Visita a Ciudad Aquae

Uno de los dos soldados en el puesto de guardia fronterizo que había interrogado a Ralf se había alegado del grupo mientras que el otro, había reunido a todos y les hablaba a voz alta.

- ¡Escuchen todos! No olviden lo que el Jefe Jones nos ordenó, no debemos reportar su salida del distrito ni la de sus acompañantes – exclamaba el hombre a viva voz

- Pero señor, si la gobernadora lo sabe podemos ir al sótano – replicó uno de quienes lo oían

- Ya oyeron, la gobernadora no está aquí presente y no tiene por qué saberlo si no se lo comunicamos, los drones de vigilancia solo se usan para monitoreo – insistió el soldado, ante lo cual todos asintieron afirmativamente

Por su parte, quien se apartó estaba comunicándose con la gobernación, al dar con la frecuencia que buscaba esperó hasta que una voz masculina le respondió.

- Tercer Puesto Jedite, ¿Puede oírme? – hablo en voz baja él

- Escucho claramente, dígame qué sucede soldado – contestó la voz del rubio través del comunicador

- Es para decirle que el Jefe Jones abandonó Ciudad Ígnea hace rato y nos exigió que no lo reportáramos – dijo el hombre vigilando disimuladamente con su mirada, que los demás no le estuvieran prestando atención

- Entiendo... con qué motivo lo hizo y quiénes iban con él, si es no estaba solo – preguntó el Tercer Puesto pensativamente

- No quiso decir nada, ni a donde se dirigía tampoco la razón, estaba acompañado por dos mujeres y un joven, una de ellas se trataba de su hija la señorita Risa – respondió el militar

- ¿Hay algo más que tenga? ¿Solo eso? – indagó seriamente Jedite

- Nada más, él no nos quiso decir nada pero no se preocupe, tenga la seguridad de que se sabrá – fue la respuesta del hombre

- Entiendo... muchas gracias por informarme, ahora debo irme – agradeció el rubio antes de cortar la comunicación

Justo en ese momento llegaba junto al guardia el otro hombre que estaba hablando al grupo hace un rato.

- Oye, ¿Qué estabas haciendo? – no perdió tiempo en preguntar él

- Nada, solo respondía una llamada entrante del cuartel para informar que todo estaba en orden – mintió su compañero con tranquilidad

- ¿No habrás dicho algo sobre lo del jefe Jones, no? – interrogó incisivamente el primero

- No te preocupes, no dije nada – contestó quien había hablado a Nukureo Kaseigan, mientras caminaba de regreso a su puesto

En la gobernación de la Ciudad Sur, el Tercer Puesto meditaba sobre la conversación que acababa de tener.

- Mmmmhhh... así que hoy que el gorila no se presenta a trabajar, sale de aquí rumbo a quien sabe dónde, si estaba con su hija y otros más... ¿Iban de paseo? No lo creo, de ser así él no hubiera ordenado que no lo reportara la guardia, eso me da mala espina ha de estar buscando o planeando algo, estaré atento al informe – pensaba para sí mismo el de ojos celestes

En eso, del despacho salió la gobernadora sumamente seria.

- Acompáñame al Banco de Datos necesito hacer un consulta antes de dirigirnos con mis consejeros – dijo secamente Rei caminando sin detenerse

- Entendido Lady Mars, ¿Sabe? Me acaban de informar desde el puesto de guardia en la frontera norte que el señor Jones salió de Ciudad Ígnea con rumbo desconocido y exigió que no lo reportaran – le dijo el rubio ante lo cual, la gobernadora se detuvo y lo miró molesta

- ¿Cómo dices? Ese desgraciado... ¿Iba solo? – fue la lógica pregunta de Rei

- No, su hija lo acompañaba aparte de otras dos personas, no me supieron decir quiénes eran.

- ¿¡Dejaron Hikawa solo!? ¿¡Cómo se atreven!? – Exclamó ella irritada - Pero claro... ¿cómo no me di cuenta antes? Conozco a mi marido... - dijo la Senshi del Fuego entrecerrando los ojos

- ¿Los llamará, señora? – le preguntó Jedite

- Ahí veré si lo hago, después de mi audiencia en el Salón Rojo voy a ir a casa, si no están los voy a esperar y si los encuentro me van a oír – respondió la de ojos violetas - Anata wa watashi kara nigeru tsumori wanai!... Kuso ̄ baka (¡Ustedes no van a escapar de mí!... Maldito idiota)* – siguió vociferando ella en japonés antiguo, refiriéndose a Ralf

- Veamos ahora qué vas a hacer, estúpido – se dijo Jedite para sus adentros riendo, sabiendo que acababa de alertar a la gobernadora

Ambos caminaron hasta el sitio que había mencionado la Gobernadora hace rato, al llegar allí le dijo al rubio Tercer Puesto que la aguardara afuera mientras ella entraba y en el ínterin que lo hacía, Deimos hizo una respetuosa reverencia y le abrió el paso.

- Adelante Lady Mars, pase usted – decía la kunoichi soldado

- Buenas tardes señores, necesito hacer una consulta – les dijo ella seriamente a quienes allí trabajaban

- Sí Lady Mars, ¿Qué se le ofrece? – preguntó uno de ellos

La Senshi les dijo el nombre de la persona cuyos datos deseaba obtener y los hombres no tardaron en buscar la información requerida, la cual demoró unos segundos en aparecer en pantalla junto con la fotografía de ella.

