CAPITULO 8.

A Sakura le tomó mucho tiempo dormirse la noche anterior. Cada vez que lo hacía se despertaba exaltada y miraba a su alrededor con la esperanza de despertar en la habitación de su apartamento, donde vivía tranquila y felizmente sola. La cama de Kakashi se sentía muy grande y vacía, solo la comodidad de la misma fue la que finalmente le permitió dormirse.

Esta mañana lo que la despertó fue la vocecita de Kenta que susurraba justo frente a su cara "mamá ¿mamá?"

"Kenta-chan, es muy temprano. Deja dormir a tu madre" esta vez fue la voz de Kakashi quién susurro a unos metros de distancia.

"Tú me prometiste que estaba bien" dijo el niño con tono de voz asustado. Y aunque al principio Sakura pretendía ignorarlos, esperar que Kakashi tuviera éxito alejando el niño de ella, no pudo ignorar la voz del niño.

"Hey ¿Qué pasa?" preguntó Sakura, pero tan pronto abrió los ojos, solo pudo ver una ráfaga gris plata abalanzarse contra ella, ahora los pequeños brazos de Kenta se abrazaban a su cuello. Ella lo abrazó de vuelta, por encima de la cabeza del niño miró a Kakashi quién lucía preocupado con el ceño fruncido a varios metros de distancia. Sakura acarició el cabello del niño y repitió su pregunta.

"Papá estaba durmiendo en el sofá y tú estabas durmiendo" respondió el niño como si eso explicaba toda la situación. Kakashi se acercó y se sentó en la cama junto a ellos. La mirada de su sensei era de que entendía perfectamente el problema cuando para ella no tenía sentido alguno. Kakashi colocó una mano sobre la espalda del niño.

"Todo está bien Kenta. Te prometí que tu mamá estaba bien, y ella está bien" dijo Kakashi con un tono de voz calmado. El niño separó la cara del cuello de Sakura para mirarla a los ojos. Sakura sintió como un puño en el pecho cuando vio la mirada preocupada y los ojos húmedos en el rostro del niño. Kakashi volvió a hablar.

"Kenta-chan, mírame" cuando el niño se volteó y fijo su mirada con la de Kakashi, el hombre continuó "Yo no te mentiría. Tú mamá no va a volver a dormir por días como lo hizo aquella vez, cuando menos no pronto, y si podemos evitarlo nunca más lo hará" El niño no lucía convencido. Y aunque era casi imperceptible, Sakura podía ver que la paciencia de su sensei estaba llegando a ese límite en el que comienza a hablar con autoridad. Las palabras con las que Kakashi intentaba alentar al niño fueron suficiente explicación del problema, el niño temía que ella entrase en otro coma "¿Qué te parece si vuelves a tu habitación?" el tono de voz de Kakashi no daba espacio para discusiones, el niño asintió. Pero antes de bajar de la cama se volteó y dio otro abrazo rápido y apretado a Sakura.

El niño dejó la habitación y luego de varios segundos de silencio, donde ambos miraban la puerta fijamente, Kakashi soltó un suspiro antes de decir "Este arreglo de dormir en el sofá no es viable"

"¿Qué ocurrió?"

"Kenta vino hace unos minutos. Y al no verme en la cama, fue a buscarme. Pero ese no fue el problema. Al parecer el niño asocia el que yo duerma en el sofá con que tú estés en coma. Todavía le preocupa que tu vayas a dormir y no despiertes de nuevo. De hecho creo que por esa razón se pasa todas las mañanas a esta cama, para asegurarse que estas despierta o que puedes despertar…Cuando me vio en el sofá entró en pánico, me despertó casi llorando diciéndome que le había mentido, que tu no estabas bien" Kakashi lucía cansado mirando el piso frente a él.

"¿Por qué decía que le mentiste?" preguntó ella.

"Porque ayer le prometí que tú estabas bien"

"Pobre niño, debe haber estado muy asustado esos días que su madre no despertaba" agregó ella entendiendo, Kakashi asintió.

"Creo que el único que sufre de Estrés post traumático no soy yo, o su padre" corrigió al final sacudiendo la cabeza ligeramente.

"¿El Kakashi que es su padre sufre de estrés post traumático?"

