Aclaración: Los personajes de Naruto no son míos, sino de Masashi Kishimoto. La historia es MIA MIA MIA.

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Capitulo 9

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Cita

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"Si supieras en las camas que he estado,

¿Me amarías menos?"

Love Me Less- Max feat. Quinn XCII

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Me muerdo el labio mientras miro hacia el piso. Ni siquiera me doy cuenta del momento en el que Sakura se apartó y me dejo sola al pie de la escalera, cuando ya dijo todo lo que quería decir.

"No me lo quites" Había dicho ella, pero ¿Se puede quitar algo cuando ni siquiera era de ella? Porque si recuerdo bien, fue Sasuke quien siempre decía que jamás había estado con Sakura y que jamás estaría con ella. Entonces si Sasuke nunca fue de ella, ¿Cómo podía yo quitarle al pelinegro? Muchos podrían pensar que estoy mal, que no debería hacer caso a las palabras de Sakura, que debería seguir con la relación actual que tengo con Sasuke.

Relación que me hace feliz.

Pero tampoco soy ciega, también sé que en algún momento tendremos que separarnos y aunque me diga a mí misma que mis sentimientos por él no serán nada más que un simple gustar, el pensamiento ya está ahí. Porque ya me estoy planteando la idea de que, en algún momento, Sasuke llegue a ser algo más que un simple gustar.

Y aquello da miedo. Da mucho miedo.

Porque con Naruto nunca existieron esos temores. Claro, tenía la esperanza que él voltearía a verme, pero también me había resignado a la idea de verlo feliz en otros brazos, por lo que jamás me quede dando vuelta a media noche mientras pensaba en él o lloraría abrazada a la almohada por el dolor en mi corazón. Con Sasuke es diferente, con Sasuke ya sé lo que es compartir y confiar tu cuerpo a una persona, ya sé que él volteará a verme en cualquier lugar y me dará una sonrisa ladina. Y sé que, si me llegara a enamorar de Sasuke, mi amor sería egoísta, porque a diferencia de con Naruto donde yo deseaba la mayor felicidad para él aun si yo no caminaba a su lado, con Sasuke querría que esa felicidad se la proporcionara yo.

Y no quiero volverme una persona egoísta, claro que no. Así que sería lo mejor el cortar por lo sano, el terminar toda relación que tenga con el Uchiha antes que se ponga más peligrosa.

Antes que pueda llegar a sentir algo más.

-Hinata. - Incluso cuando estamos rodeados de gente y la música está a todo dar por los parlantes, aun así, reconozco su voz sin dudarlo. ¿Aquello no dice ya que esto se está convirtiendo en algo demasiado serio? - ¿Lista para irnos?

Mis manos aprietan la falda con tul que he llevado por toda la noche. Se suponía que sería una noche inolvidable, se suponía que Sasuke solamente me vería a mí y una parte en mi interior estaba esperando el momento en que nos fuéramos a su casa para seguir con lo que sea que estuviera dispuesta a dar. Ino me había arreglado y maquillado para ese propósito y debo admitir que nunca me había visto tan atractiva, asique le había agradecido a la rubia por su trabajo hecho cuando me mire al espejo, pero ella solo negó con la cabeza.

"Tú ya eres atractiva, Hinata, con o sin maquillaje" Mi corazón agradeció aquellas palabras, aun cuando yo me había puesto colorada, aun así, sé que Ino se dio cuenta que estaba agradecida por todo el ánimo que me brindaba.

"Eres tan hermosa" me pongo roja cuando recuerdo como él me lo había dicho cuando besaba mis pechos o cuando bajo a mis piernas. En todo ese proceso, nunca dejo de decírmelo y aquello me hizo sentir bien como mujer, que de verdad era hermosa y que un hombre como Uchiha Sasuke lo podía ver. Cualquier otro podría haber dicho que no le gustaba mi estómago o mis muslos algo más gruesos que los de mis amigas, o mi trasero demasiado grande, pero Sasuke siempre me dijo que era hermosa.

Él me considera hermosa. Y aquella opinión pesaba más que cualquier otra opinión negativa de mi cuerpo. Incluso si 100 personas me decían que tengo un cuerpo horrible, me diría a mí misma "No importa porque Sasuke me encuentra hermosa".

¿Se dan cuenta de la importancia que tiene Sasuke en mí?

- ¿Qué fue lo que hablaste con Sakura? - Cuando lo escucho volver a hablar, recién ahí levanto la cabeza para mirarlo y veo que tiene el entrecejo fruncido e incluso su mirada esta algo molesta.

- ¿C-Como sabes que hable con Sakura? - Se que es estúpido el hacerme la tonta, pero tampoco quería decirle a él de lo que Sakura me dijo. Conozco lo suficiente a Sasuke y si le decía que Sakura estaba pidiéndome que no estuviéramos juntos, sé muy bien que Sasuke se enojaría con su amiga de infancia.

Y si a eso le sumamos lo que me dijo Karin en el segundo piso, no puedo imaginar como estará Sasuke; porque bien es capaz de acorralar a Karin y decirle que no vaya diciendo mentiras como que él está relacionado como algo más que cuñada-cuñado con Izumi.

