Capítulo VII

El aristócrata se desabrochó la túnica y se acomodó en el sillón de dos personas, esperando a Remus. En cuanto el licántropo regresó. El rubio platino lo llamó:

–Ven, siéntate conmigo.

Remus obedeció y se sentó; Lucius lo atrajo hacia sus brazos. Remus se recargó sobre el pecho de este y casi ronroneó satisfecho.

–A pesar de que ha sido un día maravilloso, lo he sentido pesado.

–Es por todas las emociones.

Lucius apretó el brazo sobre el cuerpo del rubio trigo y con la otra mano alzó el mentón de este para besarlo. Remus se quedó sin responder por un par de segundos, más solo fue en lo que se acomodó y de ese modo, sintió que su libido despertó.

Después de ese intercambio, que los dejó jadeando y con los ojos vidriosos. Remus sonrió de lado al notar los labios hinchados del Malfoy al que nunca había visto sin esa apariencia tan seria y compuesta. Y ¡Claro que disfruto ser el culpable de la ropa arrugada, el cabello despeinado y ese rubor en todo el rostro de Lucius!

Lupin se quitó el suéter y se acercó al otro mago quien lo recibió abrazándolo; el licántropo buscó acomodarse y se subió sobre Lucius a horcajadas; de ese modo el abrazo era reciproco y las manos de los dos podían recorrer el cuerpo del otro, sin separarse demasiado.

Las manos a la par se colaron entre los huecos que dejaban las ropas.

El calor comenzó a bullir en el cuerpo de la pareja y pronto sintieron la necesidad de retirarse las prendas de ropa. Ayudándose, se fueron desnudando hasta quedar en ropa interior.

Malfoy besó el cuello de Remus y sin dejar de acariciar la piel expuesta de este; mordió con algo de fuerza en donde el pulso latía, haciendo que Remus se arqueara y gimiera sensualmente.

Tal vez el sitio no era el más idóneo, sin embargo eso fue lo de menos; porque el deseo de pertenecerse no pudo esperar.

Remus se alejó del otro rubio y sin permitir que sus ojos se dejaran de ver, se fue recostando sobre el sofá. Lucius comprendió tal invitación y con total compromiso, recorrió con la vista el cuerpo del licántropo bebiendo esa imagen, más la sed en lugar de apagarse, incrementó y sin reparos se lanzó en pos de ese ese hombre para saciar cualquier sed o apetito que el deseo provocó.

Remus recibió a Lucius y con la misma o mayor avidez, correspondió a los besos y caricias de este. Los cuerpos se restregaron y el hechizo de lubricación fue susurrado y con ello los dedos agiles del rubio aristócrata trabajaron en el recto de Lupin, que corcoveó ante esa sensación.

Luego de que el de ojos plata sintió que el licántropo estaba listo se alineó y sin dejar de vigilar las expresiones de este para guiarse; fue entrando en él.

Lupin sintió la quemadura combinada con placer y agarrando sus piernas por debajo de las rodillas, las abrió más para ayudar en la penetración y al éxtasis al que eso lo llevaría.

El rubio platino comenzó con el vaivén de caderas, buscando ese dulce punto en el interior del licántropo; luego de unas cuantas estocadas lo halló y desde ese instante procuró golpearlo cada vez que entraba.

Remus sintió el impulso de acercar más al aristócrata y soltando sus piernas, las enredó en la cintura del sangre pura impulsando los golpes de este. Malfoy –que se sostenía del reposabrazos del sillón– soltó una mano y la coló entre sus cuerpos apretujados para acariciar el miembro del licántropo, y enseguida masturbarlo. No pasó mucho tiempo luego de ello, cuando el inminente orgasmo de Remus catapultó el suyo y se liberaron en un gemido gutural.

Aun buscando aire, Remus sintió como Lucius se dejaba caer sobre él. Lo recibió con besos por todo el rostro, lo que provocó la sonrisa en el de ojos plata.

–No pensé... que fueras... tan mimosos Remus...

–¿Te molesta?

–Oh Merlín no... Me agrada... y mucho...

–Naly, colocó el hechizo que evita el ruido para Harry ¿verdad?

–Sí. No te preocupes; aunque nosotros no... Solo espero que nadie se haya acercado a tu puerta.

Remus se cubrió la boca para reírse divertido. No le importaba lo que dijo Lucius, aún se encontraba en un agradable estado de post-orgasmo y eso era lo más importante en ese instante.

–Remus... necesitas otra habitación.