"Eso dijo Tsunade"

"Y supongo que mientras yo estuve en el hospital, tú no dormiste en la cama sino en el sofá" agregó Sakura comprendiendo a fondo la preocupación del niño al ver a Kakashi durmiendo allí. Él asintió y la miró a los ojos.

"No hay un tú o un yo en todo esto, Sakura. Ellos son dos personas que no somos nosotros dos. Tú y yo nunca tendríamos esta vida" luego de decir este corto y cortante discurso, Kakashi se puso de pie, recogió ropa limpia y entro al baño.

Sakura no sabía cómo recibir lo que Kakashi acababa de decir, lo que no esperaba era el sentimiento de decepción que la arropó, porque aunque es cierto que este era un camino que nunca había considerado para su vida, no podía negar que lucía como una vida feliz y llena de satisfacciones.

Sakura decidió ir a hablar con Kenta. Al abrir la puerta de la habitación se encontró con el niño sentado en el centro de su cama mirando fijamente al perro de peluche con el que aparentemente solía dormir. El niño no subió la mirada al escucharla entrar, así que Sakura se sentó en la orilla de la cama frente a él "¿Estás bien?" el niño asintió sin mirarla y se limpió con el antebrazo una lágrima, la tristeza de cualquier niño era difícil de resistir para ella, la tristeza de esta mini versión de Kakashi era simplemente irresistible, necesitaba consolarlo "Ven aquí" dijo Sakura estirando una de sus manos que el niño no dudó en tomar antes de sentarse en su regazo con una pierna a cada lado de sus caderas, la cabeza recostada de su pecho y los pequeños brazos rodeando su torso, Sakura no pudo sino recordar a un koala nuevamente. Esta era un posición en la que no había estado con un niño nunca en su vida, era un abrazo entre una madre y un hijo, volvió a sentirse como la impostora que era, así que hizo su mayor esfuerzo por ser una buena madre ahora. La mujer comenzó a acariciar el cabello del niño "Todo está bien Kenta-chan"

"Papá está molesto conmigo" la voz del niño sonó amortiguada por el pecho de Sakura.

"No, no lo está" Sakura tomó al niño gentilmente por los hombros y lo alejó de su pecho lo suficiente para poder mirarlo a los ojos "Tu padre solo está preocupado porque no sabe cómo ayudarte, le preocupa mucho que tu pienses que cada vez que voy a dormir no voy a despertar más" Y explicándole esto a este niño para calmarlo, Sakura entendió lo ciertas que eran sus palabras. Si conocía bien a su sensei, este episodio de esta mañana le haría crear distancia física y emocional de ella y de los niños. Las palabras que le había dicho hace poco solo eran un muro que estaba creando, honestamente ella no tenía ninguna idea de cómo disuadirlo, hacerle ver las cosas de otra forma, de la forma en la que ella las estaba viendo justo ahora. Esta era una vida que nunca espero tener, pero era todo lo que alguna vez había soñado. Y seguro había razones por las cuales una versión de ella se enamoró de él.

"¿Y si no despiertas?" preguntó el niño con voz temblorosa.

"No funciona así. Esa vez usé todo mi chakra para que tu hermana estuviese sana. Por eso, no podía despertar, al menos no hasta recuperar toda mi energía de nuevo, solo me estaba recuperando" el niño no parecía muy convencido "Ahora, ve a cepillar tus dientes para que me ayudes a hacer el desayuno ¿sí?" El niño asintió con una gran sonrisa y saltó de su regazo para correr al baño.

Sakura revisó a la bebé, estaba despierta pero aún no lloraba, lo que le sugería que tenía muy poco tiempo de haber despertado. La sacó de la cuna, cambió el pañal. Y se reunió en la cocina con Kenta-chan. Sakura quería alegrarle la mañana al pequeño, no le parecía justo que el niño pagará emocionalmente por un descuido. Cuando Kakashi apareció finalmente en la cocina, su humor no parecía haber mejorado, para cualquier persona probablemente lucía tranquilo y desinteresado. Pero Sakura lo conocía desde que tenía doce años.

"Me iré a la oficina ahora, enviaré a alguien para que te ayude a llevar a los niños donde tu madre" dijo sin mirarlos, Kenta miraba a su padre con el ceño fruncido.