-No soy ciego y desde el otro lado de la habitación vi que lo que sea que te haya dicho Sakura hizo que tu expresión cambiara. - ¿Por eso él se veía tan desesperado por llegar a donde yo estaba? ¿Quizás intuyo que ocurría algo malo y por eso quería llegar a mi lado? - ¿Qué fue lo que te dijo? - Su mirada levemente molesta se vuelve aún más molesta al intuir que algo pasaba, pero yo me muerdo el labio, debatiendo si decirle o no lo que Sakura me estaba pidiendo o simplemente decir que no ocurría nada y después de un tiempo poder hablar con él. Y decirle que ya no puedo seguir con lo que sea que haya entre nosotros.

-No puedo. – Quizás no tartamudeé, pero mi voz tembló cuando dije una frase tan pequeña y corta, porque sabía el poder que tenían esas palabras.

- ¿No puedes qué? - Me muerdo el labio aún más fuerte cuando pienso en lo enojado que estará conmigo.

-Ya no puedo con esto. – Los ojos antes confundidos de Sasuke, comienzan a tornarse molestos.

-Que mierda te dijo Sakura. - Ya ni siquiera pregunta, sino que es una orden de la que sí o sí debo cumplir.

Pero por una vez en mi vida, seré terca y no diré nada.

-N-No me dijo n-nada. - Por muy terca que pueda ser, si hay algo que me delata es el hecho de que no se mentir y por la mirada aún más molesta de Sasuke, deduzco que se dio cuenta.

Gira su cabeza mirando al otro lado del salón, y yo al seguir su mirada, me encuentro con los ojos jade observándonos, quizás ya sabiendo que es lo que estamos hablando, pero no sé qué cara ni mirada hace Sasuke, pero sí sé que Sakura aparta su mirada asustada mientras se va a otro lado, quedando oculta por los cuerpos bailando.

Sin mediar palabra ni yo decir una objeción, Sasuke me toma de la mano mientras va a las puertas francesas de Ino que dan a su jardín trasero. Hay algunas parejas que están paseando por ahí, pero con una mirada y sin una palabra, Sasuke hace que todos se fueran asustados. Algunas veces he llegado a admirar la forma de ser de Sasuke, ya que siendo su personalidad como es, nadie pasará por encima de él.

Él es alguien completamente diferente a mí.

-Muy bien. – Dice una vez que nos encontramos solos y suelta mi muñeca para mirarme de frente. - O me dices tú lo que te dijo Sakura o yo mismo iré a preguntarle. - Aprieto mis manos en puños a los lados de mi cuerpo cuando pienso de qué forma Sasuke le preguntará a Sakura que fue lo que me dijo.

No me sorprendería que hubiera algunos gritos, gruñidos y maldiciones de por medio, lo que haría que Sakura se avergonzara y al mismo tiempo llorara cuando el amor de su vida le está gritando por algo.

-N-No me dijo nada que no supiera ya. - No sé de dónde salen las palabras, pero de algún modo encuentro el valor.

-Hmp, ¿y eso es? – Sus ojos están pendientes de cada palabra que yo pueda decir o movimiento que pueda hacer.

-Que no puedo ser una mentirosa y seguir con esto. – Básicamente, Sakura me dijo que no le quitara a Sasuke, pero si le dijera aquello al pelinegro sé que le dirá de forma no muy amigable a Sakura que se meta en sus asuntos.

Lo miró curiosa cuando levanta un lado de su boca, como si le diera risa toda esa situación. – Ósea que básicamente, Sakura te dijo que no te acercaras a mí. – Solté un jadeo ya que Sasuke se dio cuenta de lo que ocurría. La sonrisa ladina en su boca creció un poco más, pero en sus ojos se veía la molestia. - ¿Y yo no te he dicho que no tomes en cuenta la opinión de Sakura? – Retrocedo un paso cuando el pelinegro inclina la cabeza hacia mí, estando nuestras frentes casi rozándose y sintiendo su aliento en mi nariz.

-S-Si, pero… - sin embargo, mi voz fue cortada por la de él.

-Tal parece que las palabras que te puede decir Sakura son más importantes que las que te he dicho yo. - Ni siquiera hago el intento de hablar, ya que el no pierde tiempo en continuar. – Yo, quien tenía tus piernas en mi cuello mientras tu jadeabas mi nombre hace unos momentos atrás. –

Levantó la mirada sorprendida, no sin antes soltar un jadeo y que mi rostro se pusiera colorado cuando pienso en lo que habíamos hecho momentos atrás en el piso de arriba.

-Y aun cuando te he tratado de lo mejor, mientras que Sakura no ha sido nada más que una perra, tu sigues las palabras de ella en vez de las mías. - Trago en seco cuando veo que su mirada se vuelve aún más molesta y comienza a avanzar hacia mí, mientras yo retrocedo paso a paso. - Dime, ¿se supone que debo decir "claro, Sakura tiene razón y debemos olvidar todo lo que hicimos"? ¿Acaso esperas que lo acepte, así como así? – Maldigo mi suerte cuando mi espalda se topa con la pared al lado de las puertas francesas de la casa y Sasuke esta sobre mí, al acecho para cualquier palabra que pueda decir en mi defensa.