Nombre: Shino Kuribayashi

Edad: Entre 24 y 28 años

Género: Femenino

Ocupación: Militar (Sargento Primero)

Familia: Nanami Kuribayashi (Hermana menor)

Afiliación: Fuerzas de Auto-Defensa de Japón, 3º Escuadrón de Reconocimiento

Nacionalidad: Japonesa

Estatus Actual: Fallecida

La de ojos púrpuras leyó atentamente dichos datos y al ver lo último mencionado, abrió grande los ojos y se llevó un mano a la boca.

- Al menos en eso, Ralf no mintió... pero si la chica que vi en el registro no es la misma con otro nombre y como familiar solo tiene una hermana, tal vez sea... - pensaba Rei en el asunto y haciendo conjeturas

Restaurant Magnolia

El lugar estaba más o menos concurrido ya que la hora del almuerzo había pasado, después de las 4 de la tarde el trabajo aflojaba pero a partir de las 5 y media y hasta el anochecer, volvía a aumentar.

Desde la suspensión de Haruna, Mirajane no solo debía atender la barra sino también las mesas y entregar algunos pedidos a domicilio, por suerte para ella había otras mozas que también hacían estas dos tareas, de lo contrario la bella joven de cabello blanco no hubiera dado a basto. Igualmente no era problema para ella el tener un poco más de trabajo ya que significaba mayor paga, sí lamentaba que al no estar la hermana menor de Ralf ya no tenía con quien conversar. Si bien también hablaba con las otras empleadas, ninguna de ellas era su íntima amiga como sí Haru.

Ella se encontraba limpiando la barra al mismo tiempo que no podía evitar pensar en cómo le estaría yendo a Ralf en su travesía a Ciudad Aquae, tenía decidido ir a Hikawa a verlo y ponerse al tanto de las cosas. Si bien ahora sin Haruna, Mirajane debía quedarse hasta más tarde, era seguro que Setsuna la enviaría a entregar algún encargo y entonces aprovecharía dicho momento para ir.

A la ex luchadora se acercó una de las compañeras de trabajo con quien más solía hablar aparte de la tía de Risa, una joven bonita un poco menos alta que Mira, ojos verdes y cabello color violeta corto hasta un poco más debajo de los hombros.

Ellas eran amigas pero sin tanta intimidad como con Haruna.

- Que día hoy, ¿Sabes? El mes que viene me tomaré vacaciones, ya me tocaba – comentó la recién llegada

- Bien por ti lo mereces, nunca escuché que Setsuna se quejara de ti – dijo sonriendo la hermosa muchacha de ojos azules

- ¿Y a ti cuando te toca? – indagó su compañera apoyando de espaldas los codos sobre la barra

- Aún no me toca pero estoy pensando pedir que me las adelanten, ahora que no está Haru tengo más trabajo – respondió riendo Mirajane

- Oye Mira, ¿Puedo hacerte una pregunta? – pidió quien había llegado hace un ratito, enigmáticamente

- Claro Kinana, pregunta sin problema – aceptó la ex luchadora amablemente terminando su tarea

- Me pareció verte bajando del coche del Jefe de Guardia, ¿Puede ser? – quiso averiguar la muchacha mientras sonreía

- Si, fui a comer a la casa de Haruna y allí estaban él con su hija y su novio – afirmó Mira sonrojándose

- Eso supuse, es el único que usa un auto tan antiguo como ese – opinó Kinana

- Pero lo adaptó con tecnología actual si no, no podría circular – aclaró la de grandes ojos azules

- Solo por si acaso... ¿Sabes que él está casado, verdad? Aparte de quién es su mujer... lo digo porque no puedo evitar oír lo que conversan tú y Haru - señaló la de cabello violeta poniéndose seria – Y lo siento, no quiero parecer chismosa porque no lo soy – añadió a modo de disculpa

- No te preocupes, lo que dices lo se perfectamente... su matrimonio está muy mal y no hay signos de que vaya a mejorar, su esposa está completamente loca y tanto él como la hija están viviendo un calvario – respondió la de pelo blanco con seriedad

- ¿Es en serio? – Contestó Kinana sin poder creerlo – Pero... ay no... mira quien acaba de llegar – iba a argumentar ella pero se interrumpió para señalarle a su compañera, las personas que estaban ingresando al restaurante

Mirajane dirigió su vista hacia la dirección indicada y pudo ver porqué su amiga se acababa de poner fastidiosa.

- Es el hijo de Yuuichirou Kumada con sus amigos, espero que no pase nada malo – dijo la apuesta moza frunciendo el ceño

- Siempre hay problemas cuando él viene, nunca está a gusto con el servicio que le brindamos aquí y siempre es grosero con quien lo atiende, sus amiguitos son también unos zopencos – recordó la de pupilas verdes

- ¿Y si tan disconforme está porqué sigue viniendo? – fue la lógica pregunta de Mirajane, ante lo cual, su compañera se limitó a abrir los brazos sin decir palabra, dando a entender que no sabía

- Sonamos, ahí llegó el pesado... yo no lo pienso atender – les dijo a ambas chicas un mozo compañero, acercándose a ellas que suspiraban con resignación

El grupo recién llegado se acababa de sentar a la mesa al mismo tiempo que conversaba entre sí y se reía sonoramente.

Ellos eran todos muchachos jóvenes más o menos de la edad de Chad que trabajaban en distintas empresas, o sea eran todos hijos de empresarios, se habían conocido por medio de sus padres y salían juntos a fiestas aparte de a varios lados más, como en el presente instante que se disponían a comer algo.