–Definitivamente.

Los dos magos se quedaron dormidos, tal vez un poco apretados en el sillón, más no pareció importarles mucho.

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A Severus el viaje a Hogwarts no le fue tan largo, porque iba repasando los beneficios de si su teoría sobre las emociones de Lupin, resultaba cierta.

Al arribar al castillo no quiso parecer muy culpable al ir a ver a Dumbledore y solo le avisó de su llegada vía pergamino volante.

No obstante lo que sospecharon probablemente era cierto, pues el anciano Director lo mandó a llamar a su oficina. Severus no demoró y obedeció.

Al llegar y entrar en las habitaciones de Albus, este caminó a recibirlo y guiarlo a la sala.

–Ven, sentémonos Severus. Debemos hablar.

–Está bien Albus. –El pocionista se acomodó levantando todas sus barreras mentales y pareciendo lo menos culpable– ¿Y de qué quieres hablar?

Dumbledore sirvió un par de tazas de té. Dejó una frente a Snape y otra la tomó él.

–Vayamos al grano. Severus he sabido que Harry ya no está con los Dursley.

–...

–Ellos no me lo dijeron; supongo que eso fue parte del trato.

–¿Y por qué crees que yo sé algo?

–No lo creo, estoy seguro de que no solo sabes si no que tuviste mucho que ver con todo.

Snape decidió que ya no podía ocultar nada.

–No lo regresaré, Albus.

–Ya veo ¿Lucius Malfoy y quien más?

–No comprendo.

–Severus, si bien puedes hacer muchas cosas, acercarte a Petunia no es una de ellas, tuviste ayuda; y si no es Lucius Malfoy quien ya sabe moverse muy bien en el mundo muggle, hubo más personas.

–¿Y eso importa?

–No lo haría si pudiera confiar en los Malfoy, pero por desgracias sus pasadas acciones no son buen ejemplo.

–Yo también estuve en la misma situación.

–De tu parte hubo arrepentimiento y redención. Sé perfectamente que los consideras tus amigos y confías en ellos, más Harry es muy importante para el mundo mágico y para... –El anciano se detuvo en su diatriba y eso molestó a Severus.

–Es importante porque es un niño indefenso que enviaste con muggles que no solo no lo comprendían ni toleraban, si no que incluso se desprendieron de él a cambio de dinero ¿Qué tan seguro podría estar con ellos?

Dumbledore se quedó unos instantes en silencio y luego vio con seriedad al pocionista.

–No confío en Lucius Malfoy, pero si lo hago en ti. Ustedes dos me demostraron que me decisión no fue la indicada. El que los Dursley cambiaran a Harry por dinero nunca lo imaginé y pequé de crédulo al ni siquiera considerar, que estos no serían tentados para hacer algo tan bajo. Fueron Lucius y tú, sin embargo pudo ser alguien peligroso y en estos momentos tendríamos que rastrear a Harry.

–¿No le colocaste un hechizo de seguimiento? –preguntó genuinamente curioso Severus.

–No. Como te dije, no deseaba inmiscuirme demasiado en la vida de Harry. Hay algunas squib que lo vigilaban, pero eso es todo.

–¿Ellos te avisaron?

–Si. Pues ya no vieron a Harry cuando la familia Dursley salió, todos ellos. Y aun con todo esto y saber que eres quien lo tiene; debo actuar. Harry no puede estar con magos que fueron mortífagos. No serían un buen ejemplo.

–No obstante los Malfoy o Narcissa y Draco, son familiares de Harry... de los Potter y lo sabes. Acabas de alabar mi redención ¿Por qué no puedo eximir mis culpas, cuidando de un niño que quedó huérfano por mi culpa?

–Lo siento Severus, hijo. No...

–Fue Remus Lupin. –cortó Snape.

–¡¿Remus?! –se asombró Dumbledore. – ¿El también les ayudó?

Snape asintió:

–Si. Lo contactamos para esa finalidad –Severus no iba a contarle nada de las pruebas a Albus. – Fue el único amigo cercano de los Potter y si me permites decirlo, el que no tuvo tantos prejuicios.

–Pero él es...

–Sabemos lo que es; más con las precauciones necesarias. Es un excelente prospecto para cuidar de Harry, claro con mi ayuda. Si no te fías en los Malfoy o en mí, fíate de Lupin; es uno de los de la Orden del Fénix.

–...

–¿Oh es que no tener prejuicios solo es propaganda de tu parte?