"Kenta-chan está haciendo el desayuno para nosotros, para disculparse por esta mañana ¿Cierto?" El niño había anunciado eso hace pocos minutos, y aunque ella estaba haciendo prácticamente todo, le pareció un gesto muy gentil de parte del niño. El niño asintió y Kakashi lo miró fijamente, probablemente tratando de decidir cómo reaccionar.

"¿Tal vez puedas ponerlo para llevar?" preguntó el hombre al niño quién asintió lentamente, no muy convencido con este arreglo. El niño la miró buscando la solución a este problema en su rostro y Sakura se puso en movimiento.

"Claro que sí" abrió varias gavetas hasta encontrar una con envases que cumplirían el propósito. Ayudó a Kenta a colocar la comida allí. Sakura no sabía si esto estaba bien, pero por ahora no había otra opción. Cuando estuviese a solas con Kakashi, hablarían al respecto.

Kakashi lucía incomodo parado en la puerta de la cocina, cambiando su peso de un pie a otro, pronto el niño estuvo satisfecho con la cantidad de comida que había guardado y con una gran sonrisa tomó el envase y caminó hacia su padre.

"Quiero disculparme porque hice que te preocuparas" anunció el niño estirando sus bracitos para darle el envase de comida a su padre. Kakashi la miró a ella, Sakura le hizo un gesto con la mirada para que diera su atención al niño. Kakashi tomó el envase y se agachó frente a Kenta "Estas disculpado ¿Puedes disculparme tú por no tener un poco más de paciencia?" el niño asintió con su gran sonrisa.

La escena más tierna que Sakura haya visto en su vida se desenvolvió frente a ella. Kenta se abalanzó en un abrazó contra el cuerpo de Kakashi mientras le decía "te amo papá". Kakashi la miró nuevamente por encima del hombro del pequeño. El brazo que no sostenía la comida rodeo el cuerpo del niño y Kakashi susurró algo al oído del pequeño, que Sakura no pudo escuchar.

"Ahora ve y sigue ayudando a tu mamá. Nos vemos más tarde" el niño asintió y corrió hacia Sakura "¿Estarás bien?" preguntó a la mujer.

"No necesitas enviar a nadie ayudarme a llevar a los niños. Ya tienes un equipo Anbu con ellos todo el tiempo" Kakashi lució sorprendido por un segundo.

"Tiene sentido."

Le tomó más tiempo del que probablemente a la verdadera madre de estos niños le toma arreglarlos en la mañana, pero era una madre inexperta ocupándose de dos niños al mismo tiempo. Se ocupó de Kenta primero, para dar luego toda su atención a Sayuri. Por fortuna, habían despertado más temprano de lo normal y no iban tarde. Tan pronto estuvieron en la calle con el edificio Hokage a sus espaldas, Sakura debatió si pedir ayuda a uno de los Anbu que la seguían para cargar las cosas de Sayuri, pero no fue necesario.

"Qué hermoso y lleno de juventud es un día cuando las primeras personas que saludas es la familia Hatake" la bulliciosa y alegre voz de Gai sensei los saludó. El hombre venía sentado en la silla de ruedas, siendo empujado por Lee.

"Buenos días Sakura chan, Kenta-chan y la pequeña hermosa Sayuri" Saludó Rock Lee. Ambos hombres lucían casi idénticos que cinco años atrás.

"Veo que el Hokage está muy ocupado está mañana para acompañarlos hasta casa de los abuelos. Pero no tienen de que preocuparse, Lee y yo los escoltaremos con mucho gusto" anunció Gai, Kenta comenzó a brincar de emoción y aunque Sakura trató de disuadir a los ninjas de acompañarlos, ninguno de los dos escuchó excusa alguna. Pronto el bolso de Sayuri estaba en el hombro de Lee, Sayuri y Kenta sentados en las piernas de Gai sensei, mientras él y Kenta apuntaban al frente con sus dedos, dirigiéndolos al camino de la alegría juvenil. Sakura no pudo evitar soltar una risita, era una escena muy ridícula pero muy adorable. Pronto Kenta ocupó toda la atención de Gai sensei con sus interminables preguntas que conseguían respuestas hilarantes y alentadoras del hombre.

"¿Cómo has estado Sakura-chan?" preguntó Lee quién caminaba a su lado empujando la silla de ruedas.

