Capítulo 25: The Last – Prolongación- En clave de Misión.

Naruto no supo si el beso que le dio a Hinata lo soñó o lo vivió. Despertó sobresaltado al ver la cama de Hinata vacía y ningún rastro de ella. Miró al tocador y vio un reloj que indicaba la hora, 2:48 am. Se aterró al saber que había fallado justamente en lo que Tsunade le había ordenado, no sabía hace cuanto tiempo ella se había marchado sin dejar pista alguna, sin embargo, se escuchó una voz conocida en la habitación:

- "Mira, mira a quien tengo aquí, dattebayo" un clon de Naruto que estaba de guardia había capturado a una prófuga Hinata minutos antes de que ella pudiera escapar de su habitación. Naruto vio como su clon tenía agarrada a Hinata de la cintura y pudo verla de una manera tan nítida e íntima por primera vez en su vida, vestida con yukata y pantuflas.

Sintió celos de su propio clon y liberó su Jutsu, él la recorría de arriba abajo; su sentido varonil no era estúpido e inocente como su mente, ambos se sonrojaron al instante, Naruto poniéndose de pie, caminó amenazadoramente hacia Hinata; ella no tenía miedo de su actitud, por el contrario se estaba sobresaltando y casi sin mediar palabra y de un solo impulso, él la cargó y ella volvió a sus brazos, mirando de frente, caminó un corto trayecto y la depositó con suavidad en la cama nuevamente, él siseó seductoramente a su oído:

- "Aunque no lleve mi equipo ninja, déjame decirte que justamente esta es una misión en la que estoy contigo, si te pones difícil, tendré que hacer lo posible por cumplir con éxito mi tarea, así tenga que dormir contigo hoy, incluso bajo tus mismas sábanas" dijo Naruto con una sensualidad inusitada.

Hinata en su mente contempló a Naruto durmiendo con ella; se imaginó a ambos perdiendo el control en medio de un acalorado beso en una fría noche de diciembre, despojándose de toda su ropa para sofocar el calor que provenía del interior de ambos cuerpos desnudos, en su imagen lo vio a él haciéndola suya con fuerza y dominación y se vio a ella pidiéndole más y resistiendo con fiereza sus fuertes embates. También ella pudo recordar un sueño que tuvo hace pocos minutos… soñó a Naruto arrodillado en su cama, una de sus manos entrelazadas a la altura del vientre y con la otra acariciando su cabello. Sintió como sus labios tocaron los de ella con lujuria y posesión, los degustaba, su lengua invasiva jugaba pícaramente con la de ella y cuando se dio cuenta que ella quiso alejarse para tomar aire, sintió que él la mordió, que él le clavó uno de sus colmillos en su labio inferior, marcándola como suya en un plano instintivo e inconsciente… sintió un pequeño goteo que humedecía su ropa interior y se reprendió mentalmente por recordar aquello sabiendo lo delicada que estaba la situación.

Con temor, llevo sus manos a su boca y sintió algo extraño en su labio, lo palpó con dedo y noto allí un pequeño corte. ¿En realidad lo soñó o realmente sucedió? Su respiración se tornó violenta sobre su pecho y Naruto procedió a acostarla y cobijarla nuevamente; nerviosa y acongojada, ella forcejeaba con él en un intento por huir del lugar. Venciendo el sonrojo de sus mejillas le juró:

- "No tienes que huir Hinata, de veras que no tienes que hacerlo… Te juro que rescataré a Hanabi, lo haré por ella y por ti, no te preocupes, tú mejor que nadie, sabes que jamás falto a mi palabra" Naruto miró fijamente a Hinata.

- "Como puedes decirme que me quede a dormir tan tranquila sin saber qué está sucediendo con Hanabi y mucho menos sin saber dónde está mi padre, por favor Naruto-Kun… te juro que te daré lo que quieras, pero déjame salir a buscarlos" replicó Hinata sollozando con sus manos a la altura de su pecho.