-P-Pero Sakura puede tener razón… - Salto cuando su voz alta y molesta retumba por todo el espacio abierto.

- ¡Me importa una mierda lo que crea Sakura! - Sus brazos fuertes y dominantes se ponen a los costados de mi cuerpo mientras inclina su cabeza aún más hacia la mía. - ¿Qué no te das cuenta que sólo quiere tener el camino libre? ¿No ves que te dijo aquello para que tu no estuvieras en medio? Porque lo que ella quiere es tener toda mi atención, y sabe que, si tú estás, ella no tiene oportunidad. – No sé a lo que se refiere, pero no pienso mucho en ello porque vuelve a hablar después de soltar una pequeña risita molesta. – El problema es que aún si tu no estuvieras, ella aun así no tendría oportunidad.

De algún modo me molesta su último comentario, porque Sakura si fue alguien que ha estado siempre para él, pero ¿Por qué una vez ella no estuvo para él, él encontraba que ya no tenían futuro? Que infantil.

-Solo porque Sakura no estuvo una vez para ti, no significa que no debas darle una oportunidad. - De algún modo, su mirada que antes estaba molesta, de algún modo se vuelve sorprendida cuando me escucha hablar. - Sakura siempre ha estado ahí para ti, y encuentro injusto que porque ella no estuvo para ti solamente una vez tu no puedas verte con ella a futuro, cuando antes siempre estuvo para ti. - Ahora la sorprendida soy yo cuando suelta una carcajada.

-Esa vez era la única vez que la necesitaba a mi lado, pero la muy cobarde prefirió dejarle todo el peso de hacerme volver, a su amigo. – Si antes creía que la mirada de Sasuke era molesta, ahora creía que lo era aún más. - Y, ¿ahora espera que vuelva a confiar en ella con los brazos abiertos? Tiene que ser muy estúpida y perra para que piense aquello. -

-N-No es necesario que hables de ella a-así. – Trato de hacer que Sasuke no la insulte de esa manera, pero aquello solo hace que él se moleste más.

- ¿Qué? ¿Acaso no sabes qué Sakura es una maldita perra cobarde y además estúpida? – Mis manos se vuelven puños a mis costados. – Dime, si ella no fuera cobarde, sería ella la que me estaría plantado cara en estos momentos y no yendo casi a espaldas mías donde ti, porque me tiene miedo y sabe que tu no podrás decirle que no a ella. - Inclina su cabeza hacia un lado. - ¿Has pensado en cómo sería la situación si fuera al revés? -

- ¿A qué te refieres? - Lo miró confundida, no sabiendo porque pregunta aquello.

-Dime, si Sakura estuviera en algo con el idiota de Naruto como tú lo estás conmigo, y fueras tu a hablar con ella para que te deje el camino libre, ¿ella se haría a un lado o seguiría con Naruto, no importándole tus sentimientos? - Trato de bajar la cabeza para no encontrarme con sus ojos molestos, pero me obliga a levantarla cuando pone sus manos en mi mentón y me vuelvo a encontrar con sus ojos negros. – Conoces tan bien a Sakura como yo y sabes que ella no haría nada, seguiría con Naruto y no le importaría si tu lloraras noches enteras por él. – Su voz baja una octava más, haciendo a su voz más ronca y casi como si estuviera susurrando. – Así de perra es Sakura.

Giro mi cabeza hacia la derecha cuando suelta mi cara y trato de no pensar en la verdad de las palabras del Uchiha, pero él todavía no ha terminado y siento su aliento en mi oído.

-Al menos en ese sentido ella sí es valiente, porque no le importarían los sentimientos de los demás con tal que ella sea feliz, porque ella si buscaría su felicidad. - Su voz en susurro hicieron que me mordiera el labio, porque un lugar muy al fondo de mi mente sabía que es así, que Sakura si hará lo necesario para buscar su felicidad, mientras yo me conformó solamente con mirar y acatar las órdenes de los demás. – Me pregunto, Hinata, cuando será el momento en que te des cuenta que desearle felicidad a los demás y sacrificar la tuya por ellos, no te dará la felicidad que anhelas. Porque decidiste ser bondadosa en vez de egoísta, y desearle la felicidad a los demás ya no te llenará y estarás completamente sola. - Sin una palabra más, se gira y se pierde dentro del edificio.

Mientras yo me muerdo el labio, tratando de contener las lágrimas porque muy en el fondo sé que Sasuke tiene razón, que debería ser más egoísta con mi felicidad, pero el problema es que no es cómo hacerlo.

¿Qué no puede seguir con eso?

Aquellos que se cruzan en mi camino, miran mi cara y se apartan, porque mis ojos demuestran que estoy enojado.

Estoy furioso.

¿Tan rápido se deja influenciar por las palabras de otra en vez de las mías? ¿Acaso no le afirme que todo estaba bien y que no tenía por qué preocuparse? Si era así, ¿Por qué diablos prefirió creerles a las palabras de Sakura?

Trato de recordar si en algún momento hice que llorará o que la haya lastimado con mis palabras, pero lo único que me viene a la mente es su risa. Su risa y su sonrisa. Porque Hinata sí se divertía conmigo, podíamos hablar de todo y nada al mismo tiempo y no la hacía sentir mal. ¿Acaso chuparle el coño no fue suficiente para hacerle ver que me tiene fascinado? ¿Acaso sus gritos y jadeos no me hicieron ver que lo disfrutaba? ¿Acaso no se da cuenta que yo la lleve al placer?