"Muy bien Lee, gracias por preguntar"

"Kenta es muy vivaz, es idéntico a su padre y al mismo tiempo no" apuntó Lee mirando al niño que reía alegremente con algo que Gai sensei le decía. Sakura miró al niño con ternura.

"Creo que Sayuri tiene más el temperamento de su padre" respondió ella.

"El Rokudaime es un hombre con mucha suerte" agregó Lee mirando hacia el frente con melancolía. Y Sakura se preguntó si todavía tendría el mismo crush infantil que cuando lo conoció.

Al llegar a casa de su madre Sakura agradeció a sus escoltas improvisados. Entró y saludo a sus padres antes de salir en dirección a su trabajo. Por un momento se preguntó si a sus padres no les molestaba que le dejara los niños todas las mañanas, pero lucían tan felices de verlos que probablemente fueron ellos quienes insistieron mucho en este arreglo.

Sakura entró al Hospital con una misión, buscaría en los registros de viejos alumnos el archivo de Arai Maki, cuando menos sabía exactamente cuando había comenzado su entrenamiento en Konoha. No estaba segura que iba a hacer con esa información pero la buscaría. A fin de cuentas no tuvo que hacerlo ella misma como había imaginado, Aiko era servicial y eficiente.

Tsunade no la había dado de alta para usar su chakra, así que solo hizo una ronda por todo el hospital, revisó algunos presupuestos, confirmo los horarios de la semana. Y cuando finalmente había terminado con lo más apremiante, tomó el archivo de Arai Maki, que su asistente había dejado en su escritorio unos minutos antes y lo revisó.

Estaba la tarjeta que ella había visto el día que la conoció en la oficina de Kakashi, había otras hojas con calificaciones y anotaciones. La chica había vuelto a su aldea con un nivel muy alto de Jutsu médico. Pero no encontró alguna información importante. Esperaba encontrar una dirección donde contactar a la chica, pero tenía sentido que no hubiese alguna, tomando en cuenta que la chica era una ninja. No es como que los ninja andan por la vida anunciando su ubicación exacta.

Ya cuando la hora de ir por los niños se acercaba, Tsunade-sama entró por la puerta, cerrándola detrás de ella y dándole una mirada fija e inquisitiva.

"¿Qué comimos la semana pasada en el café nuevo de la esquina?" preguntó su sishio y Sakura se sintió perdida, de todas las cosas que espero escucharle decir, esta pregunta no era una de ellas.

"Ehh…no lo sé" respondió con tímidez" Tsunade se sentó en la silla frente al escritorio.

"Entonces Kakashi no se volvió loco" dijo la mujer soltando un suspiro.

"¿Sospechabas que estaba loco?" preguntó Sakura

"Esperaba que lo estuviera, haría todo mucho más fácil que este enredo en el que me están involucrando" la mujer sacó una botella pequeña de sake y la colocó sobre el escritorio "Esta conversación amerita Sake. Pero primero déjame hacerte un chequeo rápido"

La mujer dio vuelta al escritorio y se acercó a Sakura, colocó gentilmente el dedo índice de la mano derecha sobre el Byakugo en la frente de Sakura, Luego de varios segundos de silencio pasó a mirar los ojos de la chica con atención, acerco y alejo el dedo índice y lo movió de un lado a otro, logrando que Sakura lo siguiera con la mirada. Cuando la Godaime estuvo satisfecha volvió a su asiento y comenzó a servirse sake en un copita que traía en el bolsillo.

"Estas bien, en teoría puedes usar tu chakra para pequeñas cosas, como de seguro lo has estado haciendo. Pero no permitiré que uses tu jutsu médico aún. Me gustaría que mañana en la mañana, en ayunas te hagas un estudio de sangre, solo para estar seguros. Tu asistente me dijo que ayer estuviste pálida" dijo antes de tomarse el contenido de su copa.

"Ayer desperté en la cama de mi sensei, con dicho hombre medio desnudo, con el rostro descubierto, y dos niños que aparentemente hice con él, tenía derecho a andar asustada por la vida" respondió Sakuraa la defensiva un poco molesta con su asistente, por ir con Tsunade sama.

"Es hermoso ¿no?" preguntó Tsunade con una sonrisa pícara que sorprendió a Sakura

"¿Qué?"