- Oigan, oigan amigos, escuchen esto: ¿Qué parecido hay entre una mujer embarazada, una tarta de queso quemada y una botella de cerveza congelada...? Que si la hubieses sacado un poco antes jamás habría pasado – contaba uno de ellos en voz alta ante lo cual, todos se rieron

- Nuestro querido amigo siempre trayéndonos buenos chistes, a mí no se me hubiera ocurrido uno mejor – opinó riendo aún otro de los muchachos – ¿Tenemos todo listo? – preguntó acto seguido

- Desde luego, ¿recuerdan la computadora que estaba en venta? – indagó Chad a modo de respuesta

- Claro que sí, es el modelo más caro y el mejor existente, acordamos que compraríamos una cada uno del mismo - recordó uno de sus amigos

En eso, el hijo de Yuuichirou sintió que su celular sonaba y al ver la pantalla, se disculpó ante sus amigos y se levantó de la silla para alejarse unos pasos mientras ellos seguían charlando.

- Hola, dime que tienes alguna noticia de lo que te pedí – fue lo primero que dijo el joven apenas atendió

- No se preocupe señor, me detuve frente a Hikawa como me lo pidió y estuve bien atento, al templo llegó un muchacho con el que vi que la señorita se besaba, he tomado fotografías y se las enviaré a su teléfono – respondió una voz masculina

- Excelente, imagino que no te habrás dejado ver – dedujo Chad incisivamente

- No se preocupe, me escondí y no se percataron de mi presencia, después salió de la casa el Jefe de Guardia, conversaron un rato y salieron todos juntos, los seguí hasta la frontera la cual cruzaron – informó el interlocutor

- Entiendo, espero esas fotos – dijo Chad antes de cortar la comunicación

No pasaron ni dos segundos, que a su Whatsapp llegó lo requerido y entonces, él se apresuró a descargarlas y mirarlas, en tanto lo hacía frunció el ceño.

- ¿Así que este es el novio de Risa? Pues ella va a ser mía quiera o no... conozco a ese imbécil, es el cantante de los Three Lights, ya me ocuparé de "disuadirlo "de dejarla y hacerle entender que ella es mía – pensaba mientras sentía celos por ver las fotos - ¿¡Que pasa con el servicio, acaso nadie atiende en este jodido lugar!? ¿Qué hacen ustedes dos ahí paradas como estatuas? ¡Servicio ya!– vociferó molestó regresando a sentarse y hablándole de mala forma a Mirajane y Kinana, al voltear la vista hacia ellas

Justo cuando la moza de cabello blanco iba a acudir a atenderlo para evitarle el mal rato a su compañera, fue llamada desde otra mesa ya que estaban pidiendo la cuenta.

- Cielos, no tengo otro remedio que atender yo a este pelmazo... Gran Kami, dame paciencia – decía Kinana en su pensamiento mientras respiraba hondo

Así que ella armándose de paciencia, caminó en dirección a la mesa donde estaban Chad y sus amigos a fin de tomarles los pedidos.

- Buenas tardes señores, ¿Qué se les ofrece? – preguntó la camarera lo más cordialmente posible

- Hasta que viniste, eres más lenta que caracol reumático... como todos los empleados de este lugar – contestó ceñudo el hijo de Yuuichirou, ante esto, la moza se limitó a respirar hondo

- ¿Van a ordenar algo? – preguntó la de cabello violeta a fin de que pidieran lo que consumirían

- No, si estaba aburrido y vine a mirarte la cara de estúpida... ¡Por supuesto que sí! Quiero el postre más bueno que tenga la casa, pero tráeme algo que me guste de verdad porque de lo contrario te lo voy a tirar por la cabeza – advirtió Kumada hijo levantando un dedo, por su parte los demás se reían

La muchacha se dispuso a tomar todos los pedidos mientras hacía un esfuerzo por no golpear a Chad y se preguntaba si acaso los padres no eran peor que él. Acto seguido se dirigió a la cocina a llevar los pedidos y preguntar dónde se encontraba Setsuna, uno de los cocineros le respondió que no sabía cuando regresaría ya que tenía urgencias que atender.

Un poco más de 15 minutos más tarde, las órdenes de los muchachos estuvieron listas y Kinana se dispuso a llevarlas en el ínterin que esperaba que esta vez no tuvieran ninguna queja. Al llegar a la mesa, Chad la aplaudió sonoramente a modo de ironía.

- ¿Podrías tardar un poco más? Digo, es que me encanta que me tengan esperando 5 horas por lo que voy a comer – dijo el empresario riendo al mismo tiempo que la de ojos verdes servía de prisa

- Lo lamento, hemos hecho todo lo más rápido posible – se defendió la camarera procurando no perder el control

- Pues no parece... una tortuga se mueve más rápido que ustedes – volvió a atacar el de melena castaña e inmediatamente sus amigos se rieron al oírlo

Kinana salió rapidito mientras murmuraba toda clase de insultos, Mirajane que la veía se le acercó y la animó.

- Calma y respira hondo, después podrás hablar con Setsuna y contarle todo, ella seguramente luego hable con el señor Kumada para que le ponga límites – le aseguró la de cabello blanco poniendo una mano sobre su hombro derecho

- En serio Mira, no se cómo no le puse la bandeja de sombrero a ese estúpido cretino – se quejó su compañera apretando los dientes.

Un par de minutos después, Chad la llamó a los gritos mientras los demás clientes lo miraban sorprendidos. A él le habían servido la especialidad dulce de la casa, lo mejor que preparaban, sin embargo no le había gustado y se lo haría saber a la moza.

