Nohara Shinnosuke, un adolescente normal de 14 años, va a la librería, no es que le gustara leer, pero le habían pedido un libro y debía comprarlo. Salió de casa luego del almuerzo, era un día soleado, se acercaba el verano y las cigarras hacían su característico sonido anunciando la llegada de esa estación. Procuró caminar en la sombra hasta llegar a la librería, una vez ahí se apresuró a buscar el libro que debía comprar, buscó y buscó hasta encontrar el famoso libro, iba a agarrarlo, pero su mano se chocó con otra que quería escoger el mismo título.
- Woo, perdón.- dijo de inmediato Shinnosuke volteando hacía esa persona.-
- No, está bien, perdón, iba con prisa.- dijo el chico de ojos azules. Shinnosuke se quedó en un extraño trance mirando a la persona que acababa de conocer.- ... Esto, si quieres ese libro no tengo problema, quería leerlo, pero si es para algo importante es mejor que lo compres.- Shinnosuke asintió sin entender en verdad lo que dijo.-
- Gracias...- pronunció y agarró el libro yéndose a pagarlo.-
Mientras regresaba a casa se recriminó su actuar, ya no era un mocoso como para quedarse viendo a todas las chicas hermosas que se encontrara por ahí, y lo peor es que esa persona ni siquiera era una mujer, sino un hombre, pero su belleza le dejó impactado. Se revolvió el cabello tratando de pensar con más claridad, estaba confundido, jamás tuvo esa impresión de ningún hombre en su vida, por más que fueran guapos, pero ¿por qué con este chico sí pasó eso?. Suspiró, debía relajarse, después de todo no lo volvería a ver.
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Días después fue a la escuela, ya había leído el libro que compró y hoy le tocaba un examen sobre el mismo. Entró a la escuela y abrió su casillero para sacar sus zapatos guardando los que traía hace un momento en los pies, cerró la puerta, se los puso y en cuanto volvió a enderezarse se encontró de frente con el chico de antes, ambos sorprendidos se alejaron un poco.
- Hola... eres el chico de la otra vez.- dijo Shinnosuke.-
- El mismo... no pensé que asistieras a esta escuela.- río un poco.- Soy nuevo aquí.-
- ¿En serio? Que coincidencia.- dijo Shinnosuke sin poder ocultar la emoción, pero luego su mente divagó en el porque de su entusiasmo.-
De repente sonó el timbre y tuvieron que ir a clase, Shinnosuke como buen estudiante, le ayudó a llegar a su sala y luego se fue a la suya. Se sentó en su pupitre y sacó los respectivos libros para la clase, notó que traía el libro que compró la otra vez, lo guardó debajo del pupitre y prestó atención a la clase.
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Terminó la clase y se levantó rapidísimo, llegó en tiempo récord a la sala del oji-azul.
- Disculp...- iba a comunicarse con alguien para que le llamaran, pero recordó que aún no sabía su nombre. Decidió asomarse y ahí estaba, hablando con algunos estudiantes que parecían algo pesados.- Oye, hola.- dijo acercándose a él.-
- Hola.- dijo de inmediato.- ¿Qué sucede?.-
- Esto... necesito hablar contigo.-
- Kazama, no hables con él, es un chico muy raro.- dijo uno de los presentes, metiéndose en la conversación.-
- Sí, además sus calificaciones son muy malas, se te pegará el bajo rendimiento.- dijo otro, Shinnosuke se sintió algo mal, no por lo que dijeran, sino porque de verdad quería relacionarse más con el chico que tenía enfrente suyo y no quería darle una mala impresión.-
- Descuiden, vuelvo de inmediato.- dijo Kazama incomodo, agarró a Shin del brazo y se lo llevó afuera.-
- ¿Por qué te juntas con gente así?.- preguntó sin pensarlo.-
- No es de tu incumbencia.- dijo Kazama con soberbia peinando su cabello con los dedos.-
- Que cruel.- dijo con fingida indignación.-
- ¿Para qué me querías?.- preguntó teniendo prisa por terminar con el asunto.-
- ...Quería darte el libro que estabas buscando la otra vez.- dijo Shin rascando su cuello.-
- ¿De verdad?.- preguntó impresionado por la amabilidad de Shin.- Dime ¿cuánto debo pagarte?.-
- No, no.- negó gesticulando con las manos.- Te lo regalo...- Kazama a este punto tenía una opinión nueva y mejor sobre Shinnosuke, el peli-negro de repente puso una cara de terror que lo alarmó.-
- ¿Qué pasa?.-
- Es que... olvidé el libro en mi sala.- rió un poco para liberar la tensión que se creó en el ambiente, Kazama suspiró.-
- Da igual, si quieres vamos a buscarlo.-
- Pero tus amigos...-
- No importa, vamos.- dijo empujándolo para el lado contrario.-
- Es para el otro lado.- dijo haciendo que Kazama se sonroje por la vergüenza.-
- ¡Y-Ya lo sé!.- afirmó nervioso y lo empujó hacia el lado correcto esta vez. Caminaron un buen tramo y Shinnosuke lo miró de reojo.-
- Así que... ¿te llamas Kazama?.- preguntó queriendo saber más de él.-
- Ah, sí... me llamo Kazama Tooru, ¿y tú?.-
- Soy Nohara Shinnosuke.- dijo con una sonrisa.- Llámame Shinnosuke.-
- Shinnosuke... gracias por lo del libro, era el último que quedaba ese día y aún no he podido encontrarlo de nuevo.-
- No es nada, ese día te veías decepcionado por no tenerlo.-
Llegaron al salón de clases y Shinnosuke le pasó el libro a Kazama, este lo recibió con mucha ilusión que trató de ocultar, pero no le funcionó, y le agradeció a Shinnosuke.