"El rostro de tu esposo. No sé porque el idiota lo cubre, tal vez para no mantenernos distraídos y sonrojados todo el día" respondió con una sonrisa pensativa. Sakura no tenía palabras, simplemente se sonrojo y trató de cambiar el tema.

"Hay algo que no entiendo, revisé mi historial médico y entiendo el cuadro en el que entré al parto…pero ¿Cómo llegué a ese punto? ¿Cómo perdí todo mi chakra?" la pelirosa preguntó y Tsunade soltó un gran suspiro.

"Ya hemos tenido esta conversación antes, Sakura. Fuiste muy estúpida, pusiste la vida de tu hija y la tuya en peligro por otra persona" Sakura miró a su sishio con los ojos abierto como platos "Tú querías trabajar hasta el último día como lo hiciste con Kenta. Y honestamente tu embarazo fue muy estable, mientras no te sobrecargaras no había problema, te di permiso de hacerlo. Creo que Kakashi no me ha perdonado del todo eso, tu esposo puede ser muy aterrador cuando está molesto, por eso no te dejo usar el jutsu médico aún, lo que hiciste ese día ha reducido mi confianza en que conozcas tus límites. La mujer se puso de pie y se acercó a la ventana que daba vista a la calle "Ese día hubo un incendio en un edificio de apartamentos, hubo daños graves en varios apartamentos. Los pacientes graves comenzaron a llegar y estabilizaste a todos. El último en llegar fue un niño de tres años, estaba gravemente herido, Sakura. Tenía quemaduras en el 80% de su cuerpo, tú lo recibiste aquí en el hospital y diste todo de ti, todo lo que tenías, nadie pudo detenerte, entraste en un trance, estoy segura que veías a Kenta-chan en ese niño. Yo no estaba en el hospital, cuando vieron entrar al niño en ese estado mandaron por mí, nadie esperaba que tú te hicieras cargo en tu estado y ya habías atendido otros pacientes. Cuando llegué con solo verte supe que algo estaba profundamente mal, seguías enviando tu chakra a ese niño, nadie había notado que sangre empezó a correr por tus piernas" Tsunade hizo un largo silencio, Sakura estaba como hipnotizada imaginando todo lo que su sishio le contaba "Cuando logré separarte del niño ya no estabas, comenzaste a convulsionar, lo demás seguro lo leíste en tu historial médico. Logramos estabilizarte y decidimos hacer una cesárea, obtuviste conciencia por unos minutos, tiempo que usaste para terminar de usar tu chakra en Sayuri"

"¿Pero cómo pude gastarlo todo? mi chakra y el del Byakugo" El Byakugo era llamado el Jutsu de Fuerza de un Centenar. En la guerra había hecho cosas grandiosas con ese sello ¿Cómo pudo gastarlo en algunas personas?

"Nunca estuve embarazada con el Byakugo. Nunca estuve embarazada, punto. Sospecho que tu cuerpo usaba constantemente energía de tu Byakugo. Durante tus dos embarazos tuviste energía extra en comparación con una mujer embarazada común, especialmente en los últimos meses. Te movías con agilidad, con esas grandes barrigas que llevabas siempre estabas caminando erguida, como si el peso extra no te afectara, probablemente no lo hacía. Ese día me comprobaste que mucho de tu chakra inconscientemente estaba siendo usado para darte toda esa vitalidad y energía" Tsunade volvió al asiento "Una de las cosas más difíciles que he tenido que hacer en mucho tiempo fue decirle a Kakashi que estabas en coma y que no estaba segura si ibas a despertar. Cuando un hombre ha perdido a todas las personas que ama, no quieres ser quien le diga que perdió una más" Tsunade sacudió su cabeza como tratando de borrar el recuerdo que esas palabras le habían traído "Pero estás bien ahora, hace dos semanas te di permiso de volver al trabajo solo por unas horas diarias, estuviste de acuerdo porque quieres pasar tiempo con los niños. Y honestamente este hospital es un desastre sin ti a cargo".

"Esta vida…con Kakashi sensei…no lo entiendo ¿Es este el futuro o un mundo paralelo?" preguntó mirando fijamente la foto de los niños que tenía sobre el escritorio.