–¡Severus! –exclamó escandalizado Albus. Mas el mencionado no se retractó, y el mago de más edad supo que debía dar una respuesta que no pusiera en peligro el posible acercamiento a Harry cuando se requiriera. – Estarán a prueba Severus.

–¿Cuánto tiempo?

–Un año y tendré que ver a Harry de vez en cuando.

Snape deseó con todas sus fuerzas negarse, más debió ceder a las demandas de Albus, no es como si este no fuera el mago más poderoso de ese tiempo.

–Estoy de acuerdo.

–Espero no equivocarme.

Snape deseó recalcarle al otro mago que ya lo había hecho al elegir a esos muggles, más ese encuentro fue una victoria para su causa y si bien no salió tan limpio; tampoco perdieron al pequeño.

Con el asunto que los reunió, resuelto. Severus le deseó buenas noches a Dumbledore y se retiró a descansar; ya sería al día siguiente que pondría al tanto de todo a los otros.

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En la Mansión Malfoy Draco se quedó dormido temprano y es que su padre lo dejó muy cansado, luego de jugar con él después de su plática con Narcissa. Por eso el rubito no lo buscó esa noche, lo que sintió afortunado la bruja, pues Lucius no regresó a la casa. Ella simplemente sonrió, considerando que al parecer Lucius iba en serio con cierto exleón.

Era una muy buena noticia, pues no deseaba que Lucius saliera demasiado cuando ella ya no estuviera con él. Por el bien de Draco era mejor que sus padres tuvieran relaciones estables y serias.

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En la madrugada. Naly atendió al morenito que se despertó con hambre. Ella salió y alistó un biberón, haciendo el menor ruido posible para que los amos no despertaran; con la misma atención y sigilo transformó el sillón en una cama cómoda para ellos; luego regresó con Harry que al ver que ella llevaba una botella con leche, se emocionó. Petunia ya no le daba biberón, pues lo consideraba una molestia y un gasto más.

El pequeño, en cuanto la elfina le dio la botella y lo recostó, comió feliz; ella le acercó su muñeco y el infante abrazó con una mano a este y con la otra bebió. Se quedó dormido antes de acabarse la leche.

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El sol se coló por el ventanal de la sala y eso despertó a Remus que se restregó los ojos antes de enfocar la vista y recordar porque sentía un cuerpo enredado con el suyo. El licántropo se removió, más solo para buscar un mejor ángulo y disfrutar de ese despertar con su pareja. No cualquiera se acercaría a un licántropo ni este podía ser tan confiado; por lo que era bastante complicado compartir una noche con algún amante, mucho menos tener una pareja. Lucius lo había ido conquistando con pequeños gestos, pero que nunca se detuvieron hasta que la prueba mayor de ese compromiso que mostró el rubio platino por tener una relación seria, fue el entregarle a Harry.

Suspirando satisfecho, Remus metió el rostro en la curvatura del cuello de Lucius y si bien este despertó, no se movió para no incomodar al licántropo.

El Malfoy abrió los ojos y correspondió el abrazo; considerando que aún era muy temprano para que el pequeño Harry despertara y si bien él debía irse igualmente esa mañana para ver a Draco; se dio el lujo de quedarse en esa posición con su amante en brazos.

El aristócrata tuvo algunas experiencias desde que iba en Hogwarts acerca de sentirse atraído hacia los de su mismo género; más nunca formó un lazo con nadie. Remus le cautivó desde que lo vio luchar para no caer ante todas las situaciones angustiantes que pasaba, y por supuesto que además lo consideraba muy atractivo. Y Severus le confirmó, que si bien no detuvo a sus amigos de molestarlo –en sus años estudiantiles– tampoco lo molestó y eso dijo mucho de Lupin como mago.

Contando entre todo lo anterior, se aunó que Remus parecía ser muy bueno tratando con infantes y eso para Lucius era muy importante si este conviviría con su Dragón. La razón era que Narcissa y él llegaron a un acuerdo tácito de buscar parejas buenas para ellos, pero también para el hijo de ambos.

Ahora con las cosas cambiando por la decisión de Narcissa de separarse –apoyada por él– su inclinación saldría a la luz; no es que fuera mal visto entre la comunidad mágica; más la unión entre los sangre pura se inclinaba hacia las pareja heterosexuales por la facilidad de estos de engendrar, dado que entre personas del mismo sexo se requerían alguno otros medios, como niños creados en calderos, hechizos de fertilidad, vientres rentados, adopciones o...