Sinceramente me estoy preguntado si Hinata de verdad es muy estúpida. Si, Hinata es inteligente y todo eso, pero me refiero a que se deja influenciar muy fácilmente por los comentarios de las personas. Incluso, me llego a preocupar de que en un futuro ella siga siendo así y que los demás se lleguen a aprovechar de ella.

Cómo lo hizo Sakura, porque como sea que trate de mirarle el lado bueno a la Haruno, siempre llego a la conclusión que Sakura se aprovechó de Hinata; porque vio que la ojiperla no era una persona que ocultaría algo a sus amigos, sobre todo si eso implicaba la felicidad de estos, así que básicamente, la hizo elegir.

Y Hinata la eligió a ella. No voy a mentir que cuando llegó a esa conclusión, mi pecho se estruja un poco, ya que igual duele que aun cuando yo trate bien a Hinata, ella eligió a su amiga.

¿Acaso tú eres un santo?

¿Se han dado cuenta que siempre una voz susurra en su mente? Bueno, yo detesto que esa voz susurre en la mía. Porque sé que tiene razón. Porque si me hicieran elegir entre Hinata e Izumi, yo elegiría a Izumi. Siempre a Izumi.

El que esté libre de pecado, que lance la primera piedra ¿no?

Pero cuando mis ojos se encuentran con los ojos jade de la principal responsable de todo esto, mi furia crece más. Díganme egoísta e infantil, me importa ya una mierda lo que puedan decir de mí, pero soy consciente de que soy una persona vengativa y rencorosa, y si tengo que echarle la culpa a alguien de todo lo que me está pasando, yo lo haré.

Y ahora mismo, la culpable de todo esto es Sakura.

¿He dicho alguna vez que Sakura es cobarde? Bueno, cuando aparta su vista de la mía y trata de esconderse entre la multitud, creo que ya tienen una idea de lo cobarde que puede ser Sakura. Pero sé que en algún momento me toparé con ella y aquello será más temprano que tarde.

Pero cuando veo una melena roja sentada en la barra, sé que mientras espero mi encuentro con Sakura, bien puedo hablar con Karin.

Porque ni crea que no me di cuenta de que había hablado con Hinata. El solo hecho de haberla visto al final de la escalera cuando la Hyuuga hablaba con la Haruno me da una hipótesis de que le dijo algo a la ojiperla que no debía. La mirada confusa y algo desorientada de Hinata al bajar las escaleras me lo confirma.

Y ya que Hinata no mencionó nada de eso y simplemente se enfocó en las palabras de Sakura, no le tome tanta importancia. Pero hay una voz que me dice que lo haga, que trate de averiguar qué fue lo que le dijo Karin a Hinata.

Y ahora veremos que fue.

No sé cuánto tiempo me tomó, pero creo que algunos minutos después que Sasuke me dejara en el patio trasero (creo que fue hace 30 minutos más menos) encuentro fuerzas en mis piernas para caminar hacia la fiesta y no pasa mucho hasta que me encuentro con Ino.

Esta reunida junto a otras personas, y por su estatura y su forma de pararse, no me cabe duda que son modelos que trabajan con ella. Pero apenas me ve, se aparta de ellos y camina hacia mí. Debe ver la mirada agotada y confundida que debo tener porque cuando esta frente a mí, no pasa mucho antes que hable.

- ¿Qué sucede, Hinata? - Sus cejas se fruncen, tratando de entender cuál puede ser mi problema y quizás debería contarle, para que me dé algún consejo, alguna salida de todo esto.

Donde no tenga que lastimar tanto a Sakura como a Sasuke.

Pero miró sobre su hombro y mis ojos se traban en una pareja sentada en la barra con algunos tragos frente a ellos. Ino, quizás cuando ve que ya no me concentraba en ella y tanto mis ojos como pensamientos estaban en otro lado, se gira para mirar lo que yo veo. Y creo que está tan sorprendida como yo cuando ve a Sasuke y Karin tan cerca el uno del otro.

Trago en seco cuando veo que el índice de Sasuke sube por su rodilla hacia su muslo descubierto, mientras se ríe de algo que dijo ella, y puedo decir que la peli roja está más que encantada con la atención que recibe de Sasuke, pues tiene una mano sobre su hombro, quizás acariciando el cabello en su nuca, mientras sonríe toda coqueta.

Siento ganas de vomitar cuando él se acerca a susurrarle algo al oído y las manos de ella van a la chaqueta de él, acercándolo aún más a su cuerpo mientras Sasuke sigue susurrando su oído.

Y ahí supe que no podía seguir viendo.

-Iré a tomar un poco de aire. - Creo que le digo a Ino, aunque ni siquiera espero su respuesta antes de irme hacia las escaleras, pensando en ir al balcón que da al patio, y que espero que no esté ocupado por nadie.

Pero cuando llego, me doy cuenta que aquella plegaria no fue respondida.