"No lo sé, lo importante ahora es contactar a la niña de la que Kakashi me habló, una tal Arai" Tsunade tomó otro poco de sake "Mi recomendación sería ir directamente hasta la aldea de la arena, involucrar al Kazekage, encontrar a la niña y exigir respuestas. Pero entiendo que es poco práctico, Kakashi es el Hokage, no puede simplemente salir de la aldea en una misión personal. Además tienen dos niños pequeños. La siguiente recomendación que di a Kakashi fue involucrar a Shikamaru, el hombre es muy inteligente y pronto se dará cuenta que algo no está bien, además su esposa…"

"Sería una conexión directa con el Kazekage" completó Sakura.

"No me malentiendas, pero ya esto es un problema diplomático. Un ninja de la arena al que se le dio asilo y educación causó todo este enredo. Nuestro verdadero Hokage está ausente. Si esto hubiese sido por un ninja de otra aldea no estuviese de acuerdo con involucrar al Kage".

Tsunade acompañó a Sakura a buscar a los niños, convirtiéndose en la siguiente víctima de las infinitas preguntas de Kenta. Cada pregunta Kenta la cerraba con el título "abuelita Tsunade", y su sishio parecía feliz y complacida con esto muy diferente de cuando Naruto la llamaba de esa forma. Para la sorpresa de Sakura, Tsunade demostró una poco característica paciencia hablando con el niño, se esforzaba por hacerlo reír y a veces incentivaba las preguntas. La mujer estaba total y completamente enamorada de Kenta, Sakura no podía culparla, ella tenía dos días conociéndolo y ya estaba en la misma posición.

"A veces pienso que la única razón por la que sigo en esta aldea es ese niño" comentó Tsunade antes de despedirse cuando los dejó frente a la torre Hokage.

Luego del almuerzo, justo cuando Sakura salía de la cocina con los niños. Kakashi volvió a la casa. Sakura trató de disimular la sorpresa de verlo de vuelta, no esperaba verlo hasta el final del día, quizás en la noche. Ella pensó que Kakashi, temprano en la mañana, cuando la dejó sola con los niños había cedido todas sus responsabilidades a ella. Y ella estaba de acuerdo, ver a Kenta triste no valía tener la ayuda de Kakashi. Hubo un silencio incomodo, donde ni Kenta, ni Sakura, ni Kakashi dijeron nada, solo los ruiditos alegres que la bebé estaba haciendo al notar la presencia de Kakashi se escucharon en la habitación.

"Vine a ayudarte a dormir a Sayuri-chan" dijo su sensei rompiendo el silencio. Sakura asintió, caminó hacia él y depositó la bebita en los brazos del hombre, quién ya parecía mucho más cómodo que el día anterior sosteniendo a Sayuri, manteniéndola alejada de la máscara que la niña trataba con insistencia en quitarle.

Sakura dio media vuelta para mirar a Kenta y trató de poner una enorme sonrisa en su rostro, aunque el niño lucía pensativo, hoy el niño no tenía la misma alegría y energía del día anterior, eso le preocupaba "Vamos a tomar una siesta Kenta-chan" estiró su mano y el niño la tomó con una pequeña sonrisa.

Sakura se acostó junto a Kenta en la cama del niño. No sabía cómo devolverle la sonrisa, de hecho parecía que la presencia de Kakashi lo volvió sombrío y taciturno "¿Cómo se llama tu perrito?" preguntó Sakura tomando el peluche de un lado de la cama y lo puso en los brazos del niño.

"Se llama Obito" respondió Kenta, su sonrisa se amplió solo un poco abrazando su perrito. A Sakura le sorprendió escuchar el nombre, aunque no conocía los detalles sabía que Obito fue alguien muy importante para Kakashi.

"¿Quién te regalo este perrito? ¿Fue tu padre?" el niño la miro como si había dicho algo extraño, esta era información que Sakura debía saber "No lo recuerdo" agregó.

"Me lo regaló Pakkun en mi último cumpleaños, me dijo que era de parte de toda la manada, hasta que yo pueda tener mi propia manada como mi papá" Sakura imaginó que los ninken de Kakashi deben amar a este niño tanto como todos los que lo conocen "¿Mi papá… él ya no te quiere?" preguntó el niño mirando fijamente el perro. Sakura no pudo disimular la sorpresa que le causó esa pregunta. Definitivamente Kakashi y ella han estado haciendo todo mal. Un niño tan pequeño no debe estar preocupado por esas cosas.