Lucius caviló un poco antes de cuestionar:

–¿Remus?

–... –El lobo hizo un sonido de escucharlo.

–Lamento preguntar esto..., pero ¿Quién fue quien te transformó en lobo?

Eso pareció espabilar el rubio trigo y dejó su cómodo sitió para removerse y quedar frente a Lucius encarándolo:

–Oh... Fenrir GreyBack.

–

–¡Maldito sea!... ¿Te iba a devorar?

Remus arqueó una ceja ante la extraña pregunta, sin embargo respondió igualmente.

–Supongo, solo era un niño de nueve años.

–Casi entrando en la pubertad... –valoró el Malfoy.

–Sí, eso creo ¿Por qué?

Lucius acarició la mejilla del exleón y susurró:

–Según investigó Severus, los licántropos, poseen conductas heredadas de sus primos lejanos los Lycanos y estos solo transforman a sujetos que consideran excepcionales y pocas veces... a sus posibles parejas.

–¡¿Qué?! –prorrumpió Remus al procesar tal información.

–Ellos crean a sus parejas. No importa si son varones.

–¡Oh por Morgana y merlín! Que desagradable pensar en que Fenrir... ¡Ay no!

Lucius atrajo a sus brazos al otro mago y acarició la espalda desnuda de este, calmándolo.

–No pienses en ello. Eres mi pareja y eso es todo. Haré un tapete con la piel de ese tipo, si se atreve a acercarse a ti.

Lupin se dejó mimar, sin desear aclarar que él asimismo era un diestro duelista que podía defenderse bien solo.

Luego de esa no muy placentera –pero necesaria– conversación. Los amantes se prodigaron caricias tranquilas y compartieron besos serenos; antes de levantarse, y por fin notar la cama donde yacían e ir a asearse.

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Las clases no fueron tan estresantes con el buen humor que Severus tenía y por ello se concentró en ellas y no en la perspectiva de la conversación con Albus y compartirla con los otros.

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En la Mansión Malfoy, cierto rubito despertaba bostezando y buscando atención. Para su deleite personal, su padre ya se hallaba allí, más que dispuesto a alzarlo en brazos.

Lucius junto con Rose, se ocuparon de Draco en lo que Narcissa conversaba con Marcus. Lucius consideró darle tiempo para ella, como esta se lo dio a él, la noche anterior.

El rubio mayor optó por ropa sencilla y sin túnica, pues planeaba salir al jardín con su hijo, tomar ahí el desayuno y luego pasar tiempo al aire libre; deseaba compartir su felicidad con su Dragoncito.

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En el comedor del apartamento. Remus le dio de comer a Harry, en lo que Naly alistaba el baño para el niño. El morenito no era muy llorón, eso sí con confianza era un torbellino de actividad y eso tenía ocupados a la elfina y al hombre lobo, lo que hacía el pasar del tiempo más rápido.

Cuando Remus terminó de cambiar a Harry luego de su baño y este pidió biberón para su siesta vespertina. Unos toques en la puerta del apartamento se oyeron y Severus entró después de eso.

–Remus.

–Severus ¿vienes a ver a Harry o hay pruebas?

–Las dos cosas.

Contesto divertido el pocionista que fue invitado a la habitación de Harry. Al verla llena de las cosas del infante, se giró en dirección del licántropo.

–¿Y dónde dormirás tú?

–Entre Naly y yo aumentamos una habitación.

Snape fue hasta la cuna y se asomó viendo que el morenito bebía su leche y estaba ya casi dormido, más para su asombro y orgullo, este le envió una sonrisa de lado al verlo.

–Ya veo, me parece bien. –mencionó a lo dicho por Lupin y por el gesto del pequeño Potter. Al notar que los ojitos verdes se cerraban, Snape se alejó y salió al pasillo con Remus. Naly se quedó en el cuarto con el pequeño.

Snape sonrió de lado al notar lo alegre y rejuvenecido que se veía el licántropo, sin embargo no estaba de más comprobar sus sospechas.

–¿Lucius se fue temprano?

Remus no contestó, pero su rubor lo hizo por él. Y luego cambió el tema.

–Vamos, aprovechemos que Harry dormirá por lo menos dos horas, si bien nos va.

–Oh por supuesto que aprovecharemos.

Dijo misterioso el pocionista y siguió al sonrojado lobo.

...

Muchas gracias a sakura1402 y a AnaM1707 totalmente enamorada de que dejaste reviews en todos los capítulos ¡Gracias, gracias, gracias!