-Hinata-san. - Ni siquiera me dio el tiempo de salir antes que me viera, pero algo me hizo suponer que bien Sabaku no Gaara debe tener ojos en la espalda, porque ni siquiera se giró a mirarme como para saber si realmente era yo.

Me disculpo, diciéndole que lo dejaré solo, sin embargo, él solo me dice que no hay problema. -Si quiere puede estar un tiempo conmigo, no la molestare. - Me muerdo el labio, debatiéndome si hacer caso o no a sus palabras, pero luego pienso que puede ser maleducado de mi parte negarme, así que cerrando la puerta tras de mí, camino hasta donde él se encuentra.

Miro a mi alrededor y aunque la casa de Ino puede tener un balcón al frente, es pequeño comparado con este, ya que aquí es donde guardan sus plantas más preciadas y donde la madre de Ino se sienta para relajarse o para leer un libro. No me sorprendería que tomará el desayuno aquí por las mañanas con la paz que se siente en este lugar, aunque lo que sí me sorprende es el hecho de encontrarme al pelirrojo sentado de piernas cruzadas en el suelo cuando hay suficientes sillas alrededor. No lo pienso mucho y me siento junto a él, obviamente con algo de distancia, pero con las piernas dobladas hacia un lado.

Me moriría de la vergüenza si es que la falda del vestido se subiera más de lo que debería. Pero él no está pendiente de mí, sino que desde que entré ha tenido su mirada puesta en la luna.

-Mi madre murió cuando era bebé .- Miro a su cara, sorprendiéndome que haya hablado.- Más bien, murió cuando yo nací.- Quiero darle palabras de consuelo, pero parece que él no espera eso por lo que continúa hablando.- Mis hermanos la amaban por lo que cuando fui yo quien provocó su muerte, ellos me despreciaron.- Prefiero mantener la boca cerrada para que él pueda continuar con su relato.- Ni siquiera llevaba 1 hora de nacido y ya recibía el odio de mi familia, claro que en ese tiempo no sabía que yo no era el único culpable.- Sus manos se vuelven puño, quizás conteniendo su ira.- Mi padre es alguien casi maquiavélico con su familia, y no le importa nadie más que la empresa y el bienestar de ella, incluso obligando a su esposa a embarazarse cuando su cuerpo no puede soportarlo.-

Pongo mi mano en el piso, paciente y tranquila dejándolo hablar

-Mi hermano y hermana no eran los suficientemente dignos, ya que mostraban su personalidad en cada momento, por lo que sus esperanzas estuvieron en mí. – Bajando su mirada, pasa su mano por su melena roja. - Jamás me mostró el amor de un padre, lo único que recibía de él eran instrucciones y golpes si es que no cumplía con lo esperado, por lo que aprendí a quedarme callado y seguir todo lo que me dijera, pero cuando crecí y estudié sobre el amor de un padre a un hijo, me dio curiosidad el hecho que mi padre no fuera así, por lo que se lo cuestione. Gran error. - Sonríe lastimosamente antes de continuar. – Tenía 9 años cuando me encerró en una habitación y solamente me puso un recipiente donde orinar y me daban tres comidas al día. -Subo mis manos para tapar el jadeo que quiso salir, pero estoy segura que aun así Gaara lo escucho. - Los primeros 4 meses grite y arañe la puerta diciendo que había reflexionado, pensando que me dejaría salir, pero ya por el sexto mes, simplemente renuncie a toda lucha o no hacía nada más que quedarme en silencio. Tuvieron que pasar otros 6 meses para que me dejara salir.

Se queda un momento en silencio, y mi corazón duele por el niño que, siendo inocente, simplemente cuestionó algo y fue severamente castigado.

-Después de aquello, me volví un monstruo. Arremetía contra empleados o compañeros de curso por igual, pero cuando llegaba la noche me daba miedo el hecho de quedarme a oscuras, por lo que ya nunca más pude dormir en paz. - Ahora puedo comprender porque tiene esas ojeras en sus ojos. - Pero cuando me sentía lo bastante solo y estaba lo suficientemente oscuro, siempre miraba hacia la luna, ya que ella se veía tan sola como yo y de algún modo me calmaba. - Descruza sus piernas y dobla su rodilla antes de poner su antebrazo sobre ella. - Y quizás Uchiha Sasuke este buscando a una luna que le dé tranquilidad. - Solo en ese momento, él se gira a mirarme con sus penetrantes e inexpresivos ojos turquesas.

Pero abre los ojos sorprendidos cuando ve que mis ojos han soltado algunas lágrimas, aun cuando me mantuve en silencio, las gotas recorrieron mis ojos.

Avergonzada, paso mis manos por mis mejillas, esperando que con aquello las lágrimas paren, pero de algún modo siguen cayendo y pongo mis manos sobre mi cara, llorando por el pequeño niño que no tuvo ninguna culpa y sin embargo fue tratado tan injustamente. Pero aparto mis manos cuando son unas manos las que toman las mías y las apartan de mis ojos.

Y ante mí, veo a un joven que me mira lastimosamente, casi como si le aliviara y al mismo tiempo le doliera que alguien hubiera llorado por él y por su niñez.

