Enojado fui a hablar con mi madre, ella no podía hacer esto tan repentino. Golpee la puerta y como no contestó solo entré
-Mamá debemos hablar. – Dije molesto, ella iba a hablar pero la hice callar. – Sé que no debo dejarte sola, pero no quiero irme de aquí, tengo una vida aquí no puedes llegar y quitármela.
-Edward, nos vamos a ir no hay discusión, tu vida es conmigo, nos prometimos que no nos separaríamos y tú lo cumplirás porque eso es lo que haces y punto. – Dijo molesta
-No, no me iré, me quedaré aquí y tendré mi vida propia… -No me dejó terminar.
-¿Con tu tonta página y la desastrosa Isabella piensas que tendrás una vida digna? Lo que haces no es digno Edward, me da vergüenza que lo hagas de verdad perdón por esto pero si quieres seguir con tu estúpido proyecto olvídate de mí.
Eso me dolió mucho, ella había fingido que no le molestaba lo que hacía. Con la poca dignidad que mi madre me había dejado salí del cuarto y me fui
Al llegar a mi cuarto me puse a llorar, llamé a Isabella pero no me contestaba. Estaba solo.
Agarré un bolso y metí mis cosas ahí, incluso lencería y algunos tacones.
Cuando bajé con el bolso mi madre estaba en la cocina, salió a verme. Levantó las cejas
-¿Qué haces? – Preguntó
-Me voy de esta mierda de casa, si quieres irte vete pero sola, yo me quedaré aquí en algún lado y haré lo que me gusta.
-Has lo que quieras ya eres mayor de edad. – Dijo, pero lo que me destruyó más fue lo último que escuché que dijo.- Ya no eres mi hijo.
Cerré la puerta de un portazo y me fui de ahí, con una inmensa pena dentro de mí, hasta que sonó mi celular, era Isabella.
-¿Qué pasa Ed? – Dijo tranquila.
-Me fui de casa, no me iré con mi madre pero no sé dónde me iré aún, ¿Conoces un lugar?
-Yep – Dijo – te quedarás en mi casa, sabes llegar así que ven luego. – Y cortó.
Fui a su casa, ella vivía prácticamente sola, su padre trabajaba todo el día así que no creo que haya tenido problema en decirle.
Golpee la puerta y nadie abría, así que pasé por el jardín trasero que conducía a un bosque, ahí estaba.
Cuando me vio me abrazó y pidió disculpas por su actitud, yo le dije que no importaba y le conté lo de mi madre, ella no podía creerlo, hasta le dio rabia y siguió abrazándome mientras yo lloraba por todo lo que había pasado en tan poco tiempo.
Cuando me calmé saqué mi laptop y abrí mi página, las fotos tenían muchos likes y habían más seguidores, o sea más dinero para mí, eso me entusiasmo un poco, le mostré a Bella y ella estaba feliz.
-¿Qué harás Edward? Sé que no eres gay pero te gusta la lencería, eso es raro, y no entiendo el por qué
-No sé no tengo una explicación razonable, pero haré algo más atrevido esta vez. – Dije
Ella me miró como queriendo descifrar que cosa era así que le dije.
-Mostraré mi cara, mostraré que esto puede ser un arte también, no necesariamente solo morbo, me dedicaré a esto.
Bella sonrió y dijo: "Iré por la cámara"
