tanta emoción y esa sonrisa —Mikasa sonrió de nuevo recordando a lo que había ido con él

—Yo creo que debería de irme ya— dijo Eren y Mikasa lo detuvo de su mano. Ambos sintieron una corriente y se sonrojaron al mirarse

—No...no te vayas... Quédate... uh... No es un tema que no puedas escuchar

Eren miró a Armin quien estaba con el ceño fruncido pero luego lo relajó y suspiró vencido

—Si Eren, quédate. A ver dime qué es eso que tienes que decirme

—Hoy pase por la casa de Hannes y me dijo que Eren Jaeger estaba aquí, le dije que quería hablar con él, que necesitaba preguntarle algunas cosas y me llevó hasta la casa de tía Carla, la amiga de mi madre que me cuidaba de niña— Eren abrió los ojos al igual que Armin

—Entraste a esa casa— Preguntó Eren y Mikasa negó

—No, Jaeger no estaba, pero recordé muchas cosas. Recordé las galletas de tía Carla, tú también estaba en esos recuerdos, Armin. Corrías con ese niño por las escaleras, ella los regañaba— Mikasa quien aún no soltaba la mano de Eren la apretó— recordé que en esa casa tenía una habitación, debo buscar a Eren Jaeger. Él es la respuesta a todos mis bloqueos, él debe saber de mí ¿Cierto? No me importa si me odia, yo solo quiero recuperar mis recuerdos...— una lágrima rodó por la mejilla de Mikasa y la culpabilidad invadió a Eren quien jaló a Mikasa y la abrazó con fuerza dejándola sorprendida pues podía escuchar el latir desenfrenado de su corazón.

Eren por otro lado quería gritarle que él chico que ella quería buscar estába frente a ella, pero no podía pues su garganta y el miedo a que lo rechazara y no lo perdonará no lo dejaban

Armin miró la escena atónito ¿Que hubiese pasado si Eren le hubiera abierto la puerta a Mikasa en ese momento? Conociéndola ella lo hubiera invadido de preguntas y no lo hubiera dejado en paz hasta que algo le llegase a su memoria. Mikasa estaba buscando respuestas por si sola y los vientos que soplaban le decían que no estaba tan lejos de encontrar la verdad.