-L-Lo siento, G-Gaara-kun. - Agacho mi mirada, no siendo capaz de mirarle a los ojos. - Lo siento tanto. - No sé ni siquiera de porque me disculpo. Quizás por el hecho de llorar o porque nadie estuvo ahí para el cuándo más lo necesito o quizás es por ambas cosas.

Pero levanto mi mirada sorprendida cuando escucho su pequeña risa. No era una risa burlesca, sino una risa aliviada, como si hace tiempo se hubieran ido sus cadenas de aquel pasado tormentoso.

-No necesita disculparse, Hinata-san. Porque por mucho que haya sufrido en ese tiempo, algo bueno salió de todo eso.- Sin dudar, agarro el pañuelo de tela que me estaba ofreciendo y lo miro confundida, no sabiendo que lado bueno había en toda esa historia.- Naruto me saco de aquel momento.- Abro mis ojos sorprendida cuando se menciona al rubio.- Pelee muchas veces con él, y, sin embargo, el jamás se rindió conmigo y fue perseverante y hasta el día de hoy ha estado conmigo.- Sonríe alegre, quizás recordando aquellos tiempos.- Y aunque haya perdido a mi padre, pude recuperar a mis hermanos y saber que desde que nací sí fui amado, aun cuando mi madre murió tiempo después, yo ya era amado por ella.

Paso el pañuelo por debajo de mis ojos y solamente me concentro en ser alguien en el que el pelirrojo pueda apoyarse y con la que pueda decir sus temores.

-Pero el primero que me saco de aquello, fue Naruto y básicamente fue la luna que me cuido por las noches. Y creo que eso es lo que Sasuke está buscando ahora y no sé porque, pero parece que el necesita de ti. - Abro los ojos sorprendida cuando comienzo a entender por qué Gaara me había comentado todo aquello.

- ¿C-Como lo sabe...? - ¿Quizás nos escuchó hablar?

-Sasuke debería aprender a hablar más bajo. - Suelta una pequeña risita. Y me asusto por un momento ¿Cuánto habrá escuchado? - Y creo que en todo lo que dijo Sasuke, tiene algo de razón. - Aparta un mechón de mi cara y lo vuelve a meter tras mi oreja. - No puede tomar decisiones pensando en el bien de dos personas, Hinata-san, ya que será imposible tomar una decisión sin herir a la otra persona. No puede pasarse la vida sin herir a alguien. - Miró fijo a sus ojos turquesas. – Simplemente tiene que elegir a quien le dará prioridad.

- ¿Segura que no quieres decirme nada? - Le digo cuando me acerco más a su cara mientras rozó mi dedo por su pierna.

-No, sabes que jamás te escondería nada, Sasuke-kun. - ¿En serio dijo aquello? ¿Acaso cree que no la conozco lo suficiente?

-Hmp, cierto. - Acerco mi boca a su oído, mientras le susurro bajo para que solo ella pueda oírme. - ¿Quieres besarme? - Por el rabillo del ojo, veo a Hinata que tiene la mirada algo dolida. ¿Le duele que este tan cerca de una mujer? ¿Le duele que este tocando y susurrándole a otra mujer? Bueno, si ella prefiere escuchar las palabras de Sakura en vez de las mías, es normal que me vaya a encontrar en estas situaciones.

Lo único que no sabe, es que detesto totalmente el perfume de rosas que lleva Karin; se echa tanto perfume que llega a ser desagradable. Mas bien, todo lo relacionado con Karin es desagradable. Pero aquello Hinata no lo sabe, y si con estos movimientos ella se da cuenta que no debería hacer caso a las palabras de Sakura y sí a las mías, entonces debería seguir con el juego para que se dé cuenta que está equivocada.

Sonrió malicioso cuando Karin asiente más que emocionada con la idea de besarse conmigo, y aprieta aún más sus manos en mi chaqueta, quizás para hacerme ver lo desesperada que esta con la idea.

- ¿Incluso cuando hace una hora atrás la tenía entre las piernas de Hinata? - No se me pasa desapercibido el jadeo sorprendido de ella y no pasa mucho antes que se aparte de mí, con una mirada llena de asco en sus ojos. Pero a mí me importa una mierda y para recalcar mi punto, paso mi lengua por mis dientes y labios, esperando que sepa que no es una broma y que el sabor de Hinata todavía se mantiene en mi boca, leve, pero se mantiene. - ¿Quieres saber a qué sabe un coño, Karin? Porque puedo decirte que el sabor es fantástico. - Sobre todo si ese sabor venia de Hinata.

Agarro la nuca de Karin cuando trata de escapar, de irse a otro lado y no paso por alto sus ojos llorosos, como si de verdad le dolieran las palabras que le dije. Pero sé que, si tuviera algo de corazón o sentimientos, simplemente no le habría dicho nada a Hinata.

Porque sabría que, en cierta parte, Hinata me importa.

-No me busques Karin. - Le digo, mirándola directamente a sus ojos. - No me busques porque me vas a encontrar. - No es una amenaza sin sentido ni algo de lo que yo no cumpliré, porque si lo hare y creo que Karin sabe que puedo llegar a ser muy perverso cuando me están tocando las pelotas, y ella lo está haciendo. Claro, no en el buen sentido. - Ahora dime, que fue lo que le dijiste a Hinata. - No puedo evitar mostrar mis dientes cuando digo la oración, esperando que me entienda alto y claro y no se ande con rodeos.

