Capitulo 7: Una demostración de poder
Si arrojas una piedra al aire, esperando que alcance el cielo mismo, es afectado por una fuerza invisible. Aquella fuerza que nos mantiene sujetos a la tierra, y que evita que salgamos flotando. Provocando que de esta forma la piedra vuelva a donde pertenece, toma la dirección contraria a la que fue lanzada.
Toda existencia puede tener su contraparte. Ejemplos simples de estos pueden ser: los colores blanco y negro, arriba y abajo, adelante y atrás, amar y odiar, bondad y maldad.
Un balance perfecto. Se necesita, que ambos elementos se complementen en un balance perfecto. El mejor ejemplo para dicho balance perfecto seria el bien y el mal. Porque si no hay mal, no hay bien. No podemos decir que algo está mal si no tenemos un punto de referencia.
En pocas palabras no podemos decir si algo está mal, cuando no sabemos lo que está bien. Estos conceptos cambian mucho desde el punto de vista de cada individuo, pues si para ti algo está bien, le puede estar causando el mal a alguien más.
Es un círculo vicioso la representación del bien y el mal. Si el mundo vive en paz, siempre existirá el ser destinado a romperla y sumir al mundo en caos. Y cuando el mundo esté en caos, nacerán los héroes que lo protegerán de la destrucción. Y así sucesivamente es como corre la historia desde la existencia de los primeros seres inteligentes.
Para un demonio entrar en territorio sagrado, puede ser une experiencia desagradable. Y de la misma forma es para un ángel entrar en el infierno. Ambos son su contraparte. Ángeles y demonios, es lo que la sociedad piensa cuando tratan de representar el bien y el mal.
Entonces ¿Cuál puede ser la razón por la que un grupo de demonios se dirige a una iglesia? ¿No podría esto desencadenar una guerra? Fueron las primeras dudas que surgieron de un joven estudiante de cabello castaño.
``La situación cambia si es que la iglesia se ve envuelta en una disputa entre Caídos y Demonios´´ fue lo que respondió esas preguntas. Además de que en parte estaban ayudando a la iglesia a liberar su territorio de Ángeles Caídos. Eso tranquilizo solo un poco a sus dudas.
``Mira que la única razón de convencerlo fuera esa. Convertirnos en carne de cañón si algo malo llega a pasar, y así darle tiempo de escapar´´ Eran los pensamientos de una desconcertada pelirroja. Más que pensar en la situación actual, solo daba un ligero vistazo de vez en cuando a la derecha. Solo para poder observar a Issei y su comportamiento. Esos ojos, esa mirada, ese caminar, todo de él es completamente distinto, como si de otra persona se tratase.
El pervertido que todos conocían dejo de comportarse como tal. Solo se excusó diciendo que morir le abrió la mente, parece razonable si estas al tanto de su muerte. Al menos en el club de ocultismo esa razón era comprensible.
oXo
En medio de la noche, las nubes se comenzaban a despejar poco a poco, iluminando de esa forma mejor el entorno. Claro que era inútil ya que todos podían ver a través de la oscuridad.
El peligro era evidente, se podían sentir múltiples presencias en el lugar al que se dirigían. Ocultarse ya era inútil, pues habían alertado a todos los presentes. Así de esa forma decidieron caminar de manera directa al lugar.
Ahí estaba… era la iglesia… Obstruyendo el camino se podía ver demasiados enemigos, en su mayoría se trataba de sacerdotes desertores. Todos tenían la misma cara lasciva, imaginando de la peor manera al grupo de jóvenes adolescentes frente a ellos.
Volando por los aires, justo arriba del grupo de sacerdotes, se encontraban aquellos con las alas negras. Su cara lo decía todo, pues era una de desagrado, una que pones cuando vez a alguien que crees inferior.
-Así que ya llegaron- La Loli gótica con el pelo rubio en dos coletas, los volvió a recibir con una confiada sonrisa.
-Entonces tú eras al que Raynare supuestamente había asesinado- La que tomo la palabra fue una mujer alta con cabello largo azul marino que cubría su ojo derecho. Portaba una blusa granate con un cuello ancho, una minifalda a juego con la blusa y zapatos de tacón negro. Tenía descubierto parte de su pecho y escote, al mismo tiempo que portaba un collar de oro alrededor del cuello.