- "¿No confías en mi ahora? Antes lo hacías… Pero no te preocupes Hinata, tengo la suficiente fuerza para detenerte por las buenas o por las malas… digamos que la última palabra la tienes tu" Naruto la retaba y hablaba juguetonamente con ella.

- "Si confío en ti Naruto-Kun, pero tienes que entenderme, ellos están en peligro" Hinata respondía al desafío de Naruto, intentando pararse de la cama.

- "¡Argghh… la que no entiende nada aquí eres tú! no vas a salir a ninguna parte, además porque es orden directa de Tsunade no-baachan. Es más, si quieres salir, primero tienes que pasar por encima mío" y sin pensarlo, Naruto se arrojó sobre Hinata en la cama y con sus fuertes manos, tomó las de ella y se las puso por encima de la cabeza y con sus piernas atrapó las de ella. Él replicó: "A ver, Hinata Hyuuga, intenta huir si puedes" Naruto reía con suficiencia, él continuó: "si me vences, te juro que te dejaré ir y asumiré el castigo que Tsunade no-baachan y Kakashi-Sensei quieran ponerme por dejarte escapar, pero si no me vences, te juro Hinata que yo mismo rescataré a tu hermana"

Hinata dejó de poner resistencia, sabía que no podía vencer a Naruto en fuerza y en ese momento, ella no tenía la concentración suficiente para intentar una lucha con él; ya que, en primer lugar, sus emociones estaban fuera de sí y, en segundo lugar, estaba muy confundida… no podía saber con precisión, si todo aquello, había sido un sueño o un acto real – pero involuntario de ambos- cuando estaban dormidos, sólo sabía que tenía un corte en el labio inferior y eso ya la tenía a la expectativa.

A parte de todo esto, ella sabía demasiado bien, que Naruto no la estaba retando para menospreciarla o hacer alarde de su fuerza, lo que él estaba haciendo, era para que ella recobrara su confianza en él y recordara que siempre que él le prometía algo lo cumpliría totalmente, incluso a costa de su propia vida. Naruto sintió que la tensión en el cuerpo de Hinata iba disolviéndose, ella le expresó:

- "Está bien, Naruto-Kun, te prometo que no huiré, pero quiero que me prometas algo: si hay una misión de rescate y no soy llamada para ir con ustedes, intercederás por mi ante el Hokage-Sama para que me deje ir. ¿De acuerdo?" Hinata sonreía dulcemente a Naruto, sabiendo que podía manipularlo de esa manera.

- "¡De acuerdo, te lo prometo! Tenemos un trato: tú no huyes y yo convenzo a Kakashi-Sensei de dejarte ir en la misión. IOOOOZZZZ, Trato hecho" Naruto celebraba el haber llegado a un acuerdo, abrazado fuertemente al cuerpo de su perspicaz fugitiva.

- "Naruto-Kun… etto… etto… podrías bajarte de encima… si llega a venir mi Ojii-San y te ve así…" Hinata no podía soportar más el cuerpo de Naruto tentando peligrosamente al suyo, el rubio tomando consciencia de su posición, se sonrojó furiosamente y se bajó de inmediato con el corazón a punto de salir del pecho, lamentando no haber podido quedarse con ella como lo había prometido como amenaza inicial.

- "Po... po… por favor Hinata, recuéstate, te daré el té que dejó preparado Tsunade no-baachan" Naruto temblando de pies a cabeza, le alcanzó la medicina y la terminó de cobijar. Se sentó en la cama para tratar de dominar un poco sus turbulentas sensaciones, tomó su mano y apretándola con firmeza dejó que ella finalmente volviera a dormir.