-Solo le dije la verdad. - Dice casi gritando y muchos de los que están a nuestro alrededor nos miran curiosos, pero a mí me importa más lo que puede decir Karin. - Le dije que ella jamás sería suficiente para ti y en cualquier momento te puedes aburrir. - Frunce el entrecejo mientras su mirada antes dolida, pasa a enojada. - Porque así eres tú, y así como te aburriste de mí, te aburrirás de ella. - No puedo evitarlo, pero suelto una pequeña carcajada cuando suelta la última frase y mi mano se aprieta aún más en su nuca cuando quiere apartarse, pero no la dejare. Oh, claro que no.

-Karin, jamás fuiste interesante. - Apenas termino de reírme, suelto esas palabras. - ¿Acaso no eras tú la que sabía que si me embriagaba aceptaba a cualquiera que me abriera las piernas? Después de todo, el hielo se derrite más rápido con licor, ¿no? - Acerco mi rostro al de ella, al punto en que nuestras narices se estén rozando entre sí. - Tu jamás serás suficiente, Karin. - Al menos con Hinata no tengo que tener alcohol en mi sistema para que me atraiga.

Y no me aburra.

Cuando veo que su barbilla tiembla y que en cualquier momento puede comenzar a llorar, la aparto de mi cuando ya he dejado más que clara la advertencia.

Ahora, busquemos a otra mujer, pero de pelo rosado y veamos si también tengo que dejarle clara las cosas a ella.

No pasa mucho hasta que la veo en la pista de baile, bailando con algunos amigos, con la cabeza gacha y mirando hacia todos lados, casi como si no quisiera que la encontraran. Como si no quisiera que yo la encontrara. Lástima que tenga buena vista, Sakura.

No sé si se ganó en medio de toda esa gente para que no la vieran o porque pensaba que yo no la sacaría cuando está rodeada, pero me importa poco tomarla fuerte de la muñeca y sacarnos de la pista de baile, escuchando los gritos de sus amigos y a ella tratando de apartarse de mi toque. Pero aquello no funcionara.

Abriendo puertas e ignorando completamente a personas que me saludan por el camino, nos llevó hacia el estacionamiento. Y una vez veo que estamos solos, suelto su muñeca y le hago frente.

-Dime una cosa Sakura, ¿Eres sorda? - No se me pasa desapercibida su mirada de miedo antes que me conteste. -

- ¿C-Como? -

- ¿Eres sorda? - Le repito antes de acercarme un paso, obligándola a retroceder. - Porque estoy seguro de que te dije que no te metieras en mis asuntos. - Se muerde los labios, quizás viendo que la situación no está a su favor. Pero no sé si es muy idiota o piensa que tiene las de ganar, porque vuelve a hablar.

-Sí puedo meterme en tus asuntos, Sasuke-kun. - ¿Se golpeo la cabeza antes de salir o qué?

- ¿Perdón? ¿Qué te da el derecho de meterte en mis asuntos, Sakura? -

-Porque soy tu amiga y porque yo merezco estar a tu lado. - Sin contenerme, avanzo hacia ella y no sé si vio que estoy a un paso de matarla, pero retrocede asustada hasta que su espalda se topa con un auto y yo sin perder tiempo, pongo mi mano al lado de su cabeza, impidiendo que escape.

-Sakura, estoy a un pensamiento de matarte. - Le enseño los dientes y no se me pasa desapercibida su mirada de pánico cuando ve que apenas y me aguanto de hacerle algo que después me arrepentiré. - ¿Quién te dijo que tu merecías estar a mi lado? ¿Acaso lo soñaste? O ¿Te di yo alguna pista que quisiera estar contigo? Porque estoy seguro que no, Sakura. Ni en esta vida ni en la próxima yo estaría contigo, aun si estuviera completamente solo, jamás recurriría a buscar calor y amor en ti, porque solamente serias una amiga. Nada de novia o esposa. Eres mi puta amiga. Solo eso. - Veo que sus ojos tiemblan con las lágrimas que quiere derramar, pero yo aún continuo. - Es más, en estos momentos, la piedra al lado del camino es más importante que tú. Porque me estas hinchando las pelotas, Sakura, y en vez de ser una buena amiga y ayudarme, estás haciendo que toda la situación vaya a peor. -

-P-Pero yo te a-a-amo. - Sin contenerse, sus ojos comienzan a soltar lágrimas y su voz tiembla con dolor, pero todo aquello me importa una mierda.

- ¿Y eso te da derecho de meterte en mis asuntos? - Tomo un respiro, tratando de tranquilizarme y le pregunto. - ¿Qué diablos ves en mi Sakura? - Me aparto de ella mientras me apunto a mí mismo. - Por favor dime que es lo que amas de mí, porque al menos así podre comprenderte, al menos tratar de entenderte.

-Amo tu...-Cuando ve que me alejo un poco, el miedo en su mirada desaparece un poco y ella se calma, pero ni siquiera eso hace que ella me dé una respuesta.

Porque ni siquiera ella sabe que ama de mí.