"Por supuesto que sí" respondió por instinto, era la única respuesta que le podría dar a este niño, incluso cuando era mentira, Kakashi no la amaba ella, no como se amaban los verdaderos padres de este niño "¿Por qué preguntas eso?"

"Porque ya no te abraza o te da besos cuando sale de la casa, ni sostiene tu mano. Ahora duerme en el sofá y tú no estás enferma"

"¿Tu padre me besa frente a ti?" preguntó sorprendida por esta información. El niño asintió antes de decir.

"Aquí y aquí" respondió señalando con uno de los deditos la mejilla y la frente de Sakura. Ella sintió como la sangre se le iba al rostro, no podía imaginarse a Kakashi haciendo eso "No duerme contigo…y no estas enferma" insistió el niño, dándole un racionamiento infantil a encontrar a Kakashi durmiendo en el sofá "Shikadai y yo tenemos un amigo en el parque que nos contó que su papá ya no quiere a su mamá y ya no vive con su familia porque ya no quiere dormir con la mamá, porque no la quiere ¿Mi papá va a dejar de vivir con nosotros?"

"Por supuesto que no" Sakura y Kenta volteron al escuchar la voz firme de Kakashi venir de la puerta, donde estaba de pie con la bebé casi dormida en brazos. El hombre había estado escuchando. Sakura se sentó en la cama, seguida por el niño. Kakashi se sentó frente a ambos "No tienes que preocuparte por eso Kenta-chan. Las personas más importantes en el mundo para mí son ustedes tres, somos una familia y no vamos a dejar de serlo nunca, tienes que estar seguro de eso" Kakashi colocó la mano que tenía libre sobre una de las de Sakura y se la apretó con firmeza "No creo que sea posible dejar de querer a tu madre, ella me regaló a ti y a tu hermanita, un hogar, una familia….Te prometo que todo está bien, solo he estado ocupado y preocupado por otras cosas, pero voy a tratar de ser mejor" el hombre soltó la mano de Sakura y la colocó sobre la cabeza de Kenta alborotando gentilmente el cabello del niño. Definitivamente nada que hubiese podido decir Sakura podría devolver la sonrisa a Kenta, este pequeño discurso lleno de sentimiento lo había hecho y Sakura no pudo evitar sonreir de vuelta al ver la linda sonrisa del niño. Y aunque solo eran palabras para tranquilizar un niño de cuatro años, Sakura no pudo evitar sonrojarse. Kakashi fue a acostar a la niña que se había dormido en sus brazos mientras hablaba, al parecer la voz de Kakashi era un completo somnífero. Porque hasta Kenta estaba bostezando.

"Espero confíes en lo que dijo tu padre, porque es la verdad" agregó Sakura, el niño asintió con un bostezo "Muy bien, a dormir la siesta" dijo mientras dirigía el cuerpo del niño de nuevo a una posición acostada.

Sakura dejó la habitación, chequeó la de la niña, pero ya Kakashi no estaba allí. La bebé dormía plácidamente. Encontró a Kakashi en el piso de abajo mirando las fotos familiares "Estamos arruinando la vida de estos niños" dijo sin voltear a mirarla. Sakura soltó un suspiro.

"No les estamos arruinando la vida, Solo debemos adaptarnos y esforzarnos un poco más" respondió sentándose en el sillón sintiéndose cansada.

"¿Crees que no noté que Kenta parece un niño totalmente diferente al de ayer? Arruinamos todo tomando la decisión apresurada de dormir separados"

"No pensamos en los niños. Porque no tenemos niños de dónde venimos, no estabamos al tanto de que hay que considerarlos hasta para la más pequeña de las decisiones. Pero ya lo sabemos, no volverá a ocurrir" Kakashi finalmente se volteó para mirarla "Debemos tomar esto como una misión de espionaje, una vez tuve que fingir que era novia de Sai, y durante todo el camino hasta donde llevaríamos a cabo la misión, estuvimos sosteniendo nuestras manos, nos abrazábamos en momentos inesperados, etc. Para que el contacto físico no se notara como una novedad o no fuera una sorpresa en el otro en medio de la misión. Debemos hacer algo similar ahora" Dijo la kunoichi estirando su mano y ofreciéndola a Kakashi, el hombre miró fijamente la mano de la pelirosa sin hacer ningún movimiento, finalmente cedió asintiendo y tomándola lentamente. Sakura se puso de pie.