- Diga señor... - dijo Kinana temiéndose lo que el joven diría

- ¿¡Que parte de "quiero el mejor postre que tengan" no entendiste, tonta!? ¡Esto es una porquería! – vociferó el de cabello castaño en referencia a la comida

- Es la especialidad de la casa – replicó la camarera sintiendo como en cualquier momento, lo mandaba al diablo ya que se le agotaba la paciencia

- ¡Deben esforzarse más! Llévate esta basura y tráeme un Anmitsu - exigió Kumada hijo apartando bruscamente el plato, el plato recién nombrado se trataba de un postre japonés muy popular que generalmente contenía frutas enlatadas como naranjas, piñas y cerezas, cubos de gelatina de agar, anko, una bola de helado y, a veces, shiratama (pequeñas bolas de mochi). Se servía con kuromitsu por lo general que se vertía sobre él (jarabe negro dulce). Era un postre refrescante, y había tantos postres Anmitsu únicos ofrecidos en diferentes cafés y restaurantes, como el presente lugar.

La pobre muchacha retiró el postre y lo devolvió enseguida a la cocina, realmente no veía la hora de que aquel engreído y sus amigos se marcharan.

Una vez que el nuevo pedido estuvo listo, ella se apresuró a llevárselo a Chad rogando que esta vez, no tuviera ninguna objeción.

Por suerte para ella, en esta ocasión no hubo ninguna queja y el Anmitsu fue recibido y consumido mientras conversaban, al igual que los demás jóvenes hacían lo propio con lo que comía cada uno.

Al finalizar todos de comer, llamaron de nuevo a Kinana para que les retirara los platos y pedir la cuenta. Cuando parecía que nada más iba a pasar, en el momento que la camarera estaba por retirar las cosas, sucedería algo que terminaría de alterar los ánimos.

- Muy bien primor, ¿Ven que cuando quieren hacen las cosas bien? – dijo Chad con sarcasmo justo antes de palmearle el trasero a Kinana

La chica, al sentir la mano sobre una de sus nalgas, gritó fuertemente y con la cara roja tiró la bandeja al suelo.

- ¡Atrevido cretino! – vociferó la de cabello violeta con los ojos llorosos propinándole un tremenda bofetada al hijo de Yuuichirou, inmediatamente ella salió corriendo en dirección a la cocina

- ¡Oye ven acá, a mí nadie me cachetea! – exclamó él molesto y sorprendido sobándose la mejilla ante la mirada de los demás clientes que ya estaban incómodos con él

- ¡Kinana! – exclamó preocupada Mira que lo había visto todo

Sin pérdida de tiempo, una muy furiosa Mirajane se dirigió a donde se encontraban Chad con sus amigos, que ya estaban preparándose para irse sin pagar.

- ¡Usted... ya rebasó todos los límites, nosotros siempre procuramos brindarle el mejor servicio y como respuesta, maltrata a mis compañeros y no conforme con eso le falta el respeto a mi amiga! – respondió la de pelo blanco en alta voz mientras de fondo se oía el murmullo de la gente

- Será mejor que tengas cuidado como me hablas, ¿acaso no sabes quién soy? De la mano de mi padre puedo hacerte pedazos, hago cerrar este lugar y tú no vuelves a conseguir trabajo en ningún lado – le amenazó Chad apuntándole con un dedo

- A mí no me asustan ni tú ni tu padre, el cual por lo visto no ha hecho un buen trabajo criándote – respondió la ex luchadora sosteniéndole fieramente la mirada y olvidando las formalidades

- Calma bomboncito no es para tanto – dijo uno de los amigos de Chad, restándole importancia al hecho

- Los Kumada somos una de las familias más ricas y poderosas de Japón, debes ser demasiado estúpida como para no temer, solo eres una simple camarera aunque... tú también estás bien rica, tal vez si sales conmigo olvide que me maltrataste – contestó burlonamente Kumada hijo en el ínterin que sus acompañantes se reían, lo cual no hizo más que enervar más los ánimos de Mira

- ¡Ni aunque fueras el último hombre sobre la Tierra, ahora lárguense de aquí y no vuelvan nunca más a este restaurante! – exigió la bella joven ya gritando

- De acuerdo... vamonos muchachos, dejemos a las niñitas con su merienda – les dijo Chad a sus amigos, que se apresuraban a salir

- ¿¡A donde creen que van!? ¡De aquí no salen sin pedirle disculpas a mi compañera y sin pagar la cuenta! – exclamó Mirajane interponiéndose en el camino y abriendo los brazos a fin de no dejar pasar a nadie de ellos

- ¿¡Y quien te crees tú para exigirnos algo!? Yo hago lo que quiero – respondió de mala forma el de melena castaña

Kumada hijo intentó empujar a Mira, pero esta sin pérdida de tiempo tomó la cabeza de él con los dos brazos y se dejó caer de espaldas, impactando sus rodillas con la cara del muchacho*. El cayó boca arriba al piso aturdido ante la mirada de sus acompañantes, los demás clientes al contrario de molestarse aplaudieron a la apuesta moza por poner en su lugar al engreído empresario.

- ¡Chad! – exclamó preocupado uno de ellos mientras ayudaba a levantar a su amigo

- Gracias por hacerme revivir viejas épocas, ahora le van a pedir disculpas a mi amiga y pagarán lo que consumieron, después se van a largar de aquí para nunca más volver – dijo la de pupilas azules sonriendo a modo de burla al mismo tiempo que se ponía de pie – Oye, por favor trae a Kinana – pidió amablemente la ex luchadora al mismo compañero que les había ido a hablar antes, cuando llegaron Chad y sus amigos

- Enseguida – respondió seriamente el camarero

- De acuerdo, pagaremos, pediremos disculpas y nos vamos – afirmó quien estaba tratando de reanimar a Chad palmeándole las mejillas

Unos instantes más tarde, el mozo regresó en compañía de Kinana que aún tenía los ojos llorosos.

