Senku 6 años y 2 meses

—Entonces, Senku ¿Trajiste lo que te pedí?

Estaba en la consulta con su psicólogo ese día, justo después de la escuela tenía una cita con el psicólogo infantil, el doctor Simon. Un hombre de edad bastante avanzada por como lo veía él.

—Si .-se acercó a su mochila y sacó cuatro juguetes que había metido a escondidas de Stanley y Xeno la noche anterior.

—Oh vaya .-el señor Simon sonrió como lo haría cualquier abuelo-. Entonces Senku ¿Estos son tus juguetes favoritos?

—Lo son .-tomó el peluche blanco redondo, alzándolo para mostrarlo hacía el hombre frente a él-. Este es Rei, me lo dio mi papá cuando tenía tres, para mi cumpleaños. Es idéntico al robot Rei 0.1 que hizo el viejo, este es el prototipo de su diseño .-dejó al pequeño peluche en el suelo para tomar una muñeca de trapo rubia-. Está el Lili, es la muñeca que mi mamá tenía en su cuarto, pero me la termino dando cuando era un bebé porque decía que yo lloraba mucho si no la tenía cerca .-sonrió mientras dejaba a la muñeca con sumo cuidado en el suelo, junto al robot de peluche. Esta vez tomó el avión de juguete junto a un peluche con forma de cohete-. Estos me lo dieron Stanley y Xeno. El avión es el primer modelo que voló Stan, me lo dio cuando nos conocimos .-otra vez su sonrisa se agrandó para levantar el cohete-. ¡Este me lo dio Xeno! Después de que fuimos a ver un despegue de prueba ¡Junto a mi viejo! Ese día mientras estaba en la sala de control escuchando su explicación de cómo era que funcionaban los motores, me lo dio.

Sí, tenía cuatro juguetes favoritos y la verdad no se avergonzaba de quererlos tanto.

—Ya veo. Entonces, dentro de estos cuatro juguetes ¿Podrías elegir uno? ¿O te gustan todos?

—¡Todos! .-frunció el ceño mientras volvía a colocar los juguetes en la mochila-. No puedo elegir solo uno. Por eso traje todos.

—Entiendo .-el hombre sonrió y detuvo la mano del niño antes de que guardará el peluche redondo-. Entonces, Lili y Rei son juguetes que te dejaron tus padres ¿Duermen contigo?

—No, soy grande para tener que dormir con peluches .-jalo a Rei hacía él, con un poco de recelo cuando el hombre lo había tocado-. Además, en casa Rei 0.1 o Reibot como lo llamó yo, siempre se aseguraba de que Rei estuviera sobre mi armario.

—Oh ¿Rei 0.1 no es el robot que hizo tu papá? .-preguntó curioso el doctor, más que nada anotando los datos que le daba el niño.

—¡Diez billones de punto para usted! .-alzó el mentón orgulloso del que el hombre conociera el trabajo de su padre-. ¡Reibot me cuidaba cuando la familia de Taiju no podía! Reibot era bastante útil, se encargaba de muchas cosas en mi casa .-frunció un poco el ceño, recordando un par de cosas antes de hablar-. Pero nunca me dejo abrirlo, no me dejo ver cómo era por dentro ¡Solo dejaba que el viejo lo reparara!

—¿Y cómo hacía eso Reibot si tú papá estaba aquí en Estados Unidos?

—¡Estoy hablando de cuando mi viejo estaba mi casa! Había veces en que me iban a ver ellos, sobre todo en navidad o mi cumpleaños.

—Oh, entiendo entiendo. ¿Entonces Reibot sigue en tu casa?

—No, Reibot ahora está con el grandulón de Taiju, hay veces que también está en casa de Yuzuriha. Hay veces que hablo con Rei por video llamada.

—Entonces, ¿Rei está cómodo en casa de Taiju?