- ¿Acaso es mi rostro? ¿Mi físico? ¿Mi apellido? ¿Mi familia? - Tomo un respiro. - ¿Mi personalidad? - Sin embargo, ella se queda callada, mirando el suelo y cerrando y abriendo sus puños, hasta que salta sorprendida cuando yo le grito. - ¡¿Qué mierda es, Sakura?!-

- ¡No lo sé! - Grita en respuesta Sakura. Pasan unos segundos antes que vuelva a hablar - No lo sé. - Repite más calmada, pero su voz continúa siendo fuerte. - Solo sé que te amo Sasuke, te he amado desde pequeña. - ¿Acaso se está escuchando?

-Sakura, lo que tus amas es una ilusión. - Le digo esperando que se dé cuenta. - Un maldito amor de niñez del que no has querido dejar atrás. - Sin embargo, ella sigue negando con la cabeza y afirmando que no es así. Miro el cielo esperando que me de paciencia para no hacer alguna locura, porque Sakura ya me está sacando de mis casillas. - Dime Sakura. - Le digo atrayendo su mirada. - ¿Qué esperas que haga si te convirtieras en mi novia? - En mi cabeza ya estoy ideando algo para hacer que de una vez por todas Sakura se dé cuenta que estar conmigo no es algo que ella de verdad querría.

-Q-Quiero ir a citas contigo. - Dice mientras se pasa las manos por debajo de sus ojos y limpiándose el rastro de lágrimas. - Quiero hablar de todo y nada contigo, quiero conocer a tu familia, quiero saber que te gusta o te disgusta, quiero abrazarte, tomarte de la mano y besarte. - Sus mejillas se sonrojan en la última frase, pero aun así la dice sin llegar a tartamudear.

- ¿Eso deseas? - Le pregunto y ella asiente con la cabeza. Yo suelto un suspiro y vuelvo a hablar. - Muy bien. ¿Tienes un kimono? - Confundida, ella asiente con la cabeza. - El viernes te paso a recoger a las ocho a tu casa. - Sin nada más que decir, me alejo de ella, encaminándome a donde se encuentra mi auto, pero a mis espaldas escucho una risita y ni tengo que girarme para saber que Sakura esta casi saltando y tapándose con su mano los gritos que quieren salir. Porque esta emocionada de salir en una cita con Uchiha Sasuke.

Pero contrario a sus expectativas, no será una cita romántica ni nada de eso, porque la llevare a que vea quien es Uchiha Sasuke.

Y lo que significa salir con un Uchiha.

Saco mi celular de mi bolsillo y abro los mensajes, donde está el mensaje que me envió mi madre hace unas horas atrás si estaría presente para la cena que habrá en la casa Uchiha. Y aunque había pensado en ni siquiera asomar la nariz, ahora cambio de idea y escribo que yo también estaré, pero que iré con acompañante.

Veamos si Haruno Sakura sigue amándome una vez que vea lo que significa llevar el apellido Uchiha. Porque por mucho que odie en estos momentos a Sakura, también es mi amiga y quiero que abra los ojos para que vea qué futuro le espera conmigo.

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Muy bien, estuvo corto, pero también me dije que quizás mientras más corto era, más capítulos podía actualizar en un mes, así que me estoy planteando el hecho de hacerlos más cortos.

Me disculpo por la demora, la verdad es que tenía la mitad del capítulo listo, pero luego no me convenció el rumbo que estaba tomando así que lo borré todo y comencé de nuevo. De algún modo, me demore con aquello. No sé si lo saben, pero comencé otra historia llamada "Under the Moon", y no está nada mal, por lo que los invito a echar un vistazo.

Bueno, les quiero pedir ayuda. Ha habido mucha gente que me ha dicho que quiere la segunda parte y creo entenderlos, ya que yo también quiero llegar allá, pero hay ciertas cosas que debo incluirlas en esta parte, por lo que he pensado lo siguiente:

-En unos capítulos más, termino esta historia y dejo todas las dudas de cómo se separaron Hinata y Sasuke para la próxima parte o escribo todo aquí y así ustedes no llegan casi a ciegas a la segunda parte.

No les mentiré, la idea de dejar todo con dudas es muy interesante y así la segunda parte puede ser algo más larga, pero también me pongo como lector y quisiera saber que paso para que Sasuke y Hinata se separaran. (De hecho, tengo el epilogo listo de la primera parte y les puedo asegurar que ira si o si, pero si hago la de "dejar las dudas para la segunda parte", quizás no quede tan bien explicado)

Por lo que estoy en un dilema.

Espero y ustedes me ayuden y veremos cuál será el camino que tomara esta historia.

De nuevo, muchas gracias por los comentarios, de verdad que se agradecen de todo corazón, porque siempre estoy viendo si alguien dejo algo escrito y aquello me motiva aún más a escribir (aun cuando estoy cargada con la universidad, sus comentarios hacen que ocupe todo mi tiempo libre en la historia). Muchas gracias por sus comentarios. Especialmente agradecer a Kisa Tsukasa, ya que se ha tomado su tiempo para escribirme grandes comentarios y que en cada capítulo ella me escriba uno nuevo. De verdad que te amo.

Sin nada más que agregar, solo espero que se cuiden y que no salgan más de lo estrictamente necesario. Ya saben que con 5 comentarios actualizo.

Bai.

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