- Lamentamos las molestias ocasionadas en nombre de nuestro amigo, señorita – se disculpó otro del grupo

- No me interesa oír sus disculpas, este tipo ya me faltó el respeto eso no cambiará – respondió la de pelo violeta en referencia a Chad, antes de volver a irse a la cocina

Todo el grupo pagó lo que consumió e inclusive lo de Chad, quien ya se reanimaba pero todavía estaba un poco aturdido.

- Esto... no se queda así... lo vas a lamentar, zorrita... te voy a hacer echar – decía el de ojos marrones limpiándose la sangre de la boca y tomándose la cabeza con una mano, mientras se dirigía a la salida junto con el resto de los muchachos

Como toda respuesta, Mirajane le agitaba la mano y sonreía sarcásticamente.

Kinana se encontraba sentada en una silla pensando sobre lo que acababa de pasar, solo esperaba que volviera Setsuna para hablar con ella y que tome cartas en el asunto. En eso llegó Mira tomándose uno de sus hombros, el que conservaba la secuela de su accidente que le cortó su carrera luchística, dando a entender que le dolía un poco.

- Te agradezco lo que hiciste por mí, poniendo en su lugar a ese imbécil – agradeció sonriéndole la de pupilas verdes – Pero no olvides que es hijo de uno de los empresarios más ricos de Japón, espero que no tengas problemas por mi culpa – añadió preocupada

- Ella tiene razón Mirajane, tú lo humillaste en público y eso no lo va a olvidar, se lo merece pero creo que debiste considerarlo antes de hacer tus trucos de la extinta lucha libre, con él – argumentó el mismo camarero de antes, llegando e interviniendo en la conversación – Con buena suerte, él solo puede hacer que te despidan... recuerda lo que ocurrió con Haruna por pelearse con la Gobernadora - agregó a continuación

- No se preocupen amigos, tenemos muchos testigos a nuestro favor pero pase lo que pase no me arrepiento de haberlo hecho, al ver su pésima actitud me hirvió la sangre y sentí que debía hacerlo, es cuestión de explicarle bien a Setsuna y ver qué tipo de hombre es su padre – respondió la de cabello blanco refiriéndose en lo último a Yuuichirou

- Lo único que se, es que si ese idiota sigue viniendo a este lugar, yo renuncio – avisó la damnificada frunciendo el ceño y apretando un puño

Mientras tanto...

El Dodge Charger de Ralf avanzaba de prisa través de las calles de Ciudad Argentum, la capital de Tokio de Cristal, la majestuosa vista de los futuristas edificios de cristal impresionaba a Haruna, no tanto a Risa y Seiya que ya los tenían vistos de anteriores visitas y para nada al conductor, que no les prestaba la menor atención.

A la izquierda de ellos y a lo lejos, se alzaba el imponente Palacio de Cristal por encima del resto de las edificaciones.

- Cielos, la sede de gobierno del reino es bellísima – opinó Haru con una enorme sonrisa

- Dentro de poco es el cumpleaños de la princesa heredera al trono y de la propia soberana, así que podrás conocerlo – aseguró seriamente Ralf sin perder vista del camino

- ¿En serio me llevarás? ¿Pero y la bruja de tu mujer? ¿Crees que la reina me invite a mí también? – preguntó su hermana menor abriendo grande los ojos

- Ella misma me dijo que podía llevar a quien yo quisiera y por Rei no te preocupes, manda en Ciudad Ígnea pero en el Palacio es otra cosa – explicó el musculoso de ojos cafés

- Es que papá es amigo de la reina, tía – aclaró Risa calmadamente

- ¿Algún problema, señor Ralf? – indagó Seiya al notar que el hombre se quedaba mirando el espejo retrovisor de su lado y fruncía el ceño

- Mmmmh... la moto que vi detrás de nosotros... estoy seguro que estaba también en Ciudad Ígnea – respondió el Jefe Jones ante lo cual, todos se voltearon hacia atrás

- ¿Estás seguro, papá? – preguntó su hija buscando con su vista lo mencionado

- Viene a una distancia prudencial para no ser tan obvio, será que demasiado tiempo en la milicia me volvió paranoico... pero por el espejo la vi por segunda vez, la primera fue antes de que saliéramos de la Ciudad Sur – insistió el ex soldado en referencia a la moto – Necesitamos perderla así que, agárrense fuerte – prosiguió con una pequeña sonrisa y apretando el volante con ambas manos

- ¿No estará pensando en...? – preguntó el cantante de los Three Lights sin poder acabar de hablar

No lo consiguió, porque Ralf hizo acelerar bruscamente al coche e hizo que todos los acompañantes golpearan sus espaldas contra los respaldos de los asientos.

- ¡Solo espero que no nos multen! – exclamó Risa

- Eso no importa ahora – respondió su padre subiendo el volumen de la música

*Seiya sessesse seiya
Seiya sessesse seiya
Soiya sossosso soiya
Soiya sossosso soiya

Ossu! Namida koborete mo
Ossu! Tachimukatte yukooze!

Hitasura seiya soiya tatakau-nda
Kobushi o motto kokoro o motto
Zenbu zenbu togisumashite
Wo'oo wo'oo wo'oo

Mada mada seiya soiya tatakau-nda
Kanashiku natte tachiagare-naku natte mo
Aa ossu ossu

El vehículo avanzó por la avenida esquivando a los demás autos y cruzando semáforos en rojo ante la sorprendida vista de los transeúntes que por allí pasaban. La motocicleta que mencionó Ralf aceleró también para no perderle de vista mientras que Seiya, Risa y Haruna miraban hacia atrás a cada rato al igual que Ralf cada vez que podía.