Se lo pensó un poco antes de responder. Los robots no tenían emociones, ellos iban donde sea que los mandaran... Pero, él pensaba Rei tenía su propia conciencia ya creada y que por eso siempre preguntaba por su viejo cuando hablaban.

—Creo que no... La casa de Taiju es pequeña para él, creo que se siente encerrado .-cerró un momento los ojos recordando su última conversación con el robot-. Cuando mi viejo y mamá estaban en japón, mamá siempre sacaba a Reibot al patio para ayudarle con la ropa, Reibot ponía una melodía mientras mi mamá tarareaba o cantaba.

—Entiendo... Bueno, ya puedes guardar tus juguetes, hemos terminado la sesión por hoy.

Guardo todos sus juguetes antes de que el hombre abriera la puerta para dejar pasar a Stanley, ese día el militar lo había llevado a su sesión con el psicólogo.

—Teniente Snyder, quiero hablar con usted antes que se vayan .-sonrió dirigiéndose al niño esta secretaria compró nuevas revistas científicas esta semana, ve a echarle un vistazo mientras yo hablo con el teniente.

—Vale, adiós .-acomodo su mochila mientras salía de aquella consulta, dejando solos a ambos adultos.


Una vez solos, el psicólogo comenzó a hablar después de pedirle a Stanley que se sentará.

—Senku está dando señales de que extraña su hogar, extraña su casa y la rutina que tenía allí .-se guardaría la parte del robot para más a futuro, aún necesitaba más datos sobre él-. Uso un ejemplo de cómo extraña el patio de su casa ¿Dónde viven tienen algún parque o patio?

—Vivimos en un departamento, en el piso catorce .-el militar se quedó viendo el suelo un rato, hace tiempo había tenido la idea de proponerle a Xeno que compraran una casa, pero eso era dar un paso importante en su relación como pareja.

—¿Lo sacan a jugar al parque o algo?

—Sale a correr conmigo los fines de semana, también sale junto a Xeno a probar esos prototipos de cohete. Cuando está en casa de una amiga suya también se queda mucho tiempo en el patio que tiene.

—Bueno, teniente Snyder. Como psicólogo no se me permite opinar sobre alguien que no es mi paciente, pero creo que usted y el doctor Xeno deberían pensar en tener un lugar dónde Senku se sienta menos limitado.

—¿No dijo que esto era porque extrañaba su casa? .-alzó la ceja para ver al hombre mayor, quien solo le sonrió.

—Lo hace, pero lo hace porque allá tenía más espacio que recorrer.

Stanley hizo una mueca antes de despedirse del psicólogo y por fin llevar a su mocoso al departamento, pero cuando iba en el auto recibió una llamada que lo puso algo... Nervioso.

—Xeno .-el altavoz en el auto era lo mejor.

¿En cuánto llegan? .-la voz del científico no sonaba muy animada que digamos.

—¿Ni siquiera vas a preguntar cómo le fue al mocoso?

¡Cambiaron la visita de la trabajadora social!

Mierda, eso era malo.

—¿Para cuándo?

¡PARA AHORA YA STANLEY! ¡LOS NECESITO AQUÍ PERO AHORA!

Y solo le cortó, eso significaba que debía apurar su llegada...

—Mocoso, dime que tienes el cinturón bien puesto.

—¡Espera! .-Senku se pasó al asiento de enmedio y comenzó a abrochar todos los cinturones de seguridad, de manera que quedó más que bien sujeto-. ¡Acelera!

Maldito sea el gobierno japonés con esos cambios de último momento, no era la primera vez que lo hacían y todo para agarrarlos en algún momento desprevenidos. Bien, podía adelantarse a lo que sea con el auto, menos mal había tomado uno de los vehículos blindados del trabajo.


¡En serio que desesperante situación! Se suponía que esas visitas eran siempre a fines del mes, nunca al principio.