Naruto bajó a la planta baja para tomar aire fresco y reflexionar un poco acerca de lo que había sucedido con Hinata anteriormente y darle un reporte a Tsunade sobre la evolución de la peliazul. Kakashi seguía coordinando toda la información recolectada sobre el secuestro de Hanabi, cuando un grito de Ino puso a todos bajo alerta: "Saiiiiiiiii ¿Qué tienes, que ha ocurrido?" Ino corría rápidamente hacia el portón del complejo Hyuuga desesperada por auxiliar al hombre que amaba viéndolo claramente agotado y con lesiones menores. Sakura, Tsunade y Naruto también acudieron para ayudarlo, no estaba gravemente herido, pero tenía información valiosa para el Rokudaime.

- "No llores belleza, estoy bien, solo son pequeños moretones y golpes." Sai trataba de consolar y tranquilizar a Ino.

- "Sai, ¿qué pasó? ¿por qué estás en ese estado?" Kakashi acudió inmediatamente donde se encontraba el joven Shinobi.

"Hokage-Sama, yo vi cuando se llevaron a Hanabi-Chan" Sai hacía lo posible por no caer desmayado de cansancio, en ese momento Tsunade, Ino y Sakura aplicaron al tiempo sobre él su jutsu médico. Kakashi y Hideki Hyuuga le pidieron que explicara todo lo que había visto, al tiempo que el Shinobi de falsa sonrisa se iba recuperando del suceso.

- "Desde hace días he notado a la luna más grande de lo habitual, yo estaba dibujando en las afueras de la aldea, vi una especie de bestia voladora gigante y un guerrero con vendas en el rostro que maniobraba al animal, este mismo guerrero en uno de sus brazos llevaba una adolescente inconsciente e inmediatamente noté que era Hanabi-Chan" Sai explicaba a la concurrencia.

"¿Y tú como la conoces Sai?" Curioseaba Naruto.

- "Verás, soy el maestro de artes y letras de Hanabi-Chan, por esa razón la conozco" Aclaraba Sai.

- "Aquí lo importante es saber qué ocurrió con Hanabi y saber la razón por la que estás en ese estado" Kakashi espetaba urgente, "Continua Sai".

- "Yo intenté rescatar a Hanabi por mis propios medios y mientras iba tras ellos traté de enviar la información en uno de mis pájaros de tinta, pero fue destruido. Activé mi jutsu para iniciar la persecución, pero fui atacado en el bosque con una serie de explosiones y perdí el rastro y con las pocas fuerzas que me quedaban intente llegar hasta usted, Hokage-Sama"

- "Ummm, ya veo. Por la información entregada por los guardias del clan y confrontándola con la de Sai, ambas coinciden en que esos sujetos, utilizan alguna invocación animal que les permite escapar por los cielos; entonces, de esta manera fue que ellos aterrizaron en el jardín y vulneraron la seguridad de la mansión y así fue como encontraron a Hanabi. ¿hay alguna señal en particular que recuerdes del momento en que viste a Hanabi, Sai?" Interrogaba Kakashi.

- "Como ya les dije antes, sus rostros estaban vendados, eran imperceptibles, sus ropas eran negras y no recuerdo nada más… aunque… recuerdo que no tenían un hitai ate, pero, si tenían una marca en la capucha que ocultaba su cabeza… era como un símbolo… una luna y un punto en la mitad…" finalizó Sai con su explicación.

Kakashi inmediatamente recordó el reporte de Sasuke cuando perseguía a Suien y el extraño lugar en Getsugakure con el mismo símbolo dibujado en banderas y pendones derruidos, todo estaba comenzando a hilarse y tenía la corazonada que el suceso ocurrido con el clan Hyuuga y los extraños fenómenos naturales, estaban por tener alguna conexión. Finalmente, Kakashi ordenó:

- "Mañana mismo, los enviaré a una misión en las ruinas de Getsugakure. Esperemos que Lee y Tenten lleguen lo más pronto posible con el reporte de lo sucedido con el meteorito que cayó en los sembrados que están un poco más lejos de la aldea. Cuando tengamos esa información, Sakura, Naruto, Sai y Shikamaru, saldrán inmediatamente a ese lugar"

- "Kakashi-Sensei, digo Hokage-Sama, por favor considere la idea de incluir a Hinata Hyuuga en esta misión, su Byakugan podría ser de mucha utilidad" dijo Naruto frente a los presentes dejando a todos con la boca abierta, no esperaban que sugiriera de él una teoría tan brillante en esta situación.