- ¡La veo! ¡Tenías razón hermanito! – exclamó la de cabello corto castaño

- ¡Se los dije! – contestó el de ojos cafés concentrado en el camino

El Dodge dobló a toda velocidad por una calle en el ínterin que los neumáticos hacían ruido por la fricción con el pavimento, acto seguido continuó acelerando y el conductor realizaba hábiles maniobras para no chocar aunque aún quien los seguía, continuaba detrás. Ellos marcharon derecho hasta doblar por una estrecha calle que los depositó en una avenida doble mano entre los ruidos de los neumáticos y la humareda que echaban al doblar rápidamente el auto.

Seiya que no estaba acostumbrado a este tipo de situaciones de riesgo, cerraba los ojos mientras rezaba por que no chocaran ya que pasaban a escasos centímetros de los demás coches, que para evitar impactar con el Dodge maniobraban bruscamente y algunos colisionaban entre sí, armándose un revuelo en el tránsito de dicha mano.

- ¡Ese bastardo sigue detrás nuestro! ¡Vaya que es persistente, pero tengo una idea! – dijo en voz alta Ralf en referencia a la moto

- ¿Qué tienes en mente? La policía no tardará en acudir a esta zona luego del lío de autos chocados que dejaste detrás – señaló Risa molesta, teniendo en cuenta dicho detalle

- ¡No digo que un poco de emoción no venga mal pero, Risa tiene razón! – opinó Haru de igual modo

- ¡Ahora verán lo que haré! – respondió el fornido ex soldado

Ni bien terminó de hablar, dobló en forma de U hacia la mano contraria de la avenida aunque tal cosa estuviera totalmente penada por la ley de tránsito, consiguiendo evitar a los otros vehículos aceleró a fondo regresando ahora hacia la dirección de donde provenían al mismo tiempo que zigzagueaba.

Tal como era de esperarse, la motocicleta también hizo lo mismo y fue tras el Muscle Car, ¿Pero quién era aquel desconocido y porque los seguía? ¿Lo hacía por propia voluntad o actuaba por órdenes de alguien?

El concepto de "muscle car" se refería a un automóvil de tamaño medio-grande, con rasgos deportivos y "musculosos", cualidades que lo hacía muy llamativo y le daban un aspecto "agresivo", con un motor muy potente y un precio de compra relativamente barato y, desde luego, más accesible al gran público que otros deportivos. Entre las características comunes "no escritas" que también tenían normalmente los "muscle cars" estaban: procedencia norteamericana, no ser bi-plaza, no ser demasiado lujosos, normalmente ser cupés, tener tracción trasera y ser impulsados por motores V8 y en ocasiones V6. Por extensión también han existido un gran número de sedanes, o incluso rancheras con motores de alta potencia, catalogados popularmente como "muscle cars" tal como el Dodge Charger. Los "muscle cars" han sido producidos históricamente en Norteamérica por General Motors, Chrysler, Ford o AMC.

El del Jefe de Guardia de Ciudad Ígnea era ahora el último que se veía circular por las calles, ya que dejaron de fabricarse hace mucho solo que él lo conservaba desde la anterior Era pero, actualmente adaptado a la tecnología del siglo XXX.

Ahora, el automóvil corría con potencia por la avenida aprovechando una sucesiva serie de semáforos en verde que le permitía tomar más velocidad.

- Y Rei llama a esta belleza, de chatarra, pero por favor – recordó riendo el Jefe de Guardia de Ciudad Ígnea

- ¡La gente nos mira! – observó Seiya mientras avanzaban entre bocinazos

- ¡Es normal querido! El coche de Ralf es una reliquia en desuso – le contestó la de cabello corto castaño

- Puede ser, pero yo más bien diría que es porque estamos a punto de matarnos – aclaró el cantante

- ¡Papá! Tenemos dos problemas, el primero lo ves frente a tus ojos, a dos cuadras acaba de cambiar el semáforo a rojo y la otra avenida está muy transitada como para tratar de pasar y el otro, estoy oyendo sirenas de policía detrás nuestro – señaló Risa mirando hacia atrás

Quien conducía volteó la vista y pudo ver que lo que decía su hija era verdad, aparte de la misteriosa moto que los perseguía había tres patrulleros que acudieron enseguida a la zona y se acababan de unir.

- ¡Maldición! ¡El CTOS no tarda! Pero no nos van a agarrar, no nos van a agarrar – afirmó Jones al mismo tiempo que sonreía

El Dodge Charger no disminuyó su velocidad sino al contrario, la aumentaba y realizando una buena maniobra, se colocó en el medio de la doble raya divisoria luminosa que dividía las dos manos.

Por esas cosas del destino, el auto pudo cruzar la avenida que tenía los semáforos rojos para ellos, a escasos centímetros de ser colisionados por los demás que por allí pasaban y que tenían luz verde. Así que zigzagueando en compañía de los gritos de un Seiya asustado, cruzaron y dejaron atrás un montón de vehículos que intentaron frenar de golpe para no llevárselo puesto pero que no pudieron y chocaron entre sí, cortándole así el paso a los que se encontraban del otro lado.

La misteriosa motocicleta debió frenar al ver impedido su paso al igual que los patrulleros, la gente que se amontonaba en la zona impedía también a la primera, de subir a la acera e intentar pasar y seguir al Muscle Car.

- Maldición... - se quejó la voz femenina de dentro del casco – No sé cómo pudo darse cuenta de que lo seguía pero los perdí... - añadió a continuación dando vuelta y alejándose rápidamente

Por su parte, Ralf no bajaba la velocidad y conducía derecho por la misma arteria principal.