Y el tercer ente en el aire, permaneció en silencio. Era un hombre de mediana edad con cabello negro corto y ojos azul oscuro. Su atuendo consistía en una gabardina gris pálido, sobre una camisa de vestir blanca con un pañuelo que le hacía juego. Pantalones y zapatos negros con unos guantes del mismo color, y un sombrero de fieltro negro.
Aquellos tres son conocidos como Mittelt, Kalawarner y Dohnaseek. Estaban cuidando los alrededores de la iglesia, cuando recibieron a su compañera diciendo que habían llegado intrusos.
- ¡Kiba, Koneko! - Rápidamente dio la señal. Así todos tomaron sus respectivas posiciones.
Al frente se encontraban Kiba y Koneko, seguidos de Rias que preparaba sus hechizos. Y al lado se encontraba Akeno que parecía entrar en modo de combate cambiando así la ropa que portaba, teniendo así de un momento a otro un traje tradicional de Miko.
Finalmente, al final se encontraba Issei. ¿La razón? Desde el punto de vista de todos, no tenía experiencia en combate, ni control sobre su Sacred Gear, haciéndolo de esta forma un blanco fácil. Su único rol sería el de observar mayormente la forma en la que pelean los demonios. Al menos esa era la intención antes de saber que había tantos enemigos. Que, aunque débiles, todo parecía apuntar a una batalla de desgaste.
Con una velocidad sobre humana, blandiendo su espada, el primero en atacar fue Kiba. Como todo un maestro en la espada, no dudo en cortar las cabezas de los que se encontraba en su camino. Mientras Koneko mandaba a volar varios enemigos de un golpe…
oXo
``No diré que no estaba esperando una posible emboscada porque estaría mintiendo, tampoco imagine que la iglesia tuviera tantos marginados. Lo bueno de esto es que puedo recoger bastante información´´ Me encontraba analizando la confrontación que se estaba llevando acabo justo frente a mis ojos. Es importante analizar su forma de pelear, y encontrar contra medidas lo más rápido posible.
``Es cierto que me prepare para una decepción en caso de que el combate no sea lo que espero. Pero esto es demasiado. ¿Sera que están calentando? No parece ser así´´ Decepción, era lo que pasaba por mi mente.
Observaba cuidadosamente la velocidad con la que envestía Kiba a los sacerdotes ``El caballero, con una velocidad sobre humana. Además, parece manejar bien la espada´´ Di un paso a mi derecha, ya que el cuerpo de un sacerdote se acercaba desde el aire, uno de los tantos que estaban siendo lanzados a volar por los golpes de la pequeña albina. ``La torre, le ofrece fuerza sobre humana, y una defensa muy alta´´ Analizando los golpes de Koneko, solo se podía concluir que lo único que hacía era golpear, sin ningún patrón en especial, golpes, simplemente golpes. ``No sé de guerreros cuerpo a cuerpo, pero parece un estilo de pelea bastante simple´´
``La Reina, que posee las habilidades de las otras piezas del tablero. Aunque su personalidad me deja mucho que desear. Esa actitud solo me da escalofríos´´ Se podía observar esa sonrisa en su rostro, una sonrisa sádica, parecía que estaba a punto de sufrir un orgasmo, símbolo de disfrutar la masacre que estaba llevando a cabo.
``Parece que la presidenta se está reservando para lo que nos espera dentro de la iglesia. Una acción inteligente, pero de nada sirve si los demás se terminan cansando´´
A mi izquierda se encontraba Rias, tenía el ceño fruncido. Parecía estar al tanto de que su intervención tendría que ser necesaria.
``Bien, de todas formas, tenía que poner a prueba mis habilidades en combate´´
[Fire arrow] Con esas palabras, una flecha de fuego se materializo en mi mano derecha, fije un objetivo, y la flecha salió disparada acertando a un sacerdote entre sus cejas.
-Lo lamento, pero ya vi suficiente, es hora de que reciban mi ayuda, claro si es que no es mucha molestia- Comencé a dar unos pasos adelante, todos los frentes de batalla se tranquilizaron, nadie me detenía, solo observaban que clase de movimientos podía realizar. Mis supuestos compañeros solo me observaron de reojo un poco confundidos. Pero claro no podían menospreciar la ayuda, pues poco a poco se veían más agotados.