Xeno se encontraba desesperado mientras ordenaba rápidamente todo el departamento, fijándose de que cada cosa estuviera en su lugar, no tenía tiempo de mandar a Senku o Stanley a cambiarse de ropa y él seguía con la chaqueta de la NASA, todo porque la visitadora social lo había llamado diciéndole que se encontraba en camino para su visita mensual.

Se fijó en que las fotos que tenía en la pared de las salas estuvieran limpias, rápidamente quitó la foto del anterior Halloween dónde Senku sacaba el dedo medio y Stanley lo apuntaba con la pistola de juguete, si la visitadora llegaba a ver eso, seguro le quitaban la custodia del niño allí mismo.

—Vamos, Stanley si no llegas ahora tendremos serios problemas...

Afortunadamente, la puerta del departamento se abrió y Senku entró corriendo, directo a su cuarto.

—¡Ya llegué! ¡Hola Xeno! .-saludo rápido antes de cerrar la puerta de su cuarto, seguramente se iría a cambiar el uniforme.

—¿Por qué mierda viene esa mujer hoy? .-Stanley cerró la puerta tras de sí mientras comenzaba abría el cierre de su uniforme-. ¿No dijo que vendría la última semana de este mes?

—¿Crees que yo lo sé? .-frunció el ceño y caminó hasta su pareja para volver a subir el cierre del uniforme-. No, no tienes tiempo de cambiarte, en cualquier minuto esa mujer tocara el timbre .-arregló el cabello de Stanley, peinando sus cabellos hacia atrás-. Elegante.

—No empieces .-gruño mientras caminaba a sentar en el sillón de la sala-. Es una mierda tener que pasar por esto todos los jodidos meses.

—Su custodia no es completamente mía. Siempre tienen la opción de devolverlo a un orfanato en Japón.

Antes de que Stanley abriera la boca, el timbre en la puerta sonó.
Hecho una rápida mirada hacía Stanley, indicando que se levantará, suspiro antes de abrir la puerta, encontrándose a una mujer de edad avanzada.

—Señorita Keiko, que gusto verla nuevamente .-sonrió mientras se hacía a un lado dejando a la mujer pasar-. Adelante por favor.

—Doctor Xeno .-entró al lugar dándole una mirada rápida a Xeno-. ¿Acaba de llegar del trabajo?

—¿Eh? .-hasta en ese momento Xeno se percató de la chaqueta con el logo de la NASA. Mierda-. Ah, sí... .-maldita bruja.

Era culpa de ella que no se haya cambiado por algo mejor. Admitía que tener la chaqueta y la camisa no era nada formal o elegante, pero ese día en la mañana había una lluvia horrenda y se vio obligado a usarla, sobre todo porque su auto presentó problemas y tuvo que pedirle a Stanley que lo llevará al trabajo mientras que a la vuelta el Doctor Scott se ofreció a traerlo.

—Ya veo .-la mujer se quedó viendo al militar parado en medio de la sala-. Teniente Stanley.

—Señorita Keiko .-Stan se acercó a tomar la mano de la mujer para depositar un beso en la palma de su mano, mientras Xeno lo veía con una mueca divertida. Todo sea por ganarse a la mujer-. Luce radiante este día.

—Si, claro. Veo que usted también acaba de llegar.-la señorita Keiko rodó los ojos mientras caminaba para sentarse en el sofá de aquella sala. No ocultaba para nada su disgusto a que una pareja de hombres se hicieran cargo de un niño-. ¿Dónde está el joven Ishigami?

En ese momento, Senku llegó a la sala ya con ropa normal y no con su uniforme escolar, que delataría aún más el apuro en que se encontraban.

—Buenas tardes, señorita Keiko .-Senku hizo una reverencia ante la mujer. Odiaba a esa vieja, sobre todo por su manía de tirar comentarios desagradables hacia sus tutores.

—Joven Ishigami, ¿Cómo está?

—Bien ¿Y usted? .-Bueno, que empiece el espectáculo.