- Muchas gracias... me sabe mal no pagarte.- dijo Kazama sintiendo culpa mientras abrazaba el libro, Shinnosuke pensó un poco y luego habló.-
- Ya sé, ¿y si me invitas el almuerzo? Mi madre no me preparó nada.- dijo algo fastidiado.-
- ... Pero...- dijo con la intención de negarse, sin embargo, se arrepintió a último momento.- Está bien, te compraré el almuerzo.-
- ¿Ah? No quiero que solo me lo compres, quiero que comamos juntos.- dijo para luego hacer un puchero, Kazama sonrió a queriendo reírse de la expresión de Shinnosuke.-
- Está bien, tú ganas.-
- ¡Woo woo, estaré esperando ansioso la hora del almuerzo!.- exclamó sin poder ocultar su emoción.-
Kazama se retiró a su salón, pues el timbre sonó y tocaba otra clase más, Shinnosuke en esta clase debía presentar el examen del famoso libro. Una vez terminó salió del salón con dolor de cabeza, era normal luego de concentrarse tanto y no haber comido ni un bocado, lo único que quería era comer algo delicioso, se dirigió al baño ya que también estaba a punto de orinarse. De repente dobló en una esquina y vio a Kazama nervioso mientras hablaba con otros dos chicos que grado superior, le dio mala espina.
- Ya te lo dijimos, eres nuevo, y como eres un novato, debes servirnos.- dijo uno de ellos.-
- Pe-Pero...-
- ¿Quieres hacerme enojar, nenita?.- preguntó este agarrando del cabello a Kazama.-
- N-No, claro que no.- dijo asustado a punto de llorar.-
- ¡Oye, ¿Que diablos te pasa?!.- dijo Shinnosuke acercándose molesto a la escena.-
- Mira, parece que tu novio vino a salvarte.- ambos rieron.- Yo te daré una lección.- dijo uno de ellos mientras el otro seguía agarrando a Kazama.-
El chico se acercó a él con la intención de golpearlo, pero Shinnosuke con facilidad le esquivó, esto le hizo enojar más y trató de golpearle de nuevo, sin embargo, el moreno en un instante le realizó una llave de judo dejándolo en el suelo aturdido, su amigo se asustó, fue a ayudarlo y tuvo el mismo destino. Shinnosuke se acercó a Kazama con la idea de protegerle.
- ¿Quién te crees? Una llave de judo no es suficiente.- se burló uno de ellos.-
- ¡Si quieres pelea tendrás que pelear en serio!.-
- ¿Qué está pasando aquí?.- preguntó un profesor.-
Todos terminaron en la oficina del director explicando lo sucedido, para ese punto Shinnosuke se había acordado de que quería orinar y ya no sabía como aguantar. Shinnosuke y Kazama quedaron libres luego de un rato sin ningún castigo, en cuanto pudieron salir el moreno corrió como alma que lleva el diablo hacia el baño y al fin pudo descargarse, suspiró totalmente aliviado. Salió del baño y se topó de frente a Kazama.
- ¿Qué haces aquí?.- preguntó Shinnosuke.- ¿Querías espiarme?.-
- ¡Claro que no!.- alzó la voz frunciendo el ceño y sonrojado.- Te debía un almuerzo, ¿recuerdas?.-
- Woo woo, es cierto.-
- Entonces, vamos.- dijo adelantándose y Shinnosuke le siguió.- También compraré postre.-
- ¿De verdad?.- preguntó emocionado.-
- Sí, después de todo, me ayudaste.- dijo con una sonrisa.- Jamás hubiera imaginado que practicabas judo.-
- Siempre me lo dicen.- comentó avergonzado, la sonrisa de ese chico le mareaba.-
Ambos caminaron hacia la cafetería siendo conscientes de que habían conocido a un nuevo amigo. Y todo fue a causa de un libro en una librería cualquiera.
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TERMINEEEEEE, no me puedo creer que terminé esta wea xD de verdad había momentos que quería dejar de escribir y mandar todo alv, pero no lo hice uwu
Muchas gracias a todes los que leyeron, votaron y comentaron, me animan a seguir publicando mis fanfics y yo estoy dispuesta a seguir llenando wattpad y mis demás plataformas de escritura con el precioso ShinKaza uwu
Eso, hasta otra, bai