[Fire arrow] Volví a recitar el mismo hechizo, pero en esta ocasión fueron 300 flechas las que se materializaron a mi alrededor.
Nadie decía nada, incluso mis compañeros observaban tal acción en shock.
Con un simple movimiento de uno de mis dedos, las flechas salieron disparadas. Todas ellas se clavaron en los sacerdotes en distintos puntos, no tenían la fuerza suficiente para atravesarlos. Más que eso se ensartaron y prendieron fuego a sus objetivos.
Con los ángeles caídos fue un caso diferente, todos habían esquivado o bloqueado mis flechas con lanzas de luz.
- ¡Eso es…! - Dohnaseek, fue el primero en exaltarse.
-O valla, sobrevivieron. Solo será necesario repetir la acción con más potencia ¿Cierto? - Cuando termine de hablar, rápidamente una flecha de luz se acercaba a mi estómago. Claro que ya sabía que no me aria el más mínimo daño. Solo sería negada por mi resistencia mágica. Pero justo cuando estaba por impactar, la pequeña albina se abalanzo sobre mí, haciendo que la flecha solo se ensartara en el suelo.
-Gracias… supongo- Un poco desconcertado, porque quería ver cómo funcionaba mi resistencia mágica.
-No te distraigas- Sin una pisca de emoción, solo me daba a entender que no me volvería a salvar si es que volvía a suceder algo similar.
-Valla, así que solo pueden escapar he, ¡Solo será necesario atravesarlos a todos! - Saliendo del pequeño trance, todos los Caídos volvieron a su actitud arrogante, con esa mirada de desprecio. Fue algo molesto, aunque mi rostro no lo demuestre. Esa mirada, la había recibido ya muchas veces en el trabajo por mis superiores.
[Maximize Magic: Fire Arrow] –Esta vez me asegurare de no fallar- En esta ocasión fueron solo 10 las flechas que aparecieron en mi mano. A comparación con las anteriores, se observaba un rojo más intenso en estas.
-No te creas tanto estúpido demonio, unas simples flechas no servirán de nada-
Con un simple movimiento, las flechas salieron directo a su objetivo, pero en esta ocasión con una velocidad muy superior a la anterior.
Sin tener tiempo de reaccionar, las flechas acertaron. y atravesaron a todos los Caídos en múltiples lugares.
[Ball of fire] Sin dejarles descanso, una bola de fuego salió de mis manos. Impactando a los 3 Caídos que iban en dirección al suelo.
Lo único que quedo intacto de ellos, fueron algunas plumas. Lo demás estaba completamente asado, se podía sentir un desagradable olor. La que más asco pareció expresar fue la pequeña albina, con eso se podía confirmar que tenía un mejor olfato que el resto.
Comencé a caminar en dirección a la iglesia, pero nadie me seguía. Dando un vistazo atrás con una pequeña y cálida sonrisa. Claro la sonrisa era fingida, pues no podía expresar emociones.
- ¿No vienen? –
oXo
``Son demasiados, y parece que los Caídos se están reservando. A este paso también tendré que intervenir´´ La situación no me era agradable, pues poco a poco mi nobleza se cansaba. Issei es un nuevo demonio, por lo que no tiene experiencia en combate ni sabe cómo usar sus poderes demoniacos.
``Espera ¿Qué se supone que está haciendo? Hmph, si está dispuesto a atacar, me encargare de cubrirlo. Esto le servirá mucho para poner sus habilidades a prueba´´
Solo me pude sorprender el ver como la flecha que había hecho en su mano había acertado a uno de los sacerdotes.
``Ara, ara. Parece que si tiene bastante potencial he´´ Seguí observando el cómo caminaba tan tranquilo hacia adelante. Comenzó a decir unas palabras. ``Eso es ¿Un hechizo? Pero esto es increíble, ¡Como es que puede crear tantas flechas! ´´
Vi como las flechas salieron disparadas hacia todos los presentes a excepción de mi nobleza. Las únicas que fallaron fueron las destinadas a los Caídos.