Xeno y Stanley se acercaron para comenzar con la ronda de preguntas que hacía la mujer todas las veces en que iba a ver que tal era la convivencia de ellos dos junto a Senku, más la de Xeno por ser el tutor legal.

La mayoría de estas preguntas siempre llegaban al tema de cómo era que se sentía el niño siendo criado por dos hombres, dos hombres que tenían una relación amorosa, pero esta vez, las preguntas tomaron un rumbo distinto...

—Entonces ¿Consideran que este departamento es adecuado para todo el desarrollo de Senku?

Antes que Xeno respondiera, Stanley reveló de mejor manera lo que venía pensando hace tiempo.

—Compraremos una casa, estamos viendo opciones desde hace unos días .-bueno, Xeno no, pero él sí. Mucho antes desde que el psicólogo de su mocoso lo dijera.

—¿Eso es correcto, Doctor Xeno? .-ella no era del todo japonés, solo media, pero aún así consiguió un trabajo en el consulado para encargarse de todos esos temas-. En mi última visita no mencionaron eso .-Y si, la señorita Keiko estaba de acuerdo con que esos hombres no podían hacerse cargo de un niño.

—Es porque, como dijo Stanley... No hace mucho estamos en busca de una, que se adecue a todas las necesidades de Senku.

Listo, Snyder no dormiría en junto a él ese día... ¡¿Cómo se le ocurría decir eso?!

—Oh, entonces ¿Eso significa que van a casarse?

Xeno e Stanley abrieron las bocas, tratando de articular alguna palabra ante la mención de una unión marital... Pero, Senku pensaba otra cosa al respecto.

—Si, dijeron que estaban planeando su boda apenas yo saliera de vacaciones .-bueno, quizás estaba metiendo la pata, pero si se quedaban callados unos minutos más y con esa cara de idiotas, eso no iba resultar muy bien que digamos.

—Entiendo.

Haciendo a un lado la incomodidad que sentían ambos, continuaron respondiendo todas las preguntas que tenía la señorita Keiko, hasta que después de una hora ella se retiró del departamento.

Dejando a Xeno y Stanley en un incómodo silencio.

—Voy a darme una ducha.

—Sí, revisaré los unos planos del trabajo.

Bueno, al parecer Senku si había metido la pata. Menos diez billones de puntos para él.


La semana pasó sin que Stanley o Xeno tocar el tema, incluso Stanley había optado por quedarse en su oficina en el trabajo unos días, dejando a Xeno pensando en todo lo que habían dicho durante esa entrevista con la maldita bruja.

En el receso del lunes, Senku se quedó pensando en el evento de la semana anterior, hasta que su amiga Leona llegó a sentarse a su lado en el columpio del patio de la escuela.

—¿Qué tienes? Tu cara esta rara .-preguntó la niña rubia balanceándose en el columpio suavemente.

—En lo complicada que son las relaciones amorosas de los adultos .-no tenía problema en contarle sobre ello, después de todo ya se lo había mencionado a sus amigos de Japón, incluso al mimado de Ryusui-. ¿Tú qué opinas de eso, Leona?

—¿Eh? Las cosas amorosas me dan igual. Más de una vez he visto como el señor Jasper se queda todo bobo mirando a la señora Turquoise. Y eso que ellos están casados .-se encogió de hombros viendo a su amigo-. ¿Por qué? ¿El señor Stan y el Doctor Xeno pelearon?

—No pelearon, o sea... No lo sé. Stan no ha estado en el departamento mucho tiempo en estos días. Viene, me saluda, me trae algún dulce y vuelve al trabajo... ¡Y Stan odia el papeleo! .-frunció el ceño pateando una piedra del suelo-. Xeno solo me habla cuando le pregunto por alguna investigación, incluso me he estado haciendo el tonto en algunas de las tareas que han dado ¡Ninguno se habla! Ni siquiera... .-hizo una mueca de asco antes de continuar-. Ni siquiera se besan cuando se ven, si se topan, inventan una excusa para no hablarse.

