Apuesto a que pensaron que desaparecería por otra temporada... pues ya también tenía este terminado, la verdad quería sacarle bloopers a las dos partes, pero del segundo por más que lo intenté no salió nada, ni un torpe intento...
La princesa azul.
— Umi —Comenzó suavemente la mayor, captando apenas su atención — ¿Sucedió algo bueno? —Preguntó sutilmente.
— ¿Por qué preguntas Eli?
— Por las marcas en tu cuello —La menor no tuvo tanta delicadeza.
— ¡Corte!, Chicas, por favor, apenas empezamos.
— Pero es que son muy notorias —Comentó Maki.
Umi se sonrojó.
— Kotori si que te picoteo —Continuó Eli.
— Maquillaje, por favor hagan algo.
— No podemos hacer nada, es una indecente, no podemos controlar su hambre de pajarita.
— ¿Nozomi-san?, ¿Por qué estás con los maquillistas?
— Casi no aparecía en esta doble historia así que busque algo para diver-ser productiva —Contestó mostrando una sonrisa inocente.
— Solo intenta controlarte.
…
— No, tú hermana —Sarcasmo puro — Claro que tú, pones la mismas cara de Eli cada que aparece Nozomi-sempai.
— ¡Oye! —Reclamó la rubia — ¿De verdad pongo esa cara?
La menor asintió.
— Pues también pones esa expresión cada que ves a esa sempai amiga de Nozomi-sempai —Umi hizo una pose pensativa — ¿Yazama?
— ¡Nishikino! —Corrigió rápidamente, notando tarde su error.
— ¡Corte!
— Más despacio velocista —Comentó Eli.
…
—Acosar a una pareja y arruinar su cita solo por escabullirse de la limpieza, eso es demasiado —Concordó Maki.
— ¡Aun no termino! —Reclamó ofendida — Mientras las seguía me comenzaba a cuestionar sobre lo que estaba haciendo, por lo que en cuanto entraron al maid café decidí olvidar todo y darle su sermón al día siguiente, y fue cuando me di cuenta que con toda la actividad del club, la limpieza y el tiempo que pasé siguiéndola pasaron factura a mi estómago.
— Y decidiste cenar pajarita.
— ¡Corte!, ¡Eli-san!
— Perdón, no pude evitarlo.
…
— Aunque no suelo frecuentar ese tipo de lugares pensé que ya que estaba frente a ese lugar, al menos podría pedir algo para soportar hasta regresar a casa —Mientras más hablaba su sonrisa de esa mañana regresaba — Entonces al entrar fui recibida por una hermosa chica.
— ¿Hermosa chica? —Ambas se sorprendieron de que no gritara algo como indecente o se desmayara.
— Su belleza y su voz eran comparables a las de un ángel, jamás olvidaré ese cabello gris y esos ojos dorados.
— ¡Umi-chan! —Kotori se arrojó a sus brazos besándola interrumpiendo la escena.
— ¡Corte!, Kotori-san ¿tú también?
— Lo siento, no pude evitarlo —Se disculpó separándose.
— Kotori-chan, acabamos de cubrirle tus picotazos, no queremos más.
— ¡Nozomi!
…
— Esto no está pasando, esto no está pasando, esto no está pasando —Repetía Maki una y otra vez.
— ¿Qué sucede ahora contigo? —Preguntó Eli.
— Eli, es mi hermana —Dijo preocupada.
— ¿Umi?
— No idiota, hablo de Minalisky.
— ¿Es tu hermana? —Maki asintió — ¿Hace descuentos a amigas?
— ¡Corte!
— ¿En serio Eli? —Preguntó Maki
— No me culpes, siempre tuve esa duda —Se defendió.
…
— Maki, es Umi, la chica más densa y poco perceptiva que existe en la tierra.
— Pero incluso si es así, Umi podría…
— Maki, pasamos una semana con ella convenciéndola de que Clark Kent es Superman.
— Aun no entiendo cómo llegó a la teoría de que Lex Luthor era el mismo superman.
— ¡Deténgase por favor! —Pidió Umi totalmente avergonzada.
— ¡Corte!
…
Umi caminaba sin perder la sonrisa de su rostro completamente ajena al mundo, pero no era la única, una chica de cabello gris caminaba igualmente sumida en sus propios pensamientos, el choque entre ambas fue inevitable. Gracias a sus reflejos Umi logró atrapar a la chica antes de que callera cubriendo con su mano un brillo purpura y por la sorpresa ninguna notó el brillo en la pantorrilla derecha de Umi.