La mujer dio un paso al frente acercándose a él. Kakashi lucía tenso, pero no parecía tener intención de moverse así que Sakura se llenó de valentía y se acercó más. Sakura colocó lentamente la mano que tenía libre en el pecho de Kakashi, presionó gentilmente su palma completa sobre el pecho del Hokage.

"Kenta dijo que antes de salir de casa siempre te beso" Sakura lo miró a los ojos y asintió "¿Dónde apuntó?" Sakura iba a separar la mano del pecho de Kakashi para apuntar, pero antes de poder hacerlo el ninja colocó su mano libre sobra la de ella manteniendo su palma presionada al pecho.

"En la frente" respondió al no tener la mano para apuntar. Kakashi cerró el poco espacio que los separaba y dio un pequeño, casi imperceptible beso en la frente de la mujer, se separó de ella lo suficiente para mirarla a los ojos "y en la mejilla" respondió casi sin aire. La mirada de Kakashi viajo hacia la mejilla izquierda de Sakura, por un momento Sakura pensó que no lo haría, pero Kakashi la sorprendió al acercar su rostro lentamente hacia su mejilla, apenas sintió el roce de los labios cubiertos del hombre cuando se alejaron de su cara. Pero cada pequeño punto contacto ahora lo sentía tintinear con energía. Sakura pensó que el momento había acabado, pero la boca de Kakashi viajó a su otra mejilla, los ojos de Sakura se cerraron solos con el contacto. Podía sentir el calor que irradiaba el cuerpo de Kakashi, estaba a muy poca distancia. Le daba miedo abrir los ojos y asustarlo, miedo de que el momento se acabara. La boca de Kakashi descendió sobre la de ella lentamente, podía sentir los labios del hombre sobre los de ella, sin tela alguna entre ellos cuando varios golpes suaves en la puerta principal sonaron. La pareja se alejó de un brinco sorprendidos por el sonido. Cuando Sakura abrió los ojos Kakashi estaba varios pasos de distancia, con el rostro cubierto.

Ninguno de los dos se movió. Probablemente sorprendidos por lo que estaban a punto de hacer, cuando menos Sakura lo estaba. Un beso inocente en la mejilla se estaba convirtiendo en otra cosa. Sakura estaba consciente que ya estaban en una situación complicada, dejarse llevar por esta fantasía de una vida juntos solo las complicaría aún más. Pero si era honesta consigo misma, sabía muy bien que no tenía la energía para evitarlo, ya estaba hundida hasta la cintura en esta vida. Y estaba totalmente dispuesta a hundirse por completo. Aun cuando pudiese ser una estupidez.

La puerta sonó nuevamente, sacándolos del trance en el que se encontraban, Kakashi se puso en movimiento. Sakura soltó el aire que no sabía que estaba reteniendo, pasó las manos por sus mejillas, consciente de que estaba sonrojada. Se volteó a mirar la puerta cuando escuchó la voz de Kakashi.

"Shizune-san. Ya los niños están dormidos, trataremos de volver antes de que despierten" la mujer asintió y miró a Sakura, era obvio que notaba lo sonrojada que estaba.

"Oh está bien, siento mucho si interrumpí algo" dijo mientras daba un paso dentro de la casa. Sakura trató de negar lo evidente, Kakashi simplemente no dijo ni hizo nada "No importa si se demoran, me encanta pasar tiempo con los niños. Son muy fáciles de cuidar" dijo la mujer con una gran sonrisa. Ahora, vayan a hacer lo que tienen que hacer. Sakura miró a Kakashi confundida.

"Oh lo siento, no me dio tiempo de decirte. Tenemos que estar en un lugar" Kakashi se acercó y estiró una de las manos, Sakura la tomó dejándose guiar. El éxito en este mundo era dejarse llevar y hacer preguntas luego.

"Gracias Shizune-san. Nos vemos pronto" anunció Sakura antes de salir por la puerta. Cuando la puerta estuvo cerrada Kakashi soltó la mano de Sakura y comenzó a caminar. Ella esperó alejarse un poco de la casa antes de hacer preguntas "¿A dónde vamos?"

"A casa de los Nara. Es hora de hablar con Shikamaru y su esposa"