—¿Se gritaron o algo? .-ladeo la cabeza un poco, era curioso ver a Senku enojado por algo que no sea ciencia.

—¡Nada! Y todo empezó cuando la bruja que lleva el caso de mi custodia fue al departamento... Bueno... Quizás es mi culpa .-se rasco el oído sintiéndose nervioso-. La bruja pregunto si ellos se iban a casar, y como ninguno de los dos respondía yo dije que sí lo harían.

—¡Espera, espera, espera! .-Kohaku lo vio con cara de asombro-. ¡¿Se van a casar?!

—¡No sé! ¡Leona entiende lo que dije! ¡No se han hablado en toda una semana!

—¡No soy una Leona, cebollín! .-se cruzó de brazos cerrando los ojos, haciendo un esfuerzo por darle una respuesta que lo ayudará-. ¡Ya sé! ¡Lo que necesitan es hablar!

—¡Te estoy diciendo que no se hablan! ¡Leona tonta!

—¡Porque tú no los dejas solos cebollín tonto! .-sonrió mientras se levantaba del columpio-. ¡Tú tienes que salir que dejarlos hablar solos!

—¿Y dónde quieres que me vaya?

—¡A mi casa! .-su sonrisa se agrando mucho más-. ¡Este viernes! Tengamos una pijamada. Ruri, tú, yo y Chrome. Mi amigo del que te hablé.

Senku lo pensó un momento, bien, estaba la probabilidad de que Xeno no lo dejará ir a esa pijamada, pero también... Si agarraban a Xeno desprevenido y ese viernes Stanley se decidía a ir de visita los dejaría solos y ellos podrían resolver todas sus cosas...

—¡Diez billones de puntos para tí, Leona! .-sonrió al tiempo que se levantaba gracias a que el timbre para la vuelta a clases sonó.

—¡No soy una Leona, cebollín!

Ahora solo quedaba esperar hasta el viernes, solo tenía que conversar los detalles del plan con su amiga. ¡Diez billones de puntos para ella!


Viernes

—Creo que Stanley y yo nos vamos a casar .-Xeno soltó sin más en el almuerzo que tenía ese viernes programado con su amiga Luna.

La modelo casi termina ahogándose con su propia comida.

—¡¿Disculpa?! .-nunca pensó que Xeno la había invitado a almorzar para hablar de ese tema-. ¡¿Cómo?! ¡¿Cuándo?! ¡¿Quién se lo pidió a quién?!

—No grites .-rodó los ojos mientras daba palmadas en la espalda de su amiga pelirrosa-. No dije que me lo propuso, dije que creo.

—Pero... ¡¿Por qué?! .-tomó un sorbo de su vaso de agua antes de seguir-. Digo, era bastante obvio que lo iban a hacer algún día... Espera ¿Por qué parece como que estás más molesto con eso?

—No estoy molesto, es solo que... .-suspiró mientras pasaba la mano por su cabello-. Es solo que... No llevamos tanto tiempo de una relación...

—Se llevan besando a escondidas desde la universidad, tú mismo me confesaste ebrio que lo hicieron en la sa-... .-el científico le cubrió la boca antes de que siguiera hablando.

—Cállate .-gruño un poco sonrojado ante el recuerdo-. Que hayamos tenido nuestros encuentros antes no es lo mismo que ahora... Tenemos una relación de solo un año y meses. Además, fue porque él solo se mudó a mi departamento.

—¡Eso y la confesión que te hizo! .-suspiro ya un poco más calmada, notaba que su amigo necesitaba un consejo-. ¿A qué le tienes miedo?

No tenía miedo, pero era solo que nunca se imaginó que las cosas avanzarán tan rápido en su relación su relación con el militar y mejor amigo.

—Lo haría todo más real .-se sinceró un poco.

—¿Real? .-esa parte no la entendía, no del todo.