``¡Esto es increíble!´´ No solo yo, si no toda mi nobleza se quedó observando como ardían los sacerdotes.
``Hyōdō Issei-kun, parece que me saque la lotería contigo´´ Siguió mirando a los que estaban en el aire. `` ¿Pensara atacar de nuevo? ¿El hechizo anterior no consumió mucha magia? ´´ Fue increíble, otras diez flechas aparecieron alrededor suyo, estas parecían arder más, y de igual forma cuando fueron lanzadas tenían una velocidad muy superior a las anteriores.
Los acabo a todos… No les dio tiempo de reaccionar… Y parece tan… tranquilo, eso es tenebroso, no parece reaccionar en lo más mínimo después de acabar con todos alrededor.
Parece que todos están en el mismo estado, siguen en shock. Ninguno imagino tal muestra de habilidad para un recién iniciado en el mundo sobre natural.
Parece que volteo, ¿Sera que nos atacara a nosotros ahora? No creo, de seguro no esperaba que todos reaccionaran de esta manera.
- ¿No vienen? - Volteo y nos dio una pequeña sonrisa, parece muy despreocupado pese a lo que ha hecho, casi como si esto solo fuera algo trivial en su vida.
``Después tendremos que hablar de todo esto´´ Siendo la primera en decidir caminar a la iglesia, los demás salieron del trance y me siguieron.
Koneko derrumbo las enormes puertas de un golpe, el lugar parecía vacío, de no ser por aquel que se encontraba en el centro de la iglesia.
- ¡Así que las perras han llegado! –
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GOD OF UNLIFE: El que gobierna por encima de todos los muertos, era lo que pensaba la mayoría de los jugadores al escuchar por primera vez el título. Pero en realidad, era aquel que gobernaba por encima de todas las almas. Traía consigo su pasiva única ``DEITY OF DEATH´´. También contaba con una serie de hechizos que se podían decir que son dignos de alguien que ostenta el título de dios.
Y entre sus habilidades principales, está la conocida como ``DIVINE AUTHORITY´´
DEITY OF DEATH: Es la pasiva que viene con el título de ``GOD OF UNLIFE´´. Funciona de manera simple, teniendo sobre la palma de su mano las almas de sus enemigos. Claro siempre existen las desventajas, pues la habilidad solo era 100% efectiva en aquellos que no tienen protección contra muerte instantánea.
De ser negada la pasiva, entra en un estado de enfriamiento para poder volverla a usar contra el mismo individuo una vez más, un enfriamiento de solo 30 segundos. Se puede pensar que sea poco, pero en los PvP entre los mejores jugadores, inclusive 5 segundos puede marcar la diferencia.
Puede ser negada con habilidades especiales de alguna clase, clases al nivel de la clase Eclipse. Puede ser negada por ítems de clase divino, pero traería consigo una pequeña confusión al mismo tiempo que el ítem es destruido. Y puede ser negada al 100% por ítems de clase mundial, claro con un extremo costo, haciendo que, de esta forma, al no poder ser destruido el ítem mundial, pasa a manos del dueño de la pasiva.
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En YGGDRASIL esto se convirtió en quejas del 95% de los jugadores. No esperaban una habilidad tan rota en extremo, pues los datos cargados a aquellos con el título de dios, era un completo caos en su programación.
Los GM solo se excusaron con la palabra de que, aunque era invencible en un 1vs1, podría ser derrotado en grupos de al menos 50 jugadores con equipos de mínimo clase divino. Teniendo así la oportunidad de que aquel que acertó el golpe final, le sea transferido el título.
Eso fue lo que se dijo al público en general. Pero los GM tenían otra idea en mente.
El juego tenía poco más de 9 años desde el día de su lanzamiento, poco a poco más jugadores abandonaban YGGDRASIL. Así de esta forma, ya tenían una fecha prevista para el cierre del juego. Fecha que no sería dicha hasta el momento adecuado.
Como gran evento final tenían previsto una batalla entre los 3 dioses del juego. Lastimosamente después de más de 9 años, solo uno de esos títulos había sido descubierto.
Tardarían 2 años en que el siguiente título sea descubierto, tiempo en el cual, el número de jugadores siguió descendiendo.