- Por favor señor Ralf, quiero llegar vivo a mi casa – suplicó el chico de ojos celestes todavía impactado

- Ya no nos sigue nadie – afirmó Risa mirando hacia atrás antes de besar a su novio

- Confieso que también pensé por un momento que chocaríamos – reconoció Haruna hablándole a su hermano mayor

- Funcionó, se los dije... viejo, pero no obsoleto – opinó el de ojos cafés en referencia al coche – Aún puede seguirnos la policía, debemos salir lo más pronto posible del área de búsqueda del CTOS, de lo contrario continuaran siguiéndonos – agregó él

- Espero que no haya habido ningún herido entre los que chocaron – comentó la de ojos púrpuras mirando hacia atrás

- Lo mismo digo pero no había otro modo de perderla, esa moto era de alta cilindrada y de un modelo actual, por lo que vi, parecía tener algunas modificaciones para darle más velocidad... aunque eso en teoría infringe el Código de Convivencia, más específicamente la sección de Seguridad en Transportes Civiles – explicó Jones remarcando esto último – Pero no se preocupen, este coche también la infringe ya que al motor V8 que tenía lo reemplacé por otro con tecnología actual pero, le hice algunas modificaciones para que tenga más potencia y alcance mayor velocidad... normalmente un Dodge Charger R/T de 1970 no hubiera superado los 235 Km/h, pero ahora mismo casi llegamos a los 300 y eso que no es la máxima velocidad – prosiguió sonriendo

- Papá, pedazo de tonto, ¿¡Te das cuenta que este es un modelo que no es común de ver en esta ciudad y que por eso será fácil para las autoridades, dar con nosotros!? - preguntó enojada Risa cruzándose de brazos

- ¡Bueno ya! No iba a guiar hasta donde debemos ir a un extraño que no sabemos para qué nos seguía! ¡Ya veremos luego qué hacer! - exclamó su padre irritado también

El coche torció hacia la derecha en la siguiente avenida que atravesaba la vía por la que iban, hasta llegar a una subida que los depositó en una autopista, la cual recorría Tokyo de Cristal en su totalidad por los 4 distritos y la capital.

- Por aquí llegaremos más pronto y como mencioné antes, por suerte logramos perder a quien nos seguía o lo hubiéramos guiado hasta la casa de Takashi Hino – afirmó el de cabello castaño oscuro – Cielos, que lástima que no vino Mira con nosotros – dijo acordándose de la apuesta ex luchadora

- Supongo que ahora estaría asustada también por haber estado a casi nada de estrellarnos hace rato y por haber tomado las calles como pista de carreras - supuso Seiya ingenuamente al oír eso, lo que hizo sonreír a Ralf

- No te creas chico, no la conoces... a ella le encanta la adrenalina, fue luchadora profesional, así que ten la seguridad de que hubiera disfrutado esta corrida – le respondió Haruna - Si no hubiera riesgo ahora de acabar en la cárcel - añadió suspirando al fastidiarse

- Vamos bien, el letrero que veo adelante dice "Ciudad Aquae: 8 Kilómetros" – informó Risa leyendo lo que estaba observando

- Excelente, allí vamos – dijo el de pupilas marrones con la vista fija en el camino

La distancia que los separaba de su destino fue superada media hora más tarde, de eso se dieron cuenta cuando vieron en las señalizaciones "Siguiente salida: Ciudad Aquae". De modo que el vehículo tomó la bajada indicada con el rugido del motor y la música, aparte de las voces de los acompañantes de Ralf que conversaban sobre quien podría ser el que los había seguido, como sonidos de fondo, ya que había poco tráfico en el presente horario de la tarde

*Cover you in oil
Let me cover you in oil
I want to cover you in oil
Let me cover you in oil, yeah

Luego de salir de la bajada, fueron a dar a una vía ancha en medio de una mayoría de modernísimos edificios color azul y combinados con plateado, los cuales se alternaban con diversos lugares parecidos a fábricas pero que en realidad se trataban de avanzados Centros de Investigación sea de tecnología, química, física o de medicina, dando a entender que ya se encontraban en la Ciudad del Conocimiento.

Inclusive pasaron por el Crystal Tokyo Medical University Hospital el por lejos, mejor hospital del reino y uno de los mejores del país. A la derecha de ellos podían observar un enorme edificio con altos ventanales que se asemejaba a un enorme prisma triangular de hielo que poseía minaretes de cristal de gran estatura junto a torres del mismo color que muchos de los edificios antes mencionados.

Se trataba de la Biblioteca de Ciudad del Norte, la más completa en cuanto a información se tratase, cualquier bibliografía sobre la disciplina que fuere allí estaba, matemática, geografía, sea lo que sea, incluyendo toda la historia del antiguo Milenio de Plata se encontraba allí registrada en una gigantesca base de datos que complementaba las ediciones impresas y además, era el sitio en donde trabajaban los mejores científicos del reino a fin de prestar sus conocimientos en pos de la paz y el mejoramiento humano.