—Ya sabes .-inhalo ruidosamente antes de exhalar para poder continuar-. Senku, Stanley y yo. Se suponía que solo me ayudaría un tiempo a cuidarlo. No sé si quiere hacerlo toda la vida, criar a un mocoso es la responsabilidad que Lillian y Byakuya me dejaron a mí, no a él.

No iba a revelar la parte de que eso convertiría a Stanley en el tutor legal del niño, por ahora solo era él quien respondía por todo lo que le pasará a Senku... Bueno, eso y que la gente comenzaría a verlos más como... Como familia.

—¿Y es que acaso no te ha ayudado todo este tiempo? .-Luna entrecerró un poco los ojos sin dejar de ver a Xeno-. Si ya se hubiera aburrido, ni siquiera estarías temiendo que te proponga matrimonio.

—¡Que no me lo propuso! .-se llevó la mano a la boca ante su alza de voz, estaban en un lugar público después de todo.

—Esto ya no se trata de Senku, Xeno. Se trata de tí y de Stanley .-sonrió un poco poniendo su mano sobre el hombro de su amigo-. Si esto es referente a lo que me contaste sobre la casa antes, muchas parejas solo se mudan juntos, no es necesario llegar a tener un acuerdo en papel para esas cosas.

Era verdad lo que decía la pelirrosa, comprar una casa no significaba que ambos debían tener un papel que los nombrara esposos.

—Pero creo que quiero hacerlo.

Ah, a Luna la desesperaba lo indeciso que era Xeno en algunos temas, se suponía que su mente era mucho más rápida que la suya.

—¿Cuánto tiempo te queda para almorzar?

—Unos treinta minutos más ¿Por? .-Xeno alzó la ceja al ver cómo Luna pedía la cuenta-. ¿Ya te vas?

—Nos vamos, Xeno.

—¿Y a dónde?...

—A una joyería, vamos a buscar un anillo de compromiso para tí y Stanley. Y si me dices que no, juro que te dejo en vergüenza frente a todas las personas del lugar.


Vale, Stanley pensaba que estaba siendo un cobarde en no enfrentarse a Xeno para hablar y tampoco se podía enojar con su mocoso, puesto que sabía que Senku respondió solo para sacarlos de ese aprieto en que los puso esa mujer.

Ahora mismo se encontraba esperando al mocoso a la salida de clases para llevarlo con Xeno, después volvería a meter su cobardía entre todos los papeles que tenía que revisar. Fue una sorpresa ver que Kohaku también subía en su auto.

—¿Irás a jugar con el mocoso? .-preguntó viendo por el retrovisor a los dos mocosos, quienes tenían unas sonrisas terriblemente cómplices.

—¡No señor Stan!

—La Leona solo irá para buscar algo, no será mucho tiempo .-Senku bufó cruzando los brazos.

—¿Quieren pasar a comer algo?

—¡No! .-gritaron ambos niños, bueno eso era extraño.

Al llegar al departamento no vió a Xeno por ningún lado, solo se habían enviado mensajes para coordinar quién iría a buscar al mocoso, además de que Luna también le había enviado un mensaje con unos guiños, eso era raro.

—¡Ven Leona! .-Senku tomó la mano de su amiga y la jalo a su cuarto, ambos niños se encerraron allí.

Bueno, si Xeno no estaba no los podía dejar solos, así que se puso a buscar en la nevera a ver si podía prepararles algo de comer a esos mocosos, pero tan pronto la abrió, la puerta del departamento se abrió y Xeno entró con una expresión extraña en el rostro, incluso cuando sus miradas se encontraron el científico se sonrojo levemente.

—Stanley, estás aquí .-doctor obvio era ahora.

—Sí... Senku está con Kohaku en su cuarto.

—Ah, no sabía que vendría la señorita Kohaku de visita.