La chica, tras unos momentos en shock se abalanzó sobre Umi besándola, siendo correspondida de inmediato.
— ¡Corte!, ¡Así no iba la escena!
— ¿Les hecho agua? —Preguntó Nico con una manguera.
…
— ¿Y Eli? —Preguntó Maki al ver llegar a Umi al lugar donde usualmente se reunían.
— ¿No ha llegado? —Inquirió buscándola.
— Creí que estaba contigo —Comentó Maki.
— No, yo estaba charlando con Kotori-san hasta-
— ¿Con mi hermana? —Interrumpió rápidamente tomándola por los hombros — ¿No le hiciste nada indecente? —Preguntó con la mirada fija en los de su sempai.
— ¡Corte!, ¡Nozomi-san!
— Yo no hice nada lo juro por Dieguito Maradona.
— Perdón, la costumbre —Dijo Maki sonrojada.
…
Apenas se acercaron a la sala del consejo Umi se cubrió la nariz.
— ¿Qué es ese olor?
— ¿Qué olor? —Preguntó Maki antes de notar a la pequeña figura que estaba intentando abrir la puerta de la sala del consejo estudiantil — ¿Esa es Nico-sempai?
— ¿Desde cuándo la llamas por su nombre? —Preguntó Umi deteniéndose, el olor ya era demasiado para ella.
— Desde que la escogí como esposa.
— ¡Corte!, ¡Maki-san!
— Así decía el guion —Se excusó.
— ¡Nozomi-san!
La chica solo sonrió traviesa.
…
— ¿Qué sucede? —Preguntó Maki acercándose.
— Sucede que esa pervertida entró en su etapa fértil y se encerró con esa rubia domada —Dijo intentando abrir la puerta.
— Espera ¿Qué? —Ambas chicas se quedaron en shock y Umi al borde del desmayo — ¿Cómo permitiste que eso pasara? —Reclamó.
— ¿Yo? —Se señaló indignada — Intenté detenerla y razonar, pero en cuanto se juntaron, tu idiota amiga me sacó de la sala y se encerraron.
— A un lado —Dijo empujándola pero al mismo tiempo un brillo purpura apareció debajo de su labio y en el cuello en el caso de Nico.
— Una preguntita —Un raro señor con bigote salió de la nada — Si ya se conocían desde hace tiempo, ¿Cómo es que hasta ahora se tocan?, ¿No les parece eso curioso?
— ¡Corte!, Señor ¿Quién es usted? Y ¿Qué hace aquí?
— Mira, sabes cuándo te pones a pensar en ¿Quién soy? y ¿qué hago aquí? Me entra otra duda —Contestó con toda calma.
— ¿Cuál?
— ¿Alguien me puede prestar para el taxi de regreso?
— ¡Sáquenlo!
…
— Permíteme —Rápidamente Maki comenzó a revisar cada parte de Umi, una que sería difícil de ver para ella, como la nuca, espalda, la parte trasera de las piernas, y esperaba no tener que ir más arriaba por su propia salud — Lo encontré —Dijo tras levantar la falda.
— ¿Maki? —Umi estaba completamente avergonzada sin saber cómo reaccionar.
— ¿Qué encontraste? —Preguntó Nico con evidente molestia.
— Más picotazos de Kotori.
— ¡Corte!
Y Umi se desmayó.
…
— Hija, tú sabes que tu hermana puede ser algo despistada a veces, tal vez aún no se haya dado cuenta de su sello, ¿Qué tal si ella y Sonoda quedan atrapadas en algún almacén mientras alguna está en su periodo fértil?
— ¿No exageras un poco? —Inquirió al ver el escenario típico de algún romance cliché, o algo para adultos.
— Maki —Hizo una pausa con una mirada seria — ¿Cómo crees que fue concebida Kotori?
— Genial, ahora tendré pesadillas —Comentó la pelirroja.
— ¡Corte!, ¡Maki-san!
— ¡No puedes culparme!
…
— Eso me recuerda —Dijo de pronto interrumpiendo la charla telefónica tras volver del trance — Eli y Nozomi-sempai se encerraron en la sala del consejo estudiantil —Informó intentando eliminar cualquier imagen de sus sempai dentro del lugar, o de sus madres.
— ¿Otra vez?
— ¡Corte!
— Perdón, la costumbre —Dijo la directora.