Kakashi le respondía a Naruto con su sonrisa oculta bajo la máscara: "Todo dependerá del estado de salud de la propia Hinata, por cierto, Naruto, deberías darle un vistazo a ver como se encuentra".

- "Como usted ordene Kakashi-Hokage-Sensei, está bien" Naruto salió del salón con una amplia sonrisa y se disponía a subir al segundo piso cuando vio a Hinata apostada a un lado de las escaleras, él se acercó amorosamente a ella, preguntándole con suavidad: "¿Estuviste escuchando el relato de Sai verdad?" ella asintió con su cabeza y su mirada baja, Naruto nuevamente la cargó: "Ven te llevo a tu habitación"

- "Etto… etto… Me… me preocupé al no verte en la habitación y quise saber dónde estabas" Hinata tartamudeaba hirviendo de suma vergüenza, al parecer a Naruto le estaba gustando la idea de llevarla cargada entre sus brazos cada vez podía y ella, a su vez, podía notarlo.

Naruto acercando su rostro al de ella, volvía a poner ese rostro sensual y pícaro que ella recién le estaba empezando a conocer: "¿entonces me estabas extrañando? ¿quieres que duerma contigo?" y sin darle la oportunidad de responder a su pregunta, él la apretó fuertemente entre sus brazos y la llevó hasta su habitación, cerraron la puerta y Hinata pidiéndole que la descargara en el suelo le dijo:

- "Acompáñame, Naruto-Kun" Hinata llevó a Naruto a su cuarto de baño, le pidió que entrara y que en la parte alta del armario que contenía toda la ropa de cama, buscara un futón que había allí guardado. Ella ya no tenía intención de escapar, había escuchado a Naruto interceder por ella ante Kakashi, y cumpliría su promesa de quedarse a recuperar fuerzas en su habitación. Ella moría por tomarle la palabra a Naruto así fuera una broma, anhelaba dormir con él y ser suya en la tenue oscuridad de su habitación, pero sabiendo la imposibilidad de su deseo, quiso buscar algo para que él no durmiera incómodo y mientras él aprovechaba su estatura para bajar el futón, ella, buscaba en el gran guardarropa un yukata que pudiera prestarle para que él descansara allí con ella.

Había puesto el futón al lado de su cama, Naruto se vistió con el yukata que ella le encontró y ambos se acostaron en sus respectivos lugares; el sueño se había dispersado totalmente y en su lugar llego una apenada tensión. Hinata quiso romper el hielo y ablandar un poco la situación: "te agradezco todo lo que estás haciendo por mí y por Hanabi, Naruto-Kun…" carraspeando, esperó un rato una posible respuesta del rubio y al no encontrar palabra alguna, se levantó a medias de su cama apoyándose en su antebrazo y vio al rubio dormido levemente descobijado; sonriendo, ella bajó lentamente de su cama y puso las mantas sobre él; no supo cómo, pero encontró algo de valentía en su actuación y susurrándole con amor y suavidad dijo con deleitante dulzura a su oído:

-"Hubiese preferido que la situación y el momento fuera diferente Naruto-Kun…" ella acarició sus mejillas con suavidad y gentileza; continuó: "…hay tanto que quiero decirte, pero no me atrevo…" y dándole un cálido beso en la mejilla, Naruto abrió sus ojos y volteó su rostro hasta quedar de frente a ella y de forma pícara le dijo: "lo que sea que tú quieras expresar… llegará el momento en que tendrás que decírmelo de frente, Hinata" él le ofreció su hermosa sonrisa y ella al instante, cuando se sintió descubierta por él, fue sonrojándose completamente y finalmente se desmayó.