—¡Y no vino! .-Senku apareció con su mochila de Doraemon en la sala, junto a la niña rubia quien sonreía-. Yo iré a dormir a casa de la Leona.

—¿Qué? .-Xeno alzó la ceja viendo al niño, quien sonreía travieso-. No me has informado de ninguna pijamada.

—¡Doctor Xeno! .-Kohaku se acercó a tomar la mano del científico-. Yo ya le dije a mi papá sobre que Senku se quedaría en mi casa, y él está de acuerdo. ¿Puede dejar que vaya a mi casa? Por favor .-Kohaku aplicó el método del puchero.

—Si Xeno, déjame ir .-Senku le sonrió aún más, sabía que su tutor no se negaría al puchero de su amiga.

—Yo los llevo a casa de Kohaku, Xeno .-Stanley intervino, pero automáticamente un mensaje de Kokuyo llegó a su celular, avisando de que Jasper ya se encontraba esperando a los niños en la entrada del edificio-. Jasper ya vino por ellos...

Xeno sintió un tic en la ceja sin dejar de ver a Senku, el niño ya había planeado todo eso desde hace tiempo, le recordó a cuando Byakuya lo invitaba de imprevisto a algún lugar junto a Lillian, lo peor era que no se podía negar a la cara de la niña rubia frente a él.

—Está bien... Los llevo abajo...

Antes de que volviera a tomar las llaves de la puerta, Senku y Kohaku se adelantaron a la puerta.

—¡No hace falta! ¡Podemos ir solos en el ascensor! .-Senku estaba orgulloso de que su plan haya salido a la perfección, el resto ya dependía de los adultos-. ¡Adiós! ¡Vayan por mí en la tarde!

—¡Adiós Doctor Xeno! ¡Nos vemos señor Stanley! .-Kohaku sonreía mientras corría detrás de Senku para llegar al ascensor.

Ambos niños solo escucharon la queja del científico detrás de ellos.

—¿Crees que funcionará? .-Kohaku entró en el ascensor justo después de Senku, milagrosamente este había llegado apenas presionaron el botón para bajar.

—Bueno, este plan es de los dos. Si fracasa tendremos que recurrir a usar tu fuerza bruta, Leona.

—¿Qué? ¿Quieres que los golpee hasta que se hablen? .-ladeo un poco la cabeza ante la ocurrencia de Senku.

—Quizás no puedas contra Stan, pero pensaré en algo.


Bien, si antes estaba nervioso ahora era peor, hace tiempo no estaba completamente solo con Stanley, generalmente si se encontrarán en una situación distinta se acercaría a besarlo y jalarlo directamente hacía su habitación, para poder hacer muchas cosas.

—¿Se fue con el uniforme del colegio puesto? .-vale, tenía que decir algo en todo ese silencio.

—Sí .-respondió tajante, mientras presionaba la cajita en el bolsillo de su abrigo.

—Ah.

Silencio nuevamente... Bien, si el militar no decía nada, era su turno de hablar, no siempre tenía que ser Stanley quien diera el primer paso.

—Stanley, tenemos que hablar .-se puso recto mientras caminaba hacía el militar.

—Ya lo creo .-Stanley se acercó a paso firme a Xeno mientras sacaba algo de su bolsillo.

No, está vez no iba a ser Stanley, tenía que ser él quien hablará. Saco la cajita del bolsillo y la extendió hacia Stan.

—Casemos.

—Compre una casa.

Tanto Xeno como Stanley abriendo la boca tratando de articular una palabra, que mierda acababan de decir ambos.

Continuará...


¡HOLA! Técnicamente en mi país natal ya es lunes xD
Como verán, este cap se dividirá en dos partes. ¿Tendremos boda? Aún no lo decido xD
Espero les guste el cap y ya ven que Senku y Kohaku son unos traviesos, por algo los diablillos en el cap anterior uwu
Gracias a quienes siguen la historia, perdón por la mala redacción y las faltas de ortografía.
¡XOXO!