- Ciudad Aquae es impresionante, recuerdo haber hecho conciertos aquí con Taiki y Yaten – dijo Seiya admirado del distrito

- Lo mismo digo, no había tenido nunca la chance de visitar este sitio – concordó Haru observando atentamente todo

- Aquí es algo parecido a lo que fue el Silicon Valley en Estados Unidos, norte de California, pero mucho más avanzado y completo – les informó Ralf seriamente – Sin dudas la mente de Lady Mercury es la más brillante del reino, ha hecho un magnífico trabajo aquí, este lugar es sinónimo de avance y progreso – añadió acto seguido

- Todo muy lindo pero, me quedé pensando en ese sujeto que nos siguió... ¿Pero no será que Lady Mars nos tenía bajo vigilancia? Nadie más sabía que saldríamos de Ciudad Ígnea y con todo el revuelo que armamos en las calles de la capital, llamamos mucho la atención – razonó el de cabello largo negro

- Seiya tiene razón, si ese desconocido no nos seguía por órdenes de mamá... no se porque lo hacía, no se me ocurre otro motivo – dijo Risa preocupada

- En eso mismo pensaba, pero ahora lo prioritario es llegar a la casa de Hino – les contestó el robusto hombre de pelo castaño oscuro – Kou, tú tienes la dirección, dime cuánto falta para llegar – pidió el ex soldado al chico

- Sí señor, la tengo marcada en mi GPS, debe seguir derecho 10 cuadras más y luego doblar a la izquierda, una vez que lo haya hecho continúe conduciendo por 2 cuadras derecho; la dirección indicada se encuentra ahí – respondió el cantante

El Jefe de Guardia de Cuidad Ígnea asintió afirmativamente y sintió su celular vibrar, como no podía sacarlo al estar manejando, le pidió a Haruna que lo tomara y le dijera qué era. Esta obedeció y le informó que se trataba de un mensaje de Mirajane "Hola Corazón, ¿Cómo les está yendo? Espero que todo bien, cuento estén de regreso voy ir a verte si es que puedes, para saber los detalles", Ralf sonrió y tomado el celular de manos de su hermana, dejó mensaje de voz en el Whatsapp de Mira indicándole que le avisaría cuando estuviese llegando a fin de no hacerla esperar mucho tiempo.

Luego de eso, el Muscle Car recorrió el trayecto mencionado a velocidad moderada, hasta que por la calle en donde debía doblar avanzó lentamente y llegó a una casa bonita de dos plantas con jardín, el frente mostraba enormes ventanales de cristal y la entrada principal estaba equipada con una cámara y panel para hablar fin de que la visita se anunciase.

Seiya señaló a dicho sitio como la dirección que marcaba su GPS, entonces Ralf estacionó el auto justo frente a la casa y una vez que detuvo el motor, todos descendieron de prisa, cruzaron la calle y el jardín hasta llegar frente a la puerta principal, rogando por que la viuda de Takashi Hino aún viviese allí.

Ralf tocó el timbre y con el corazón galopando, esperaron un par de minutos hasta que una voz femenina hablo a través del panel del costado izquierdo.

- ¿Si? ¿Que se les ofrece? .

- Buenas tardes señora, ¿Es esta la residencia del señor Takashi Hino? – respondió el de pupilas marrones

- Mi esposo murió ya... no tienen nada que hacer aquí, váyanse – contestó secamente la voz

- Es importante para nosotros, verá... yo soy el esposo de Rei Hino, la hija de su marido, inclusive conmigo viene quien sería su nieta, mi hija Risa... Rei ha cambiado mucho... lamentablemente para mal, estamos desesperados, nuestra vida se ha vuelto un suplicio día tras día desde hace dos años y hay mucho que mi mujer no quiere contarnos... precisamos conseguir información sobre qué pasó entre ella y su padre... por favor, señora – insistió Ralf en un tono suplicante que no solía usar con nadie

- Por favor, mi mamá está loca, me quiere casar a la fuerza con alguien a quien no amo y más allá de eso, nos maltrata... necesitamos información – añadió la muchacha de ojos púrpuras con la voz quebrándose casi a punto de llorar

Luego de un par de minutos de total silencio, la misma voz de antes les respondió.

- Esta bien, pueden pasar.

Acto seguido, los cuatro vieron a la puerta abrirse sola e ingresaron a paso lento, el momento había llegado, estaban por averiguar valiosos datos que les relevaría una importante parte del motivo de la transformación de Rei...

*Se que debí aclarar esto antes pero nunca es tarde, el japonés que se habla en el siglo 30 no es el mismo que se hablaba en la anterior Era, o sea nuestro tiempo actual, debido a que el idioma también evolucionó, esta es la razón por la que pongo los diálogos en japonés real aunque están en Japón y se supone que ya hablan en dicho idioma XD

*El movimiento que hace Mirajane lo utiliza el luchador Chris Jericho, y lo llama Codebreaker.

*Canción: Karate, Álbum: Metal Resistance, Año: 2016, Artista: Babymetal

*Canción: Cover You In Oil, Álbum: Ballbreaker, Año: 1995, Artista: AC/DC

Bueno amigos, espero que sepan disculpar por este largo capítulo pero deseaba terminarlo justo en el momento en que llegan a la casa de la viuda del papá de Rei, espero que les haya gustado y que me haya quedado bien la parte de la persecución en Ciudad Argentum (No puedo con mi genio, no puede no haber algo de acción en una historia mía XD).

La Kinana que aparece aquí pertenece al mismo animé que Mirajane (Fairy Tail) no tengo ni idea de si va a salir en esta historia de nuevo, ya que no veo ningún papel relevante para ella así que, a otra cosa XD.

Acaban de ver cómo es en verdad Chad Kumada cuando no tiene a los padres cerca, pero no se preocupen que alguien se encargará de darle su merecido muajaja, lo que le hizo Mirajane es muy poco en comparación a eso :3

Creo que no tengo más nada que decir por el momento, en el próximo chap habrá un inesperado encuentro que no será muy amistoso que digamos XD.

Con la alegría de saber a River Plate campeón de América, me despido hasta la próxima actualización así que, hasta pronto amiguirijillos.